El propósito del propósito
La palabra propósito y conceptos como los valores y fortalezas siempre me habían parecido como términos vacíos que los líderes y las empresas usaban para cumplir con una expectativa que la sociedad tiene. Pero con el tiempo descubrí que el propósito tiene un propósito. Una definición que me encanta es la que Keith Yamashita y Sandra Spataro proponen en su libro Unstuck: "El propósito nos da la claridad para actuar y la fortaleza para superar los obstáculos que enfrentaremos en el camino".
Cuando analizamos las misiones de la mayoría de las empresas, son al mismo tiempo extremadamente vagas y ridículamente específicas. Parece una contradicción, pero la típica misión expresa ideas como las siguientes:
“Nuestra misión es ofrecer productos o servicios en la industria X o Y, para atender las necesidades de nuestros clientes, las expectativas de nuestros accionistas y tener un impacto positivo en la sociedad.”
Esto y nada son lo mismo. Por un lado, es vaga porque solo expresa que su propósito es ser los mejores y, por otro lado, es demasiado específica ya que nos limita a la venta de un tipo de producto o servicio.
La realidad es que tanto los líderes como las empresas existimos para resolver problemas y, dependiendo del tipo de cliente en el que nos enfoquemos, de lo que valoramos y en lo que somos fuertes, escogemos resolver un problema muy específico. Cuando nuestro propósito se centra en el problema en lugar de en la empresa, está verdaderamente centrado en el cliente y nos permite enfocar nuestros recursos para ser más eficientes y tener mayor impacto. Por otro lado, nos libera de una categoría específica de productos y servicios y nos permite explorar múltiples avenidas para encontrar la mejor forma en ese momento de atender ese problema.
En mi experiencia como consultor de empresas en todo tipo de industrias en Norte, Centro y Sur América, los líderes y los emprendedores tendemos a diluir nuestro tiempo, dinero y esfuerzo porque no tenemos claridad de propósito. Cuando no sabemos cuál es nuestra razón de existir, no sabemos cuáles son las oportunidades correctas, ni tampoco sabemos en qué variables debemos enfocarnos y terminamos siendo dispersos y poco eficientes, y por lo tanto, diluyendo nuestro impacto.
En este libro te brindamos la inspiración, los ejemplos y las herramientas necesarias para que puedas reflexionar acerca de cuáles son tus prioridades en la vida, cuáles son tus fortalezas, qué tipo de problemas quieres resolver y cómo puedes unir todas estas ideas en una declaración de propósito que guíe todas tus decisiones y te ayude a vivir una vida más significativa.
Este libro es parte de nuestro curso "El poder del propósito", que desarrollamos de la mano de Raphael Vuitton, un amigo y colega que es un consultor experto en temas de liderazgo y desarrollo organizacional.
Michael Garcia Novak Founder Infinite Institute
Contenido
P06 El origen de tu fuerza
P10 Un modelo para una vida congruente
P16 Calcetines con propósito
P20 Los costos ocultos de la ambigüedad
P26 Vistudes de la vida
P32 Identifica tus valores fundamentales
P48 No seas un Motley Crew
P54 Valores en movimiento
P58 Principios rectores
P68 Las batallas equivocadas
P72 El secreto de tu éxito
P76 Declaración de propósito
El origen de tu fuerza
¿Estás cansado de vivir corriendo en piloto automático? ¿Qué te parecería, en cambio, vivir una vida vibrante y llena de significado? Una vida en la que cada esfuerzo que realizas diariamente alimenta tu alma, dejándote más energizado que exhausto. Imagina vivir de manera que cada paso que das, cada desafío que enfrentas, en lugar de desgastarte, te haga sentir más vivo. Es como poseer un superpoder. Y no, no se trata de tomar una píldora mágica o una bebida energética, sino de descubrir aquello que realmente te mueve y dejar que eso sea tu motor. Este tipo de energía es inagotable porque nace de tu interior, otorgándote la claridad para decir ‘sí’ a lo que realmente importa y ‘no’ a lo demás, con tranquilidad y convicción.
Reflexiona un momento: a lo largo de la historia, la humanidad ha perseguido incansablemente el significado de la vida. Pensemos en Viktor Frankl, un hombre que, inspirado por sus vivencias en la Segunda Guerra Mundial, nos enseñó a encontrar significado incluso en las adversidades más extremas. Su método, la logoterapia, va más allá de un simple deseo: nos revela que tener un propósito es fundamental para nuestra resiliencia y motivación. Frankl nos abrió los ojos al poder transformador de tener un propósito claro.
Avancemos a los años 60 y 70 con George Leonard, un pionero en el movimiento del potencial humano. Aquella época marcó un despertar en la exploración del autoconocimiento y el crecimiento personal. Sin embargo, la mentalidad predominante era que primero debías trabajar duro y solo después buscar tu propósito, una vez establecido económicamente. La idea de vivir una vida orientada al propósito desde el inicio no era común.
Hoy en día, pensadores como Simon Sinek y Fred Kofman están revolucionando nuestra comprensión de la motivación y el cerebro. Resulta que cuando nuestras acciones están en sintonía con nuestros valores y propósitos más profundos, nuestro cerebro nos premia con una dosis de dopamina. Es como si nuestra biología nos impulsara a perseguir nuestras metas. Aún estamos descifrando los misterios de nuestra mente, pero lo importante es simplificar este conocimiento para que todos puedan aplicarlo.
Y aquí viene lo emocionante: descubrimientos recientes en neuroplasticidad demuestran que nuestros cerebros son extraordinariamente adaptables, sin importar nuestra edad. Esto significa que nunca es tarde para empezar a vivir con un propósito. Figuras como Simon Sinek y Brené Brown están liderando el camino con sus ideas sobre el propósito en la vida y el trabajo. Nuestro desafío es desarrollar un enfoque que sea fácil de entender y aplicar.
Considera esto: estamos viviendo más años que nunca. Sin un propósito claro, esta longevidad podría reducirse a una mera existencia. En un mundo que enfrenta desafíos como los avances tecnológicos y problemas globales, un fuerte sentido del propósito se vuelve crucial. Esto no solo es beneficioso a nivel personal, sino también esencial para nuestros equipos y líderes futuros. Se trata de enriquecer nuestra vida, no solo de prolongarla.
Entonces, ¿estás listo/a para embarcarte en este viaje? ¿Preparado/a para descubrir la chispa que alumbra tu camino y el de quienes te rodean? ¡Hagámoslo juntos!
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