IN MEMORIAM Maestra Olga Escobar Torija
Por Hern谩n Le贸n Velasco
“No leemos y escribimos poesía porque es bonita. Leemos y escribimos poesía porque pertenecemos a la raza humana; y la raza humana está llena de pasión. La medicina, el derecho, el comercio, la ingeniería... son carreras nobles y necesarias para dignificar la vida humana. Pero la poesía, la belleza, el romanticismo, el amor son cosas que nos mantienen vivos".
Robin Williams La sociedad de los poetas muertos, 1989
Escuela Primaria Federal ﾃ］gel Pola Moreno, Villaflores, Chiapas
Por eso al enterarme que el día de ayer la Maestra Olga se fue para siempre, pienso que no es cierto, una mujer tan grande nunca muere, no debe morirse. Ella sigue estando entre nosotros, en el corazón del pueblo que tanto la quiso. Dios la eligió para que nos enseñara las primeras letras; de ese modo la aprendimos a querer.
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Cerro Nambiyigua, Villaflores, Chiapas
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La noticia fue como una marea que nos llegó de golpe y nos hizo dolernos hasta el alma con sus recuerdos. Te quedas inmóvil, luego te rebelas contra la muerte, das un golpe a la pared y contienes el llanto para después, lágrima a lágrima derramarlo, como si aprender a despedirla y llorar por su gran causa fuera la última lección que ella nos dictara.
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Paisaje de Villaflores, Chiapas.
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Recuerdo mi primer día de clases en la escuela primaria “Ángel Pola Moreno” en la ciudad de Villaflores, un lunes 5 de septiembre de 1966. Eran las 8 de la mañana de un día radiante, después de participar en los honores a la bandera y al ritmo de la "Marcha Zacatecas" entramos al salón de clases. Ella me ubicó en primera fila, mis compañeros del aula fueron Marco Antonio Bezares Escobar, Rosy Mary Pereyra, Jesús Moreno, Ramón Baltazar, entre otros.
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Su primera lección fue que escribiéramos la letra “o” en una hoja de rayas, de inmediato llené la hoja y se lo entregué, así fueron los siguientes días hasta llenar el cuaderno con el abecedario. La ¨o¨ fue un símbolo donde cabían todas las cosas empezando por su nombre: “Olga”, que era como el principio del tiempo donde todo estaba por nacer en el corazón del mundo.
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Por ahora nadie se resigna que se haya marchado, tal vez se ha ido para anunciarnos en donde quedaron los libros con los que ella nos enseñó cómo se conquista el destino.
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Vista panorámica de Parque Central de Villaflores, (década 80’s-90’s del siglo XIX)
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Tenía la grandeza de una montaña. La inmensidad de su voz cabía en todo el salón de clases que nos despertaba para el aprendizaje. Aprender a leer con ella, era tan natural como respirar o como divisar el porvenir que iba a paso redoblado, sin dar media vuelta o tener un traspié. Hoy la recordamos con el mismo amor que ella nos tuvo en aquella infancia y sé que algo de la Maestra Olga Escobar Torija, vivirá en nosotros, algo como su alma que nos habita desde que Dios inventó la eternidad en cada letra de su nombre.
Hernán León Velasco 24 enero de 2015
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EL ARTE DE ENSEÑAR
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Cada cual debe aplicarse a la educación propia hasta el último día de su vida. Massimo Taparelli d'Azeglio
Dar amor, constituye en sí, dar educación.
Anna Eleanor Roosevelt
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Educar es dar al cuerpo y al alma toda la belleza y perfección de que son capaces.
Platón
Educad a los niños y no será necesario castigar a los hombres.
Pitágoras
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El arte supremo del maestro es despertar el placer de la expresi贸n creativa y el conocimiento.
Albert Einstein
El buen maestro hace que el mal estudiante se convierta en bueno y el buen estudiante en superior.
Maruja Torres
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El maestro deja una huella para la eternidad; nunca puede decir cuando se detiene su influencia.
Henriqueta Lisboa
Enseñar es un ejercicio de inmortalidad.
Ruben Alves
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Los discípulos son la biografía del maestro.
Domingo Faustino Sarmiento.
Uno de los principales objetivos de la educación debe ser ampliar las ventanas por las cuales vemos al mundo.
