Decir la Historia

Decir la historia Producciones literarias de 5°3°

Los siguientes cuentos y poemas fueron escritos por estudiantes de 5°3° en la clase de Literatura, en el marco de un proyecto a partir del cual comparamos qué textos produce un/a historiador/a, un/a sociólogo/a y un/a escritor/a de literatura ante un hecho histórico-social. A lo largo del año se leyeron textos literarios de distintos géneros que dan cuenta de momentos particulares de la historia y, al finalizar, cada autor/a del curso eligió un suceso de la historia general y produjo una narración ficcional o un poema a partir de conocerlo e investigarlo.

Fabricio Insaurralde y Brian Ifrán Hecho histórico: Accidente nuclear Chernobyl. 26 de abril de 1986 El día 25 de abril de 1986 hice un viaje de turismo hacia Ucrania, la ciudad de Chernobyl. Me recibieron en una cabaña que era muy linda y cómoda. Me tomé una ducha y salí a conocer la ciudad.

A la tarde tuve la posibilidad de conocer la planta nuclear de Chernobyl. Los guías turísticos nos llevaron a dar un recorrido por la planta y nos explicaron e informaron cómo se manejaba y funcionaba la planta nuclear. Se veía segura, estable y confiable. Después que me fui de la planta, fui a cenar a un restaurante de la ciudad de Chernóbil llamado Desyatka Café , uno de los mejores de la ciudad. Era muy cómodo, lindo, económico y limpio. Terminé de cenar y me volví a la cabaña a dormir porque ya estaba cansado, pero me quedé mirando la televisión. Estaban pasando una película de terror.

Tipo 0.00 AM me había aburrido de ver la película y como a la 1:22 de la madrugada escuché una explosión. Salí a ver qué pasaba y me encontré con la gente corriendo, gente herida y toda la ciudad destruida por la explosión de la planta nuclear.

Entré en pánico y no sabía qué hacer o hacia dónde ir, lo primero que pensé fue escapar hacia mi país, pero no había ningún tipo de movilidad para llegar al aeropuerto.

Fui corriendo hasta el aeropuerto. En el camino me crucé a gente herida, casas destruidas, choques. Cuando llegué al aeropuerto todos los vuelos estaban cancelados por las alertas de radiaciones. Pasé la madrugada en el aeropuerto.

Cuando desperté ya había vuelos con normalidad. Saqué el pasaje para regresar a mi país. Abordé el avión y volví. Cuando llegué, mi familia me estaba esperando muy asustada por lo que habían visto en la tele que había pasado en Chernóbil.

No me sentía bien, estaba con dolores. Me llevaron al médico, que me hizo análisis y me detectaron que tenía radiaciones por el cuerpo. Podía vivir con las radiaciones en el cuerpo, pero en unos años me perjudicaría en mi salud.

Esta historia la cuento porque gracias a Dios salí vivo, aunque con síntomas de la radiación. Fue un momento que marcó mi vida.

Santiago Góngora y Mateo Poggio Hecho histórico: La caída del muro de Berlín.

Teníamos trece años cuando nos tuvimos que ir a Alemania por problemas acá en Argentina. Nuestros padres ya vivían allá, hacía menos de un año. Nos llegaron los pasajes y era el día de irnos. Al llegar al aeropuerto nos avisaron que había problemas con los aviones y que tendríamos que esperar al otro día para retomar nuestro vuelo.

Al llegar a Alemania, varios oficiales de la policía pasaron corriendo desesperadamente con sus armas en la mano. Llamamos a nuestros padres para ver qué estaba ocurriendo en la ciudad, y nos avisaron que había problemas políticas y que habían hecho un muro que dividía la ciudad de Berlín en dos partes.

Tomamos camino rumbo a la casa de nuestros padres cuando nos avisaron que la dirección en la que vivían estaba del otro lado del muro, y teníamos prohibido cruzar.

Nuestros padres se encontraban en Berlín Oriental, mientras que nosotros habíamos aterrizado en Berlín occidental, por cuestiones climáticas durante el vuelo.

En ese momento no se nos ocurrió otra cosa que llamarlos para avisarles todo.

