Costos sociales de la deserción escolar en Puerto Rico (1993)

Page 1

UERSION FINAL NO ÍNCLUVE FE DE ERRRTR

JUAM. P'jtH ro PICO 0C931

TELS iSOQ) 728-5463 iS ANDiC, 809.' 755-007'; r CAQr X-íJtü

&CSZJL tzjL^

UNIVERSIDAD DE PUERTO RICO

SISTEMA DE BIBLIOTECAS

ADQUISICIONES-DONATIVOS

^ (VOV

Estudio realizado para:

Proyecto Nexos

Vicepresidencia de Asuntos Académicos

Sistema Universitario Ana G. Méndez

enero de 1993

: OOSTOS SOCIALES lA I>ESÉÍicX RXCO
/^ I --j rol lo Z>l lo >1

UNIVERSIDAD DE PUERTO RICO

SISTEMA DE BIBLIOTECAS

ADQUISICIONES-DONATIVOS

63 NOV 2003

CP!^ 57I.2'Í13 ASIGc.
▼ * f»-

Este estudio trata acerca de estimar los costos sociales de la deserción escolar en Puerto Rico. Su propósito es calcular el monto de esos costos para el año de 1990, el cual se selecciona por ser un año censal. ^

Deserción Escolar: Una Definición Operacional

Estimar los costos sociales de la deserción escolar conlleva identificar cuáles son esos costos, estimar su valor por individuo y agregar para la población de desertores escolares^. Claro que antes de proceder, según lo indicado al comienzo del párrafo es necesario definir con claridad cuál es la definición que se ha de emplear para "desertor escolar". Por ello, el estudio comienza analizando las ejecutorias históricas en el mercado laboral de las personas con diferentes niveles de escolaridad. A base de ese análisis se establece una definición operacional de la deserción escolar, la cual se contrasta con las que se encuentran en la literatura.

La literatura usualmente utiliza como criterio de deserción escolar a no completar la graduación de escuela superior. Desde una perspectiva estrictamente económica, el problema del costo social de la deserción escolar surge porque las destrezas de la persona lo ubican en una posición de desventaja con respecto a la productividad promedio de la población. Ello hace que la capacidad del desertor para emplearse y generar un ingreso sea una desventajosa. Puesto que la escolaridad mediana de la fuerza laboral ha estado aumentando a través del tiempo, resulta pertinente preguntar si no ha cambiado el nivel de escolaridad que establece el u^ral para la desventaja en el mercado laboral. Además, es posible qpae los niveles de desventaja laboral varíen sustancialmente entre personas con diversos niveles de escolaridad, en cuyo caso sería necesario establecer varias categorías de desertores, en vez de agregarlos en una sola.

Para evaluar esas posibilidades, se examinaron las tasas de desempleo por nivel de escolaridad para el periodo de 1963 a 1991 cubriéndose así 29 años en el análisis. Se encontró que, a partirde 1976, las desventajas de las personas con de 10 a 11 años de escolaridad se mantienen constantes en el mercado laboral. En términos generales, este grupo laboral registra tasas de desempleo que, en promedio, exceden en 9.4 puntos porcentuales las de la población en general. Las ^rsonas con educación postsecundaria tienden a ventaja estable en el mercado laboral, de suerte que su tasa de desempleo tiende fluctuar manteniendo una

EJECUTIVO
RESUMEN"

DESERCION ESCOLAR Y DESEMPLEO

distancia promedio de 8.5 porcentuales por debajo de la tasa para la población. Así "T je« que, durante los a.. pasados 15 años, no ' parece que hayan ^ ocurrido cambios en las ventajas y desventajas laborales relativas ... « « 13 I ' I ' i ' I ' I ' I ' I I I I 1 I ^ I I ^ ae las personas con "*« 1*«5 m? im» uti uto i»7s i»?? itn imi itaa UK IMT iw* IMI niveles de I escolaridad mayores "*«Tot»i| y menores a la , graduación en escuela superior, a Diagrama 1 pesar del aumento registrado en la escolaridad mediana de la fuerza laboral

I tkpto. iltt Tr«b«jo ^ Ktc. H«fn.

Diagrama 1

El siguiente asunto que se trató en el análíRíc si las oportunidades laborales de las personas no graduadM"e escuela superior, pero con niveles diversos de escolaridad registran diferencias sustantivas. El análisis estadlsíic¿ concluyó que las oportunidades o desventajas laborales oara personas con de 7 a 9 años de escolaridad no son significa^eLnte diferentes a las que experimentan las personas con de 10 a ii año« de escolaridad. anos.

se concluye, entonces, que la inforaacidn estadística evaluada es consistente con utilizar al criterio de graduación de escuela superior como base para definir operacionalmente la deserción escolar. Por esta razón se adopta ese criterio, según es iS tradicional en la literatura. ' ^ lo

Estimado del Núaiero de Desertores Escolares

Una vez de define operacionalmente, para Drooó«il<-r>e estudio, la deserción esoolw, se procede a estimar ^núl?«o de desertores escolares en Puerto Rico. El problema anuí Departamento de Educación estima "tasas de retencTón" el número de estudiantes en un grado dividido entre el núi^^ comenzó estudios para esa clase. Pero la pérdida de estud^nte«^« las escuelas del Departamento no significa qíé los no retenidos

Asesoría y Consulta, inc

RESUMEN EJECUTIVO
PuMoS
'Oif. It-n U Tttal
-Oif.
12 w Tota • Olf. IJ* y Total

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R.

sean necesariamente desertores escolares. El número de estudiantes en una clase en escuelas públicas puede mermar a causa de la emigración, la transferencia a escuelas privadas y la muerte e incapacidad de estudiantes. La tasa de retención así calculada también se afecta por la inmigración y la transferencia de estudiantes de la escuela privada a la pública. Por todas esas razones, es necesario ajustar los estimados de deserción escolar del Departamento de Educación, para obtener un indicador más preciso del número de desertores escolares en la población También es necesario analizar los cambios y tendencia en la tasa dé deserción a través del tiempo y entre grupos de edades.

Para estimar^ el número de desertores escolares en Puerto Rico se utiliza la definición operacional establecida anteriormente: un desertor escolar es una persona adulta que no completa sus estudios de escuela superior, esto es, que su escolaridad es menor a 12 años. Para no incluir como desertores escolares a personas con rezago en sus estudios, se excluye de la definición de deserción escolar a las personas que estén matriculadas en cualquier institución educativa. Así, por ejemplo, un joven de 20 años de edad, que haya completado el lOmo. grado, pero que esté asistiendo a una escuela u otra institución educativa, no se considera desertor escolar. Tampoco se consideran desertores escolares a los menores que vivan como dependientes de un jefe de f£unilia, aunque no asistan a la escuela. Esto se hace para evitar incluir como desertor escolar a aquellos menores que interrumpen temporalmente sus estudios.

Utilizando los criterios indicados en el párrafo anterior, se TASAS E estima que la tasa de deserción escolar de #ereí«*to varones es 46.2%. puesto que, de acuerdo a la información censal, el número total de varones con 15 ó más «w- HH años de edad en la población es 1,200 mil, se estima que el total Jp (Je varones que son "■** desertores escolares es 554 mil. con respecto a las personas del sexo Diagrama 2 femenino, a base de la TASAS ES base de la

TIMADAS DE DESERCION ESCOLAR PUERTO RICO: 1992

Asesoría y Consulta, Inc.

información muestral se calcula que su tasa de deserción escolar es 55.2%. Toda vez que la información censal indica 1,364 mil personas del sexo femenino con 15 ó más años de edad, se estima que 753 mil personas del sexo femenino son desertores escolares. La tasa de deserción resultante para la población total es 51.o%.

Se observa que este resultado significa que, nuevamente aumentó la proporción de graduados de escuela superior en lá población. Como se indicó antes en este capítulo, tal fenómeno sólo puede ocurrir si la tasa de deserción escolar ha estado disminuyendo a través del tiempo. Para verificar esa hipótesis se decide examinar la tasa de deserción escolar por sexo y grupos de edad. De ser cierta la hipótesis, se espera que la tasa de deserción escolar aumente mientras mayor sea la edad del grupo.

El Diagrama 3 informa las tasas de deserción escolar por sexo y grupos de edades para las personas mayores de 25 años en la muestra. Se encuentra que, según lo esperado, las tasas de deserción escolar tienden a ser mayores para los grupos de mavor edad. Otro ^ ha l la zgo interesante es que TASAS ESTIMADAS DE DESERgON ESCOLAR la diferencia entre POR QRUP08 DE EDAD Y SEXO sexos en las .tasas r«,rci,to de deserción escolar disminuye a aax medida que se reduce la edad de *** los grupos, llegando a desaparecer la diferencia para el «i grupo en las edades " *■" as » •>-•« tih entre 25 y 29 I años' I

Diagrama 3 presenta la distribución por sexos v gru^s de edad de las proporciones de personas con educacióí postsecundaria. Nuevamente se encuentra que las personas S jóvenes tienden a estar mejor educadas que las mayores Además la

Asesoría y Consulta, inc

RESUMEN EJECUTIVO
aa-M a3-3« 'W-m «•-•4 89-S* W-M

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R.

desventaja educacional por oento oon educación post-8ecunqaria~~~" de las personas del sexo POR QRUPoe de edad y sexo femenino, no solo r-rci.»*» disminuye en los grupos de menor edad, sino que para las edades entre 25 „. y 34 años la proporción ^ ^ de personas del sexo femenino con educación j«^ postsecundaria es mavor im ■ , que la correspondiente «» »-»4 *=« 4.-4« ^-*4 s n *,'„ al sexo masculino'. Los l patrones identificados I en estos dos diagramas indican que a través del L_ tiempo han estado Diagrama 4 ^ ocurriendo cambios de significación en la distribución de la educación entre los sexos.

Diagrama 4

Parecen existir dos fenómenos en la población que están relacionados con la deserción escolar, aunque pueden considerarse diferentes a Uno es el rezago escolar. Esta categoría comprende a estudiantes, matriculados en instituciones educativas que no registran un progreso académico normal; esto es, que en cada año académico no incrementan su nivel de escolaridad también en un ano. El problema con estas personas es que, a pesar de no ser desertores escolares, bajo la definición operacional que se emplea en este estudio, parecen registrar una alta probabilidad a desertar de la escuela

Por otra parte, al examinar la información estadística, se observa que la proporción de personas que no ha completado 12 años de escuela superior es mayor en el grupo de edades de 17 a 24 años que en el de 25 a 29 años. Este fenómeno puede tener dos causas* (1) un aumento en la deserción escolar durante los últimos años ó

(2) que existan sectores poblacionales c[ue abandonen temporalmente sus estudios escolares, pero que al cabo de algún tiempo completan el cuarto año de escuela superior.

La hipótesis de ion aumento reciente en la tasa de deserción escolar es inconsistente con el resto de la información estadística analizada en este estudio. Se ha visto que, entre 1963 y 1991 ha estado aumentando la escolaridad mediana de las personas en la fuerza laboral del país. También se observó que la escolaridad mediana de la población aumentó entre 1960 y 1980, de acuerdo a la información censal. Más aún, las tasas de deserción escolar

Asesoría y Consulta, Inc'.

i

aumentan a medida que se pasa a grupos poblacionales de mayor edad. Toda esta información es consistente con una tendencia secular a la disminución en la tasa de deserción escolar a través del tiempo, por lo que ha de descartarse la hipótesis de un aumento en la tasa de deserción escolar.

