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TENDENCIAS

EL PUEBLO MÁS COLORIDO DE MÉXICO

Las construcciones pueden transmitirnos emociones con tal solo obsérvalas y un claro ejemplo es el pueblo de “Sonora Art Village”. Aunque todavía es un proyecto, por su arquitectura colorida y las formas de las viviendas, de seguro más de una persona le gustaría vivir en una comunidad así para estar siempre de buen humor, estar alegres y que sus días sean siempre coloridos a comparación de las grandes ciudades donde predominan los edificios grisáceos y sin nada de vida.

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Los arquitectos rusos Davit y Mary Jilavyan crearon un poblado arquitectónico de estilo contemporáneo con tonalidades vividos en pleno desierto de Sonora, México. El proyecto surgió a causa de la necesidad de escapar de un mundo donde las malas noticias están a la orden del día en los últimos meses. Su idea inició cuando realizaron “Sonora House”, una residencia alegre y colo

rida cuya esencia se basa del diseño contemporáneo, con tonos llamativos y formas futuristas. Tras realizar esto, se les ocurrió en crear una villa basada en la arquitectura moderna. Davit ha comentado que no esperaba que la maqueta les gustara tanto a las personas, mucha gente le ha escrito sobre los sentimientos que le produjeron al ver su obra, inspirándolos por completo con tal solo apreciarla. Tras respetar la cuarentena y estar encerrado, se le ocurrió la creación del pueblito basándose de la casa de Sonora House. Sus autores de querían crear un sitio donde las personas pudieran sentirse diferente y

lejos de los colores grises con espacios en 3D brillantes, como si se tratase de una caricatura. El lugar es libre de prejuicios, su atmósfera irradia felicidad, amor y alegría.

LOS ARQUITECTOS LUIS BARRAGÁN Y RICARDO BOFILL LOS INSPIRARON EN SU CONCEPCIÓN Sonora Art Village tiene como inspiración los trabajos de Luis Barragán y de Ricardo Bofill, es una explosión de las emociones de las mentes rusas que crearon el pueblo. Además, mencionan que no es solo un proyecto de recintos residenciales, sino que es una propuesta artística. Cada vivienda es como si fuera una escultura única en su tipo con combinaciones de diversos colores para que sean vistosas y se complementen con los paisajes que inviten a relajarnos. No existe un sistema de organización, las residencias no están localizadas de manera

estratégica y cada una tiene su propio camino. Las casas no tienen el mismo tamaño, los arquitectos rusos fueron más allá y se atrevieron a dejar volar su imaginación en los interiores. En materia de geometría utilizaron arcos de medio punto, pasillos y escaleras debido al tamaño de las casas pareciéndose como si fuera un juego de Mario Bros. Sus ventanas blancas combinan con los colores de las fachadas, los hogares que están en las laderas cuentan con sus propias piscinas e inclusive frente a una piscina hay una cancha de básquetbol. Hay zonas con vegetaciones donde hay cactus gigantescos ya que ambos creadores los aman.

Con esta propuesta que rompe los esquemas de la arquitectura, expresan un lenguaje arquitectónico de geometrías mínimas y con acabados llamativos. Al caer la noche, las casas tienen luces nocturnas provocando que la villa se convierta en una zona luminosa. A pesar de que es una maqueta, Davit y Mary esperan que esto se pueda materializar a la realidad para que las personas sean felices en esta colonia viva a través de sus colores y puedan sumergirse en un ambiente completamente distinto.

Fuente: Arquitectura y diseño

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