




"Yo, el Señor, soy su guardián; todo el tiempo riego mi viña. Día y noche cuido de ella para que nadie le haga daño." (Isaías 27:3)
Qué maravilloso es saber que el mismo Dios se presenta como nuestro guardián personal. No encarga esta responsabilidad a ángeles ni a profetas; Él mismo nos protege. Este versículo nos recuerda que estamos bajo la mirada atenta y amorosa del Señor, quien cuida de nosotras con dedicación y ternura constante
El texto habla de una viña que es regada todo el tiempo. Esa viña eres tú. En medio de un mundo seco y hostil, Dios te riega con su gracia cada momento, no solo cuando oras o lees la Biblia, sino en cada instante de tu vida. Su cuidado no es esporádico ni condicionado: es permanente, constante, y lleno de intención.

La imagen de Dios como jardinero cuidadoso nos revela que no solo vela por nuestra seguridad, sino que también trabaja activamente para que florezcamos Él no permite que el mal nos destruya, y al mismo tiempo, se asegura de que tengamos lo necesario para crecer y dar fruto. Su protección va de la mano con su provisión.

Cuando Isaías escribe "día y noche cuido de ella", entendemos que no hay momento en que Dios se desconecte de nuestra vida. Ni la oscuridad ni el cansancio limitan su actuar. Él está despierto cuando tú duermes, atento cuando tú dudas, presente cuando tú clamas No hay interrupciones en su amor ni vacíos en su vigilancia.
Así que, querida lectora, confía. Aunque el entorno se torne amenazante y la incertidumbre te visite, recuerda esta promesa: nadie te hará daño, porque tu guardián es el Señor. Vive en paz, camina con seguridad y recibe su cuidado constante Dios está contigo, y eso basta

Querida lectora
¡Estamos ya a mitad de este 2025! Un tiempo clave para reflexionar, reordenar y avanzar Quiero animarte a no desanimarte, sino a reinventarte Si hasta ahora las cosas no han salido como esperabas, no te preocupes Aún hay tiempo para retomar fuerzas, redefinir tus estrategias y seguir luchando por los sueños y metas que Dios ha sembrado en tu corazón ¡No te detengas!
Recuerda, mi reina, mi princesa: si Dios está contigo, ¿quién contra ti? ¡Nadie! No permitas que las circunstancias te roben el gozo ni la visión Camina con fe, con la frente en alto y el corazón encendido Como dice Romanos 8:31: “¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” Aférrate a esa promesa y sigue adelante con valentía.
En esta edición especial, desde México tendremos una entrevista exclusiva con la Pastora Flor Rentería, quien nos comparte parte de su vida, su llamado y detalles de su más reciente libro: Dones Operacionales Una conversación transformadora que te inspirará a descubrir el propósito de Dios en tu vida
Además, encontrarás artículos de moda, belleza, inspiración y bienestar, pensados especialmente para ti, mujer valiente y emprendedora Gracias por acompañarnos ¡Débora Revista sigue creciendo contigo, y lo mejor aún está por venir!
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DIRECTORIO
Gladys Alvarez CEO FOUNDER
Jackeline Alvarez Directora Perú
Jean Carlos Camán Director Periodístico
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RECORDATORIO
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Vestirse es una forma de comunicar quiénes somos, qué representamos y cuál es nuestra misión. Para una mujer con propósito, cada ocasión es una oportunidad para reflejar seguridad, identidad y elegancia Ya sea que te estés preparando para hablar en público, asistir a un evento o grabar contenido para redes, tu imagen puede convertirse en una herramienta de impacto positivo.
Cuando se trata de hablar en público o liderar una reunión, opta por prendas que transmitan autoridad sin perder feminidad. Los blazers estructurados, combinados con pantalones de corte recto o faldas lápiz, son aliados clave Los colores sólidos como el azul marino, el blanco o el rojo burdeos ayudan a proyectar confianza. Acompaña tu look con accesorios discretos pero significativos, como un collar con mensaje o una pulsera con versículo.
En eventos sociales o conferencias, apuesta por vestidos midi con cortes modernos y telas que den libertad de movimiento. El equilibrio entre comodidad y estilo es esencial para que puedas desenvolverte con naturalidad. No temas incluir detalles que hablen de ti: un estampado que ames, un bolso artesanal o un maquillaje sobrio que resalte tu rostro.
Para las grabaciones o apariciones en redes sociales, elige outfits que conecten con tu audiencia sin dejar de ser auténticos. Colores que contrasten con tu fondo, telas que no brillen excesivamente con la luz y un peinado cuidado harán que el mensaje que compartas tenga aún más fuerza. Recuerda que tu propósito se ve, se escucha y también se viste. La forma en que te presentas es parte de tu llamado.





