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La Tristeza es un punto Conociendo a nuestros de partida para discernir Diáconos: Diácono Roberto Cortés la voluntad de Dios
“El Señor está cerca de los contritos de corazón” Sal 34,18 por Blanca Primm
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ste otoño, en particular, me ha hecho recordar que la vida tiene sus diferentes etapas, así como la naturaleza nos enseña con sus diferentes estaciones. Hoy al mirar por la ventana vi al viento soplar sobre los árboles y a las hojas caer como gotas de agua, llegando a cualquier lugar donde el viento las empujaba. Así nos sentimos muchas veces cuando nos topamos con acontecimientos de la vida que escapan de nuestro control. Nos sentimos impotentes. Muchas veces la tristeza nos invade y no sabemos cómo manejarla o qué esperar de ella. Es por eso que quisiera compartirles algunas ideas que el Papa Francisco mencionó en su Audiencia General de los miércoles, el pasado 26 de octubre, sobre la desolación, en el que siguió enseñando sobre su ciclo del discernimiento: El Santo Padre explicó que “el problema es cómo poder leerla, (a la desolación) porque también tiene algo importante que decirnos, y si tenemos prisa en liberarnos de ella, corremos el riesgo de perderla”. En este sentido, el Papa Francisco explicó que “todos querríamos una vida siempre alegre, feliz y satisfecha” aunque defendió que “esto,
además de no ser posible, tampoco sería bueno para nosotros”. “De hecho, el cambio de una vida orientada al vicio puede empezar por una situación de tristeza, de remordimiento por lo que se ha hecho”, señaló. A continuación, dijo que cuando Dios toca el corazón con tristeza, es “una invitación a empezar un camino”. A partir de esta idea, señaló que “es importante aprender a leer la tristeza”, algo que en nuestro tiempo “está considerada de forma negativa, como un mal del qué huir a toda costa, y, sin embargo, puede ser una campana de alarma indispensable para la vida, invitándonos a explorar paisajes más ricos y fértiles que la fugacidad y la evasión no consienten”. “La tristeza a veces trabaja como semáforo: ‘¡Párate, párate! Está rojo aquí. Párate’”, dijo más tarde. Asimismo, explicó que para aquellos que quieren realizar el bien, “la tristeza es un obstáculo con el que el tentador quiere desanimarnos”. “El camino hacia el bien, recuerda el Evangelio, es estrecho y cuesta a-rriba, requiere un combate, un vencerse a sí mismo”, añadió el Papa. La Tristeza continúa en la página 2
Por Diácono Roberto Cortés
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oy el Diácono Roberto Cortés, nací en el estado de Guanajuato, México. En 1991 emigré a los Estados Unidos y fui residente del estado de California hasta 1997. Ese año me mudé para Tennessee por cuestiones de trabajo. Cuando llegué aquí, comencé a trabajar para Monterey Mushrooms (hasta el momento). Allí conocí a mi esposa, María Guadalupe Cortés o “Lupe” como muchos la conocen, y con quien tengo 23 años de casado (un gran Diácono quien nos preparó). No tenemos hijos, por voluntad de Dios, pero tenemos un ejército de ahijados/ ahijadas. Desde que llegué a Tennessee comencé a asistir a la Parroquia de Santo Tomás Apóstol en Lenoir City a la cual estoy asignado. Por muchos años nada más asistía a la Santa Misa, pero no servía en ningún ministerio. Fue hasta muchos años después que comencé a participar un poco. Puedo decir que estaba al margen de la Iglesia. En 2011, se me dio la oportunidad de vivir el retiro parroquial de Juan XXIII donde tuve una conversión. En ese tiempo, Padre Jesús Guerrero fue asignado seminarista en Santo Tomás, y fue quien me ayudó mucho en el crecimiento de mi fe ya que contestaba muchas de las inquietudes que tenía. Desde entonces, comencé a estar ac-
tivo en mi parroquia, involucrándome en más ministerios. Participé de la Escuela Bíblica Católica la cual me ayudó a enamorarme más de mi fe, de Nuestro Señor Jesucristo, su Esposa la Iglesia, y sus enseñanzas. En el año 2012, mi párroco, el Diacono José Rivera y el padre Jesús Guerrero fueron quienes sembraron la semilla del diaconado. En 2016, durante una exposición del Santísimo fue que finalmente Dios utilizó a Diácono Al Forsythe para que la semilla brotara y por la gracia de Dios fui ordenado el 11 de Junio de 2022. Que el Señor Dios Todopoderoso los bendiga y la Santísima Virgen los proteja. ■
