Contexto histórico en Ortega y Gasset -15 ( 0,50 puntos) El contexto histórico de Ortega fue muy agitado, tanto desde el punto de vista nacional como internacional. Desde el punto de vista de la política nacional, Ortega conoce la monarquía de Alfonso XIII, la Dictadura de Primo de Rivera, la II República, la Guerra Civil y la dictadura del General Franco; desde el punto de vista internacional, su vida coincide con el fin del Imperio Español, tras la Guerra de Cuba (1898), la Primera y la Segunda Guerra Mundiales (1914-1918/1939-45) y la Revolución Rusa de 1917. También presencia el ascenso del fascismo italiano, del nazismo alemán y del comunismo soviético. En todos estos fenómenos Ortega detecta lo que para él constituye el fenómeno más grave y característico de nuestra época: la rebelión de las masas y la ausencia de una auténtica élite intelectual capaz de dirigir el destino de Europa. En su obra más difundida, “La rebelión de las masas” (1929), Ortega plantea que en Europa se está produciendo un peligroso fenómeno de uniformización que produce al “hombre-masa”, el hombre que sólo quieres ser igual a los demás y que es fácilmente manipulable por los demagogos. Sobre esta uniformización se pretende (tanto por la izquierda como por la derecha) producir una revolución abstracta, separada de las circunstancias concretas y por tanto de la conciencia histórica. Frente a esta situación, Ortega propondrá un reformismo liberal dirigido por la minoría selecta (los intelectualmente mejores), que es, en su opinión, lo que se corresponde con una visión pluralista y perspectivista de la sociedad (en esta misma obra Ortega defiende la creación de un Estado Europeo multinacional, que dote de unidad a Europa sin perder su diversidad). La vida de José Ortega y Gasset (1883) transita por buena parte del siglo XX. Estudia en Málaga, Madrid, Leipzig y Marburgo, se dedica tanto a la filosofía académica desde su cátedra como a la educación cultural y formadora de opinión desde los diarios, funda el periódico El Sol en 1917 y la Revista de Occidente en 1923, excelente vehículo de difusión de la cultura de la época. En 1929 se enfrenta a la dictadura de Primo de Rivera (En 1923, con Alfonso XIII en el poder y con nada más y nada menos que 32 gobiernos que se suceden bajo su reinado, el general Miguel Primo de Rivera dirige un golpe de Estado .Ortega mostrará su oposición a la dictadura, oposición que le llevará a dimitir de su cátedra). Con la caída de la dictadura los republicanos ganan posiciones y consiguen el fin de la monarquía. Nace así la II República (1931). Ortega, junto a otros intelectuales, funda la Agrupación al Servicio de la República, y es elegido diputado a las Cortes Constituyentes de la II República, aunque un año más tarde abandona su escaño debido al descontento producido por lo que él entiende como “una orientación radical de la Constitución de 1931” y, en especial, por la aprobación del “Estatuto de Autonomía de Cataluña”. Con el comienzo de la guerra civil en 1936 se ve obligado a exiliarse. Pasa de París a Holanda y Buenos Aires, y acaba instalándose en Lisboa. A partir de 1945 logra participar en la vida cultural española a través del Instituto de Humanidades, hasta su muerte acaecida en Madrid en 1955. Ortega y Gasset hacía la siguiente reflexión sobre su propia obra: “Si alguien la mira, lo que ve es un hombre estremecido en torno a ciertos grandes temas españoles. Nada