Los Testigos de Madigan N.º 15

Page 1

R E V I S T A

D I G I T A L

L I T E R A T U R A

Y

A R T E

N Ú M E R O

1 5

|

J U L I O

2 0 2 2


CONSEJO EDITORIAL L O S T E S T I G O S D E M A D I G A N N . 0 1 5 J U L I O

Armando Adame, Gaspar Aguilera, Armando Alanís Pulido, Juan Antonio Alfaro, Luis Armenta Malpica, Rocío Arellano, Juan Manuel Bonilla, Félix Barbosa, Daniel Bencomo, Saúl Castro, Fernando Carrillo, Joaquín Cosío, Roberto Colis, Miguel Ángel Chávez, Jorge Humberto Chávez, Luis Humberto Crostwaithe, Miguel Ángel Díaz, Miguel Donoso Gutiérrez, Alejandra Elías, José María Espinasa, Roberto Carlos Gámez, Alejandro García Ortega, Violeta García, José Isabel Hernández, Eudoro Fonseca, Joel Flores, Julián Herbert, Ana María Jaramillo, José Ángel Leyva, Gonzalo Lizardo, Claudia Luna, Élmer Mendoza, Citlalli Mendoza, Julián Mitre, Juan José Macías, Nicolás Minelli, Jesús Navarrete Lezama, David Ojeda Sánchez, Christian Ramos, José Luis Rico, Édgar Rincón, Diego Romo, Víctor Roura, José de Jesús Sampedro, César Silva, Josué Sánchez, José Eugenio Sánchez, Magali Velasco, Francisco Velázquez, Marco Vieyra y Noé Zavala.

2 0 2 2

2

Si gustas colaborar con nosotros, aportando alguna obra literaria o pieza artística para su difusión, escríbenos a: lostestigosdemadigan@gmail.com


DIRECTORIO Coordinación general Laura Elena González y Jorge Humberto Chávez Diseño Sergio Grande Corrección Ad hoc. Asesoría y soluciones en comunicación Relaciones públicas y comercialización Rosa María Zamora

Los Testigos de Madigan es una revista independiente, publicada por el colectivo del mismo nombre. Su registro se encuentra en trámite y su aparición es trimestral. Los textos son responsabilidad de sus firmantes pero la revista asume su plena competencia sobre los juicios y valoraciones de carácter literario, que al Consejo Editorial le permiten justificar su inclusión en cada número. Sólo se publicarán colaboraciones previamente solicitadas y dictaminadas por dicho consejo.

lostestigosdemadigan.com

3


ED IT OR IAL

El verano

nos ha encontrado celebrando centenarios literarios que nos hacen recorrer una autopista de ida y vuelta con paisajes que parecen repetir la fragilidad de nuestra vida globalizada, lo precario de nuestra salud y la escaza certeza de cualquier tipo de seguridad. Pero, definitivamente listos para el privilegio de soñar, para encontrar algún reposo que nos proporcione gozo: la música, un buen libro, un paseo sin prisa y el silencio. Con el número 15 de Los Testigos de Madigan queremos abrir esos espacios. Empecemos con un puente aéreo muy antiguo, con enormes resonancias poéticas y afectivas que es desvelado por Roberto Colis en su texto. Otro lazo con el pasado remoto lo traza José Alberto Navarrete Lezama, quien desmenuza el concepto de identidad, tan llevado y traído, y nos aproxima a diversos momentos en la historia de la humanidad en donde tal vez esa idea cobraba forma. Por otro lado, los binomios en juego de esta edición los conforman Félix Barbosa/David Byrne, quienes nos traen de regreso

4

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


al álbum Remain in light y sus momentos casi mántricos. Miguel Díaz/Robert Bly están presentes en la traducción de los poemas del estadounidense, los cuales nos aproximan a una luz que cuestiona nuestro «mundo civilizado». Citlalli Mendoza nos permite escuchar la polifonía que habita el poemario de Armando Salgado, una de las voces más consistentes del actual panorama poético nacional. Diego Romo presenta a Junior H, quien de manera lúdica nos permite encontrar en el rap y su argot un registro lingüístico que conecta a diferentes contextos de la población fuera de los clichés. Noé Zavala hace una apuesta por Leonardo Padura y las historias policiacas del atípico detective Mario Conde. También están incluidas las primicias de dos poemas de Juan Antonio Alfaro, y del cuento de Astrid Back, así como la recomendación de Rocío Arellano. Antes de cerrar esta edición recibimos la noticia de Juan Antonio Alfaro, miembro del colectivo que hace posible esta revista, quien ha resultado ganador del Premio Nacional de Poesía Joven Elías Nandino 2022. Desde aquí queremos enviarle una cálida felicitación. Esperamos en el futuro poder publicar un adelanto del libro premiado: Cadáver Perlongher. Verano 2022 LOS TEST IG OS DE MADIGAN N.0 15 | EDITORIAL

5


ÍN 8 14 18 DI ENSAYO PINTURA POESÍA CE Herr Urian y el Autorretrato Dos poemas para L O S T E S T I G O S

vaquero marcial rupestre

Santiago

Roberto Colis

Juan Antonio Alfaro

J.A. Navarrete L.

D E M A D I G A N N . 0

22 MÚSICA Remain in light: la luminosidad 32 de lo negro CUENTO El Barquero 28LITERATURA El Nobel de Padura Juan Félix Barbosa

Astrid Black

Noe Zavala

1 5 J U L I O 2 0 2 2

6

46 RESEÑA

Cuadro de resiliencia Citlali Mendoza


54 60 TRADUCCIÓN MÚSICA Poesía de Robert Bly Miguel Díaz

Junior H: Mi vida en un cigarro 2 Diego Romo

66 RECOMEN DACIÓN

El hijo deseado, de Julián Mitre Rocío Arellano

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

El contenido vertido en cada uno de los textos de esta revista es de exclusiva responsabilidad de su autor, cuyo estilo y libertad de expresión se respetan íntegramente, y no reflejan necesariamente los criterios editoriales de Los Testigos de Madigan

Síguenos en @lostestigosdemadigan

7


Roberto Colis

T E S T I G O S

URIAN L O S

D E

N . 0

1 5

J U L I O

Y EL VAQUERO MARCIAL M A D I G A N

2 0 2 2

8

HERR EN SA YO


Cada

treinta de abril vuelvo a la Noche rústica

de Walpurgis, de Manuel José Othón. David Ojeda me inoculó su fascinación por el poemario así como los vampiros transmiten a sus acólitos la afición al sabor ferruginoso de la sangre, ese David de filias esotéricas (si se entiende «esotérico» en su sentido original de «interno, comprensible solo para iniciados»), proclive a los motivos crípticos, que en la media luz subacuática de su biblioteca, frente a la ventana que daba a un pequeño jardín, editaba la revista Runa en su computadora, con la palabra ABRAXAS tatuada en el brazo derecho. Fiesta a la vez aciaga y voluptuosa, uno de los escenarios del Fausto, la noche de Walpurgis hizo brotar motivos brujeriles en Wolfgang von Goethe y, cien años después, en Manuel José Othón. Se perfila eje de Herr Urian y el Vaquero Marcial. ¿De dónde viene esa procesión de brujas que tiende un puente aéreo entre Alemania y México? Cerca del poblado de Trautenstein (nombre que se traduce como «piedra de los druidas»), en las laderas del monte Brocken, brujas de plástico a batería, con ojitos fulgurantes de un rojo-naranja que los turistas llevan a precios inflados, aluden a la tragedia fáustica y a las fiestas que los antiguos germanos celebraban al llegar el buen tiempo. El Brocken, pico más alto de la Sierra del Harz, urheimat del mito walpurgiano, ostenta una altura modesta. Su cima se alcanza sin mucho esfuerzo a pie siguiendo el camino marcado que recorría Goethe, o bien tomando un tren rojo a escala que se desliza entre viejos pinos y abedules. LOS T E ST I G OS DE MADIGAN N.0 15 | E N SAYO | Robe r to Colis | Herr Urian y el Vaquero Marcial

9


EN SA YO Roberto Colis

La festividad de Walburga o Walpurga, predicadora del cristianismo celta en tierras germanas, llegó a imponerse con el calendario cristiano a aquellas fiestas, aunque paradójicamente su nombre quedaría asociado al jolgorio que se había intentado anular. En el decir popular, esa noche, brujas y brujos, animales y espíritus sombríos se congregaban en una orgía entre la carne turgente y la decrépita —concupiscencia y repulsión—, ilustrada por el granadino Luis Ricardo Falero. El Herr Urian del Fausto, una denominación familiar elegida por Goethe para llamar al diablo, es la presencia atemorizante que festejan a coro las brujas tras su peregrinaje cuesta arriba: «las brujas suben por el Brocken el rastrojo es amarillo, verde la mies allí se acumula el gran montón y encima está sentado Herr Urian.» El nombre de Herr Urian, además del diablo, designa a un huésped indeseable, a un rústico o a un ingenuo. En el poema El viaje de Urian por el mundo, de Matthias Claudius —musicalizado por Beethoven y en voz de Dietrich Fischer-Dieskau mientras escribo —encontramos una mención. Dice el primer verso: «Quien hace un viaje tendrá algo que contar». Y como este Herr Urian ha hecho un viaje y cree tener materia de relato, quizá obligado por su sentido de gratitud a sus anfitriones, canta su periplo, que arranca rumbo al Polo Norte y, una vez franqueado el Paso del Noroeste, ya en América, lo lleva a México:

10

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


«De ahí fui a México ¡Queda más lejos que Bremen! Ahí está tirado el oro como paja, pensé, he de ir a llenar el saco. […] Solo, solo, solo, solo. ¡Cómo yerra el hombre! Allí no encontré sino arena y piedra y dejé tirado el saco.» En la Noche rústica de Walpurgis de Othón reverberan ecos de la tragedia faustiana por una región no muy diferente, esa parte del altiplano mexicano que no es el pródigo Bajío ni el industrioso Norte; cóncava y elevada, híbrido de sabana y garriga. Othón, poeta, la mira de noche parecida a un paisaje de nieve y lanzas. En el proemio, una entidad anónima llama y conduce al poeta por un páramo órfico o dantesco. Una vez declarado el propósito del viaje, toma la palabra el elemento que producirá el canto: el arpa, la naturaleza misma. El acorde macabro se desgrana en sonetos a los fuegos fatuos, a la fauna nocturna, a las brujas y a los muertos que esperan la llegada del día como una resurrección. También con un nombre familiar se evoca en la Noche rústica de Walpurgis al diablo que congrega a las brujas y espanta a los campesinos: «tras nahuales y brujas, el coyote ulula clamoroso, y aletea sobre negro peñón, el tecolote LOS T E ST I G OS DE MADIGAN N.0 15 | E N SAYO | Robe r to Colis | Herr Urian y el Vaquero Marcial

11


EN SA YO Roberto Colis

la lechuza silbando horrorizante se junta a la fatídica ralea y el Vaquero Marcial llega triunfante.» La montaña, repleta de metales que esperan ser extraídos, insta al hombre a aprovechar el día. Las estrellas admiran los esfuerzos humanos y su inteligencia, que es para ellas el astro verdadero. El gallo y el perro, compañeros de los trabajos humanos, son rayos en la noche amenazante; uno con su canto que desgarra el miedo, el otro —el preferido de Ojeda— velando el sueño de su amo. No puedo evitar hacer cábalas: ¿los veintidós sonetos en clave pánica corresponden acaso a las veintidós letras del alfabeto hebreo o a los veintidós arcanos mayores del tarot? ¿Los seres inquietantes que pueblan la oscuridad y se diluyen con el amanecer gradual están inspirados en la serie «El Diablo, La Torre, La Estrella, La Luna y El Sol?». Acaso sea la pistola el más inquietante de los símbolos hecho por ingenio del hombre. En el poema es apenas un disparo lejano de noche, sin que sepamos si crimen o defensa, pero ahora truena cada vez más cerca y de día. A diferencia de los fantasmas, las brujas y los astros nocturnos, la pistola persiste a medida que se acerca el alba, la entrada gradual de la luz, momento en que «las sombras palidecen».

12

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


Fusión

Instalación in situ Paisaje intervenido

Medidas variables L O S

PAUSAGRÁFICA

Esperanza Zavala Fabián

T E S T I G O S D E M A D I G A N N . 0 1 5 J U L I O 2 0 2 2

13


PIN TU RA

José Alberto Navarrete Lezama

L O S

T E S T I G O S

D E

M A D I G A N

N . 0

1 5

J U L I O

2 0 2 2

14


Sin duda,

el género artístico con el que menos vinculamos una pintura rupestre es el autorretrato y, sin embargo, cabe la posibilidad de considerar si esos hombres y mujeres que ilustraron figuras humanas durante el Paleolítico inscribieron en ellas rasgos de identidad individual para los cuales carecemos de las referencias necesarias para descubrirlos. Plantearnos esta idea no es trivial, tiene sus consecuencias, y espero a continuación exponer las razones de su importancia. La arqueóloga María de la Luz Gutiérrez, especialista en el arte rupestre de Baja California Sur, sugiere que algunas de las figuras antropomorfas dibujadas en cuevas pueden representar a sus creadores: «Estas personas, a través del artilugio del arte rupestre, encontraron la manera de plasmar su reflejo en la piedra, perpetuando así sus rasgos identitarios, su filiación y sus vínculos con un pasado mitológico». En apariencia esto no concuerda del todo con una descripción de un autorretrato, al menos no coincide con la concepción arraigada sobre dicho género. Echando mano de un programa informático, Gutiérrez reconstruyó hipotéticamente las imágenes a partir de fotografías digitales. Descubrió en las figuras humanas pintadas en rocas elementos de diferenciación (formas, tocados, colores) que probablemente sugieran distinciones de linaje o de grupos, o en otros casos representen ancestros mitológicos. Pero, ¿es posible que no sean formas genéricas de hombres y mujeres, y que tal vez quienes las hacían y las contemplaban encontraban en ellas rasgos que remitían a personas particulares? LOS TESTIGOS DE MADIGAN N.0 15 | PINTURA | José Alberto Navarrete Lezama | Autorretrato rupestre

15


PIN TU RA José Alberto Navarrete Lezama

16

Si tomamos por verdad que algunos de estos dibujos fueron realizados por chamanes, ¿no sería igualmente cierto que representan al mismo chaman ejecutando su papel? O si la pintura fue hecha por un jefe de linaje, ¿remitan a él mismo en su relación de poder con los demás individuos? Por otro lado, es legítimo plantearnos, dado la notoria habilidad estilística, si ya entonces había especialistas en el arte de la pintura, y que estas imágenes correspondan más bien al género del retrato. No hay ninguna prueba de ello. Como siempre, estamos ante conjeturas. Consideremos también probable que, al ser grupos humanos reducidos, quienes contemplaban estos retratos conocieran personalmente a sus creadores, y vieran a tal o cual individuo y no una figura humana genérica. Esta idea no nos convence del todo, pues solemos asociar al autorretrato con el desarrollo de una especial conciencia de la individualidad y la personalidad, que solo se presentó de manera contundente a partir de cierta etapa de la historia: el Renacimiento. Pienso, ahora, en dos formas de entender el autorretrato. La primera, y más común, es la relacionada con el culto a la personalidad, incluso al narcisismo. La segunda considera al yo y la imagen del propio cuerpo un punto de partida para expresar algo más, y no el fin único o último de las obras. Nace, quizá, de la conciencia de que no hay nada más

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


poderoso en la expresión del artista que aquello que le concierne muy íntimamente. Ignoro cuál de estas sería la más antigua. Las dos han convivido y se han entrecruzado a lo largo de las épocas. Este uso de la imagen de sí, que no se vuelca únicamente sobre la afirmación de la personalidad, lo podemos ver más claramente en obras modernas y contemporáneas. John Coplans, en contra de la idealización corporal moderna, retrató su cuerpo obeso, arrugado, velludo, en posturas que rayan en lo grotesco. En sus autorretratos, Kimiko Yoshida adopta distintas referencias culturales y artísticas para expresar su multiplicidad, no se pregunta ¿quién soy yo?, sino «¿cuántas soy yo?». A Tomoko Sawada le preocupa la uniformización social, y en School Days (2006) crea fotografías grupales escolares en las que todas las alumnas son la misma Sawada. ¿Por qué no pensar que los pintores paleolíticos encontraron en las imágenes de sí mismos una forma eficaz de expresión para con los otros? Ellos, como los artistas de otras épocas hasta llegar a los contemporáneos, habrían descubierto en la imagen autorreferencial una forma de expresión singular y efectiva. Esa sería la base para pensar en un posible autorretrato rupestre, con sus propios cánones representacionales, que no deben ser medidos bajo los criterios de realismo aplicados a obras como las de Durero, Rembrandt y otros.

LOS TESTIGOS DE MADIGAN N.0 15 | PINTURA | José Alberto Navarrete Lezama | Autorretrato rupestre

17


L O S

T E S T I G O S

D E

M A D I G A N

POEMAS PARA Juan Antonio Alfaro

N . 0

1 5

J U L I O

2 0 2 2

SANTIAGO

18

DOS PO ES ÍA


Santiago habla tranquilo mientras por su cuerpo corren mil caballos. Le gustaría ser tan rápido como los erizos de piel azul. Santiago sabe que la noche empieza a brillar cuando baila en una esquina su canción favorita. Sueña que es un perverso verde y polimorfo. Le gusta la idea de cambiar de forma: ser un pteranodonte luego un pterodáctilo y, al final del día, dibujar con los pies un jardín de gnomos. Ser un huevo de dinosaurio que crece en una tina con agua. Un dinosaurio de goma. Lo he visto quitarse de los ojos un recuerdo borroso. También ha dicho que hace tiempo no encuentra su inteligencia. También sé que está mintiendo. Santiago ahora duerme y es un susurro. A veces un río. El sonido del metal de los aviones que descansan adentro de sus jaulas. Santiago no miente: la inteligencia es un museo, tiene múltiples perfiles y él, desde luego, está esperando a que le crezcan alas. LOS T E ST I G OS DE MADIGAN N.0 15 | P O E SÍA | Juan An ton io A lfar o | Dos poem as para Santiago