Entre llantos y ruidos, le explicamos lo sucedido y nos comunicaron que a partir de ahora teníamos que mantenernos solos hasta que la situación política termine y hayan derrumbado el muro que nos separaba.

Comenzamos a caminar en busca de un hogar para poder dormir. Seguimos caminando y entre ruidos empezamos a escuchar gritos, llantos y murmullos de personas, pero no le dimos importancia por riesgo a que nos pase algo.

Después de unas largas horas de caminata, pudimos encontrar un refugio medio antiguo y abandonado. Después de muchos días sin comer ni beber nada, mi hermano y yo tuvimos que salir a buscar algún tipo de trabajo que nos diera algo de dinero para satisfacer nuestras necesidades.

Buscando trabajo entramos en un restaurante. Al vernos tan mal, el dueño nos ofreció lavar platos a cambio de comida y cinco euros de propina. Con mucho gusto aceptamos el trabajo.

Durante cinco años estuvimos trabajando en ese restaurante, viviendo de la comida que nos daban y ahorrando el dinero de las propinas. Con ese dinero ahorrado nos comprábamos ropa y zapatillas que compartíamos a diario.

Después de muchos años tuvimos que dejar el trabajo en el restaurante ya que éramos mayores de edad y podíamos vivir libremente en una casa normal.

Luego de unos meses informaron por la televisión y diarios que se venía un cambio de gobierno. Después de idas y vueltas, los manifestantes pedían el cambio de

gobierno inmediato y lo lograron. El 9 de diciembre de ese año, el nuevo gobierno empezó a destruir el muro. En las siguientes semanas informaron que el muro había sido derribado en su totalidad, y nuevamente se podía cruzar hacia el otro lado de la ciudad.

Fuimos en busca de nuestros papás y a las horas de buscarlos los encontramos en un parque en el centro de la ciudad. Después de encontrarlos fuimos a almorzar juntos, nos contaron toda su historia y finalmente nos llevaron a conocer nuestra nueva casa.

Paz Reynoso Hecho histórico: Guerra de las Malvinas

Una tarde de sol aunque ahí era todo lo contrario. Santiago que jamas pensó en encontrarse en este lugar y de esta manera,en Malvinas, planeaba cómo infiltrarse entre los ingleses.

Santiago estaba junto a su grupo y ya era de noche, otra noche helada sin poder tomar algo caliente. Estaban caminando hacia un lugar para turnarse a descansar. Era el turno de Santiago para vigilar. A lo lejos pero no muy lejos vio que había un grupo más o menos con la misma cantidad que el suyo. Supuso que era otra tropa pero no, eran los ingleses.

Despertó al capitán del grupo para idear un plan, que consistía en infiltrarse en el equipo enemigo.

Santiago logró infiltrarse, ya que estaba adentro (del grupo), ningún inglés sospechó nada, iba todo más que bien, hasta que se dio cuenta de que el grupo estaba por atacar a un soldado amigo de Santiago. Se puso nervioso y no sabía qué hacer ya que él tenía que actuar tal como ellos. El solo estaba ahí para obtener información y después debía volver. Comenzó a actuar raro y distinto, estaba asustado porque no sabía qué hacer y no era el momento de huir. Su comportamiento puso en evidencia y en duda a los ingleses, pero ellos no dijeron nada. Antes de que el grupo llegue a su compañero, Santiago pensaba en desviarlos, pero era un poco complicado.

Después de caminar un rato, Santiago no quería hablar mucho pero logró desviarlos diciéndoles que había visto un soldado.

Los ingleses fueron despacio hacia donde los guió Santiago. El estaba nervioso, tenía miedo de que se dieran cuenta y así fue, los ingleses lo descubrieron y avisaron a sus otras tropas

Nahuel Catini y Nelson Sueldo Hecho histórico: Holocausto judío Pit era un joven de diecinueve años con creencias judías que heredó de su familia. El 9 de diciembre de 1943, a las 5 PM Pit se encontraba caminando hacia el almacén que estaba muy cerca de su casa. A pocas cuadras de llegar, fue secuestrado por un grupo de militares nazis. En ese momento, era común que sucedieran situaciones como estas.

