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El poder de la educación
LIBROS

Anna Pi i Murugó
En este extenso volumen se compilan diversos artículos que dan razón y justifican una idea central: “la preocupación sobre el poder de la educación como fuerza motora del desarrollo social y la capacidad de la gente común y corriente para asegurar su acceso a una educación de calidad”.
através de los distintos textos podemos identificar algunas de las características El libro se divide en seis partes que aquí presentamos de manera sucinta. Como se verá, los del cambio educativo promovido por la acción nombres de cada uno de los artículos son bassocial en México desde el ámbito político y ad- tante explícitos. La primera parte, “La cuestión ministrativo (local o comunitario), y desde el de la innovación educacional”, se subdivide ámbito escolar. Destacan así las experiencias de en dos artículos: el de Bonifacio Barba titulala práctica educativa que han contribuido a los do “Cambio en educación: Un mensaje de la procesos de elaboración de políticas públicas o sociedad al sistema político mexicano”, y el de a su renovación. En cada capítulo un especia- Christopher J. Martin, “Las innovaciones de la lista, con base en alguna experiencia concreta, educación popular en el mundo jerárquico de analiza algún problema específico del sistema las políticas públicas”, en ambos se plantean el educativo mexicano, lo cual posibilita al lector enfoque general del proyecto de la publicación. comprender el estado de la participación social La segunda parte, “Los maestros”, tiene en la educación, así como valorar las innovacio- como autores a Alba Martínez Olivé, con “La nes educativas que se han sucedido. Todo esto construcción del Programa Nacional para la Acse realiza en el marco del Seminario patrocinado tualización Permanente de los maestros de Edupor la Fundación Ford con la idea de Christo- cación Básica en Servicio”, y está dedicado a un pher J. Martin de fortalecer la participación so- actor de importancia vital en el ámbito educaticial en la educación. vo, y la implementación de políticas: los maes-
tros. Bonifacio Barba y Alberto Arnaut escriben “Las relaciones SEP-SNTE y el proyecto educativo de México, escenario para comprender a los maestros en la política educativa”; se complementa con los de Susan Street “Contribución del movimiento del movimiento magisterial democrático al cambio educativo en México” y el de Cecilia Fierro, “En los márgenes del sistema. Despuntes en la construcción de Respons-Habilidad en la gestión escolar”. “La comunidad”, título de la tercera parte, incluye el artículo “Participación social en la educación y política educativa: una relación en construcción”, de Miguel Bazdresch Parada, y “El papel de la comunidad en el cambio desde la escuela”, de Sylvia Schmelkes.
La cuarta parte aborda el tema de “La participación social y la gestión”, y en él podemos leer “Centro de Investigación para el éxito y la calidad educativa (CIEXCE). Creación y desarrollo como organización no gubernamental”, de Rosaura Galeana Cisneros; “La participación de la sociedad en las políticas educativas: comenzar el camino”, de Sandra Aguilera Arriaga y Participación Social, corresponsabilidad y gestión centrada en la escuela” de Claudia Santizo.
En la quinta parte, “La investigación y las políticas educativas”, encontramos “Las escuelas primarias en México, ¿orientadas al aprendizaje?”, de Ernesto Treviño; “El impacto de la investigación en la mejora educativa: conceptualización y experiencias”, de Lucrecia Santibáñez, y “La relación entre investigación educativa, política y práctica escolar: ¿entelequia, construcción del conocimiento o solución de problemas?”, de Mercedes de Agüero.
La sexta parte y el epílogo están conformados por los artículos de Bonifacio Barba y Margarita Zorrilla “Práctica educativa, investigación y elaboración de políticas” y “Recomendaciones para la elaboración de políticas”. En este apartado cabe mencionar que se presentan una serie de recomendaciones para mejorar la elaboración de políticas educativas, de forma que sean abiertas a las necesidades sociales, en especial cuando se manifiestan por medio de las demandas y experiencias surgidas de las escuelas, las comunidades y en la actividad de grupos de maestros preocupados por la renovación de la escuela y sus servicios.
