JUAN CARLOS DE LA TORRE
“Virgen del mayor dolor”
ANTONIO REYES
“Borracho”
Visita nuestra Galería Virtual. Sin horarios de cierre. Cómodamente. Estamos en: http://www.grupoparnaso.com/
SUMARIO Editorial Fueron noticia Cosas del Facebook (Aida Lorente) El rincón de #Twitter (Ester Lorente) Cinematorripios (Enrique Gallud Jardiel) Decires sobre… (Mª Isabel Barbeito) Acércate a la poesía (Pilar Chacón) El autor y sus textos (Domingo Becerra) El significado de… Meditaciones (Paqui Gavira) ¿Lo sabías? Desde mi butaca (Rubén Lorente)
ROBLES SEVILLA
“Fantasía, catedral de Cádiz”
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JUAN FRANCISCO MARTÍNEZ
Cartel del Nazareno, 2013
Tu punto de encuentro. Nº 9
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Editorial Si llegamos más tarde de lo esperado, no es porque nos hayamos dormido en los laureles ni mucho menos. Traemos novedades en las que como siempre, os animamos a participar. En primer lugar, nos gusta dar la noticia de que nuestra página Web ha cambiado de nombre y de ubicación. Ahora somos http://www.grupoparnaso.com/ Hace tiempo que inauguramos la Galería Virtual en la que se puede conocer la obra de Juan Carlos de la Torre, que se ha hecho colaborador activo del Grupo Parnaso desde Málaga y nos ha dado a conocer a otros pintores: Antonio Reyes, Robles Sevilla y Juan Fran Martínez. Creemos sinceramente que merece la pena darse una vueltecita por allí. Para quienes nos veníais preguntando por la posibilidad de enviar vuestras opiniones, ensayos o investigaciones, ya está abierta la sección que hemos llamado “Humanistas del XXI” y que no tiene nada que ver con movimientos políticos de ninguna clase. Recordemos qué dice la Real Academia Española de la palabra humanismo:
1. m. Cultivo o conocimiento de las letras humanas. 2. m. Movimiento renacentista que propugna el retorno a la cultura grecolatina como medio de restaurar los valores humanos. 3. m. Doctrina o actitud vital basada en una concepción integradora de los valores humanos. También hemos comenzado la emisión de documentos sonoros con el fin de conocer a autores, personas y grupos cuyas actividades nos pueden resultar muy interesantes, así como sus curiosas maneras de acercarse a la cultura y mantenerla viva y candente. Esta sección se ha llamado “Es que yo soy de letras” y se irá colgando en Ivoox a medida que vayan saliendo las entrevistas o los recitales. Esperamos seguir trayendo novedades y ampliando nuestro campo de acción que, al fin y al cabo es cultura para todos, al alcance de todos. No dejéis de avisarnos de la presentación de libros y eventos, que en la medida que podamos, estaremos con vosotros. En este número os presentamos a Ana Benito, la primera mujer a la que traemos como poeta invitada. Estamos convencidos de que sus originales imágenes no os van a defraudar. Seguimos con las secciones habituales, con nuevos colaboradores y con los habituales. Todos ellos se han esmerado en volver a sorprendernos desde la palabra escrita. Os invitamos a abrir estas páginas virtuales porque sabemos que es una aventura que no os podéis perder. Para cualquier duda o consulta o aportación, os esperamos en revistaparnaso@gmail.com
El equipo editorial
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FUERON NOTICIA Cuando cualquier autor se decide a hacer una parodia está demostrando un par de cosas. Por un lado que goza de buena salud humorísticamente hablando y por otro, que es un valiente en muchos sentidos. Efectivamente, tiene que conocer lo bastante bien el objeto parodiado como para poder jugar y divertirse con él, para después poder lidiar con los que se toman demasiado en serio las cosas. Cuando leemos la “Historia estúpida de la literatura”, Enrique Gallud Jardiel hace que desfilen ante nosotros, autores, temas, estilos, épocas y técnicas con un lenguaje que prentende imitar y lo consigue sin dejar por ello de tener viveza, ingenio y humor propios. Aparecen también glosas y formas de acercarse a la obra literaria que no son ajenas al estudioso. ¿A destacar? Confieso que me ha cautivado imitando y burlándose de la lengua usada en la Edad Media. Es un auténtico maestro. Tras leerlo con avidez, caí en la cuenta de su valentía porque puede encontrarse con un público que no entienda su manera de abordar esa historia de la literatura, ya sea por falta de cultura o porque aún teniéndola, sea la estrechez mental su única manera de afrontar la vida. Absténgase de leerlo pues, cualquiera que pertenezca a uno de los grupos mencionados. Eso sí. Si como lector le gusta la lengua, la literatura y el humor, intente leerlo en alto y en compañía. Puede que el buen rato que pase, sea aún mucho mejor.
Olga Becerra
El pasado día 7 de marzo, en la Casa Argentina de Alcalá de Henares se realizó el recital “Poesía para ti, mujer”. La presentadora Gladis Ramos y los poetas invitados: Elisabeta Botan, José Pejó, Cristina Penalva, Eduardo Ruiz, Paz Cornejo, Hazel Messiatz, Suko, Rosario Delgado y Enrique Sabaté.
El 15 de marzo estuvimos en el Auditorio del Aula de Música de la UAH, en la presentación de "Las cien mejores poesías de amor de la lengua castellana". Una concienzuda selección realizada por J. Francisco Peña que no os podéis perder. En la foto, Miguel Franco (Contrabajo), J. Francisco Peña Martín (Poeta. Editor de la antología), Luna Paredes (Actriz) y Manuel Vegas Asín (Poeta).
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Cosas del Facebook Aida Lorente Búscanos: Parnaso.Creacción
Virgi Zmb: "Cuando descubres que amas completamente a alguien y esa persona te ama a ti... aun con tus debilidades y tus defectos, todo empieza a encajar. Y si puedes hablar con ella, y ella te escucha, si te hace reír, y te hace pensar, te hace querer, te hacer ver quién eres en realidad, y esa persona que eres, es mejor, mucho mejor, cuando está con ella. Estarías loco si no quisieras pasar el resto de tu vida a su lado" Fragmento de uno de los libros de la trilogía 4 bodas, Norah Roberts.
Maribel Domínguez Duarte: Mi libro recomendado para este mes es "El Violín del Diablo" de Joseph Gelinek. Un libro que seduce, no sólo por su título, sino porque está plagado de buenas referencias musicales, por el pseudónimo que usa el autor, por su argumento: una gran concertista española es asesinada después de interpretar el Capriccio 24 del genial Paganni, una de las piezas más difíciles para violín. Su valioso Stradivarius, con la cabeza de un demonio tallado ha desaparecido...
