Historia y Desastres en América Latina (Volumen I)
Los comisionados para colectar los donativos de los empleados municipales de la ciudad de San Luis Potosí fueron el tesorero municipal, Valente Viramontes, y su secretario, Urbano Flores.(46) La cantidad colectada tanto de la Tesorería Municipal como de la Secretaría del Ayuntamiento, que ascendió a $84.00, se envió a la Junta a principios de julio. Para recibir los donativos de los profesores de instrucción primaria particular y pública, la Junta nombró otras dos comisiones colectoras auxiliares. Austasio Guerrero, Narciso Armenta y Cayetano Cardona, fueron los encargados de obtener la participación de los profesores particulares y prometieron "desempeñar con la mayor diligencia" la tarea que se les encomendó, aunque la cantidad que remitieron al iniciar julio no correspondió a sus promesas, pues sólo llegó a $24.00. En cambio, los integrantes de la comisión de profesores de instrucción primaria pública (Juan Ramos, Juan Rentería y Herculano Cortés), no contestaron las misivas que se les enviaron, pero remitieron un sustancioso donativo de $358.00 a principios de noviembre. Una sexta comisión quedó integrada por Blas Escontria, Felipe Muriedas y Matías Hernández Soberón,(47) quienes se encargaron de reunir los donativos provenientes de los sectores comercial y agrícola. Como comerciantes, Felipe Muriedas y Matías Hernández Soberón, pudieron conseguir no sólo los donativos de otros importantes comerciantes, sino que los dueños de los establecimientos pequeños reunieran fondos entre sus empleados. De esta forma, la cantidad de $2,505.75 obtenida por esta comisión fue la más alta de las colectadas a través de este medio.(48) Tres comisiones más estuvieron encargadas de obtener donativos: de los maiceros, Jesús Bustamante y Antonio C. Sánchez; del área de profesiones, artes y oficios, Teófilo Porras, Luis Aguerre y el Dr. Alejo Monsiváis; y del ramo de fincas urbanas, Juan Bustamante, Enrique Schroeder y Antonio Espinosa y Cervantes. El monto total de los donativos reunidos por estas tres comisiones auxiliares ascendió a $461.46. También se nombró una comisión de señoras, integrada por Luisa M. viuda de Cabrera, Emilia Cabrera de Salas, Francisca Othón de Muriedas y Catalina O. viuda de Tovar.(49) Aunque la documentación nos permite saber que la primera no aceptó y la segunda envió una carta accediendo a formar parte de dicha comisión, no es posible establecer cuál fue la labor desempeñada por este comité. Quizá su participación haya tenido que ver, al igual que la comisión de señoritas organizada en Ríoverde antes reseñada, con la organización de espectáculos públicos tales como conciertos, funciones teatrales o corridas de toros, pero no hay documentación que lo confirme. Los donativos espontáneos La organización de espectáculos públicos por parte de algunos ciudadanos potosinos fue otra fuente de obtención de donativos. El 18 de junio, el "aplaudido diestro potosino" Pedro Nolasco Acosta, ofreció al gobernador de San Luis Potosí "dar una corrida de toros cuyo producto líquido sirva para socorrer a los que sufren". Con el fin de que la función tuviera "los mayores productos que posibles sean", el gobernador instruyó a la Junta para que se pusiera de acuerdo con dicho torero; la Junta, a su vez, comisionó a los señores Marcelino Muriel, Juan Gutiérrez Castillo y Francisco Hernández Red de Estudios Sociales en Prevención de Desastres en América Latina http://www.desenredando.org
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