Lo que pasaba era muy simple: te agarraban entre tres o cuatro militares, te subían a una camioneta junto a otras personas. El destino era un campo de concentración más cercano.

En el caso de Pit, el más cercano era el campo de Chelmno, en Polonia, a poco más de media hora del lugar donde él se encontraba. Luego de unos golpes, lo subieron a la camioneta junto a dos personas. Iban en la parte de atrás. Pit los conocía de vista, pero no sabía su nombre ni nada de ellos. En pocos minutos habló con ellos. Uno se llamaba Harry y el otro Robert. Hicieron un plan de escape que consistía en patear la puerta de la camioneta al mismo tiempo y luego correr lo más rápido posible (tenían las manos atadas). Lo hicieron, pero no pudieron correr ni cuarenta metros antes de ser alcanzados. Al subirlos nuevamente a la camioneta les dijeron que al llegar al campo de Chelmno serían los primeros en morir.

Pit pensaba en toda su familia, en por qué el mundo era tan injusto, por qué justo a él lo agarraron. Pero ya no había forma de escapar.

La velocidad de la camioneta iba disminuyendo. Cada vez veían más militares. Pit de a poco iba aceptando que iba a hacer uno más de todos los muertos. Robert y Harry cada vez lloraban más fuerte, hasta que la camioneta frenó y ya todo lo que habían sido en su vida no importaba. Pit nunca imaginó morir tan joven y de manera tan cruel.

Habían llegado al campo de Chelmno. Sabían lo que les esperaba.

Juan Manuel de la Colina Hecho histórico: Caída de las torres gemelas Un día de mayo del 2001, el 20 para ser precisos, decidimos mi novia y yo empezar una nueva vida, empezar de cero. Había surgido una oportunidad, Brenda, mi novia, consiguió empleo en Nueva York, en un centro comercial muy importante, fue entonces cuando nos decidimos al cien por ciento. Días después tomamos el primer vuelo disponible.

Al llegar, notamos la enorme cantidad de gente que había, era increíble y un poco aterrador, aún así continuamos con nuestro camino y nos centramos en nuestra primera meta, encontrar un hogar. Finalmente conseguimos un departamento con tres ambientes, con buena iluminación y una gran vista desde el balcón. Era medio costoso pero gracias al empleo de Brenda podíamos mantenernos bastante bien, o al menos eso esperábamos.

Al cabo de unos días nos hicimos amigos de los vecinos de arriba, pero no salíamos mucho debido a los horarios que tenían. El trabajo de Brenda iba perfecto y sin problemas, tampoco existían problemas internos, bastante raro pero real.

Unos meses después, a finales de agosto, todo seguía en ordena excepción de Brenda, que continuaba asistiendo al trabajo a pesar de su condición, le aconsejé que no lo hiciera pero no escuchó, era tan terca y trabajadora como siempre; fue mejor no contradecirle ya que era de temer si se enojaba, además ella me mantenía así que…

Mientras tanto, decidí ir a buscar un trabajo de medio tiempo, sin importar cual. Era muy aburrido estar solo en la casa hasta tarde. Por suerte me aceptaron en un McDonald’s, no pagaban mucho y el jefe era una mierda, pero bueno, me era suficiente entretenimiento.

Más adelante, el 11 de septiembre, Brenda nuevamente asistió a su trabajo incluso estando a punto de reventar, y yo a mi pequeño puesto en McDonald’s.

Aproximadamente a las nueve y media de la mañana, recibo una llamada de Brenda, ‘ya es hora’, dijo. Debía ir a buscarla lo más rápido posible, en taxi, ya que no tenía ningún vehículo; así que sin decir nada e ignorando los gritos de mi jefe, salí corriendo en busca de un auto amarillo. No encontré ninguno disponible por lo que me senté a esperar. Fue entonces cuando me di cuenta de la gran felicidad que sentía, el solo pensar que iba a ser padre… Me inundaba el pecho de alegría, y ahí estaba yo, llorando en la calle a la espera de un taxi. Finalmente encuentro uno al cual me subo.