Ester Lorente: "El amor es sufrido y considerado, nunca es celoso. El amor nunca es jactancioso o engreído. Nunca es grosero o egoísta. Nunca se ofende ni es resentido. El amor no haya placer en los pecados de los demás y se deleita en la verdad. Siempre está dispuesto a escuchar, confiar, esperar y soportar todo lo que venga". Fragmento de la película "Un paseo para recordar", la cual recomiendo a quien no la haya visto.
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El rincón de #Twitter Ester Lorente Síguenos: @par_creaccion
¡INAUGURAMOS NUEVA SECCIÓN DE TWITTER! Desde hace un tiempo observo lo que escribís y voy escogiendo tweets que me gustan para publicarlos en esta sección. Así que, estad muy atentos, porque podéis ser los elegidos. @Que_Recomiendo: Cuando los ojos no bastan para ver, es necesario abrir el alma. @_helluolibrorum: La felicidad y la tristeza tras leer un libro que va a ser, ya es, de tus favoritos. @HazelMessiatz: Soy un mundo a la deriva dentro de otro mundo donde la Luz y la Sombra han hallado su equilibrio inmortal. Hazel Messiatz (19/02/2014) @PoesiaYRelatos: “Muchos vuelan como hojas. Pocos como aves”. –José Narosky. @Diazkiwi: Y Dios negó al camello las alas. El mamífero, colérico, persistió en su anhelo de ser un ente alado, a lo que Dios respondió: "te jorobas".
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Nada Nada. Surgí de la nada. Lo deseaba con todas mis fuerzas. Era mi vida. La mujer que todavía me ligaba a este mundo. No podía abandonarla. No lo podía evitar. Desesperado, intenté tocarla. Sentirla, aunque fuera la última vez. Pero su cuerpo se escapaba de mis manos. El frío invadió toda la estancia. De repente, noté un cambio de expresión en su pálido rostro, afligido por la tristeza. Creí ver un brillo de esperanza en aquellos ojos tristes. Parecióme que la pena y la desesperación finalmente habían abandonado a mi amada. Ya no se sentiría jamás sola. Yo siempre permanecería a su lado a medio camino entre este mundo y el otro. Pero me equivocaba. En una fracción de segundo su tez volvió a empalidecer. El pesar regresó a sus facciones. Su alma fracturada se volvió a sumir en la más profunda oscuridad, inevitablemente. No dio crédito a lo que había percibido. Finalmente, la tristeza me venció. El vacío lo volvió a inundar todo. Regresé a la nada.
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CINEMATORRIPIOS… por Enrique Gallud Jardiel SEGUIR SIENDO IGUAL D E BRUTO (200 1, U N A O D I S E A D E L E S P A C I O ) S T A N L E Y K U B R I C K , 1968 H o y l e s c u e n t o 20 0 1 , una odisea del espacio . ¿Qué la han visto? Me da igual. Porque seguro que hay varios que no lo han hecho y prefieren —en vez de este filme clásico— ver Matrix o Terminator o incluso alguno más malo. Antes de empezar, quisiera dejar dicho de antemano que yo admiro más a Kubrick que, por ejemplo, a San Pablo; y que me parece un genio de lo cinematográfico; y los críticos que dicen que está sobrevalorado no saben nada de cine y deben dejar sus cargos y hacer las oposiciones para Hacienda o el Catastro. La cosa empieza al principio con un tinte darwiniano y unos monos muy astutos aprendiendo a dar un palo al vecino con un hueso, que se convierte muy rápido en estación espacial sita, ¡claro!, en el espacio y que está llena de armas como bien imaginamos.
¿A qué reflexión incita este milenario salto? Está claro: que en milenios de evolución y gazpacho el hombre sólo ha aprendido a zurrar a todo pasto y a armarse para chafar al que esté en el otro bando. El resto es algo superfluo y no hace falta contarlo. Segunda genialidad que en esta «peli» encontramos: hay en la luna una cosa desde hace un porrón de años y no la han hecho los hombres: es algo interplanetario. ¿Conque resulta que el hombre no está solo en el espacio? ¿Conque hay otra gente ahí fuera? ¿Conque son mucho más sabios? Así, el antropocentrismo queda al momento hecho cachos. Nuestra ciencia está en pañales. Y aún hay otro corolario: que todas las religiones, las fes y los credos varios que dicen que el hombre es el centro de lo creado hacen, de una vez por todas, un ridículo sonado.
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Tu punto de encuentro. Nº 9 En la siguiente secuencia una nave va a algún lado y sus vagos tripulantes pasan los años roncando. Hete aquí que se despiertan por un método automático y al computador de a bordo (que siempre les ha hecho caso) se le ocurre amotinarse por ver a qué sabe el mando. Y como es mucho más listo que todos los astronautos hace un rato lo que quiere hasta que es desenchufado. ¿Qué nos enseña a nosotros en esencia este pedazo de film? Pues que todos quieren ser los amos del cotarro y que, por más que pensemos que estamos civilizados, hombre, máquina o tomate, —seamos lo que seamos— todos queremos mandar; y el medio en que lo logramos es usar contra el vecino todos nuestros megavatios. Por la fuerza nos ungimos, por la fuerza destronamos; si el que manda no nos gusta le hacemos trizas el cráneo. Así era en la prehistoria y mucho no hemos cambiado. Ya llegamos al final, que es un trozo complicado de argumento psicodélico al estilo de Andy Warhol.
Parnaso.CreAcción La nave se acerca a Júpiter y allí pasa algo muy raro. El astronauta ve cosas que le dejan mareado: ve a un niño estelar; también se ve a sí mismo, de anciano; ve un salón casi sin muebles, todo pintado de blanco. En fin, ¿para qué cansar?, parece que se ha tomado algo de ácido lisérgico y que el hombre está flipando. ¿Y cómo se explica esto? (Ahí es donde me han pillado, porque es que ni yo lo entiendo. Mas como hay que decir algo me inventaré un simbolismo para así salir del paso.) Pues el sentido, señores, yo diría que está muy claro: y es que hay cosas en el mundo que, por más que las pensamos, no podemos entenderlas; es el misterio primario, el enigma primigenio, lo oculto, el ignoto arcano de la esencia de este cosmos, lo inefable, el negro manto que cubre los mil niveles de realidad de los actos del universo, es el tiempo que trasciende nuestros años, el efluvio de lo etéreo, el sentido de lo vago, el numen de lo invisible, el Ka y la sota de bastos.
