La calidad total es nuestra meta

Dedicación

que nos alimenta

Detrás de cada platillo servido en COTEMAR existe el compromiso con la excelencia por parte de Cocinas del Mar.

No es muy común que nos detengamos a pensar acerca de la gran importancia que tiene el comer bien. Comiendo bien el cuerpo funciona adecuadamente, se rinde mejor en las actividades y el humor mejora visiblemente. Por eso bien dicen que «barriga llena, corazón contento». Es una gran ventaja poder consumir alimentos higiénicamente preparados, nutritivos y sabrosos, agradables al paladar pero que además nos ayuden a mantener una buena salud.

En COTEMAR contamos con un grupo de expertos en el tema de la alimentación, representado por el personal de Cocinas del Mar. Este equipo se encarga de la elaboración diaria de los alimentos tanto a bordo como en tierra. Si reflexionamos sobre la cantidad de alimentos y la cantidad de personal que se atiende diariamente, nos damos cuenta de la enorme labor y gran responsabilidad que esto representa, y con un entusiasmo igualmente enorme, el personal de Cocinas del Mar demuestra diariamente el gusto y la pasión con que llevan a cabo su trabajo.

Todos los procesos para la preparación de los alimentos están regidos por estándares de calidad establecidos en la norma ISO 9001:2008 y la Norma Oficial Mexicana NOM-251-SSA1-2009, la cual establece los requisitos de buenas prácticas de higiene que deben observarse en el proceso de alimentos, bebidas o suplementos alimenticios y sus materias primas. Todo el personal de Cocinas del Mar conoce los aspectos de esta normativa y está capacitado y comprometido con el cumplimiento de los mismos.

Cocinas del Mar, además de alimentar al personal costa afuera diariamente, brinda servicios especiales; ya sea la conmemoración de una fecha importante, visitas VIP, posada navideña, etc., son los especialistas de Cocinas del Mar los que hacen el evento verdaderamente especial.

El equipo de Cocinas del Mar hace un intenso trabajo; vale la pena porque, además de que disfrutan haciéndolo, el resulta para ellos es muy emotivo por el reconocimiento y agradecimiento de todos.

Reconocemos la entusiasta labor que diariamente realiza toda la gente de Cocinas del Mar, labor que nos inspira y alimenta, ¡muchas gracias!

Hoy platicamos con...

Capitán Óscar Contreras Meza

—Se quedan a comer, ¿verdad?— nos pregunta, amable y con una gran sonrisa, el Capitán Óscar, dándonos paso al comedor del barco Olimpo. Es una invitación irresistible, después de haber recorrido su barco. Ahora saciaremos el apetito, aceptamos la invitación y nos sentamos a la mesa.

—Gracias por la entrevista, me siento muy contento— dice el Capitán con voz franca. Nosotros le agradecemos la atención de recibirnos. —Mi nombre completo es: Óscar Contreras Meza; me dicen «Capitán Óscar».

La comida servida, y con toda calma comenzamos la entrevista platicando sobre su vida personal. —Sí, soy casado y tengo tres hijos; Jocelyne que ya tiene 18 años; Óscar Alberto de 17 y Gerardo Manuel, el más pequeño, de 7 años. Mi familia opina que mi trabajo es interesante pero algo riesgoso por los malos tiempos. Como quiera, sí les gusta cuando me vengo para el trabajo...— comenta entre risas el Capitán Óscar. —Mi esposa Claudia es mi fuerza, mi pilar, ella tiene que hacer ambos papeles de mamá y papá cuando yo estoy afuera trabajando—.

El Capitán tiene una familia muy unida, —Procuro pasar tiempo de calidad con ellos, nos vamos de vacaciones a la playa, visitamos a los parientes, tanto de mi esposa como los míos. Mi hijo pequeño y yo salimos a caminar, la pasamos bien. Cuando tengo tiempo para mí, me gusta leer libros, ver documentales de todo tipo...— nos comparte mientras desde la cocina nos envían el siguiente platillo.

La plática, como la comida, está sabrosa. El Capitán nos comenta cómo es que ingresó a COTEMAR: —Entré el 26 de mayo de 1996, cuando mi hija la mayor tan sólo tenía 3 meses de nacida; por eso digo que es mi buena suerte. Desde 1992 que llegué a Ciudad del Carmen, venía de Mazatlán con mi compañero, casi hermano, el Capitán Sergio Zatarain— recuerda el Capitán. —Actualmente, estoy en OMMA, soy capitán del barco Olimpo, en donde cuido la operación, administro sus recursos, escucho a la tripulación y creamos un buen ambiente de trabajo, siempre con responsabilidad, disciplina y buena actitud—.