19


PO ES ÍA Juan Antonio Alfaro

20

Buscamos el amor que perdimos en la enredadera de las cosas inútiles. Vivos, entre la vigilia y el sueño, avanzamos sin otro norte que olvidarnos, que activar los despertadores de la soledad para cambiar de posición nuestro huso horario. Así aprendimos a comer del mismo plato, a dormir temprano para levantarnos con más ánimos que el día anterior porque si hay una ganancia en todo esto es la de despertar con alguien más pequeño que se atreve a recorrer la cama como si fuera el mapa de algún país y luego lucha contra sus propias pesadillas y también grita y se ríe con los ojos cerrados y esa debe de ser la imagen de la inocencia y la plenitud. Aún si el mapa cambia existe una manera de recorrerlo, algunos lo llaman imaginación; otros, lo llaman recuerdo: esa idea que nos atraviesa cuando sabemos que ya comienza la hora de partir, la hora de sacar los cajones del tocador, la hora exacta de tirar todo al bote de basura que custodia nuestra casa. Mientras, en la cocina se acumulan sartenes que antes cruzaron el espacio. En el jardín, inclinado, el árbol del amor ya presagiaba el desastre: también es conocido como algarrobo o árbol de Judas y ese era un indicio. Quisiera pensar que de ahí viene este declive. Mis fracasos de magnitudes despreciables. Santiago, nunca pienses que soltaré tu mano. Llevo guardado en la memoria el mapa donde duermes para encontrarte en el sueño. LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


Conexión

Instalación in situ Paisaje intervenido

Medidas variables L O S

PAUSAGRÁFICA

Esperanza Zavala Fabián

T E S T I G O S D E M A D I G A N N . 0 1 5 J U L I O 2 0 2 2

21


MÚ SI CA

Juan Félix Barbosa

L O S

T E S T I G O S

D E

M A D I G A N

N . 0

1 5

J U L I O

2 0 2 2

22


David

Byrne siempre ha tenido un alma inquieta,

y antes de ser reconocido, aunque amaba el sonido de Chuck Berry o Eddie Cochran, interpretaba la música de estos rocanroleros cambiándola de contexto, ya fuera con un ukelele o un viejo violín heredado para tocarla en cafeterías universitarias, teniendo siempre una respuesta favorable. Ya con los Talking Heads en un viaje al oriente, Byrne asistió a ver las formas tradicionales del teatro japonés: Kabuki, Noh y Bunraku en los cuales observó dos aspectos que lo impactaron: el toque minimalista y, particularmente, la deconstrucción de elementos en escena cuando intervenían auxiliares para montar o desmontar vestuario o utilería. El líder de los Talking Heads enseguida planeó cómo llevar algo conceptualmente similar a un concierto de la banda. El resultado fue una presentación de menos elementos a más, en la que aparecía únicamente él con su guitarra, después de una canción, otro con su instrumento, y así, hasta que se completaba la imagen orquestal, proceso que puede apreciarse en el documental Stop making sense, logrando producir el mismo pacto con el público que el que consigue el teatro japonés. Remain in ligth o «Permanecer en la luz» es un álbum de los Talking Heads que desde su trabajo en los demos nació con una muy buena estrella, pues no solo convenció a un reacio Brian Eno para producirlo, luego de haber trabajado en los dos anteriores: More songs about buildings and food y Fear of music, sino también (ya publicado) a una crítica que prácticamente le celebraba todo a la banda surgida en el Nueva York de entonces, entregado sin prebendas al movimiento punk con bandas como Television o Los Ramones. LOS TESTIGOS DE MADIGAN N.0 15 | MÚSICA | Juan Félix Barbosa | Remain in light: la luminosidad de lo negro

23


MÚ SI CA Juan Félix Barbosa

24

Es sabido que Remain in ligth proyecta el encuentro de David Byrne y el resto de la banda con la música africana gracias a un muy motivado Brian Eno que les compartió este material, particularmente con la del músico Fela Kuti; para entonces, los Talking Heads estaban cerrando el ciclo de su tercer álbum Fear of music, y enfrentaban, por un lado, la posibilidad de terminar con la agrupación debido al carácter obsesivo de su líder, y por el otro, las ganas de continuar con el aura de la exploración sonora y artística que seguía teniendo la misma fuerza en ellos. Este cuarto álbum de los Talking Heads fue grabado en el estudio Compass Point en Bahamas, en 1980, año crucial en el que el punk inglés y neoyorkino marcaban prácticamente su defunción, pero, al mismo tiempo, heredaban parte de sus lineamientos a otras expresiones emergentes como el postpunk y la new wave, que no dudaron en incorporar la música electrónica y algunos otros recursos novedosos como el empleo de los loops, al igual que en el cada vez más aceptado hip hop. Remain in light, al igual que sus predecesores, se caracteriza por la experimentación típica de Byrne y además, en este caso, de los otros integrantes, lo que hace el espíritu grupal más notorio que la dictatorial huella del líder en sus discos anteriores. Resulta entonces un trabajo de colaboración y conexión que logró amalgamar lo que se creía improbable: la polirritmia negra con los elementos del postpunk, la new wave, e incluso destellos de un funk minimalista pero elegante y preciso. Permanecer en la luz es un disco pensado en dos lados (o actos). La parte A, con los temas «Born Under Punches (The Heat Goes On)», «Crosseyed and Painless» y «The Great Curve» con una línea festiva que LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


provoca la sensación de estar celebrando en la cima de la espontaneidad mediante un diálogo puntual entre sus partes: los guitarreos rítmicos machacantes de Byrne y Adrian Belew, este último ex King Crimson, el bajeo muy inteligente, a manera de slap contrapunteado o a destiempo de Tina Weymouth, como si fueran golpes contundentes para reafirmar lo propuesto por las guitarras, enmarcados por secciones percusivas divididas entre la batería de Chris Frantz y los complejos beats africanos, los teclados de Jerry Harrison, los loops y desde luego, las notables líneas melódicas pegadizas de la voz principal, además de los coros que dejan en el oyente una especie de hipnosis y una extraña sensación de bienestar. En la parte B, con las piezas: «Once in a Lifetime», «Houses in Motion», que fueron lanzadas como primeros sencillos, conservan en menor medida el vuelo de la cara A, con la presencia del bajeo de Tina como una guía indiscutible para que la voz de Byrne y los coros luzcan en medio de su contexto sonoro, por ejemplo, el sonido de los metales en la segunda; para posteriormente seguir con «Seen and Not Seen», «Listening Wind» y «The Overload», en las que la sensación se vuelve de mayor intimidad. Así, en «Seen and Not Seen» Byrne interviene en algunas partes hablando, prácticamente como si rezara, mientras que en «Listening Wind» pareciera que por momentos emula pasajes de cantos gregorianos, como si la banda buscara trazar un camino hacia la serenidad, efecto que prácticamente se consigue con la pieza que cierra el disco. Si en la parte A el efecto de las percusiones y las líneas instrumentales insistentes provocan júbilo, en «The Overload», pieza casi mántrica y de tonalidad oscura, el efecto hipnótico lleva al grado de la meditación, es decir, de la vigorosidad inicial al sosiego. Nuevamente, visto de una manera global, surge la presencia de los LOS TESTIGOS DE MADIGAN N.0 15 | MÚSICA | Juan Félix Barbosa | Remain in light: la luminosidad de lo negro

25


MÚ SI CA Juan Félix Barbosa

contrarios y en medio un proceso que da cuenta de ello y la reminiscencia del teatro oriental, pero no en cuestión de la suma o resta de elementos, sino de la muy lograda transición de emociones. Remain in light es considerada la obra mayor de los Talking Heads, uno de los mejores discos en la historia del rock, y desde luego, de los más influyentes. Tiene la rara virtud de ser un pasaje sonoro complejo que combina sonidos blancos con la visceralidad del beat negro como si fuera algo completamente natural, aunado a las letras de David Byrne, que si bien algunos consideran herméticas, para otros son un excelente ejemplo de asociación libre y hacen que el disco conserve el toque necesario de frescura, pese a que entre julio y agosto de este año cumplirá 42 años de haber sido grabado, hecho que le da la garantía de permanecer en la luz gracias a las inquietudes y talentos de unas cabezas parlantes fuera de serie.