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No sabe qué decir de sí misma. Quizás porque ya dicen o dirán sus poemas. Nos cuenta que vive en Indiana (EE.UU.), “donde hace un frío de muerte ahora mismo, aunque nací y viví mi infancia en las montañas donde nace el Duero, en Burgos, así que el clima de mi vida no ha cambiado mucho, aunque mi hermano dice que soy lo más tropical que ha nacido en la sierra”. También nos cuenta que escribe y que ha publicado en las revistas Grafemas, Ágora y alguna más, aunque no le alcanza la memoria, al igual que tampoco le alcanza para la cuestión de los premios que consiguió en los tiempos de estudiante. Nos dice que tiene un libro inédito de poemas, Hablante nativa, que espera publicar algún día. Ni le gusta hablar de los estudios, ni de lo N IÑ O S A M A RGO S que hace para ganarse la vida. Y transcribimos el resto de lo que piensa Una docena porque nos parece lo suficientemente de niños amargos sensato y hermoso como para darlo a salpican la pena conocer: “[…] puede haber buenos y malos dejada en los charcos. poetas en cada profesión o en personas que no están vinculadas a las letras o la Los niños amados literatura necesariamente por su oficio. Es que beben el sol, un patrimonio espiritual y, por lo tanto, a saltos de risa, común a la humanidad. Como cada arrastran sus juegos de caracol. escritor que crea en la penumbra de su soledad, espero que alguna palabra de mis Los niños divinos renglones toque una fibra humana y se que emplean la tierra quede allí, arrullada por la memoria. Para hacen palpitar los siglos eso hay que decidirse a difundirlas, lo cual marcados de la tiniebla. no siempre es fácil. Tanto si se escribe sobre algo biográfico como ficticio, la ¡Oh niños divinos, escritura supone un algo de oh niños amargos! desnudamiento emocional […] para que el yo os mezo en la cuna, poeta o la poeta salga de su cuarto oscuro la suave cuna y el lector ilumine sus palabras”.
que imanta la luna de los letargos.
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EDAD DE SAL Cuando tú eras gotas vertidas por las salas de mis sienes, entonces, el polvo sufría de caerme siempre en el mismo lado y desequilibrar mi frente hacia quienes... como se hacía poco a poco un infante de dolor. ¿Quién me había tocado el corazón con la yema de los dedos, sino los nombres, mojados como nenúfares, del estupor? Qué extraño era morirse en clave de sol con el ruido más normal, con tus ojos superando la colina de mi boca, con la melodía tonta de mi vida que pasa y no te toca por no romper el compás. Te uno más, a mis soledades más, y me muevo entre ciudades que murmuran hacia el mal. Todavía soy un puño entristecido resbalando en blanco inerte, cuando tú, - ¿no hay otro modo? – para beberte, cuando tú eras de sal.
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Para recibirte Como un niño errante, niño en fábula, niño desusado, te has sustituido por tu nombre, niño en ronda, niño gris, niño por los tejados. Y ahora que te doblas al capricho de la luz, niño cielo, niño desarmado, niño sobras, niño en cruz, ya eres el viento atrapado de perfil, niño juego, niño incierto, niño luego, después de añil. De costado sueña el día lo que fuiste, niño solo, niño triste, y quiere ser toda la frente mía, niño, niño sombra para recibirte.
Éramos Éramos sauces enredados y cielos de cuatro esquinas, éramos niños apretados tuerca a tuerca por vuelos de voz sonando aína. Éramos tejados y gatos y redondeces, azul lluvioso sereno, y cuando menos, la cúspide desprovista de los cipreses. Sabíamos de la utopía atada al suelo y de las bicicletas futuras, salir del sueño sin flores caídas, nadar despacio en baños de besos reunidos de oclusivas amarguras. Éramos la hierba en brotes pequeños, la materia-esperanza de un jardín en riego. Éramos, y sólo éramos un juego.
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Mujer número 10 No me vas a entender cuando te diga que fuiste mi amor en zapatillas, que yo esperaba tu cuerpo para despertar los ríos sedados, y me encontré a quemarropa sentada con tu puño anclado en las costillas. No vas a querer saber que construí una cama de humo y esperé acostada, ahumándome de promesas, a que tu sombra me arropara con sábanas negras. Pero abrió de golpe una puerta sin bisagras, manchando de lunes rojos las cortinas y dividiéndome cada noche las cejas. Ni voy a querer decirte que me guardé los labios amoratados en el segundo cajón de los tropiezos, que me até las manos al agua fría de los inviernos donde la soledad se afila contra las muecas. Y no me quedan razones para extinguirme entre tus dedos, ni me quedan sueños sanos que arrojarte a la cara, ya no puedo ir de tu brazo, como si nada, tengo vacío el sitio donde quedaba el alma. Estoy rota, no me busques, vendí la casa, me salí de la ropa, me cansé de vivir en puntillas para no despertar tu ojo siniestro. Yo era otra, y no me hace llorar quien bien me quiere, ni me hiere arrastrando mis palabras por el suelo. Estoy rota, tu rabia ha perdido contra mis cicatrices el eco. Estoy rota, antes de que tú me acabes metiendo dentro, aunque hubo amor, quiero salir del ataúd que me resuena por el cuerpo.
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EL ABUELO Era una tarde, acercando el otoño bajo la sombra de un olmo, las risas de unos niños corrían entre murgas y charangas, dimanadas del festejo, trajinando una cometa, ante los ojos del abuelo, fulgentes, aún en la hondura delineada de sus párpados mirando su gesto de antaño en el rostro terso del que porteará su nombre por los raíles del destino férreo. Regalos se cruzan delante de su tez para una primavera reverdecida, que él, solo premiará con unas monedas en un sobre. El abuelo moldeó la tierra y sus cosechas alimentarían pucheros por doquier. Dejó el grosor de su vida entre sirenas de entrada y salida en manufacturaciones que abrigarían cuerpos desnudos, y arroparían lechos harapientos, calentarían braseros a la intemperie y procurarían venturas bajo techos forasteros. Contribuyó a la construcción de templos y catedrales, a la cimentación de honores entre comensales extraños y a la fortificación de holgadas patrias. Formó parte de la dinastía que empuñaría con fuerza la lucha por una soberanía entre multitudes, la lucha por la libertad humana entre páginas de fábula, la lucha por sublimar la voz de los afligidos, la ecuanimidad de razas en la distancia, la cercanía de unas manos entrelazadas en la penumbra de la miseria, al latido acariciado por la fortuna. Compartió su mesa con viajeros hambrientos, amó con el vigor y el fuego de su entraña. Hoy sus manos temblorosas, frágiles, desgastadas por el tiempo sólo sostienen un sobre con unas monedas, como entrega a sus días bajo la sombra del olmo, mientras ve otras primaveras revoloteando, alzando sus sueños depositados en los colores de una cometa, antes de empezar sus mismas lides. Octubre 2013
