4 minute read

VIVIENDO CON SENTIDO

En algún momento hemos leído o escuchado, “Nuestro cerebro no solamente aprende a interpretar el mundo, sino que también lo crea” l “hardware” del cerebro pesa entre 1.3 y 1.5 kilos, tiene alrededor de 100,000 millones de neuronas que establecen de manera continua mientras interactuamos mil billones de sinapsis. Los elementos de la tabla periódica que nos conforman: oxígeno 65%, carbono 18%, hidrógeno 10%, nitrógeno 3%, calcio 1.5%, fósforo 1%.

Sin embargo a pesar de que nuestros cerebros parecen ser “iguales”, están individualizados, la emoción de abrazar a un nieto, el cómo percibir determinada melodía, el disfrutar los sabores y olores, admirar una obra de arte son experiencias diferentes para cada uno de nosotros, por lo que asombrosamente nuestra maravillosa “computa- dora” está personalizada.

Advertisement

También es un ecosistema que se transforma continuamente, veamos el caso de Christina Santhouse quien a simple vista es normal, sin embargo debido a una extraña enfermedad, a los siete años fue sometida a una cirugía y le retiraron el hemisferio derecho del cerebro, esto no le impidió continuar estudiando, graduarse con honores, obtener una maestría, casarse, tener familia, trabajar como especialista en patologías del lenguaje, y todo ¡con solamente el hemisferio izquierdo!

EL MEJOR LÍDER ES AQUEL QUE NADIE SABE QUE ES LÍDER”.

- LAO TSE

Lo anterior me lleva a preguntarme; si nuestro mundo es único y está personalizado solamente para mí, que o quién está detrás de esta formidable personalización y creatividad, ¿quién desarrolla el “software”, mi cerebro o yo? Si respondo que definitivamente soy yo, entonces me traslado a un mundo de creatividad sin ninguna limitación a lo que soy capaz de lograr.

Es importante tener presente que nosotros somos para nuestro cerebro: Líderes, Maestros, Inventores y Usuarios. Como actuemos en estos cuatro roles marcará la diferencia entre un cerebro común y uno Premium.

“El mejor líder es aquel que nadie sabe que es líder” -Lao Tse. Mi actuar como LÍDER de mi cerebro determinará que tenga un:

Cerebro común: A) Me comporto siempre igual (espero qué haciendo lo mismo tenga resultados diferentes) B) Soy una persona de hábitos, si fumo sigo fumando, si como insano lo sigo haciendo. C) No leo ni aprendo cosas nuevas. D) Prefiero lo cotidiano y rutinario, así se vive menos complicado. E) Mi vida en casa, el trabajo, en mis relaciones interpersonales, son rutinarias y aburridas.

Cerebro Premium: A) Todos los días busco y encuentro nuevas opciones y oportunidades B) Estoy al pendiente de no tener malos hábitos y si adquiero uno, busco eliminarlo. C) Disfruto siguiendo a mi corazón más que a mi razón, también improviso.

D) Busco no actuar rutinariamente. E) Me atraen nuevos retos en los distintos aspectos de la vida

Como creadores sabemos que nuestro cerebro es el único órgano de nuestro cuerpo que está en constante evolución, nuestros riñones, hígado o corazón desde que nacemos hasta que morimos hacen y son exactamente iguales. Cuando dejamos de exigirle que día a día adquiera nuevos conocimientos y habilidades, estamos utilizándolo al mismo.

Como creadores diseñaremos día a día nuevas conexiones y rutas que hace apenas una hora no existían.

“No puedes esperar a la inspiración, tienes que perseguirla con un bate de béisbol” -Jack London.

¿Qué tal somos como CREADORES de nuestro cerebro, con qué me identifico?

Cerebro Común: A) No puedo afirmar que estoy aprendiendo y creciendo como cuando era niño o joven. B) Además de resistirme a los cambios los siento como una amenaza. C) No me esfuerzo para perfeccionar aquellas cosas para las que soy bueno. D) No realizo ningún esfuerzo para adquirir nuevos conocimientos y habilidades. E) Paso demasiado tiempo realizando actividades pasivas, tal como ver televisión.

Cerebro Premium: A) Busco el cambio y rápidamente me adapto.

B) Me mantengo en constante actividad. C) Procuro estar en continua evolución. D) Al aprender algo nuevo lo llevo al máximo. E) Disfruto los desafíos de hacer cosas nuevas.

Como MAESTROS de nuestro cerebro ¿sabemos conducirlo y enseñarle para que esté en constante aprendizaje de nuevas habilidades?

“No tengo talentos especiales, pero si soy profundamente curioso”. -Albert Einstein.

Un buen maestro sabe que el conocimiento y la sabiduría tienen sus raíces en la curiosidad, por ello los mejores profesores son los que logran despertarla e infundirla a sus alumnos. Con nuestros cerebros somos a la vez profesores y alumnos, entonces es responsabilidad de nosotros el despertar e infundirnos la curiosidad. El envejecimiento de nuestro cerebro está íntimamente relacionado con mantenernos o no activos, curiosos, aprendiendo, inventando, creando. El ser un buen maestro y alumno determinará:

Cerebro común A) Hace mucho tiempo que no me siento inspirado. B) Mis creencia y opiniones son inamovibles. C) No leo, ni asisto a cursos o conferencias, no sé cuánto hace que no aprendo nada nuevo D) Me siento muy conforme con mi percepción de la vida. E) Dejo que los demás tomen las decisiones sin preguntarme o cuestionar.

Cerebro Premium: A) Vivo continuamente inspirado. B) Profundizo y cuestionó mis creencias C) Leo, asisto a cursos, seminarios, conferencias y soy un aprendiz de todo. D) Busco y disfruto el reinventarme. E) Trato de opinar y cuestionar

Como USUARIO de nuestro cerebro somos los responsables de su buen funcionamiento. Aunque no traemos una manual para usarlo, es indudable que debemos aprender a alimentarlo, darle mantenimiento, repararlo y utilizarlo de manera apropiada.

TODO HOMBRE PUEDE SER, SI SE LO PROPONE, ESCULTOR DE SU PROPIO CEREBRO

Con cuál me identifico me dirá qué tal soy como usuario.

Cerebro Común: A) Tolero un nivel continuo de estrés alto. B) Me siento descontrolado en algunos aspectos de mi vida. C) Estoy deprimido o ansioso. D) Siento que mi vida tomará un rumbo no deseado. E) Continuamente soy obsesivo y tengo pensamientos que me causan ansiedad.

Cerebro Premium: A) Se evitar las situaciones estresantes. B) Me siento bajo control y cómodo. C) Normalmente mi humor es bueno y estable. D) A pesar de los imprevistos, encaminó mi vida en la dirección que deseo. E) Disfruto y me gusta la forma en que mi mente piensa.

Utilizarlo y alimentarlo bien nos permitirá mantenernos siempre en el camino de el crecimiento, el logro, la satisfacción de seguir aprendiendo y lograr el destino final que todos deseamos, la felicidad.

“La neurociencia es, por mucho, la rama más excitante de la ciencia, porque el cerebro es el objeto más fascinante del universo. Cada cerebro humano es diferente y hace a cada ser humano único y define quien es”. - Stanley B. Prusiner (Premio Nobel de Medicina).

This article is from: