Los sindicatos y los partidos: PIP (197?) by La Colección Puertorriqueña

Y EL PARTIDO

LUIB RIVERA PAQAI^J

% PreasnciaMoa actualmente en Puerto Rico una intensa ola de hueitas. El movimiento obrero exhibe una militancia y una combatividad no vista en muchos años. Pero lo roalmeate nuevo e importante en lo& acontecimientos recientes (la huelga en la Telef<5nica y El Mundo) es la unidad de todos los obreros puertorriqueños en un mismo movimien" to y la participación de solidaridad y apoyo en la acción de las fuerzas independeatistas socialistas hacia los obreros. Hasta el presente la lucha por la independencia ha permanecido separada de la lucha de los obreros. Dominados por el ideal nacionalistaj que en el rescate de la soberanía de la patria no veía dife rencias de clase, los movimientos independentistas nunca se plantea ron la necesidad de dotar a la lucha por la independencia de una ba se popular 7 revolucicnaria* ia clase obrera.

La transformación del Partido Indfpendentista Puertorriqueño ea partido socialista implica precisamente el reconocimiento de que la indepatíencia vendrÓ como consecuencia de la lucha de aquellos querealmente (objetivamente) la necesitan, las clases y sectores socia les cuyos intereses son contrarios al imperialismo, especialmente los trabajadores. El socialismo sólo tiene valor real como ideología de la clase obrera. Toda ideología revolucionaria dirigida a transfor mar la sociedad sólo es posible si consigue apoyarse en una vcVíce^. c fuerzas sociales que necesite y pi. oda realizar esa transformación. Dentro del capitalismo esa fuerza os la clase obrera.

El Partido Indopendentista debo ser, aunque no exclusivamente, fundamentalmente un partido de los trabajadores, después de todo este es lo q»e define a todo partido socialista. El gran reto y la gran tarea que tiene nuestro partido por dolante es incorporar a los secto res más progresistas de la clase trabajadora al partido y conseguir la unidad de los obreros y el socialismo.

^ En este ensayo el compañero Luis Rivera analiza cuál debe ser^ sfgtin el marxismo, la relación entre el partido político y los obrerosi "¿Cuál es la relación entre los sindicatos y la clase obrera?

¿Entro ol partido y los sindicatos? ¿Entre la lucha económica y la lucha política? ¿Dohen los sindicatos pertenecer foroaliaente al par tido socialista? ¿o deben ser independientes?

e»l vez hoy en Puerto Rico tienen mis valor que nunca las pala bras que Lenin pronunciara en 1900:"la historia muestra que en Rusia la separación entre el pensamiento socialista y los representantes avanzados de las clases trabajadoras es mucho mayor que en muchos pa lees, y que, de perdurar esta separación, el movimiento revoluciona rio esti condenado a la impotencia. De aquí se deduce lógicamente el deber que está llamado a cumplir la social-democracia rusa, llevar las ideas socialistas y la conciencia política a la masa del proleta riado y organizar un partido revolucionario,ligado indisolublemente al movimiento obrero espontáneo."

Esperamos que el presento cuaderno y los dos publicados anteritrorlbir^T r"""" ""lUdancia se plantee este Importan- problema de la relación de nuestra lucha con la lucha sindical de los obreros.

Angel R. Villarini

* Nos referimos a lndeEe.ndencia y s_l.ndicalismo de CÍsar Andreu Igl

^ los Social ri ein<5cr;^ta.c! ¿e V. I, Lenin, es las

SINDICATO Y PARTIDO EN MARX Y LENIN

IEL MARXISMO COMO TEORIA DE LA REVOLUCION DEL PROLETARIADO

Hay una relación orgánica y conceptualmente indisoluble entre el marxismo y el proletariado. El marxismo es, por un lado como ana]isis científico de las relaciones de producción capitalistas, la reconstru cción teórico-histórica de la realidad objetiva del proletariado. Pero, por otro lado, es también, como teoría, una arma de lucha revolucionaria (1) del proletariado. Aquí la teoría no es algo separado de la lucha prá ctica. La teoría, es, como tal, un instrumento de liberación.^^^ Y lo es por lo siguiente:

1. Por desenmascarar la sociedad capitalista como una basada en la del trabajador asalariado. La teoría tiene una necesaria función desencantadora, ejerce un exorcismo de las ilusiones que confor man la falsa conciencia. "Se trata de no conceder...ni un solo instante de ilusión y de resignación. Hay que hacer la opresión todavía más opre siva, añadiendo a aquélla la conciencia de la opresión. ^^^ El proleta riado vive desquiciado entre su realidad objetiva de explotación y su conciencia subjetiva que reproduce las racionalizaciones del sistema pro ducidas por los ideólogos burgueses. Vive explotado sin saberse tal. Por eso la primera función libertadora del marxismo, como ciencia de las re laciones de producción capitalistas, es la del desengañamiento, la reve lación de la contradicción entre el ser y la conciencia del proletaria do.

2, Por desvelar los talones de Aquiles de los mecanismos de explo tación inherentes a la sociedad capitalista. No se revela la explotaci ón para que ésta sea acogida como ley última de la naturaleza o de la historia. "La crxtica no arranca de las cadenas las flores imaginarias para que el hombre soporte las sombrías y escuetas cadenas, sino para que se las sacuda y puedan brotar las flores vivas. T, '-.^vea de la teoría no es meramente la denuncia o la crítica. Se trata de la trans formación radical de lo denunciado y criticado. Esto naturalmente no lo puede hacer la teoría por si sola. Lo que ella sí puede hacer es encon trar los elementos inmanentes a la sociedad capitalistas que la subvier ten y revolucionan desde adentro. Se trata de la identificación de lo potencialmente revolucionario dentro de la sociedad burguesa. Es aquí que se unen directamente la teoría marxista y el proletariado. La pri mera define al segundo como la auto-negación interna llevada en su seno por la sociedad capitalista. La crítica teórica del sistema capitalista se une a la crí:tica práctica del mismo sistema, a la resistencia que el proletariado hace contra su opresión y se convierte en arma de libera ción. "Es cierto que el arma de la crítica no puede sustituir a la crí tica de las armas, que el poder material tiene que derrocarse por medio del poder material, pero también la teoría se convierte en poder .materi al tan pronto como se apodera de las masas. El marxismo como teoría no es, por lo tanto, una mera explicación del sistema capitalista. Es su negación al nivel teórico. No intenta explicar el sistema; su objetivo es destruirlo. La revolución del pro letariado es el objetivo práctico de esta teoría crítica. De aquí la ligazón indisoluble entre el materialismo histórico, entre el marxismo, y el proletariado; una ligazón al nivel de la revolución como"denomina dor común tanto de la teoría como de la existencia del proletariado.

"Así como la filosofía (Marx hablará luego de materialismo histórico) encuentra en el proletariado sus armas materi ales,el proletariado encuentra en la filosofía sus ármas espirituales. y tan pronto como el rayo del pensamiento muerda a fondo en este candoroso suelo popular, se lleva rá a cabp la emancipación^,. La cabeza de esta emancipaci ón es la filosofía, su corazón el proletariado, La filoso fía no puede llegar a realizarse sin la abolición del pro letariado, y el proletariado no puede llegajr a abolirse sin la realización de la filosofía, " (6)

LUCHA DE CLASES

Todo los antes dicho conduce a la afirmación de que el marxismo encuentra su clave principal para la explicación de la realidad social, particularmente de la sociedad capitalista, en la lucha de clases, "La historia de todas las sociedades hasta nuestros dias es la historia de las luchas de clases," Esta afirmación inicial del Manifiesto dirige (7) toda la obra teórica de Marx, Incluso las partes más rigurosamente académicas de sus escritos encuentran sy secreto y sentido en el inten to de Marx de; Dentender a plenitud la lucha dp clases consubstancial {8) al modo de producción Cc(pitaliata y 2) capacitar a la clase obrera para la victoria en esta lucha, Esto implica la clarificación de las condiciones que determinan pl rumbo y dirección de la lucha, entre la bur guesía y el proletariado, Y además el postular la dictadura del proleta riado como etapa importante, aunque no final, en la conducción de esta lucha^ Importante, por indicar que el proletariado tiene en sus manos el poder político^ pero no final, pues el objetivo de la dictadura del proletariado es su auto-liquidación en la sociedad sin clases,

En lo que toca a nuestro tema particular, el rol de los sinc^icatos de acuerdo al marxismo, esto Implica que debemos yer los sindicatos en términos de su función en la lucha de clases del proletariado contra la burguesía. Hay una guerra entre la clase obrera y los que detentan el poder en el sistema capitalista. Analizar las tareas de los sindicatos significa ver sus posibilidades y limitaciones como instrumento de lucha

en esa gueii.4^ Primeramente, antes que el proletariado tome el poder^ en Ja dictadura de la burguesía^ Luego l?ajo la hegemonía política de la clase obrera., en la dictadura del prpletariado. En esta dicusíón afloran lógicamente problemas importantes para la estrategia de lucha por la construcción del socialismo; ¿Cuál es la relación entre los sinr dicatos y la clase obrera^ ¿Entre el partido y los sindicatos'? ¿Entre la lucha económica y la lucha política? "¿Deben los sindicatos peftene^p cer formalmente al partido socialista"^ ¿O deben ser independientes^