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DECIRES SOBRE… por Isabel Barbeito Carneiro LECTURAS ESCOLARES INFANTILES Lo malo era madrugar; pero, ¡cuánto disfrutaba en el “Cole”! El repelús que me causaban Matemáticas y Geometría, se compensaba con la Lengua Española y sus aditamentos: redacciones y dictados escritos, narraciones y lecturas de viva voz… En “Primer Grado” (curso siguiente a “Párvulos”), el libro de lectura era España mi Patria. Escrito en 1917 por el Profesor José Dalmáu Carles, de Gerona, fue publicado en la Editorial de su nombre. La edición de 1945 (470 páginas + Índice) describe todas las provincias peninsulares, desde Vascongadas (pp. 9-37) hasta las Islas Canarias (pp. 461-470). A pesar de la concisión, el recorrido es sumamente ilustrativo. Para mí, fue durante años un compañero de viaje muy útil. Copio a continuación algunos fragmentos sobre Alcalá de Henares: «[…] A 33 kilómetros de Madrid, es la antigua Complutum de los romanos, a la que Trajano engrandeció haciéndola residencia de 14 legiones. En 1088 el arzobispo de Toledo la reconquistó a los moros, y los reyes de Castilla la eligieron como uno de los sitios donde frecuentemente residían. Cuando en 1498 colocó el cardenal Cisneros la primera piedra de su celebérrima Universidad —que superó en importancia a la de Salamanca y compitió dignamente con las de París, Bolonia y Oxford— Alcalá no tenía más valor que el que le daban sus fuertes murallas, protegidas por recios baluartes y almenadas torres; mas rápidamente se transformó en ciudad alegre y populosa. De aquella época de esplendores fueron testigos sus admirables monumentos […]. Alcaláde Henares tiene bellos paseos, espaciosa Plaza Mayor con monumentos a su hijo inmortal, el Príncipe de los Ingenios […]» (p. 313). En Segundo Grado, el libro de lectura era Países y Mares, de Joaquín Pla Cargol, publicado asimismo por la Editorial Dalmáu Carles. La edición de 1947 (423 págs. + Índice) consta como «obra declarada de utilidad para las escuelas y colegios por Decreto de 3 de febrero de 1931». Según indica el título, comprende un recorrido por distintos países del mundo, utilizando como hilo argumental el periplo de un padre y el hijo al encuentro de sus padres y abuelos respectivos. El itinerario previsto es «dirigirse al Japón visitando antes América del Norte, y regresar pasando antes por la India, por el Mar Rojo y por el Mediterráneo» (p. 10). Los textos correspondientes al “Diario de viaje” aparecen escritos en distintos tipos de letra cursiva al uso entonces y ahora, aun cuando por razones obvias cada vez se manuscriba menos. Bajo el epígrafe «Finalidad de este libro», se dice: «nos parece que la lectura de este libro, más si se hace comentada y viva, puede contribuir a desarrollar en los niños curiosidad e interés por numerosos asuntos y materias […]» (p. 8). Doy fe de que lograron su objetivo en muchas cabecitas infantiles, a corto y largo plazo.
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AMANECER SIN TI
LA MAGIA DE TU ESENCIA
Amanecer sin ti ya no sería lo mismo. Mi corazón herido se volvería marchito. Te quiero más que a un hermano, te quiero como al héroe que me rescató del pánico, de la náusea de vivir y no ser nada. Nada. Una llama rota y apagada. Sin tu apoyo mi mente hubiera sucumbido al delirio, al dolor de saberse no querida por el mundo. Tú siempre fuiste mi referente, mi estrella, tú eres tú, y yo sin ti, sólo soy aire. Una ráfaga lunática perdida a la que el amor un día, convirtió en un sauce.
La magia de tu esencia, se me perdió en sus sollozos. Una imagen desmoronada que habrá que pegar a trozos. Puedo fingir que es lo mismo, quererte como hice siempre, pero ante mi alma y mis ojos… ¡Qué triste y hondo vacío!
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AQUELLA NOCHE
Habitantes de extramuros Refugiados en la indiferencia Con el sudor clavado en abruptos peldaños Lanzando miles de redes al viento Salieron del desván Pedazos destrozados Escuchando aquel corazón Que golpeaba al unísono Un frío cristal Rompiendo enmohecidos espejos. Las lunas sucedieron a las nieves, Los largos estíos a las lluvias En una rueda incesante Y aquella noche Unos labios rozaron el aterciopelado cielo Encontrando su hueco errante Cayendo ante el esplendor de la ciudad perdida. El fulgor en sus ojos Agranda hasta la eternidad sus pupilas Senderos de latidos sacuden Cuerpos bañados por las estrellas En el río donde mi boca Saborea este momento.
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ACÉRCATE A LA POESÍA por Pilar Chacón L. El Poeta se va haciendo Haciendo un repaso de los “artículos” aparecidos en esta sección, los tres primeros iban dedicados a los aficionados a la poesía, a los que se iniciaron durante su adolescencia y a los que siempre han tenido la inquietud de expresarse en verso. En los siguientes números celebramos el cincuenta aniversario de la creación de llanura (Revista complutense de poesía). En los restantes nos acercamos al recuerdo y al conocimiento de algunos de los grandes poetas que ha dado Alcalá. Quedan más, muchos más, a los que nos tenemos que acercar, y algún día añadiremos a esa lista tu propio nombre. Pero hoy volvemos al mismo interés que nos movía en los tres primeros números de la revista y, para animar, tenemos otro ejemplo: LUIS ALBERTO DE CUENCA. Tropecé o tuve la suerte de encontrar en la revista Litoral, (11 de abril de 2013) un extenso artículo del gran poeta donde nos cuenta cómo y cuándo se aficionó a la Literatura y a la poesía. Al leer algunos párrafos sentí o quise ver cierta coincidencia con él, aunque infinitamente mejor expresado que yo, cuando nos dice: “Otros -insistocomenzamos a escribir poesía porque nos gustó un determinado libro iniciático y no pudimos evitar que nos indujera a escribir. […] Lo que sí alcanzo a discernir es que escribir poesía no se elige; más allá en el fondo, no me cabe duda de que la creación poética ha de plantearse en términos de necesidad” Pero también nos indica que: “Ser poeta es hallarse en posesión de una determinada técnica, la de hacer versos, que implica, desde luego, oído poético, cultura poética y algo que decir al oyente o lector (un “algo que decir” que se plantea en términos de necesidad u obligatoriedad y que se impone al creador, que no tiene más remedio que expresar ese “algo” en un poema”. Y también: “[…] que, detrás de cada verso irrepetible, no solo hay inspiración, sino también técnica y trabajo”. E insiste: “[…] y en la inmensa mayoría de las ocasiones el poema es un producto de la sensibilidad y de la inteligencia en acción, o sea, del trabajo y la constancia”. Según él nos cuenta, fue estudiando en Bachillerato la asignatura “Historia de la Literatura Universal” cuando se despertó el él un gran interés por la lectura de las obras más destacadas de los autores a los que iba descubriendo, situándolos en el tiempo, distinguiendo su estilo. Estudió a los clásicos, lo que le Página 16
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proporcionó una gran cultura y preparación que junto a su sensibilidad y perseverancia en el trabajo consiguió ser el poeta que hoy intentamos conocer, admirar, y si se pudiese, imitar. Tomo una muestra de los poemas de Luis Alberto de Cuenca de la revista, anteriormente citada: Litoral, número 255, página 38. Juzgad vosotros, pero si aquellos tiempos eran difíciles, ¿qué diría hoy del tiempo presente?