RESUMEN EJECUTIVO

PROPORCION DE PERSONAS CON ESCOLARIDAD MENOR A 12mo. ORADO

POR EDAD Y SEXO

El argumento Diagrama 5 anterior lleva a la consideración de la otra hipótesis: existen personas que sibandonan temporalmente sus estudios escolares, para después completar su cuarto año de escuela superior. A estos individuos se les denomina aquí desertores temporales. Debe señalarse que estas personas no necesariamente completan su escolaridad de 12 años a través del mecanismo formal de la escuela tradicional, sino que pueden completarla p)or otros medios, como los programas de la Administración del Derecho al Trabajo y del Cuerpo de Voluntarios.

La existencia de esta categoría de desertores temporales no solo es consistente con el patrón de la evidencia empírica, sino que también con los hallazgos de otras investigaciones. Según un estudio que realizó el Departamento de Educación de Puerto Rico en 1988, ocho de cada diez desertores escolares indicaron que deseaban volver a la escuela', mostrando una propensión a no mantenerse permanentemente en su condición de desertores escolares.

A pesar de que escapa del tema de este estudio, parece pertinente indicar que esta situación plantea interrogantes, que convendría analizeur en otras investigaciones, para el diseño de políticas públicas. El primer asunto es (jue, para la existencia de la posibilidad de que los desertores temporales no se conviertan en permanentes, es necesario que existan alternativas educativas que complementen la escuela superior. Es evidente que tales alternativas deben ser diferentes a la escuela tradicional, puesto que: (l) ya ella falló y (2) las condiciones personales cambian con la edad, por lo cual un ambiente adecuado para un individuo de 14 años no lo es para uno de 20 años. Sería objeto de análisis

Asesoría y Consulta, Inc.

17-M 21-M S9-» M'M S3-M 49-4* M-M t9-9f ••-44 ••-•9 BA»

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R.

determinar si alternativas como las que ofrecen la Administración del Derecho al Trabajo y del Cuerpo de Voluntarios son eficientes para esos desertores escolares, si su oferta es suficiente para el número de personas que requieren los servicios y cómo comparan las destrezas sociales y laborales de los que adoptan esas alternativas con las de aquellos estudiantes que siguen el patrón escolar tradicional.

Otro aspecto que conviene analizar es si existen variaciones en las características de los desertores temporales y permanentes. Ese análisis es pertinente para el diseño de estrategias de prevención para la deserción escolar. si las características difieren entre los dos grupos, las estrategias también deberán ser diferentes.

Educación Empleo y Desempleo

Una vez se obtiene un estimado del número de desertores escolares en la población, procede identificar, y calcular, los costos sociales asociados a esta situación. Identificar los costos sociales asociados a la deserción escolar equivale a establecer los beneficios que la sociedad pierde cuando un estudiante abandona sus estudios®. Al revisar la literatura, se encuentra que uno de los principales efectos que se señala es la relación entre educación, productividad e ingreso"'. La literatura es consistente en identificar una relación positiva entre nivel educativo e ingreso*. Como consecuencia, a través de la educación las personas aumentan el nivel del Ingreso Nacional, contribuyendo así al desarrollo económico*. Cuando una persona abandona la escuela, la sociedad experimenta una limitación en su capacidad para el crecimiento económico, lo que representa un costo social.

ASÍ entonces, desde una perspectiva estrictamente económica, el problema del costo social de la deserción escolar surge por^e . ¿jgstrezas productivas de la persona lo ubican en una posición de desventaja con respecto a los demás miembros de la sociedad^*'. Filo hace que la capacidad del desertor escolar para emplearse y enerar un ingreso sea desventajosa. Por tal motivo es pertinente ^valuar cómo compara la situación laboral de los desertores ^ colares con la de las personas (^e no lo son. Tal análisis expresar en forma cuantitativa una de las desventajas que '^^entan los desertores escolares, así como una de las pérdidas sufre la sociedad, al no emplear la capacidad productiva de Stas personas.

Asesoría y Consulta, Inc.

El análisis efectuado en el estudio lleva a la conclusión de que una disminución en la tasa de deserción escolar llevaría a un aumento en la tasa de participación laboral. La información estadística indica que a medida que aumenta el nivel educativo de los individuos, mayor es su disposición para participar en la fuerza laboral. Así, una disminución en la tasa de deserción escolar aumentará el número de personas buscando empleo. Tal hallazgo hace que resulte pertinente analizar la distribución de empleos por sectores económicos y educativos. Tal análisis permitirá una primera aproximación acerca de la capacidad de la economía para absorber una oferta adicional de trabajadores oue resultaría de una disminución en el número de desertores escolares

Al examinar cómo se distribuyen las personas empleadas entre los diferentes sectores económicos se encuentran resultados de interés. Uno es que, tanto en el caso de los varones como de las mujeres, las proporciones de personas empleadas en el gobierno en un grupo de nivel educativo, aumenta a medida que incrementa la escolaridad. Esto es, mientras más educadas son las personas mayor es la probabilidad de que se empleen en el sector gubernamental Esta tendencia es particularmente cierta para las mujeres, donde el gobierno es el principal patrono para las mujeres empleadas con educación de nivel postsecundario.

Toda vez que el empleo gubernamental no ha estado creciendo en los últimos años", este sector no habría podido absorber un aumento en la oferta laboral ocasionado por una reducción en 1 deserción escolar. Dados los problemas fiscales que enfrenta el gobierno de Puerto Rico, no es de esperar que ocurra un cambio en su tendencia de creación de empleos, por lo que en el futuro próximo no podrá ser éste el sector que capte aumentos sustancialoo en la oferta laboral.

No es de esperar que la empresa privada aumente su demanda non trabajadores de ocurrir una disminución en el número de desertores escolares. Para que las empresas empleen más personas es necesario que ocurran aumentos en la demanda por sus productos o ou disminuya la tasa salarial en el mercado. La demanda por trabaio no varía con cambios en la oferta laboral, por lo que un aumento en i» Oferta laboral tendría como resultado una disminución en el salari promedio, lo que traería consigo algún cambio en el número personas empleadas. Sin embargo, la situación más deseable serf» que ocurriese un aumento en la demanda por trabajo Para ello necesario que se tomen medidas que estimulen el crecimiento aener«i de la economía o que aumente el autoempleo entre los Darticioaníci en la fuerza laboral. ^ ^ "tes

Asesoría y Consulta, Inc.

RESUMEN EJECUTIVO

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R.

En el estudio también se encontró que el autoempleo es una alternativa que parece ser poco atractiva para las personas. a medida que aumenta el nivel de escolaridad del individuo, menor es su probabilidad de que decida autoemplearse. Aunque este tema cae fuera del ámbito de este informe, es pertinente que, en su momento, se estudien las oportunidades y limitaciones del autoempleo para la fuerza laboral del país; de forma de identificar medidas y políticas que lo conviertan en una alternativa efectiva para la generación de empleos.

Deserción Escolar e Ingreso

A continuación, en el estudio se analiza directamente la relación entre ingreso y escolaridad, con el propósito de calcular la pérdida en ingresos del trabajo que es atribuible a la deserción escolar. Los valores que se estimen deben ajustarse por los efectos que tendría sobre la oferta laboral un aumento en el nivel de escolaridad en la población.

El primer paso en el proceso de estimación es calcular la diferencia promedio entre el ingreso ganado por los desertores escolares y las personas que no lo son. Al respecto se utiliza como patrón de estimación la diferencia entre el ingreso promedio de los desertores escolares y el de las personas con escolaridad de 12mo. grado. Esa diferencia es la base para calcular el aumento en ingreso ganado de los desertores escolares que dejen de serlo. Ahora bien, el estimado debe ajustarse por los siguientes factores;

1. La tasa de desempleo de los desertores escolares es mayor que la de las personas con escolaridad de 12mo. grado.

2. La tasa de participación laboral de los desertores escolares es menor que la de las personas con escolaridad de 12mo. grado.

3. Un aumento en la oferta laboral tiende a causar una reducción en el salario promedio.

Para los estimados se utiliza al 1990 como año de referencia, ya que el número estimado de desertores escolares se calculó a base de la información del censo de 1990.

Al efectuar el análisis, se observa que el ingreso promedio de los varones es mayor al de las mujeres para todos los niveles considerados de escolaridad. Asimismo se observa que el ingreso

Asesoría y Consulta^ Inc,

promedio aumenta a medida que es mayor el nivel de escolaridad. Esta situación es cierta para ambos sexos. También se observa que completar la escuela superior resulta en una mayor mejoría para las mujeres que para los varones, en cuanto a la capacidad para generar ingresos, ya que completar el 12mo. grado de educación representa, en promedio, los siguientes aumentos en el ingreso anual que ganan los desertores escolares:

• Varones $2,288.52 anuales Mujeres

$2,497.66 anuales

El hallazgo de que el diferencial en ingreso ganado promedio entre sexos varíe con el nivel de escolaridad, amerita que el fenómeno se examine con mayor detenimiento. En el caso de los hombres, pasar de la condición de desertor escolar a la de tener una escolaridad de 12mo. grado, significa un aumento promedio de 20.9% en el ingreso ganado. Ese mismo cambio, en el caso de las mujeres, representa un incremento promedio de 28.0% en el ingreso ganado. Por lo que ese aumento en el nivel de educación es más beneficioso para las personas del sexo femenino.

La tendencia sigue con la misma dirección para el siguiente nivel de escolaridad, esto es, al pasar a un nivel de 13 a 14 años de educación formal. La tendencia en el patrón de cambio se revierte cuando se pasa a niveles educativos mayores. Aumentar la escolaridad de 1314 años a 15 - 16 años es más DIFERENCIAS EN INGRESO QANADO PROMEDIO beneficioso para CON RELACION AL INGRESO GANADO POR los hombres que PERSONAS CON ESCOLARIDAD DE 12niO. GRADO para las mujeres, y lo mismo sucede ^ : —■— cuando la rüü; | escolaridad aumenta . wm l a 17 años o más. - 1 SiS

Esta situación ~ tiene importantes xs-uimplicaciones con respecto a la "♦equidad en la ^ ^ ^ distribución del «« ingreso entre los sexos. Al comienzo Diagrama 6 de la distribución I

Asesoría y Consulta, Inc.

RESUMEN EJECUTIVO
aa.w 47.M
fm CIBR*
M.M

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R.

de escolaridad, la proporción entre el ingreso ganado de los hombres, con respecto al de las mujeres, va disminuyendo, hasta alcanzar su mínimo en el nivel de 13 a 14 años de escolaridad. Hasta llegar a ese punto, la educación tiene un efecto de disminuir las diferencias entre sexos en el ingreso ganado, lo que implica que la educación actúa como promotora de equidad social. sin embargo, al pasar a los niveles de educación mayores a de 13 a 14 años de escolaridad, se encuentra que a mayores niveles de educación, mayor es la diferencia entre sexos en el ingreso ganado disminuyendo así la equidad. '

Se observa, entonces, que la educación desempeña un papel contradictorio en la promoción de la equidad entre los sexos Aunque escapa del ámbito de este estudio, tal hallazgo plantea interrogantes que ameritan ser investigadas, adelantándose algunas hipótesis en el informe. Cualesquiera que sean las causas para el peculiar comportamiento de los efectos de la educación sobre la equidad entre los sexos, el fenómeno identificado es lo suficientemente importante como para justificar un análisis mayor al que se le puede dedicar en este estudio.

