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Un hobbit heroico y un enano exiliado

El Hobbit no solo cuenta la historia de cómo Bilbo Bolsón, un mediano acomodado de la Comarca, tuvo una gran aventura con un grupo de 13 enanos y un mago para recuperar el tesoro robado por el dragón Smaug; también cuenta de los peligros que superó, usando su habilidad e ingenio, convirtiéndolo en saqueador y héroe. De igual manera, relata la historia de Thorin Escudo de Roble, el príncipe enano expulsado de su reino por el mismo dragón y de cómo vino a aceptar a Bilbo, recuperó su reino perdido y sucumbió a la misma maldad que causó la ruina de su familia.

Ambas historias tratan de una gran aventura con peligros que los héroes deben superar para llegar a su destino y regresar a casa, pero también son viajes internos que marcan un crecimiento en sus personajes para llegar al Saber que encierra el corazón de la aventura. En otras palabras, Thorin y Bilbo tienen un arco narrativo durante la trama que los lleva al mensaje más bonito del libro.

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Nada fuera del otro mundo, pero al analizar detenidamente cómo están construidos sus arcos narrativos, se puede observar que ambos poseen dos estructuras de relato que corresponden a las de las historias clásicas de héroes mitológicos. Es más, en El Hobbit estas dos estructuras mitológicas se entrecruzan y se complementan de tal manera que, sin el viaje de uno, no se podría dar el viaje del otro. Sin Thorin, Bilbo no completaría su crecimiento personal; sin Bilbo, Thorin tampoco, y esto es gracias a la genialidad narrativa de cómo Tolkien utiliza dos estructuras mitológicas para entretejer las historias de ambos.

No es una sorpresa que Tolkien era un gran conocedor de la mitología. Su gran inspiración fue el Kalevala, El anillo de los Nibelungos y las Eddas nórdicas. 1 Estas fueron la base para construir su mundo –tanto así que Tolkien apropió los nombres de los enanos de la Edda mayor para los suyos– (Sturluson & El Sabio, 2019, pág. 108). El punto aquí es que Tolkien no era un extraño para la mitología y que la historia de Bilbo comparte el esqueleto de varios relatos heroicos que tratan sobre «El viaje del héroe»; por lo mismo el estudio de Joseph Campbell sobre El héroe de las mil caras

1 Se sabe que Tolkien admiraba la mitología original que dio vida a la obra de Wagner del mismo nombre, y muchas veces se puede leer en sus cartas referencias a tales mitos aplicaría perfectamente acá. La travesía de Bilbo se asemeja al monomito.

Para los que no saben, Campbell encontró que un gran número de mitos heroicos coinciden en una estructura narrativa. Como tal, está dividido en tres grandes etapas (La Partida, La Iniciación y El Regreso) y cada una tiene sus eventos específicos que son significativos para el viaje del héroe. Aquí una lista resumida de esos eventos enumerados por Campbell, usando el viaje de Bilbo:

LA PArTIDA

1. Mundo ordinario: Bilbo vive tranquilo en la Comarca, acomodado en su hogar lujoso bajo la tierra. 2. Llamada a la aventura: Una mañana, el mago Gandalf conoce a Bilbo y arreglan una cena al día siguiente. A la invitación llegan trece enanos con el mago que contratan a Bilbo para saquear el tesoro de un dragón. 3. La negativa al llamado: Bilbo se rehúsa, porque ningún hobbit ha hecho algo tan peligroso antes y él no desea ser el primero. 4. La ayuda sobrenatural (o El encuentro con el mentor): Gandalf lo convence, apelando al lado aventurero de su familia, los Tuk, y Bilbo termina por aceptar. 5. El cruce del primer umbral: Bilbo sale de La Comarca y junto con los enanos se adentra en un bosque, donde son capturados por unos hambrientos trolls. Aunque luego son salvados por Gandalf, Bilbo comprende que el mundo es muy distinto a la comodidad de su hogar. 6. El vientre de la ballena: La compañía es atrapada por trasgos y Bilbo es separado del grupo. Termina en la profunda oscuridad de las montañas donde conoce al desconfiado Gollum y le roba su anillo mágico para escapar de las profundidades como un hobbit renacido.

LA InIcIAcIón

7. El camino de las pruebas: Bilbo se reencuentra con el grupo, huyen de lobos wargos, son salvados por águilas, duermen en la casa de un cambia formas y Gandalf los abandona. Usando su anillo mágico y espada, Bilbo demuestra su valía

salvando a los enanos de arañas gigantes, pero luego son capturados por elfos. Bilbo encuentra la manera de liberarlos al disfrazarlos de barriles y terminan arribando en el pueblo de los Hombres del Lago, donde finalmente llegan a la Montaña en la que duermen el dragón y el tesoro. 8. El encuentro con la diosa: Este evento no se encuentra en El Hobbit, pues Bilbo no conoce un interés amoroso o alguien con quien pueda tener una reconciliación maternal. 9. La mujer como tentación: Esta fase tampoco se encuentra, ya que ese interés amoroso no lo desvía de su aventura. 10. La reconciliación con el padre: Thorin, que sería la figura paternal más cercana a Bilbo, lo reconoce como un miembro esencial de la compañía, después de que salvara repetidamente a los enanos en el último tramo de la aventura. 11. Apoteosis (o La prueba final): Bilbo se enfrenta en un duelo de astucia contra Smaug, haciendo uso de todas las herramientas que adquirió en el viaje (anillo, ingenio, sigilo y elocuencia). Smaug luego se alza en furia contra el pueblo del Lago. 12. El don final: Thorin muere al final de la Guerra de los Cinco Ejércitos y sus últimas palabras se las dirige a Bilbo, como una última enseñanza. Bilbo desea volver a casa, ya habiendo tenido suficiente de su aventura.