Es evidente que al Capitán le gusta su trabajo; nos comenta que disfruta mucho la convivencia con sus compañeros y los traslados, pero sobre todo, las oportunidades que le ha brindado COTEMAR y la gran formación que ha recibido. Su pasión es valorar a las personas, así como transmitirles a sus hijos la importancia de ser felices en la vida y de servir a los demás.

En el futuro, el Capitán Óscar se ve trabajando aún en COTEMAR, —probablemente reforzándome en las áreas administrativas—, nos dice. —Me gustaría tener alguna experiencia en tierra como Jefe Operativo, aunque sé que es un reto muy grande...— confiesa.

Desde hace rato que ya acabamos con el postre, nos estamos despidiendo de nuestro nuevo amigo cuando, ya casi saliendo del comedor, nos comparte estas palabras:

Estoy muy agradecido por la magnífica oportunidad que se me ha otorgado; trabajando aquí he obtenido una excelente formación, un gran desarrollo profesional y el buen trato de todos los compañeros de trabajo, así como de los directivos.

Muchas gracias y hasta la próxima, Capitán Óscar.

Legado

que nos engrandece

Es en el año de 1979 cuando se origina una visión emprendedora, con la motivación de crear, de innovar, de trascender y de permanecer en la competida industria. Fue un sueño que a veces pareció imposible de realizar y que ahora es toda una realidad: una empresa que sigue creciendo, que sigue soñando y conservando ese ímpetu que la lleva a ser mejor día con día.

Nuestros fundadores, hace 35 años, tuvieron el valor de iniciar la gran aventura llamada COTEMAR, esta empresa a la que queremos tanto, que la sentimos tan propia, tan nuestra, tan familiar, que siempre ha procurado el bienestar de sus colaboradores.

El mundo de los negocios es difícil y competido. Para entrar en él se necesita tener carácter, entereza, conocimiento y habilidad. El verdadero reto es lograr mantenerse en el negocio por 35 años, tener la visión de llegar más lejos, de saber lo importante que es mejorar constantemente, que la innovación no es opcional sino absolutamente indispensable para mantenerse como una empresa sustentable. Esa, desde el primer día, ha sido la característica principal de COTEMAR: hacer las cosas bien, siempre buscando una nueva manera de hacerlas aún mejor.

Los resultados de esta filosofía son evidentes en el gran crecimiento y desarrollo que ha tenido COTEMAR a través de estos 35 años. Además, la realización de todos estos éxitos y el aprendizaje que hemos obtenido, se logra gracias a que nuestra empresa cuenta con una gran fortaleza: su gente.

Toda empresa es un reflejo de su gente y COTEMAR no es la excepción. Nosotros somos quienes forjamos su carácter, la hacemos funcionar, le damos la capacidad para que pueda competir con otras, la fortalecemos con nuestro trabajo en equipo. Los valores personales que aplicamos en nuestra vida son los mismos valores con los que cuenta la empresa: Integridad, Efectividad, Sencillez e Innovación.

Nuestra empresa se conforma de personas íntegras que saben cuidar una reputación intachable en todos los aspectos de su vida, de gente altamente efectiva que sabe cómo conseguir resultados, que toma el éxito con satisfacción y a la vez con la sencillez necesaria para no conformarse y reconocer que siempre habrá nuevos retos, más difíciles, que requieren de una constante innovación para poder superarlos. Esa es la gente COTEMAR.

Por eso nos llenamos de orgullo al ser parte de esta historia. El trabajo y la dedicación durante estos años han rendido frutos y cimentan una base fuerte para el futuro. Nos da mucho gusto ser parte de esta familia que ahora celebra sus primeros 35 años. Sabemos que vendrán muchos años más, por eso es que nos preparamos cada día, trabajando mejor y generando una Cultura Organizacional sólida para que COTEMAR sea la empresa referente en la industria petrolera de nuestro país.

Está en nuestras manos este legado que debemos perpetuar, esta visión de nuestros fundadores que nos engrandece como empresa, como personas, como la gran familia que somos. Es tu trabajo, tu sencillez y tu compromiso lo que nos ha traído hasta aquí.