Técnicas de imagen
ción se trata de modo conservador y suele resolverse espontáneamente. Sin embargo, en un 10-15% de los casos es necesaria la colocación de un tubo de drenaje torácico. La rentabilidad diagnóstica de la punción transtorácica es alta y superior al 90% en la mayoría de las series; su negatividad no debe considerarse diagnóstica. 3. ANATOMÍA RADIOLÓGICA BÁSICA 3.1. Tráquea
La tráquea es una estructura aérea central que mide entre 6-9 cm de longitud. La pared traqueal derecha se identifica en el estudio convencional como una estructura lineal de un grosor de 2-3 mm. La tráquea se divide en los dos bronquios principales a nivel de la carina. La presencia de aire en el interior de la tráquea y bronquios principales nos permitirá medir el ángulo carinal que se sitúa alrededor de 60 grados. 3.2. Hilios pulmonares
Los hilios pulmonares están constituidos básicamente por los bronquios principales y los vasos hiliares. Los ganglios linfáticos, nervios y tejido conectivo no forman parte de la imagen radiológica normal de los hilios pulmonares. El bronquio principal derecho tiene una orientación anatómica más vertical que el bronquio principal izquierdo y nace más próximo a la carina que el bronquio izquierdo. Las partes posteriores de los bronquios del lóbulo superior derecho e intermediario tienen un contacto directo con el pulmón, hecho que permite su identificación en la proyección lateral del tórax. La arteria pulmonar derecha pasa por delante del bronquio principal derecho y se sitúa lateralmente a los bronquios intermediario e inferior. En la proyección PA, el hilio izquierdo siempre se situará en una posición más elevada que el derecho. La arteria pulmonar izquierda se sitúa por encima de los bronquios principal y superior izquierdos y desciende en situación posterolateral al bronquio del lóbulo inferior. Las venas pulmonares son similares en ambos pul-
mones, situándose las superiores en la parte anterior y media de ambos hilios pulmonares y las inferiores por detrás de las arterias correspondientes a los lóbulos inferiores hasta alcanzar la aurícula izquierda. En la proyección lateral del tórax la columna aérea de la tráquea se identifica con claridad, configurando en su porción posterosuperior un espacio aéreo denominado «triángulo de Raider». La tráquea acaba en una opacidad aérea redondeada que corresponde a la porción más distal del bronquio principal izquierdo vista «de frente». Por delante de este bronquio se observa una opacidad redondeada que corresponde a la arteria pulmonar derecha. La arteria principal izquierda se ve de forma tubular y se sitúa por detrás y por encima del bronquio principal izquierdo. El bronquio del lóbulo superior derecho aparece como una imagen aérea redondeada situada por encima del bronquio principal izquierdo. Entre ambos bronquios vistos de frente aparece una estructura linear que corresponde a la pared posterior del bronquio intermediario. Entre la arteria pulmonar izquierda y la aorta torácica se identifica una zona radiolucente que se corresponde con la ventana aortopulmonar. La porción central del tórax la ocupa el corazón. En la proyección lateral existen dos grandes espacios aéreos situados a nivel retroesternal y retrocardiaco. La ocupación de estos dos espacios por densidades diferentes a la del aire es siempre patológica. 3.3. Pleura y cisuras
En condiciones normales la pleura no se ve en los estudios radiológicos simples. Únicamente la podremos ver cuando la pleura visceral se invagina sobre el tejido pulmonar para formar las cisuras o cuando los pulmones contactan entre sí originando las líneas de reflexión pleural anterior y posterior. Las cisuras interlobares separan los diferentes lóbulos pulmonares y se forman por la invaginación de dos hojas de pleura visceral sobre el pulmón. Existen dos tipos de cisuras, las cisuras habituales y las cisuras accesorias. Las cisuras habituales (mayores u oblicuas y menor u horizontal) únicamente se ven radiológicamente cuando el haz de rayos incide sobre ellas de 117