Una vez se estima la pérdida esperada en ingreso que sufre \in desertor escolar, a causa de su condición educativa, es necesario calcular el valor agregado de esa pérdida para la sociedad, en un año dado. Puesto que se ha establecido que el ingreso esperado varía entre sexos, es conveniente estimar esa pérdida para cada sexo y después sumar ambos valores. La pérdida agregada atribuible a los desertores escolares varones se estimó en $1,992.6 millones, mientras que la correspondiente a las desertores escolares del sexo femenino se calculó en $1,679.7 millones, ambos valores estimados para el año 1990. El costo social total por este concepto es, entonces, $3,672.3 millones. Este valor corresponde al 27.0% del total de los pagos por compensación al trabajo en 1990.

El costo social informado en el párrafo anterior supone que eliminar la deserción escolar no traería consigo variaciones en la estructura salarial de la isla, sin embargo, tal cambio resultaría en expandir la oferta laboral. Un aumento en el número de personas participando activamente en el mercado de trabajo, suele resultar en disminuir el salario promedio y aumentar la tasa de desempleo. Por este motivo, se deben ajustar los estimados de la pérdida agregada en ingresos ganados por los desertores escolares, para reconocer los efectos del incremento esperado en la oferta laboral. Para hacer ese ajuste, se decidió utilizar el criterio propuesto por Catterall.^ Siguiendo el procedimiento propuesto por ese autor, la pérdida estimada en ingresos, atribuible a la deserción escolar,

" " Asesoría
y Consulta, Inc,

se reduce en 25 por ciento; resulta pérdida neta de millones, c a n t lo que en una ajustada $2,754.2 Tal i d a d corresponde al 20.3% del total de las compensaciones pagadas al trabajo en Puerto Rico durante 1990.

Otra forma de

PERDIDA ESTIMADA EN INGRESOS A CAUSA DE LA DESERCION ESCOLAR AJUSTADA

valorar los efectos Total; $2,754.2 millones de la pérdida de 1990 ingresos ocasionada Diagrama 7 " ~ ■— por la deserción escolar, es calcular el valor presente de los ingresos que pier-río un desertor escolar a través de su vida. Ese estimado ofrece un indicador de la pérdida capitalizada que sufre la sociedad por cad« uno de los desertores escolares. Al calcular ese costo social en tal forma, se encuentra que el valor presente de las pérdidas estimadas en el ingreso de un desertor escolar del sexo masculino es $87,333, mientras que para uno del sexo femenino es $54 161 Esos valores contrastan marcadamente con los recursos que sé asignan para prevenir y remediar la deserción escolar en Puerto Rico, ya que se estima que el gasto anual promedio por participante para esos propósitos es $407.89.

ConsBcuencias Fiscales de la Deserción Escolar

La relación entre educación e ingreso tiene otras manifestaciones sociales, que también conviene explorar. A mavor sea el ingreso de la persona, mayor será su habilidad para paqar impuestos y, por ende, mayores los ingresos gubernamentales, otro efecto de un mayor nivel de ingresos es la disminución en la demanda por servicios de bienestar social. Al aumentar el nivel de ingresos de una i^rsona, se reduce su demanda por servicios de beneficencia pública. En el caso de Puerto Rico es necesario ejercer cautela ¿l estimar ese efecto, pues gran parte de los pagos de asistencia p^lica se financian a través de transferencias del gobierno federal; por lo que es necesario ajustar por los efectos sobre los pagos de transferencia.

Asesoría y Consulta, inc

RESUMEN EJECUTIVO
■ranas M.ax Cl.494.4
Mujaras
_ _ ,
43.7X
«i.im.b

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R

central incurrió en una pérdida de ingresos fiscales estimada $510.4 millones, estudiantes (los que ahora son desertores escolares) requeriría

Al estimar esos efectos, se encontró en que 1990 el gobierno L en Por otra parte, atender el mayor número de un aumento en el presupuesto del Departamento de Educación estimado en $334.9 millones, suponiendo que se mantendrían constantes los niveles de gasto promedio por estudiante en las diferentes partidas. Asimismo, se estimó que el Departamento de Educación tendría un incremento neto de $77.4 millones en las transferencias que recibe del gobierno federal.

Deserción Escolar y Criminalidad

En la literatura también se señala que las tasas de criminalidad tienden a disminuir entre las personas con mayor nivel de educación^'; por lo que es de esperar que un aumento en el nivel educativo habrá de generar beneficios sociales por la vía de una reducción en la criminalidad. Para analizar esa hipótesis, se efectuó una revisión de estudios realizados en la Isla acerca del tema de la criminalidad. Al examinar esas investigaciones se encuentra que, en efecto, en Puerto Rico también parece existir una relación inversa entre el nivel de escolaridad del individuo y la probabilidad de que incurra en actos delictivos. El examen de las estadísticas gubernamentales referentes a la incidencia criminal de menores y adultos tiende a indicar que ellas también resultan ser consistentes con el argumento de que los niveles de criminalidad tienden a disminuir a medida que aumenta la escolaridad en las personas.

En el estudio se encontró que, efectivamente, los desertores escolares registran una mayor probabilidad de incurrir en delitos, que los no desertores. Así, una reducción en el número de desertores escolares tenderá a disminuir la criminalidad, y los costos a ella asociados. Se calculó en $412.3 millones el costo social anual del crimen atribuible a la deserción escolar existente. Ese valor equivale al 37 por ciento del costo social total estimado para la actividad criminal en Puerto Rico.

Demanda por Educación Dniversitaria

Toda vez que la deserción escolar disminuye el número de graduados de escuela superior, ella reduce el número de candidatos elegibles a realizar estudios universitarios. Este asunto es importante por varias razones. En primer término, la matrícula

Asesoría y Consulta, Inc

universitaria en Puerto Rico disminuyó a partir del año 1984, por lo que parece existir capacidad excesiva en esas instituciones educativas. Un aumento en la matrícula universitaria también incrementarla los flujos de transferencias federales, por concepto de becas, que recibiría Puerto Rico. Así aumentaría el ingreso disponible en el país. Además, los nuevos estudiantes universitarios, al graduarse tendrían mayor capacidad para generar ingresos del trabajo, lo que se añadiría al valor de la pérdida de ingresos del trabajo, previamente estimado en el informe.

Sin embargo, el elemento más importante en este asunto quizás lo sea el efecto que tenga sobre la capacidad de Puerto Rico oara competir bajo las nuevas condiciones económicas. Los desarrollos en la tecnología, la globalización en la industria y i» regionalización de los mercados alteran las relaciones económicas Ahora los países, para competir con éxito, requieren nuevas condiciones para la promoción industrial, incluyendo disponer una fuerza obrera diestra y versátil». De ahí la importancia de promover la educación universitaria y postsecundaria, así como el efecto limitante de la deserción escolar en el desarrollo de l» competitividad en nuestra economía.

Para estimar los efectos de la deserción escolar sobre la demanda por educación universitaria, se revisó informacid estadística pertinente y se estimaron dos ecuaciones de regresión Esas ecuaciones relacionaron la matrícula universitaria de nuev ingreso con el número de graduados de escuela superior y con l tasa de desempleo para los jóvenes en edades de 16 a 24 años s estimó una ecuación para universidades públicas y otra na universidades privadas en Puerto Rico. Esas ecuaciones utilizaron para simular el número de matriculados en universidad^^ en 1990, de no haber deserción escolar. aues

Esas ecuaciones proveen un instrumento para estimar el cambio esperado en demanda por educación universitaria de controlarse i» deserción escolar. Si en las ecuaciones se sustituye el número d graduados que habría en la clase de 1990 de no haber deseroió^ escolar, se obtiene un estimado del cambio en la demanda ¿o? educación en las universidades publicas y privadas en Puerto n4^ Previamente se habla estimado que la tasa de deserción escola; promedio en cada promoción de graduados es 35.3%». Al aiust número de graduados de escuela superior en 1990 *dot- i» deserción estimada, se obtiene que 55,781 persoMs se htórlan graduado de escuela superior, de no ser por la deR^r-oióra ««« i Al sustituir ese valor para el número de gradSedoi eS ecuaciones, se obtienen estimados Para la mateí

Asesoría y Consulta, inc,

RESUMEN EJECUTIVO

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R.

ingreso que habría ocurrido en las universidades del país, de no ser por la deserción escolar.

La simulación indicó que, de eliminarse la deserción escolar, en 1990 habrían 6,362 estudiantes adicionales de nuevo ingreso en las universidades del país. De ellos, 6,090 habrían ingresado en universidades privadas y 272 en instituciones del estado. La diferencia en esa distribución se puede atribuir al fenómeno observado de cjue la universidad pública basa sus admisiones en políticas institucionales que son poco elásticas con respecta a la demanda por sus servicios.

Se observa que, a base de los estimados informados, la proporción de personas graduadas de escuela superior que se habrían matriculado en universidades en 1990, de no haber sido por DESERCION ESCOLAR Y DEMANDA la deserción escolar, POR EDUCACION UNIVERSITARIA sería 64.8%. Tal proporción es menor al valor promedio de 77 por ciento, que se ha ....... mnn.» regist^do históricamente. embargo, es razonable que esa proporción disminuya al ocurrir un aumento sustancial en el

numero de graduados de escuela superior, según es .^99Q el caso en la simulación llevada a cabo.

Diagrama 8 Ahora bien, si la matrícula universitaria hubiese aumentado en 6,362 estudiantes en 1990, es de esperar que las transferencias federales por concepto de becas habrían aumentado en $12.2 millones. Ese valor es otra pérdida de ingresos a la sociedad que ocasiona la deserción escolar.

Efectos Intergeneracioiiales y Distribución del Ingreso

También es importante reconocer que la deserción escolar tiende a introducir un elemento diferenciador entre sectores sociales: los más educados y los menos educados. Ello tiende a introducir una dimensión de marginación e inequidad entre sectores sociales, lo cual es contrario a la cohesión y la solidaridad social. Un indicador de esos efectos es las consecuencias que

Asesoría y Consulta, Inc,

X y OZCTO ■BXncilM DC *■""
1990 mero niDCKw nc i.Ka
Hmictfui ncftnMié

tengan las diferencias en niveles educativos sobre la distribución del ingreso.

Al revisar la investigaciones realizadas en Puerto Rico acerca del tema de la distribución del ingreso, se encontró que los autores no han podido establecer una clara relación estadística entre aumentos en los niveles de escolaridad y mayor equidad en la distribución del ingreso. Esa situación se puede explicar por el papel contradictorio que tiene la educación en la promoción de la igualdad económica entre los sexos. Se encuentra que, hasta llegar al nivel educativo de 13 a 14 años de escolaridad, a mayor sea la escolaridad menor es la diferencia entre los sexos en el ingreso ganado por el trabajo. Sin embargo, después de ese nivel la relación cambia, de suerte que al pasar a mayores niveles de escolaridad aumenta la diferencia entre los sexos en el ingreso ganado. Como ambos efectos están ocurriendo en forma simultánea con direcciones opuestas, en el agregado tienden a cancelarse entre sí; resultando el efecto básicamente neutro que informa la literatura.

