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EN LOS PROCESOS POLÍTICOS
Todas las acciones que se realizan entorno al poder político, llevan determinados procesos, marcos normativos, dinamismo logístico, actores políticos, clases políticas, ciudadanía en general, etc. El conjunto de todas las variables enunciadas o algunas, conforman los procesos políticos más significativos de las democracias, entre los que destacan, los procesos electorales, que incluyen precampañas, campañas, elecciones; construcción de planes de desarrollo; reformas legislativas y construcción de agendas políticas, las cuales son determinadas por los planes de desarrollo de cada entidad administrativa.
Considerando solo tres procesos políticos: electorales; legislativos y construcción de agendas políticas, tenemos múltiples manuales que nos acercan a la metodología y técnicas que nos permitan realizar dichas acciones concatenando diversas actividades que nos permitan llegar al cumplimiento normativo, sin embargo, aunque se cumplan con todos los factores determinados por los manuales o guías, donde la perspectiva de género se ha convertido en una parte esencial de la elaboración, al menos en el texto, de los procesos políticos mencionados, la mayoría de las personas que realizan dichos insumos, no suelen conocer la riqueza y variedad de los feminismos, se quedan atenidos a lo que dicta la norma, ley o idea con base en la perspectiva de género imperante en dichos marcos normativos, aunque esto, ya es un avance en materia política, por la rigidez que suele tener esta perspectiva, que ha sido dictada en la mayoría de los casos por grupos privilegiados, o por ocuparla solo en el cumplimiento de los requisitos, en la mayoría de las ocasiones vemos que se convierte en una salida, un trámite burocrático extra. No es la solución a la desigualdad, invisibilidad, tipos y modalidades de violencias que han sido enunciadas y que las mujeres viven a diario en todos los ámbitos públicos.
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Ante tal problemática: sólo enunciar con perspectiva de género, se debe buscar una solución real, tangible, que involucre las necesidades, problemáticas y demandas de las mujeres, las cuales, son diversas, dependiendo de los privilegios que ostentan, de la clase social en la que se desarrollan, de la escolaridad, incluso de la religión, donde los hombres también tengan un papel activo, un actuar de aliados ante las acciones que se pretendan implementar, no solo ser expectadores o peor aún críticos de dichas acciones que han realizado las mujeres para ganar sus derechos.
Queda claro que la perspectiva de género es un enfoque necesario, una visión que permite conocer y reconocer todo lo que nos circunscribe y ha generado grandes políticas públicas y cambios normativos sustanciales, sin embargo, la verdadera lucha de las mujeres está en esos feminismos que vemos y escuchamos, pero que generalizamos y que no son parte de las guías, manuales, reglas de operación, etc.
¿Qué se propone? Un acercamiento a las colectivas, a las cooperativas, a todos los grupos que amalgaman a diversas mujeres, que traen una lucha continua, donde la diversidad que las aglutinan hace más evidentes las batallas que faltan por luchar, las acciones que faltan por implementar, no se debe tener miedo a conocer los feminismos, popfeministas, ecofeministas, transfeministas, feministas radicales, de la diferencia, feminismos indígenas, anticolonialistas, antimperialistas, etc. esa riqueza de feminismos es lo que permite conocer dónde estamos fallando como gobierno, sector privado, educativo, etc, que tiene una gran actividad en los procesos políticos de todas y todos.

Se debe recordar que los feminismos son la revolución que sucede, lo que ha llevado a las mujeres a estar en diversas posiciones que anteriormente eran exclusivas de los hombres. Cada mujer ha entrado a la lucha de forma individual o colectiva, con privilegios o no, buscando una transformación real de la situación que la tiene oprimida y en desventaja, aspectos que se deben considerar en los procesos políticos que engloban a toda la ciudadanía, se debe dejar de integrar la democracia a la cultura del patriarcado y comenzar a desarrollar la conciencia política dinámica, activa, asertiva y eficaz que genere las condiciones necesarias para tener una vida digna en sociedad.