Homenaje a nuestra querida Gladys Herrera: “Nos dejas recuerdos inolvidables” Por Blanca Primm
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l pasado 21 de octubre recibimos una noticia muy triste porque nos dejó una gran amiga y compañera de camino. Partió a la casa del Padre nuestra querida hermana Gladys Herrera, originaria de Maracaibo, Venezuela. Era nuestra hermana, pero también nuestra madre, especialmente, para muchos, quienes la conocimos y queríamos dentro de la comunidad hispana de la Catedral del Sacratísimo Corazón de Jesús en nuestra Diócesis de Knoxville. Su gran alegría, su profunda fe, su cariño por las familias, por los matrimonios y parejas que acompañó a lo largo de sus 25 años en Knoxville, junto con su querido esposo, don Juan Antonio, fueron un testimonio del amor de Dios en medio de nosotros. Gladys fue una mujer entregada y comprometida con Jesús y Su Iglesia. Proveniente de una familia muy católica, siempre inculcó en su familia, a sus hijos, hijos políticos, nietos y hasta bisnietos, el amor a Dios con su ejemplo y vida de piedad. Gladys fue siempre una señora de su casa, cocinaba muy rico, siempre tenía una comidita o un postre que compartir con los demás. Era muy generosa y con una personalidad muy cálida, muy bondadosa y alegre. También acompañaba a mucha gente por telé-
fono. Tenía innumerables amigas de distintos países y siempre transmitía esperanza y sabiduría con sus consejos que nos encaminaban por el buen camino de la vida. A continuación, les compartimos un extracto de la entrevista que le hicimos a Gladys, que en paz descanse, y a su esposo Juan Antonio, en mayo pasado en nuestro programa La Voz Católica: Blanca Primm: Gladys y Juan Antonio, ustedes participaron en la realización del primer plan pastoral hispano junto con otros líderes, ¿Cuál fue su experiencia en este suceso? Gladys: Fue un crecimiento espiritual, nos dio más conocimiento de nuestra Iglesia, de nuestra comunidad, conocimos más a fondo a nuestros sacerdotes. Aprendimos mucho. Nos dio más luz y entendimiento del Evangelio, llevar la palabra de Dios a los demás. Fue un compromiso mayor. Blanca Primm: En la Catedral han preparado muchas parejas para el sacramento del matrimonio. ¿Cuáles serían los consejos que darían a las parejas para cuidar su amor entre ellos y para que sean perseverantes en su matrimonio? Gladys: Lo primero que les decíamos es que tenían que tener la presencia de Dios allí en su hogar primero que nada, la presencia de Dios. Jesús con ellos y la oración. Deben
Apostolado Hispano Católico Blanca Primm, directora Maria Hermon, asistente administrativa 805 S. Northshore Dr., Knoxville 37919 T 865-637-4769, F 865-584-7538 E-mail: lacosecha@dioknox.org www.dioknox.org, FB: lacosechaDOK
estar pendientes a la oración porque eso es lo que va hacer bendecir su hogar y lo que va a hacer un hogar feliz. Si están de espaldas a Cristo no tenemos felicidad. Eso era lo que más les decíamos. Y les recomendábamos, respeto entre ambos, respeto mutuo, fidelidad a su pareja, comunicación y la confianza. Nosotros, Dios mediante siempre hemos tenido a Dios y su presencia, y ya vamos a cumplir 63 años de casados y bien apoyados por Dios. Juan Antonio: A esto que ha dicho Gladys, siempre deben tener claridad. Claridad, en cualquier problema, por insignificante que sea, discutir entre los dos, llegar a un acuerdo y seguir la vida, porque la vida todos los días es problemas que hay que irlos solucionando: el trabajo, la salud, el dinero, tantas cosas que afectan a la pareja, que hay que irlo solucionando todos los días, Gladys: pero si estamos en la presencia de Dios, todo es mejor y todo se soluciona. Blanca Primm: ¿Como definirían el amor que se tienen? Gladys: Pasamos 5 años de amores, y como eran antes los novios, nada más que agarraditas de manos, y en una descuidadita un besito, (se ríe) del resto nada. Eso eran los amores y fueron 5 años de amores, respeto, constancia y perseverancia.
