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Fran Nore CRÓNICA POÉTICA
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Camino al son del viento emancipador Las calles son más largas cuando no sonrío y extrañas bocas pronuncian mi nombre
¿Seré el hombre que llaman entre las verjas? No sé si merezco que una sombra me llame por mi nombre igual no me importa demasiado
Y camino sin sonreír con mis labios de tierra con mis ojos llameantes de fuego apasionado con mi cara de hueso salpicado de brisa
Hace una pequeña luna verde y cae la suave escarcha sobre los guayacanes nocturnos deshojados
Se sacuden las hojas de los árboles en el frío de la ausencia insaciable sed
La noche es cómplice de mis manos deshojadas mis pies transitan levemente un camino imaginario de patria recién nacida
Antiguos íconos de mi vida descubierta relucen juveniles en un campanario perpetuo exhalo subterfugios
El horizonte funda en mis ojos parajes lejanos
Quiero renacer allí
como una llamarada
soy
quiero No busco nada Tengo en mí todo lo que
Tengo en mí todo lo que
Ya me equivoqué las veces que quise aceptando aprender a verme al punto de borrar los dolorosos recuerdos de mi mente