Estando por llegar, siendo casi las diez AM, nos quedamos parados en un amontonamiento, había mucha gente corriendo y muchos gritos. No entendía nada, por lo que le pago al conductor y me bajo del auto e inmediatamente llamo a Brenda por

celular para confirmar su ubicación pero no contestó. Al girar en la esquina lo pude ver, el edificio estaba en llamas, quedé paralizado por un momento, realmente no podía creerlo, no quería creerlo. Me encuentro llorando otra vez, y no por felicidad. Brenda seguía desaparecida y sin responder mis llamadas. Ese día, ese estúpido día, mi vida había acabado.

Martina González Hecho histórico: Hundimiento del Titanic La familia Schneider estaba compuesta por cuatro personas: el padre Oliver, madre Juliana, hermana mayor Lily y el hermano menor Timotheé. Salieron por Bretaña a navegar por primera vez en barco.

Ya en el barco, el padre y la madre fueron al bar a disfrutar de su viaje. 11:20 de la noche, mientras Lily y Timotheé dormían, Oliver y Juliana sintieron un golpe y salieron del bar para ver qué había pasado. Se dieron cuenta de que el barco había chocado con un iceberg. Escuchando que había riesgo de que el barco se diera vuelta, fueron corriendo a buscar a sus hijos. Lily escuchó muchos gritos. Saliendo de su cuarto vio a sus padres y Juliana le decía que fuera a despertar a Timotheé.

Cuando se juntaron los cuatro, intentaron escapar entre toda la gente enloquecida, que también intentaba irse. Salieron y vieron a personas yéndose en botes que bajaban hombres que trabajaban ahí. Oliver subió a Timotheé al bote y a Lily, mientras que Juliana bajó en otro bote. Sin haber lugar para Oliver y sin botes, él se quedó en el barco. Mientras que se inundaba, Juliana se dio cuenta y empezó a gritar su nombre. Oliver se despidió de ella y de sus hijos. El barco se hundió, los botes se juntaron y Juliana se reencontró con sus hijos, llorando por la muerte de su padre Oliver.

Tomás Sauer Momento histórico: prehistoria

Como de otra era Por fin desperté, tanto tiempo dormido junto a mis hermanos, tan cerca, casi juntitos, pero separados por un cascarón que nos mantiene con vida. Todo el tiempo escucho gritos fuertes y poderosos, pero me hacen sentir seguro, demasiado, para ser sincero.

Sé muy bien que mami es grande, y si ella está con nosotros nada malo nos va a pasar.

Me siento listo, inquieto e incómodo, ya no veo la hora de ver a mi familia, jugar con mis hermanos y aprender todo lo que pueda de mami, porque sé que un día voy a tener que hacer mi vida solo y nada ni nadie me va a defender.

Ya hace días que fui libre y me encanta, ya aprendí a caminar, a correr, a comer solito, e incluso a gritar como mamá. Obvio que no puedo hacerlo tan fuerte ya que soy chiquito, pero mami me dice que me sale muy bien y que en unos días nos va a enseñar cómo conseguir nuestra comida.

Hoy me levanté feliz y contento, va a ser la primera vez que pueda salir a buscar comida solito. Estoy nervioso, la verdad, pero creo que estoy listo. Anoche no pude dormir mucho, me quedé repasando todo lo que había aprendido de mami hace días.

Ahí está, lo veo, pero él a mí no, y mamá decía que eso era lo más importante… uno, dos y tres ¡AHORA!

Pasaron unos pocos días, ya me siento mejor, no me di cuenta de que él no estaba solo, estaba con su familia.

Mami me dijo que no me preocupe, que de los errores se aprende, y sí que aprendí, a las malas, pero estoy muy seguro de que estas cicatrices no me van a dejar olvidar.

Hace tanto tiempo que no veo a mis hermanos y a mi vieja que ya los empiezo a extrañar, pero era momento de sobrevivir por mi cuenta.

No sabía que iba a ser tan difícil estar solo. Tengo que estar todo el tiempo buscando a alguien que esté distraído para poder matarlo, pero justo ese es el problema, nadie se distrae en este lugar, nadie quiere morir.