Juan Antonio: Lo que nosotros recomendamos a las parejas es lo que hacemos nosotros, constancia, fidelidad, respeto mutuo entre uno y otro, eso es importantísimo. Gladys: Cuando se pierde el respeto ya no hay nada. Esto de ponerle maltrato, ni de palabra, ¡nada! El amor es respeto, el amor es consideración, es no le hagas a otro lo que no quieres que te hagan a ti. Amor es no pedir perdón, había una película que decía que amar es no tener que pedir perdón, porque tu pides perdón porque ofendiste, porque hiciste daño Herrera continúa en la página 2
Procedimiento de la Diócesis de Knoxville para reportar casos de abuso sexual Cualquier persona que tenga conocimiento real o que tenga una causa razonable para sospechar de un incidente de abuso sexual debe reportar primero tal información a las autoridades civiles apropiadas, luego a la oficina del Obispo, 865-584-3307. Para asistencia en español durante el contacto inicial, favor de comunicarse con Blanca Primm, llamando al 865-862-5743. ■
Él Habita Entre Nosotros por el Obispo Richard F. Stika
Un sacrificio vivo La Misa es la fuente para vivir y llegar a ser los santos que todos estamos llamados a ser El fuego del Espíritu. Así como Dios advirtió a los israelitas que no dejaran que el fuego del altar se apagara, así también debemos desear mantener el fuego del Espíritu Santo ardiendo continuamente sobre el altar de nuestro corazón (cf. Levítico 6, 5). Siempre debemos cuidarnos del egoísmo del pecado y prestar atención a la advertencia de San Pablo: “No extingan el Espíritu” (1 Tesalonicenses 5:19). Los “otros” altares. San Juan Crisóstomo habla de una hermosa manera en que podemos invocar al Espíritu Santo sobre el altar de nuestro corazón, así como sobre todos los “otros” altares a nuestro alrededor en los que debemos ofrecernos: Así como el sacerdote se para ante el altar e invoca al Espíritu Santo, así también podrás invocar al Espíritu divino, no por palabras, sino por obras. Porque nada mantiene y enciende tanto el fuego del Espíritu como el aceite de la misericordia, cuando es abundantemente derramada…. Por tanto, cuando mires a un pobre, cree que lo miras en un altar de sacrificio”. Ser un portador de Cristo para los demás. El Papa Benedicto XVI nos recuerda que “Quien no da a Dios, da muy poco”. Para vivir verdaderamente nuestra Misa, debemos esforzarnos por morir a nosotros mismos en el altar de nuestro corazón para ser transformados cada vez más y más por el Espíritu Santo en aquel que buscamos dar a los demás. Nosotros, pues, que hemos recibido a Cristo en la Santa Comunión, debemos salir al mundo, y desde la “píxide” de nuestro corazón, como la que contiene a las hostias consagradas, dar a Cristo a los demás en todo lo que hacemos. Así nos volveremos santos. ■
Encuentro Durante el mes de octubre una delegación de la Diócesis de Knoxville participó en el Encuentro Regional de Pastoral Hispana en San Agustín, Florida. El Encuentro fue organizado por SEPI -Instituto Pastoral del Sureste- y tuvo el tema “Fortaleciendo los puentes que nos unen”. En la foto están (de izq. a der.) Padre Arthur Torres, párroco de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro y representante de la oficina de vocaciones; David Lopez, de la Basílica de los Santos Pedro y Pablo, ambos de Chattanooga; Blanca Primm, directora de la Oficina del Apostolado Hispano; Zulay Navarro-Pickering, de la parroquia Todos los Santos, Knoxville; Dra. Sedonna Prater, Superintendente de las Escuelas Católicas de la Diócesis de Knoxville; Maria Hermon, asistente administrativa de la Oficina del Apostolado Hispano y (atrás) Padre Jorge Mejia, párroco asociado de Todos los Santos en Knoxville.
