Nombre del cuento: Sofía y la montaña de los de r echos
Etiquetas: cuento infantíl
Autor: Sisa Maldonado
Edad: 11 años
Locación: Agato - Otavalo
Fecha de creación: 26 de noviembre de 2025
Edición: F. Jara Educomunicación Imbabura
Proyecto de Educomunicación Imbabura para los Derechos Humanos, la Paz y la Cohesión social.
PRÓLOGO
Sisa Maldonado
La conejita curiosa
En un bosque tranquilo vivía Sofía, una conejita blanca con orejas largas y ojos brillantes.
A Sofía le encantaba explorar y hacer nuevos amigos. Un día, mientras recogía flores, escuchó voces preocupadas que venían del claro del bosque.
Los nuevos amigos
Al acercarse, Sofía encontró a un grupo de niños y ancianos del Pueblo de la Montaña, una comunidad indígena que vivía cerca del río.
Ellos le contaron que algunas personas no querían respetar sus tradiciones ni dejarles usar el bosque como lo habían hecho siempre.
“Pero todos merecemos ser escuchados y respetados”, dijo Sofía con firmeza.
Un problema importante
Los miembros del Pueblo de la Montaña explicaron: —“Hay personas que quieren sacar nuestras plantas, nuestros árboles y nuestros caminos, y dicen que no tenemos derecho a decidir sobre ellos.”
Sofía frunció el ceño.
—“Eso no está bien. Todos tienen derecho a vivir en paz, a cuidar su hogar y a que su cultura sea respetada.”
El plan de Sofía
Sofía reunió a todos los animales del bosque: zorros, aves, tortugas y ardillas.
Les contó lo que ocurría y cómo podían ayudar de manera pacífica.
—“Vamos a enseñar lo importante que es este bosque para el Pueblo de la Montaña. Que vean que aquí vivimos todos y que respetarnos es lo más importante.”
Los animales aplaudieron emocionados.
El gran encuentro
Cuando las personas que querían ignorar los derechos del pueblo llegaron, se sorprendieron al ver a Sofía y a todos los animales formando un gran círculo.
Sofía habló con voz clara:
—“Este bosque es hogar de muchos seres. El Pueblo de la Montaña tiene derechos: a su tierra, a su cultura y a vivir sin miedo. Podemos compartir el bosque si escuchamos y respetamos.”
Un final feliz
Las personas entendieron que habían actuado mal y aceptaron proteger los derechos del pueblo indígena.
El bosque volvió a ser un lugar de paz.
Sofía sonrió mientras el Pueblo de la Montaña celebraba con cantos y colores.
Desde aquel día, la conejita se convirtió en Guardiana de los Derechos del Bosque, recordando a todos que cuidar, respetar y escuchar es la mejor forma de vivir juntos.
Este cuento forma parte de una serie de cuentos infantiles producidos dentro del programa ProCohesion para la Paz, los Derechos Humanos y la Cohesión Social y del proyecto de Educomunicación Imbabura.
Los cuentos contienen el pensamiento, el imaginario y la narrativa de las niñas y los niños de la comunidad indígena de Agato, de la parroquia Miguel Egas Cabezas de Otavalo.