ENTREVISTA AL DR. JOAO EDUARDO REYMUNDE

PUBLICACIONES BIOÉTICAS DE FUNDACIÓN JAIME ROCA

ENTREVISTA DE INTERÉS

ENTREVISTA AL

DR. JOAO EDUARDO REYMUNDE

Entrevistamos al Dr. Joao Eduardo Reymunde, Profesor de Bioética, Sociología y Filosofía de la Secretaria de Salud de Porto Alegre, graduado por la Universidad Federal de Rio Grande do Sul, Brasil, a raíz de su trabajo “Bioética Resolutiva: una nueva propuesta para superar la violencia”, al que consideramos de interés.

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¿CUÁL HA SIDO SU FORMACIÓN Y CÓMO HA INFLUIDO EN SU INTERÉS POR LA BIOÉTICA? Mi formación es en el área de las ciencias sociales, específicamente la sociología.

Mi trayectoria profesional estuvo durante muchos años ligada a la seguridad pública (sistema penitenciario) y la práctica docente. El interés por la Bioética nació de la provocación de una profesora quien hizo una disertación que proponía el conocimiento bioético fundamental en formación de profesores. Cuando comencé a leer sobre bioética, simplemente descubrí que todas las investigaciones que había hecho en el área de la violencia por 20 años, tenían sustento teórico en la bioética.

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¿CÓMO Y PORQUÉ ELIGIÓ EL TEMA DE SU TRABAJO? Elegí el tema de mi trabajo debido a la falta de investigaciones que aborden la violencia como un problema bioético persistente y emergente. La bioética es plural, puede y debe servir como un subsidio conceptual para muchos temas relacionados con la vida y el vivir, y todo lo que modifica este estado (vida y vivir) está relacionado con la violencia. No debe ser exclusivo de un segmento o disciplina. La intención del trabajo es dar visibilidad y despertar la curiosidad para que más investigadores avancen en el tema intrínseco de la violencia y la bioética.

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SU TRABAJO LLEVA POR TÍTULO “BIOÉTICA RESOLUTIVA: UNA NUEVA PROPUESTA PARA SUPERAR LA VIOLENCIA”. QUEDAN CLAROS TRES EJES: LA VIOLENCIA HUMANA, LA BIOÉTICA Y UNA DE SUS VARIANTES: LA “BIOÉTICA RESOLUTIVA”, A LA QUE PROPONE COMO SUPERADORA. ¿ESTÁ BIEN QUE AGREGUEMOS “HUMANA” A LA VIOLENCIA? ¿ES UN DISVALOR EXCLUSIVO DE NUESTRA ESPECIE? En mi investigación dejo claros tres ejes: violencia, salud y bioética. La bioética se presenta, por tanto, como una estrategia para evitar la violencia, quedando patente el significado relacional de esta tríada, en la que tenemos la concepción de bioética resolutiva.

Sí, trabajo con la definición de que la violencia es una característica del ser humano, ya que es un acto racional e intencional, requiere decisión y está dotado de sentido. Está bien agregar "humano" a la violencia. Es exclusivo de nuestra especie.

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¿CÓMO DEFINE EL TÉRMINO VIOLENCIA, EN ESTE CONTEXTO? Defino el término violencia en el contexto de la resolución WHA49.25 de la OMS de 1996.

Analizado social, histórica y culturalmente, tenemos que es un fenómeno del ser humano, dotado de intencionalidad (racionalidad y decisión), que busca de alguna manera dañarse a sí mismo o a otro (s) ser (es) vivo (s). Ya sea directa o indirectamente, explícita o implícita, física o psicológicamente, puede ser concreta o simbólica, singular o plural.

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¿Y A LA BIOÉTICA? ¿QUÉ SIGNIFICADOS SE CRUZAN CUANDO DICE QUE “LA BIOÉTICA ES UN EJERCICIO DE REFLEXIÓN PERMANENTE, YA QUE SE CARACTERIZA POR SER INTERDISCIPLINAR, MULTIDISCIPLINAR Y TRANSVERSAL EN SU ALCANCE”?