MARX: LOS SINDICATOS Y EL PROBLEMA DEL PARTIDO -r

Los sindicatos nacen como unión defensiva de parte de los trabaja dores asalariados. Sus causas inmediatas son las siguientes; 1) El aglo-r meramiento de obreros en una misma localidac;!^ producto de la gran indus¡ tria; 2) la lucha del capitalista por extraer mayor plusvalía de parte del obrero, sea aumentando la jornada de trabajo diafie» sea reduciendo al mínimo posible el salario^ Eptas dos condiciones obligan a los obre» ros a convertir su solidaridad geográfica y de trabajo en solidaridad de defensa contra la lucha de clases que contra ellos sostiene el capitalisn ta, Al principio se trata fundamentalmente de resisljiii^^ "Pero el sos-, tenimiento del salario., Ínteres cpmún que tienen contra el patrono, les une en una misma idea de resisiir.^^ ^

Hasta este punto, el énfasis no es en la ofensiva contra el siste»» ma capitalista., sino en la defensa frente a los intentos de la burgue.sia de obtener mayor plusvalía de la fuerza de trabajo de los obreros. Tiene como tarea fundamental la lucha económica por mejores salarios y condiciones de trabajo y vida,

Pero la lucha c^e clases inherente al sistema capitalista tiene su propia lógica y dinámica que trshscienc^en Ips esquenjes previos de com prensión de la realidad. Lo qug comienza como unión defensiva salarial

se convierte en base para el cobro de conciencia de parte de los obreros j i de la existencia de un antagonismo fundamental entre los burgueses y e-' llos| de que ellos constituyen una clase con un rol histórico particular » totalmente diferente del rol de sus oponentes. Las uniones obreras, los (11) sxndicatos, de acuerdo a Marx son "una escuela de socialismo": sirven para convertir al proletariado de clase en sí, de clase objetivamente hablando, a clase para sí, clase con conciencia de su particularidad pro pia.

* "En principio, las condiciones económicas habían transformado la masa del país en trabajadores. La dominación del capital ha creado en esta masa una situación común, intereses comunes. Así, esta masa resulta ya una clase frente al capital, pero no todavía para sí misma. En la lucha, de la cual hemos seña lado algunas fases, esta masa se reúne, constituyéndose en cla-< sé para sí misma." (12)

Pero este paso de clase en sí, definida por su función objetiva en ^ el modo de producción capitalista, a clase para sí, la cual ha compren dido tal función y entiende la necesidad de luchar contra ella y por lo * tanto contra el modo de producción que la determina, trasciende la lu cha económica por el salario. El conflicto pasa del nivel de la defen sa salarial al problema del poder político o, más exactamente al poder para reconstruir la sociedad humana. "Una vez llegada a este punto, 'ia asociación adquiere carácter político... La lucha de clase contra clase Mil es una lucha política."

Aquí es donde encontramos la ambigüedad del sindicato para los teó ricos marxistes. Ambigüedad que se expresaría constantemente alrededor del problema de la relación entre el partido y el sindicato. Marx y Lenin están perfectamente de acuerdo en una cosa: en la necesidad de los sindicatos para la unidad del proletariado' y, por ende, para la forma- " ción de la clase obrera como tal, como clase. El problema estriba en la pregunta: ¿Cuáles son las posibilidades y cuáles las limitaciones de

-6lucha del sindicato y, por ende, cuál debe ser la relación entre el par tido y el sindicato?

» La ambigüedad se expresa en la doble función que Marx le atribuye al sindicato. Por un lado el sindicato debe luchar por mejores salarios y condiciones de trabajo. Hacer esto es necesario debido a los intentos qontinuos de los capitalistas de aumentar la jornada de trabajo y redu-»

cir el salario. Pero en esta lucha no s^ confronta directamente al sis tema capitalista como tal. Por el contrario, se presupone su existencia y preservación. Además de esta lucha económica defensiva, Marx exige de los sindicatos una postura revolucionaria no ya contra los efectos del sistema capitalista, sino contra el sistema mismo, En Salario, Precio y ganancia(1865) Marx insiste largamente en la necesidad de luchar por

mejores salarios y condiciones de vida. De no hacerlo así el proleta, riado proclamaría por medio de su inacción su capitulación frente a la , burguesía. Sin embargo, añade Marx, la clase obrera' no debe exagerar el valor de esta lucha salarial. Debe darse cuenta que por medio de ella está combatiendo los efectos nocivos del sistema, no las causas; está aplicando paliativos, pero no curando' la enfermedad. No debe,, pues, so breestimar esta forma de lucha^, Debe comprender que el sistema capita lista reproduce constantemente las condiciones de opresión a que está sometido el proletariado, trata., pues,, de escalar la lucha: de mejo res salarios a lucha coptra el sistema de trabajo asalariado,. "En vez ' del lema conservador de lun salario justo por una jornada de trabajo jus ta!, deberá inscribir en su bandera esta consigna revolucionaria:•lAbo lición del sistema de trabajo asalariado!*" Así que los sindicatos deben superar la esfera de la lucha salarial para luchar contra el sis tema capitalista mismo. Aquí es donde el sindicato deja de sep meramen te reformista y defensivo y se convierte en un arma de ofensiva revolu-

í -7cionaria.

En la resolución sobre "El pasado, el presente y futuro de los sindicatos", adoptada en el Congreso de la Primera Internacional,ce- * letrado en Ginebra, en 1866, Marx repite esta doble función de los sindicatos:

"Los sindicatos son indiscutiblemente necesarios en la guerra de guerrillas cotidianas entre el capital y el trabajo. pero es aún más importante su sugunda cualidad: la de ser una fuerza or ganizada capaz de destruir el sistema mismo del trabajo asalari ado y de la dominación del capital."(15)

La "guerra de guerrillas" mencionada es referencia, al igual que en Precio, salario y ganancia, a la resistencia contra los intentos del patrono de aumentar sus ganancias a' costa de los trabajadores. Es ta es la primera función' de los sindicatos. Es necesario volver a in sistir que para Marx esta función es básicamente defensiva. Es una ^

respuesta de los obreros al intento de los patronos de reducir su par-

ticipación en lo producido por su trabajo. Marx expone esto de la si

guiente manera:

"La tendencia general de la producción capitalista no es a ele var el nivel medio de los salarios, sino, por el contrario, a hacerlo bajar/ o sea a empujar más o menos el valor del trabajo a su límite mínimo... Las luchas de la clase obrera' por eLnivel de los salarios son episodios insep'arables de todo el sistema de salarios, en el 99 por ,100 de los casos no son más que esfu erzos dirigidos a mantener en pie el valor dado del trabajo Si en sus conflictos diarios con el capital cediesen cobarde mente, se descalificarían sin duda para emprender movimientos de mayor envergadura."(16)

Por ser una acción de defensiva, de resis.tencia a la lucha de cla ses que conducen victoriosamente los capitalistas contra los proleta rios, es necesaria ppro insuficiente. Supone la constante sujeción del proletariado al sistema que le esclaviza.

La tarea del proletariado, sin embargo no es sólo defenderse del capital. Es también liberarse de él. No se trata meramente de forjar

paliativos de defensa. El objetivo final es la emancipación del pro letariado, la destrucción de la vida social basada en división de cla ses sociales. El propósito es la creación del "reino de la libertad" que con tanta energia proclama Marx en el tercer volumen de El Capital. La realización de este propósito final' requiere el escalamiento de la lucha. Exige el cumplimiento dé lo que Marx llama en el pasaje • arriba citado ''segunda cualidad" de los sindicatos; el del' ser una fu erza organizada capaz de derrocar el sitema capitalista, no meramente sus efectos más nocivos, Pero, ¿han cumplido los sindicatos esta segunda tarea, su tarea propiamente revolucionaria? Aquí Marx critica las uniones obreras por su miopía histórica, por su limitación a la lugha' contra las consecuen-cias y no contra las raices del sistema.

Las tradeuniones.,,en general son deficientes por limitarse a' una guerra de guerrillas contra los efectos del' sistema existen te, en vez de esforzarse, al mismo tiempo, por cambiar!,o, en vez e emplear sus fuerzas organizadas como palanca papa la emancipacxón definitiva de la clase obrera; es decir, para ia abolici ón definitxva del sistema de trabajo asalariado."(17) " '

Los sindicatos tienen sobre si una misión' histórica transcenden-' tal; ser un Instrumento Importante en la lucha revolucionarla del pro letariado, en la eliminación de la explotación del hombre por el hom bre y la construcción del "reino de la libertad". Pero su práctica no está a la altura de su imperativo histórico. Se han dedicado a las guerrillas, no a la guerra en grande contra el capital. Sirven de con trapeso, de balance al sistema, no de sepultura.

¿Indica esta deficiencia señalada por Marx, recalcada más tarde por teóricos marxistas como Engels, Lenin y Plejánov, meramente una falla en la conducta de los sindicatos o implica que el sindicato aun que necesario es insuficiente para la emancipación de la clase obrera?

