¿PORQUÉ LA Nº 6? En este mismo blog hemos leído un articulo de Iniciativa, en el que entre otras afirmaciones decía que… “el Sr. Alcalde casi nunca está en Chiva y siempre deja de alcaldesa a una concejal que no es el nº 2, ni el nº 3 de la lista presentada a las elecciones”. Esta concejal es, Amparo Lapuente, la nº 6 en la lista del PP. A partir de esta noticia, un grupo de ciudadanos de Chiva (de los que pagamos tributos, últimamente muy altos, por cierto) empezamos a debatir los motivos de esta actitud del Sr. Haro, y estas, podrían ser algunas de las conclusiones que hemos sacado. Por cierto, tan válidas o erróneas como cualquier otras. Es la consecuencia de tanto ocio y tiempo libre, y debido seguramente, a la falta de otra mejor ocupación. Si el Sr. Haro, deja de alcaldesa siempre a la misma concejal, es ¿por qué los demás concejales que están delante de ella en la lista, no valen? O ¿es por qué esta persona es la más capacitada de todos los de la lista? Vamos a centrarnos en la primera cuestión. Si los concejales que continuaban en la candidatura al Sr. Haro no valen, o no despiertan la confianza de este, para dejarlos en su puesto cuando él no está ¿por qué los puso en su lista y los presentó al pueblo para gestionar el Ayuntamiento de Chiva? Salvo, que lo pretendiera fuera, rodearse de gente con poca capacidad para que nadie destacara más que él. Pero si no despiertan su confianza ¿por qué busca a gente, que ni siquiera estaba afiliada a su partido, que no tienen ninguna experiencia política, ni de gestión, y los coloca en los primeros puestos de la lista? Su nº 2, el “brillante” concejal de urbanismo, no despierta la confianza del Sr. Alcalde para sustituirle, ni para ser el primer teniente de alcalde, pero a pesar de su nula experiencia en la política, le ofrece la posibilidad de “desarrollar” el PGOU (bueno, o lo que quede que no haya negociado el Sr. Haro), con las reservas que debería despertar alguien que en su vida privada es constructor. No se entiende esta contradicción, a menos, que el verdadero objetivo del “avispado” Sr. Alcalde sea tenerlo en medio de convidado de piedra, haciéndole creer que manda, cuando en realidad no puede ni aprobar una simple licencia de obras (la firma no está delegada), y haya sido utilizado para atraer cierto sector del voto progresista y de determinada Asociación local. Vamos, como vulgarmente se dice, el típico “tonto útil”. Por su parte, parece ser que el Sr. Casanova tampoco le ofrecía mucha confianza como sustituto suyo en la alcaldía, no sea que se acomode y le guste, o le haga sombra y le quite la ración diaria de protagonismo que Haro necesita para alimentar su ego. De las otras dos concejales, Concepción Ortiz y Cristina Martínez, nada nuevo que contar. Su capacidad de gestión y resolución de problemas, la hemos comprobado (o sufrido mejor dicho) en estos últimos años. Por ser benevolentes diremos que es “gris” Toda su preocupación al iniciarse la legislatura era, que iban a cobrar y tener dedicación exclusiva, pues Amparo Lapuente iba a estar liberada. Más aún si una de ellas, no tiene trabajo y depende de este sueldo, y la otra esta pendiente de elevar la cotización a la
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