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“Bardo”: la última película de Iñárritu

Fabio Martínez

¡Fantástica! Es lo menos que se puede decir sobre la última producción cinematográfica del mexicano Alejandro González Iñárritu.

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Bardo: crónica de unas cuantas verdades comienza con una toma general del desierto fronterizo entre Estados Unidos y México. En medio del desierto, deambulan, como fantasmas, los inmigrantes latinoamericanos, atrapados en el sueño americano.

El eje argumentativo de la última película de Iñárritu es la migración, que viene desde el Génesis, y que hoy, ante los embates del capitalismo salvaje, arroja en cada país, miles de desplazados.

Son los trasterrados de la tierra. Aquellos que, ante la imposibilidad de vivir materialmente en sus países, toman el camino incierto del nomadismo.

El desplazado es el viajero de ninguna parte.

En la película Bardo, el primer desplazado es el propio cineasta, que después de vivir durante dos décadas en California, decide regresar a México para recoger sus pasos.

“México, ciudad bella y fea”, afirma el protagonista desde una terraza del centro histórico.

La película narra la migración voluntaria del cineasta que quiere tomar distancia de su México, pero al mismo tiempo le duelen sus orígenes.

El regreso del artista a su ciudad natal le permite al autor establecer una relación paradojal, de amor y odio, con su propia ciudad.

En la película Iñarritu ama México, a sus padres, a sus amigos; es un apasionado de la salsa de Héctor Lavoe y Willie Colón, pero le duele la decadencia mediática en la que ha caído, y la crisis de los bardos y los periodistas, que viven mendigando un like en las redes sociales. hector.f.martinez@correounivalle.edu.co

En la película la plataforma Amazon compra la baja California. México y América latina viven en el deliro apasionante que producen la violencia y la inmensa pobreza. Sus gobernantes son simples marionetas que se la pasan enredados en sus negocios turbios.

Bardo es un cuestionamiento profundo sobre una sociedad mediatizada, que como afirma el despechado de Mario Vargas Llosa, cayó en la ‘cultura del espectáculo’.

El film es implacable con el artista contemporáneo que lo único que le interesa es estar contemplándose en el espejo mediático. El artista del siglo ya no es quien conmueve al mundo con su obra. Es el ser enajenado de las redes sociales.

El vocablo ‘bardo’ significa vate, poeta; pero también, según la cultura budista, alude al tránsito entre la muerte y la resurrección.

México es el país de los vivos y los muertos.

La película de Iñárritu es una auto ficción existencial sobre uno de los cineastas más importantes del siglo.

El film es implacable con el artista contemporáneo que lo único que le interesa es estar contemplándose en el espejo mediático. El artista del siglo ya no es quien conmueve al mundo con su obra. Es el ser enajenado de las redes sociales.

En una época donde el cine se ha infantilizado hasta el punto de convertirse en una caricatura, Bardo es una excelente película que nos indica que, en el arte y el cine, aún hay esperanza.

Alejandro G. Iñárritu es un cineasta que ha obtenido tres Premios Óscar. Bardo: falsa crónica de unas cuantas verdades está nominada a la mejor película internacional de los Premios Óscar 2023. Esperemos que el próximo 12 de marzo el cine latinoamericano tenga una grata sorpresa.

El escritor mexicano Jorge Zepeda Patterson, Premio Planeta de 2014, aseguró que leer novela es una herramienta para crear valores en los seres humanos en los tiempos presentes, de tanto egoísmo.

“La novela es el mejor recurso para construir solidaridad, también tolerancia. En la medida en que me puedo meter en 300 páginas a sufrir y tener alegrías con la realidad del otro; en esa medida estoy en capacidad de preocuparme por los sufrimientos de un personaje que no soy yo”, afirmó este domingo en entrevista con EFE

Zepeda Patterson promociona en estos días su quinta novela: El dilema de Penélope, un thriller vigoroso que será presentado el 9 de febrero en la librería Mauricio Achar del sur de la capital y que denuncia la corrupción y el aumento del racismo en el Mundo.

En Estados Unidos, el expresidente republicano Dan Thompson hace campaña para regresar al poder y su equipo idea una estrategia para llenar de lodo a sus enemigos. El escritor usa la ficción para denunciar la tendencia de los políticos de ensuciar a los rivales, más que construir proyectos.

“Donald Trump inauguró una tendencia de un tipo de campaña que degrada la política, consistente en la descalificación del adversario más que en la construcción de argumentos propios; no hay límites en las ideas para jugar sucio”, consideró.

Penélope en zapatos de tacón

Es una atractiva mujer capaz de alborotar el barrio cuando viste falda y zapatos de tacón. Hija de un noruego y una mexicana, Penélope Hunt recibe una oportunidad para enderezar su vida, al ser nombrada directora de un centro de ayuda a pandillas en Los Ángeles.

En pocos días logra que los líderes de las dos bandas principales, de origen hispano, se sienten a conversar, pero una serie de atentados atribuidos a la comunidad latina la ponen al borde de la muerte.

La historia, que se lee como si uno viera imágenes en el cine, presenta varios conflictos, a través de los cuales el autor provoca la reflexión.

“Intenté en la novela, como un thriller de suspenso en el contexto de la degradación de la política, en una campaña sucia, sin límites. Con tal de sacar adelante el triunfo de su candidato, los equipos están dispuestos a inflamar los medios y los odios”, contó el también analista político.

El narrador cree que en tiempos de redes sociales la política se ha frivolizado y lleva una carga de reclamos, pasiones insatisfechas y miedos.

En la novela, un periodista obsesionado con ganar el premio Pulitzer investiga los asesinatos atribuidos a hispanos y paga con su vida. Zepeda Patterson acepta que eso ocurre poco en Estados Unidos, pero en México es algo común.

“En México hay poderes salvajes; originalmente la mayor parte de las agresiones a la prensa surgió de ellos, pero luego, frente a la impunidad, hoy observamos que muchos ataques proceden de otros intereses y la mitad de las agresiones a periodistas, no necesariamente de los asesinatos, tienen un origen político”, estimó.

La hipocresía de los tiempos modernos Doctor en ciencias políticas, además de economista, Zepeda Patterson cree que la hipocresía reina en la política y existe un doble discurso desde los tiempos de la globalización.

“Todo este evangelio de vamos abriéndonos porque somos un gran planeta significa que circulen las mercancías, que circulen los capitales, pero no las personas. Los queremos como consumidores, para espolear recursos, pero no los queremos a ustedes; esa es la idea”, dijo.

En el caso de México, el escritor reconoce logros del gobierno de López Obrador, pero acepta que el discurso del mandatario ha dividido al país.

“Yo creo que la polarización a la que apela López Obrador todo el tiempo tiene que ver con el discurso de progresistas contra conservadores, corruptos contra los intereses populares, etcétera, y tiene mucho de cálculo político”, reflexionó.

-¿Hay esperanzas en el futuro?

“Si uno quisiera tener hijos tolerantes, sensibles a los otros, yo sugeriría a los padres introducirlos en el hábito de la lectura, al sumergirse en esas aventuras, van a resultar mejores seres humanos”.

Con información e imagen de EFE

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