“Cuevas de ali-BaBa y los 40 ladrones” Memorias de Ofelia Por Dr. Gerson Villa González
Las ciudades se han convertido en peligrosas donde no sabes que puede ocurrir en cualquier momento. Dentro y fuera del hogar se tiene la misma probabilidad de sufrir cualquier tipo de acción negativa por parte de un desconocido pero también de un conocido. Cuantos y cuantas personas y familias llegan todos los días a las ciudades en busca de una vida mejor, huyendo de sus lugares de origen por múltiples situaciones, pensando que su posibilidad de vivir una vida mejor va a ser mayor que la actual. Toda esta nueva población se va asentando en las zonas aledañas de las ciudades comiéndose a los estados vecinos, creando mega-unidades. Las casas en las ciudades van desapareciendo para dar paso a otro tipo de edificaciones caras y pequeñas, aumentando el número de personas por m2, porque el crecimiento de estas edificaciones es hacia arriba. Las ciudades continuamente están sufriendo de falta de servicios ya sea por mantenimiento, accidentes o simplemente porque el sistema está obsoleto y ya dio de sí. Cada vez las necesidades en servicios de las ciudades son mayores, es como un animal que no tiene llenadero por tal motivo están “robando” de otros lugares servicios vitales para abastecer a las ciudades, no para satisfacerlas sino por lo menos mantenerlas funcionales porque la demanda siempre es creciente. El aumento de empleo así como de bienes y servicios de la población no va a la par con su crecimiento. Caos y desesperación es ocasionado por este motivo en las ciudades, afectando los intereses de terceros.