Toda vez que prevenir y controlar la deserción escolar ocurre en la zona donde aumentar la escolaridad mejora la equidad entre los sexos, aumentar el nivel educativo en ese punto tiene un efecto de promover la equidad en la distribución del ingreso. Así entonces, acciones encaminadas a prevenir y remediar la deserción escolar son consistentes con la promoción de la equidad social.

Se encuentra, además, que la deserción escolar promueve el desarrollo dinámico de un círculo vicioso, donde los hijos de los desertores tienden también a serlo. De esta forma, la situación de desigualdad social que promueve la deserción escolar tiende a perpetuarse a través del tiempo, deteriorando la cohesión en las estructuras sociales.

Otros Beneficios Sociales de la Educación

La intención primordial en el estudio es calcular un indicador monetario de lo que la sociedad puertorriqueña pierde a causa de la deserción escolar, así como de los beneficios que recibiría de controlar ese problema. Sin embargo, el control de la deserción escolar también resultaría en beneficios económicos que no se pueden medir en términos monetarios, pero que no por ello resultan ser menos importantes. En realidad, algunos de esos beneficios son esenciales para el funcionamiento del sistema económico y la permanencia misma de la sociedad. Por tal razón, se decidió

Asesoría y Consulta, inc, '

RESUMEN EJECUTIVO pi.

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R.

dedicar el capítulo 11 del informe a la evaluación de esos "otros beneficios sociales de la educación", que son esenciales para que puedan existir y funcionar adecuadamente economía y sociedad.

Entre esos beneficios se identificaron la función de socialización y cohesión social de la educación, la cual es esencial para el funcionamiento y permanencia de una colectividad, en particular si su sistema de gobierno es democrático. Asimismo se identificó el papel que desempeña el proceso educativo en el desarrollo de actitudes adecuadas y necesarias para el mundo del trabajo.

Otros beneficios identificados son el desarrollo de las capacidades de las personas para aprender y adaptarse al cambio. Se estableció que estas destrezas son particularmente importantes en el momento presente, a consecuencia de las profundas y rápidas transformaciones económicas que traen consigo los procesos actuales: cambios tecnológicos, globalización económica y regionalización de los mercados. Dentro de ese contexto, se concluyó que la viabilidad misma de la economía de un país depende de que su fuerza laboral no solo posea las destrezas laborales en demanda, sino que tenga la capacidad para aprender nuevas destrezas al menor costo y adaptarse a los cambios.

En la literatura también se establece que a mayor el nivel de educación de una persona, mejor tiende a ser su salud y la de sus hijos. Asimismo se encontró que la literatura identifica el fenómeno de que la educación tiende a mejorar las decisiones cotidianas de las personas, su eficiencia como consumidores y en la administración del hogar.

Finalmente, se discutió que, puesto que existe una relación directa entre el nivel de educación de una persona y su ingreso, numerosos autores han argumentado a favor de promover la educación como instrumento para la equidad social. Este argumento se ha tornado más crítico en tiempos recientes, cuando los rápidos cambios tecnológicos llevan a que las personas en el mercado laboral requieran niveles crecientes de destrezas. Así, parece existir consenso en la literatura de que mayor igualdad en la distribución de la educación tiende a promover mayor equidad en la distribución del ingreso. Puesto que controlar la deserción colar tiene el efecto de disminuir la desigualdad en la e+-T-ibución de la educación, es de esperar que ello promovería una situación de me]or justicia social.

se observa que estos beneficios son de la mayor importancia

Asesoría y Consulta, Inc

social, a pesar de que no puedan ser cuantifloados en términos monetarios. Por eso, cualquier estimación monetaria de los costos sociales de la deserción escolar tiende a subestimar el valor real de tales costos, por lo que esos estimados (incluyendo el que se presenta en este informe) deben evaluarse con precaución.

RBSumen de los Costos Económicos de la Deserción Escolar en P, jj

Los principales efectos económicos y sobre las finanzas? gubernamentales de la deserción escolar, según han sido estimador en este estudio, se reseñan en la tabla a continuación.

Resumen de los Principales Efectos Económicos y Fiscales de la Deserción Escolar Estimados para el Año 1990

Categorías

Ingreso adicional del trabajo

Beneficio por disminución en actividad criminal

Aumento en ingresos al Gobierno de Puerto Rico

Fondo General

Fondos Esp. Serv. Públ.

Sistema de Seguridad Soc.

Aumento en gastos en el Depto. de Educación

Cambio neto en transferencias federales al Depto. Educación

La Clase de 1990

Otra forma de contabilizar los costos sociales de la deserción escolar es estimar el valor presente de la pérdida económica. Este enfoque trata a la educación como una inversión en capital humano así ^e se capitaliza el flu^o de ingresos adicionales qu4 obtendría un desertor escolar que dejase de serlo. Ese valor

Asesoría y Consulta, Inc.

RESUMEN EJECUTIVO
Millones de $|Millones de $ $2,754.2 333.3 20.1 157.0 412.3 510.4 334.9 77.4

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R

capitalizado se puede agregar para todos los desertores escolares que pertenecen a la clase de 1990; obteniéndose así un estimado del costo económico de la deserción escolar en que incurre la sociedad, evaluado para ese grupo de personas que debió graduarse en 1990.

En el estudio se estimó que en la clase de 1990 hubo 19,691 desertores escolares. Si ellos hubiesen terminado sus estudios de escuela superior, se esperaría que 13,329 de ellos no realizarían estudios posteriores y que 6,362 ingresasen a hacer estudios universitarios. El valor promedio de la pérdida capitalizada de los ingresos de los desertores escolares, con respecto a los graduados de escuela superior es $70,749, mientras que con respecto a los que tienen una escolaridad de 13 a 14 años es $83,305. Así que la pérdida social, correspondiente a aquellos para los que el diploma de escuela superior sería el grado terminal sería $943 millones, mientras que para el grupo que ingresaría a realizar estudios universitarios sería $530.0 millones". Lo cual resulta en una pérdida económica capitalizada de $1,473 millones, a la deserción escolar en la clase de 1990. Esa pérdida económica conlleva que el gobierno deje de recibir ingresos fiscales, cuyo valor presente se estima en $273 millones. a«..-mC.D13

Asesoría y Consulta, Inc,

Notas

1. J. S. Catterall, On the Social Costs of Dropping Out of School Stanford: Center for Educational Research at Stanford, 1985.

2. Este hallazgo es consistente con la información disponible en los censos de población de 1970 y 1980. En 1970 el 28.9% de los varones y el 25.3% de las hembras eran graduados de escuela superior, mientras que para 1980 esas proporciones habían aumentado a 40.1% en el caso de los varones y a 39.0% en el de las hembraslo que refleja una disminución en la diferencia en tasas dé deserción escolar entre los sexos. (U.S. Dept. of Commerce, Bureau of the Census. Census of Population. Detailed Socio-Economic Cbaracteristics. Puerto Rico. 1970 y 1980.)

3. Este hallazgo también es consistente con la información disponible en los censos de población de 1970 y 1980. En 1970 el 7.1% de los varones y el 5.0% de las hembras tenían un nivel de educación de 4 ó más años de universidad. Para 1980 esas proporciones aumentan a 10.0 en el caso de los varones y 8.9% en el de las hembras. Nuevamente ocurre una disminución en la diferencia entre las proporciones que completan este nivel de educación en los dos sexos. (U.S. Dept. of Commerce, Bureau of the Census. Census of Population. Detailed Socio-Economic Cbaracteristics Puei-fRico, 1970 y 1980.) *

4. Véase, por ejemplo, Rafael A. Meléndez Tosté, "La escuela me aburre; radiografía de un desertor escolar". Interamericana noviembre/diciembre 1992, págs. 18 y 19. '

5. Citado en ibid., pág. 19.

6. Para una taxonomía de esos beneficios, véase a E. Cohn Th Economics of Education. Cambridge, Hass.: Ballinger* Publishin^ Co., 1979, capítulo 3. El lector también puede referirse a T Schultz, Tbe Economic Valué of Education. New York: Columh' * University Press, 1963. *

RESUMEN EJECUTIVO
Asesoria y Consulta, Inc.

7. Véase, por ejemplo, a H. S. Houthakker, "Education and Income". Review of Economics and Statistics, Vol. XLI, febrero de 1959; M* Blaug, "The Empirical Status of Human Capital Theory: A Slightlv Jaundiced Survey". Journal of Economic Literatura, Vol. liv septiembre de 1976, págs. 827 a 855; M. Blaug, "Where Are We Now in the Economics of Education?". Economics of Education Review, Vol. II, verano de 1985, págs. 17 a 28; I. Sobel, "The Human Capital Revolution in Economic Development; Its Current History and Status". Comparativa Education Review, Vol. XXII, No. 2, junio de 1978, págs. 278 a 308; G. Psacharopoulos, "Los réditos de la educación". La Educación: Revista Interamericana de Desarrollo Educativo, Año XXX, No. 98, 1985; R. Cao García y H. Matos Díaz, Educación universitaria y oportunidad económica en Puerto Rico', Madrid: Editorial Betania, 1988.

8. Véase ente otros a G. Becker, Human Capital. New York: National Bureau of Economic Research, 1964; T. W. Schultz, Investment in Human Capital. New York: The Free Press, 1971; J. Mincer, "Human Capital and Earnings" en D. M. Windham, ed., Economic Dimensions of Education. Washington, D.C.: Report of a Committee of the National Academy of Education, 1979, págs. 1 a 31; J. Mincer, "Human Capital and Economic Growth", Economics of Education Review, Vol. III, No. 3, 1984, págs. 195 a 205.

9. E. F. Denison, The Sources of Economic Growth in the United States. New York: Committee for Economic Development, 1962 y E. F. Denison, Why Growth Ratas Differ?. Washington, D.C.: The Brookings Institution, 1967.

10. Véase, por ejemplo, a H. M. Levin, The Costs to the Hation of Inadequate Education. Washington, D.C.: Report to the Select Committee on Equal Educational Opportunity of the Ü.S. Senate; and J. S. Catterall, op. cit.

11. Véase Departamento del Trabajo y Recursos Humanos de Puerto Rico, Serie Histórica del Empleo, Desempleo y Grupo Trabajador en Puerto Rico, 1947-1991. San Juan: septiembre de 1992. Tabla 21.

12. R. G. Spiegleman, "A Benefit/Cost Model to Evalúate Educational programs". Socio-Economic Planning Sciences, Vol. I, 1968, págs. 443 a 460; L. D. Webb, "Savings to Society by Investing in Adult

Asesoría y Consulta, Inc

COSTOS SOCIALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR EN P.R.

Education". Economic and Social Perspectives in Adult Illiteraav 1977, págs. 52 a 73; y J. S. Catterall, 1985, op. cit.

13. Sobre este particular véanse, entre otros, a L. Thurow, Head to Mead, New York: William Morrow and Co., 1992, así como a J Naisbitt y P. Aburdene, Megatrends 2000: Ten New Directions for thé 1990^5, New York: William Morrow and Co., 1990, capítulo 1.

