658 AMECCDA El Heraldo - La Teología de Eliú: Parte IV

23 de septiembre de 2018 • Volumen XIII • No. 658

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a reflexión anterior nos permitió iniciar el análisis de las bendiciones enumeradas en los versos 14-16 del Salmo 91. Este salmo es sin duda alguna uno de los favoritos de la mayoría de los creyentes en Cristo. El mensaje que nos comunica este salmo está centrado en la capacidad que nos brinda el Todopoderoso (Shadday, H7706) para enfrentar las vicisitudes y los problemas que nos asaltan en la vida con la seguridad de que Dios nos guarda de las consecuencias que estos pueden producir. Una de las publicaciones del Profesor Warren Wiersbe1 nos sirvió de ayuda en la reflexión anterior; para proveernos nuevas herramientas para acercarnos al análisis de este salmo.

1. Fe en Dios — la vida que está escondida en Dios (vv. 1–4).

2. Paz de Dios- la vida que es protegida por Dios (vv 5-13) 3. Amor por Dios - la vida satisfecha en Dios (vv. 14–16).

RV 1960 “14Por cuanto en mí ha puesto su amor, yo también lo libraré; Le pondré en alto, por cuanto ha conocido mi nombre. 15Me invocará, y yo le responderé; Con él estaré yo en la angustia; Lo libraré y le glorificaré. 16Lo saciaré de larga vida, Y le mostraré mi salvación.” Son los elementos de esa vida satisfecha en Dios los que nos ocupan aquí. En vías de poder analizar responsablemente esas bendiciones decidimos estudiar los conceptos utilizados por el escritor de este salmo para tener una interpretación más certera de ellas. A continuación algunos de los conceptos que estamos analizando aquí:

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n nuestra reflexión más reciente analizamos el concepto traducido como “amor” (“chashaq,” H2836) y el concepto traducido como “libraré” (“palat,” H6403). Creemos que la NVI es la que mejor recoge las ideas centrales de ese verso 14 cuando dice lo siguiente:

NVI “«Yo lo libraré, porque él se acoge a mí; lo protegeré, porque reconoce mi nombre.

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a segunda parte del verso 14 nos dice que Dios decide poner en alto a aquellos que le han conocido.

El concepto traducido como “alto” en la versión RV 1960 es el vocablo hebreo “sagab” (H7682). En algunas declinaciones del hebreo bíblico es traducido como ser colocado en un lugar inaccesible, seguro, defendido y/o demasiado alto para ser capturado. En otras declinaciones puede ser traducido como un lugar noble exaltado, majestuoso, o fuerte.

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s muy interesante conocer que este concepto se usa solo 20 veces en el Antiguo Testamento. Los escritores de la literatura sapiencial (de sabiduría) son los que lo utilizan con mayor frecuencia. Por ejemplo:

“11 Que pone a los humildes en altura, Y a los enlutados levanta a seguridad;” (Job 5:11) “22 He aquí que Dios es excelso en su poder; ¿Qué enseñador semejante a él?” (Job 36:22) “1 Jehová te oiga en el día de conflicto; El nombre del Dios de Jacob te defienda.” (Sal 20:1) “1 Líbrame de mis enemigos, oh Dios mío; Ponme a salvo de los que se levantan contra mí.”; (Sal 59:1) “29 Mas a mí, afligido y miserable, Tu salvación, oh 1 Wiersbe, Warren W.. Be Exultant (Psalms 90-150): Praising God for His Mighty Works (The BE Series Commentary) (pp. 2628). David C. Cook. Kindle Edition.

Dios, me ponga en alto.” (Sal 69:29) “41 Levanta de la miseria al pobre, Y hace multiplicar las familias como rebaños de ovejas.” (Sal 107:41) “6 Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí; Alto es, no lo puedo comprender.” (Sal 139:6) “10 Torre fuerte es el nombre de Jehová; A él correrá el justo, y será levantado.” (Prov 18:10) “25 El temor del hombre pondrá lazo; Mas el que confía en Jehová será exaltado.” (Prov 29:25)

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l lector debe haberse percatado que la promesa que nos hacen en el Sal 91:14b es una consistente y que se repite en muchos otros pasajes bíblicos. Dios pone a los humildes en altura. Dios es excelso en su poder y es a esa dimensión que lleva a aquellos que confían en Él.

Es Dios el que defiende a los suyos. Es Él quien nos pone a salvo y en alto. Es Dios el que nos levanta de nuestras miserias. Al mismo tiempo, es a esas dimensiones de las alturas de su conocimiento que Él nos quiere llevar.

Es el Señor nuestro refugio más alto y no hay lugar que ofrezca mayor seguridad que estar bajo las sombras de sus alas.

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as aseveraciones más recientes nos sirven como puente para la segunda parte de las expresiones que el salmista realiza en el verso 14 del salmo 91.

El salmista dice allí que Dios decide poner en alto a aquellos que han conocido su nombre.

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l concepto traducido como “conocido” es el vocablo hebreo “yâda” (H3045). Este concepto es utilizado con mucha frecuencia en el Antiguo Testamento (867 ocasiones). Su uso implica la capacidad de aprender, comprender, percibir, entender, reconocer, estar consciente, ser hecho, entre muchas otras traducciones.

