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El rol fundamental del fashion law y la propiedad intelectual en el diseño cultural

La industria de la moda es un ámbito en constante evolución y expansión, que va mucho más allá de las prendas y accesorios. Detrás de cada diseño y cada pasarela, existe una compleja estructura legal que regula esta apasionante industria. El fashion law, una disciplina jurídica en ascenso, se encarga de analizar y asesorar en temas como propiedad intelectual, derecho laboral, protección de marcas y patentes, beneficios fiscales, asesoría en la compra, exportación o importación de productos para elaboración de piezas, entre otros, en el contexto de la moda; así como para el amparo o defensa de las mismas o asegurar el cumplimiento de las normativas que rigen este dinámico sector.

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En esta publicación nos adentraremos en esta fascinante especialidad, explorando cómo el derecho la moda (fashion law), La propiedad intelectual y el diseño cultural se entrelazan para garantizar la protección de la creatividad y la innovación de los creadores y diseñadores y sobre todo la protección del trayecto cultural de cada país.

La moda es un ámbito dinámico y altamente competitivo, siendo impulsada por la innovación, el diseño y la identidad de marca. Las empresas de moda, los grandes diseñadores y hasta los que están empezando a incursionar en la moda invierten una cantidad significativa de tiempo, esfuerzo y recursos en el desarrollo de productos únicos y distintivos que atraigan a los consumidores. Sin embargo, la falta de protección adecuada puede llevar a la apropiación no autorizada de ideas y diseños, lo que pone en peligro la integridad de las marcas, el trabajo creativo de los diseñadores y hasta la identidad cultural de alguna región o comunidad si se ve afectada por una apropiación indebida de algún diseño cultural.

En razón de todo lo anterior, podemos determinar que uno de los componentes clave del Fashion Law es la protección de la propiedad intelectual, que incluye: derechos de autor, marcas registradas y diseños industriales.

Los derechos de autor son especialmente notables en este ámbito, ya que brindan protección a las creaciones originales, como patrones, diseños de prendas de vestir, obras artísticas asociadas con la moda, obras gráficas o textiles, etc. Los diseñadores, entonces, pueden registrar sus creaciones con los derechos de autor para evitar la copia no autorizada y asegurar la exclusividad de sus creaciones.

Además de los derechos de autor, las marcas registradas también juegan un papel importante en la moda. Las marcas registradas protegen los nombres, logotipos y otros signos distintivos que identifican los productos y servicios de una empresa. En la moda, las marcas registradas son esenciales para construir y mantener la reputación de una marca, así como para evitar la confusión en el mercado. Los consumidores asocian ciertos nombres o logotipos con la calidad y el estilo de una marca en particular, lo que las convierte en un activo valioso para las empresas de moda.

Otro aspecto crucial de la propiedad intelectual en la moda es la protección de los diseños industriales que se refieren a las características estéticas de un producto, como la forma, los colores y los elementos ornamentales. En el ámbito de la moda, los diseños industriales protegen la apariencia visual de prendas de vestir, accesorios y otros artículos relacionados. Al obtener una protección adecuada de los diseños industriales, los diseñadores pueden, al igual que en los derechos de autor, evitar la copia no autorizada de sus creaciones y salvaguardar su identidad visual única en el mercado.

Teniendo en cuenta todo lo expuesto previamente, es normal que nos surjan las siguientes interrogantes: ¿Qué es el diseño cultural?, ¿Cuál es su relevancia para los países? y ¿Qué papel juega la propiedad intelectual en el diseño cultural? Empezaremos por determinar que un diseño cultural es un producto, servicio o solución que lleve un proceso que se adapte

Los derechos de autor son especialmente notables en este ámbito, ya que brindan protección a las creaciones originales, como patrones, diseños de prendas de vestir, obras artísticas asociadas con la moda, obras gráficas o textiles, etc. Los diseñadores, entonces, pueden registrar sus creaciones con los derechos de autor para evitar la copia no autorizada y asegurar la exclusividad de sus creaciones.” a las características, necesidades y valores de una determinada cultura donde se toman en cuenta aspectos como el lenguaje, las tradiciones, las creencias, las costumbres, los símbolos y las experiencias de este grupo cultural específico. El diseño cultural se puede emplear en diversas áreas como el diseño gráfico, el diseño de productos, diseño de interiores, diseño de moda, entre otros. Por ejemplo, en el diseño de productos se busca que éste se adecúe al contexto cultural en el que será utilizado, considerando aspectos como el tamaño, la forma, los colores, los materiales, etc

La relevancia de los diseños culturales radica en la promoción de la diversidad cultural de cada país en la industria de la moda, por lo que es imperativa la protección de la propiedad intelectual en este rubro. Además, el reconocimiento y la promoción de los diseños culturales también puede generar oportunidades económicas y sociales para las comunidades que los crean. Al proteger legalmente estos diseños, se fomenta la colaboración y la compensación justa entre los diseñadores y las comunidades culturales.

Muchas culturas tienen técnicas de diseño y patrones tradicionales que son únicos y representativos de su identidad cultural, tal es el caso de nuestro país con sus textiles y artesanías Nahua pipil, por ejemplo. El fashion law, en especial la propiedad intelectual ayudan a proteger y preservar estos diseños culturales, garantizando que no sean copiados o explotados sin el consentimiento y reconocimiento adecuados; tal como ocurrió en el 2019 con el caso de Apropiación Cultural en una de las colecciones de la reconocida marca Carolina Herrera donde ocupó técnicas de bordados y patrones de comunidades indígenas originarias de México. Este es solo uno de muchos casos en los que se ha visto afectada una comunidad por la falta de protección a sus diseños culturales.

Podemos concluir, entonces, que el fashion law y la propiedad intelectual están estrechamente entrelazados y desempeñan un papel fundamental para brindar una sólida protección de las creaciones de los diseñadores y de los diseños culturales en la industria de la moda. A través de la propiedad intelectual los diseñadores pueden registrar y proteger sus diseños y creaciones, ya sea a través de diseños industriales o derechos de autor, otorgándoles seguridad jurídica para prevenir la copia no autorizada y la apropiación indebida, así como para exigir el reconocimiento y la compensación en caso de infracción y también para evitar confusiones en el mercado y proteger así la reputación de los creadores.

En El Salvador ya estamos empezando a labrar el camino para la protección de esta industria, pero debemos trabajar aún más para que esta combinación de marcos legales busque fomentar en nuestro país la creatividad, la innovación y sobre todo el respeto por todos los diseñadores y por la protección de nuestros diseños culturales, promoviendo así una industria de la moda más equitativa y sostenible. Al proteger los diseños en general y nuestros diseños culturales se garantiza que la moda siga siendo un reflejo de la diversidad y de nuestra riqueza cultural, la cual debemos dar a conocer al mundo entero.

René Alfonso Padilla y Velasco