EL rEGrESO

13. La negativa al regreso: Esta fase tampoco aparece, pues Bilbo no rechaza volver a su hogar después de la aventura, sino que abraza la idea. 14. La huida mágica: Bilbo retorna a los lugares que visitó en su trayecto y se reencuentra con los amigos que hizo en el viaje, viendo la paz que proliferó por las hazañas de su aventura. Finalmente, regresa a la Comarca. 15. El rescate del mundo exterior: Esta fase también se ausenta, pues Bilbo no es rescatado por los habitantes del mundo ordinario en un incidente; en cambio, la interacción con estos es casi mínima. 16. El cruce del umbral del regreso: Bilbo regresa a su hogar con la sorpresa de que están subastando su casa y sus cosas, ya que lo daban por muerto. 17. La posesión de los dos mundos: Habiendo encontrado un balance con su lado Tuk y Bolsón, Bilbo recupera sus cosas y se convierte en el hobbit más ricachón y famoso de La Comarca. Su historia termina con él tomándose un té con Gandalf y Balin, rememorando la expedición que vivieron juntos.

Si bien la historia de El Hobbit cabe cual anillo al dedo con el monomito, esta estructura no es gratuita. Es necesario conocer la vida de burgués acomodado de Bilbo y su “cobardía” al negar el trabajo de saqueador para saber las características que irán transformándose en su aventura. Es importantísimo que sea retado por contratiempos para que los resuelva a su manera, ¡con su ingenio! Lo que lo diferencia de los demás personajes. También es vital apartarlo del grupo, pues debe demostrar el pequeño hobbit que puede valerse por sí solo, hasta tal punto, que es él quien salva a los “experimentados” enanos, ganándose el reconocimiento de Thorin, quien era el que más dudaba de su coraje. Bilbo crece y cambia de inicio a fin. Su historia es una de pasar del burgués que extraña la comodidad de su cama, al saqueador que se bate en duelo intelectual con un dragón. En otras palabras, Bilbo madura de hobbit promedio a héroe.

El viaje del héroe no es un simple viaje de aventuras, es un viaje de crecimiento interior. Esto mismo lo reconoció Lord Raglan (predecesor de Joseph Campbell) en su estudio mitológico sobre el origen del folclor, The Hero, A study in Tradition, Myth, and Drama, y lo explica así:

«La historia del héroe de la tradición, si lo entiendo bien, es la historia de su ritual de progreso [para alcanzar la madurez], y es por lo tanto apropiado que aquellas partes de su trayecto en las que no progrese su ritual deben dejarse en blanco (pág. 193)»2 .

Este principio del paso a la adultez se aplica a otra estructura del relato mítico que propone Lord Raglan, que es distinta al monomito, la cual no tiene nombre, pero me gusta decirle “El viaje del rey exiliado”. Raglan lo explica así: 1. La madre del héroe es una virgen, 2. Su padre es un rey 3. familiarmente cercano a su madre, pero 4. Las circunstancias de la concepción del héroe son inusuales, y 5. Este también es considerado el hijo de un dios. 6. Al nacer, hay un intento de asesinarlo, usualmente por parte de su padre o su abuelo materno, pero 7. Desaparece antes de que lo maten, y 8. Es criado por padres adoptivos en un país lejano. 9. No se relata nada sobre su infancia en el país lejano, pero 10. Al alcanzar la mayoría de edad retorna o viaja a su futuro reino.

2 Me tomé la libertad de traducir la cita para comodidad del lector: «The story of the hero of tradition, if I understand it aright, is the story of his ritual progress [of reaching manhood], and it is therefore appropriate that those parts of his career in which he makes no ritual progress should be left blank» (Raglan, 1935, pág. 193).

11. Después de la victoria contra el rey y/o dragón, gigante o bestia salvaje, 12. Desposa a una princesa, usualmente la hija de su predecesor, y 13. Se convierte en rey. 14. Gobierna sin eventualidades por un tiempo. 15. Ejerce las leyes, pero 16. Luego pierde el favor de los dioses y/o sus súbditos, y 17. Es expulsado del trono y de la ciudad, que lo lleva 18. A morir misteriosamente, 19. Usualmente en la cima de una colina. 20. Sus hijos, si los tiene, no heredan poder. 21. Su cuerpo no es enterrado; no obstante, 22. Tiene uno o más rituales sacros en su nombre (Raglan, 1935, págs. 178-179).