Sin embargo hay dos (2) usos que llaman mucho la atención y que parecen claves para entender lo que dice el verso 14. En primer lugar, su uso para definir relaciones. Por ejemplo, este concepto es utilizado en Gn 4:1 para describir la relación entre Adán y Eva:

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“1 Conoció Adán a su mujer Eva, la cual concibió y dio a luz a Caín, y dijo: Por voluntad de Jehová he adquirido varón.”

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sea, que el conocimiento descrito aquí es uno que se basa en la intimidad que existe entre aquellos que se conocen. En segundo lugar, el uso que se le da para definir revelación. Este concepto es utilizado así en Exo 6:3: “3 Y aparecí a Abraham, a Isaac y a Jacob como Dios Omnipotente, más en mi nombre Jehová no me di a conocer a ellos.”

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uando uno examina bien este versículo uno descubre que hay dimensiones de Dios que solo se pueden obtener y conocer mediante la revelación.

Abraham, Isaac, y Jacob no alcanzaron conocer la revelación de Dios que el señor le estaba dando a Moisés y al pueblo de Israel.

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as implicaciones que generan las aseveraciones hechas hasta aquí explican la traducción ofrecida en la Nueva Versión Internacional: NVI

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e trata entonces que ser protegido, puesto en alto, o puesto en un lugar seguro por el Señor es entonces el resultado de haber aceptado la revelación de Dios. Esa dimensión de Dios que se revela en el Antiguo Testamento (Yahweh o Jehová) es el Dios del pacto, el Dios que cumple sus promesas. El salmista está señalando que Dios ha decidido revelarse para ser conocido, y que aquellos que han procurado esta revelación son protegidos, puestos en lugar seguro.

Ese conocimiento revelado tiene que ser buscado y recibido por amor al Señor. Este es el énfasis de la versión Dios Habla Hoy: DHH “«Yo lo pondré a salvo, fuera del alcance de todos, porque

él me ama y me conoce.” ¿Cuál es la importancia de esa relación enfatizada en esta versión bíblica? En primer lugar , la Biblia dice que hay personas que han conocido a Dios y deciden no glorificarle (Rom 1:21).

“21 Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido.”

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l mismo tiempo, la Biblia enseña que aquellos que aman a Dios son conocidos por Él (1 Cor 8:3).

“3 Pero si alguno ama a Dios, es conocido por él.”

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e hecho, el conocimiento del amor de Dios es la revelación más excelsa que se describe en la Biblia. Veamos lo que dice 1 Jn 3:16: “16 En esto hemos conocido el amor, en que él puso su vida por nosotros; también nosotros debemos poner nuestras vidas por los hermanos.”

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a Biblia dice que sin ese amor es imposible conocer a Dios:

“8 El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor.” (1 Jn 4:8)

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a Biblia dice que ese conocimiento de Dios desarrolla una relación permanente con el Eterno:

“16 Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él.” (1 Jn 4:16)

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eiteramos que ese amor que genera el anhelo de conocer más a Dios trae consigo el privilegio de ser protegidos por el Señor y las responsabilidades de cumplir con los mandamientos del Eterno. “«Yo lo libraré, porque él se acoge a mí; lo protegeré, porque reconoce mi nombre.

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s acerca de esta clase de relación que nos habla el pasaje de Juan 14:20-24:

“20 En aquel día vosotros conoceréis que yo estoy en mi Padre, y vosotros en mí, y yo en vosotros. 21 El que tiene mis mandamientos, y los guarda, ése es el que me ama; y el que me ama, será amado por mi Padre, y yo le amaré, y me manifestaré a él. 22 Le dijo Judas (no el Iscariote): Señor, ¿cómo es que te manifestarás a nosotros, y no al mundo? 23 Respondió Jesús y le dijo: El que me ama, mi palabra guardará; y mi Padre le amará, y vendremos a él, y haremos morada con él. 24 El que no me ama, no guarda mis palabras; y la palabra que habéis oído no es mía, sino del Padre que me envió.” (RV 1960)

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onociendo estos datos podemos acercarnos otra vez a la versión bíblica que nos regla la Traducción en Lenguaje Actual:

Pastora Rebeca Parrilla......................................Hogar Evelyn Quiñonez..............................................Hogar Nayda Secola................................................... Hogar José Mercado................................................... Hogar Margie Pérez.................................................... Hogar Bryan Rodríguez.............................................. Hogar Glory García.................................................... Hogar Noemí Rosario................................................. Hogar Saúl Esaí Pérez Esquilín....................Cobertura/Hogar Noemí Velázquez ......................Hosp. Auxilio Mutuo Paula Rosa....................................................... Hogar Darell Pabellón Rivera.................Hosp. San Francisco

TLA “Dios dice:”«Mi pueblo me ama y me conoce; por eso yo lo pondré a salvo.”

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a pregunta final que formulamos en esta reflexión es la siguiente: ¿cómo alcanzamos conocer a Dios? La respuesta a esta pregunta es una bíblica: “25 Padre justo, el mundo no te ha conocido, pero yo te he conocido, y éstos han conocido que tú me enviaste. 26 Y les he dado a conocer tu nombre, y lo daré a conocer aún, para que el amor con que me has amado, esté en ellos, y yo en ellos.” (Jn 17:25-26)

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risto es la única vía para poder adquirir esa revelación, ese conocimiento y esa revelación del amor del Padre. Cristo ofrece la revelación del conocimiento de Dios y la manifestación del amor del Padre.