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EL LIBRO DE DANIELA

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RITA

RITA

Capítulo 1

Tal vez todo inició el día en que te conocí, no estoy muy segura

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Esta historia comienza en sexto grado de primaria, era mi primer año en el colegio, yo era la chica gorda, pero no fue el caso de la chica gorda a la que le hacen bullying, fue bueno para mi autoestima. El primer día de clases lo vi, ese chico rubio de ojos claros y de tez blanca y delicada, su nombre era Nicolás, no sabía lo que me esperaba, no era la primera vez que lo veía, la primera vez que lo vi fue en un torneo de baloncesto de mi antigua escuela, cuando lo vi jugando, me gusto, por decirlo así, en ese momento habría dicho algo cursi e infantil como, ese niño es el amor de mi vida, o algo así, tenía 10 años, qué más podría pensar en ese momento

Volviendo al primer día de clase, no conocía a mucha gente, y siempre se me ha sido difícil hacer amigos o al menos socializar, básicamente, resumiendo mi primer año, no sucedió nada interesante, hasta final de año que él se enteró de que me gustaba, y no lo tomo bien, me dijo que no le atraía físicamente, era un patán, no sé porque me gustaba, en ese momento sentí que mi corazón se partía, fue el primer niño que me gusto y me rompió el corazón, mis primeras lágrimas derramadas por un hombre de muchas más Hasta el año próximo, séptimo grado, me tocaba verlo otra vez, afortunadamente tuve la suerte de que no quedamos en el mismo salón, pero no todo es alegría, me toco con sus dos mejores amigos, y obviamente ellos sabían lo que había pasado el anterior año, en algún momento del año sacarían el tema de chiste, y así fue, un día que les dije algo que no les gusto y ellos me respondieron con eso, porque sabían que me molestaba, tal vez porque todavía me gustaba un poco, pero eso cambio hasta que llego su hermano, suena irónico, y autodestructivo el hecho de que me gustara su hermano, que claramente se parecen mucho físicamente, probablemente también internamente, en ese momento no lo pensé.

Su nombre era Santiago, era mucho mayor que yo, cuatro o tres años, yo no lo sabía, pero desde el primer día que lo vi me sentí hipnotizada por sus ojos, que eran los mismos que Nicolas, eso era lo que más me gustaba de ellos, esos ojos café claro, casi verdes, tan brillantes y claros que se podía sentir que te absorben energía. Él, Santiago, obviamente no me prestaría atención, aparte de ser 2 grados menor que él, yo no era físicamente atractiva, y mucho menos me dedicaba tiempo para arreglarme, tenía 12 años, aún era una niña

Desde aquel día caminaba por los pasillos del colegio tratando de topármelo “casualmente” solo para ver sus ojos claros, ese cabello rubio y esa sonrisa que me gustó tanto. Que con el tiempo se volvió una obsesión enfermiza

Mis primas estaban en el mismo salón que el, por eso pude averiguar su nombre, lo investigué demasiado, porque claramente él no me iba a decir nada, lo que yo no sabía en ese momento era que había empezado una obsesión por él Tanto así que conseguí su número, nunca me atreví a hablarle porque me daba pena, prácticamente todo el año la obsesión por él iba creciendo cada día, hasta el próximo año, octavo grado, este año, la obsesión aumentaba y aumentaba, el día de san Valentín, le escribí una carta, las cartas son para mi algo muy personal, no para cualquiera, y claramente para él no era, no supo valorarla como en verdad merecía.

Este año me toco en el mismo salón que mi mejor amiga mariana, pero me separaron de mi otra mejor amiga Sofia, con la que estudie en séptimo grado, ellas dos sabían que me gustaba Santiago y cuanto me gustaba, ellas fueron mi compinche, siempre me acompañaban todos los días por los pasillos para encontrármelo por “casualidad”, como decía antes, el 14 de febrero le escribí una carta expresándole lo que sentía por él, no me atreví en lugar de eso, le entregue un pedazo de papel que decía “i like you”, solo eso, fue decepcionante sabiendo aun que tenía otra carta más bonita De hecho, omití algo importante, yo no se la entregue personalmente, se la envié con una de mis mejores amigas, y ella se la entrego y le dijo que era de mi parte, sinceramente no sé si la leería, lo más probable es que la arrojo a la basura. Por más que el demostrara que me rechazaba, yo siempre lo miraba con ojos de amor, y era tan embobada por lo lindo que yo lo veía, porque mis amigas siempre me decían que era horrible, pero cuando estas enamorado de esa persona se ve diferente a como es en realidad, hasta que esa persona hace algo que de verdad cambie tu perspectiva de ver la realidad.

Tiempo después decidí escribirle a Santiago por chat, eran aproximadamente las 11 de la noche, me respondió y me dijo que no me conocía y que la verdad no estaba interesado, eso me rompió el corazón y rompí a llorar, una semana después le hablé por accidente a Nicolás, para una supuesta broma para mi mejor amiga, y él respondió a eso y me dijo que me podía ayudar con la “broma”, yo le dije que no necesitaba nada, y de igual forma, me dio su número de teléfono De ahí empezamos a hablar, yo le hablaba prácticamente todos los días y él me contestaba después de casi tres o cuatro semanas, a mí se me ocurrió la idea de preguntarle si quería ser mi mejor amigo, y él dijo que sí Y Seguíamos igual, yo le hablaba y él me contestaba, la verdad él nunca me habló por voluntad propia……

** Este capítulo hace parte de un libro aún sin titular que la autora lleva escribiendo hace aproximadamente un año, próximo a terminar para pasar a revisión y edición

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