Jorge Etcheverry Arcaya

Armado de la resistencia de Che Guevara te Jorge Etcheverry Arcaya Daría una mano, pero todo no está perdido.C A N A D Á

Cochabamba, 1812

Ya desde antes de la asignación final del nombre a los países configurándose en esa extensión que iba desde las purezas astrales de las mesetas a pantanos cordilleras desiertos ciénagas abismos marinos ya desde esos inicios las mujeres esgrimían su ser que da vida en esas geografías de esa continente mujer desde entonces—desde antes—la protegen se sacrifican por ella imponen y defienden sus territorios y derechos así en este caso cuando en el alba de Bolivia esas mujeres desafían la desidia y el temor de los hombres de la población—ellas ponen el pecho a las lanzas tizonas y arcabuces de los godos cuando la América entra en crisis quizás podríamos repetir con Belgrano que escribió que al pasar la lista de soldados en la noche “un oficial de cada cuerpo militar preguntaba en voz alta ¿Están presentes las mujeres de Cochabamba?” y la antiestrofa era “Gloria a Dios han muerto todas por la patria en el campo del honor”

Y ellas dijeron en Cochabamba en 1812 cuando los varones contemporizaban retrocedían dudaban frente al conquistador Goyeneche. “Si no hay hombres nosotras defenderemos” Y esa América todavía está en el crisol y más que nunca necesita a sus mujeres.