Imprudencia cobra nueve vidas

La madrugada del lunes, un trágico accidente en la carretera central cobró la vida de nueve personas. Un autobús de la empresa Guadalupe, que transitaba por la sinuosa y congestionada vía desde Ticlio hasta San Mateo, se volcó y terminó en el río Rímac, sobrecargado debido a las intensas lluvias.

Según algunas versiones, el accidente ocurrió cuando un camión cerró el paso al autobús, causando que el conductor perdiera el control del vehículo.

Según versiones de pasajeros y de la misma empresa, un camión habría intentado sobrepasar al ómnibus en un espacio estrecho y, debido a la velocidad, la neblina y la llovizna, el conductor perdió el control y el bus cayó al río. Otra hipótesis apunta a que el conductor se habría quedado dormido por el cansancio.

El lamentable suceso nos entristece y nos hace reflexionar sobre la seguridad en nuestras carreteras. Se supone que Sutran realiza controles y fiscalizaciones constantes a las empresas de transporte, pero parece que no están cumpliendo con su trabajo.

Esta situación nos lleva a reflexionar sobre la necesidad de redoblar los esfuerzos en el control de tiempo de manejo de los conductores, niveles de velocidad y seguridad en esta transitada carretera.

A lo largo de los años, diversos gobiernos han prometido una vía alterna para descongestionar la carretera central, pero hasta ahora, no se han materializado soluciones efectivas.

Es fundamental que las autoridades tomen medidas para mejorar la seguridad en nuestras carreteras, y que los conductores de vehículos de transporte público sean conscientes de la responsabilidad que tienen al llevar a tantas personas a bordo.

La vida de cada pasajero está en sus manos, y es vital que se conduzca de manera responsable y segura para evitar futuras tragedias. Son nueve familias enlutadas y que por más que la empresa pague los gastos correspondientes de sepelio, el vacío que dejan no será llenado con nada. La pregunta acá es: ¿La empresa será responsable del sustento económico de estas familias? Es muy probable que no.

Por otro lado, se espera que la empresa Guadalupe asuma la responsabilidad de cubrir los gastos médicos de los heridos, el traslado a sus lugares de origen y los sepelios de las personas fallecidas. Nuestras condolencias a todas las familias que han perdido a sus seres queridos en este trágico accidente.

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