Aquí el marxismo es unánime en que la clase obrera' requiere un instrumento de lucha adicional y superior al sindicato: el partido del proletariado que tenga como finalidad la toma del poder para ins tituir la dictadura del proletariado y eliminar gradualmente la divi sión clasista de la sociedad^

Al mencionar esta **unanimidad" en el marxismo con- respecto al necesario yo del partido, se requiere disipar Una falsa noción con res pecto a Marx y Lenin, Muchas veces se afirma- que Marx postuló la autoemancipación de clase obrera, sin especificar al partido como medio de dicha liberación; mientras que Lenin, supuestamente, había aportado te óricamente al marxismo la necesidad del' partido para la revolución pro letaria^ El leninismo sería, por ende» igual a marxismo más partido.

Hay un elemento de verdad en esta afirmación, Lenin escribió so bre el partido con una intensidad y energia desconocidas en Marx. El partido»» su ideología, composición de clase, estrategia y táctica - conrstituye su interés primoldial. Inclusive lo? apuntos más teóricos y académicos discutidos por él - la esencia del estado, la expanción im perialista del capitalismo moderno - guardan una estrecha relación en su mente con las tareas del partido* Pues, para Lenin, la correcta estrategia y táctica del partido son derivables sólo a base de una co rrecta apreciación de la realidad objetiva. Todo gira alrededor de la cuestión urgente del '♦¿qué hacer?" del partido. No que Lenin fuera un activista que despreciara el estudio teó rico riguroso. Todo lo contrario. Su apreciación de la acción polí tica como ei medio revolucionario por excelencia le llevaba a apreciar el valor y significado del fundamento teórico necesario de toda la acción adequada. De hecho, en 1915 Lenin dedicó intensos meses de es tudio riguroso nada menos que a Hegel, en especial su Lógica, Pero

tal estudio no era algo separado de su labor política, sino que tenia como proposito un mayor dominio de la dialéctica, que para Lenin cons tituía el método de análisis superior, de tal manera de poder perfecci onar su capacidad para apreciar correctamente la realidad objectiva y poder así tener la base adecuada para precisar la táctica correcta a n (18) seguxr por el partido.

Pero, si es cierto que Lenin dedica al problema de^l partido una atención mucho mayor que Marx, es falso afirmar que Marx no asifnaba un papel central al partido de los trabajadores en la revolución pro letaria. Marx anticipa a Lenin en dos postulados fundamentales del pen samiento de esté último: 1) la lucha de clases al llegar a su plenitud es lucha política (aunque nunca desligada de la lucha ecónomica); 2) el triunfo en esta lucha requiere la constitución del partido de los tra bajadores. En estos dos puntos tan centrales para él, Lenin no hace más que profundizar teóricamente el legado de Marx.

Con respecto al primer punto, Marx afirma que "la lucha de clases contra clase es una lucha política. "Toda lucha de clases es una lu(19) cha política" El contexto de ambas afirmaciones hace ver bien cla ramente que el carácter político de la lucha de clases se revela en la agudización de la guerra entre el capital y el trabajo. Al prin cipio el asunto parece ser una defensa del proletariado y un intento por reformar el sistema para proporcionar mejores condiciones de exis tencia a los obreros, Pero al éstos cobrar conciencia del radical an tagonismo entre sus intereses objetivos como obreros y los intereses de los burgueses, la disputa se convierte en una lucha por la toma del poder político; en otras palabras, en una basada sobre la división de

elases Y, por lo tanto, sobre la explotación del hombre por el hombre, en una sociedad sin clases y sin condiciones posibilitantes de la ex plotación. En estos momentos, "la conquista del poder político se con vierte en la gran responsabilidad del proletariado."^ ^ La toma del poder político se revela como la gran tarea del prolétariado que se apresta a cumplir su rol histórico de clase revolucionaria.

Esto significa que para Marx, en la lucha de clases', la lucha po lítica - la lucha por la toma del poder político - tiene primacía so bre la lucha económica - la resistencia del trabajo contra- el capital. Los pasajes citados arriba de Marx constituyen, por lo tanto, el fun damento de las futuras afirmaciones de Lenin en el sentido de que: "La política no puede menos de tener supremacía sobre la económia. Pensar de otro modo significa olvidar el abcé del marxismo. ^ Y esto debi do a que:

"Los intereses más esenciales, 'decisivos' de las clases pueden ser satisfechos únicamente por transformaciones políticas radi cales en general; en particular, el interés economice fundamen tal del proletariado puede ser satisfecho únicamente por medio de una revolución política que sustituya- la dictadura de la burguesía por la dictadura del proletariado."(22(

Para Lenin esto implica claramente la constitución del partido re volucionario del proletariado. ¿Y para Marx?

Primeramente, hay que insistir que el famoso "Manifiesto" no lie-va como titulo "Manifiesto Comunista", como corrifistemente se le cono ce. Su título verdadero es "Manifiesto del partido comunista"-. Y en varios sitios claves menciona al "partido" comunista. Con referen cia a Alemania, Marx no habla de "los comunistas",^ sino que afirma:

"En Alemania, ei Partido Comunista lucha- al lado de la burguesía... pero jamás en ningún momento olvida este partido de inculcar a los obreros la mis clara conciencia del antagonismo..-, entre- la burguesía y

el proletariado. ^ ^ Y de hecho,' en el mismo Manifiesto,- insiste Marx en que la agudización de la lucha de clases lleva a la "organi zación del proletariado en clase y, por lo tanto, en partido pol'íti(24) —•••" subrayado). Asi que' para Marx la lucha de ciases en tre el proletariado y la burguesía plantea como principal tarea la to ma del poder político de parte del primero y, como corolario indispen sable, la formación del partido revolucionario del proletariado.

Pero, Marx hace esto aún mas claro en su resolución adoptada por Congreso Internacional de la Haya de la Asociación Internacional de Trabajadores (2-7 de septiembre de 1872) ^ que fuera añadida como ar ticulo 7 a los "Estatutos Generales"- de la Asociación. La resolucióndice de la siguiente manera:

"Contra el poder social de las clases proletarias, puede el proclase' sólo cuando se constituye como par- especial, en oposición a todos los viejos partidos, constituidos por las clases proletarias.

• constitución del proletariado como partido político es indispensable para el triunfe de la revolución social y para asegurar su objetivo final: la abolición de las clases.

sus señores de la tierra y del capital se sirven de lio eíÍnóÍf?Í políticos para defender y perpetuar su monopo- r>r>n para sojuzgar al trabajo, la conquista del po- ?ariado^" (?5r responsabilidad del proLAquí se encuentran todos los elementos que más tarde Lenin sis tematizaría: 1) El proletariado puede' actuar como clase contra la he gemonía social de las clases propietarias (terratenientes y capitalis tas) constituyéndose en partido político en lucha contra los par tidos que de una forma u otra responden al poder económico establecido. 2) La formación del partido del proletariado es indispensable para el triunfo de la revolución socialista. 3) La gran tarea actual de ese partido es la toma del poder político; en otras palabras, el derroca-

miento del poder político de las clases' propietarias.

Vimos, pues, como Marx atribuye' a los sindicatos una doble fun ción; 1) la defensa del trabajo contra la lucha de clases continua de capital; es decir, la resistencia alrededor de mejores salarios y una jornada de trabajo, más corta;.2) la lucha contra el sistema capitalis ta y la sociedad clasista como talos. Pero Marx (al igual que Engels (26) y Lenin) critica a los sindicatos por no estar cumpliendo la segunt^r^cion. El problema que surge entonces es si no la están cumpli endo porque no puede ser un instrumento de capacidad, suficiente para realizarlp. Esta pregunta plantea inmediatamente el problema del par tido, su función y tareas en distinción a las del sindicato. Para en trar de llenp a esta cuestión era necesario primeramente refutar una falsa noción sobre Marx. Esta nocion es al respecto de que Marx no a— tribuye rol central al partido y que, por ende, la contribución total mente novedosa, al nivel teórico, de Lenin, sería el planteamiento de la indispensabilidad del partido para la revolución socialista. Nues tras breves consideraciones sobre importantes pasajes de Marx nos lle van a la conclusión de que también Marx postula la supremacía de la lu cha política sobre la lucha económica (sin olvidar la ligazón dialé ctica existente siempre entre estos dos tipos de lucha) y la necesidad del partido del proletariado. De esta manera, el leninismo no surge como un fenómeno inexplicable dentro de la evolución del marxismo, co mo es muclias yeges dentro de algunos manuales de marxismo. Lenin re sulta ser verdadero heredero y profundizador de Marx. O como diría Mao; "El leninismo es el marxismo de la era del imperialismo y de la revolu ción proletaria. ^

Esto reafirma nuestro- planteamiento original acerca de la unanimi dad en los grandes teóricos marxistes acerca de que el proletariado requiere un instrumento de lucha adicional y superior al sindicato: el partido. Pero esto plantea inmediatamente el difícil problema de la re lación entre partido y sindicato. Veamos como brega con este proble ma Lenin.