Arnold H. Glasow
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TEXTOS FRAILESCANOS
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Cerro Nambiyigua, Villaflores, Chiapas
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El Nanbiyigua es nuestra montaña ella nos conoce más que nosotros mismos. Sabe que en un tiempo fuimos invisibles estábamos en al aire, luego escuchó nuestro llanto al nacer y nos esparció en los bosques del sol. La montaña conoce nuestro tiempo en nuestra sangre encontramos su destino. Puede uno decir la montaña soy yo: Crezco desde sus duras rocas. A través de los años cuando la vemos, nuestra mirada la abraza. Y le decimos: he vuelto, no te preocupes, que por estos mismos caminos nos verás regresar para estar cerca de ti. Si te miramos nos recuerdas a nuestra ciudad y a las tierras baldías que nos dejaron nuestros abuelos. Es cierto, la montaña es uno mismo. Cuando pensamos en ella Está en cada parte de nuestros huesos En nuestros pasos nos anuncia su eternidad Y si nos tocamos el pecho nuestro corazón habla con la montaña de lo que fuimos y de los que seremos en otros días. Hernán León Velasco 12 marzo de 2015 In Memoriam por Hernán León Velasco
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Cerro Nambiyigua, Villaflores, Chiapas
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Este momento no va a regresar. Por tanto aprende a ser un buen amigo, que ésta es la mayor verdad que te acompañará siempre. En toda circunstancia por difícil que parezca toma un respiro para decir una palabra de aliento Aunque a veces tu sufras porque eres el derrotado, consolar a los amigos te consolará de tu propia desdicha. No hay mejor día para prender el fuego de la hermandad que cuando alguien necesita de tu fortaleza. No digas: Yo también espero que me señalen el camino. ¡Este es el secreto!... Ayudar te ayuda sin reparar quién eres, te das cuenta que no estás solo y que tus males en realidad son menores. Nadie que tiene amigos puede quedarse atrás cada quien sabe cuál es su destino y a qué hora se oculta el sol.
Hernán León Velasco 12 marzo de 2015
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Salto Chiquito, Villaflores, Chiapas.
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Eres original, tu crecimiento es a ras del suelo. Con flores ambarinas te anuncias, y dices: traigo en mis entrañas el mineral terrestre. Calabaza tu nombre es sencillo y tiene el ritmo de un son. No obstante, con tu fósforo prendes las estrellas en nuestra boca con el potasio electrificas nuestro corazón. Eres una deliciosa caricia para el gusto de la multitud, con el zinc aumentas nuestro olfato y cicatrizas nuestras heridas de amor. En la redondez de tu ser tienes algo del cielo, y en el color de tu cáscara traes algo del astro solar. Tal vez quieres que en ti probemos algo del cielo y del sol, en realidad nos recuerdas que nacimos de la tierra. Somos los espíritus del bosque. Hernán León Velasco 23 febrero de 2015.
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R铆o el Tabl贸n, Salto Chiquito, Villaflores, Chiapas.
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Las piedras son las bellas inmóviles, son tan lentas que para dar un paso necesitan de un siglo. Ellas callan el grito del día. Cada una luce su propia personalidad las hay bermejas, azabaches o ambarinas. Tienen la prudencia de un sabio la dureza de un guerrero la leyenda de una pirámide. Sobre todo, en ellas se construye la casa y se ama la vida. Hernán León Velasco 22 febrero de 2015
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Cerro Nambiyigua, Villaflores, Chiapas.
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Cada hombre tiene su montaña o existe una que está cerca de nuestra vida. La montaña creció con nuestra niñez en cada amanecer tenía otro rostro era nuestro mayor resguardo, podías platicar con ella. Ahora que el tiempo ha pasado ha crecido en el corazón de todos. Nadie habla al pasar cerca de sus laderas pero todos vuelven la mirada hacia su cima y le dicen ya ves, estoy más cerca de tus montes por ti he aprendido a buscar la cumbre donde están mis sueños. En esta búsqueda muchos se quedaron dormidos para siempre y tú nos dices: no lloren que aún les falta hallar el misterio de las alturas. Tus abuelos se han ido, porque ellos aprendieron a volar a mayor distancia. Es tu tiempo para que subas mis laderas escabrosas, que salves mis abismos donde habitan mis soledades de piedra. Ahí hallarás las duras tareas y los peligros jamás vistos, animales que pondrán en riesgo tu habilidad de sobrevivencia. Nunca olvides antes de llegar a la cumbre que naciste de las entrañas de la tierra y yo soy tu montaña para que desde otras alturas aprendas a conocer la inmensidad cerca del cielo. Hernán León Velasco 20 febrero de 2015 In Memoriam por Hernán León Velasco
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Paisaje dominante en Villaflores, Chiapas.
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El sol descansa en los campos por eso cuando mordemos al fruto un pedazo de luz nos ilumina la boca. Aquí surgen en forma de rosas gigantes los árboles más extraños del mundo. Cada día están más solos, y extienden sus ramas como protesta porque son los sobrevivientes del siglo. Cuando se desata la lluvia la vastedad del cielo nos salpica de azul, toca su tambor el mar y nos recuerda que nacimos del agua. De estos rincones proviene el camino esta es nuestra raíz y a ella volverán nuestros pasos. El hombre será otra vez la semilla que ha de nacer del vientre original de la tierra. Hernán León Velasco 21 febrero de 2015.
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R铆o el Tabl贸n, Salto Chiquito, Villaflores, Chiapas.