Ya encontré el truco perfecto, aunque esto de tener brazos cortos complica todo, pero bueno, mis dientes lo compensan, de un mordisco le puedo arrancar la cabeza a casi cualquiera, por lo que no me preocupa tanto.

Ayer tuve que pelear por una pareja, mi oponente era más joven que yo e inexperto, así que usé eso a mi favor para lastimarlo lo más posible. Lo estaba por matar hasta que se rindió. Gracias a eso puedo decir que voy a ser papá por primera vez, se siente raro ya que no voy a ver nunca a mis hijos, pero de todas formas no me importa.

Todo el día cayeron piedras como lluvia, hace mucho calor y todos actúan raro, pero lo que más me preocupa es el sol, está mucho más grande y el cielo cada vez más rojo, el agua no está tranquila y es casi imposible encontrar comida, solo espero que esto termine pronto.

Ya no se puede estar, hace mucho calor y todos están muriendo, el sol enorme y la lluvia no para, hace días que no oscurece.

No aguanto más, me siento débil, se rumorea que el sol nos ataca y no sé qué pensar, solo espero que todo termine, que todo termine, que todo termine…

Por fin desperté, se me hizo tarde para ir a trabajar, me tengo que apurar porque hoy me traen un nuevo fósil, un T-REX para ser exactos. Hoy me toca examinar sus huesos para descubrir cómo fue su vida, siempre me toca este trabajo a mí, ya que por alguna razón soy bueno en esto.

Isabella Jubany Hecho histórico: Marcha por el aborto legal (2018)

Ojos verdes Ollas cayéndose al piso, el granizo fuerte golpeando sobre el techo de chapa.

Gritos, en la marcha.

La Marcha. Árboles con hojas nuevas de primavera, yerba recién puesta en el mate.

Pañuelos, Pañuelos Verdes.

Mis ojos verdes reflejan esperanza, Tomamos mate sentadas, en una plaza.

Camila Rodríguez Hecho: ley de Matrimonio Igualitario

15 de julio de 2010, estoy afuera del Congreso desde que el debate comenzó, a las 13:15 PM. El cansancio me está matando y el frío de la noche se hace sentir, pero sigo firme por todos los años que sufrí y luché para que llegara este momento. Rodeada

de miles de personas que pasaron por lo mismo que yo, o tal vez mucho peor, pero que siguen de pie haciendo sentir la fortaleza que el amor puede sacar.

Esperando el resultado la miro a ella, que se volvió mi compañera todo este tiempo y que nunca bajó los brazos conmigo. Como esa vez que en llanto me dijo lo mucho que me amaba después de haber aguantado comentarios asquerosos en plena luz del día, miradas de parte de señoras grandes y en algunos casos salidas donde no pudimos disfrutarnos como cualquier pareja en la calle.

Estuve días haciéndome la misma pregunta: ¿Qué hay de malo con nosotras?

Nada, no hay nada más que amor y puedo asegurar con mi vida que es el más puro.

Por la madrugada en el Congreso se dio el sí, el sí al amor, el sí a la igualdad, el sí a la felicidad sin importar género. Lloro a más no poder al abrazarla, sabiendo por fin que la espera y la lucha todos estos años no fue en vano.

La gente alrededor festeja, la noche está más hermosa que nunca y se sienten muchas emociones en este lugar. Por fin pudimos dar un paso más, nadie dice que la homofobia va a desaparecer pero sigo firme porque como siempre dije : queda poco para que el amor se apodere del mundo.

Celeste Conti Hecho histórico: Marcha por el aborto legal Revolución con mate Nacen atados de acelga Encuentros cada año con hermanas Me tomo un tren para ser ultravioleta Un canto de unión en el cual me siento especial El color me ayuda a pensar Con mis manos puedo calcar Doy abrazos como apretones Y otro anillo de matrimonio en el dedo anular.

Valentino Protto Hecho histórico: las torres gemelas El avión pasa por la ciudad Mientras la gente mira al cielo Y es captada la atención por El olor de la explosión El avión dibuja una raya por la ciudad Mientras la gente mira el infinito Y el olor del humo Intoxica a las personas La estructura de las torres Estaba llorando porque Ya las calles no podían Presenciar su belleza.