Lenin: Partido y sindicato

La ambigüedad de los sindicatos en la lucha de clases, de acuerdo a Lenin se revela claramente en el siguiente pasaje:

"Los sindicatos fueron un progreso gigantesco de la clase obrena en los primeros tiempos del desarrollo del capitalismo, por cuan to significaban el paso de la dispersión y de la impotencia de los obreros a los rudimentos de la unión de clase. Cuando empezó a • desarrollarse la forma superior- de unión de clase de los proleta« r-ios, el partido revolucionario del proletariado... los sindica tos comenzaron a manifestar fatalmente ciertos rasgos reaccionaf rios, cierta estrechez gremial, cierta tendencia al apoliticismo... V Pero el desarrollo del proletariado no se ha efectuado ni ha podido.efectuarse en ningún país de otro modo que por medio de los sindicatos y por su acción conjunta con el partido de la clase obrera..." (28)

Hay varios puntos en esta cita que' son importantes para entender la relación entre partido y sindicato de acuerdo a Lenin:

1. Los sindicatos han jugado un rol muy importante en la formación P-Colstariado como clase, en la creación de la clase proletaria. Han contribuido dos elementos importantes: unidad y poder. Ambas cosas han sido muy significativas para la clase obrera en su lucha de clases.

2. Pero los sindicatos, aunque necesarios én la formación de la da—

^ se proletaria, son insuficientes como instrumentos de lucha. La expe riencia histórica demuestra que el proletariado requiere algo más en su lucha por la liberación. Se necesita la formación del partido revo lucionario. El sindicato representa una forma rudimentaria de unidad para la lucha, mientras que el partido es la unidad superior del

proletariado. El partido es un instrumento de lucha superior al sindi cato. Esto no es cierto solamente' al nivel teórico: el partido como forma máxima de unidad proletaria pues tiene como tarea la toma del po der político y la reestructuración de la sociedad. También al nivel his tórico. Los sindicatos (Lenin escribe en el 1920) han demostrado cier ta tendencia al apoliticismo, a la mera lucha económica por reformar el sistema. Por esto,- a pesar de su aparente combatividad, han manifesta do rasgos reaccionarios.

3. Sin embargo, este conservadorismo no debe llevar a la conclusión de que los sindicatos sear dispensadles y hasta nocivos. Por el contra-

5 formación de la clase obrera como clase revolucionaria requiere no solo la lucha polxtica, sino también la lucha económicu (lo que Marx llama "guerra de guerrillas") contra el capital. Los sindicatos son in dispensables en la lucha por la construcción del socialismo. Lo que se necesita es la acción conjunta entre el partido y los sindicatos, entre política y la constante lucha económica. Aunque insuficientes, los sindicatos son necesarios en la lucha del proletariado.

Pero, ¿qué implica esta acción conjunta? Tratemos de aclarar el al cance de dicha acción conjunta y al hacerlo veremos más exactamente la relación entre partido y sindicato en el pensamiento de Lenin.

Para Lenin dicha acción conjunta tiene una implicación importante para el partido revolucionario socialista: es necesario para este parti do establecer una ligazón indisoluble y real con el movimiento obrero. I^enin plantea esta tarea como el objetivo táctico más importante para el partido socialdemocrata ruso en el breve pero importantísimo artículo titulado Tareas urgentes de nuestro movimiento escrito en 1900. Per mítasenos una cita extensa. Su contenido lo justifica.

"La socialci^mocracia es ia unión del movimiento obrero con el so cialismo Su cometido no estriba en servir pasivatnenre al movimi ento obrero en cada una' de sus' fases', sino en representar los in tereses de todo el movimiento' en conjunto, señalar a este movimi ento su objetivo final, sus tareas políticas, y salvaguardar su independencia política e ideológica. Desligado de la socialdemo— cracia, el movimiento obrero se achica y adquiere por fuerza un ■carácter burgués... En todos los países hubo un período en que el movimiento obrero y el socialismo existieron por separado, sigui endo caminos distintos, y en todos los países esta desvinculación fue causa de la^debilidad del socialismo ^ del movimiento obrero; en todos los países, 'sólD> la unión- del socialismo- con' el movimi ento obrero' creó una sólida base tanto- para' el uno com.o para el otro... En Rusia, la necesidad de la unión del socialism.o con' el movimiento■obrerc fue proclamada hace ya mucho en el terreno' te órico, pero en la praccica esta unión sólo va haciéndose efecti^ va en nuestros días... La historia muestra que en Rusia la sepa— - -ración entre el pensamiento socialista y los representantes ava nzados de las clases trabajadoras es m.ucho mayor que en otros paí— y *3^^» óe perdurar esta' separación, el movimiento revolucio nario esta condenado s^la impotencia. De aquí se deduce lógica mente el deber que esta' llamada a cumplir la social-democracia rusa: llevar las ideas sociali'stas y la conciencia política a la masa del proletariado y organizar un partido revolucionario li gado indisolublemente al movimiento obrero espontáneo." (29).Para Lenin el triunfo de la revolución anti-capitalista^depende de la unión entre el socialismo y el movimiento obrero. El socialis mo como ideología está condenado al fracaso si no tiene en la clase obrera una base de lucha y acción revolucionaria. Por otro lado, el movimiento obrero, desligado del socialismo capitula ideológicamente frente a la burguesía y es incapaz de retar efectivamente el sistema capitalista. Si Marx en el 1844 hablaba de la necesaria unidad' .entre filosofia y proletariado para la abolición de la explotación-del hom bre por el hombre, Lenin repite las mism.as ideas, pero precisando los polos a unirse como socialismo y movimiento obrero. La unidad entre ambos es indispensable para derrocar las estructuras capitalistas e impantar un nuevo orden social.

El problema en Rusia es que esta unidad se ha dado sólo en el teteórico, pero en la práctica deja mucho que desear. Esto signi-

fica que ],os socialistas rusos están conscientes del problema plante-r ado por Lenin y comprenden que el socialismo tiene valor real sólo co mo ideología de la clase obrera, Al nivel teórico el problema está resueltoI el socialisrr^o está ligado orgánicamente al proletariado tan to por ser una explicación científica de su desarrollo y situación, co<mo por se una necesaria arma de lucha' para el prpletariado comprometi do Qon sy liberación,

Pero sólo al nivel teórico el asunto está resuelto. En la practi ca la realidad indica yna fatal separación entre las ideas sooialistaa y el movimiento obrero. Esto plantea la tarea fundamental; llevar las ideas socialistas a la masa obrera, clarificar ante los obreros su si tuación real y el objetivo final al cual lógicamente deben tratar de moverse. En otras palabras^ unir las ideas socialistas y el movimi ento obrero, E^sto es importante, pues de no lograrse tanto el socia lismo como el movimiento obrero serán impotentes para transformar ra dicalmente el sistema capitalista y construir el nuevo orden social donde desaparezcan la explotación y opresión,

Pero, ¿quien ha de llevar estas ideas socialistas a la clase o— brera y a qué se refiere Lenin al hablar de "movimiento obrero espon tanee"^ Lo primero es una referencia al partido, lo segundo a los sindicatos^ Los sindicatos es el movimiento espontáneo, pues surgen espontáneamente de la necesidad de los obreros de luchar contra la o— presión directa de los capitalistas; la opresión que se expresa por medios de salarios bajos y largas jornadas de trabajo, Lps sindica tos no son un producto artificial de la clase obrera, Son engendra dos por la misma lucha de piases conducida por la burguesía. Es una

accion refleja espontanea de defensa de parte de los obreros. Ya hemos yisto que para Lenin estos sindicatos son indispensa bles y necosapios en la DrUcha del proletariado. Pero no suficien tes, Y no lo son porque su lucha, como lucha contra los efectos del sigtema capitalista como mera lucha económica que no se plantea la toma del poder político papa transformar la sociedad radicalmente, a lo más que puede llegar es a proporcionar paliativos, pero no re medios eficaces contra la enfermedad fundamental. Y no se plantean la toma del poder'político porque la lucha económica espontánea de la clase obrera no alcanza por si misma el nivel del anális cientí fico del desarrollo del modo de producción capitalista, sus talones de Aquiles o elementos que vulnerabilizan desde adentro el sistema iTíismo y por lo tanto no alcanza a plantearse el. objetivo final de la lucha; la abolición de las clases sociales. Según Lenin, "el mo vimiento obrero espóntanao es tradeunipnismo... y el tradeunionismo implica precisamente la esclavización ideológiqa de los obreros por la burguesía. Esclavización ideológica porque se lucha aceptann do los naipes rriarcados del oponente.

?ero, hay que insistir, esto no significa que el movimiento obrero sea dispensable. Hacer esto equivaldría, de acuerdo a Lenin, a aceptar un desarme unilateral que no obliga al contrario a reqiprocar de la misma manera. El movimiento obrero, por ser organización de lucha del proletariado, es un arma necesaria e importante para la movilización popular contra el sistema vigente."

Lo que hay que hacer es llevar la conciencia socialista a los integrantes de ese movimiento obrero, los cuales son," evidentemente

la avanzada, la vanguardia de la clase obrera, sus líderes de bata-? lia.