14. La tasa de deserción escolar promedio para una promoción de graduados de escuela superior se estimó a base de la encuesta informada en el capítulo 3 de este informe. Para verificar si la tasa estimada de 35.3% es consistente con la información censal se puede sumar el n\ímero de graduados de escuela superior entre 1986 y 1990, y ajustar la suma por la tasa de deserción estimada. El valor así calculado debe ser aproximadamente igual a la población que tenía entre 20 y 24 años en 1990. A base de la información en la Tabla 1, en este capítulo, 184,932 personas se graduaron de escuela superior entre 1986 y 1990. Si se ajusta ese número por la tasa de deserción de 35.3%, se obtiene un estimado de 285 S3o personas. De acuerdo a la información en la Tabla 2 del capítulo 8, en 1990 hubo 287,227 personas en las edades entre 20 y 24 años Se observa que la diferencia entre ambos valores es apenas 0.49%* lo cual es evidencia a favor de la razonabilidad de la tasa d¿ deserción estimada.

15. Este estimado se basa en el supuesto de que, en promedio las personas en este grupo que ingresen a universidades obtendrían una escolaridad promedio de 13 a 14 años.

RESUMEN EJECUTIVO
Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en Puerto Rico

Estudio realizado para: Proyecto Nexos Sistema Universitario Ana G. Méndez

diciembre de 1992

ASESORIA & CONSULTA. INC. = 0 50X 22~.:4 üPR STATiON SAN JUAN PUERTO RICO 00931 *ElS £091 723-5463(S ANDIC) .809) 755-0071 (R CAOl

Introducción

Este estudio trata acerca de estimar los costos sociales de la deserción escolar en Puerto Rico. Se trata de calcular el monto de esos costos para el año de 1990, el cual se selecciona por ser un año censal.

Estimar los costos sociales de la deserción escolar conlleva identificar cuáles son esos costos, estimar su valor por individuo y agregar para la población de desertores escolares'. Claro que antes de proceder, según lo indicado al comienzo del párrafo, es necesario definir con claridad cuál es la definición que se ha de emplear para "desertor escolar". Por ello, en el capítulo 2 de este informe, se analizan las ejecutorias históricas en el mercado laboral de las personas con diferentes niveles de escolaridad. A base de ese análisis se establece una definición operacional de la deserción escolar, la cual se contrasta con las que se encuentran en la literatura.

Una vez de define operacionalmente, para propósitos del estudio, la deserción escolar, se procede a estimar el número de desertores escolares en Puerto Rico. El problema aquí es que el Departamento de Educación estima "tasas de retención" como el número de estudiantes en un grado dividido entre el número que comenzó estudios para esa clase. Pero la pérdida de estudiantes en las escuelas del Departamento no significa que los no retenidos sean necesariamente desertores escolares. El número de estudiantes en una clase en escuelas públicas puede mermar a causa de la emigración, la transferencia a escuelas privadas y la muerte e

incapacidad de estudiantes. La tasa de retención así calculada también se afecta por la inmigración y la transferencia de estudiantes de la escuela privada a la pública. Por todas esas razones, es necesario ajustar los estimados de deserción escolar del Departamento de Educación, para obtener un indicador más preciso del número de desertores escolares en la población. También es necesario analizar los cambios y tendencia en la tasa de deserción a través del tiempo y entre grupos de edades. El capítulo 3 del informe presenta los trabajos realizados acerca de estos asuntos.

Una vez se obtiene un estimado del número de desertores escolares en la población procede identificar, y calcular, los costos sociales.asociados a esta situación. Identificar los costos sociales asociados a la deserción escolar equivale a establecer los beneficios que la sociedad pierde cuando un estudiante abandona sus estudios^. Al revisar la literatura, se encuentra que uno de los principales efectos que se señala es la relación entre educación, productividad e ingreso^ La literatura es consistente en identificar una relación positiva entre nivel educativo e ingreso". Como consecuencia, a través de la educación las personas aumentan el nivel del Ingreso Nacional, contribuyendo así al desarrollo económico^ Cuando una persona abandona la escuela, la sociedad experimenta una limitación en su capacidad para el crecimiento económico, lo que representa un costo social.

Así entonces, desde una perspectiva estrictamente económica, el problema del costo social de la deserción escolar surge porque las destrezas productivas de la persona lo ubican en Asesoría y Consulta, ¡nc.

una posición de desventaja con respecto a los demás miembros de la sociedad®. Ello hace que la capacidad del desertor escolar para emplearse y generar un ingreso sea desventajosa. Por tal motivo es pertinente evaluar cómo compara la situación laboral de los desertores escolares con la de las personas que no lo son. Tal análisis se presenta en el capítulo 4, y permite expresar en forma cuantitativa una de las desventajas que enfrentan los desertores escolares, así como una de las pérdidas que sufre la sociedad, al no emplear la capacidad productiva de estas personas.

En el capítulo 5 se analiza directamente la relación entre ingreso y escolaridad, con el propósito de calcular la pérdida en ingresos del trabajo que es atribuible a la deserción escolar.

Los valores que se estimen deben ajustarse por los efectos que tendría sobre la oferta laboral un aumento en el nivel de escolaridad en la población.

La relación entre educación e ingreso tiene otras manifestaciones sociales, que también conviene explorar. A mayor sea el ingreso de la persona, mayor será su habilidad para pagar impuestos y, por ende, mayores los ingresos gubernamentales. Otro efecto de un mayor nivel de ingresos es la disminución en la demanda por servicios de bienestar social. Al aumentar el nivel de ingresos de una persona, se reduce su demanda por servicios de beneficencia pública.

En el caso de Puerto Rico es necesario ejercer cautela al estimar ese efecto, pues gran parte de los pagos de asistencia pública se financian a través de transferencias del gobierno federal; por lo que es necesario ajustar por los efectos sobre los pagos de transferencia. El capítulo 6 se dedica a analizar esas consecuencias fiscales de la deserción escolar.

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

En la literatura también se señala que las tasas de criminalidad tienden a disminuir entre las personas con mayor nivel de educación"'; por lo que es de esperar que un aumento en el nivel educativo habrá de generar beneficios sociales por la vía de una reducción en la criminalidad. En el capítulo 7 se analiza la relación entre deserción escolar y criminalidad en Puerto Rico, mientras que en el capítulo 8 se presentan unos estimados de los costos sociales de la criminalidad asociados a la deserción escolar.

Por otra parte, una disminución en la deserción escolar tiene como consecuencia un aumento en el número de graduados de escuela superior, por lo que es de esperar genere un aumento en demanda por educación universitaria*. Es importante evaluar tal efecto pues conlleva un incremento en la demanda por servicios educativos, mayores transferencias del gobierno federal en becas estudiantiles y una modificación adicional en la capacidad de tales personas para generar ingresos. El capítulo 9 del informe se dedica a analizar esa relación entre deserción escolar y demanda por educación universitaria.

También es importante reconocer que la deserción escolar tiende a introducir un elemento diferenciador entre sectores sociales: los más educados y los menos educados. Ello tiende a introducir una dimensión de marginación e inequidad entre sectores sociales, lo cual es contrario a la cohesión y la solidaridad social. Un indicador de esos efectos es las consecuencias que tengas las diferencias en niveles educativos sobre la distribución del ingreso, lo cual se examina en el capítulo 10 de este informe.

Introducción

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

La intención primordial en el estudio es calcular un indicador monetario de lo que la sociedad puertorriqueña pierde a causa de la deserción escolar, así como de los beneficios que recibiría de controlar ese problema. Sin embargo, el control de la deserción escolar también resultaría en beneficios económicos que no se pueden medir en términos monetarios, p>ero que no por ello resultan ser menos importantes. En realidad, algunos de esos beneficios son esenciales para el funcionamiento del sistema económico y la permanencia misma de la sociedad. Por tal razón, se ha decidido dedicar el capítulo 11 del informe a la evaluación de esos "otros beneficios sociales de la educación", que son esenciales para que puedan existir y funcionar adecuadamente economía y sociedad.

Finalmente, el capítulo 12 presenta un resumen de los hallazgos y conclusiones principales de la investigación. Se utiliza también el capítulo para explorar algunas de las implicaciones de esos resultados para la formulación de políticas públicas y se presentan recomendaciones para investigaciones futuras.

Asesoría y Consulta, Inc.

Notas

1. J. S. Catterall, On the Social Costs of Dropping Oití of School. Stanford: Center for Educational Research at Stanford, 1985.

2. Para una taxonomía de esos beneficios, véase a E. Cohn, The Economics of Education Cambridge, Mass.: Ballinger Publishing Co., 1979, capítulo 3. El lector también puede referirse a T. W. Schultz, The Economic Valué ofEducation. New York: Columbia Universitv Press, 1963. ^

3. Véase, por ejemplo, a H.S. Houthakker,"Education and Income". Review ofEconomics and Statistics, Yol. XLI, febrero de 1959; M. Blaug, "The Empirical Status of Human Capital Theory: A Slightly Jaundiced Survey". Joumal ofEconomic Literature, Yol. LIY, septiembre de 1976, págs. 827 a 855; M. Blaug, "Where Are We Now in the Economics of Education?" Economics ofEducation Review, Yol. II, verano de 1985, págs. 17 a 28; I. Sobel,"The Human Capital Revolution in Economic Development: Its Current History and Status". Comparative Education Review, Yol. XXII, No. 2,junio de 1978, págs. 278 a 308; G.Psacharopoulos, "Los réditos de la educación". La Educación: Revista Interamericana de Desarrollo Educativo Año XXX, No. 98, 1985; R. Cao García y H. Matos Díaz, Educación universitaria y oportunidad económica en Puerto Rico. Madrid: Editorial Betania, 1988.

4. Véase ente otros a G. Becker, Human Capital. New York: National Bureau of Economic Research, 1964; T. W. Schultz, Investment in Human Capital. New York: The Free Press 1971; J. Mincer,"Human Capital and Eamings" en D.M. Windham,ed.,EconomicDimensions of Education. Washington, D.C.: Report of a Committee of the National Academy of Education, 1979, págs. 1 a 31; J. Mincer, "Human Capital and Economic Growth",Economics ofEducation Review, Yol. III, No. 3, 1984, págs. 195 a 205.

5. E. F. Denison, The Sources of Economic Growth in the United States. New YorkCommittee for Economic Development, 1962 y E. F. Denison, Why Growth Rates Differ?. Washington, D.C.: The Brookings Institution, 1967.

Introducción
1

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

6. Véase, por ejemplo, a H. M. Levin, The Costs to the Nation of Inadequate Education. Washington, D.C.: Report to the Select Committee on Equal Educational Opportunity of the U.S. Senate; and J. S. Catterall, op. cit.

7. R. G. Spiegleman, "A Benefit/Cost Model to Evalúate Educational Programs". SocioEconomic Planning Sciences, Yol. I, 1968, págs. 443 a 460; L. D. Webb, "Savings to Society by Investing in Adult Education". Economic and Social Perspectives in Adult Illiteracy, 1977, págs. 52 a 73; y J. S. Catterall, 1985, op. cit.

8. Completar un nivel escolar le provee al estudiante la oportunidad de pasar a otro nivel educativo superior. Esto es lo que Mincer llamó la "opción financiera de la educación". (J. Mincer, "On-the-Job Training: Costs, Retums and Some Implications". Journal of Political Economy (Supplement), Yol. 70, octubre de 1962, págs. 50 a 79.

Asesoría y Consulta, Inc.

