¿Dónde está el límite en el proceso de creación?
Mutaciones, cambios y más cambios. Un largo proceso lleno de incertidumbre. Mutaciones que crean ciudad a partir de diferentes órdenes. Mutaciones que crean volúmenes de carácter pétreo, rocoso, orgánico, para albergar los 3 usos con mayor capacidad para hacer ciudad: una biblioteca, una sala de cine y un teatro, que se hacen evidentes por su forma, peso y materialidad. Una roca enterrada, una elevada y otra apoyada. Rocas que orbitan alrededor de un vacío de encuentro abierto, natural, cubierto por ese pequeño teatro que queda casi suspendido sobre un pequeño bosque urbano que se comparte con el Edificio Princesa, de Fernando Higueras, justo al lado. Un sistema flexible, adaptable, en el que esos usos de carácter más cultural se integran con programas de todo tipo bajo un tejido que tamiza la luz, creando ambientes.
Quizás proyectar sea eso, crear en la incertidumbre, agarrándose fuerte al proceso de trabajo, aglutinando lo mejor de cada propuesta anterior.