Qué contradictorio es el Perú.
Pareciera que tiene tres ejércitos
diferentes viviendo bajo el
mismo techo. Por un lado el sector formal,
tradicional, y capitalista, que dice
llamarse República Peruana, con su
gobierno y sus instituciones. Por otro
lado, el sector informal, también capitalista
y emprendedor, responsable del
90% del empleo y de casi la mitad de
la riqueza producida, surgido como
consecuencia de las contradicciones
políticas, del fracaso de la República,
de los partidos y de la institucionalidad.
Finalmente la burocracia estatal,
que agrupa a una amplia mayoría de
peruanos, empleados de ministerios y
“instituciones de control” que han adquirido
un poder discrecional capaz de
frenar la inversión, el desarrollo, y la
economía.