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guna prueba será superior a lo que nosotros podemos hacer”. En este sentido, el Papa animó a los fieles a “no huir de las pruebas: ver qué significa esta prueba, qué significa que yo estoy triste: ¿por qué estoy triste? ¿Qué significa que yo en este momento estoy desolado? ¿Qué significa que estoy desolado y no puedo ir adelante?”. “Y si no la vencemos hoy, nos levantamos otra vez, caminamos y la venceremos mañana. Pero no permanecer muertos -digamos así- no permanecer vencidos por un momento de tristeza, de desolación: ir adelante”, concluyó el Papa. Quisiéramos invitarlos al Retiro sobre Discernimiento Espiritual el próximo viernes 18 de noviembre. Fuente: Aciprensa ■
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Un Joven Ejemplar en la Comunidad
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uchando por la santidad. Cada noviembre, cuando la Iglesia celebra a todos los santos y ora por todas las almas, me acuerdo de las palabras del celoso apologista católico Léon Bloy (1846-1917): “La única tristeza real, el único verdadero fracaso, la única gran tragedia en la vida, es no llegar a ser santo”. Para que no nos desanimemos, Santa Teresa de Kolkata (Calcuta) nos recuerda que “Los santos son solo pecadores que siguen intentándolo”. Y añadiría, santos son aquellos que se esfuerzan por vivir su Misa todos los días. La Misa que debemos vivir. ¿Alguna vez has pensado en tu vida como una Misa de toda la vida? Comenzó el día de tu bautismo cuando te convertiste en un “templo de Dios” (1 Corintios 3:16) y comenzaste una nueva vida en Cristo, compartiendo su misión como sacerdote, profeta y rey. Del templo construido de piedra, Dios dijo a Salomón: “He escogido este lugar para mi casa de sacrificio.” Del templo de los bautizados, San Pedro dice: “Como piedras vivas, sean edificados en un templo espiritual para ser un sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo” (1 Pedro 2:5). Verdaderamente, pues, son las Palabras de Jesús dirigidas a cada uno de nosotros: “En tu casa celebraré la Pascua”. (Mateo 26:18). Un sacrificio vivo. Si somos “bautizados en un solo cuerpo” y somos “templos de Dios” (1 Corintios 12:13; 3:16), y compartimos el “sacerdocio real” de Cristo (1 Pedro 2:9), entonces
CORTESIA BLANCA PRIMM
la Misa no es algo en lo que participamos una vez a la semana, sino algo que hay que vivir cada día como “sacrificio vivo en Cristo” (de la Plegaria Eucarística IV). Y para serlo, debemos “vivir el ofertorio” y continuar invocando al Espíritu Santo en todo lo que hacemos para que Su acción creativa y renovadora pueda traer a Cristo al mundo a través de nosotros. Por eso San Pablo nos exhorta: “Todo lo que hagas, hazlo de corazón, como para el Señor y no para los demás” (Colosenses 3:23). Así vivimos la Misa de nuestro corazón. Vivir el ofertorio. Cristo Jesús es a la vez sacerdote y víctima, aquel que “ofrece” y es “ofrecido” en cada Misa. Pero Él no quiere hacerlo sin nosotros. Muy simple, “Cristo murió por nuestros pecados para hacer de nosotros una ofrenda a Dios” (de la Liturgia de las Horas). Nosotros también debemos “ofrecer” y ser “ofrecidos” por [Cristo], y con Él, y en Él como el sacrificio más agradable y aceptable a Dios. Jesús quiere unir nuestra pobre ofrenda a su perfecta ofrenda—a Su sacrificio de alabanza, acción de gracias, expiación por nuestros pecados y petición al Padre. Consideren esta oración del ofertorio de la Misa: Acepta, Señor, las ofrendas que te hemos traído…, para que la oblación de tus fieles se transforme en el sacrificio de Aquel que quiso en Su compasión lavar los pecados del mundo…. (Fiesta del Bautismo del Señor). Sacrificios espirituales. Lo que Dios dijo a los israelitas con respecto a la ofrenda que debían llevar al Templo se aplica también a nuestra participación en la Misa: “Nadie se presentará ante el Señor con las manos vacías” (Éxodo 23:15). Y estos
