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Noricias
Periódico El Sol de Puerto Rico Del 16 al 30 de noviembre de 2015.
Advierten a seguidores de Lumen Dei en Diócesis de Ponce Por Agustín Muñoz Periódico El Sol de Puerto Rico La noticia cayó “ni bomba” entre los fieles católicos seguidores de la Unión Sacerdotal Lumen Dei de la Diócesis de Ponce cuando fueron informados que esa orden “no está autorizada” a realizar “actividades pastorales, espirituales o sacramentales” en esta región. Del mismo modo, el Obispo de Ponce, Monseñor Félix Lázaro Martínez, promulgó que un grupo de sacerdotes que antes pertenecían a la organización Prodein o ABC Prodein en Lumen Dei deberán integrarse a sus respectivas diócesis. En una comunicación a los católicos del sur, que no fue leída en todas las parroquias según fue la directriz del obispo, Lázaro Martínez hace referencia a una nota informativa de la Congregación para los Ins-titutos de la Vida Consagrada y Sociedades de la Vida Apostólica sobre Prodein Lumen Dei que dispone que esta
entidad “no podrá organizar actividades que tengan relación con la pastoral, la espiritualidad y los sacramentos” dentro de la Iglesia Católica. Agrega que “y habrá de cerrar las capillas u oratorios en sus sedes y centros”. A tenor con esa directriz, el Obispo de Ponce señaló que “para todos los efectos Lumen Dei ya no figura en la Diócesis de Ponce” y ordenó cerrar “al culto la capilla del Hilasterio Nuestra Señora del Encuentro con Dios”, bajo Prodein ubicado en las jurisdicciones de Villaba y Orocovis. Los terrenos donde está localizada la sede fueron donados por la familia Hernández Colón, se supo. La mencionada capilla clausurada ha sido un centro de oración y espiritualidad en donde residían varios sacerdotes y monjas de vida contemplativa. “Aún está allí el Padre William (tiene 90 años de edad)
y nueve monjas a quienes se les ordenó quitarse el hábito de la orden”, dijo Noemí Collazo, una asidua visitante del lugar. La mujer dijo que hace dos semanas el Padre William, quien está enfermo y debe ser asistido para caminar, celebró la última misa en la capilla del Hilasterio. “Tenemos que seguir orando”, murmuró Collazo muy emocionada. Entre tanto, las religiosas siguen residiendo en el clausurado monasterio usando una vestimenta apropiada para las féminas consagradas. La determinación de la autoridad eclesial ha provocado “muchas lágrimas” entre los seguidores laicos. Wilfredo Negrón, quien se describió como un hombre nuevo gracias a Lumen Dei cuando asistía a la Parroquia del Residencial Lirios del Sur de Ponce, no esconde su insatisfacción por la decisión contra
esa entidad religiosa. “Mi cre-
cimiento espiritual se lo debo a los sacerdotes de Lumen Dei. Me enseñaron a amar a la Iglesia, al Papa, los principios fundamentales de la vida cristiana. Le digo a usted que todo lo que huela a santidad va a ser perseguido”, comentó durante el diálogo con el Periódico El Sol de Puerto Rico. Mercedes Alfaro, vecina del barrio Mogotes de Villalba, dijo vía telefónica que de la capilla del residencial Lirios del Sur “salieron vocaciones a la vida
sacerdotal porque Lumen Dei ha hecho obras buenas”. Otros entrevistados, que se reservaron hacer públicos sus nombres, coincidieron en expresar que la Iglesia está siendo dividida entre tradicionalistas y “los progresistas que quieren cambiarlo todo”. “Que se prepare el Opus Dei porque los próximos serán ellos. El diablo está metido en todo esto”, cuestionó uno de los entrevistados en Ponce. Lumen Dei es una asociación fundada por el difunto P. Rodrigo Molina, intervenida por el Vaticano, que nombró como comisario pontificio de la misma primeramente al cardenal Fernando Sebastián, y posteriormente a Monseñor Jesús Sanz Montes, arzobispo de Oviedo. La determinación de la Santa Sede fue en respuesta a múltiples querellas de orden moral y económico de sus miembros, dice el dictamen.
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