26

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


Conexión

Instalación in situ Paisaje intervenido

Medidas variables L O S

PAUSAGRÁFICA

Esperanza Zavala Fabián

T E S T I G O S D E M A D I G A N N . 0 1 5 J U L I O 2 0 2 2

27


LI TE RA TU RA Noé Zavala

28


Leonardo

Padura, futuro gana-

dor del premio Nobel de Literatura, refiere que cuando creó al personaje protagónico de varias de sus novelas policíacas, el detective Mario Conde, no quería uno de corte clásico: despiadado, corrupto e insensible, sino a alguien con atributos opuestos a esa descripción: un policía de corazón puro, que luchara de manera honesta contra los males del mundo. Algo especialmente difícil en un protagonista que inicia su carrera policial formando parte de un régimen político como el cubano, que no se destaca precisamente por garantizar las libertades ciudadanas, ni por llevar a cabo investigaciones bajo otros parámetros que no sean los de la única voz que ahí se escucha, que es la del Estado. Pero, precisamente, este es un punto nodal de la literatura, el que un escritor con talento puede llevar a cabo: modelar y delinear personajes que sean verosímiles, aun luchando contra entornos que le son adversos. Mario Conde es un personaje que, sin socavar planos de la realidad en las tramas en que se ve envuelto, va a contracorriente de algunos de los postulados del policía, además de ser un amante de los libros y un escritor frustrado. En Conde principalmente no hay violencia hacia los demás; solo se daña a sí mismo con su alcoholismo acendrado, producto de la soledad y la melancolía que a veces lo aquejan, y de un querer cambiar las cosas por un mundo más justo e igualitario, aunque en el fondo esté plenamente convencido de la imposibilidad de lograrlo. Este conflicto interno lo suaviza con las largas charlas con sus amigos, con sus amores inacabados y con los suculentos manjares que provee la comida cubana. LOS T EST IG OS DE MADIGAN N.0 15 | LITE RAT URA | Noé Zavala | E l Nob el de Padura

29


LI TE RA TU RA Noé Zavala

30

La importancia de las historias policiacas radica en que representan el pulso de una nación; son el fiel reflejo de las circunstancias de un tiempo, pues desnudan los artificios que se construyen para representar lo que no es y, por lo tanto, acentúan en el detective la labor de descubrir esos cimientos falsos, las más de las veces momentáneamente, pues al final, son los intereses políticos y económicos los que siguen prevaleciendo; la conveniencia de los poderosos. El policía es un conducto entre la élite y los bajos mundos: sabe que las motivaciones para cometer un crimen son esencialmente las mismas en los seres humanos: ambición, venganza, celos y poder, entre otras, y que solo existen cambios de escenario. De todo ello es plenamente consciente el personaje de Conde, en el que se entremezclan esos dos mundos, a pesar de que en el discurso se supone que la división de clases no existe en la sociedad cubana, pero el lector se dará cuenta, a través de las narraciones escritas por Padura, de que también la sociedad cubana se encuentra sesgada, y de que acontece lo mismo que en otras partes del mundo. Resulta un exceso que la generalidad de los personajes que desarrollan labores policiacas esté constituida mayormente con atributos negativos, especialmente en México. No hay de otra, dirán algunos, o un número importante de autores. No sería creíble que en un país corrupto y transa,

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


de lo cual los policías son grandes promotores, y en donde el noventa por ciento de los delitos no se denuncia, exista un policía justo y honesto, abundan diciendo. Pero entonces de qué manera nos explicamos que haya asesinos, narcotraficantes, violadores y defraudadores en prisión. Esa realidad nos demuestra otra cosa. Es cierto que tal vez sean más los policías malos o de quienes más se difundan sus actos en los medios de comunicación y en la literatura, pues eso atrae el morbo de la gente y vende más, pero sí existen los policías buenos y nobles, los Mario Conde, los que están rescatando el mundo, a pesar de ser ignorados. Siempre habrá quienes militen del lado del bien y se abstengan de estar en el bando contrario, al que precisamente se han comprometido a eliminar. Los que enarbolen valores que la sociedad, aunque sea de manera mínima, debe acatar, porque de otra manera estaría condenada a su desaparición. Es con la construcción de este personaje la forma en que Padura desmenuza con minuciosidad lo que es la cubanidad y su devenir; la isla que parece vivir en un tiempo diverso al del resto del mundo es donde demuestra su pleno talento y, por lo cual afirmo que, sin lugar a dudas, ganará el Nobel.

LOS T EST IG OS DE MADIGAN N.0 15 | LITE RAT URA | Noé Zavala | E l Nob el de Padura

31


CU EN TO Astrid Black

32


25 de octubre “El Barquero no mide más de 1.65 m. Tiene un bigote prolífico que parece una brocha vieja, y las entradas en su cabeza, perladas de sudor, reflejan la luz del sol. Sus dientes delanteros asemejan los de un roedor; sus ojos, los de un mapache, con grandes ojeras oscuras. Y su mirada… es perturbadora”. –Escribió Roy en su diario personal. «Con pesar, la familia Jiménez Díaz le informa que ha fallecido el señor Eladio Jiménez. El velorio se llevará a cabo en Funerales La Paz. La misa de cuerpo presente será mañana, 25 de noviembre, a las 13 horas en la parroquia de la Inmaculada Concepción. De ahí partirá el cortejo hacia el Panteón Municipal. Descanse en paz el señor Eladio Jiménez». Apenas anoche llegué al pueblo para ver a mi familia, y hoy amanecimos con la noticia de que don Eladio, el dueño de la forrajera más antigua de aquí, se peló pal’ otro mundo. Don Álvaro, a quien conocemos aquí como el Barquero, lo anunció muy temprano desde esa vieja bocina suya a la que apenas y se le entiende. La calle, a las 7 de la mañana en domingo, es solitaria; y justo así acabó don Ela. El discurso pregrabado del Barquero hace eco por las calles empedradas del pueblo, como si incluso las frías paredes de las casitas se entregaran al luto. Ese audio repite una y otra vez la información del velorio para que nos unamos a la pena que también debería embargar a la familia de don Ela, si no lo hubieran dejado aquí hace unas semanas. Cada vez escucho más lejos la bocina y el traqueteo de la camioneta destartalada provocado por los empedrados; y por donde quiera que pasa el Barquero ladran los perros, y la gente hace la señal de la cruz al ver pasar su camioneta, como si ahí trajera cargando al muertito.

LOS T EST IG OS DE MADIGAN N.0 15 | C UENTO | Astr id Black | E l Barquero

33


CU EN TO Astrid Back

34

Escuché a mis viejos hablar del tema en la cocina recordando a don Ela, y como somos un pueblo tan chico, todos nos conocemos: si hay boda, lo sabemos; si hay bautizos, también; que una pachanga nomás porque sí, ahí vamos los colados. Por eso cuando alguien de fuera llega, uno se da cuenta nomás al verlo. Nuestras costumbres son diferentes a las de la ciudad. Cuando me fui pa’la capital me sorprendió lo fastidiosas que son algunas personas allá, nada que ver con los de mi pueblito; y precisamente hablando de los foráneos, hace unos 20 años llegó aquí un tipo llamado Roy, decía que venía del norte, pero nunca supimos exactamente de dónde, porque cada que alguien le preguntaba mencionaba un lugar distinto. Roy era medio güero, y mi mamá decía: “Éste tiene sangre gabacha”. Por aquel entonces, coincidió la llegada del “Güero”, como le decíamos aquí, con la muerte de doña Carmelita, una viejecita curandera de 90 años que, la mera verdad ya la rondaba la Pelona. Aquí en la región se hizo famosa por su oficio de brujería, su tino pa’ayudar con los males de ojo y los de amores. Después del velorio, los vecinos la llevaron sobre una tabla en procesión, derechito pal’panteón y por las calles se le dio el último adiós como aquí es la costumbre. La caravana en procesión exhibió ante todos la palidez de la piel arrugada de doña Carmelita, que parecía despedirse del pueblo. Mi mamá dice que el Güero quedó como estatua viendo la marcha, y al reaccionar de inmediato sacó una cámara que cargaba en su mochila para tomar fotos de la peregrinación. En un momento se aproximó a mi mamá y le preguntó qué sucedía: –¿No ve que la llevan muerta pal’ panteón? –dijo mi mamá. –Pero, ¿por qué así?, sin ataúd, exhibiéndola –respondió el Güero.

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


–Es la costumbre aquí, joven –finalizó mi mamá alejándose de aquel curioso foráneo. 22 de octubre «Un hombre, que no vi de dónde salió y caminaba detrás de mí, escuchó mi curiosidad por aquel sepelio. Cuando me alcanzó, enseguida palmeó mi espalda y me dijo: “Ven, Güero, yo te digo qué pasa. Aquí la costumbre es llevar a los difuntos en una tabla, descubiertos, porque hace muchos años la gente de la comunidad era más pobre y no tenía para un ataúd. Había señores que trabajaban la madera y los construían, pero eran caros. Por eso, la gente prefería llevar a sus muertitos en tablas y, a veces, por pudor los envolvían en sábanas. Aunque ahora sí que ya es mera costumbre; por esa razón, Carmelita que ya tenía muchos años, prefirió que la llevaran como es la tradición”. »Le expliqué que nunca en mi vida había visto algo parecido, pues en la ciudad, como en la mayoría de lugares, la usanza dicta que se vele a los muertos en ataúd y se los lleven en carroza al panteón. »Le pregunté al hombre cómo se llamaba, y me respondió: Álvaro Carreto. Allí me comentó que tiene un oficio extraño y curioso a la vez. “Yo me encargo de dar los anuncios de las muertes”. Le respondí que mi nombre es Roy y que vine a tomar fotografías del lugar para un fotoreportaje de pueblitos en México. »Parecía emocionado, y me comentó que aquí encontraría, literalmente “chulada de lugares”, y sugirió que empezara por el panteón ya que íbamos para allá. LOS T EST IG OS DE MADIGAN N.0 15 | C UENTO | Astr id Black | E l Barquero

35


CU EN TO Astrid Back

36

»Ese hombre ojeroso me provocó mucha curiosidad y no pude evitar preguntarle más sobre su trabajo. Porque tal cosa ha dicho: se encarga de dar los anuncios de las muertes. –¿Cómo es eso? –le pregunté. –Con mi camioneta, traigo una bocina y paso por todas las calles del pueblo, anuncio a todo volumen quién ya se peló. Ahí les digo de las misas y en dónde se velarán los cuerpos –me respondió. »Cuestioné si era su único trabajo y me dijo que sí; que los habitantes del pueblo le dan algunas monedas para ayudarle en el mantenimiento de su camioneta y poder comprar material para las grabaciones de los anuncios. –¡Ah cabrón! ¿Así que, si no hay muertito, no hay chamba? -le dije en tono de broma para simpatizar más con él, pues nos estábamos conociendo. –Algo así, Güero, por eso la gente me da una que otra moneda pa’echarme la mano. –Mira, ¡qué bien! Pagan para que no hagas casi nada– le dije sarcástico. »Aquella plática incomodó a don Álvaro, a quien se le borró la sonrisa, y cuando llegamos a la entrada del panteón cada uno decidió irse por su lado. –Aquí te dejo, Güero, que Dios te acompañe –me dijo don Álvaro, muy frío, sin mirarme a la cara, y una vez en el panteón se perdió entre la polvareda provocada por el cortejo».

