veterinario y les dijo que si le daban una pastilla al día podía durar muchos años. Desde ese día la niña comprendió que su querido Ton era el mejor amigo que había tenido y ahora le tocaba a ella cuidarle y acompañarle a su amigo Ton. Desde ese momento se hicieron inseparables, a todos los sitios iban juntos y nunca se separaron.
Amanda B. A.