Guia para un turismo responsable y solidario

Yo quiero ser un turista responsable y vos?

Pastoral del Turismo Argentina

En tus vacaciones, aprendé a darle un descanso al planeta, para luego cuidarlo también durante el año; en tus vacaciones aprendé a compartir con otras culturas para luego compartir con quien pasa a tu lado cada día.

«Les deseo a ustedes, que están ya de vacaciones, que aprovechen el verano para realizar experiencias humanas y espirituales formativas»

Beato Juan Pablo II

En esta breve presentación queremos entregar algunas nociones básicas del turismo solidario y responsable, y algunas acciones concretas que podemos realizar como turistas.

Según la Declaración de Ciudad del Cabo sobre Turismo Responsable en los lugares de destino, el turismo responsable consiste en “crear mejores lugares para vivir y mejores lugares para visitar”. Supone el compromiso de respetar los lugares que visitamos como turistas y la importancia de poner en primer lugar los intereses de sus comunidades y su entorno natural y cultural.

"El turismo responsable protege y mejora las oportunidades de futuro".

QUE ES EL TURISMO SOLIDARIO, RESPONSABLE...?

Algunas definiciones nos presentan al turismo solidario como un tipo o una clasificación del turismo, pero nosotros preferimos presentarlo como debería ser, o como esperamos que pronto sea, por la concientización que vamos asumiendo los turistas, comunidades locales, agentes de turismo, en sus varias formas.

El turismo solidario, pero también justo, responsable, sostenible, ético...se caracteriza por una mayor interrelación entre las dos comunidades implicadas: la local y los visitantes o viajeros.

Combina el descanso con la acción responsable en el destino elegido. Esta actividad requiere el compromiso y participación del turista en los proyectos de cooperación y desarrollo de las comunidades desprotegidas.

Se trata de una distribución más equitativa de los recursos generados. De hecho, los beneficios del turismo deberían volver a los pueblos de los territorios de acogida, se trata de una herramienta para el desarrollo, la lucha contra la pobreza y así frenar el éxodo rural.

El turista, inmerso en la vida cotidiana de las comunidades locales, se asocia con su desarrollo, es una nueva forma de viajar y salir enriquecido.

Y más allá del dinero que puede dejar esta alternativa en las diferentes comunidades, se entabla una relación de compromiso que perdura en el tiempo. Una nueva dimensión en el mundo del turismo que promueve una forma de viaje que colabora con el desarrollo de las personas que viven en estos lugares tan remotos.

Viajes donde no sólo vas a disfrutar, sino también a hacer el bien a los demás, aportando cada uno su conocimiento, experiencia y trabajo en un área determinada. Así, tanto el que recibe esta mano de obra desinteresada como el viajero que acude a transmitir su saber ganan con la experiencia. Y lo mejor es que

se descubre un disfrute diferente y hermoso, volvemos con una plenitud y un mayor crecimiento.

Lo más importante es la “

contribución a la comprensión y al respeto mutuo entre las sociedades”, convirtiéndose, por tanto, en “una actividad beneficiosa para el país y las comunidades locales” (Revista de la OMT, Turismo y reducción de la pobreza). También la población local se enriquece con el intercambio cultural que trae consigo el visitante.

En nuestro país, los primeros pasos de turismo solidario se dieron en el año 2000, asumiendo el compromiso de caminar dentro de los lineamientos mundiales propuestos por los organismos internacionalesi, en los que se conceptualizó como respuesta concreta a la necesidad de un "turismo sostenible global". La propuesta quiere ser un aporte a un escenario turístico en el que la demanda apunta a un turismo cualitativo y no tanto al cuantitativo “sol y playa”. Las pautas fundamentales tienen que ver con la creación de programas que incluyan a

el diseño de nuevas rutas de viaje a partir del concepto del “encuentro que se vuelve diálogo”. También apuesta a la generación de conciencia de los graves e irremediables en las comunidades locales como prestadoras de servicios turísticos y

impactos negativos que produce la actividad turística y a la inclusión de zonas o regiones aún no desarrolladas en el mercado por problemas de accesibilidad o de infraestructura.

No se trata solo de elegir un lugar, sino sobretodo en las actitudes que tomemos como turistas, sin duda será un aprendizaje que nos enriquecerá, nos hará descansar de un modo diverso, nos hará descubrir aún más la importancia de las relaciones con otras personas, los cuidados que tenemos que tener hacia el lugar, la naturaleza, etc. y lo más importante es que será un aprendizaje que luego podremos seguir practicando en nuestro diario vivir.

