Historia de las RRII



«Analizamoselpasado,para entendernuestropresente»
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Bienvenido a su revista informativa preferida, Historias de la RRII donde «Analizamos el pasado, para entender nuestro presente», en esta nueva edición estaremos hablando de eventos que marcaron parte del siglo XIX y XX respectivamente. Tocaremos 5 temas principales que son: La Guerra Chino-Japonesa (1884-1885), La Rebelión de los Bóxers en China y la Doctrina de Puertas abiertas, Los Antecedentes mediatos e inmediatos de la Primera Guerra Mundial, la Triple Alianza y la Triple Entente y finalmente La Guerra de los Balcanes. Sin mas que agregar, ¡Comencemos!
Los antecedentes de la guerra se remontan a la década de 1870, cuando tanto China como Japón comenzaron a mostrar un interés creciente por Corea, que en ese momento era un reino tributario de China.
Corea se convirtió en un objetivo estratégico para Japón debido a su ubicación geográfica y a sus recursos naturales.
Por su parte, China veía a Corea como parte de su esfera de influencia y buscaba mantener su dominio sobre esta.
La tensión entre China y Japón se exacerbó en 1894, cuando estallaron conflictos internos en Corea. Tanto China como Japón enviaron tropas para proteger sus intereses y mantener la estabilidad en la península coreana. Sin embargo, los choques entre las fuerzas chinas y japonesas condujeron rápidamente a un conflicto armado a gran escala.
La superioridad militar japonesa se hizo evidente desde el principio de la guerra. Japón contaba con un ejército y una armada modernizados, entrenados según los estándares occidentales, mientras que el ejército chino estaba mal equipado y mal organizado.
Las fuerzas japonesas, lideradas por el general Yamagata Aritomo, utilizaron tácticas y estrategias innovadoras que les otorgaron una ventaja significativa sobre las fuerzas chinas.
La guerra se desarrolló en diferentes frentes, pero la campaña terrestre en la península de Liaodong fue especialmente importante.
La guerra llegó a su fin en abril de 1895, con la firma del Tratado de Shimonoseki. China fue obligada a reconocer la independencia de Corea y a ceder Taiwán y las islas Pescadores a Japón.
Además, China tuvo que pagar una indemnización y abrir varios puertos al comercio japonés. Este tratado marcó un hito en la historia de Asia, ya que fue la primera vez en la era moderna en la que una potencia asiática derrotó a una potencia europea en un conflicto armado.
La Primera Guerra Chino-Japonesa tuvo importantes repercusiones en la región y en el escenario internacional. Por un lado, consolidó el ascenso de Japón como una potencia militar y económica en Asia, y socavó la dominación china en la región
que tuvo lugar en China entre 1899 y 1901. Este movimiento se originó como una respuesta a la creciente influencia extranjera en China.
La Rebelión de los Bóxers comenzó en la provincia de Shandong, en el norte de China, donde los miembros del movimiento comenzaron a atacar a los extranjeros y a los misioneros cristianos. Pronto, el levantamiento se extendió a otras partes de China, con los Bóxers atacando y saqueando propiedades extranjeras y cristianas. A medida que el levantamiento ganaba fuerza, se formaron unidades militares de Bóxers y se llevaron a cabo asedios contra embajadas extranjeras en Beijing.
En ese momento, la Emperatriz viuda Cixi se encontraba en el poder y compartía el sentimiento de rechazo hacia los extranjeros. Ella deseaba mantener las tradiciones imperiales de China. Por otro lado, el emperador Guangxu, su sobrino, abogaba por seguir las pautas de la modernidad occidental para que
China pudiera crecer como nación y convertirse en una potencia económica en el futuro.
La respuesta de las potencias extranjeras y del gobierno chino fue contundente. Las potencias occidentales, incluidos Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, Rusia y Alemania, se unieron para formar una fuerza militar
multinacional conocida como la Alianza de las Ocho Naciones. Esta alianza lanzó una expedición militar para sofocar la rebelión y proteger a sus ciudadanos y propiedades en China.