Esta t^rea es la que define el partido. El partido tiene para tenin como tapea básica el llevar la conciencia socialista al pro letariado, Esto significas

1) Clarificarles el funcionamiento y estructura fundamental del sistema social que les explota, De esta manera se les ayuda a enten der que la lucha económica, aunqua necesaria, tiene que ser transcen dida en dirección a la lucha política revolucionaria. Esta es una tarea de desenmascaramiento que supone, por up lado, el estudio con cienzudo de la realidad nacional para poder comprender cabalmente la correlación de fuerzas entre las diversas clases sociales; es decir, las funciones que cada clase social ocupa en el modo de producción y de qué manera éste le beneficia o perjudica, Lenin insiste en que la clarificación ideológica del proletariado ruso supone como conditio sine qua non este estudio de la realidad concreta de Rusia, El marxismo no es un dogma abstracto que funciona en relación a la rea lidad nacional como un lecho de Procustes, Es un método de análisis provechoso solamente en su aplicación a la investigación rigurosa de (31) la realidad nacional. Esta clarificación supone también el acce? só dii^ecto a los trqbajadores^ No se puede reqlirar desde la cómo da butaca de la oficina de un intelectual o un funcionario. La co municación supone la proximidad^ "Se debe trabajar sin falta allí donde estén las masas|,^ Y los sindicatos y las cooperativas obreras (estas últimas, por lo menos, en algunos casos) son precisamente las organizaciones donde están las masas,"^^2) conciencia socialista al proletariado significa, por lo tanto, clarificar a los

obreros la realidad nacional como realidad de su opresión, lo cual requiere el estudio teórico de la situación concreta real y la agi tación constante dentro de los centros de unidad de los obreros, es pecialmente los sindicatos.

2) Señalarle al proletariado su objetivo final. - Esto significa que la tarea del partido no se limita a hacer surgir entre el prole tariado la concienia de su explotación. Esto es importante y' necesario, pero en aislamiento solo puede conducir al fatalismo y la resig nación o a la sublevación suicida. No basta con mostrar "la necesidad de la explotación y la expropiación de los trabajadores", es necesario también y sobre todo "indicar la salida que sugiere el desarrollo econó.,(33)mico. La agitación entre los trabajadores, para lo cual se utili za el movimiento obrero espontáneo, tiene como finalidad la desnatura lización y desacralización de la opresión. Demostrar como la explota ción que sufre el obrero no es una ley de la naturaleza o de Dios. Es una realidad hecha por los hombres y como tal finita. Ha sido hecha y puede, por lo tanto, ser deshecha. Es necesario además demostrar los talones de Aquiles objetivos del sistema; es decir, no especular sobre posibles mundos mejores, sino señalar las contradicciones reales del sisn tema, la forma como estas pueden ser agudizadas para la creación de una si.,uación revolucionaria y la estrategia a segir para que la situación revolucionaria no aborte, sino que conduzca al triunfo de la revolución, LO que está envuelto es demostrar al proletariado la necesidad y la sibilidad de la dictadura del proletariado, de la adquisición del poder político para la emancipación de los trabajadores. La critica al sis-r tema es importante en la agitación. Pero más importante aún es crearle

al pueblo trabajador de que el socialismo no es un sueño o un mero ideal, sino una posibilidad real indicada por el desarrollo socio- ^ económico de la realidad nacional misma. Al mismo tiempo se le pre senta a dicho pueblo las tareas cuya realización constituyen la con— * dición necesaria para la revolución social.

3) Pero esto implica la construcción del partido revolucionario del proletariado. El partido es la vanguardia revolucionaria del proletariado. Lo es por su claridad teórica y por su capacidad de plasmar tal claridad en postulados estratégico—tácticos que sirvan para' acelerar el proceso revolucionario. Esta es una tarea que el sindicato no puede realizar. Esta es la tarea del partido. Este, naturalmente, no puede ser independiente en la realidad de los sin- . * dicatps. Tiene que estar "ligado indisolublemente al movimiento obre ro espontáneo".^ ^ Pero como su vanguardia teórica y práctica. La tarea que se muestra inaplazable es, por ende: "Organizar un paptido revolucionario ligado indisolublemente al movimiento obrero esponta neo." La tarea fundamental de ese partido en el inicio de su lucha contra la explotación es "llevar las ideas socialistas y la concien cia política a la masa del proletariado ^^^^

Sin embargo, el que el partido esté "ligado indisolublemente" con el movimiento obrero no significa para Lenin que los sindicatos formen parte oficialmente del partido. Por el contrario. El consi dera que para el beneficio de las funcionen; tanto del sindicato como del partido es necesario asegurar la independencia formal del primero con respecto al segundo. Tanto antes como después de la toma blochevique del poder Lenin defiende el principio de "la afiliación volun taria en los sindicatos." Más aún: "De ningún modo se debe exigir a

los miembros de los sindicatos que profesen un determinado credo po lítico; en este sentido... los sindicatos no deben ser una organiza ción- de partido."^ ^

, La independencia formal del sindicato es para Lenin la mejor ga— Y rantia para el acceso del partido a la mayor cantidad posible de tra bajadores. Porque sólo de esta forma pueden ser los sindicatos verda deramente organizaciones de madas. Por eso él insiste que "es en ab soluto contrario a nuestros intereses exigir que sólo los socialde— mócratas puedan ser miembros de las uniones gremiales, ya que esto re duciría el alcance de nuestra influencia sobre la masa... Cuanto más amplias sean estas organizaciones, tanto más amplia será nuestra in fluencia en ellas... por la acción directa y consciente de los miem bros socialistas de los sindicatos sobre sus camarades. " ^ ^ ^ enfermedad infantil del izquierdismo en el comunismo (1920), Lenin arremete contra los comunistas alemanes que desean salir de , los sindicatos "reaccionarios" y quieren formar uniones obreras nue vas, uniones formalmente comprometidas con la ideología y el parti, do comunista. Las razones dadas por los alemanes parecen válidas: los sindicatos tradicionales están dominados por una aristocracia obrera que ha capitulado ideológicamente ante la burguesía. Hay que crear nuevos sindicatos. Sindicatos realmente militantes en favor de la revolución proletaria, sindicatos comunistas. Y sin embargo Lenin se torna impaciente contra esta argumentación y vuelca toda su energía polémica contra ella.

necedad que cometen los comunistas - izquierda' , los cuales deducen del carácter rea— ^ contrarrevolucionario ^ 1^ cabecillas de los sincatos°' conclusión de que es preciso... Iisalir de los sindi catos. . , i irenunciar al trabajo en ellos! ! , ¡ ¡crear formas de

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organización obreras nuevas, inventadas I ! Una estupidez tan imr. perdonable, que equivale al rno. ior servicio que los comunistas pueden prestar a la burguesía... No actuar en el seno de los sindicatos reaccionarios signii ica abandonar a las masas obreras insuficientemente desarrolladas o atrasadas a la influencia de los líderes reaccionarios, de los agentes de la burguesía, de los obreros aristócratas u 'obreros aburguesados'..,"

En Inglaterra, Francia y Alemania, millones de obreros pasan por primera vez de la falta completa de organización a la for ma mas^elemental e_inferior, más simple y accesible... de orga nización: los sindicatos; y los com.unistas de izquierda, revolucionarios, pero insensatos, quedan a un lado, gritan i Masa! • , , pero i i se niegan a actuar en los sindicatos!!, i ¡«---o su,'espíritu reaccionario'!! e inventan una 'unión uuevecita, ^pura, limpia de todo prejuicio democráticosar^^en^lToi^Sf (!que será!), dicen, amplia y para ingre sar en la cual se exige solamente ( I sol ame-,te!) I I el 'reconocí miento del sistema de los Soviets...!!' reconocilEs imposible concebir mayor insensatez, mayor daño causado a la revolución por los revolucionarios 'de izquierda'!... L ... , comunistas consiste en saber convencer- a los ele mentos atrasados, en saber actuar entre ellos y no aislarse de ellosmediante consignas sacadas de la cabeza e infantilmente 'izquierdistas'." (38) -luí anuiimente

La idea de crear sindicatos nuevos, de abandonar los grandes sindicatos tradicionales por su falta de compromiso formal y concre to con la revolución proletaria; la exigencia de comenzar sindicatos adheridos ideológica y formalmente al comunismo y al Partido, es lla mada por Lenin "necedad", "estupidez", "insensatez" y "daflo a la revolución". ¿Por qué?

Porque la tarea de los sindicatos es incorporar a la mayor can tidad posible de obreros en la lucha económica organizada contra el capital. Es verdad que Lenin llama a los sindicatos "escuela de co munismo".^9) requiera ser o desear ser comunista. Los únicos requisitos son ; 1) ser obrero 2) tener un impulso de resistencia contra la opresión directa del capital, opresión que se expresa por medio de salarios

bajos y jornadas agotadoras de trabajo. Nada más. Sólo de esa forma pueden ser organizaciones masivas de la clase obrera y sólo siendo «sto pueden ser un instrumento de lucha adecuado contra el capital. La incorporación masiva de la clase obrera a la lucha contra el capital, aunque sea meramente la lucha económica, impide que los sin dicatos sean "comunistas" o "socialistas" en el sentido de que para en trar en ellos haya que aceptar la ideología comunista. Esto cerraria la entrada a ellos de la gran mayoría de la masa obrera. Es cierto que la unidad sindical es inferior compara con la partidista y que la lucha económica cede en supremacia a la lucha política, pero esto no implica su dispensabilidad en ningún momento de la lucha. No se pue de entender la relación entre lucha económica y lucha política en Lenin de forma cronológica; como si en un momento la primera desapareci era cediendo todo el campo a la segunda. La lucha de clases tiene pa ra Lenin tres dimensiones: es lucha económica, ideológica y política ("la lucha se desarrolla en forma metódica en sus tres direcciones con certadas, relacionadas entre sí: teórica, política y económico práctica (resistencia a los capitalistas) Estas tres formas de la lucha de clases son en todo momento necesarias e importantes. Se requiere una constante lucha ideológica para eliminar toda idea que sirva de fre no al proceso revolucionario. La lucha política es la suprema, pues es ella la que plantea la toma del poder político y su uso revoluciona rio. Pero la lucha económica, como resistencia constante contra el ca pital, es necesaria también no sólo durante el proceso previo a la

dictadura del proletariado. También bajo la dictadura del proletaria do Ha lucha económica persiste, pues la construcción del socialismo no es un fiat mágico que se logra con la mera adquisición .1 poder. Las estructuras, inclusive productivas, capitalistas o tendientes al capi talismo subsisten por un largo periodo y es necesario protegerse contra ellas. Así que la lucha económica y la función de la lucha de los sin-

IJO dicatosAes algo que desaparece tan pronto se instaura el partido.