El ritmo acelerado de la vida moderna no debería ser un obstáculo para cuidar nuestra imagen personal. Para muchas mujeres que trabajan, emprenden, lideran y también cuidan de su hogar, el tiempo es un recurso valioso. Sin embargo, tener un cabello saludable y con brillo no requiere horas frente al espejo, sino una rutina práctica y efectiva que se adapte a nuestro estilo de vida.
Una clave esencial es elegir productos multifuncionales. Por ejemplo, un champú nutritivo con acondicionador incorporado puede reducir el tiempo en la ducha sin sacrificar el cuidado. También es recomendable aplicar una mascarilla intensiva una vez por semana mientras realizas otras tareas en casa. Si el cabello tiende a resecarse, un aceite capilar liviano puede ayudarte a controlar el frizz y darle un toque de brillo en segundos.
El secado natural puede ser tu mejor aliado. En lugar de usar secadora todos los días, aprovecha el clima para dejarlo secar al aire mientras te arreglas o trabajas desde casa. Para mantener el estilo, los peinados recogidos como trenzas sueltas, moños bajos o coletas elegantes no solo lucen profesionales, sino que también protegen el cabello del quiebre.

Por último, recuerda que la belleza también nace desde adentro. Una buena hidratación, alimentación balanceada y descanso adecuado influirán directamente en la salud capilar. Aun en medio de agendas ocupadas, dedicar unos minutos a ti misma no es un lujo, es parte de honrar tu cuerpo y tu propósito. Una mujer con visión también se cuida, se valora y brilla… desde la raíz.


En medio de reuniones, responsabilidades familiares y múltiples tareas diarias, muchas mujeres sienten que no tienen tiempo para ejercitarse. Sin embargo, mantener el cuerpo en movimiento es fundamental para la salud física y mental. La buena noticia es que no necesitas ir al gimnasio ni pasar horas entrenando. Con una rutina breve y práctica, es posible mantenerse activa desde casa.
Lo más importante es la constancia. Una rutina de 15 a 20 minutos puede marcar la diferencia si se realiza al menos tres veces por semana. Ejercicios como sentadillas, abdominales, estiramientos y saltos de tijera son fáciles de ejecutar, no requieren equipo especial y ayudan a mejorar la fuerza, resistencia y flexibilidad. Puedes comenzar con 3 series de 10 repeticiones por ejercicio y aumentar poco a poco


Para las que prefieren una opción más suave, el yoga y el pilates son ideales. Solo necesitas una colchoneta o toalla, y un espacio tranquilo. Estas disciplinas no solo trabajan el cuerpo, sino también la respiración y el enfoque mental, lo cual es perfecto para equilibrar el estrés de la vida diaria.
También puedes incorporar actividad física en momentos del día que parecen insignificantes. Por ejemplo, caminar durante llamadas telefónicas, subir y bajar escaleras varias veces, o hacer estiramientos mientras esperas que se cocine algo en la cocina. Todo movimiento cuenta, y cada pequeño esfuerzo suma
En definitiva, ser una mujer activa no significa tener mucho tiempo libre, sino encontrar formas creativas de priorizarte Cuidar tu cuerpo es una forma de amarte a ti misma. Así que respira profundo, ponte ropa cómoda y empieza hoy. Tu bienestar lo vale.