La Alianza de las Ocho Naciones finalmente logró aplastar la Rebelión de los Bóxers. Beijing fue tomada por las fuerzas extranjeras y se impuso una ocupación militar. China fue obligada a pagar indemnizaciones a las potencias extranjeras y se impusieron más concesiones territoriales y económicas. Además, la rebelión y su represión tuvieron un impacto significativo en la percepción de China en el escenario internacional y en la dinámica política interna del país.
La política de puertas abiertas es un concepto en relaciones exteriores y economía. Como teoría originalmente postulaba que debían existir las mismas condiciones comerciales de las grandes potencias en China.
Con base en los Tratados desiguales firmados entre China y las potencias existiría un acceso sin restricciones a los mercados comerciales chinos.
*La Política de las Puertas Abiertas
La Primera Guerra Mundial (1914-1918) fue el evento histórico que definió el acontecer del siglo XX; devastó el orden político, económico y social de Europa, y su dudosa conclusión sentó las bases y preparó el camino para un escenario aún más destructivo: la Segunda Guerra Mundial.
Desde 1885 hasta 1914 reinó por casi toda Europa la llamada Paz Armada, siendo un periodo de tiempo en el que apenas hubo guerras entre las potencias europeas, existiendo una especie de paz no escrita entre todas. Esta paz fue muy importante en la época, ya que existía una gran rivalidad económica por las colonias africanas y asiáticas, y esta paz permitía que las potencias pudieran continuar con su actividad sin miedo a que otro estado europeo intentará quitarle sus posesiones.
El Imperialismo fue la época en la que las grandes colonias europeas comenzaron a
numerosos territorios de África y Asia bajo su dominio. La Revolución Industrial había provocado que los recursos de los países europeos se gastarán rápidamente, así que las grandes potencias decidieron que lo mejor era tomar los estados africanos y asiáticos donde las materias primas no habían sido tan usadas como en Europa.
En la Conferencia de Berlín, las grandes potencias europeas acordaron dividir y repartirse África, asignando a cada país una porción del continente
Alianzas antes de la Primera Guerra Mundial
Estas alianzas no se mantuvieron del todo en la guerra, pero parte de ellas si, y es por ello que es importante mencionarlas.
La primera de las alianzas fue la llamada Triple Entente, formada por el Imperio Ruso, Reino Unido y la República Francesa. Esta alianza fue formada como medida contra el creciente poder de Alemania y sus aliados, así como por la envidia que Alemania tenía a los británicos y franceses por sus colonias. El bando formó el bando de los Aliados en la Primera Guerra Mundial, aunque con importantes aliados como Estados Unidos e Italia.
La segunda de las alianzas fue la llamada Triple Alianza, formada por Alemania, el Imperio Austrohúngaro e Italia, aunque estos últimos dejaron la alianza al entrar en la Primera Guerra Mundial. La principal razón de la alianza fue el odio mutuo hacia la figura de Francia, ya que los tres estados estaban enfadados con los franceses por sus políticas en África.
La Paz Armada había provocado que Europa fuera un territorio libre de enfrentamientos, siendo la única
excepción lo sucedido en los Balcanes. La crisis de los Balcanes fue una situación mantenida entre 1906
y 1914, que mucha gente considera que fue vital para el comienzo de la Primera Guerra Mundial. El Imperio Otomano estaba en crisis, y por ello nacieron dentro de él muchos espíritus nacionalistas, los cuales se enfrentaron a los turcos a la vez que potencias europeas entraban en el conflicto para sacar beneficio.
El primer paso fue la separación de BosniaHerzegovina del Imperio Otomano, y su entrada al Imperio austrohúngaro. Esto no gustó a Serbia, quien quería añadir a Bosnia a su independencia, buscando la creación de una Gran Serbia, o lo que más tarde sería Yugoslavia.
El 28 de junio de 1914, el archiduque Francisco Fernando de Austria, heredero del trono austrohúngaro, fue asesinado en Sarajevo por Gavrilo Príncipe, miembro de la organización terrorista conocida como la Mano Negra. Esta organización buscaba la independencia de Bosnia.