Es bueno adquirir una buena guía y / o información de viajeros veteranos que incluya un resumen de historia, cultura, legislación y situación actual del país. Te ayudará a entender el idiosincràssia de cada pueblo y evitarás malentendidos. Es recomendable que incluya frases o fórmulas sencillas en los idiomas locales.

Aceptá la diversidad cultural de los estados. Son un patrimonio de toda la humanidad. Tené en cuenta que los aspectos folclóricos de algunas naciones oprimidas o indígenas pueden ser explotadas como atracción turística sin ganancias para estas comunidades.

Apostá por vacaciones solidarias. Contactá a alguna de las ONG que organizan este tipo de viajes o estando ya en el lugar fijate si puedes contactarte con alguna, a veces bastan pequeños

pasos, pero que unidos a los de otros hacen un camino.

En definitiva se trata sobretodo de generar una nueva

cultura, la del dar y recibir.

Cómo ser turistas solidarios y responsables?

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Antes de emprender el viaje: Debes tener presente que, cuando decidís viajar en avión a tu destino de vacaciones, estás contribuyendo a una emisión significativa de CO2, lo que intensifica los efectos del cambio climático.

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Por eso... intentá elegir destinos más cercanos o a los que se pueda acceder por otro medio de transporte con menor impacto ambiental.

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Intentá utilizar los medios de transporte público locales.

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Si estás viajando en coche, apaga el motor cuando estés detenido o en un embotellamiento. No sólo ahorrarás combustible, sino que contribuirás a la reducción de emisiones.

• Tratá de elegir hoteles que sean ambientalmente amigables y que muestren una actitud responsable con la comunidad local.

• Viajá a lugares menos “famosos” por los turistas.

• Buscá opciones que promuevan el ecoturismo. Muchas compañías de viajes ofertan vacaciones que fomentan el desarrollo sostenible, no impactan de forma negativa en el medio ambiente y potencian el desarrollo económico de las comunidades locales.

• Turismo solidario, también algunas empresas están asociados con algunas comunidades locales, y podés participar en actividades de la comunidad, o prestar tus serivicios y conocimientos.

Dónde alojarse?

• Intentá hospedarte en hoteles

que tengan implementados sistemas de reciclaje de residuos y, en lo posible, que utilicen fuentes de energía renovables como la solar o eólica.

• Muchos hoteles también implementan el ahorro de agua, ofreciendo cambiar sábanas y toallas día por medio.

• Intentá usar menos el ascensor y más la escalera.

• Respetá al personal que te atiende, y sé agradecido, pensá que mientras vos descanśas, ellos hacen todo lo posible para que así sea, y están trabajando.

• No le des vacaciones a los buenos modales y las sonrisas amables.

El turista responsable y la naturaleza:

• Disfrutá de la naturaleza pero no persigas ni toques a los animales.

• Dejá todo como lo encontraste, no remuevas nada que pueda ser parte del equilibrio natural como piedras o plantas.

• Mantenete en los senderos, los senderos están diseñados para disminuir la erosión causada por el transito de los visitantes.

• Fomentá un comportamiento responsable por parte de su familia y otros.

• Reportá los daños ambientales a las autoridades.

• Participá en actividades de conservación local.

• Respetá el entorno. No arranques ningún tipo de vegetación, no alimentes a los animales ni viertas residuos.

• Nunca hagas fuego en el campo sólo en los sitios preparados para ello, y nunca en días con viento. La vegetación, sobre todo en verano, se convierte en material muy inflamable.

• Llevá bolsas de basura para tus desperdicios y

depositlos en las papeleras y los contenedores habilitados para ello. ¡Esto incluye las colillas de cigarrillo, por pequeñas que sean tardan años en degradarse.

• No derroches agua. Duchate en vez de bañarte Controla el consumo energético, tanto con el aire acondicionado como con el agua caliente. Cerra bien todos los grifos y apaga todas las luces y electrodomésticos cuando salgas • Limitá el uso de detergentes.

• No viertas aceites ni sustancias contaminantes en el mar o en el agua del río.

• Alquilá una bicicleta para hacer turismo.

No sólo estarás contribuyendo al medio ambiente, sino que es una forma fantástica de explorar una zona.

• Realiza excursiones a pie. Es una forma de descubrir sitios y personas que jamás encontrarías si hicieras el recorrido en coche.

• Si consumís productos naturales de la zona, además de disfrutar de la auténtica gastronomía local, contribuís a las economías familiares y a la supervivencia de un auténtico turismo rural con un uso del suelo compatible con la conservación del medio ambiente. Elejí regalos entre la artesanía local.