Cuando una mujer queda embarazada, la noticia también transforma la vida del esposo. Aunque no lleva el bebé en su vientre, el padre tiene un papel clave durante esta etapa: ser apoyo emocional, espiritual y práctico para su esposa. Su presencia activa puede marcar la diferencia en la experiencia del embarazo, fortaleciendo la relación y preparando el terreno para una paternidad consciente y comprometida.
Uno de los mayores regalos que un esposo puede dar en este tiempo es su escucha y comprensión Las hormonas, los cambios físicos y las emociones que acompañan al embarazo pueden ser abrumadores. Por eso, el esposo debe convertirse en un refugio de amor y paz, cultivando la paciencia, interesándose en lo que su esposa siente, y mostrando empatía en cada conversación.
La oración en pareja cobra especial valor durante el embarazo. Orar juntos por el desarrollo del bebé, por un parto saludable, y por la nueva etapa que ambos están por comenzar, fortalece su vínculo espiritual. Cuando un padre se arrodilla junto a su esposa para clamar a Dios, está construyendo una base sólida para el hogar que están formando.
Además del aspecto espiritual, es importante que el esposo se involucre activamente en lo cotidiano: acompañar a las citas médicas, ayudar con las tareas del hogar, preparar el espacio del bebé y aprender sobre el proceso del parto. Cada gesto cuenta y comunica: “estoy contigo, somos un equipo”. Este acompañamiento también prepara emocionalmente al padre para asumir su rol con mayor seguridad.

En definitiva, el embarazo no es solo un viaje para la mujer, sino un caminar conjunto. El esposo tiene la oportunidad de reflejar el amor de Cristo hacia su esposa, brindándole cuidado, ternura y fe. Un padre presente desde el principio deja una huella imborrable no solo en la vida de su esposa, sino también en la del hijo o hija que están por recibir.



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En exclusiva para Débora Revista, la Psra Flor Rentería nos comparte su inspirador testimonio de sanidad, perdón y propósito Desde una infancia difícil hasta liderar el ministerio Gente Nueva a las Naciones, su historia refleja cómo Dios transforma el dolor en un llamado. Nos habla de su libro Dones Operacionales, su visión para la iglesia y la próxima gira internacional que busca activar el diseño divino en miles de vidas.
¿Recuerdas algún momento de tu infancia en el que sintieras el llamado de Dios a algo más grande? ¿Cómo lo reconociste siendo tan pequeña?
Ecristiano,
n mi caso, no tuve la fortuna de nacer en un hogar
pero siempre fui consciente de la presencia de Dios Me criaron con temor a Él y respeto por las cosas santas. Nunca fui desobediente ni rebelde hasta que sufrí abuso sexual (toques físicos insanos por parte de mi padre cuando tenía 4 o 5 años).
Mi inocencia fue violada, y durante muchos años no pude hablar del tema por miedo a que no me creyeran.
Sin embargo, cuando me di cuenta del daño que me habían causado, sentí una terrible necesidad de venganza.
A los 16 años, tuve un encuentro sobrenatural de sanidad en una iglesia de renovación carismática, y además fui sanada de un problema auditivo. A esa edad, comencé a leer la Biblia por primera vez y tuve un encuentro con la ira de Dios al leer Romanos 12:19: “No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor”.
Este encuentro con la ira de Dios me llevó a preguntarle: “¿Por qué tienes ira?”. Y Él me respondió: “Por lo que te hicieron, pero deja lugar a mi ira, yo pagaré”. En ese momento, pude ver la justicia de Dios en mi vida. Pude perdonar, y mi agresor pudo arrepentirse, pedirme perdón y ser salvo Fue una experiencia muy fuerte que viví.
Después de ser sanada, acepté el matrimonio y me casé a los 25 años con mi esposo Daniel Sánchez. Tuvimos dos hijas, que hoy están felizmente casadas
¿Cómo te han apoyado espiritualmente y emocionalmente tu esposo e hijos en tu ministerio?
Mi familia siempre ha sido mi prioridad, y lo digo con un dicho: “Si voy a ganar al mundo, no voy a perder mi casa”. Agradezco la motivación de mi esposo y su contribución para plasmar esta revelación en un libro que he enseñado en la iglesia por más de diez años.

