En Santiago me esperaba Tonet Viota, un ¨supero¨ y especialista en rafting que dos años atrás compartimos expedición durante 9 días en el primer descenso del río Gambia en África. Alquilamos un coche, cargamos nuestras tablas hinchables y pusimos rumbo al sur, en busca de los ríos más populares de Chile.
El primero que visitamos fue el cajón del Maipo, pero sus aguas en esta época bajaban chocolate, las cuales no nos incitaban a la navegación. Decidimos continuar hacia abajo hacia la región de los ríos. El Bio-bío fue el primer río donde se practicó el descenso de aguas bravas en Chile, pero tras la construcción de unas presas de producción eléctrica el río perdió parte de su recorrido, aun así conserva tramos espectaculares. Durante dos días bajamos sus caudalosas aguas. El primer día el río poseía un grado 2º con pasos de grado 3º para finalizar en la ciudad de Santa Bárbara. El segundo día el río transcurría entre dos presas, es un tramo habitual de rafting, el cauce se mantenía en un grado 3º con rápidos bien pronunciados y buenas olas, si bien tras cada uno de ellos podíamos recuperarnos en remansos de aguas serenas. El Bío-bío es el río olvidado, no muy frecuentado actualmente pero de enorme belleza. En el descenso fuimos acompañados por Símon un kayakista que nos prestó sus conocimientos sobre el río y Martín en el apoyo logístico, ambos tratan de relanzar la zona.