En todo momento el sindicato debe incorporar más y más obreros a la lucha de resistencia directa contra el capital. Sólo si ésto se lo gra puede prosperar la lucha política. Los sindicatos son una expresi ón organizada del instinto de clase de los obreros y del inicio de su lucha contra el capital. Constituyen pues el terreno fértil de la agi tación que es tarea del partido socialista. La conciencia socialista puede ser llevada "desde afuera" (es decir, desde el partido) a las ma sas obreras cuando ésta es reconocida como arma adecuada por estas ma sas envueltas en la resistencia contra el capital. pero para esto se requiere que dichas masas realmente se comprometan en dicha resisten cia. Lenin considera que la gran masa obrera adquiere conciencia polí tica socialista no por medio de discusiones elevadas de capacitación ideológica. Esto es efectivo sólo con una minoría de los trabajadores.

Con la avanzada obrera. Pero la masa obrera adquiere conciencia de cla se sólo gracias a la dialéctica de lucha directa, de acción contra-el capital (una huelga, por ejemplo) y agitación socialista. Ambas cosas son necesarias, la lucha o acción y la agitación. Por lo tanto, es

muy necesario que los sindicatos sean organisnos de movilización cons tante de la gran masa obrera contra los efectos del capital. Sólo así (41) puede la agitación del partido encontrar terreno fértil. pero esto significa que la masa obrera tiene, al inicio al menos, una muy rudi mentaria conciencia de clase y que rechazaría entrar a un sindicato si este exigiera una ideología política muy elevada. Así que la evolución de la conciencia política de la masa obrera requiere, paradógicamente, que los sindicatos no sean abiertamente y formalmente marxistes.

La ligazón indisoluble entre partido y movimiento obrero de la cu al habla Lenin, por ende, no implica la unión formal entre partido y sindicato. Por el contrario, lo que requiere es la independencia for mal del sindicato. Lo que se necesita son líderes obreros socialis tas que conduzcan a los sindicatos por una dirección militante de lu cha que prepare el terreno para la agitación del partido. Así que la ligazón entre partido y sindicato es provista, por un lado, por la dia léctica, tan importante para la formación de la conciencia de clase proletaria, entre lucha económica y política, y, por el otro lado, por lideres sindicales que pertenecen al partido y propugnan en la lucha sindical la linea que el partido cree necesaria para el adelanto de la revolución.

Pero en caso de un sindicato estar dominado por una "aristocracia obrera", por lideres obreros que responden objetivamente (estamos ha blando al nivel de las consecuencias políticas, no de las intenciones morales) más a los intereses de la burguesía que a los de los traba-

jadores, la táctica de los revolucionarios no debe ser abandonar esos sindicatos y crear sindicatos socialistas. Eso seria entregar esa ma sa obrera a la burguesía, sería equivalente a una capitulación ante los agentes de la burguesía. Hay que trabajar allí donde están los traba jadores. Y los trabajadores no están donde las ilusiones políticas de los socialistas quisieran que estuvieran. Están donde el proceso his tórico los ha colocado: en los sindicatos existentes.

Para Lenin, por lo tanto, el imperativo que tiene el partido de movilizar la masa obrera por medio del movimiento obrero para la acci ón y por ende para la adquisición de conciencia de clase proletaria, es decir, de conciencia política revolucionaria, requiere no la depen dencia formal de los sindicatos con respecto a los partidos. Sólo así podrá ser efectivo el trabajo de propaganda y agitación socialista en tre los obreros. La independencia formal de los sindicatos es la mejor base para la unidad real entre el movimiento obrero y el partido revo lucionario.

Lenin: Los sindicatos bajo la dictadura del proletariado

Según Lenin, la función de los sindicatos no concluye con la toma del poder de parte del proletariado. Bajo la dictadura del proletaria do, tienen unas tareas de gran importancia en el proceso de construcción del socialimo. Estas son las siguientes: 42 1. Contribuir al aumento de la productividad. El alza en la pro ducción es especialmente importante en el caso de los paises donde se construye el socialismo sobre la base de una economía atrasada o subde-

sarrollada, como en la Unión Soviética ( y lo es hoy en China, Chile, Cuba, etc.) Lenin insiste en que el éxito de la construcción del soci-

^®psnde de su capacidad para contribuir al desarrollo qeneral de la vida hiimana por medio del alza en la productividad. Los sindica tos deben, po lo tanto, hacer propaganda al respecto y educar a sus afi liados en la importancia del trabajo productivo y disiplinado. La nece sidad de llevar una desciplina y organización rigurosas es repetida con stantemente por Lenin. Es la única esperanza de supervivencia para la Unión Soviética, rodeada por poderosas naciones capitalistas. Es la úni ca vía de triunfo del socialismo. Esta alza de.productividad la llama Lenin "la condición material de la implantación del socialismo." Pa ra eso se requiere disiplina y perseverancia total en el trabajo produ ctivo cotidiano.

2. Ser "escuela de dirección técnico-administrativa de la producci(44)ón", y por ende, "escuela de comunismo". El capitalismo enajena al trabajador de su trabajo por medio de la división del trabajo. Según és ta, a cada trabajador compete el conocimiento y dominio de sólo una esfe ra pequeña de la producción de algún renglón económico. Así el trabaja dor labora a ciegas, totalmente enajenado del sistema de trabajo en el cual está inmerso. No tiene poder sobre ese sistema porque: 1) no lo co noce y 2) no tiene forma alguna de controlarlo, Pero, al no tener poder sobre el sistema de producción en el cual vive su vida, pierde también poder sobre su propia existencia. Vive una vida enajenada. Los sindica tos bajo el poder del proletariado tienen como tarea el poner la economía

bajo el control obrero, sentando los fundamentos para superar la enaje nación.

a. Los sindicatos participan en la creación de todos los organis mos del estado que tienen que ver con la planificación y dirección de la economía. Así se convierten en canales para que la clase obrera deje de ser objeto de las decisiones históricas de otras clases y comience, por medio del control de la economía, a ser sujeto de la historia, el motor del cambio social revolucionario.

b. En consonancia con ésto, los sindicatos tienen como tarea el eli minar la brutalización de los obreros "haciéndoles conocer todo el ciclo de la vida económica, todo el ciclo del trabajo industrial, desde la pre paración de la materia prima hasta la venta del producto, y dándoles una idea cada vez más concreta del plan estatal único de la economía socia lista, así como del interés práctico que representa para los obreros y los campesinos la realización de este plan."^^^^ Los obreros adquieren

así conocimiento del funcionamiento y naturaleza de la economía que ellos articulan por medio de su trabajo. Esta deja de ser naturaleza ciega e ignota para ellos y se convierte en algo entendible y controlable. De esta manera su trabajo propio adquiere significado dentro de la totalidad de la vida social.

En este sentido, los sindicatos son "escuela de comunismo". Y tie nen como propósito el lograr "suprimir la división del trabajo entre los hombres, a educar, instiuir y formar hombres universalmente desarro llados V universalmente preparados, hombres que lo sabrán hacer todo."^^^^

De esta manera se ponen las bases para la superación de la enajenación

del trabajador de su trabajo y de si mismo,

3. Formar parte de la necesaria relación dialéctica entre el parti do gobernante, el estado del proletariado, y los sindicatos. Esta rela ción es esencial para la construcción del socialismo.

a. Por un lado los sindicatos sirven de canal por medio del cual el partido se comunica con las masas trabajadoras, se mantiene unido a ellas y logra establecer en ellas el apoyo que le es necesario para el adelanto del proceso revolucionario. Sin esta ligazón con el pueblo tra bajador, el poder del partido iria rápidamente a la bancarrota. Lo que conllevaría también el fracaso del régimen del proletariado.