DESERCIÓN Escolar: Una Definición Operacional Planteamiento del Problema

Para estimar los costos sociales de la deserción escolar en Puerto Rico es necesario comenzar definiendo operacionalmente lo que es un desertor escolar. La literatura usualmente utiliza como criterio de deserción escolar a no completar la graduación de escuela superior'.

Tal criterio se basa mayormente en consideraciones de administración pedagógica y política pública, que pueden o no ser adecuadas para los propósitos de este estudio.

La graduación de escuela superior representa que la persona adquirió una serie de destrezas y conocimientos que la sociedad considera tan deseables, que el Estado garantiza la educación universal gratuita hasta ese nivel. Además,la graduación de escuela superior coincide conque la persona llegue a una edad en la que se le reconocen muchos de los deberes y responsabilidades de la vida adulta^. Todo esto lleva a que la graduación de escuela superior marque un hito de importancia en el desarrollo social del individuo. Sin embargo, estas consideraciones, sin lugar a dudas importantes, no son suficientes para tomar a la graduación de escuela superior como criterio incuestionable para definir la deserción escolar, dentro del contexto áe este estudio.

pesde una perspectiva estrictamente económica, el problema del costo social de la deserción escolar surge porque las destrezas de la persona lo ubican en una posición de d sventnja con respecto a la productividad promedio de la población\ Ello hace que la

Deserción Escolar: Una Definición Operacional capacidad del desertor para emplearse y generar un ingreso sea una desventajosa. Ahora bien, ¿existe algún criterio específico de demarcación para establecer el nivel del proceso educativo donde ocurre esa desventaja?. Esta pregunta adquiere relevancia cuando se reconoce que la escolaridad mediana de la fuerza laboral en Puerto Rico ha estado aumentando a través del tiempo y que las personas pueden desertar en diferentes etapas del proceso educativo.

El incremento en la escolaridad mediana de la fuerza laboral puede significar que lo que fue un nivel satisfactorio de escolaridad en un momento dado, deje de serlo en otro momento. Similarmente, es posible que la posición de desventaja de una persona que desertó de la escuela en lOmo. grado sea diferente a la de otra persona que desertara en, digamos, 7mo. grado. Así que es posible que la definición operacional de deserción escolar puede variar a través del tiempo, o que en un mismo momento de tiempo sea pertinente establecer diferentes categorías de desertores escolares, en vez de agruparlos a todos bajo un mismo y único criterio. Por eso es importante considerar analíticamente estos dos aspectos para establecer una defmición operacional de deserción escolar, lo que se hace a continuación.

Escolaridad y Oportunidades Laborales

Según se aprecia en el Diagrama 1, la escolaridad mediana de la fuerza laboral empleada ha estado aumentando a través del tiempo en Puerto Rico. Entre 1963 y 1975, la escolaridad mediana registra una rápida tasa de crecimiento, al aumentar de 7.1 años en 1963 a 12 O en

Asesoría y Consulta, Inc.

10

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.r

1975. A partir de esa escolaridad mediana . DE LA FUERZA LABORAL EMPLEADA fecha, disminuye la . pendiente, aunque sigue " —^ ■ 18siendo positiva; de suerte e que para 1991 la * escolaridad mediaoa de la ..l. ..1,. ..L...uXXIil. fuerza obrera empleada es

12.8 años, lo que implica Diagrama 1 que al presente (y desde 1976) la mayoria de la fuerza laboral empleada cuena con alguna educación postsecundaria. u preguna es si ese cambio en condiciones deterioró o no la posición relativa de los graduados de escuela superior en el mercado laboral.

En el Diagrama 2 se compara la tasa de desempleo de los graduados de escuela superior^ con la de la población en general, para el período de 1963 a 1991. Se observa que ambas tasas se mueven en forma comcidente, con pequeñas diferencias entre sí. Sin embargo, hasta 1981 la tasa de desempleo de los graduados de escuela superior es menor a la del promedio de la población, pero la situación cambia a partir de 1982. Durante los últimos diez años de la serie, la tasa de desempleo de los graduados de escuela superior excede a la de la población en general, aunque la diferencia relativa es pequeña y oscilante. Asesoría y Consulta, ¡nc.

' ' ' ' ' ' I I ' I I I I I , ■ , .
1«3 1915 1967 1969 1971 1973 1973 1977 1979
1983 1987 1989 1991
'
,
19B1 19B3
'EscoUrlBtd NtBluia
Futnct; Dtpto. del Trabajo v Rtc. Hgm.

Deserción Escolar: Una DEnNicióN Operacional

Diagrama 2

La ultima aseveración en el párrafo antenor se puede apreciar

DESEMPLEO Y ESCOLARIDAD

PROPORCION ENTRE LAS TASAS DE DESEMPLEO

mejor en el Diagrama 3. Este representa la proporción de la tasa de desempleo entre los graduados de escuela superior con respecto a t»v. IfCS

TOTAL Y ESCOLARIDAD 12

la de la población en general. Se "«T

rrmrcioa: it/total observa que hasta 1981, la

Diagrama 3

Asesoría y Consulta, Inc.

H4T l«(l H7l IITI 117S wW M7f Htl
un UM

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

proporción es menor a 100 por ciento, ya que la tasa de desempleo para los graduados de escuela superior fue menor a la del promedio en la población. La proporción alcanza el valor de 100 por ciento en 1982, cuando ambas tasas se igualan; excediendo 100 por ciento a partir de 1983, cuando la tasa de desempleo entre los graduados de escuela superior supera a la del promedio para la población. Se observa además que entre 1983 y 1991 el valor de la proporción tiende a oscilar alrededor de 105.

El siguiente paso en el análisis es comparar la tasa de desempleo de los graduados de escuela superior con la tasa correspondiente a las personas en la fuerza obrera con de 10 a 11 años de escolaridad. Esa comparación se ilustra en el Diagrama 4.

Durante el período considerado, la tasa de desempleo de las personas con de 10 a 11 años de escolaridad es consistentemente mayor a

la de los graduados de

de que ambas tasas tienden a fluctuar en forma s

coincidente. Entre 1963 y

1969 la distancia vertical entre ambas series tiende a ^^^g^ama 4

48
38
28
8
M DESERCION
Tua it B«un»Uo tS 1>(9 l»t7 H7l W73 1»7S U77 1»7» M81 17B3 198S M87 Ijn 1»»1
escuela superior, además
ESCOLAR Y DESEMPLEO
Fu^e:
PtMiirUo
12
«•••OTN^ltO Isc
Tfibpjo v Rftc* Kum.
0«pte. 4%\ '
8sc
-
18*2
Asesoría y Consulta, Inc.

Deserctón Escolar: Una Definición Operacional

ser más o menos estable, situación que cambia entre 1970 y 1975, cuando la distancia entre ambas tiende a aumentar progresivamente todos los años^ A partir de 1976 ocurre otro cambio en el patrón de comportamiento de la tasa de desempleo de las personas con de 10 a 11 años de escolaridad. Entre 1976 y 1991, la distancia vertical entre ambas series tiende a mantenerse estable, aunque registra fluctuaciones alrededor de la nueva magnitud alcanzada.

La información en la gráfica significa que las personas con de 10 a 11 años de escolaridad registran una desventaja en el mercado laboral, con respecto a los graduados de escuela superior, durante todo el período. Esa desventaja aumenta entre 1970 y 1975 tendiendo a estabilizarse a partir de 1976, hasta el presente.

Resulta pertinente evaluar ahora si el crecimiento en la escolaridad promedio de la fuerza laboral afectó a las personas con educación postsecundaria. Esta evaluación se puede hacer con la ayuda del Diagrama 5, donde se representan las tasas de desempleo (a) promedio para la

is población, (b) para i» graduados de escuela superior,(c) para personas ma m, m7 xn, T6t«l

Ootnolto EftC ll*ll Otitneito C»c U OtMmctto £»e con de 10 a 11 años de I fu«nt«! D«cto. a«l TfUtio <t «te. Huí».

Diagrama 5 Asesoría y Consulta, Jnc.

14
DESERCION ESCOLAR Y DESEMPLEO
*1-

escolaridad y (d) para personas con 13 ó más años de escolaridad.

Se encuentra que la tasa de desempleo para las personas con educación postsecundaria (13 ó más años de escolaridad)se mantiene por debajo de la tasa promedio de desempleo durante todo el período de 1963 a 1991. La tasa de

DESERCION

desempleo para las

personas con educación a

postsecundaria fluctúa

cíclicamente con el -w -15 desempleo promedio, 'I

Sta

I -M-Oif. l«-ll V T«ttl Dif. 12 V lot»! Oif. u Totíl I tendiendo a mantenerse

estable la distancia vertical Diagrama 6 entre las dos tasas. Durante todo el período, aunque la diferencia entre ambas tasas registra variaciones anuales, la tasa de desempleo para las personas con educación postsecundaria tiende a mantener una distancia media de 8.5 puntos porcentuales por debajo del desempleo promedio para la población. Esto se puede apreciar mejor en el Diagrama 6, donde se presentan las diferencias (en puntos porcentuales) entre cada una de las tres tasas consideradas y la tasa promedio para la población. Este resultado tiende a indicar que el incremento en la escolaridad jnediana de la fuerza laboral no ha tendido a modificar en forma significante las ventajas de las

Asesoría y Consulta, Jnc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. 15
19
10
0
fuMos 1^orc«ntu&lts
ESCOLAR Y DESEMPLEO
US5 «67 «6» «71 «73 «75 «77 «77 «81 «83 «85 «87 «8» «71
Futntc: Otpto. Trabajo u Rae. Hum.

Deserción Escolar: Una Definición Operacional personas con educación postsecundaria en el mercado laboral.

En resumen, se observa que, a partir de 1976, las desventajas de las personas con de 10 a 11 años de escolaridad se mantienen constantes en el mercado laboral. En términos generales este grupo laboral registra tasas de desempleo que, en promedio, exceden en 9.4 puntos porcentuales las de la población en general. Las personas con educación postsecundaria tienden a mostrar una ventaja estable en el mercado laboral, de suerte que su tasa de desempleo tiende fluctuar manteniendo una distancia promedio de 8.5 porcentuales por debajo de la tasa para la V población. Así que, durante los pasados 15 años, no parece que hayan ocurrido cambios en las ventajas y desventajas laborales relativas de las personas con niveles de escolaridad mayores y

: menores a la graduación en escuela superior, a pesar del aumento registrado en la escolaridad mediana de la fuerza laboral. Este resultado es consistente con la adopciór. del criterio de graduación de escuela superior como delimitador para definir deserción escolar

Debe reconocerse que la tasa de desempleo de los graduados de escuela superior sufrió una cambio en su relación con la tasa promedio durante el período. Como se indicó previamente, hasta 1981 la tasa de desempleo de los graduados de escuela superior fue inferior al promedio para la población; pero la situación cambia a partir de 1982, resultando aue 1

' consistentemente excede al promedio de la población desde esa fecha Sin embarg i

■ diferencia entre ambas tasas se mantiene pequeña, tendiendo a fluctuar la variación en alreded de solo 0.9 puntos porcentuales; así que esta variación no parece ser razón suficiente para

Asesoría y Consulta, Inc.

