3.2.- Tipo de lengua (nivel, registro). Principales rasgos y recursos estilísticos. La conversación entre Celestina y Melibea se desarrolla utilizando un registro culto, cuidado y elaborado retóricamente, como corresponde a la condición noble de la joven. Si nembargo, se percibe claramente como Celestina emplea dos registros distintos: el culto con Melibea, y el coloquial , familiar y mucho más descuidado, en los apartes que Melibea no oye , con frases hechas y orden desucuidado (“en hora mala acá vine”, “bien sé a quién digo”, “que se va todo a perder”, “más fuerte estaba Troya”) e interjecciones (“Ce”, “ea”). En el diálogo entre Celestina y Melibea encontramos abundantes refranes y frases sentenciosas ( “vendrá el día que en el espejo no te conozcas”, “el más sempecible mientro del mal hombre o mujer es la lengua”, “no es vencido sino el que se cree serlo”, “De los locos es estimar a todos los otros de su calidad”, “”La sangre nueva poca calor ha menester para hervir”, “el deleite de la venganza dura un momento y el de la misericordia dura para siempre”, “A la firme verdad el viento del vulgo no la empece”, ) y las interrogaciones retóricas, bien para enfatizar el paso del tiempo por parte de Celestina (“¿No has leído que dicen “vendrá el día...”) o para enfatizar lo inadmisible de los propósitos de Celestina por parte de Melibea (“¿Ese es el doliente....? “¿Querrías condenar mi honestidad...?” etc.) También abundan las exclamaciones, en boca de Celestina para halagar a Melibea (“¡Oh angélica imagen...”), y en boca de Melibea para amenazar a Celestina con cierta violencia (“¡Quemada ses, alcahueta, falsa...!”) Celestina y Melibea también utilizan alguna metáfora. Por ejemplo, la del amor como enfermedad, que utiliza Celestina para expresar el motivo de su venida, situandose ella misma como “médico” (“más para dar salud al enfermo que para dañar la fama del médico”). Utiliza otra metáfora para lisonjear a Melibea llamándola “Perla preciosa”). Melibea habla de “el galardón de su yerro” para mencionar el beneficio que obtendría Celestina si ella fuera deshonrada accediendo a las pretensiones de Calisto. Otras metáforas serían “pasos deshonestos” por pretensiones pecaminosas, “palabra que le lleve metida en mi seno” para la respuesta de Melibea que llevará Celestina, o “su pasión y su remedio salen de una misma fuente” como descripción de la “enfermedad” amorosa. También encontramos comparaciones: Celestina pide clemencia a Melibea diciendole que no sea “como la telaraña, que no muestra su fuerza sino contra los flacos animales” y encarece sus esfuerzos por ayudar a los dema´s dicendo que cumple con todoso “como si tuviese veinte pies hy otras tantas manos” Otro recurso importante son las enumeraciones,por ejemplo, en boca de Melibea: de insultos a Celestina (“alcahueta, falsa hechicera, enemiga de honestad, causadora de secretos yerros...) y a calisto (“loco, saltapredes, fantasma de noche...”) 4.- Relación del fragmento con el sentido o significado de la obra. Este fragmento, en el que vemos a la alcahueta y bruja Celestina desplegando toda su habilidad para conseguir lo que quiere de Melibea, encajaría perfectamente dentro del propósito moralizador que Fernando de Rojas proclama en el Prólogo, de avisar de los peligros de las alcahuetas. Melibea muestra un rechazo inequívoco y vigoroso hacia Calisto (cada vez que oye su nombre monta en cólera) y después de su trato con Celestina aparecerá completamente enamorada de él, no le importará destrozar la honra que ahora tanto parece preocuparle y llegará a sucidarse por él. Pero además, este pasaje podría relacionarse con el sentido existencial, ya que asistimos a cómo pasiones destructoras dominan a los personajes: Calisto recurre a alcahueta y bruja para satisfacer su pasión, y la alcahueta no duda en engañar y utilizar al diablo para sus propósitos. Entre Melibea y Celestina no hay verdadera comunciación, ya que la vieja sólo utiliza el lenguaje para engañar y manipular a los demás, hecho que evidencia esa visión de los personajes como individuos encerrados en su materialismo y su egoísmo, es decir, completamene solos. Pero además, será ese egoísmo, ese individualismo y ese materilismo lo que los lleve a su final desgraciado. Y ese materialismo, ese egogísmo, esa falsedad y ese engaño al que asistimos tiene también un sentido social:el de criticar a esa sociedad feudal en crisis y decadencia, que ya no se rige por los antiguos valores de fidelidad, lealtad y honor. Y la crítica se extiende tanto a los personajes de clase baja (en este fragmento, Celestina) como a los de clase alta (en este caso, Calisto y Melibea) Celestina no duda en explotar económicamentela pasión de un noble al que no respeta y para ello recurre al diablo y engaña a Melibea, que se olvidará rapidamente de su honra en cuanto nazca en ella la pasión que la llevará a la muerte.