"En su labor el partido se apoya directamente en los sindicatos ... que en el aspecto formal son sin partido.,. Se obtiene, en conjunto, un aparato proletario, formalmente no comunista, fle xible y relativamente amplio, potentísimo, por medio del cual el partido está ligado de manera estrecha a la clase y a las "^asas y a través del cual se ejerce, bajo la dirección del par tido, la dictadura de la clase. Es natural que nos hubiera si do imposible gobernar el pais... sin la más estrecha ligazón con los sindicatos, sin su apoyo entusiasta..."(48)

El progreso del estado proletario requiere el apoyo político de los trabajadores. El lograr y profundizar este apoyo es tarea del par tido. El partido dirige el proceso revolucionario. En sus manos está el poder político que utiliza para la construcción del socialismo, para la creación de la sociedad no clasista donde desaparezcan todas las con diciones que permiten la explotación del hombre por el hombre. La dicta dura del proletariado tiene como finalidad su auto-liquidación, su desa parición. Esto se logrará cuando se eliminen totalmente los vestigios de la antigua sociedad explotadora y clasista. Entonces desaparecerá la necesidad del estado como gobierno de hombres sobre otros hombres.

como forma de dominio y represión de una clase sobre otra. El estado será sustituido por la administración pública de los procesos de produ cción y distribución.

Para lograr esto el partido necesita insoslayablemente el apoyo del pueblo trabajador. Este pueblo se organiza en los sindicatos. De aqui la importancia de los sindicatos como canal de comunicación y di rección del partido hacia las masas trabajadoras. Por esto el partido debe dar atención principal a su relación con los sindicatos.

"Dicho con otras palabras, el enfoque político significa: si no se abordan bien los sindicatos, eso matará el poder soviético, la dictadura del proletariado. (La escisión entre el partido y los sindicatos..„ darla al traste con el Poder soviético en ...Rusia.)"

"Lo mismo que la mejor fábrica con un magnifico motor y con má quinas de primera categoría no podrá funcionar si está averiado el mecanismo de transmisión que va del motor a las máquinas, i^^^Iniente será inevitable la catástrofe de nuestra construcción socialista si no está estructurado de manera acertada o trabaja ja con fallos el mecanismo de transmisión del Partido Comunista con las masas: los sindicatos,"(49)

Pues, esto conllevarla el gran peligro del alejamiento entre el partido y los trabajadores, lo cual serla fatal para el e'stado proleta rio. La construcción del socialismo requiere por lo tanto que los sin dicatos sirvan de mecanismo de movilización popular en favor del estado proletario.

b. Pero si, por un lado, los sindicatos son indispensables co mo canal de dirección de los trabajadores por medio de su vanguardia, el partido; por el otro lado, los sindicatos deben ser instrumentos de cri tica de parte de los trabajadores con respecto al estado proletario. No hay ninguna garantía metafísica de que el estado dominado por el partido

-32del proletariado va a permanecer libre de deformaciones o corrupción. De hecho, un problema grave al cual Lenin se tiene que enfrentar en los dos últimos años de su vida política es al surgimiento del burrocratismo den tro del estado soviético. Este burocratismo surge, en parte, de las me didas de emergencia tomados para poder combatir rápidamente los efectos del hambre, la guerra mundial, la intervención imperialista en Rusia, la guerra civil y el caos ocasionado por la revolución. El gran peligro a— parece cuando el aparato gubernamental, estructurado para responder de inmediato a esos problemas, comienza a burocratizarse, a dar vueltas so bre si mismo, convirtiéndo su subsistencia, poder y crecimiento en su propia razón de existencia. El burocratismo aparece de repente como una amenaza grave, pues atenta contra las relaciones entre el estado y las masas populares, lo cual significa que pone en peligro el apoyo políti co indispensable para la subsistencia del estado soviético.

Toca a los sindicatos ser un instrumento de crítica, no para la des trucción del estado proletario, sino para su fortalecimiento por medio de su liberación del burocratismo.

"Los sindicatos han perdido una base como la lucha económica pero aún están muy lejos de haber perdido y, lamen tablemente, no podrán perder aún en muchos años, una base co mo la "lucha económica" ^^ clase en el sentido de lucha con tra las deformaciones burocráticas de la administración sovié tica...

"La participación de los sindicatos en la gestión económica y la incorporación por ellos de amplias masas a esta gestión es ... el medio principal de lucha contra la burocratización del órgano de hacienda del Poder soviético y permite someter el control verdaderamente popular los resultados de la producción."50

Es'Cierto que el poder político y económico fundamental ya no está en manos de la burguesía, sino en manos del proletariado por medio de su vanguardia, el partido controla el estado, Pero este estado no es invulnerable el burocratismo y, por ende, a convertir en un mito aleja-' do de la realidad el principio del control popular del estado y la eco nomía. Por esto los sindicatos, aunque ya no tienen la función previa de lucha económica contra el dominio capital y el estado de la burgue sía, tienen todavía una función de lucha contra el burocratismo que de hecho se ha extendido por la administración soviética.

Los sindicatos deben incorporar a los trabajadores al control pú blico del estado y la economía, sirviendo así de forma de lucha contra el peligro de la enagenación del aparato burocrático soviético. Aquí está en juego no algo de menor o relativa importancia, sino el futuro y destino de la revolución socialista. Esta tiene como propósito la eman cipación de los trabajadores de los mecanismos de dominio que hasta aho ra los oprimen y explotan. Es una revolución libertaria en todos los sentidos y se expresa no sólo al nivel infra-estructural - la elimina ción del modo capitalista de producción — sino también al nivel super— estructural - la liberación de las ideologías de dominio y de las estru cturas políticas de sojuzgamiento. El burocratismo en un proceso revo lucionario es una contradicción de este proceso, pues conlleva la forma ción de nuevos mecanismos de dominio que mantienen a los trabajadores en el infantilismo político. Por esto la preocupación que constantemen te expresa Lenin con respecto a la burocratización incipiente del esta do soviético.

Por eso es necesario poner en práctica la "democracia proletaria, que toma inmediatamente medidas para cortar de raiz el burocratismo y que estará en condiciones para llevar estas medidas hasta el fin. Hasta la completa destrucción del burocratismo, hasta la implantación comple ta de la democracia para el pueblo. Esta democracia proletaria o democracia para el pueblo no es algo secundario a la revolución socia lista. Constituye uno de sus objetivos principales y centrales. Que los trabajadores dejen de ser explotados y dominados y se transformen en seres libres que dirigan la vida social en todas sus diversas esfe ras. Esta es la finalidad de la revolución.

Este objetivo es puesto en peligro por el burocratismo dentro del estado proletario. Y contra este peligro deben luchar las organizacio nes obreras, los sindicatos.

"Nuestro estado es un estado obrero que presenta una defor mación burocrática... Hoy en día nuestro estado es tal que el proletariado totalmente organizado debe defenderse y nosotros debemos utilizar esas organizaciones obreras para defender a los obreros contra su Estado y para que los obreros defiendan nuestro Estado."

Vemos, pues, que los sindicatos juegan bajo el régimen socialis ta una función importantísima de ser canal para la relación dialéctica entre el partido-estado y los trabajadores. Por un lado, el partido dirige a los trabajadores en el proceso revolucionario por medio de los sindicatos, los cuales agrupan a las masas trabajadoras, sean o no comunistas. Pero, por otro lado, los trabajadores utilizan los sindi catos para la critica de las deformaciones del estado, para señalarle a éste sus desviaciones de sus funciones auténticas. Esta interrelación

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esta comunicación dialéctica entre partido-estado y clase obrera es esencial para el desarrollo auténtico de la revolución socialista y su democracia proletaria o popular. Lograrla es una de las funciones principales de los sindicatos bajo la dictadura del proletariado.

4. otra tarea central de los sindicatos durante la construc ción del socialismo, tarea que está estrechamente ligada con las ante riores, es la continuación, dentro de las nuevas condiciones, de la lucha de clases. La lucha de clases no concluye con la toma del poder político por el proletariado. La dictadura del proletariado no es la terminación de la lucha de clases, es su continuación bajo otras con diciones políticas. "Mientras existen las clases, la lucha de éstas es inevitable. Durante el periodo de transición del capitalismo al socialismo es inevitable la existencia de las clases..." por lo tan to es inevitable también la lucha de clases, persisten y crecen ras gos burgueses y pequeño-burgueses al nivel económico y al nivel cultu ral. La negligencia del estado y de las organizaciones obreras ante el sabotaje continuo, consciente o inconsciente del proceso revolucio nario, llevaría a éste a su ruina. por esto los sindicatos deben ejer cer una función educativa constante, alertando e incorporando a las masas trabajadoras al proceso revolucionario y a la lucha contra los residuos, a veces muy importantes y poderosos, del viejo orden social.

Para lograr la victoria en esta lucha de clases, el proleta riado requiere de sindicatos que cumplan a cabalidad las funciones arriba delineadas: el alza en la productividad (para el desarrollo de la gran industria que para Lenin es base material del socialismo).

ser escuelas de comunismo (lo que implica la superación de las defor maciones personales creadas por la división del trabajo; la educación integral del individuo y el control de la sociedad y la economía por los trabajadores), ser canales adecuados de comunicación reciproca en tre el partido-estado y los trabajadores (para cjue el primero pueda dirigir efectivamente a los segundos en el proceso revolucionario y para que los segundos puedan supervisar y criticar constantemente la labor del primero). El cumplimiento de todas estas funciones se resu men en la tarea central del proletariado durante la construcción del socialismo - tarea que se expresa de formas diferentes pero interre-

lacionadas en el partido y los sindicatos: llevar a su culminación la

lu'^ha de clases de los trabajadores, hasta la implantación del "reino de la libertad" que menciona Marx en El capital y que constituye la aspiración suprema y objetivo último de todo revolucionario.