son los “sacrificios espirituales” que representan nuestras alegrías y desilusiones, nuestras cruces y sufrimientos, nuestras vocaciones y trabajos, nuestras oraciones y deseos. Como lo expresó el Papa Pío XII en su encíclica sobre la Sagrada Liturgia: Que las almas de los cristianos sean como altares en cada uno de los cuales una fase diferente del sacrificio, ofrecido por el sumo sacerdote, vuelve a la vida, por así decirlo: dolores y lágrimas que limpian y expían el pecado; súplica a Dios que traspasa el cielo; la dedicación e incluso la inmolación de uno mismo hecha con prontitud, generosamente y con seriedad; y, finalmente, esa íntima unión por la cual nos comprometemos nosotros, y todo lo que tenemos, con Dios en quien encontramos nuestro descanso. “La perfección de la religión es imitar a quien se adora” (Mediador Dei, 152). Invocando al Espíritu Santo. En la Misa de nuestro corazón debe haber también una “epíclesis”, literalmente “un llamado a que el Espíritu Santo descienda”. En la Misa, es ese momento central de invocación cuando el sacerdote ordenado pide al Padre que envíe su Espíritu sobre las ofrendas del altar “para que lleguen a ser el Cuerpo y la Sangre de nuestro Señor Jesús Cristo”. Pero en la Misa que nos esforzamos por vivir, debemos continuar invocando al Espíritu Santo en todo lo que hacemos. Porque como el Padre Jean Corbon señala: “Es en la epíclesis del corazón donde se determina toda la santidad cristiana”. Qué tan resueltos debemos ser, entonces, para hacer una ofrenda total de nosotros mismos en cada Misa, porque “el Espíritu transformará sólo lo que le ofrezcamos a Él” (The Wellspring of Worship, 212).
“Ofrezcan sus cuerpos como ofrenda viva, santa, agradable a Dios: éste es su culto espiritual “—Romanos 12:1.
entonces no hagas daño ni ofendas. También hemos preparado niños para bautizar, que es bellísimo. Venían los padres y padrinos a la Catedral. Unas veces nos llamaban los sábados a las 7 de la noche con algún problema familiar y les decíamos, nosotros no somos consejeros, nosotros damos clase de biblia y charlas de bautismo y les dábamos el número de la parroquia. Más de una vez nos llamaron con graves problemas, eso fue un sábado en la noche, y al día siguiente se me presentó en la iglesia el señor que me había llamado y me trajo a su esposa para que yo hablara con ella, porque yo le había llegado a su corazón, y quería que yo llegara al corazón de la señora, ¡imagínate tú! Blanca Primm: Gladys y Juan Antonio ustedes se graduaron de la Escuela Bíblica Católica de la Universidad de Dallas en el 2015. ¿Cuál fue su experiencia? Fue maravilloso, esos años nos hizo mucho bien porque a pesar de que teníamos mucho tiempo trabajando para la Iglesia no conocíamos en sí la Biblia, y en esos 4 años verdaderamente tuvimos maravillosos profesores que llegaban de Texas. ¿Por qué es importante conocer la Biblia y estudiarla? Porque nos nutre mucho, espiritualmente es lo mejor que uno puede hacer, tener el libro en la mesa de noche, de tu cama, ahí cerquita, yo la 2 noviembre 2022