16

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

descartar a la graduación de escuela superior como criterio para definir operacionalmente a la deserción escolar. Variación en Escolaridad y Oportunidades Laborales

Además de los efectos que pudiese tener el cambio registrado, a través del tiempo, en la escolaridad mediana, sobre la definición de deserción escolar; también se planteó la necesidad de evaluar los efectos que pudieran tener diferentes niveles de escolaridad sobre las oportunidades laborales de las personas. El asunto planteado es la validez de agrupar bajo una misma categoría de desertor escolar, a personas con diferentes niveles de escolaridad; esto es, si se puede o no considerar como similares a personas que no se hayan graduado de escuela superior, pero posean diferentes niveles de educación®.

Para mantener la consistencia analítica con lo desarrollado en el apartado anterior, lo que procede es comparar si las oportunidades laborales de las personas no graduadas de escuela superior registran diferencias sustantivas. Con este propósito, en la Tabla 1 y Diagrama 7 se presentan las proporciones entre las tasas de desempleo para ciertos grupos de escolaridad y la promedio para la población. Las proporcionales se presentan para años decenales, excepto en el caso de 1960 que, por no estar disponible el dato, se utiliza el año de 1963, que es el más próximo con información disponible. Los niveles educativos considerados son los de 7 a9 años de escolaridad y de 10 a 11 años, porque son los grupos de grados que la literatura señala como Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar: Una Definición Operacional aquellos donde ocurre la mayor concentración de deserción escolar"'.

Tabla 1

Tasas de Desempleo por Escolaridad

Proporción con Respecto a la Tasa de Desempleo de la Población

Escolaridad 7 a 9

Escolaridad 10 a 11

1990

1.65

1.64

Fuente: Depto. del Trabajo y Recursos Humanos de Puerto Rico, Serie Histórica del Empleo. Desempleo y Grupo Trabajador en Puerto Rico 1947-1991.

Se observa que en 1963 ambos grupos registran una proporción de 1.30, lo que significa

^ que la tasa de desempleo en ambos casos superó en 30 por ciento la del promedio para la

^ población. Por consiguiente, la relación de desventaja con respecto al promedio de la población es la misma para ambos niveles de escolaridad. Nuevamente, las diferencias en las tasas de desempleo entre los dos grupos es insignificante para el año 19970.

En 1980 la desventaja laboral de las personas con de 7 a 9 años de escolaridad parece

^ ser menor que la de los individuos que tienen de 10 a 11 años. La tasa de desempleo del grupo de menor escolaridad sobrepasa en 40 por ciento al promedio para la población mientras qu la tasa para las personas con de 10 a 11 años de escolaridad sobrepasa al promedio en 55 por

Inc.

Asesoría
y Consulta,

ciento También se observa que el valor numérico de las proporciones aumenta sustancialmente entre 1970 y 1980.

Debe recordarse que durante ese período de tiempo, particularmente entre 1970 y 1975, se registra un cambio.

j PROPORCION laboral de los desertores ^ escolares (véase Diagrama i.so - i 3b i.sb

4)> psro que después se

, estabiliza la diferencia a """ jmM

partir de 1976. Los datos

referentes a 1980 en la

tabla podrían corresponder Diagrama 7 a un período de ajuste, donde no son permanentes las diferencias entre los dos grupos con distintos niveles de escolaridad. De hecho, al observar los valores para 1990, se encuentra que no existe diferencia estadística entre la desventaja laboral de las personas con de 7 a 9 años de escolaridad y la de las personas con de 10 a 11 años.

Un análisis estadístico de ji-cuadrado para evaluar si existen diferencias estadísticas entre las proporciones de los grupos para los cuatro años considerados, indica que no existe diferencias con significación estadística®. Así, se concluye que las oportunidades o desventajas aumentando la desventaja proporcic

Asesoría y Consulta, ¡nc.

COSTOS Sociales de la Deserción Escolar en P.R.'
TASAS DE DESEMPLEO POR ESCOLARIDAD PROPORCION CON RESPECTO A LA TASA TOTAL 1.(3 1.(3 1.33 1.34 I Ese. 1 • « Ese. IB s 11 I
L— 1 Futnti; Dfpto. dti Trabije dt P.R.

Deserción Escolar: Una Definición Operacional laborales para las personas con de 7 a 9 años de escolaridad no son significantemente diferentes a las que experimentan las personas con de 10 a 11 años de escolaridad. Este resultado también es consistente con utilizar al criterio de graduación de escuela superior como base para definir operacionalmente la deserción escolar.

Resumen y Conclusiones

En esta sección del informe se examinan las ventajas y desventajas que tienen en el

• mercado laboral las personas con diversos niveles educacionales. El propósito del análisis es determinar una definición operacional para la deserción escolar, ya que para estimar los costos sociales de la deserción escolar en Puerto Rico es necesario comenzar definiendo operacionalmente lo que es un desertor escolar.

La literatura usualmente utiliza como criterio de deserción escolar a no completar la

■' graduación de escuela superior. Desde una perspectiva estrictamente económica, el problema del costo social de la deserción escolar surge porque las destrezas de la persona lo ubican en una posición de desventaja con respecto a laproductividad promedio de lapoblación. Ello hace a la capacidad del desertor para emplearse y generar un ingreso sea una desventajosa.

Puestoque laescolaridad medianade lafuerza laboral haestado aumentandoatravés del tiempo, resulta pertinente preguntar si no ha cambiado el nivel de escolaridad que establece el umbral para la desventaja en el mercado laboral. Además, es posible que los niveles de Asesoría y Consulta, Inc.

20

desventaja laboral varíen sustancialmente entre personas con diversos niveles de escolaridad, en cuyo caso sería necesario establecer varias categorías de desertores, en vez de agregarlos en una sola.

Para evaluar esas posibilidades, se examinaron las tasas de desempleo por nivel de escolaridad para el período de 1963 a 1991, cubriéndose así 29 años en el análisis. Se encontró que, a partir de 1976, las desventajas de las personas con de 10 a 11 años de escolaridad se mantienen constantes en el mercado laboral. En términos generales, este grupo laboral registra de desempleo que, en promedio, exceden en 9.4 puntos porcentuales las de la población tasas en general. Las personas con educación postsecundaria tienden a mostrar una ventaja estable en el mercado laboral, de suerte que su tasa de desempleo tiende fluctuar manteniendo una distancia promedio de 8.5 porcentuales por debajo de la tasa para la población. Así que, durante los pasados 15 años, no parece que hayan ocurrido cambios en las ventajas y desventajas laborales relativas de las personas con niveles de escolaridad mayores y menores a la graduación en escuela superior, a pesar del aumento registrado en la escolaridad mediana de la fuerza laboral.

Debe reconocerse que la tasa de desempleo de los graduados de escuela superior sufrió cambio en su relación con la tasa promedio durante el período. Como se indicó una previamente, hasta 1981 la tasa de desempleo de los graduados de escuela superior fue inferior al promedio para la población; pero la situación cambia a partir de 1982, resultando que la tasa

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Deserción Escolar: Una Definición Operacional' consistentemente excede al promedio de la población desde esa fecha. Sin embargo, la diferencia entre ambas tasas se mantiene pequeña, tendiendo a fluctuar la variación en alrededor de solo 0.9 puntos porcentuales; así que esta variación no parece ser razón suficiente para descartar a la graduación de escuela superior como criterio para definir operacionalmente a la deserción escolar.

El siguiente asunto que se trató en el análisis fue comparar si las oportunidades laborales de las personas no graduadas de escuela superior, pero con niveles diversos de escolaridad registran diferencias sustantivas. El análisis estadístico concluyó que las oportunidades o desventajas laborales para las personas con de 7a 9 años de escolaridad no son significantemente diferentes a las que experimentan las personas con de 10 a 11 años de escolaridad.

Resulta entonces que el análisis, efectuado én el capítulo, concluye que la información estadística evaluada es consistente con utilizar al criterio de graduación de escuela superior como base para definir operacionalmente la deserción escolar. Por esta razón se adopta ese criterio según es lo tradicional en la literatura.

DEF-OPER.DES

22
Asesoría y Consulta, Inc.

1 Véase, por ejemplo, Awilda Aponte Roque, La deserción escolar en el sistema educativo de p'iiprto Rir^i ^ 1971. Junta de Planificación de Puerto Rico, Negociado de Planificación Social, San Juan, 1971. Comisión de Reforma Educativa de Puerto Rico, Informe final. San Juan 1977. James S. Catterall, On the Social Costs of Dropping Qut of School. Center for Educational Research at Stanford, California, 1985. Comisión Conjunta para la Reforma Educativa, Tnfnrme final. San Juan, 1990.

2 La graduación de escuela superior tiende a coincidir conque la persona esté en una edad alrededor de los 16 a 18 años. Para esas edades, aunque no se reconoce la mayoría de edad hasta los 21 años, a la persona se le reconoce el derecho a conducir vehículos de motor, votar en las elecciones, ingresar a las fuerzas armadas y responsabilidad criminal por varios tipos de actos entre otros. Así, aunque no es hasta los 21 años de edad que a la persona se le reconocen todos'los derechos y deberes de un ciudadano adulto, entre los 16 y 18 años va adquiriendo muchos de tales derechos y responsabilidades de la adultez.

3 Véase, por ejemplo, a H. M. Levin, "The Costs to the Nation of Inadequate Education", Report to' the Select Committee on Equal Educational Opportunity of the U.S. Senate, 1972; y a J. S. Catterall, QP- ch-

4 Los graduados de escuela superior son las personas con escolaridad de 12 años, excluyendo a aquellos que tengas estudios postsecundarios.

5 Entre 1970 y 1975 la escolaridad mediana de la fuerza laboral empleada aumenta de 9.6 a 12 O años. Así que 1975 es el año que también marca la fecha cuando la mayor parte de la fuerza laboral empleada se ha graduado de escuela superior.

6 Véase el apartado acerca de "Planteamiento del problema" en esta sección del informe.

7 Al respecto refiérase a A. Aponte, op. cit.; Germán Palau, LfisJ

i deserción escolar en el sistemz ;rminantes empíricos de la desiarción

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. Notas

Deserción Escolar: Una Definición Operacional

escuelas públicas de Puerto Rico, por niveles. Tesis de M.A. en Economía, Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras, 1986; Centro de Investigaciones Académicas de la Universidad del Sagrado Corazón, Estudio sobre niños v jóvenes que abandi Puerto Rico. San Juan, 1988.

8. El valor calculado para el estadístico ji-cuadrado es 0.0026, lo que no permite rechazar la hipótesis nula de que no existen diferencias estadísticas entre las proporciones para los dos grupos.

Asesoría y Consulta, Inc.

Estimación del Número de Desertores Escolares en Puerto Rico

Introducción

Como se ha indicado previamente, estimar los costos sociales de la deserción escolar en Puerto Rico requiere: establecer operacionalmente qué es un desertor escolar, estimar el número de desertores escolares en la isla y evaluar los costos, o beneficios que deja de percibir la sociedad como resultado de la deserción escolar. En el capítulo anterior se examinaron las condiciones que enfrentan en el mercado laboral, las personas con diferentes niveles de colaridad El análisis estadístico, efectuado en el capítulo, concluyó que las oportumdades y desventajas laborales para las personas con de 7 a 9 años de escolaridad no son significativamente diferentes a las que experimentan las personas con de 10 a 11 años de scolaridad También se estableció que las condiciones que enfrentan ambos grupos son stadísticamente diferentes a las que enfrentan las personas que tienen 12 años de escolaridad, to es los graduados de escuela superior. Tal resultado es consistente con el criterio de utilizar raduación de escuela superior como base para definir operacionalmente la deserción escolar, la 5^^

¿ctp también es el criterio que tradicionalmente se utiliza en la literatura para definir Como esie uu d serción escolarS se decidió emplearlo también para esta investigación.

