8 de abril de 2018 • Volumen XIII • No. 634
1 Por tanto, nosotros también, teniendo en derredor nuestro tan grande nube de testigos, despojémonos de todo peso y del pecado que nos asedia, y corramos con paciencia la carrera que tenemos por delante, 2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios. 3 Considerad a aquel que sufrió tal contradicción de pecadores contra sí mismo, para que vuestro ánimo no se canse hasta desmayar. 4 Porque aún no habéis resistido hasta la sangre, combatiendo contra el pecado;
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l mensaje de la Cruz es la manifestación visible del amor redentor de Dios y del plan de salvación que Él orquestó desde antes de la fundación del mundo (1 Ped 1:18-20). La Biblia dice que Dios nos amó de tal manera que decidió entregar en la Cruz a su Hijo unigénito para que todo aquel que cree en él no se pierda más tenga vida eterna (Jn 3:16). Este mensaje se basa en la elección de un hombre, creado a la imagen y semejanza de Dios, que no habría de cometer pecado alguno, para que pudiera ser ofrecido voluntariamente como sacrificio por los pecados de todos nosotros los pecadores.
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a eficiencia indiscutible de este mensaje y de la ejecución del plan eterno que lo diseñó estriba en la capacidad que éstos poseen para desmantelar todas aquellas áreas de nuestra humanidad que pueden oponerse a los mismos. Esto es, la Cruz y su mensaje se levantan como una paradoja ante todo aquello que parece definir y darle sentido a nuestra humanidad rebelde. Es en esa paradoja que ocurre lo antes dicho.
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a paradoja es una figura retórica que consiste en la unión de dos ideas o escenarios opuestos que resultan contradictorios, pero que sin embargo pueden estar encerrando una verdad oculta. Este concepto proviene del griego “paradoxon, concepto compuesto por “para” (contrario a) y “doxon” (opinión).1 Esta no debe ser confundida con los conceptos oxímoron ni antítesis. El oxímoron produce contradicción e incoherencia entre dos términos contiguos (ej.fuego frío o hielo incandescente). En la antítesis no existe contradicción entre las oraciones o palabras contrapuestas y lo que se procura es la producción de una síntesis.
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ay ejemplos de paradojas que repetimos con mucha frecuencia. Una de ellas es la célebre frase que le adscribimos a Sócrates, “solo sé que no sé nada.” Otra, la que usamos a menudo para describir las carestías de algunas personas muy pudientes:
1 http://www.retoricas.com/2009/06/8-ejemplos-varios-de-paradoja.html