Se ha ampliado la definición de bioética. El vínculo exclusivo con el sector médico ya no sirve hoy. Se vuelve a las concepciones de Potter y Fritz Jahr, buscando una comprensión conceptual que acompañe la amplitud de la vida y el vivir. La teoría principialista no responde a las exigencias de la vida moderna. Cuando hablamos de vida, nos referimos a el sentido “bio” de la filosofía aristotélica, que sería el ejercicio de la vida humana (vivir) y no solo zoe (estar vivo).

La ética es un campo de estudio múltiple. El significado de respeto, empatía, derechos, dignidad, solidaridad, están presentes en diversos campos de estudios como la filosofía, la sociología, la medicina, entre muchos otros. Al aceptar la Declaración Universal de Bioética y Derechos Humanos de la UNESCO, necesariamente nos conduce a una reflexión permanente, que se traduce en una bioética moderna. Pero, hace falta decir que estar a favor de la vida es estar en contra de la violencia o las distintas formas de violencia. La bioética debe ser considerada por varias disciplinas para una mejor comprensión. Quizás este sea uno de los aspectos más apasionantes de la bioética, la característica y necesidad de una mirada holística y multidisciplinar (se extiende a varias disciplinas e investigaciones), interdisciplinar (que es común a dos o más disciplinas) y por tanto de forma transversal, el resultado está por encima de una sola disciplina (sociología, antropología, medicina, etc.) generando nuevos conceptos y entendimientos.

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VOLVIENDO A SU PROPUESTA DE UNA DETERMINADA BIOÉTICA, ADJETIVADA COMO “RESOLUTIVA”, ENTENDEMOS QUE TIENE UD. LA ESPERANZA DE QUE LA VIOLENCIA HUMANA PUEDA SER RESUELTA, DANDO FIN A UN PROBLEMA MILENARIO Y PERSISTENTE. ¿ES ASÍ? ¡Sí!! Como es un problema, ya entendemos que existe al menos una posibilidad de alternativa.

La visión contemporánea de enfrentar la violencia nos lleva a buscar soluciones basadas en evidencias. La metodología y el enfoque de la salud pública deben aplicarse en la lucha contra la violencia, incluso porque la OMS, a través de la resolución WHA49.25, declaró que la violencia es un problema de salud pública importante y creciente en el mundo. De la misma

manera que se enfrentaron y erradicaron otras epidemias, también se puede erradicar la violencia. Sería utópico decir que la violencia terminará, pero es demostrable que se puede reducir este problema milenario y persistente. La violencia nace junto con la humanidad, lo que prueba que es una característica exclusivamente humana. Pero cuando identificamos las diversas fuentes de violencia, nos encontramos con el camino contrario al que debemos tomar para solucionar este problema. Pero si comparamos varias sociedades del mundo, veremos que la violencia está presente en diferentes ritmos y en algunos países, tiene cifras muy bajas en comparación con otras enfermedades. Actualmente contamos con tratamientos para muchas enfermedades que solían victimizar a miles de personas, pero esto no significa que incluso con toda la tecnología, algunas personas aún puedan morir por una determinada enfermedad, incluso con tratamiento. ¡Así será con la violencia!

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UD. PROPONE UTILIZAR PROCEDIMIENTOS EPIDEMIOLÓGICOS PARA ESTUDIAR LA VIOLENCIA, HACIÉNDOLA PREDECIBLE Y EVITABLE”, EVITANDO ACTUAR SOLO SOBRE SUS CONSECUENCIAS. ¿CÓMO FUNCIONARÍA ESTO? El estudio incluye vigilancia, observación, investigación analítica y soluciones basadas en evidencia, seguimiento permanente y corrección de rutas en programas específicos de prevención de la violencia. ¡Conocer el ciclo completo de violencia es fundamental para detenerlo! Dado que el problema de la violencia es antiguo y persistente, existen estudios avanzados sobre este tema. El análisis a realizar puede residir en el desdoblamiento de la formulación de la Bioética Resolutiva. Si definimos conceptualmente que la violencia es racional (aunque parece lo contrario) e intencional, llevada a cabo por libre albedrío (decisión), nos acercaremos mucho a todas las orígenes de la violencia. Así, debemos identificar las causas y consecuencias de la violencia.