• Visita zonas naturales protegidas y reservas.

• Mantené las distancias con la fauna para no interferir en sus hábitos.

La riqueza más grande de un lugar: su gente y su cultura.

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Sé amable, paciente y disfruta intensamente del viaje. No dudes en solicitar información o ayuda si necesitás Aprendé algo de la lengua y códigos culturales (para entendernos mejor), pero también de los problemas sociales y políticos.

Pedí permiso para hacer fotografías a gente. Si no dominás el idioma, una sonrisa y la voluntad de entenderse puede ser suficiente.

Conversá más con la gente local y aprender a ser tolerantes con sus opiniones y costumbres.

Realizá actividades que eduquen medioambientalmente Las vacaciones son una buena oportunidad para educar a los hijos en el respeto hacia la naturaleza, las personas y los pueblos.

Optá por actividades de escaso impacto en el entorno. Y no olvides el turismo cultural.

Minimizá el equipaje (más ahorro, menos CO2, menos preocupaciones) Usá pilas recargables Vestite y comportate respetuosamente, especialmente en sitios religiosos y áreas culturales.

Deshácete de la basura cuidadosamente, recicla cuanto sea posible, re-utilizá botellas y decí no a las bolsas plásticas.

Usá la energía y el agua responsablemente.

Tomá en cuenta la contaminación auditiva La explotación sexual es una aberración cruel con consecuencias irreversibles. Tené una actitud firme en contra.

Recordá que sos un invitado – no hagas nada que no harías en casa.

Y por último, no olvidemos que los viajes son una buena oportunidad de estrechar lazos familiares o de pareja.

Antes de volver a casa

• No compres souvenirs hechos con restos de seres vivos.

Además de afectar a especies en peligro de extinción te expones a fuertes multas en la aduana al regresar a casa.

• Apoyá las empresas locales, comprá productos, arte y manualidades locales.

• Buscá alguna ong o capilla cercana y doná lo que te sobró (un sachet de leche, pan, fruta...)

Juan Pablo II habló de los aspectos sociales de las vacaciones en su mensaje del año 2004 por el Día Mundial del Turismo, se refirió a las posibilidades que tiene el turismo para mejorar las relaciones entre las personas. Esto se logra, observaba, cuando esta relación «es cordial, respetuosa y solidaria» (No. 1). Cuando se logran estas condiciones es «como una puerta abierta a la paz y la convivencia».

Algunos verbos que son importantes practicar EMPATIZA con el entorno, es decir, puede ponerse en la situación de las personas (o incluso animales) con los que se relaciona y comprender mejor sus reacciones ante su presencia.

APRENDE de lo que ve para poder adaptarse al nuevo entorno.

Viajar es la mejor experiencia de aprendizaje IMPACTA POSITIVAMENTE en el entorno con su presencia, favoreciendo el comercio justo y el enriquecimiento local, al tiempo que reduce al máximo su huella ecológica y cultural.

RESPETA las costumbres locales en el modo de vestir y comportarse públicamente.

DEMUESTRA PACIENCIA Y COMPRENSIÓN ante situaciones que le resultan extrañas o absurdas según sus estándares.

RECONOCE LA IMPORTANCIA DE LA DIGNIDAD de ambas partes, locales y extranjeros.

AHORRA RECURSOS usando los medios menos contaminantes y escogiendo rutas razonables en términos de distancias y tiempos.

AYUDA a proteger los ecosistemas naturales, respetando la fauna y la flora local, y no contaminando.

EDUCA y enseña también, especialmente a los niños, a que el viajero no es un regalo andante.

Cultura: Viajar para desconectar, pero también para conectar y siempre respetando la dignidad de las personas

Cuando hayas emprendido el viaje del turismo responsable y solidario, serán las vacaciones soñadas, porque no se vuelve atrás. ¡Buen Viaje!

Fuentes: www.corcovadofoundation.net/espanol www.vidasilvestre.org.ar www.wwf.es http://www.aktuaya.org/ http://www.blogturistico.com/ http://ecoaventurapuebla.blogspot.com.ar http://www.turismo-solidario.es http://espaciosustentable.com http://www.portalcomunicacion.com http://www.turismo-sostenible.org http://turismo-sostenible.net http://www.zenit.org/article-20991?l=spanish Lic. Paula Renata Gonzalez, Presentación del Turismo solidario Lic. Bettina Gonzalez “La empresa comprometida en el turismo solidario y sustentable.

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