De hecho, el interés por entender a mis dos hijas fue lo que me llevó a esta revelación. A muy temprana edad, me di cuenta de que eran muy diferentes, pero no sabía por qué. En mi búsqueda, Dios me reveló lo que escribo en este libro: que cada uno nacemos con un don operacional de parte del Padre y que el don de mamá o papá nos influye significativamente.
¿Cómo empezó tu iglesia y cuál es la visión principal que Dios te dio para ella?
Nuestro ministerio se llama Gente Nueva, y siempre nos hemos centrado en ganar a personas no salvas y ayudarlas a encontrar su propósito en la vida, al ayudarlos a encontrar su don operacional.
Agradezco la motivación de mi esposo y su contribución para plasmar esta revelación en un libro que he enseñado en la iglesia por más de diez años. “ ”
Y hasta hace ya tres años nos llamamos Gente Nueva a las Naciones por una dirección apostólica
¿Qué enseñanzas prácticas de tu labor pastoral se reflejan en tu libro, Dones Operacionales?
La clave es poner a cada discípulo y servidor en el área que corresponde a su diseño para el cual nació. Se trata de identificar su don operacional y activarlo dentro del cuerpo de Cristo, porque pedirle hacer algo a alguien para lo que no nació es frustrante.
Eso explica porque muchos no se dedican para lo que estudiaron sino para lo que nacieron
En nuestro don operacional está implícita nuestra vocación.
Isaías 46:10 dice que Dios “anuncia lo por venir desde el principio, y desde la antigüedad lo que aún no era hecho.”
Es decir todos jugamos a lo que nos debíamos de dedicar. Porque a muy temprana edad reflejamos el diseño Con juegos proféticos que anunciaban nuestro destino.
¿Cómo disciernes la diferencia entre dones espirituales y dones operacionales en tu experiencia ministerial?
Los dones espirituales son potencias sobrenaturales que se activan en el bautismo del Espíritu Santo.
Los dones operacionales, por otro lado, son dones del Padre que recibimos desde la concepción. Como Dios le dijo a Jeremías en 1:5 “Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones”
Nuestro don operacional define nuestra forma de ser y explica por qué somos tan diferentes.
Algunos son muy amorosos y atentos porque su don es el servicio. Otros son tan misericordiosos y compasivos porque su don es la misericordia. Algunos son muy perceptivos, otros tan reservados, otros tan alegres y otros incluso tan decididos, competitivos y hasta enojones porque, aunque no lo crean, están reflejando atributos de Dios Padre en esta tierra
Como bien sabemos, nuestra alma tiene mente, voluntad y emociones. Entonces, al descubrir tu don operacional, manifestarás más tu alma Eso explica por qué unos son más emocionales, otros son muy voluntariosos y otros más mentales. Si ubicas tu triada, es más fácil descubrir tu don y entender para qué naciste.
¿Cuál ha sido uno de los momentos más difíciles que atravesaste en tu ministerio y cómo Dios te fortaleció en medio de ello?


Servir por 15 años de tiempo completo y tener que dejar la iglesia para dedicarme a mis hijas para atender la desnutrición fetal que ambas presentaron.
En un día perdimos todo: casa, carro, muebles, iglesia, servicio, pastor, amigos, trabajo, ministerio, todo, y tuvimos que empezar de cero, reconociendo que las heridas las hicieron las circunstancias y no Dios. Aferrándonos a la fe la cual fue nuestro principal recurso.


¿Qué impacto esperas generar con la gira internacional que realizarás en 2025? ¿A qué países planeas llevar el mensaje de Dones Operacionales?
Que el mundo pueda saber que así como reflejamos características de nuestros padres terrenales; también reflejamos características de nuestro Padre celestial. Y que Dios a todos nos hizo nacer con un Don el cual refleja atributos de Él mismo.
Descubrir tu don operacional, un regalo del Padre, activa tu identidad y revela el propósito eterno.
Por ahora, tenemos Perú, Colombia y, con la bendición de Dios, Estados Unidos en nuestro itinerario También iremos a donde Él nos abra puertas.
Ya que el libro está disponible en español, inglés y muy pronto en portugués.
¿Cómo te estás preparando espiritualmente y logísticamente para esta gira internacional?
La oración es fundamental para nuestra preparación espiritual, y estamos agradecidos por los intercesores que se han levantado a mi favor por esta oportunidad.