Tobías Roldán y Bautista Valentini Hecho histórico: El incendio de Notre Dame El día 13 de abril mi amigo y yo teníamos que partir hacia París. Llegó el día, nos levantamos a las 6 AM con mi a migo y fuimos al aeropuerto. El avión despegaba a las 10 AM. Cuando llegamos al aeropuerto hicimos los trámites del pasaje y nos fuimos hacia Francia.

Una vez que arribamos en París, llegamos al hotel y nos organizamos. Estábamos muy ansiosos por recorrer los lugares más emblemáticos de la ciudad. Luego de conocer la torre Eiffel fuimos al Moulin Rouge. Después de varias horas de recorrido, estábamos cansados y regresamos al hotel.

Al día siguiente nos levantamos a las 11 AM y fuimos a almorzar a un restaurante.

Más tarde se nos ocurrió ir a ver el partido de PSG vs Juventus. Luego del juego, muchas personas nos recomendaron ir a conocer la Catedral de Notre Dame. Nos tomamos un taxi hacia allí, se veía de lejos porque era muy grande. Una vez que llegamos a la Catedral compramos unos colgantes y llaveros que vendía un viejo en la calle. Luego de entrar y recorrerla, con mi amigo empezamos a sentir un olor a ceniza. Luego empezaron a sonar las alarmas de incendio y nosotros intentamos salir a la Catedral, pero las puertas estaban cerradas.

Nadie nos había visto y seguimos intentando escapar de allí. Hasta empezaron a caer partes incendiadas del techo. Comenzó a llenarse toda la catedral de humo y nos costaba respirar. Mi amigo se había desmayado y a mí me faltaba el aire. Cuando estaba a punto de desmayarme, escuché fuertes golpes en la puerta principal.

Derrumbaron la puerta por un arriete: eran unos rescatistas que estaban verificando si había personas dentro de la Catedral.

Después de ese momento nos despertamos en una ambulancia fuera de la Catedral.

Recuerdo que había muchas personas y medios de comunicación informando sobre el incendio. Después de varias horas los bomberos lograron apagar las terribles llamas.

Ese fue uno de los peores momentos de nuestras vidas.

Alejo Stock Hecho histórico Torres Gemelas La tragedia del 2001

Hoy es once de septiembre no es Un día como tantos En las pantallas nos muestran Imágenes del espanto.

Un hecho nada habitual Escalofriante impactante Nueva york es un infierno Jamás visto nunca antes.

La televisión como la Ciencia ficción no imaginaron jamás semejante conmoción.

Fueron las torres Las gemelas Las que cayeron cuando Un avión choco con Ellas Fue entrenado y financiado Por los Estados Unidos Quien hoy fuera su verdugo Ironías del destino.

Crían cuervos terroristas Luego se echan a dormir Y un día por la mañana se despiertan y a sufrir.

Ya no son invulnerables Todo el mundo lo advirtió La sangre que derramaron su rostro se posó.

Fueron miles de inocentes os que perdieron la vida y muchas otras personas que quedaron malheridas.

Muchas personas ayudaban Y colaboraban para Rescatar a las personas Golpeadas.

Agustina Soddu Hecho histórico: La inundación de La Plata

en

EL MIEDO Me rodean trapos de piso Personas ahogadas Sin luz En las calles El miedo Una cucaracha gigante y asquerosa No volver a ver a mi familia Nunca más.

Agustin D’Amico Hecho histórico: Primera guerra mundial

FRESCAS TUMBAS Por los campos luchadores Se extienden los heridos.

Las heridas mas profundas Son las de sangre.

Que van para esas Tumbas relajantes y Ventiladas.

La sociedad toma Estrategias para que Duelan menos, Como si quisieran Salar las heridas.

Pilar Ferreira y Tomás Cognetti Persona de la Historia: Eva Perón

Símbolo de presencia e irreverencia En todos sus estados defensora de Derechos. Árbol floreciendo en primavera.