TIEMPOS DIFÍCILES Era todo tan triste y tan absurdo. No vivías apenas. Te colgabas de la pared de la melancolía y veías pasar las lentas horas que hacia nada conducen y hacia nunca. Las mujeres te habían retirado su protección, los dioses su asistencia y la literatura su cobijo. Fueron tiempos difíciles aquéllos. Luis Alberto de Cuenca
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"La casa es el sitio donde vas cuando no tienes otro sitio donde ir". Bette Davis
Las ocho de la mañana y el aroma del café recién hecho se percibe en toda la casa. Se puede escuchar de fondo la melodía de ‘Protagonistas’ a través del viejo transistor Phillips, un transistor, que aguantó los años como pudo, maltratado por dedos de mantequilla y migas de pan, pero que siempre fue el fiel altavoz que día tras día ponía banda sonora a los desayunos. Era una casa normal. Y lo sigue siendo después de tantos años. La mesa de la cocina siempre ha tenido -y tiene- un mantel de cuadros. Bueno, ha tenido muchos, pero todos de cuadros. Cuando era pequeño, ese mantel era el mejor circuito de carreras del mundo. Ya le hubiera gustado a Schumacher correr en él. Pero no solo era una pista, también era el lugar donde alunizaba un Action Man y se encontraba con muñecos de Playmobil. La envidia de Neil Armstrong. Pasaron los años y los juguetes se fueron del mantel, se quedaron en la Luna. Y dieron paso a las acuarelas, los deberes y los libros de texto; las fórmulas (malditas, siempre os odiaré), la calculadora y los grandes de la literatura. Y, más tarde, llegaron las charlas de papá y mamá sobre la vida, las primeras cervezas y el primer cigarro dentro de casa. Ese es un mantel de vida, lleno de frustraciones y sueños. Mis frustraciones y sueños. El mantel de cuadros es mucho más que un pedazo de tela, es hogar y confidencias. Pensarán por qué diablos les cuento esto. Pues es muy sencillo, verán. Hace poco paseaba por Madrid y me topé con una mirada repleta de tristeza y resignación. El dueño de aquella mirada vacía era un señor que vive el frío de diciembre en primera persona con un bote delante de él y un mantel de cuadros arropándole las piernas. Cuando me acerqué a él le dije: Bonito mantel. Y aquel señor, por un instante, recuperó el brillo en su mirada, y sus mejillas entumecidas le permitieron sonreír de nuevo. Y con una imponente voz me dijo: Gracias, es lo único que me queda de mi casa. Me recuerda tiempos mejores, lejos de la puta calle. La vida es muy puta, ¿sabe? Asentí y le deseé suerte. Y no pude evitar acordarme del mantel de cuadros y pensar que, para aquel señor, el suyo también era un mantel de vida, de frustraciones y sueños. Sus frustraciones y sueños. Un pedazo de cálido hogar con el que resguardarse del frío que hace afuera. Y es que al fin y al cabo, todos queremos un lugar donde poner nuestro mantel de cuadros. Estemos donde estemos en esta puta vida.
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Tu punto de encuentro. Nº 9
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2013 languidece. Vidas muertas. Todo crece. A veces luchas. Otras ganas, pero no lo mereces. Rabia entre victorias. Derrotas con creces. Lo único que pasa aquí es que desvaneces. Cuando ves que a veces, la pena te aparca lejos y eso es lo que vence. Que te espera, vente. Continúo: martes 13. Qué coño pasa en este ritmo que todo entorpece. Esto va de frente. Esto va de leches. Una tras otra sin saber qué siente. Después al rato, gilipollas te arrepientes. No miras de frente, siempre para la corriente. Qué quieres que te cuente… Cuando la mentira a ti te gana, eso no es suerte. Eso es sentirte algo raro diferente, dentro de una rutina que ya no comprende mi gente. Únanse al canto que este vende, -mecánico y escacharrado como el puto vender-, dame lo que quieres pero al menos no la muerte, que queda en la estela que hace todo diferente. STOP. Ahora vengo a mi manera. Ya nada espera. Primavera se fue y… STOP. Ahora vengo gente. Ahora vengo como siempre. A veces lejos, diferente, pero… STOP. Suenan palmas (y a veces gritos), pero entre todos palpito, buscándome un sitio a la otra orilla… Es lo que pido, pero STOP. Mejor ¡paren ya! Porque ya nada se mueve en este continuo vendaval, y ya no doy para más… Pronto voy a descarrilar en el tren que queda para poder soñar. Y qué quieres avivar, esperanza o libertad… Lo único que quiero ahora es poder descansar y poder respirar y poder recordar cuando todo eran sonrisas, todo felicidad… Y nno puedo parar y no puedo pensar que todo lo que se queda aquí es para ná. Y sé que nada se fue o nada se marchó. Pero antes de que vuelvas, mejor soltar un adiós. Porque nada va mejor. Porque todo va a peor. Más vale correr, correr, cual Forrest, hacia un futuro mejor. Pero sube el altavoz. Deja que suene mi voz. Que el eco de esta noche retumbe hasta que el sol salga hoy de nuevo. Lo siento amiga, pero es lo que debo. No tengo ganas ni siquiera de dinero. Sólo mil recuerdos en un agujero. Y con eso me quedo. Ya no pasa nada. Ya no es lo que quiero. Ya no es lo que siento ni lo que venero. Son sólo recuerdos de un eterno enero, donde el frio poco a poco me convierte en prisionero. Vengan a por mí. Hoy, vengan con pico y pala, porque nada arregla lo que este men dispara. Lleven hacia el cielo estelas caducadas de un cometa que ya no vuela porque le faltan alas. Y mientras, no sonrían. No se hagan los fuertes. Empieza un nuevo año: igualito es el siguiente. Qué pasa aquí mi gente… ¿No quieren ser fuertes? Mejor luchen y griten… Que el enemigo tiemble.
