FRUSTRACIONES
PATOGÉNICAS Y EL DESARROLLO DE LOS TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD
Frustraciones
Patogénicas Serias: ocurren en la primera infancia y pueden incluir negligencia emocional y física, falta de apego seguro y abuso emocional. Estas experiencias pueden predisponer el desarrollo de trastornos de la personalidad como el trastorno límite y el trastorno de personalidad dependiente.
Las frustraciones patogénicas son experiencias negativas y traumáticas en los primeros periodos del desarrollo que influyen significativamente en la formación de la personalidad y la aparición de trastornos de la personalidad. Según el Manual de trastornos de la personalidad de Vicente E. Caballo, estas frustraciones se clasifican en:
Frustraciones
Frustraciones
Patogénicas Graves: surgen en la niñez media e incluyen experiencias como el abuso físico y sexual, la pérdida de un cuidador principal o la exposición a violencia doméstica. Estas frustraciones están asociadas con trastornos como el trastorno de personalidad antisocial y el trastorno de personalidad histriónica
Patogénicas Máximas: Se producen en la adolescencia y pueden incluir el rechazo social severo, el acoso escolar y la falta de apoyo parental durante la adolescencia. Estos eventos pueden contribuir al desarrollo de trastornos de la personalidad como el trastorno de personalidad paranoide y el trastorno de personalidad esquizoide.
DESARROLLO DE LOS TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD
Las frustraciones patogénicas serias, graves y máximas durante los primeros periodos del desarrollo pueden tener un impacto significativo en la formación de la personalidad y pueden contribuir al desarrollo de diversos trastornos de la personalidad El DSM-5 (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales, Quinta Edición) identifica varios trastornos de la personalidad, cada uno de los cuales puede estar asociado con diferentes periodos del desarrollo. A continuación, se presenta un resumen de cómo y cuándo pueden originarse estos trastornos:
Trastorno de la personalidad paranoide:
Periodo de origen:
Infancia temprana
Factores contribuyentes: Experiencias tempranas de rechazo o abuso, entornos familiares donde prevalece la desconfianza y la falta de seguridad.
Trastorno de la personalidad esquizoide:
Periodo de origen: Infancia temprana. Factores contribuyentes: Falta de relaciones emocionales cálidas, desapego emocional de los cuidadores, negligencia emocional.
Trastorno de la personalidad esquizotípica:
Periodo de origen:
Infancia temprana a adolescencia
Factores contribuyentes: Familias con antecedentes de esquizofrenia o trastornos del espectro psicótico, ambientes familiares inusuales o excesivamente rígidos
DESARROLLO DE LOS TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD
Trastorno de la personalidad antisocial:
Periodo de origen:
Infancia temprana a adolescencia.
Factores contribuyentes:
Entornos familiares violentos o caóticos, falta de supervisión parental, abuso infantil.
Trastorno de la personalidad límite (borderline):
Periodo de origen:
Infancia temprana a adolescencia.
Factores contribuyentes:
Abuso o negligencia emocional, inestabilidad en las relaciones tempranas, pérdida temprana de un cuidador.
Trastorno de la personalidad histriónica:
Periodo de origen: Infancia temprana. Factores contribuyentes: Atención inconsistente de los cuidadores, refuerzo de comportamientos dramáticos, ambientes familiares donde la apariencia y la aprobación externa son valoradas en exceso.
Trastorno de la personalidad narcisista:
Periodo de origen: Infancia temprana. Factores contribuyentes: Exceso de adulación o crítica excesiva por parte de los cuidadores, expectativas parentales grandiosas o desmedidas.
Trastorno de la personalidad evitativa: Periodo de origen: Infancia temprana a adolescencia.
Factores contribuyentes: Rechazo social temprano, experiencias de vergüenza o humillación, crítica o rechazo por parte de los cuidadores.
Trastorno de la personalidad dependiente:
Periodo de origen:
Infancia temprana. Factores contribuyentes: Sobreprotección por parte de los cuidadores, falta de estímulo para la autonomía y la independencia.
(TRASTORNOS DE PERSONALIDAD EXTRAÑOS O EXCÉNTRICOS)
Los trastornos de personalidad del Grupo A, según el DSM-5 (Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales), incluyen el trastorno paranoide, el trastorno esquizoide y el trastorno esquizotípico de la personalidad. Estos trastornos suelen caracterizarse por comportamientos excéntricos y formas de pensamiento extrañas. A continuación, se presentan algunas de las técnicas y psicoterapias actuales utilizadas en la intervención de estos trastornos:
1. Terapia Cognitivo-Conductual (TCC)
La TCC se utiliza para ayudar a las personas a identificar y cambiar patrones de pensamiento distorsionados y comportamientos problemáticos. En el caso de los trastornos del
Trastorno Paranoide de la Personalidad: Se enfoca en reducir la desconfianza y las sospechas irracionales, promoviendo formas más realistas de evaluar las intenciones de los demás.
Trastorno Esquizoide de la Personalidad: Ayuda a mejorar las habilidades sociales y emocionales, facilitando una mayor interacción con los demás.
Trastorno
Esquizotípico de la Personalidad: Trabaja en la modificación de pensamientos mágicos o ideas inusuales, y mejora las habilidades de afrontamiento.