Si averiguamos cómo comienza y entendemos por qué comienza, estaremos muy cerca de encontrar una solución a este problema. Admitir que no hay solución es aceptar nuestra ignorancia e incompetencia como sociedad humana. Pero además de encontrar las causas, debemos crear efectivamente políticas públicas capaces de satisfacer las necesidades.

Actualmente, especialmente en América Latina, a pesar de conocer muchas de las causas, no se crean alternativas en la práctica. Ni siquiera la asistencia a quienes sufren violencia se realiza bien, es decir, no actuamos eficientemente sobre las consecuencias y mucho menos sobre las causas.

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¿QUE CAMBIOS PARADIGMÁTICOS PRODUJO LA ASAMBLEA MUNDIAL DE LA SALUD CON SU RESOLUCIÓN WHA49.25?

Esta resolución existe desde hace mucho tiempo, en la práctica solo unas pocas ciudades de Estados Unidos (y no es unánime en todo el país) modificaron sus conceptos sobre la violencia y cambiaron, rompiendo el paradigma de que la violencia es un problema policial. Las grandes ciudades estadounidenses, apoyadas por políticas federales del Departamiento de Salud, están implementando la lucha contra la violencia con un enfoque de salud pública. Las políticas preventivas y reparadoras están comenzando a mostrar eficacia y están siendo probadas por las tasas decrecientes de muerte y violencia.

Hasta entonces, siempre que se hablaba de violencia, se atribuía a un problema policial.

Pero la policía sirve para reprimir y no para prevenir. Cuando se llama a la policía, es porque todo lo que se pudo haber hecho antes salió mal o no se hizo. Si no construimos escuelas, tendremos que construir penitenciarías en el futuro. Pero el resultado será desastroso.

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¿QUÉ ES “LA CULTURA DE LA PAZ”, DEFINIDA Y PROMOVIDA POR LA ONU (ORGANIZACIÓN DE LAS NACIONES UNIDAS)?

La cultura de paz definida por la ONU es un conjunto de valores, actitudes, comportamientos y formas de vida que rechazan la violencia, y que apuestan por el diálogo y la negociación para prevenir y resolver conflictos, actuando sobre sus causas. La esencia de la bioética está contenida en este pensamiento. Respetar la vida y la dignidad de cualquier persona sin discriminar ni dañar. Practicar la no violencia activa, repeler la violencia en todas sus formas: física, social, psicológica, económica, particularmente hacia las personas más vulnerables, como la niñez y la adolescencia. Compartiendo tiempo y recursos materiales, cultivando la generosidad, para acabar con la exclusión, la injusticia y la opresión política y económica.

Defender la libertad de expresión y la diversidad cultural, privilegiando siempre la escucha y el diálogo, sin ceder al fanatismo, ni difamar o rechazar a los demás. Promover el consumo responsable y un modelo de desarrollo que tenga en cuenta la importancia de todas las formas de vida y el equilibrio de los recursos naturales del planeta. Contribuir al desarrollo de la comunidad, brindando la participación plena de las mujeres y el respeto a los principios democráticos, para crear nuevas formas de solidaridad.

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ES POSIBLE IMAGINAR LA PERPLEJIDAD DE FRITZ JAHR SI PUDIERA VER HOY LO QUE LOS HUMANOS HEMOS HECHO SOBRE LA NATURALEZA, ASÍ COMO LA DESIDIA PARA INTERRUMPIR ESTE DAÑO AUTOINFLINGIDO. ¿CUÁL ES SU MIRADA SOBRE ESTA TERRIBLE SITUACIÓN? Para el teólogo Fritz Jahr, en su Imperativo bioético (1927), la bioética sería el reconocimiento de las obligaciones éticas hacia todos los seres vivos. Curiosamente, otro gran defensor de toda la vida, el abogado indio Mahatma Gandhi (1920), proclamó que "la no violencia perfecta es la ausencia total del mal contra todo lo que vive". Una similitud increíble en el trabajo de Van Rensselaer Potter, inspirado en la Ética de la Tierra de Ald Leopold (1936), quien defendía la supervivencia de gran parte de la especie humana, dependería del desarrollo sostenible y mantenimiento de un sistema ético y ecológico. No se tiene constancia de que estos tres autores hayan estado en contacto, a pesar de habiendo vivido al mismo tiempo, pero en diferentes continentes. Los tres tenían la misma preocupación. No tengo ninguna duda de que nunca hubieran imaginado el rumbo que tomó la "evolución" en el momento en que formularon sus tesis de preservación.

