Boletín El Heraldo AMECCDAi 7 de junio 2015

Page 1

7 de mayo de 2015 • Volumen X • No. 484

E

n nuestra reflexión anterior analizamos cuatro (4) áreas de la vida de Moisés que necesitamos repasar antes de entrar al análisis del encuentro que este tiene con Dios en Éxodo 33. Este encuentro forma parte de los análisis que realiza el Dr. Elmer Towns que esboza en su libro “Encountering God for Spiritual Breakthrough,” (Regal Books, Dic 1998). n primer lugar encontramos el nivel de educación que poseía Moisés. En segundo lugar encontramos la experiencia de vida que tiene Moisés. En tercer lugar encontramos los niveles de exposición que experimenta Moisés. Este hombre de Dios es expuesto a siervos, reyes, sacerdotes, profetas, levitas, militares, princesas y nodrizas. Este siervo aprende y se educa en palacios para luego operar en desiertos. Hemos dicho que Moisés es la antítesis de José, quien fue educado en desiertos para trabajar en palacios. En cuarto lugar encontramos la eficiencia de este siervo de Dios. En este caso, se trata del nivel de eficiencia que exhibe y el nivel de eficiencia que se le exige o que debió tener. En adición a esto, analizamos algunas de las características que se pueden observar en Moisés. Entre ellas, mencionamos el nivel de compromiso que él tenía con Dios y con su pueblo. Además, el hambre que él exhibe de conocer más de Dios, algunas escenas en los que exhibe dominio propio y su paciencia, amor a Dios y a los suyos. ejamos una pregunta sobre la mesa: ¿necesita alguien así un encuentro con Dios? La Biblia nos dice que sí. Es cierto que todas y cada una de estas aseveraciones nos pueden llevar a concluir que estamos frente a un hombre con muy pocas debilidades. Estamos frente a un hombre que no necesita mucho más para ser capaz de desarrollar las tareas y las responsabilidades que le asignó el cielo. Sin embargo, la Biblia nos deja saber que en el plan perfecto de Dios estaba programado que Moisés necesitaba experimentar otros encuentros con el Todopoderoso. El encuentro que Moisés necesitaba con Dios no tenía como prioridad capacitarle para la tarea. Este encuentro procuraba transformar algunas áreas que necesitaban ser rendidas a los pies del Señor. Es muy importante destacar que todos los encuentros que tenemos con el Señor poseen características únicas y agendas divinas únicas. Es como si cada uno de ellos poseyera su propio ADN (DNA por sus siglas en inglés). El Dr. Towns argumenta que en el caso del encuentro descrito en Éxodo 33, éste sirve para delinear algunos principios esenciales y muy importantes. s correcto afirmar que Moisés sale de ese encuentro con el compromiso divino de que el pueblo de Israel no sería destruido. Sale de allí después de que Dios le repone las tablas de la Ley (Ex 34) y dirige a su pueblo hasta la Tierra Prometida. Este es el resultado más importante que surge de este encuentro. Sin embargo, hay otros elementos que necesitan ser atendidos. Se trata de elementos que no encontramos en otras experiencias que Moisés tuvo con Dios. En primer lugar, Towns describe que este encuentro produce efectos físicos en Moisés. La Biblia dice que el rostro de Moisés brillaba luego de los 40 días que estuvo en la Presencia de Dios (Ex 34:30-35). Se trata entonces, argumenta Towns, de encuentros que producen efectos que pueden y tienen que ser vistos por aquellos que nos rodean. a Biblia dice que Dios permitió que Moisés viera sus espaldas (Ex 33:23). Nadie puede imaginar cuáles serían los resultados observables en Moisés si hubiera visto el rostro de Dios. Towns asevera con toda la razón que cualquier persona que entra a la Presencia del Todopoderoso tiene que salir de ese lugar

E

D

E L


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.