19 de noviembre de 2017 • Volumen XII • No. 614
Num 21:13-18 “ 13 De allí partieron, y acamparon al otro lado de Arnón, que está en el desierto, y que sale del territorio del amorreo; porque Arnón es límite de Moab, entre Moab y el amorreo. 14 Por tanto se dice en el libro de las batallas de Jehová: Lo que hizo en el Mar Rojo, Y en los arroyos de Arnón; 15 Y a la corriente de los arroyos Que va a parar en Ar, Y descansa en el límite de Moab. 16 De allí vinieron a Beer: este es el pozo del cual Jehová dijo a Moisés: Reúne al pueblo, y les daré agua. 17 Entonces cantó Israel este cántico: Sube, oh pozo; a él cantad; 18 Pozo, el cual cavaron los señores. Lo cavaron los príncipes del pueblo, Y el legislador, con sus báculos. Del desierto vinieron a Matana, ”
L
as reflexiones compartidas después del huracán María nos han obligado a repasar la ruta que Dios ha trazado para nosotros como País y como Iglesia Cristiana. El proceso que hemos desarrollado para hacer esto es el de acompañar al pueblo de Israel en una parte de su peregrinación por el desierto, específicamente las porciones descritas en los capítulos 20 y 21 del libro de Números. En la reflexión de hoy caminaremos con ellos de Arnón a un lugar llamado Beer. Beer (H876) significa pozo. A base de lo que describe el texto del epígrafe de esta reflexión, este pozo parece haber sido cavado por los líderes de Israel aprovechando el agua que salía de la peña (Nm 20: 2-9). En este esfuerzo participaron los nobles, los príncipes y hasta los legisladores. O sea, que Israel regresó al mismo lugar en el que se había desatado una contienda por la falta de agua. Es obvio que la actitud del pueblo de Dios que regresó a ese lugar era diametralmente opuesta a la primera vez que estuvieron allí. En su primera experiencia en ese lugar ellos se mostraron desafiantes, belicosos y desesperados. En esta ocasión sabemos que es otra la conducta que se observa en ellos. Israel llega a este lugar y lo hace cantando. No hay que abundar mucho para explicar las diferencias que existen entre llegar a un lugar para pelear y protestar y llegar a ese mismo lugar cantando para celebrar. ¿Por qué canta Israel?
na de las razones por las que Israel canta es porque ha regresado al lugar en el que vio un milagro U de Dios; la mano poderosa del Señor que suple. Otra razón por la que Israel canta es porque pueden celebrar que no desperdiciaron el milagro que Dios había realizado. Los líderes del pueblo de Dios habían
aprovechado la oportunidad y cavaron un pozo. ¡Qué enseñanza más extraordinaria! No podemos darnos el lujo de desperdiciar o echar a perder la provisión. En otras palabras, Israel es traído de vuelta a ese lugar para ser confrontado como País con los resultados obtenidos por lo que hicieron con lo que Dios les había dado milagrosamente. Sin embargo, llegar a Beer implica mucho más que lo que hemos descrito en los párrafos anteriores. Llegar a un pozo en lugares desérticos tiene unas implicaciones trascendentales. Entre otras cosas implica la oportunidad de mantener la vida. Un pozo era un lugar que invitaba a que se formaran comunidades a su alrededor. Entonces, llegar a un pozo es sinónimo de llegar a la vida en comunidad, con los privilegios y las responsabilidades que esto implica. Llegar a Beer implica llegar al lugar en el que tenemos que repasar todas estas cosas. Esto es, cuáles son las actitudes que hemos abrazado, qué hemos hecho con lo que Dios nos ha dado, cómo hemos estado manejando las responsabilidades y privilegios que tenemos dentro de la vida en comunidad.
n ocasiones anteriores nosotros no nos hemos detenido a examinar los significados y las implicaciones ESacks que traen consigo los pozos. De hecho, en algunas de nuestras reflexiones citamos trabajos de Sir Jonathan en los que se enfatiza el valor de los pozos para Isaac, Jacob y Moisés (entre otros). Al mismo