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Y sí que era bueno descubrir tu lugar en el mundo. Entretanto te aguarda el off de las cosas. Los sueños esperan... ¡A tiempo! Hernán León Velasco 18 febrero de 2015
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Gabriela Mistral La oraci贸n de la maestra
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¡Señor! Tú que enseñaste, perdona que yo enseñe; que lleve el nombre de maestra, que Tú llevaste por la Tierra. Dame el amor único de mi escuela; que ni la quemadura de la belleza sea capaz de robarle mi ternura de todos los instantes. Maestro, hazme perdurable el fervor y pasajero el desencanto. Arranca de mí este impuro deseo de justicia que aún me turba, la mezquina insinuación de protesta que sube de mí cuando me hieren. No me duela la incomprensión ni me entristezca el olvido de las que enseñé. Dame el ser más madre que las madres, para poder amar y defender como ellas lo que no es carne de mis carnes. Dame que alcance a hacer de una de mis niñas mi verso perfecto y a dejarte en ella clavada mi más penetrante melodía, para cuando mis labios no canten más. Muéstrame posible tu Evangelio en mi tiempo, para que no renuncie a la batalla de cada día y de cada hora por él. Pon en mi escuela democrática el resplandor que se cernía sobre tu corro de niños descalzos. Hazme fuerte, aun en mi desvalimiento de mujer, y de mujer pobre; hazme despreciadora de todo poder que no sea puro, de toda presión que no sea la de tu voluntad ardiente sobre mi vida. ¡Amigo, acompáñame! ¡Sostenme! Muchas veces no tendré sino a Ti a mi lado. Cuando mi doctrina sea más casta y más quemante mi verdad, me quedaré sin los mundanos; pero Tú me oprimirás entonces contra tu corazón, el que supo harto de soledad y desamparo. Yo no buscaré sino en tu mirada la In Memoriam por Hernán León Velasco
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dulzura de las aprobaciones. Dame sencillez y dame profundidad; líbrame de ser complicada o banal en mi lección cotidiana. Dame el levantar los ojos de mi pecho con heridas, al entrar cada mañana a mi escuela. Que no lleve a mi mesa de trabajo mis pequeños afanes materiales, mis mezquinos dolores de cada hora. Aligérame la mano en el castigo y suavízamela más en la caricia. ¡Reprenda con dolor, para saber que he corregido amando! Haz que haga de espíritu mi escuela de ladrillos. Le envuelva la llamarada de mi entusiasmo su atrio pobre, su sala desnuda. Mi corazón le sea más columna y mi buena voluntad más horas que las columnas y el oro de las escuelas ricas. Y, por fin, recuérdame desde la palidez del lienzo de Velázquez, que enseñar y amar intensamente sobre la Tierra es llegar al último día con el lanzazo de Longinos en el costado ardiente de amor.
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LA EDUCACIÓN PUEDE CAMBIAR LA VIDA DE UNA PERSONA
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La próxima vez que decidas quejarte por tener que tomar el autobús a la escuela o a cualquier parte, es posible que quieras pensarlo dos veces. En varias partes del mundo, algunos niños necesitan llegar al extremo para llegar a clases.
Historias sobre niños que caminan kilómetros para llegar a la escuela están bien documentada, pero ¿alguna vez habías visto niños que arriesgan sus vidas cada vez que asisten a clases? Estas imágenes muestran la peligrosa pero lamentablemente necesaria manera en que algunos niños llegan a la escuela.
La educación puede cambiar la vida de una persona, y el sacrifico que estos niños hacen es una muestra de la importancia que como sociedad debemos darle. Fuente: upsocl.com
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Viaje de 5 horas por las montañas en un camino muy angosto. Probablemente la escuela más remota del mundo, Gulu, China.
Escolares subiendo por estas escaleras sin seguridad, Zhang Jiawan.
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Niños viajando al colegio a través del Himalaya, Zanskar, Himalaya indio.
Niña montando un toro a la escuela, Myanmar.
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Alumnos cruzando Indonesia.
un
puente
colgante
dañado, Lebak,
Niños “volando” 800m por un cable a 400m sobre el río Negro de Río, Colombia.
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Niños cruzando a través del bosque por un puente de Árbol, India.
Una versión distinta de bus escolar en Beldanga, India.
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Cruzando un puente dañado y con nieve para llegar a la escuela en Dujiangyan, provincia de Sichuan, China.
Niñas cruzando por una tabla en Sri Lanka.
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Viajando en barco en Kerala, India.
Escolares viajando en carreta para llegar a la escuela En Delhi, India.
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Peligroso camino por las montañas, Pili, China.
Caminando por la cuerda floja por encima de un río, Padang, Sumatra, Indonesia.
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Cruzando un río, provincia de Rizal, Filipinas.
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Hern谩n Le贸n Velasco hernanlv@prodigy.net.mx
Edici贸n ingenoe@hotmail.com
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