Esta estructura no coincide con el viaje de Bilbo, pero puede observarse perfectamente en el de Thorin Escudo de Roble. Su arco narrativo, paralelo al de Bilbo, es más cercano a la estructura que propone por Lord Raglan.

Thorin es el enano anciano, líder del grupo y heredero al reino Bajo la Montaña, Erebor. Se nos revela que es el hijo del rey Thrain (2), pero no se sabe nada de su pasado (4), excepto que sobrevivió a Smaug, el dragón, y que fue expulsado de su reino (7). Vive exiliado al otro lado del continente, en las Montañas Azules, donde reúne un grupo de enanos junto con Gandalf para regresar a casa (10), usando un mapa con una entrada secreta para entrar a la montaña sin ser detectados por Smaug. Thorin contrata a Bilbo, pero duda de sus habilidades como “saqueador”. Atraviesan juntos obstáculos y peligros en el viaje, en los cuales el hobbit demuestra su valía y Thorin termina apreciándolo como uno de los suyos casi al final del trayecto. Cuando el dragón termina siendo expulsado de Erebor y vencido (11) por Bardo, el arquero, Thorin vuelve a ser el Rey Bajo la Montaña (13) y es él quien reparte el tesoro entre todo el grupo (14) de manera justa (15). No obstante, comienza a sufrir de fiebre de dragón (16) y busca, sin encontrarla, la Piedra del Arca que sería la consagración de su mandato como rey. Su avaricia lo ciega y decide no compartir las riquezas de su reino con el pueblo de Bardo que se alza contra él; incluso, Bilbo, que no concuerda con la persona avariciosa en la que se convirtió Thorin, le entrega la Piedra del Arca a Bardo, desprestigiando a Thorin como rey (17). En la Guerra de los Cinco Ejércitos, Thorin es herido de muerte (18) y sus sobrinos, Fili y Kili, únicos herederos a su legado, también mueren al proteger el cuerpo de su tío (19). Finalmente, Thorin es enterrado de manera ceremoniosa con su corona, armas y la Piedra del Arca, bajo la montaña de su tierra natal (22).

Mientras el viaje de Bilbo trata sobre superar retos para madurar y convertirse en héroe, el de Thorin es de regresar a lo más alto y caer en los mismos fracasos de sus antecesores que lo terminan matando, para así aprender de la humildad y de retractarse sobre las ideas que tenía sobre Bilbo. Thorin, primeramente, se retracta sobre la inutilidad de Bilbo y lo acepta en la compañía (Tolkien J.R.R., El Hobbit, 1937, pág. 202) –fomentando así el crecimiento de Bilbo como héroe–. Luego, al reconocer su avaricia y sus errores, Thorin le imparte a Bilbo el Saber que encierra el corazón de su aventura:

«—¡No! —dijo Thorin—. Hay en ti muchas virtudes que tú mismo ignoras, hijo del bondadoso Oeste. Algo de coraje y algo de sabiduría, mezclados con mesura. Si muchos de nosotros dieran más valor a la comida, la alegría y las canciones que al oro atesorado, éste sería un mundo más feliz. Pero triste o alegre, ahora he de abandonarlo. ¡Adiós!» (Tolkien J.R.R., El Hobbit, 1937, pág. 295) En un viaje hay un aprendizaje y en el otro, una tragedia, pero ambos encajan en el otro para hacerse más grandes. Un rey exiliado hizo a un héroe y un héroe hizo a un rey más humano. Y juntos, se hicieron leyendas… y amigos.

referencias

Campbell, J. (1949). El héroe de las mil caras. México D.F.: Fondo de cultura económica México.

Pearce, J. (2012). Bilbo’s Journey: Discovering the Hidden Meaning of The Hobbit. Charlotte, NC: Saint Benedict Press.

Raglan, L. (1935). The Hero, A Study in Tradition, Myth and Drama. Bungay: The Thinker’s Library.

Sturluson, S., & El Sabio, S. (2019). Eddas, leyendas de los dioses del norte. (P. G. Carrizo, Ed., & Á. de los Ríos, Trad.) España: Desván de Hanta.

Tolkien, J. (2009). Sobre los Cuentos de Hadas. En J. Tolkien, Cuentos desde el Reino Peligroso (págs. 257-324). Barcelona: Minotauro.

Tolkien, J. R. (1937). El Hobbit. Barcelona: Minotauro.

Tolkien, J. R. (1993). De una carta a Christopher Tolkien. En H. c. Carpenter, Cartas de J. R. R. Tolkien (págs. 154-156). Barcelona: Minotauro.

Tolkien, J. R. (1993). De una Carta a Christopher Tolkien. En H. c. Carpenter, & H. Carpenter (Ed.), Cartas de J. R. R. Tolkien (R. Masera, Trad., pág. 51). Barcelona: Minotauro.

Tolkien, J. R. (1993). De una carta a Stanley Urwin. En H. c. Carpenter, Cartas de J. R. R. Tolkien (pág. 56). Barcelona: Minotauro. q