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Lázaro Cárdenas
Hasta el momento se confirmó la muerte de un hombre y una persona que fue “levantada”
KANTUNILKÍN. - En relación a los hechos ocurridos el pasado viernes en la cabecera municipal, donde tuvo lugar un ataque armado, hasta el momento no se han reportado mayores avances por parte de las autoridades municipales en lass investigaciones. La Fiscalía no ha publicado en su página ofi cial ninguna declaración sobre esta ejecución y “levantón”, que ocurrieron a escasos metros de sus propias oficinas en la ciudad de Kantunilkín.
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Hasta la fecha, la única información confirmada es el fallecimiento de un hombre que conducía un vehículo MiniCooper , el cual fue encontrado abandonado frente a las instalaciones de la Escuela secundaria técnica Número 4. Además, se ha confi rmado el “levantón” de un hombre en el lugar.

Las investigaciones se encuentran bajo la responsabilidad de la Fiscalía, que está encargada de esclarecer este incidente cuyo motivo aún es desconocido. Llama la atención el hermetismo en torno a la información, agravado por el hecho de que los hechos ocurrieron en las cercanías de las oficinas de la dependencia en Kantunilkín.
En relación a los acontecimientos ocurridos la tarde del viernes en la cabecera de Lázaro Cárdenas, las autoridades policiales han mantenido un total silencio. Estos eventos, que se han registrado en menos de quince días, continúan siendo considerados como hechos aislados por las fuerzas de seguridad, lo cual ha generado inquietud en la ciudadanía, al haber perturbado su sensación de seguridad.
Horas después del ataque en el que fue ejecutado el conductor del Mini Cooper, dejando su vehículo abandonado frente a la Escuela Secundaria en la avenida Javier Rojo Gómez , las autoridades fi nalmente confi rmaron ofi cialmente la muerte de un hombre a consecuencia de múltiples impactos de bala.
Después de varios días, se ha confirmado que fue un hombre el que fue privado de su libertad, en lugar de las dos mujeres y un bebé mencionados por algunos testigos presenciales. Aún no se conocen detalles sobre la identidad de la víctima ni su procedencia antes de ser secuestrado.
Aparentemente, la calma ha regresado a Kantunilkín después del ataque armado del pasado viernes. Sin embargo, es innegable la preocupación de los padres de familia por la seguridad de sus hijos, especialmente en vista del próximo ciclo escolar. Con miles de estudiantes transitando por las calles en horarios de entrada y salida de clases, es crucial que las autoridades policiales del municipio tomen medidas para garantizar la seguridad y prevenir futuros incidentes.
La inquietud persiste entre los padres debido al temor de que sus hijos puedan estar en riesgo al asistir a clases o al regresar a sus hoga- res. Existe el temor de que puedan presenciar eventos violentos y ser objeto de agresiones para evitar que revelen información sobre los perpetradores, lo que pone en peligro la tranquilidad que Kantunilkin ha mantenido durante años.
(José Marcial Reyes)