leo todos los días, ahí y cuando tengo momentos de depresión, porque vivimos estos dos años y nos pegó terrible, y tomas la Biblia y te lees algún pasaje de Pablo, o te lees las cartas de Pedro, de Santiago, y eso te reanima y viene un momento que te dices bueno si ellos vivieron épocas más difíciles que nosotros, ¿por qué nosotros no vamos a salir de esto?, y te reconforta y vuelves a tener tu espíritu lleno, y yo te digo, yo no leía la Biblia, y allá en Venezuela el sacerdote siempre nos la regalaba y yo la tenía de adorno en mi casa hasta que murió mi mamá, y mi mamá sí leía la Biblia todo los días y entonces en ese dolor tan grande empecé yo a leer la Biblia y a recordar a mi mamá todos los días leyendo la Biblia y ya tiene mi mamá 44 años de muerta y yo 44 años leyendo la Biblia. Un día el padre en Venezuela me dijo: No me gusta como que usted tiene la Biblia de adorno. La Biblia es para leerla, porque uno la abre y está nuevecita, entonces ahora no, yo tengo una Biblia ahí que esta toda rota y me recuerda que la uso siempre. ----Gladys se robó el corazón de muchos pero creo que especialmente el de Dios, quien la escogió para ser su discípula y misionera de su amor en Knoxville. Para escuchar la entrevista completa la pueden buscar en nuestro canal de YouTube: Diócesis de Knoxville (mayo 2022) ■
“Algunos deciden abandonar la vida de oración, o la elección emprendida, el matrimonio o la vida religiosa, empujados por la desolación, sin pararse antes a leer este estado de ánimo, y sobre todo sin la ayuda de un guía”, lamentó el Papa. Recordó también que “una regla sabia dice que no hay que hacer cambios cuando se está desolado. Será el tiempo sucesivo, más que el humor del momento, el que muestre la bondad o no de nuestras elecciones”. “Si sabemos atravesar la soledad -continuó el Papa-,y desolación con apertura y conciencia, podemos salir reforzados bajo el aspecto humano y espiritual. Ninguna prueba está fuera de nuestro alcance; nin-
Felicidades a David López Por Brittany Garcia
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avid López da ejemplo del gran impacto que un joven puede tener en su comunidad cuando vive su fe plenamente y al servicio de los demás. El 2 de octubre de 2022 la Basílica de los Santos Pedro y Pablo anunció que David Lopez ganó el premio del Siervo de Dios, Padre Patrick Ryan. Se entrega este premio cada año a los miembros de la parroquia que ejemplifican la virtud teologal de la caridad, en imitación del heroico testimonio del Padre Patrick Ryan. Inspirado por su ejemplo de esa misma medida de caridad hacia todos nuestros hermanos y hermanas necesitados, el destinatario de este premio ha sido reconocido por su servicio desinteresado, especialmente hacia los pobres y necesitados. La Basílica de Santos Pedro y Pablo escribió lo siguiente sobre David: “David López es un joven comprometido en nuestra Basílica de Santos Pedro y Pablo. Se distingue por su compromiso fiel en la práctica de la fe. Se dedica al grupo de Jóvenes Adultos Hispanos de la Basílica como líder, compartiendo temas de fe y reflexiones, ayudando a otros jóvenes con consejos, e interesándose por sus inquietudes y necesidades con generosidad. David es también el representante
Diócesis de Knoxville Viviendo nuestra fe Católica Romana en el Este de Tennessee
diocesano de la Basílica para el Grupo de Jóvenes Hispanos, trabajo que realiza con entrega generosa, humilde y fiel. Su carácter inspira el respeto de quienes lo conocen. David es catequista en la Casa de Oración Inmaculada Concepción, servicio que realiza con amor, entusiasmo y responsabilidad cristiana. Conocido por su fidelidad a Dios y a la parroquia, David López sirve con obediencia, mostrando respeto por la comunidad y sus líderes. Estas cualidades han llevado a su nominación para el Premio del Siervo de Dios, Padre Patrick Ryan”. ¡Muchas gracias por tu entrega, David! Nos haces a todos sentir orgullo de que formas parte del ministerio de la Pastoral Juvenil Hispana. ■ lacosechadok.com