Dibuja sonrisas en gente desesperanzada Valentía de león Tsunami arrasador Como gigantes en el bosque Haciendo temblar el suelo

Azul Kornisuik Hecho histórico: accidente nuclear en Chernobyl Habían pasado doce horas de alerta y no sucedía nada. Recién dos horas después se concretó la primera reunión con los dueños de la planta nuclear y tres bioquímicos, aparte de mí. Aunque solo fue informativa y nadie sabía más que otro, fue un avance. El tema a tratar era cómo funcionaba la planta y cuáles podrían haber sido las causas de lo sucedido.

Luego de setenta y dos horas seguíamos sin estar informados del hecho. Lo que más me preocupaba eran las medidas de emergencia tomadas hacia la ciudad. Nos ocultaban no solo el hecho sino su gravedad.

Ya a las noventa horas fuimos informados, solo los profesionales, de lo que pasó ese 26 de abril en la planta nuclear.

A causa de un problema en la sala de controles se sobrecalentó el núcleo y explotó, liberando así quién sabe cuántos tóxicos perjudiciales para la salud. Ni bien nos enteramos procedimos con el protocolo, todos los científicos involucrados.

Ni bien nos enteramos procedimos con el protocolo todos los científicos involucrados. Nuestro único “deber” era evitar que esos gases tóxicos sigan esparciéndose.

Más allá de eso también me pareció necesario insistir en cuanto a la evacuación de los ciudadanos, y como no me prestaban atención me encargué yo sin el permiso del Estado ni nadie.

Pude lograr evacuar a tiempo y que todo ese procedimiento haya salido bien, pero a consecuencia de haber hecho todo esto sin estar avalado por alguien importante. Años después fui sometido a juicio por decidir lo que no podía: no solo ayudé a la reparación

del núcleo sino que salvé millones de personas. La sentencia final fue clara: el resto de mi vida preso por violar las leyes de este país.

Macarena Rodríguez Hecho histórico: Marcha del Orgullo LGTB Me levanté exhausta. Ya estaba cansada de tantos parciales. Fui a la cocina, mi mamá me estaba preparando mi desayuno, unos omelettes que tanto me gustan.

Desayunamos juntas, yo le quería contar que mañana sería la marcha del Orgullo y que iba a ir con Nahir, Tiago y Francisco. Pero lo que ella no sabía era que Nahir era mi novia y no solo una amiga, y si le contaba lo que iba a hacer era capaz de hacerme un exorcismo.

De repente ella me dijo: -Amparo, viste que mañana hay una marcha de esa gente enferma-.Yo le digo que no son personas enfermas y me levanto de la mesa con ganas de decirle lo que soy, pero la miro y me voy a mi cuarto a cambiarme, ya que llegaba tarde a la facultad.

Llegué a la facultad diciéndome a mí misma: “Dale, Amparo, dale que ya es viernes”.

Entregué un trabajo y me fui a la plaza a una cuadra de la facultad. Ahí me esperaba mi novia, mi mejor amigo Tiago y su novio. Llegué y abracé a mi novia y saludé a mis amigos. Estábamos felicies de que al día siguiente sería la marcha. Fuimos a la casa de Francisco, el novio de Tiago. Teníamos banderas y carteles, nos encantaba hablar sobre qué nos pondríamos ese día.

Se atardecía, así que llamé a mi mamá para avisarle que ese día no iba a volver y que el sábado tampoco.

Dormimos poco y nada.

Ya era sábado 7 AM. Empezamos a arreglarnos. Con Nahir nos llenamos de glitter. Agarramos nuestras cosas y nos fuimos.

Decidimos ir en tren, sabiendo que esa no era la mejor opción. Esperamos el tren, por suerte nos encontramos con más personas que irían a la marcha. Con Nahir no podíamos creer que con tantas horas despiertas no tengamos ni un poco de sueño.

Subimos al tren, ya no dábamos más de la ansiedad por llegar. Ibamos con un grupo de amigos, donde conocimos a Manuel y Martín, que era una pareja de 70 años. Íbamos hablando con ellos, intercambiando historias y anécdotas.