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


23 de octubre «Me sentía fascinado por la primera historia que podría documentar, pues ya tenía algunas fotos del cuerpo de Carmelita sobre la madera astillada e imágenes de personas desconocidas para mí, quienes lloraban por aquella viejecilla, y algunas fotos de ese panteón lleno de tumbas antiguas, en cuya entrada, la mayoría eran de angelitos. Recordé la última vez que pisé un panteón en Monterrey para mi reportaje sobre el Día de Muertos en el que coleccioné aquellas historias abrumadoras, algunas de mujeres viudas que se quedaron completamente solas, hijos jóvenes que perdieron a sus padres, y aquellos papás que seguían llorando la pérdida de sus niños. »Una mañana, me comentó mi papá que se encontró a Roy en casa del talabartero don Luis, y que el Güero le pidió permiso para tomar algunas fotos de su trabajo, quien accedió, pero le pidió que no lo hiciera de sus nuevos diseños porque no estaban terminados. Mientras fotografiaba el exquisito trabajo de cuero como sombreros, cinturones, bolsas y hasta zapatos, entró por la puerta don Álvaro, saludando alegre como todas las semanas. Mi papá y don Luis le respondieron el saludo normal, pero Roy acentúo su énfasis: “¡Álvaro! Qué gusto volver a verte”. Este último cambió su expresión de alegría al desagrado, y contestó: “¿Quiubo Güero?”. »Don Luis sacó unas cuantas monedas y se las dio a don Álvaro; éste lo agradeció y antes de despedirse para continuar su recorrido, mi papá le dijo que lo buscara por la tarde en nuestra casa. El Güero salió detrás del Barquero. Así, gente del pueblo los vio alejarse por las callecitas, y LOS T EST IG OS DE MADIGAN N.0 15 | C UENTO | Astr id Black | E l Barquero

37


CU EN TO Astrid Back

luego a don Álvaro entrar en la tienda de doña Perita, en la juguería de Mati, en la cantina de don Polo; en cada lugar que visitaba, extendían la mano para darle algunas monedas; mientras, el Güero iba despacio, decían: haciéndose menso, quesque para tomar fotos. Pero, que clarito se notaba iba siguiendo a el Barquero». 25 de octubre «Sinceramente, me resulta muy extraño por qué la gente le da dinero a don Álvaro sin que él les brinde, realmente, un servicio como tal. No solo los comerciantes lo hacen; lo vi entrar en las casas, y un señor en la talabartería le pidió que se vieran por la tarde, lo más seguro para lo de las monedas. »Y es que don Álvaro me recuerda al mito griego del Barquero del Hades, aunque el primero me resulta más siniestro, con su mirada y su sonrisa que incomodan. »Desde el primer momento, mientras recogía su cuota de monedas, don Álvaro supo que yo lo seguía, pero nunca volteó a verme, caminó sin premura como si esperara que fuera tras él hasta el final de su camino. No tardamos en recorrer la mayor parte del pueblito, y finalmente llegamos a una casucha, que por lo que supe más tarde, es de las primeras que existieron aquí. El Barquero se detuvo frente al cerco viejo, quitó una pesada cadena oxidada que cerraba ambas puertas de metal, sacó una llave para abrir el gran candado que cuidaba de aquella casa y dijo sin voltear a mirarme: –¿Recuerdas, Güero, aquel día en el panteón? Te dije que Dios te acompañara. –Sí… sí recuerdo –respondí nervioso.

38

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


–A veces, hay que encomendarse a él para no andar haciendo cosas tontas. Te invito a pasar a mi casa para mostrarte que me gano estas monedas honradamente –dijo, enseñándome las monedas que había reunido por la mañana. –No, es que yo… Mire, no quiero molestarlo don Álvaro. –¡Nah! ¡Qué molestia vas a ser!, si vivo solo y quiero enseñarte lo que guardo de la gente que se ha muerto en este pueblo y sus alrededores. »De pronto, un escalofrío indescriptible me recorrió todo el cuerpo. Abrió la reja, y comencé a caminar hacia atrás. Me miró y no pude hacer más que permanecer inmóvil por unos segundos. Le agradecí su amabilidad y le inventé que por el momento debía irme, que con gusto regresaría mañana para platicar. –Güero, estás haciendo un reportaje; si quieres saber más de mi trabajo, aquí tengo audios y mi espacio donde grabo todo lo que transmito. Mira, aquí tengo mi camioneta –dijo don Álvaro señalando su Ford 79. –¡Ah ya! –dije con alivio. Le prometí regresar más tarde porque necesitaba mi grabadora de audio y rollos para la cámara. –Te espero a las 6 –me dijo. »Mi papá también me comentó del rumor que corrió en el pueblo acerca de un audio que encontraron entre las cosas del Güero. Era su diario-cassette. Dicen que lo cargaba pa’todos lados porque hablaba con la gente, les preguntaba de sus vidas y sus trabajos, y el que más llamó la atención de la comunidad fue precisamente el último que grabó». LOS T EST IG OS DE MADIGAN N.0 15 | C UENTO | Astr id Black | E l Barquero

39


CU EN TO Astrid Back

40

25 de octubre de 2002 «Estamos en la casa de don Álvaro Carreto, él es habitante del pueblo que actualmente documento. Nos platicará sobre su vida y el oficio muy peculiar que ejerce. Cuéntenos sobre usted don Álvaro: –Ya lo dijiste; me llamo Álvaro y tengo años viviendo en el pueblo. Me dedico a dar los anuncios de las muertes de las personas de aquí, paso por las calles en mi camioneta y en una bocina que adapté a la troca pongo el discurso pa’que la gente se informe y vaya al funeral. –Pensé que usted era de aquí. ¿De dónde es, entonces? –De por aquí cercas… –Oiga, y cuando no hay muertes en el pueblo, ¿qué hace?, ¿a qué más se dedica? –Nada más. –¿Cómo está eso? ¿De qué vive, cómo se mantiene? –La gente me ayuda. –¿Le da dinero? –Sí. –¿Por qué? –Porque no se quieren morir… –¿Eso qué tiene que ver con usted? –Creencias… Cuando llegué al pueblo, la primera que me conoció fue Carmelita, la bruja. Me vio y me gritó: «¿A qué vienes?». Le respondí que a trabajar. Pero ella no me quería aquí, decía que ya había previsto que yo llegaría y que también soy como el ave de mal agüero. –¿Ella cómo supo que usted llegaría?

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


–Pues… era bruja, ¿no? –¿Y usted qué hizo cuando Carmelita le dijo todo eso? –Que yo nomás quería chambear, ya venía yo de otro lugar. Que debía cumplir mi trabajo, pues. –¿Qué trabajo era ese que debía cumplir? –Anunciar las muertes, alguien tiene que hacerlo. –Oiga, pero yo nunca escuché de eso hasta que llegué aquí. ¿Por qué alguien tendría que anunciar las muertes? –A mí me gusta este trabajo, y me dije «¿por qué no hacerlo?». –¿Y por qué le dan monedas? –¡Eh! Meras creencias. –Álvaro, ¿sabes?, me recuerdas a un personaje mitológico de Grecia: el Barquero. –¿Ese quién es? ¿Por qué o qué? –respondió con fingida sorpresa. –A ti las personas del pueblo te dan monedas para ayudarte, y es curioso que cuando la gente fallece, eres tú quien anuncia que ya no están aquí. En la mitología, este barquero conducía las almas de los muertos a su destino. Pero debían pagarle unas monedas para que los llevara, por eso enterraban a los difuntos con una moneda debajo de la lengua, e incluso se las colocaban sobre los ojos, para pagarle al barquero de almas. –Güero… La muerte… siempre llega a tiempo. Nunca antes y nunca después, justo cuando tiene que. Yo estaré sin chamba mientras no se muera nadie. Pero eventualmente habrá alguien por quien venga la Flaca. Nada es casualidad en la vida, todo tiene un porqué. Y tú bien sabes… que no llegaste aquí por mera casualidad ni buscando hacer