Notas

lo Georg Luckács, Lenin (la coherencia de su pensamiento)(México;Grijalbo, 1970), p. 9: "El materialismo histórico es la teoría de la revolu ción proletaria. Y lo es porque su escencia es la síntesis conceptual de ese ser social al que se debe la producción del proletariado y que deter mina el ser entero del mismo; lo es porque el proletariado q[ue lucha por su liberación encuentra en él su más clara auto-conciencia."

2. Para el problema de la relación entre teoría y práctica en el pen samiento moderno y, en particular, en Marx, véase a Juergen Habermas, Theorie and Praxis (Berlin: Luchterhand, 1969)

3. Carlos Marx, "Introducción a la crítica de la filosofía del derecho de Hegel" (1844) en La sagrada familia y otros escritos filosóficos de la primera época (México: Grijalbo, 1967) p. 6.

4. Ibido p. 3s. * 5. Ibid. p. 9s.

6o Ibid p. 15

7. Louis Althusser, "Presentación a la sexta edición", en Marta Harnecker. Los conceptos elementales del materialismo histórico (6ta ed.) (México: Siglo xxi, 1971), pp. xi-xv: "Toda la teoría de Marx... tiene por centro y por corazón la lucha de clases... La lucha de clases es el "es labón decisivo" para comprender El Capital... La teoría científica de Marx nos da la demostración de que todo está relacionado con la lucha de clases

8, Ibid. p.xv: "Uno se ve forzado a abandonar la idea de que la soci edad capitalista habría existido de alguna manera antes que la lucha de clases, y que la lucha de clases... sería el producto del proletariado (y de sus aliados) en rebelión contra las 'injusticias' de la sociedad. En realidad, la lucha de clases propia de la sociedad capitalista es con substancial con la sociedad capitalista: comenzó con ella, es la burgue sía la que la condujo desde sus comienzos con una ferocidad sin igual..."

9. Véase la carta de Marx a Weydemeyer (5 de marzo de 1852) en Obras escogidas (Moscú: Progreso, 1969), pp. 719s; "Lo que yo he aportado de nuevo ha sido demostrar: 1) que la existencia de las clases sólo va unida a determinadas fases históricas de la producción; 2) que la lucha de cla ses conduce, necesariamente, a la dictadura del proletariado; 3) que esta misma dictadura no es de por sí más que el tránsito hacia la abolición de todas las clases y hacia una sociedad sin clases..."

ió. Carlos Marx, Miseria de la filosofía (Madrid; Aguilar, 1969), p.237. Véase también a Marx El pasado, presente y futuro de los sindicatos (1866) reproducido en A. Losovki, Marx y los sindicatos (México: Grijalbo, 1969), p. 8s "El fin inmediato de los sindicatos se concentra, pues, en las exi gencias del dia, en los medios de resistencia contra los incesantes ataques del capital; en una palabra, en la cuestión del salario y de la jornada."

11. Marx (1869) en conversación citada por Plejanov, op. cit. p, 87

12. Marx, Miseria... p. 238.

13. Ibid.

14. Obras escogidas, p. 237.

15. Citada en Jorge Plejanov, Sindicalismo y marxismo (México:Grijalbo,1968), p. 85,

16. Obras escogidas, p. 236s.

17. Ibid. p. 237s.

18. Ejemplo de una expresa utilización de la dialéctica hegeliana pa- • ra poder precisar una linea de acción partidista correcta, la encontramos en "Insistiendo sobre los sindicatos, el momento actual y los errores de Trotski y Bujarin" (enero de 1921), Obras escogidas, vol. 3 (Moscú: Pro greso, 1970) pp, 554-59,

19. Miseria...p, 238, Obras.,. p. 42.

20. Karl Marx u, Friedrich Engels, Ausgewaehlte Schriften (Berlin: Dietz Verlang, 1968), vol. 1, s. 360.

21. V.I. Lenin, Obras escogidas, vol. 3, p. 544.

22. Ibid., vol. 1, p. 155

23. Obras... p. 62s.

24. Ibid. p. 42.

25. Marx u. Engels, Ausgewaehlte Schriften, vol. 1 p. 360,

26. con respecto a Engels, véase Ibid, vol. 2, pp.380. De Lenin es principalmente instructiva su critica a la conciencia "tradeunionista" en su ;Qué hacer?

27. Mao, Obras escogidas (Pekín: Ediciones Lenguas Estranjeras, 1968) vol. 1 p. 348.

28„ Obras... vol.3 p. 376.

29. Ibid. vol. 1, p. 113s.

3Óo Ibid. p. 150.

31. Para entender este aspecto anti-dograático del pensamiento de Lenin y también el desarrollo ulterior de su obra, es importante estudiar el pri mer libre que publicarás Quienes son los amigos del pueblo. Con írespecto a la relación entre el ma^rxismo y el estudio de la realidad nacional, es cribe:"Kingún marxista ha visto jamás en Marx un esquema de la filosofía de la historia obligatorio para todos ... Ningún marxista íia fundado nun ca sus concepciones social-demócratas sobre cosa distinta a la conformi dad con la realidad y la historia de relaciones económicas y sociales de terminadas, es decir, rusas.,. Los intelectuales socialistas sólo podrán realizar un trabajo fecundo cuando hayan puesto fin a sus ilusiones y co miencen a buscar un apoyo en un desarrollo de Rusia no deseable, sino real, en las relaciones económicas y sociales no posibles, sino reales. A par tir de ese momento, su trabajo teórico deberá orientarse hacia el estudio concreto de todas las formas que toma el antagonismo económico en Rusia... Deberá trazar un cuadro de conjunto de nuestra realidad en tanto que sisLevne determinado de relaciones de producción, mostrar la necesidad de la explotación y la expropiación de los trabajadores en ese sistema e indicar la salida que sugiere el desarrollo económico. Esta teoria, fundada en un estudio detallado y profundo y profundo de la historia y realidad rusas, debe proporcionar la respuesta a las aspiraciones del proletariado... No puede haber dogmatismo cuando el criterio supremo y único de la doctrina radica en su correspondencia con el proceso real del desarrollo económico y social..." Estos pasajes son reproducidos de la antología de Lenin in cluida en Roger Garaudy, Lepin (la vida de un militante) (México: Grijalbo, 1970), pp. 107-10. '

32. Obras... vol. 3, p. 378.

33. Quienes son los amigos... p, 108

34. Obras... vol. 1, p, 114

35. Ibid,

36. Ibid., vol. 3, pp. 673s,

37. Ibid., vol. 1, p. 212

38. Ibid., vol. 3, pp. 378s.

39. Ibid., p. 376.

40. Ibid., vol. 1, p„ 139.

41. Con respecto a este punto del pensamiento de Lenin y en general pa ra toda la idea leninista de organización del partido, es muy útil el ensayo de Ernest Mandel, "The leninist Theory of Organization; Its Revelance for Today", International Socialist Revie\v (December, 1970)

42. obras escogidas, vol, 3, p. 674: "El interés primoldial del prole tariado, después de haber sido conquistado por éste el poder estatal, es el aumento de .la cantidad de productos y la elevación de las fuer zas productivas de la sociedad."

43. Ibid., vol. 2, p. 683.

44. Ibid., vol. 3. p. 556.

.45. Ibid.,.p. 557 y 675.

46. Ibid., p. 676.

47. Ibid., p. 375.

48. Ibid., p. 374. '

49. Ibid., p. 544 y 677. . . . • . • •

50. Ibid., p. 559ss. ' ' .

51. Ibid., voi. 2, p. 380,

52. Citado por Garaudy en op. cit. p. 81. El-pasaje es de diciembre de 1921.

53. Obras..., vol, 3, p. 672.

EDITORIAL DE EDUCACION POLITICA

PUBLICACIONES

1. Pedro Albizu Campos, Vida y Pensamiento, Tomo I, Número 1, 1930

2. Cambio social e Ideología, H. Conteris

3. Teoría Socialista, A. Villarini, A. Ramos

4. Militancia Pacifica: Teoría y Practica, R. Cotto Serrano

5. Sobre la Organización Política: I« Organización y Partido, E. Mandel, V.I. Lenin

6. Sobre la Organización Política; II. Organización y Propaganda, J.M. Domenach, V.I. Lenin

Independencia y Sindicalismo, Cesar Andreu Iglesias

®• El Desarrollo de las Clases Sociales y los Conflictos Políticos en Puerto Rico, A.G. Quintero

9. Las tareas de los socialdemocratas, V.I. Lenin

10- Independencia y Cultura. José E. González

11» Los Sindicatos y el Partido, Luis Rivera

DE PROXIMA APARICION

Principios Elementales de Socialismo, Leo Huberman

E:?g3lotaci6n Capitalista; La Plusvalía, M. Harnecker

Las Formas de Lucha Política. R. Levins

Manual de Organización, Varios

El Uso Revolucionario de las Elecciones y el Parlamento, Norman pietri, Luis Rivera y Angel Villarini