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EL AUTOR Y SUS TEXTOS
con Domingo Becerra del Puerto
JOSÉ ASUNCIÓN SILVA En la mañana del 24 de mayo de 1896 es encontrado muerto en su dormitorio el gran poeta colombiano José Asunción Silva. La noche del 23, su madre, doña Vicenta Gómez, había organizado una velada. Probablemente en ella, nuestro querido José Asunción se había hecho señalar por su médico, con una cruz, el lugar exacto de la situación del corazón. En esa señal se pegó un tiro. Por qué había tomado tan tamaña y dramática decisión nuestro inmortal poeta. Lo ignoro, pero en una de las rimas de su admirado Gustavo Adolfo Bécquer se puede leer: Mi vida es un erial, flor que toco de deshoja; que en mi camino fatal alguien va sembrando el mal para que yo lo recoja. El contenido de esos versos se puede aplicar perfectamente a José Asunción Silva que había nacido en Bogotá el 27 de noviembre de 1865 en el seno de una familia rica formada por don Ricardo Silva y doña Vicenta Gómez como ya se ha señalado. El matrimonio tuvo varios hijos. Cuando José Asunción tenía diez años perdió a su hermano Andrés Guillermo y al siguiente año murió también su hermano Alfonso, un bebé de apenas dos meses. Y cuando nuestro poeta tenía poco más de doce años también perdió a su hermana Inés Soledad. Sólo sobrevivieron, aparte de él, sus hermanas Elvira, que había nacido en 1872 y Julia en
1877. Por cierto que en enero del 91 muere también Elvira a los 19 años y Elvira no sólo era su hermana, era su amiga y confidente de sus penas y por si fuera poco, también parece ser la inspiradora de tan musicales y emotivos versos que encierran todas las notas de la sublime marcha fúnebre de este tercer nocturno que podréis leer a continuación. Algunos malnacidos han llegado a pensar mal de la relación de José Asunción con su hermana. Peor para ellos. Y siguiendo con las muertes, antes de dar otras pinceladas negras a sus desgracias, hay que decir que a los veintiún años perdió a su padre. Pero las ruinas económicas ya habían comenzado mucho antes. A los diecinueve ya tuvo que hacer frente a responsabilidades de este tipo que prácticamente no cesaron nunca. Cuando al fin parecía que su desgraciada vida iba a enderezar un poco su camino al ser nombrado Secretario de la Legación de Colombia en Caracas, el dinero sigue faltando y hay un enfrentamiento con el ministro de la Legación. Tiene necesidad de volverse a su patria porque Caracas lo ahoga. Coge un vapor para regresar a Colombia. El vapor naufraga en Barranquilla. No hay desgracias personales, pero la mayor parte de los manuscritos del poeta se pierden en el naufragio. Nuevos intentos de renacer. Vuelve a Caracas, pero sigue su enfrentamiento con el ministro y aumentan sus deudas. Nuevo y continuo fracaso. Vuelve a Colombia y… el resto ya se sabe.
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Nocturno Una noche una noche toda llena de perfumes, de murmullos y de música de älas, Una noche en que ardían en la sombra nupcial y húmeda, las luciérnagas fantásticas, a mi lado, lentamente, contra mí ceñida, toda, muda y pálida como si un presentimiento de amarguras infinitas, hasta el fondo más secreto de tus fibras te agitara, por la senda que atraviesa la llanura florecida caminabas, y la luna llena por los cielos azulosos, infinitos y profundos esparcía su luz blanca, y tu sombra fina y lánguida y mi sombra por los rayos de la luna proyectada sobre las arenas tristes de la senda se juntaban. Y eran una y eran una ¡y eran una sola sombra larga! ¡y eran una sola sombra larga! ¡y eran una sola sombra larga! Esta noche solo, el alma llena de las infinitas amarguras y agonías de tu muerte, separado de ti misma, por la sombra, por el tiempo y la distancia, por el infinito negro, donde nuestra voz no alcanza, solo y mudo por la senda caminaba, y se oían los ladridos de los perros a la luna, a la luna pálida y el chillido Página 21
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de las ranas, sentí frío, era el frío que tenían en la alcoba tus mejillas y tus sienes y tus manos adoradas, ¡entre las blancuras níveas de las mortüorias sábanas! Era el frío del sepulcro, era el frío de la muerte, Era el frío de la nada... Y mi sombra por los rayos de la luna proyectada, iba sola, iba sola ¡iba sola por la estepa solitaria! Y tu sombra esbelta y ágil fina y lánguida, como en esa noche tibia de la muerta primavera, como en esa noche llena de perfumes, de murmullos y de músicas de alas, se acercó y marchó con ella, se acercó y marchó con ella, se acercó y marchó con ella... ¡Oh las sombras enlazadas! ¡Oh las sombras que se buscan y se juntan en las noches de negruras y de lágrimas!
Humanistas del XXI Nuestros colaboradores te dan a conocer el fruto de su trabajo y/o de su estudio. Opiniones acerca de las diferentes manifestaciones culturales, cine, teatro, literatura o nuevas tendencias gastronómicas. Estudios históricos… El ensayo también tiene lugar en nuestra Web. Un espacio en el que tú también cuentas.
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ARENA ETERNA Con motivo del homenaje a las mujeres de Ciudad Juárez. Septiembre 2013
Se cuentan por millones los huesos desgarrados que claman bajo la arena del desierto, fundidos con ella, brillando con ella, muriendo con ella, viviendo con ella. Se cuentan por millones las lágrimas de los muertos mojando cada grano de arena en un afán imposible, constante, desgarrador y eterno. La eternidad extiende sus entrañas bajo la arena creando ríos de savia con los labios de las muchachas que, desde Juárez o cualquier otra ciudad del mundo, cantan color de nácar o mañanas de besos. Porque no existe el mundo sin la nana que duerme, porque no existe el hombre sin el viento y la herida, porque no existe el cielo sin la mano que clava el amor en la espuma de arena infinita. Todo suena en un eco de voces no tocadas por encima de las nubes y de las sombras. La serpiente se diluye en la luz del camino mientras dibuja el paso ondulado hacia la eternidad. Sufre la arena, canta la arena frente a un mar que, desgajado en olas de tormenta, esconde la esperanza de un futuro de pájaros para dejar la huella que nunca deberá repetirse.
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EL SIGNIFICADO DE ALGUNAS EXPRESIONES TOMAR LAS DE VILLADIEGO. Se trata de una expresión muy antigua que encontramos frecuentemente en nuestros clásicos y que se cita en “La Celestina”. Significa huir, salir a escape de algún sitio o desentenderse de una situación o un problema a toda prisa, sin ánimo de volver a retomarlo. Villadiego es una importante población castellana de la actual provincia de Burgos. Existen varias teorías para explicar el origen de esta frase. Mientras algunos afirman que en tiempos remotos, allí se fabricaban unas famosísimas alforjas que eran muy utilizadas para salir de viaje; otros atribuyen el origen de la frase a un aventurero nacido en aquel lugar, que durante la conquista de América tuvo que salir precipitadamente de alguna circunstancia embarazosa, o fue enviado a una misión de la que no regresó nunca, haciéndose popular aquella extraña hazaña que tiene como resultado la desaparición de todo aquel que la emprende. Pero existe una tercera explicación más verosímil que relaciona esta expresión con las persecuciones de los judíos durante la Edad Media. En pleno furor antisemita, el rey Fernando III “El Santo” (1199-1252) promulgó un decreto prohibiendo que se persiguiese a los judíos de Villadiego, a los que deseaba proteger por algún motivo, poniéndolos bajo su protección y custodia. La noticia debió propagarse rápidamente entre ellos hasta que entre la población judía se llegó a considerar la mencionada villa como un auténtico santuario. No sería de extrañar que cuando alguno de ellos se sintiera amenazado, “tomara las de Villadiego”, o lo que es lo mismo: se apresurara a buscar refugio y seguridad en la citada población. Una vez allí, tenía que vestir una especie de calzas amarillas, que lo identificaba como judío protegido del monarca, y que le evitaba el verse sometido a otro tipo de vejaciones o maltratos.
