EL AULLIDO
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NUESTRA GENTE
EL NADADOR HUMILDE Entrevistamos a Javier Moreno Lorenzo, alumno de 2ºC de Bachillerato, un gran campeón de natación y, a la vez, una persona sencilla y humilde. Lo primero: dinos quién eres. Mi nombre es Javier Moreno Lorenzo, y practico un deporte llamado salvamento que, sumado a la natación, es poco conocido . El club en el que estoy entrenando es el C.N.Albasit, que aunque no seamos muchos nos hacemos notar en los resultados. Explícanos de dónde te viene la afición por la natación y cómo empezaste en ese mundo. De pequeño no hubiese creído que practicaría este deporte, ya que, como a la mayoría de los chicos, yo lo que quería era jugar al fútbol. Mis inicios en la natación tienen un aspecto cómico, si se puede decir, ya que empecé por un “chantaje” que me hizo mi padre con un videojuego. ¿Cuál es tu modalidad preferida? En natación he nadado todos los estilos, pero me considero librista ya que es en la que mejores resultados tengo. ¿En qué competiciones has participado? Teniendo en cuenta que empecé con nueve años, llevo muchas competiciones, desde provinciales hasta campeonatos de España en salvamento. ¿Cuántas medallas tienes ya? En cuanto a los trofeos es un asunto del que no me gusta hablar mucho porque no soy un fanfarrón, pero en lo que llevamos de esta temporada llevo seis medallas y una copa. ¿Qué crees que te ha aportado la natación como persona?
La natación, aparte de ser el deporte más completo, me ha aportado una serie de valores muy importantes como el respeto hacia los demás, el sentimiento de compañerismo, aunque sea un deporte más individual que otros, y sobre todo, la sensación de que puedo superarme día a día y mejorar en todo lo que me proponga. ¿Piensas que en la natación puedes encontrar un fututo? Como en cualquier deporte, es muy difícil ganarse la vida con esto, en todo caso me plantearía ser entrenador, pero de ninguna manera tendría el futuro resuelto. ¿Qué piensas de la gente que se
ahoga en un vaso de agua? Para mí esas personas, sin ánimo de ofender, son personas que no quieren hacer algo que desean por una pequeña dificultad, se ponen barreras mínimas para excusarse si no logran una de sus metas. Si ves a un profesor tuyo ahogándose, ¿lo salvarías? Depende el profesor, jajajaja. Por supuesto, a la hora de la verdad tienes el tiempo justo para ayudar a una persona, y si además es un profesor, siempre te puede subir la nota, jeejeje.