Yo defiendo la sostenibilidad social a través de la Bioética Resolutiva, basada en el uso de los recursos naturales de manera ética correcta, en la reducción de las desigualdades con el mantenimiento de una vida digna y garantizando que se satisfagan las necesidades básicas de los seres humanos. El tema de la sostenibilidad va más allá de las generaciones y sigue

siendo moderno. Esta preocupación por el todo que rodea al ser humano, principalmente porque es fundamental para su supervivencia, sigue formando parte de la agenda de Bioeticistas como Lisbeth Sagols, quienes entienden que la bioética debe volverse y abordar cada vez más temas como el cuidado de todos seres vivos y debe prestar atención a los problemas relacionados con el tema ecológico y los límites que esto implica en el accionar de los seres humanos. “Si la bioética requiere algo para tener un futuro que contribuya a la salud del planeta y de la propia humanidad, es insistir, repetidamente, en la sacralidad de todas las formas de vida” (SAGOLS, 2015 p.26). Nos encaminamos hacia un cansancio predecible.

El dilema humano persiste en el tema de la violencia y la sostenibilidad ecológica, frente al modelo económico egoísta y excluyente.

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A MODO DE CIERRE, LO INVITAMOS A AGREGAR LO QUE DESEE. Agradezco inmensamente a la Fundación Jaime Roca por la oportunidad de dar visibilidad a un tema fundamental de la vida humana, que es la prevención de la violencia, por lo tanto, hace parte de la agenda de la Bioética por excelencia. Debemos enfrentar la violencia con un enfoque de salud pública, con el objetivo de evitar la violencia y actuar antes de que ocurra el delito, brindando asistencia inmediata a la víctima y buscando la restauración y socialización del delincuente. El conocimiento de las motivaciones produce elementos para la formulación de soluciones, partiendo de una mirada analítica, se evidencia la indiscutible aproximación entre el fenómeno de la violencia y la bioética. Pensar en la prevención de la violencia es, en sí mismo, una acción bioética que, sin duda, conlleva la mejor resolución posible.

De ahí surge la formulación de la Bioética Resolutiva que, con principios anti-violencia, implica ser obligatoria, viable y aceptable, utilizando la frônesis como método. La Bioética Resolutiva tiene como resultado esperado la superación, especialmente de la violencia, el tener que superar una situación desagradable. En la concepción de la Bioética Resolutiva (BR), el análisis de la violencia debe hacerse desde una perspectiva filosófica, esta interfaz está dedicada a analizar el presente, el pasado y el futuro, en la forma de lo que es o debería ser hoy, lo que estuvo o debería ser en el pasado, y lo que será o debería ser el futuro. La BR busca, de manera objetiva, ser un mecanismo facilitador para la toma de decisiones en temas bioéticos que generan controversias sobre la vida - zoe; su desarrollo, entendido como bio - vivir; y su final - thanatos.

Debe ser dialéctica y científica en la búsqueda de la superación de los conflictos, para el fin o la minimización del daño, la proposición de la dignidad y la mantenimiento de vida con calidad.

Debe ser “una actitud ante la vida” (CLOTET, 2002), comportamiento dictado por disposición interior, conducta éticamente correcta.

Agradecemos su participación

Dr. Eduardo Darío Beccar y Dr. Eduardo Piluso.

Entrevistadores, médicos integrantes del área bioética de Fundación Jaime Roca.