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EL AMOR LO TRAE EL POEMA Jamás pensé que cuerpo y alma se estremecieran al escuchar los latidos de tu corazón. Jamás pensé que tu boca haciendo surcos dibujara una sonrisa e hiciera temblar las paredes que lapidan los turbios sonidos del amor. Es más quisiera creer que las palabras prisioneras del olvido albergaran al poeta y mintieran a la razón. Amar sin confusión ahuyentar al deseo dejar libre pensamientos aturdidos que un día se hundieron en el fondo del mar. Escudriñar en el deseo arrancar los poemas de amor candelabros de hielo que abrigan cuando la llama encendida desea dar calor. 15/07/2012
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EL RETORNO A la luz cereal de esta mañana vuelvo al lugar antiguo y por el pecho siento tocar a misa una campana.
Así voy con mi pena y con mi gloria, bajo un sol amarillo de acarreo por el campo que tengo en la memoria.
Se viene el corazón, por lo derecho, a su ración de tierra soñadora donde ayer tuvo lecho y tuvo techo.
O madrugo en la frente un laboreo del huerto aquel “del monte en la ladera” donde si busco a Dios ya no le veo.
Y la canción se me hace trilladora de una mies imposible de otra era y su recuerdo, siempre, me enamora.
Me voy por la bendita sementera -casi luz, casi sombra, casi olvido-, a una tarde lluviosa en primavera.
Que el alma se me vuelve jornalera de andar entre lo humano y lo divino espigando en la vieja rastrojera.
Aquel agua de amor cuyo sonido repica dulce por mi sangre y dudo si estoy por lo ganado o lo perdido.
Pero sé ya que no mueve molino el agua aquella que se fue, pasada, rumorosa de riego a su destino.
Porque vuelvo a la paz, retorno, acudo a la señal de un mágico convite y vengo a la besana y os saludo.
Se llega por la senda acostumbrada al surco, al beso, a Dios, a lo primero que nos puso la vida en la mirada.
Regresa el corazón y se repite; como el niño que fui, voy por la aldea jugando, alegremente, al escondite.
O nos devuelve el tiempo pasajero al mismo andén feliz en que otro día levantamos un vuelo aventurero.
O soy, por la pasión que me rodea, mozo otra vez que ronda una ventana y aunque la novia esté ya no me vea.
Y estoy por la cosecha vuestra y mía si al ir dándole vueltas a la noria repaso mi lección de geografía.
Amigos de mi vida más temprana: de estar a vuestro lado, en la querencia, a la luz cereal de esta mañana mi corazón ya tiene residencia.
(1986)
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NO TENÍAS RAZÓN, AMOR No tenías razón, amor, no la tenías. Era el miedo a sumergirte entre esas nubes que en el azul inmenso deslizaban tu agónica partida. Confundiste el miedo con el viento, al que llamabas libertad, mientras huías. Te confundías, amor, te confundías. Luego, viajaste a las tinieblas de la noche para llegar hasta una luna que inventabas como a una diosa o un espejismo, para adorar su tez sombría. No me veías, amor, no me veías. Y no me quedaron lágrimas que derramar, ni desconsuelo -aunque fuera en los reproches-, y comprendí sencillamente que no dolías. No me dolías, amor, no me dolías. Y era mi voz un triste arrullo y estaba sola, y se meció en la nostalgia de tu recuerdo, y desgastó tu nombre, desnudo ya, en melancolía, y te llamaba, y no venías. No respondías, amor, y no venías. Y ahora te extraña, cuando regresas, que te ofrezca en esta copa de licor, mi indiferencia. No tenías razón, amor, porque ese amor que me ofrecías, si no es de los dos, es de mentira.
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EL QUIJOTE DE ORTEGA Y GASSET -III EL VILLANO Veamos ahora la impresión que el heroísmo produce en el alma del villano, incapaz de heroicidad. El villano vive atenido a lo necesario y lo que hace lo hace por fuerza. Obra siempre empujado; sus acciones son reacciones. No le cabe en la cabeza que alguien se meta en andanzas por lo que no le va ni le viene. Pocas cosas odiamos tanto como al ambicioso. Y el héroe, empieza por ser un ambicioso. La vulgaridad no nos irrita tanto como las pretensiones. Solemos abrigar una gran desconfianza hacia todo el que quiere hacer usos nuevos. No pedimos justificación al que no se afana en rebasar la línea vulgar, pero la exigimos perentoriamente al esforzado que intenta trascenderla. De aquí que el héroe ande siempre a dos dedos de caer, no en la desgracia, sino de caer en el ridículo. El aforismo “de lo sublime a lo ridículo no hay más que un paso” formula este peligro que amenaza genuinamente al héroe. De querer ser a creer que se es ya va la distancia de lo trágico a lo cómico. Este es el paso entre la sublimidad y la ridiculez Como el carácter de lo heroico estriba en la voluntad de ser lo que aún no se es, tiene el personaje trágico medio cuerpo fuera de la realidad. Con tirarle de los pies y volverle a ella por completo, queda convertido en un carácter cómico. De esta guisa queda como un disfraz ridículo, como una máscara bajo la cual se mueve una criatura vulgar. Esto acontece con Don Quijote cuando, no contento con afirmar su voluntad de la aventura se obstina en creerse aventurero. Vive, en consecuencia, la comedia sobre la tragedia, como la novela sobre la épica. (3ª Parte. Fin.)
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¿LO SABÍAS? por Ester Lorente y Olga Becerra Hay una pulsera termoeléctrica creada en el Instituto Tecnológico de Massachusetts que monitoriza la temperatura corporal y envía variaciones muy rápidas e imperceptibles de calor o frío para mantener el cuerpo en una zona de confort constante. Si alguien no lo sabe, su nombre es Wristify. El insecto alado más pequeño del mundo es la avispa parasitaria de Tanzania. ¿Quién puede pensar que es más pequeño que el ojo de una mosca común? Pues ese es su increíble tamaño. Con más de 2 000 Km. de longitud, el gran arrecife de coral es la estructura viviente más grande de la Tierra. El profesor de física escocés James Lind fue quien inspiró a Mary Shelley su novela universalmente famosa "Frankenstein". Había sido profesor de su marido, el poeta Percy Shelley, y los comentarios de éste sobre sus experimentos acerca de las ranas muertas a las que movía por medio de impulsos eléctricos, despertaron el interés de Mary Shelley hasta el punto de emplearlos más tarde en su novela.