LOS T EST IG OS DE MADIGAN N.0 15 | C UENTO | Astr id Black | E l Barquero

41


CU EN TO Astrid Back

42

reportajes. A ti te buscan en el norte porque hiciste algo feo, muy malo. Te andas escondiendo y viniste a dar aquí porque el pueblo está alejado de todo y casi nadie lo conoce. –¿Quién, quién… quién es? ¿Por qué sabe eso? Álvaro… no se acerque… ¡deje de mirarme así! –A veces Dios se olvida de la gente… especialmente de los que no se arrepienten de su inmundicia». Allí, dicen, terminó el audio de lo que pasó en casa de don Álvaro; pero, luego de escuchar ruido o neblina auditiva durante un buen rato, surgió lo que en realidad parece ser la última grabación en la que se escucha al Güero llorar desesperado, como si confesara algo: «Encontré al Barquero y se quiere llevar mi alma… Sabe lo que hice, seguro le hablaron del norte, por eso me mandaron aquí. ¡Él sabía que yo llegaría! Hubo algo que me condujo de inmediato hacia él y cometí la estupidez de cuestionarlo. Me pidió unas monedas antes de comenzar a grabar en su casa y me negué. Le dije que no le pagaría por su entrevista ¡Qué pendejo fui! ¡No me las pidió por eso! ¡Mamá! ¡No quise dejar a mis hijos sin su madre! Los malditos celos fueron más fuertes que yo. Perdí la cabeza y ya no supe de mí, eso me consumió, igual como lo está haciendo el miedo ahora. ¡No quiero morir! Por favor, pide porque mis niños me perdonen. Te quiero, aunque nunca te lo dije. Discúlpame, mamá, por lo que hice y no ser el hijo que esperabas». Al día siguiente encontraron al Güero ahogado en el río. Pero don Álvaro o el Barquero, como empezó a llamarle la gente después de escuchar sobre ese audio, no fue la última persona que vio a Roy con

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


vida, pues por la noche algunos lo vieron desesperado y llorando, jugando con su grabadora, pasándola de una mano a otra, en la cantina de don Polo. Dicen que el Güero estaba perturbado, que hablaba solo y alucinaba con que alguien lo seguía. Repentinamente, salió corriendo de la cantina con su mochila al hombro. Cuenta mi padre que la leyenda del Barquero comenzó a ganar presencia después de que al Roy se lo cargara la pelona, al igual que los muchos muertitos que le siguieron. Es más, desde la muerte de la bruja, porque dicen los allegados a Carmelita que ella antes de morir se negó a pagarle las monedas de siempre a don Álvaro; la enfermedad de ella la aquejaba, ya no tenía para ayudar a ese hombre y, entonces, todo pareció tener sentido. Lo último que se sabe es que doña Carmen le dijo al Barquero: «Ayúdame tú, ¿no ves pues que ya no puedo ni pararme de esta cama? Mira que eres ingrato». Don Álvaro atinó a decirle: «Está bien pues, te voy a dejar tranquila Carmen, a partir de hoy». Esa misma noche, doña Carmelita se peló al otro mundo. En el caso de don Ela, después de que su familia lo abandonara, el hombre se alejó de todos. Aunque nunca fue una persona de buen carácter, sino todo lo contrario (malhumorado y malencarado), en su forrajera se conseguía de todo lo que uno necesitara. Y justamente hace poco, según mi papá, días antes de que falleciera don Eladio, lo vieron discutir con el Barquero: –¡Ora cabrón, lárgate de aquí! Te he aguantado mucho; ponte a chingarle en otro lado, quieres que todos te sigamos manteniendo. Nomás porque mi vieja te pagaba a escondidas de mí, pero ya estuvo

LOS T EST IG OS DE MADIGAN N.0 15 | C UENTO | Astr id Black | E l Barquero

43


CU EN TO Astrid Back

bueno de aguantar huevones como tú, como la bola de cabrones de mis hijos y la pinche vieja de su madre –gritaba don Ela afuera de su forrajera. –Está bien, Eladio, voy a chingarle por otro lado, como tú dices. Te voy a dejar tranquilo, ya lo verás –contestó el Barquero, subiéndose a su vieja compañera Ford. En cuanto al Barquero, la policía lo cuestionó en su momento sobre los audios y el diario auditivo de Roy, aunque no se le acusó de nada, porque no hubo rastro definitivo alguno. El Barquero llegó al pueblo siendo joven, nadie sabe realmente de dónde vino. Solo dicen que se asentó aquí para quedarse. Esa mirada que tiene, la misma a la que hacía referencia el Güero, nadie lo acepta, pero es la que probablemente hace que la gente siga dándole las monedas hasta el día de hoy. Porque si uno se encuentra con esos peculiares ojos durante la noche, es mejor cargar con tus moneditas de rigor. Por cierto, anoche me fui de peda, y tengo el vago recuerdo de habérmelo topado en la calle, si me pidió sus monedas no me acuerdo y si se las di, menos. Mañana cruzo pal’gabacho, y estoy rogándole a Dios que, haya sido como haya sido, espero que mi cuota con el Barquero haya sido cubierta.

44

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


Natalia Castillo Rodríguez

Tlazoltéotl

Acuarela sobre papel fabriano

1,70 x 80 cm L O S

PAUSAGRÁFICA

@natfdaa

T E S T I G O S D E M A D I G A N N . 0 1 5 J U L I O 2 0 2 2

45


Citlalli Mendoza

L O S

T E S T I G O S

D E

M A D I G A N

N . 0

1 5

J U L I O

2 0 2 2

46


Cuadro

de resiliencia* de Armando

Salgado es un libro integrado por cuatro voces ficticias provenientes de distintos lugares geográficos. En esta polifonía nos hablan Zazil Calakmul (Campeche, 1982), Silvia Esquivel (Tzintzuntzan, 1979), Pedro Misol-Ha (Comitán, 1985) y Otilia Peñaloza (Arcelia, 1987) a través de las letras del autor. A decir del autor: «Esta obra surge de la multitud de hablas que replantean nuestros imaginarios a través de mitos, leyendas e historias de familia». Esta multitud de voces se podrían leer por separado o como una sola obra, la cualidad de la inclusión de estas voces masculinas y femeninas reside en que podrías acercarte por separado a cada uno de los apartados del libro y verlo como un solo poemario o leerlos juntos y notar cómo todos estos están conectados, ya sea por los temas que abordan o por las emociones a las que nos remiten. Así, los temas que aparecen a lo largo del texto son la muerte, la enfermedad (aneurisma), el nacimiento, lo materno, la infancia y la familia. Además, hay también destellos de erotismo, y se hace mención de remedios y venenos presentes en la sabiduría de nuestros abuelos y abuelas. A la par, también es un libro quinestésico ya que evoca nuestros sentidos la fuerza de sus imágenes, no solo tienen impacto en nuestra imaginación, sino que también despiertan el gusto y el olfato, por ejemplo, al hablar del Día de Muertos se dice lo siguiente «(…) Durante la noche las ofrendas respiraban el humo de los comales. La canela y * Salgado Armando (2021) Cuadro de Resilencia, México, Consejo Estatal para la Cultura y las Arte Chiapas. Premio Nacional de Poesía Rodulfo Figueroa 2020

LOS T E ST I G OS D E MADIGAN N.0 15 | R E SE ÑA | Citla lli Me n doza | Cuad ro d e res iliencia de Arm ando Salgado

47


RE SE ÑA Citlalli Mendoza

el ponche de fruta, todos nos enroscábamos en una misma nariz: la dirección del incienso como flecha confusa y el olor de la calabaza junto al vaso de leche, corrían como niños que descubren sus primeros pasos». El poemario conecta con elementos socioculturales anclados a las geografías desde las que nos hablan estos seres que habitan la voz de Armando, ejemplo de ello son los versos que nos remiten a la migración, la pobreza, la revolución, las creencias y costumbres. Además de lo anterior, en el libro hay una búsqueda por la palabra precisa y también el autor nos da algunas definiciones que me parece importante retomar por la fuerza de sus imágenes. «La locura es el ojo abierto del gran arenal». «Y respirar por primera vez es un acto marítimo». «El mar es la escritura de las primeras cosas». «Es el cuerpo otro acuario del mundo». «El diablo es un poema con bardas infinitas». «La añoranza es un terrón de piloncillo y café sobre la mesa». «La eternidad es río que arrastra nuestros días».

48

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


«El calor es un indocumentado que cruza nuestro cuerpo». La riqueza de este poemario también es notoria en los recursos literarios y visuales, por ejemplo, algunos textos que están de cabeza, porque «el mar se lee de cabeza». Además, juega con la alineación del texto, algunos aparecen alineados a la derecha y en cursivas y en poemas de Pedro Misol-Ha aparecen fragmentos de Cien años de soledad de Gabriel García Márquez. En el último apartado podemos ver fotografías que forman parte del acervo de Armando Salgado acompañadas de descripciones que interactúan con la imagen. Como mencioné, este texto se integra por cuatro voces. Les iré platicando de cada una. La primera es la de Zazil Calakmul, cuyo nombre nos remite a la cultura maya y ella nos habla de lo materno, siempre vinculado a lo marino, a ese fondo acuoso y cálido en el que todos habitamos antes de nacer. En las palabras de Zazil hay ternura, pero también la vivencia de la enfermedad del hijo y el envés del lado materno, es decir, lo paterno que aparece vinculado a la insatisfacción, pero también al acompañamiento. Así, podemos leer: El agua en su invitación Al desprendimiento. Un paso firme y, a la vez, El corazón en picada: Sus pliegues Junto a las manos de la madre Posan nuestro cuerpo En la ducha LOS T E ST I G OS D E MADIGAN N.0 15 | R E SE ÑA | Citla lli Me n doza | Cuad ro d e res iliencia de Arm ando Salgado

49


RE SE ÑA Citlalli Mendoza

Ella nos enseña a ir y venir Como las olas, Remueve nuestros pasos Y con ternura Enjabona nuestros miedos. En el segundo apartado, los poemas de Silvia Esquivel de Tzintzuntzan de la Isla de Janitzio nos acercan al Día de Muertos. En él nos recuerda cómo en este ritual los vivos se mezclan con los muertos; aparecen las historias del abuelo y hay también aquí una nostalgia por la infancia y congoja al rememorar un pasado en el que no había detonaciones de cañones de granizo y donde el «progreso» no había aún cobrado factura. En el poema «Es día de muertos», podemos leer: «Las fogatas Se encienden alrededor del lago El silencio descansa Y señala de forma pueril La orilla de la isla. La luz muestra a la distancia Un portón de cempasúchil. Poco a poco, la lancha se abre camino Entre las almas que se han perdido. Es Día de Muertos: Mi corazón cuarteado flota».

