236 Manual de técnicas de montaña e interpretación de la naturaleza
mos un prusik sobre la cuerda para permitirnos maniobrar con seguridad y sustituimos el nudo de fuga por un sistema autobloqueante (bloqueador mecánico, nudo corazón, ocho en posición de bloqueo). Alcanzamos al accidentado un seno de la misma cuerda con un mosquetón de seguridad que anclará al anillo del arnés. Simultáneamente, el accidentado traccionará de la cuerda anclada al sistema de autobloqueo mientras que el compañero lo hará por medio de la cuerda que pasa por el mosquetón situado en el arnés. Figura 9.49 Pasabloc. RESCATE Si colabora el accidentado • Sistema alternativo • Sistema de autopolea Si no colabora el accidentado • Utilización de polipastos a través de un sistema fijo, móvil o combinado
Figura 9.47 Pasamanos y forma de pasarlo. Tirolina
Cuerda auxiliar de seguridad
Figura 9.48 Tirolina.
TRANSPORTE DE ACCIDENTADOS Una vez ocurrido el accidente, situado el accidentado fuera de la zona de peligro y realizados los primeros auxilios, viene lo que tal vez sea la parte más dura de un rescate: el traslado. Cuando sospechemos que hay lesiones importantes, esta labor la dejaremos en manos de los equipos de rescate, que son quienes tienen los medios y los conocimientos para realizar la evacuación de un herido en estas condiciones. Hay que advertir que el transporte con medios improvisados es incómodo para el accidentado y agotador para los socorristas. Utilizaremos un sistema u otro en función de la importancia de las lesiones, así como de la localización de las mismas. Con medios manuales Si contamos con un solo socorrista, el transporte lo podemos realizar a corderetas, sobre los hombros, o en brazos. Si están dos o más personas disponibles, podemos utilizar la “sillita de la reina” o improvisar un asiento con algún trozo de madera. Silla con cinta Para ello emplearemos dos trozos de cinta o cuerda que colocaremos uno en cada hombro del porteador, a modo de bandole-