(TRASTORNOS DE PERSONALIDAD EXTRAÑOS O EXCÉNTRICOS)
Terapia de Aceptación y Compromiso (ACT):
ACT se basa en aceptar las emociones y pensamientos tal como son, mientras se compromete a realizar cambios en el comportamiento que estén alineados con los valores personales del individuo. En los trastornos del Grupo A, puede ayudar a las personas a aceptar sus experiencias internas mientras desarrollan un compromiso hacia un comportamiento más adaptativo.
Terapia de Rehabilitación Cognitiva (CRT):
CRT se centra en mejorar las funciones cognitivas como la memoria, la atención y la planificación. Es particularmente útil para el trastorno esquizotípico de la personalidad, donde pueden existir déficits cognitivos.
Terapia Basada en la Mentalización (MBT):
La MBT se centra en mejorar la capacidad del individuo para comprender sus propios estados mentales y los de los demás. Esto es particularmente útil para los trastornos del Grupo A, donde puede haber dificultades significativas en la interpretación de las señales sociales y en la comprensión de las intenciones de los demás.
C.
TÉCNICAS Y PSICOTERAPIAS ACTUALES EN LA INTERVENCIÓN DE LOS TRASTORNOS DE PERSONALIDAD DEL GRUPO B DEL RESPECTIVO MANUAL DE INTERVENCIÓN.
Los Trastornos de Personalidad del Grupo B según el DSM-5 incluyen el trastorno límite de la personalidad (TLP), el trastorno antisocial de la personalidad (TAP), el trastorno histriónico de la personalidad (THP) y el trastorno narcisista de la personalidad (TNP). Cada uno de estos trastornos se caracteriza por comportamientos dramáticos, emocionales o erráticos. Las técnicas y psicoterapias actuales utilizadas en la intervención de estos trastornos son variadas y se adaptan a las necesidades específicas de cada paciente A continuación, se detallan algunas de las más destacadas:
Terapia Dialéctico-Conductual (DBT):
Usada principalmente para: Trastorno Límite de la Personalidad (TLP).
Descripción: La DBT, desarrollada por Marsha Linehan, combina técnicas de terapia cognitivoconductual (TCC) con conceptos de aceptación y mindfulness. Se centra en enseñar habilidades para manejar emociones intensas, mejorar las relaciones interpersonales y reducir comportamientos autodestructivos.
Terapia
Psicodinámica
Usada principalmente para: todos los trastornos del grupo B.
Descripción: esta forma de terapia se basa en explorar los conflictos internos y las experiencias tempranas que contribuyen a los problemas de personalidad.
Ayuda a los pacientes a ganar una mayor comprensión de sí mismos y de sus relaciones.
Terapia Familiar
Usada principalmente para: Todos los trastornos del Grupo B.
Descripción: Involucra a miembros de la familia en el proceso terapéutico para mejorar la comunicación, reducir conflictos y apoyar al paciente en el contexto familiar.
Terapia de Esquemas
Usada principalmente para: Trastorno Límite de la Personalidad (TLP), Trastorno Narcisista de la Personalidad (TNP).
Descripción: Desarrollada por Jeffrey Young, esta terapia combina elementos de la TCC, el psicoanálisis y otras técnicas terapéuticas. Se enfoca en identificar y cambiar esquemas desadaptativos tempranos y patrones de comportamiento.
D. TÉCNICAS Y PSICOTERAPIAS ACTUALES EN LA INTERVENCIÓN DE LOS TRASTORNOS DE PERSONALIDAD DEL GRUPO C DEL RESPECTIVO MANUAL DE INTERVENCIÓN.
Los trastornos de personalidad del Grupo C, según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5), incluyen el trastorno de personalidad evitativa, el trastorno de personalidad dependiente y el trastorno de personalidad obsesivo-compulsiva. Estos trastornos se caracterizan por altos niveles de ansiedad y comportamiento temeroso. Las técnicas y psicoterapias actuales más efectivas para la intervención de estos trastornos incluyen:
Terapia CognitivoConductual (TCC)
Objetivo: Modificar patrones de pensamiento y comportamiento disfuncionales.
Técnicas: Reestructuración cognitiva, exposición gradual, entrenamiento en habilidades sociales, y técnicas de relajación.
Terapia de Grupo
Objetivo:
Proporcionar apoyo social y desarrollar habilidades interpersonales.
Técnicas: Dinámicas grupales, feedback de pares, y práctica de habilidades sociales en un entorno seguro.
Terapia Dialéctica
Conductual (TDC)
Objetivo: Aceptar y cambiar comportamientos problemáticos.
Técnicas: Mindfulness, regulación emocional, tolerancia a la angustia y habilidades interpersonales.
CONSIDERACIONES ESPECIALES PARA CADA
Trastorno de Personalidad
Evitativa
Foco: Reducción de la evitación social y aumento de la autoconfianza.
Técnicas específicas: Terapia de exposición y entrenamiento en habilidades sociales.
Trastorno de Personalidad
Dependiente
Foco: Fomentar la independencia y la autonomía.
Técnicas específicas: Fomento de la toma de decisiones y la asertividad.
Trastorno de Personalidad
Obsesivo-Compulsiva
Foco: Reducir la rigidez cognitiva y los comportamientos perfeccionistas.
Técnicas específicas: Flexibilidad cognitiva, manejo del tiempo y técnicas de relajación.