Es que yo soy de letras
Hemos comenzado la producción de documentos sonoros para acercarnos a personas muy ligadas a la cultura. Estuvimos con Antonio M. Moreno, poeta que nos habló de su manera de entender la vida y recitó poemas de su último libro, “El café del loco”. También nos visitó Manuel Vicente Sánchez Moltó, cronista oficial de la ciudad de Alcalá de Henares que nos desveló sus maneras de acercarse a la investigación. Y llegó Enrique Sabaté, Quique para los amigos, que nos desveló toda una filosofía de vida. Lo efímero del tiempo se convierte en arte para el trovero. Sus improvisaciones siempre nos van a sorprender. Puedes escucharlos en http://www.grupoparnaso.com/#!es-que-yo-soy-de-letras/c21wu
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NÚMERO DOS Rompe mi pecho contra el tuyo, descubre la lubricidad que se oculta… la que se escuda bajo el atuendo de la falsa moral. Abre la ventana y deja que también me penetre toda la luz del mundo. Renueva la maldad propia del sexo exhausto, acostumbrado a las manos pasajeras del amor equivocado. Remueve de las entrañas aquellas osadías verbales, impropias y perjudiciales. Adiéstrame para matar el tiempo entre tus piernas. Educa mis manos para aferrarse a tu espalda de una manera dolorosa pero elegante. Iníciame en tu cuerpo que yo te daré la oportunidad de contemplarme.
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BÚSQUEDA INEFICAZ Te he buscado en la tierra y en el cielo. Te he buscado en el cielo y en la tierra. Te he buscado en todos mis anhelos. Te he buscado en la paz y allá en la guerra. Te he buscado en la altura de los vuelos. Te he buscado en el valle y en la sierra. Te he buscado en la calma y en los celos. Te he buscado en la vida que me aferra. Te he buscado en los listos y en los lelos. Te he buscado en la muerte que me aterra. Te he buscado en los olmos y pomelos. Te he buscado en el justo, en el que yerra. Te he buscado en las uñas y en los pelos. Te he buscado en la puerta que se cierra. Te he buscado en las caras y en los velos. Te he buscado en el perro y en la perra En la luz y en la sombra te he buscado. Te he buscado en el sobrio, en el borracho. Te he buscado en el viejo, en el muchacho. En todas partes, Dios, y no te he hallado.
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DESDE MI BUTACA por Rubén Lorente Sin él, el séptimo arte no sería lo mismo. Se han cumplido cien años de la aparición del más famoso vagabundo en febrero. Es uno de los grandes. Se trata de Charlie Chaplin. Nació en Londres en 1889. Perteneció al mundo del teatro y la pantomima ya que sus padres eran cómicos. Él, alcohólico. Tras la muerte de ella en un frenopático, Charlie y su hermano llegaron a vivir de la caridad. Avatares que reflejó fielmente en sus películas. Compuso su vagabundo con diferentes elementos: Sombrero de hongo y bastón que representaba a la burguesía; bigote de galán frente a zapatones y pantalones raídos y llenos de parches que lo convierten en un personaje completamente contradictorio. Su atuendo es el más famoso y perdurable de la historia del cine. Fue un gran conocedor del lenguaje corporal y gestual y supo plasmarlo con gran acierto en el cine. El éxito está además servido si lo encontramos siempre huyendo de la policía o de algún matón. Había nacido Charlie, Carlitos para América latina y Charlot en Francia, de donde España lo acogió con dicho nombre. Judío errante, pícaro enamoradizo, bandido generoso, apátrida sentimental y mendigo dandy como lo definió Fernández-Santos. El personaje del vagabundo lo acompaño hasta 1940, cuando rodó “Tiempos modernos”. Con Mack Sennett, jefe de la Keystone, la famosísima productora de las persecuciones policiales, los innumerables trompazos y tartazos, rodó 35 películas de un rollo. En 1915 la productora Essanay le robó a Sennet su estrella por un contrato de 1.500 dólares a la semana. Chaplin innovó: películas de 2 rollos y tramas más complicadas con toques románticos, melancólicos trufados con receta humorística en los que él era el protagonista absoluto. Escribió y dirigió 14 películas con esta productora. Cambió nuevamente de productora en 1916 (La Mutual) realizando 12 películas, entre ellas “El prestamista” o “El inmigrante”. En 1918 la First National lo contrató por la cifra record de un millón de dólares anuales. Entonces rodó su primer largometraje “El chico” (1921), con elementos autobiográficos. En 1919 Charlie, Mary Pickford (la novia de América), Douglas Fairbanks y David W. Griffith crean una productora independiente: United Artistis (UA). Pero Chaplin no pudo trabajar con ella hasta que acabó su contrato con la anterior productora en 1923. Una vez sin ataduras dará rienda suelta a su creatividad. Inicia la gran trilogía final de Charlot “La quimera de oro” (1925); “El circo” (1928), que él no consideraba muy lograda aunque consiguió con ella su primer Oscar; “Luces de la ciudad” (1931). Terminó con el vagabundo en 1936 con “Tiempos modernos”. En 1940 rodó “El Gran Dictador” una crítica al totalitarismo, una parodia a Hitler y lo que significaba. Posteriormente Chaplin comentó que “de haber sabido las atrocidades cometidas por ese individuo, no hubiera rodado la película”. Víctima del macartismo, se vio obligado a abandonar EE.UU. en 1952. Aunque antes de irse rodó “Candilejas”. Una verdadera alegoría de la vida de un cómico. Ya en Londres dirigió “Un rey en Nueva York” (1957), haciendo una crítica despiadada a la sociedad norteamericana. Su última película fue “La condesa de Hong Kong” Murió el día de Navidad de 1977, en Suiza. A los 88 años.
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Coordinación: Olga Becerra Consejo Editorial: Domingo Becerra, Rubén Lorente, Pilar Chacón, Montserrat Siesto, Aida Lorente, Ester Lorente. Diseño y maquetación: Ester Lorente y Olga Becerra. Diseño y rotulación de portada: Rubén Becerra y Maua Orma. Ilustraciones: Maua Orma. Fotografía de portada: Ester Lorente. Modelo de portada: David Díaz. Fotografía de portada realizada en el parque Europa de Torrejón de Ardoz (Madrid). Contraportada, en Daganzo de Arriba (Madrid). En las redes sociales: Aida Lorente y Ester Lorente. En la Web: Rubén Becerra. Correo electrónico: Olga Becerra y Montserrat Siesto. Editado en Alcalá de Henares (Madrid) Por Parnaso.CreAcción Año 2014
EN ESTE NÚMERO HAN PARTICIPADO: María Luisa Arnal Salazar (pág. 5) Ana Benito (págs. 8 a 11) Gloria Gómez Candanedo (pág. 12) Aurora Esteban Zarza (pág. 14) Maribel Domínguez Duarte (pág. 15) Javier Portillo (pág. 18) Luis Maker Mesa (pág. 19) Juan Francisco Peña (pág. 23) Esther Núñez (pág. 25) Luis de Blas (pág. 26) Olga Becerra Pérez (pág. 27) Aranesvid López (pág. 30) Domingo Becerra del Puerto (pág.31)