50

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


La poeta también nos recuerda que: «[Para] evitar la asfixia: [hay que] viajar acompañado». La tercera voz es la de Pedro Misol Ha. Aquí Armando Salgado, jugando con la intertextualidad, retoma algunos fragmentos de Cien años de soledad de Gabriel García Márquez. Este apartado lleva por título «Río de hormigas», y en este río se habla de la familia, la muerte, el tiempo y el dolor, temas universales anclados a una vida particular. Así, en su poema «Melquíades», se lee: No solo es el olor del demonio Como dijo Úrsula: Hay que sumar un aura de tristeza Y el rostro de todos los siglos. Melquíades tuvo la capacidad De conocer el otro lado de las cosas, Descifrar no solo Las claves de Nostradamus, Sino el futuro exacto de una familia Cotidiana, sistemática y visceral ante la pesadumbre. El dolor humano es la fiebre Que más se contagia. Finalmente, aparece la poeta Otilia Peñaloza con el poemario «Tierra Caliente». Ella, a través de poesía y prosa poética acompañados de LOS T E ST I G OS D E MADIGAN N.0 15 | R E SE ÑA | Citla lli Me n doza | Cuad ro d e res iliencia de Arm ando Salgado

51


RE SE ÑA Citlalli Mendoza

fotografías, habla de la supervivencia en una tierra hostil marcada por el «hambre histórica», la migración y múltiples formas de violencia. También muestra cómo una familia puede enseñarnos de sus experiencias en un lugar en el que El hambre y la historia Hierven A más de cuarenta y cinco grados. De este apartado comparto el siguiente poema: «Hambre histórica» Muevo los dientes del fogón, Atizo el pegamento, Pronto me remendaré la mandíbula. Don Roque aún no abre. El letrero anuncia Cajitas de pan de Teloloapan. Da lo mismo si te arrebatan La comida de la boca O de la despensa: El hambre se yergue De finca en finca.

52

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


Atraviesa cercas y veredas Aunque use cubrebocas. Son los usos y costumbres El lenguaje del estómago Traduce el chillido de las tripas Las malas noticias Se sirven solas Y el porvenir de los políticos Tiene estómago escurridizo.

Acercándonos a la parte final del libro aparece una fotografía tomada por Salgado en la que se contemplan: «Condiciones extremas, y un lecho de esperanza. Un grupo de vacas pasta el paisaje seco. Una familia feliz nos da cátedra de resiliencia».

LOS T E ST I G OS D E MADIGAN N.0 15 | R E SE ÑA | Citla lli Me n doza | Cuad ro d e res iliencia de Arm ando Salgado

53


TRA DUC CIÓN

Robert Bly/ Miguel Díaz

L O S

T E S T I G O S

D E

M A D I G A N

N . 0

1 5

J U L I O

2 0 2 2

54


(1926 - 2021)

Nació en Minnesota, en una comunidad de granjeros de origen noruego, asistió a Harvard donde fue compañero de John Ashbery, Adrianne Rich, Kenneth Koch, Frank O’Hara, Donald Hall, entre otros. Escritor prolífico de poesía y ensayo, así como de traducciones muy importantes para la literatura de su país, al presentar al público las obras de autores como Vallejo, Machado, Neruda, Lorca, Rilke, Trakl, y de poetas noruegos como Tomas Transtömer y Gunnar Ekeloef. Su escritura abarca muchos temas, entre los que se destaca su oposición a la guerra o su crítica a los roles de género, en especial a la masculinidad tóxica de la cultura americana; que se conjugan con su activismo civil y político sobre la guerra de Vietnam o el Men’s Movement. Su poesía puede verse como una aproximación lírica a la naturaleza y a la soledad del hombre, en una estética no modernista, y de una simplicidad íntima que vuelve las experiencias comunes en un escape casi místico, en un movimiento elegante que a veces acaba en gesto irracional o en una reflexión crítica, con mucha imaginación y un ritmo delicado. En esta pequeña colección de poemas podemos encontrar meditaciones sobre lo humano frente a la naturaleza, los animales, las plantas, la luna (siempre la luz de la luna), que cuestionan la existencia de la civilización y sus absurdos. LOS T E ST I GOS DE MADIGAN N.0 15 | P O E SÍA | Poe sía de Robe r t Bly. Traducción de Miguel D íaz

55


PO ES ÍA Robert Bly/ Miguel Díaz

DESEANDO SUNTUOSOS CIELOS Nadie se queja en la tribu de las ostras, Y las langostas tocan sus guitarras de hueso todo el verano. Solo nosotros, con nuestros pulgares opuestos, queremos Estar en el Cielo, y que Dios venga, otra vez. No hay fin para nuestras quejas; queremos Un planeta cómodo y un suntuoso Cielo Pero la…

AL TOMAR LAS MANOS Al tomar las manos de alguien que amas Las ves como delicadas jaulas… Aves pequeñas cantando En las praderas apartadas Y en los profundos valles de sus palmas.

56

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


DESPUÉS DE UN LARGO AJETREO Al fin salí a caminar después de semanas frente al escritorio. ¡Ya sin luna, arando bajo los pies, sin estrellas ni un rastro de luz! ¿Y si un caballo viniera galopando hacia mí en este campo abierto? Todos los días que no he pasado en soledad habrían sido en vano.

LOS T E ST I GOS DE MADIGAN N.0 15 | P O E SÍA | Poe sía de Robe r t Bly. Traducción de Miguel D íaz

57


PO ES ÍA Robert Bly/ Miguel Díaz

EL HOMBRE Y EL OSO Imagina que hay un oso y un hombre. El oso Conoce su familia —viejos guijarros, barriles de cincuenta y cinco Galones, pinos enormes bajo la luna, Un saco abandonado en el suelo; y el hombre se aproxima cautelosamente— Él ha leído a Tolstoi, conoce algunas sinfonías. Eso es todo. Cada uno ha perdido un hijo. El del oso Lo mató una trampa, el del hombre lo mató un oso. El hijo estaba medio ebrio, solo en el bosque. El oso extiende sus negras garras sobre la tierra. Tampoco es tonto. Sin pelaje, sería un hombre. La gente Dice que tanto el hombre como el oso reciben una señal Que viene desde allá lejos, cerca del Polo Norte. La antigua abuela de ambos, del oso y del hombre, Tejida entre las estrellas, desde arriba los observa.

58

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


DESPUÉS DEL TRABAJO I Después de tantos pensamientos extraños, Pensamientos de puertos lejanos, y vida nueva, Llegué y hallé la luz de la luna acostada en el cuarto. II Afuera cubre los árboles de un sonido diáfano, El sonido de campanarios, o de agua fluyendo bajo el hielo, El sonido que el sordo oye a través de los huesos de su cabeza. II Conocemos el camino; como la luz de la luna que eleva las cosas, así en una noche como esta, Los caminos se adelantan, y todo clarea.