Por un lado estaban las Potencias Centrales o la Triple Alianza (Alemania, Italia y el Imperio Austro-Húngaro) y, por el otro, la Triple Entente (Francia, Reino Unido y Rusia). Los dos bandos se mantuvieron durante el conflicto, pero la intervención de otros países y el cambio de bando determinó el resultado final de la guerra.
Italia, por ejemplo, comenzó en el bando de las Potencias Centrales, aunque no llegó a combatir en como Alemania o Austria-Hungría. A medida que avanzaba la guerra, el gobierno italiano pasó a apoyar al otro bando.
En el lado opuesto estaba la Triple Entente, que acabó ganando la guerra. El Reino
Unido, Francia y Rusia fueron los tres ejes fundamentales de la coalición, aunque Rusia acabó retirándose de la contienda tras la Rebelión Rusa d 1917 .
El asesinato del archiduque Francisco
Fernando, heredero del Imperio Austro-Húngaro, desencadenó el conflicto bélico en junio de 1914. Austria-Hungría fue la primera potencia en declarar la guerra y se convirtió en un pilar fundamental de la Triple Alianza.
Sin embargo, los continuos combates contra Rusia, Serbia, Rumanía e Italia, el desgaste de la guerra y las revueltas internas
las revueltas internas provocaron la desaparición del imperio en 1918.
El mayor apoyo a los austriacos fue el Kaiser Guillermo II, líder del Imperio Alemán. Alemania estaba enemistada con Francia desde la Guerra
Franco-Prusiana (18701871) y este nuevo conflicto ofrecía la oportunidad de atacar e invadir al antiguo enemigo. El primer paso del Kaiser fue la conquista de Bélgica.
El Archiduque Francisco Fernando fue asesinado por un nacionalista de Serbia (un territorio que quería independizarse del Imperio Austro-Húngaro). Por eso, Austria-Hungría declaró la guerra a Serbia.
Rusia enseguida ofreció apoyo a Serbia, aunque lo hizo por sus propios intereses. Los rusos querían imponer su dominio en los territorios de Prusia Oriental y Galitzia, que formaban parte del Imperio Austro-Húngaro.
Así, el Zar de Rusia se involucró en la Gran Guerra desde el principio. Pero la falta de preparación provocó la muerte de millones de soldados rusos, la escasez de recursos y la pobreza entre la población. La crisis interna del país desembocó en la Revolución de 1917.
La Guerra de los Balcanes fue un conflicto complejo y multifacético que tuvo lugar en la década de 1990 en la región de los Balcanes, en el sureste de Europa. Esta guerra se caracterizó por una serie de enfrentamientos violentos entre grupos étnicos, principalmente serbios, croatas y bosnios, que buscaban establecer o mantener el control sobre territorios específicos.
Durante la guerra, varios países de la región se separaron de Yugoslavia, que era un estado compuesto por seis repúblicas socialistas. Estas repúblicas eran Bosnia y Herzegovina, Croacia, Eslovenia, Macedonia, Montenegro y Serbia. La separación de estos países de Yugoslavia condujo a una serie de conflictos violentos y guerras civiles.
Uno de los conflictos más significativos fue la Guerra de Bosnia, que tuvo lugar entre 1992 y 1995. En este conflicto, se produjeron numerosas violaciones de los derechos humanos, incluyendo asesinatos, violaciones y limpieza étnica.
Las principales partes en conflicto eran los serbios bosnios, los croatas bosnios y los bosniacos (bosnios musulmanes). Esta guerra culminó con el asedio de Sarajevo, la capital de Bosnia, que duró casi cuatro años y dejó miles de muertos y heridos.
La Guerra de los Balcanes fue devastadora para la región, con altos números de muertos y heridos, destrucción de infraestructura y ciudades enteras, así como una gran cantidad de desplazados internos y refugiados.
La comunidad internacional mostró su incapacidad para prevenir y resolver los conflictos de manera efectiva, lo que generó tensiones y críticas. La intervención de la OTAN en Kosovo fue controversial.
«Analizamoselpasado,para entendernuestropresente»Miriam Gutiérrez, Ethlyn Almanza y Wilfredo Peña