La entrevistada además de ser madre es profesora de psicología de la Universidad de Valencia. Cuando decidimos realizar este trabajo nos acordamos que el año pasado en una de sus clases nos estuvo contando un poco su experiencia personal, sin profundizar mucho en el tema. Por lo tanto, decidimos enviarle un correo para concertar una entrevista con ella y no tuvo ningún problema en atendernos, es más, lo hizo con mucho gusto. ¿A qué edad se le detectó la superdotación? Desde pequeño yo notaba que mi hijo era diferente, además era muy activo, incluso llegué a pensar que era hiperactivo porque mi marido lo es. No sabría decir la edad exacta en la que me di cuenta de que mi hijo tenía altas capacidades pero por detalles en su comportamiento empecé a descartar la hiperactividad y me di cuenta de lo que realmente poseía. ¿Cómo se detectó? Por mi trabajo yo intuía que mi hijo era superdotado, aparte había ciertos aspectos en él que me hacían pensar eso, como por ejemplo: que el niño empezó a andar directamente sin pasar por la fase del gateo, que hablaba perfectamente a los 18 meses (esto suele ser un indicador esencial), viendo la tele memorizaba los anuncios y los repetía perfectamente… Como anécdota os puedo contar que un día estando en la tienda de mis padres, cuando mi hijo solamente tenía año y medio, una clienta se le acerco y dijo “que niño más guapo” y él le contesto “Rubia, guapa”. Por lo tanto, cuando fue un poco más mayor decidí hacerle diversos test para saber su coeficiente intelectual y efectivamente lo era. Pero creí conveniente que un compañero de profesión le realizar otro test y contrastar resultados. Y sí, mi hijo era superdotado. ¿Qué tipo de superdotación tiene? ¿Qué coeficiente intelectual? Recuerdo que cuando estaba en tercero de primaria le volví a hacer otro test y vi que su coeficiente había aumentado, por aquel entonces tenía 170 (*) Un CI de 170 es considerado como superdotación intelectual excepcional (representa el 0.003% de la población) ¿Tu hijo se siente distinto al resto de sus compañeros? Él sabe que es más inteligente que sus compañeros, pero yo siempre desde pequeño le he explicado que tiene que respetar tanto a los compañeros como a los profesores. Y que por ejemplo cuando en clase el profesor pregunte, aunque él sepa la respuesta deje un margen de tiempo para que lo compañeros puedan contestar, y que aunque no esté de acuerdo con lo que dice el profesor, no le corrija, ya que él es quien da la clase. ¿Te has planteado adelantar a tu hijo de curso? La verdad es que eso siempre ha sido una opción, pero pienso que no le haría bien, él tiene que estar con niños de su edad, jugar con sus iguales, hay una edad para todo y aunque en inteligencia vaya por delante tiene que intentar vivir las cosas que viven los niños de su edad. La verdad es que a él le encanta jugar con niños más pequeños y les enseña cosas, él y otro amigo hacen de profesores y los niños más pequeños de sus alumnos, pero los profesores le han llamado la atención, incluso le han llegado a castigar porque movía masas, mareaba a todos los niños (risas). ¿Qué clase de ayuda le proporcionas? Le proporciono actividades extras relacionadas con temas de interés para él. Es muy curioso y siempre quiere saber más y más, a veces es un poco agotador. Yo le intento dar todo el material que él necesita pero también es verdad que cuando me dice que está cansado, no le obligo a que siga, sino que él solo es el que se raciona su tiempo entre el aprendizaje y el ocio, hay tiempo para todo. Es un niño muy exigente consigo mismo, hubo una vez que no sacó sobresaliente y vino cabizbajo y tuve que explicarle que no pasaba nada que no tenía que obsesionarse. Y también le dije un día que: “la nota evalúa el esfuerzo
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