LOS T E ST I GOS DE MADIGAN N.0 15 | P O E SÍA | Poe sía de Robe r t Bly. Traducción de Miguel D íaz

59


Diego Romo

L O S

T E S T I G O S

D E

M A D I G A N

N . 0

1 5

J U L I O

2 0 2 2

60


Cuando

escuché los corridos tumbados

me situé en la extrañeza: algo me mantenía, pero no sabía qué era. En realidad, no hace falta buscar mucho en internet para leer que este género es reciente e irse con la idea de que se define como una combinación de hip hop, rap, trap y música regional mexicana o sierreña, con temas sobre sustancias adictivas y violencia. Sus exponentes son jóvenes, hablan del contexto que siempre habitamos, pero visto a su manera: Natanael Cano, Dan Sánchez, Junior H son nombres que emergieron de la disquera Rancho Humilde y que han contribuido al género. Pero creo que para empezar hay que dejar claro que si nos gusta la música hay que saber aprender y estar dispuesto a hacerlo. Hay que saber escuchar para entender, por ejemplo, que estas voces surgen desde las nuevas generaciones, y que cada generación vive sus géneros musicales y los temas sobre los que se habla o se prefiere callar. Y esto es el qué y el cómo. Entre todos los músicos de corridos tumbados, llamó mi atención Junior H, nombre artístico de Antonio Herrera Pérez, nacido en Guanajuato en el 2001, y a quien escuché por primera vez en una canción de Natanael Cano. Se ha convertido en uno de sus principales expositores y cuenta con una amplia discografía considerando su edad. Entre sus álbumes está Mi Vida en un Cigarro (2019), Atrapado en un sueño (2020), $ad Boyz 4 Life (2021) y su más reciente producción, bajo el sello de Z Music Group y Rancho Humilde, Mi Vida en un Cigarro 2 (2022). Lo destacable de este artista es que se trata de un storyteller de las nuevas generaciones. En una entrevista con Vice, Junior H comentó que los corridos tumbados se distinguen principalmente por la letra, que él LOS T E ST I G OS DE MADIGAN N.0 15 | R E SE ÑA | D iego Romo | Junior H Mi vid a en un cig arro 2

61


RE SE ÑA Diego Romo

habla de lo que le sucede, de sus cosas cotidianas; y si somos objetivos, podríamos coincidir en que más importante que saber si de verdad los artistas viven o no lo que cantan, es que sus canciones se sientan como si fueran también parte de nosotros: el placer y sus excesos, las drogas y su (ab)uso, las tentaciones, el duelo, la tristeza y la muy personal superación son cosas de las cuales (tal vez) no todos escribimos, pero nos atraviesan, las vivimos y reflexionamos. En este último álbum nos encontramos ante escenarios que conforman pequeños atisbos de una realidad que se vive en el país. Con 21 canciones y una hora y veinte minutos, el álbum se sostiene musicalmente en los ritmos melódicos y violentos de las guitarras y en un fraseo bastante cuidado, más propio del rap y los juegos de palabras que del tono lírico al que la música regional se suele apegar. Además, muestra al menos cuatro ejes que funcionan como un leitmotiv general: la muerte y el duelo, las drogas, los placeres y las tentaciones, y la vida. En Mi Vida en un Cigarro 2 lo cantado no pretende solo quedarse en una descripción de los hechos, sino que es asumido e Junior H - Mi Vida en un Cigarro 2, Warner Music Latina ®, 2022 interpretado por una voz que habla Z Records / JHRH también desde lo suyo. En el álbum se canta de las despedidas, de aquellas que nos arrebatan a alguien, se canta para recordar y para hacer que la memoria hable. “Esta vida” es acelerada como galope de caballo y “Nunca tristes

62

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


siempre locos” corre más lenta y cadenciosa, pero ambas evocan a quienes no están, y celebran que de lo que se va, algo siempre queda. También sobre la opulencia, el exceso y la superación se canta, y “Como Jordan” describe el éxito y el dinero, la motivación por encima de la precariedad y la envidia: el viejo lobo que es como Michael Jordan, porque anda “con un pelotón en la mano” y porque ambos pueden ser considerados los mejores en su clase, es el mismo que para ayudar a estudiar a su hermana “bien pilas se puso a chambear”. En “Empresa Fly Club”, de ritmo de guitarras rápido y con el estira y afloja en la forma de narrar, se canta una imagen diferente del artista, esbozada antes por otros raperos: la del empresario. Junior H muestra un corrido con versos muy bien construidos, codificados (“cuando los vean zumbar la perla, amigazos / porte empresario, bajo el agua no la navegamos / son cachanilla’, pa los R, saludazos”); sugerentes (“pura vitamina la miel que sacamos / el dispensario que pegó, y no en el gabacho”); e irónicos (Dios que nos libras, cuídanos de esto”). El juego semántico apunta hacia dos posibilidades: el del dealer y el del músico que hace y vende su producto. Toda esa estética de manejar drogas, rodearse de mujeres, mover balas y loquear se canta también en otras canciones. “Qué hay que hacer” abre con una melodía que crece y cuando está arriba, calla: el silencio frena de golpe para adentrarnos en versos que hablan sobre el exceso de lujos, de placer y la ausencia de los enemigos. Junior H juguetea con la estructura de sus letras, experimenta con la musicalidad de las palabras, siempre con un argot que pretende sugerir la droga y la lujuria: “me pegué / un lineón de ‘p’ en las ‘b’s’ de una princess”; sin dejar de lado el guiño al Cartel de Santa: “soy un perro pa’ las perras”, LOS T E ST I G OS DE MADIGAN N.0 15 | R E SE ÑA | D iego Romo | Junior H Mi vid a en un cig arro 2

63


RE SE ÑA Diego Romo

64

y al gobierno: “póngase la verga atrás”. En “Extssy Model” hay una analogía entre el placer del sexo y las drogas, una celebración de las tentaciones, de la recaída y el deleite. “Número 7” habla del negocio que es casi una tradición casi familiar. El cambio que hay en el estilo del fraseo de las estrofas al de los coros es exquisito: con los acentos tan bien colocados que las palabras se alargan y se acortan, se les da forma: es un baile en los versos, una melodía vocal bastante dinámica. “El Pelos” es un dueto muy armonioso en el que alterna con Jr Torres, un corrido sobre una emboscada: un corrido que retoma lo que se dice popularmente: de que lloren en tu casa a que lloren en la mía: “no es que sea yo un hombre malo / tampoco soy un dejado / ellos me querían matar”. Este álbum representa el corrido tumbado: las melodías con ese toque de entre nostalgia y bajón; los cambios rítmicos y las armonías de las guitarras y bajos; los silencios y los versos sugerentes, los cantados y los que se parten y se construyen desde el rap; la narrativa en las letras, en las que hay una mezcla de lo personal con las historias de las que se habla: la droga, el amor, el placer, el duelo y la muerte nos marcan a todos nosotros. Digamos en otros términos más sofisticados e interesantes que los corridos tumbados son un registro, materializan el bagaje de experiencias que viven los jóvenes, sobre todo las que habitan un contexto que puede estar marcado de un lado por la pobreza y el narcotráfico y del otro por el despilfarro y éxito. Porque escuchar música es también iniciar un viaje por otras historias con otros contextos, y conocerlos para aprender a entenderlos, sin saber nunca de dónde vinimos y adónde llegamos.

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


Santiago Solís Montes de Oca

Del mismo cajón de las ideas para portadas que no pasan pero que después, con el tiempo, las terminas para ti. L O S

PAUSAGRÁFICA

@santiagosolism

T E S T I G O S D E M A D I G A N N . 0 1 5 J U L I O 2 0 2 2

65


RE CO MEN DA CI ÓN

Rocío Arellano

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022

66


En el libro

de cuentos El hijo deseado, es a través de pequeñas narraciones que se nos muestra el lado más oscuro de algunos personajes variopintos. Julián Mitre, escritor potosino, transmite aquello que muchos quieren decir pero que pocos se atreven: contar lo políticamente incorrecto y lo más salvaje del ser humano. Su libro logra transmitir al lector la incomodidad de la violencia diaria, normalizada (tristemente) hasta cierto punto respecto a lo que sucede tanto en el estado como a nivel nacional: la pobreza y la marginación latente en todos lados como acto de inicio para la tragedia. Niños que crecen en situaciones violentas, y que cometen actos repulsivos, como es el caso de los cuentos «La pata», que hace una referencia clara al relato «La pata de mono» (1902) de W. W. Jacobs, humorista británico; o «Intenté besar al diablo», que podría formar parte sin problema alguno de la visión cruda de Luis Buñuel y su película Los olvidados. Con palabras duras, sin tapujos ni convencionalismos, nos lleva a conocer lo que habita en la oscuridad: padres que no quieren serlo, madres que nunca debieron serlo, hijos deformes y maliciosos.

LOS T E ST I G OS D E MADIGAN N.0 15 | Roc ío Arellano | Recom endación literaria: E l hijo d es ead o de Julián Mitre

67


RE CO MEN DA CI ÓN Rocío Arellano

En este libro aparecen dos cuentos «Cabrón muchacho» y «Beatriz», sobre un sicario llamado Anselmo, un personaje repulsivo y decadente, además de ser híperviolento. Un reflejo también del psicópata Anton Chigurh de la novela de Cormac McCarthy, Sin país para los viejos. Julián ya ha contado algunas de sus aventuras anteriormente, pero es en El hijo deseado que conoceremos más sobre su infancia y cómo es que terminó siendo lo que es. Este personaje bien podría contar con todo un libro de sus aventuras, tan solo por los muchos matices que le confiere el autor –bastante retorcido también– y que, en el género criminal sería, por demás, interesante de leer. Mención aparte merecen las imágenes que acompañan todos los cuentos, realizadas por Violeta García, también escritora y artista visual, quien, con humor negro, muy acorde con el del autor, nos presenta la visión de cada relato en ilustraciones explícitas que no dejan lugar a dudas sobre lo que se nos viene encima. No se dejen engañar por el título, en El hijo deseado leeremos mucha mala leche.

*Con motivo de la publicación del libro en su versión física.

68

LOS TESTIGOS DE MADIGAN

N.0 15

JULIO 2022


Sergio Grande

Perra hambre, perro empacho

2022 Serigrafía L O S

PAUSAGRÁFICA

@seryogrande

T E S T I G O S D E M A D I G A N N . 0 1 5 J U L I O 2 0 2 2

69


N.0 15

JULIO 2022

W W W. LO ST E ST I G O S D E MAD I GAN . C O M


Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.