Todo iba bien hasta que un hombre borracho se nos acercó, sucio, con una camisa de boca y unos pantalones que se le caían. Tenía en su mano un “Fernandito”. Comenzó a decirle “puto”, “merecen morir” y otras cosas más que intentaba no escuchar. Trataba con Nahir de distraer a Tiago y Francisco. Tuvimos la mala suerte de que en ese vagón estábamos nosotros, una vieja que se pasó de gira, una familia y el borracho. De pronto el borracho se fue, cansado de jablar y que nadie le haga caso. Seguimos hablando y tomando unos mates, ya íbamos por la mitad del camino. De pronto escuché que dos personas gritaban, miré para atrás y venía el hombre borracho con otro hombre más.

Este último lucía flaco, alto, con barba, y tenía una botella de cerveza en su mano. Se les acerca a Tiago y su novio, yo presentía que algo iba a pasar.

El borracho flaco y alto tenía una navaja en su cintura. Sin decir nada fue directo a francisco y le dio cinco puñaladas, mientras el otro borracho decía “Dale, matalo, matalo. Matalo a ese puto”. Nahir y yo nos quedamos en shock, no entendíamos qué estaba pasando. Tiago intentó defenderlo, pero la furia del borracho era demasiado.

Justo venía una parada y los dos borrachos salieron inmediatamente del tren, y se fueron corriendo dejando a Francisco tirado en el piso, sangrando. Nahir salió del tren gritando por ayuda. Yo me quedé con Francisco, no podía creer lo que había pasado.

Empecé a llorar y decir “¿por qué?” Vinieron personas y llamaron a la ambulancia. Pero Francisco ya había perdido la vida por una puñalada al corazón.

Renata Arce Hecho histórico: Guerra de Malvinas Mi familia me está acompañando para irme. Llegamos a la estación de trenes y estaba lleno de hombres, muchos jóvenes. Temblando con la expectativa de un lugar desconocido, sabiendo solo su nombre, la cabeza ya no me deja pensar de los nervios.

Mis dos hijos lloran y todo se torna muy difícil. Nos despedimos con mi esposa y los nenes. Llega el tren y es hora de partir, va a ser un largo viaje. Horas y horas para llegar a la isla. Lo único que me quedaba por pensar era si mi vida seguiría.

Llegamos, era el 2 de abril. Con el ejército desembarcamos más precisamente en la Isla Soledad.

Igualmente cada tanto vamos cambiando de lugar. Así es como empieza todo. Sentimos una explosión y no estamos preparados. La mayoría nunca había agarrado un arma en su vida, incluyéndome.

Pasan los días y todo es más difícil. Muchos compañeros están muriendo. Luego de una cantidad de días impensados los británicos nos invaden el territorio y ya no hay marcha atrás con esta situación.

Mauricio Sena Hecho histórico: Inundación de La Plata

Una tarde de abril, yo en mi departamento de Capital Federal estaba pelando papas para hacer pastel de papas, que era mi comida preferida. De fondo sonaba la TV para que no hubiera tanto silencio en la casa. De pronto en el noticiero vi que pasó una inundación en la ciudad de La Plata, donde vivía mi mamá. Atiné a llamarla urgente pero ella no atendió y yo me preocupaba más, así que agarré el auto en medio de la tormenta.

Mientras, vi que no tenía nafta, fui a cargar y me dirigí a la Plata. Tres cuadras antes de llegar, noté que había mucha agua y que la lluvia era interminable.

Yo intentaba caminar y no podía, cada vez había más agua.

Me agarré fuerte de una garita mientras veía a la gente desesperada por llegar a su casa. Yo llamaba a mi mamá, pero como no había señal era imposible, así que gritaba pidiendo ayuda. Estuve ahí hasta que paró de llover. Fui nadando hasta la casa de mi abuela y veía a la gente desesperada, sacando el agua con tachos, algunos llorando. Una cuadra antes vi a una persona casi ahogada. Yo fui rápido a su casa para reanimarla, ya que los teléfonos no funcionaban. Vi que revivió, así que le pregunté qué pasó. Ella me dijo que habían salido a buscar a su perro porque estaba afuera y fue cuando vino la tormenta fuerte. Por suerte mi abuelo está bien.