EL AUTOR EN SU TINTA Francisco Proaño Arandi

Entrevista a Francisco Proaño Arandi

Redacción VISIÓN EPS

¿Cuándo comenzó a escribir?, ¿qué le inspiró? Creo que esta vocación hacia la escritura y la literatura viene conmigo desde siempre, desde niño me gustaban los versos. También lo atribuyo al ambiente familiar, mi padre tenía una interesante biblioteca y gustaba mucho de contarnos sobre los libros que él leía.

Francisco Proaño Arandi, cuencano de nacimiento y quiteño de toda la vida, es novelista y cuentista, quizá uno de los mejores en Ecuador. Con una amplia trayectoria en el mundo cultural, ha sido autor de varias novelas de trascendencia, galardonadas en su momento y reconocidas en toda época.

Esta vocación se perfila en los años 60, cuando muy joven me incorporo al vanguardista movimiento literario el grupo “Tzántzicos”. Además fui cofundador de la revista La bufanda del Sol, emblemático medio de comunicación; creo que es aquí dónde siento la gran necesidad de escribir.

Fotografía: Daniela López S.

¿Qué personaje literario considera usted que ha influido en su trabajo? En aquella época me impresionó mucho el protagonista de la novela Rojo y negro (de Stendhal), Julián Sorel, seguramente por la disección psicológica profunda que se hace de este personaje. También hay varios autores que influyeron y perfilaron mi vocación como Fiódor Dostoyevski, Franz Kafka, y algunos escritores ecuatorianos.

Para usted ¿cuál de sus obras considera la mejor?, ¿por qué? Creo que tengo cierta predilección por Del otro lado de las cosas, publicada en los años 90; es la que más me llena porque ahí resalté mucho lo que tengo adentro. Sin embargo, considero que una de las obras mejor terminadas es Tratado del amor clandestino, ganó el premio “José María Arguedas” de Casa de las Américas en Cuba, fue finalista del premio “Rómulo Gallegos”. Tengo mucho afecto también por mi primera novela, Antiguas caras en el espejo, en esta obra asumí frontalmente el riesgo de escribir.

Después de leer y escribir, ¿qué es lo que más disfruta hacer? Leer y escribir para mí es vital, parte de mi existencia, para mí no es un hobby. Entre otras cosas, me gusta el cine, me apasiona el arte y también disfruto mucho de viajar.

En su vida como escritor, ¿qué considera lo más satisfactorio? Puede ser el haber llegado a ciertos lectores con mis obras, en especial al público joven. Me hace sentir que algún mensaje está llegando a la conciencia de estos lectores. También hay momentos importantes como cuando se revela una faceta de la realidad y uno piensa que debe ser objeto de tratamiento literario. Eso a lo que llaman inspiración yo lo llamo revelaciones de la realidad.

Otro momento trascendente es cuando uno ve acabado el texto, esa primera sensación o idea de ya verlo como un hecho literario.

Al momento, ¿se encuentra trabajando en un nuevo proyecto? Tengo algunos proyectos en los que voy avanzando, pero esto lleva tiempo, espero pronto ya poder comentar algo. Recientemente publicamos el libro Elementos dispares con una reconocida editorial del país, son una serie de cuentos.

¿Usted cree que las revistas aportan en la generación de lectores? Pienso que una revista, en especial cuando es un ensayo o reflexión, de índole cultural literaria, es muy importante, pues además de llegar a un público más amplio que el mismo libro se convierten en vehículos de comunicación.

Lamentablemente en nuestro país he visto que estamos adoleciendo de este valioso medio de comunicación, pues poco a poco han ido desapareciendo muchas revistas que aportaban en varios aspectos por la información que permitían difundir y por la preferencia que había, en especial, del público joven.

Fotografía: Daniela López S.

ALGUNAS DE SUS OBRAS:

Antiguas caras en el espejo (1984) Oposición a la magia (1987) Del otro lado de las cosas (1993) Historias del país fingido: cuentos (2003) La razón y el presagio (2003) Perfil inacabado (2004) Tratado del amor clandestino: novela (2009) El sabor de la condena (2010) Entretextos, ensayos sobre literatura (2010)