Erandeny Osorio Rivero Politóloga por la UNAM, Artista Visual (fotógrafa estenopeica);
Estudiante de Historia en la Facultad de Filosofía de Letras de la UNAM, @ErandenyOsorio @fotorandeny
La nueva burguesía es una novela escrita por Mariano Azuela, la obra se ambienta en el México posrevolucionario y cuenta la historia de una familia de clase media que, después de la Revolución, se enriquece gracias a la compra y venta de terrenos y propiedades.

La novela presenta a los personajes de la familia Pineda, quienes se convierten en parte de la nueva clase social emergente: la burguesía mexicana. A través de la historia de la familia, Azuela explora las contradicciones y conflictos sociales que surgieron después de la Revolución, incluyendo la tensión entre la vieja y la nueva clase social, la lucha de poder y las diferencias culturales.
Se crítica la burocracia, la corrupción, el oportunismo, con un sarcasmo crudo que no perdona, el autor menciona: “Hormigueaba la multitud haraposa y famélica, acarreada de Los estados de México, Hidalgo, Tlaxcala y Morelos, a falta de concurrentes de la capital. Eran las mismas bestias de cargo al servicio del encomendero español después de la Conquista, las mismas que hoy obedecen al líder, al sargento o al presidente municipal” 1
La prosa de Azuela es clara y concisa, y su narrativa es fluida y cautivadora. La novela es una crítica social aguda y una reflexión sobre la corrupción y la decadencia moral de las sociedades. Con una crítica social aguda y detallada muestra cómo la lucha por el poder y el dinero puede corromper incluso a las personas más decentes y honestas. Incluso así lo demuestra el General Almanza que se candidatea por la causa de los pobres, pero más allá de generar un cambio, al final solo ve para su propio beneficio. “Yo siempre he defendido a los de abajo, contra los que están arriba y si los de abajo del ayer ni siquiera han sabido darse cuenta que son los de arriba de hoy, es cosa que yo no tengo la culpa” 2
En general, la nueva burguesía es una obra importante para entender la evolución social y económica de México después de la Revolución Mexicana, y para reflexionar sobre los desafíos y las tensiones que enfrentan las sociedades en proceso de cambios.
Abuso, abandono y explotación infantil, hambruna, precariedad, analfabetismo, falta de oportunidades tanto laborales como de educación que desembocan en delincuencia y vicios.
Cuando leemos todo esto nos ponemos a pensar en nuestra realidad y situación actual, pero, ¿Qué pasaría si les dijera que en realidad es la trama de una película de hace más de 70 años?
“Esta película está basada íntegramente en hechos de la vida real y todos sus personajes son auténticos”, nos dice la cinta antes de comenzar el relato y retrato de la cara más lamentable de nuestro país, enfocada en un grupo de niños en medio de lo que se convertiría en la ciudad de Tlatelolco, una imagen contrastada a lo que el gobierno quería mostrar, una ciudad en plena modernización en donde se presumía desarrollo, plenitud y riqueza, la película nos muestra a través de ellos lo trágico, injusto y desamparado que es su presente y futuro y como las condiciones y circunstancias los obligan a sobrevivir.
“Pedro” y “El jaibo”, nuestros dos personajes principales con condiciones muy similares, nos muestran el desarrollo e inevitable fin dentro de este patrón y circulo vicioso, por un lado, Pedro, carente de amor materno, ya que su nacimiento fue fruto de una violación y “el jaibo”, criado por un mundo despiadado, sin algún oportunidad o rehabilitación, siendo victimas los dos de condiciones externas que afectan su día a día.
Una crítica que hizo resonar nuestra sociedad en ese entonces, película que fue censurada por la crítica tan cruda a nuestra sociedad, catalogada por “la liga de la decencia” como una película no apta para gente decente, mostrándonos que, desde siempre, los temas de desigualdad social han sido muy incómodos para abordarse, censurados y perseguidos.
Hasta la fecha, la película sigue haciendo eco mostrando y evidenciando lo poco que hemos avanzado como sociedad, como lo político sigue dejando como olvidados a varios sectores de nuestra población, haciéndola ver como un clásico contemporáneo
Disponible en Amazon prime y Youtube.
Michelle Medina
Amante de la sociología del cine y de la comunicación, con estudios en la UNAM. @El_chico_de_los_chinos