Afirman los autores: “Lo urgente ahora, como ha sido en tiempos precedentes, es un cambio de actitudes en diversos actores que intervienen en el campo de la educación”. Ellos son los maestros y directores, diversos grupos y sectores sociales, las asociaciones de padres y los funcionarios e integrantes de los equipos técnicos de las dependencias gubernamentales. El cambio de actitudes que se propugna como necesario permitirá, y en los casos descritos en los distintos artículos del libro permite, impulsar innovaciones en la escuela pública y contribuir a su mejoramiento. Asimismo, en lo que respecta de forma expresa a los gobernantes y funcionarios de primer nivel, ellos deben reconocer la demanda social y garantizar el derecho a la educación. Es decir, las instancias gubernamentales deben transformar en acciones eficaces muchas declaraciones y metas ya formuladas que son socialmente valiosas, al mismo tiempo que parte sustantiva de la política educacional.
Las recomendaciones detalladas al final del texto se agrupan en cuatro grandes apartados:
1. Criterios para la elaboración de políticas para la educación; 2. aspectos significativos de la práctica; 3. componentes importantes de la gestión y 4. la investigación educativa.
Estos aspectos son desglosados con base en la participación social; la tarea de los docentes y los directivos; la pedagogía (es decir, fundar
el diseño de las políticas en una concepción de la educación como proceso centrado en el alumnos, el maestro y en la escuela); las normas y la gestión.
Es importante señalar el espíritu sintético y de resumen de los dos últimos capítulos de este extenso libro, pero la lectura de cada uno de los restantes resulta apasionante y analiza diversas experiencias y aspectos que nos muestran cómo la participación de los distintos sujetos en el proceso educativo y la actividad educativa son necesarios. La educación está comprendida en un entorno comunitario que debe ser considerado. Al tiempo que la comunidad es simultáneamente una condición de singular importancia para la formación de las personas y su desarrollo, que a través de las relaciones sociales que establecen fomentan la confianza, el respeto, la cooperación y la solidaridad.
Asimismo, en el texto se hace patente que la perspectiva de los derechos humanos debe permear la acción del Estado en sus tres niveles de gobierno en el ámbito educativo. En el contexto de modernización y globalización en el que las sociedades, las escuelas y los ciudadanos actúan y conviven, un propósito fundamental para las políticas públicas educativas es orientar los recursos del Estado a salvaguardar los valores humanos que forman las personas y construyen las comunidades. De ahí que al diseñar las políticas sea necesario ver primero la acción social que innova y dirigir la mirada al aprendizaje y a la equidad en la distribución de todo recurso que administra el Estado. Si bien muchas veces la aplicación de las políticas educativas, aun las que son innovadoras, tienen dificultades de eficacia y continuidad, el fortalecimiento de los vínculos con la acción social, con las comunidades y sus culturas, con sus necesidades de aprendizaje, así como el fortalecimiento de las relaciones entre el maestro, la escuela y la comunidad, son factores que fomentan la calidad educativa y el logro de buenas prácticas pedagógicas y de gestión. Los casos plasmados en el libro, también con sus errores, muestran que la teoría bien puede llevarse a la práctica y que los maestros, directores, padres de familia y quienes ostentan cargos políticos debemos ser sus promotores, ya que la participación social no se puede crear desde las instancias gubernamentales exclusivamente. Estas instancias tienen una visión externa al problema, necesaria, pero que debe complementarse con la participación social de los sujetos protagonistas.
Reseña del libro:
Innovación social en educación. Una base para la elaboración de políti-
cas públicas, Bonifacio Barba, Margarita Zorrilla (coordinadores), Universidad de Aguascalientes - Siglo Veintiuno Editores, México, 2010, 492 pp.