Una vez establecida la definición operacional a emplear para la deserción escolar, este trata acerca de estimar el número de desertores escolares en Puerto Rico. Con ese

propósito, se comienza por analizar los problemas envueltos para medir la población de desertores escolares, después se propone y discute la metodología a utilizar en el estudio para efectuar la estimación requerida. Finalmente, el capítulo informa y evalúa el valor estimado obtenido para la población de desertores escolares.

Problemas de Medición

Puesto que se establece a la graduación de 12mo. grado como criterio para definir la deserción escolar, se podría considerar que la deserción escolar se puede medir como la diferencia entre el número de niños que ingresa a primer grado en un año dado y el número de ellos que se gradúa doce años más tarde. A base de tal procedimiento, la deserción escolar acumulada para un año dado se estimaría a base de las estadísticas escolares. Por ejemplo el Departamento de Educación informa que en el curso escolar 1981-82 se matricularon 65,438 estudiantes en primer grado y proyecta que en 1992-93, doce años después, habrán 32,200 estudiantes matriculados en 12mo. grado^. Eso significa una tasa de deserción de 50.8%

Sin embargo, tal estimado debe tomarse con precaución, puesto que no toma en cuenta los siguientes factores:

1. Traslados de estudiantes entre los sistemas público y privado.

2. Estudiantes que inician sus estudios en Puerto Rico y emigran fuera de la isla así como los estudiantes que inician sus estudios fuera de la isla e inmigran durante

Asesoría y Consulta, Inc.

26
Estimactón del Número de Desertores Escolares en P.R.

Costos Sociales de la Deseroón Escolar en P.R. sus años escolares.

3. Aquellos estudiantes que no siguen un curso normal en sus estudios, pero que se gradúan de escuela superior en un número de años diferente a doce.

4. Los estudiantes que mueren o se incapacitan durante sus años escolares.

5. El procedimiento descrito en el párrafo anterior supone que la tasa de deserción escolar es una variable de tipo flujo para una promoción escolar, pero la variable en realidad es una de acumulación, pues los nuevos desertores escolares se agregan a los que ingresaron en esa categoría en años anteriores. En todo caso, la medida sería una aproximación aceptable si la tasa de deserción escolar fuera constante a través del tiempo, pero la información en el capítulo anterior tiende a indicar que ha disminuido con los años, pues la escolaridad mediana de la población ha estado aumentando.

Ajustar los datos del Departamento de Educación resulta imposible, ya que:

1, La información estadística disponible para las escuelas privadas es de muy pobre calidad, puesto que no todas ellas informan con precisión los datos referentes a su matrícula estudiantil.

2. Los datos referentes a movimientos migratorios no son de calidad consistente a través del tiempo, y no informan a acerca de la historia escolar de los migrantes menores de edad.

Asesoría y Consulta, Inc.

3. No existe información estadística confiable y actualizada acerca de estudiantes que completan sus estudios de escuela superior en un período de tiempo diferente a doce años.

4. Aunque se puede obtener información de defunciones por edades,no se mantienen estadísticas disponibles acerca del progreso escolar de menores que faUecen. Tampoco se ha podido identificar un censo de personas incapacitadas por edad y niveles de escolaridad.

Además, aún cuando se pudiese ajustar la información estadística del Departamento de Educación para compensar por los cuatro factores antes señalados, la estimación referente a un

• año no se puede generalizar para la población. En el capítulo anterior se vio que la escolaridad mediana de la fuerza laboral en Puerto Rico ha estado aumentando a través del tiempo'. Esto solo puede ocurrir si la tasa de deserción escolar ha estado disminuyendo con el transcurso de los años. Así que la tasa de deserción escolar para el agregado de la población debe ser mayor a la que ocurra en un año reciente.

Gran parte de los problemas de medición podrían resolverse si se recurre a información censal. Así vemos,en el Diagrama 1, que entre 1960 y 1980 en Puerto se registraron aumentos sustanciales en la escolaridad mediana y en la proporción de personas de 25 años o más de edad graduados de escuela superiorí. Sin embargo, esta fuente de información no está disponible al momento de efectuar esta investigación, ya que aún no se ha procesado la información

Asesoría y Consulta, he.

28 ESTTMAaÓN DEL NÚMERO DE DESERTORES ESCXJIARES EN P.R.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

«icioeconómica del censo de 1990

GRADUADOS DE ESCUELA SUPERIOR Y ESCOLARIDAD MEDIANA para Puerto Rico. Por este motivo, medios altemos para estimar el ^año y distribución de ia población de desertores escolares en la isla. es necesario buscar

Diagrama 1

Una Metodología de Estimación

Toda vez que aún no está disponible la información socioeconómica del censo poblacional rtnn cA Hetcidió recurrir a información basada en encuestas. La fuente de datos a utilizar de 199U, se

la encuesta realizada para el estudio de Horacio Matos, et. al.. Educación y mercado laboral Puerto Rico^' La encuesta se realizó por el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos d Puerto Rico, en colaboración con la Universidad de Puerto Rico. Para la encuesta se trevistaron familias en aproximadamente 8,000 viviendas, seleccionadas aleatoriamente, * .,n mes de 1992. Dada la cobertura de la encuesta, sus resultados se pueden generalizar durante un probabilísücamente para la población de Puerto Rico.

Para estimar el número de desertores escolares en Puerto Rico, se utiliza la definición racional establecida en el capítulo anterior: un desertor escolar es una persona adulta que no Asesoría y Consulta, Inc.

I CraAiitoa lsc« tuy.
I C«rk»Oi ét NMtcItfW IHI. 1979

completa sus estudios de escuela superior, esto es, que su escolaridad es menor a 12 años. Para no incluir como desertores escolares a personas con rezago en sus estudios, se excluye de la definición de deserción escolar a las personas que estén matriculadas en cualquier institución educativa. Así, por ejemplo, un joven de 20 años de edad, que haya completado el lOmo grado, pero que esté asistiendo a una escuela u otra institución educativa, no se considera desertor escolar. Tampoco se consideran desertores escolares a los menores que vivan como dependientes de un jefe de familia, aunque no asistan a la escuela. Esto se hace para evitar incluir como desertor escolar a aquellos menores que interrumpen temporalmente sus estudios

A base de los criterios descritos en el párrafo anterior, se utiliza la información en la encuesta para estimar la proporción de desertores varones y hembras en la muestra. La proporción estimada de varones que sean desertores escolares, se aplica al número de varones mayores de 15 años en la población®, de acuerdo a la información censal para 1990. Este procedimiento permite calcular un estimado del número de varones en la población que son desertores escolares. Para estimar el número de personas del sexo femenino en la población que son desertores escolares, se utiliza el mismo procedimiento. La tasa estimada de desertores escolares en la población se calcula sumando los números estimados de desertores escolares de ambos sexos y dividiendo el resultado entre la población total en edades de 15 años o más

EsnMAaóN DEL número de Desertores Escolares en P.R.
y Consulta, Inc.
Asesoría

Un Estimado delNúmero deDesertoresEscolaresenlaPotíaaón

Utilizando los criterios indicados en el apartado antenor, se estima que la tasa de deserción escolar de varones es 46.2%. Puesto que, de acuerdo a la información censal, el número total de varones con 15 ó tasas estimadas de desercíon escolar , ^ 1 U1 PUERTO RKX):1092 másaflosdeedadenlapoblaaón es 1,200 mil,se estima que el total ^ .. « »<

respecto a las personas del sexo

femenino, a base de la Diagrama 2

información muestral se calcula que su tasa de deserción escolar es 55.2%. Toda vez que la información censalindica 1,364 mil personas delsexo femenino con 15ó másañosdeedad,se gstima que 753mil personas del sexofemenino son desertoresescolares. Latasa de deserción resultante parala población total es51.0%. Porsuparte,latasadedeserción escolarpromedio en la clase graduanda de 1990se calcula en 35.3%.

Seobserva queesteresultado significa que,nuevamente,aumentóla proporción de gra duados de escuela superior en la población. Como se indicó antesen este capítulo,tal fenójoeno sólo puede ocurrir si la tasa de deserción escolar ha estado disminuyendo a través dd

Para verificar esa hipótesis, se decide examinar la tasa de deserdón escolar por sexo tiempo- *

Asesoríay ConsuJta,Lja

CostosSocialesDELA DeserciónEscolarenP.R. ffor Ctaato
gi4K -

Estimactón del número de Desertores Escolares en P.R. y grupos de edad. De ser cierta la hipótesis, se espera que la tasa de deserción escolar aumente mientras mayor sea la edad del grupo.

El Diagrama 3 informa las tasas de deserción escolar por sexo y grupos de edades para las personas mayores de 25 años en la muestra. Se encuentra que, según lo esperado, las tasas de deserción escolar tienden a ser mayores para los grupos de mayor edad. Otro hallazgo interesante es que la diferencia entre sexos en las tasas de deserción escolar disminuye a medida que se reduce *'-« »••»« »s-»» la edad de los grupos, llegando a desaparecer la diferencia para el Diagrama 3 grupo en las edades entre 25 y 29

TASAS ESTIMADAS DE DESERCION ESCOLAR POR GRUPOS DE EDAD Y SEXO

En el Diagrama 4 se presenta la distribución por sexos y grupos de edad de 1 proporciones de personas con educación postsecundaria. Nuevamente se encuentra que las personas másjóvenes tienden a estar mejor educadas que las mayores. Además la desv J^ educacional de las personas del sexo femenino, no solo disminuye en los erunnc e^upos ae menor edad, sino que para las edades entre 25 y 34 años la proporción de personas del r femenino con Asesoría y Consulta, Inc.

**-•» "-S* «S-» «»-*» T»*

educación postsecundaria es mayor por cíei que la correspondiente al sexo masculino». Los patrones identificados en estos dos ^' diagramas indican que a través del ,^,4 tiempo han estado ocurriendo cambios de significación en la L__ distribución de la educación entre los sexos.

Rezago Escolary Desertores Escolares: Una Disgresión Parecen existir dos fenómenos en la población que están relacionados con la deserción escolar aunquepuedenconsiderarsediferentesaella. Unoeselrezagoescolar. Estacategoría comprendeaestudiantes, matriculadoseninstitucioneseducativas, quenoregistranunprogreso académico normal; esto es, queen cadaañoacadémico noincrementan su nivel deescolaridad también en un año. El problema con estas personas es que, a pesar de no ser desertores escolares bajoladefiniciónoperacionalqueseempleaenesteestudio, parecenregistrarunaalta probabilidadadesertar delaescuela'.

Asesoría y Consulta, Inc.

Sociales de la Deseruón Escolar en P.R.
POR CíEN 13-» IB-M TO CON EDUCAOON POST-SEGUNDARIA POR GRUPOS DE EDAD Y SEXO 13-» 4»-44 «S-» SU-i* IS-M ■Muuilliis »«iw«Uo »-«* T*.
Costos

Por Otra parte, al examinar la mformación estadística, se observa que la proporción de personas que no ha completado 12 años de escuela superior es mayor en el grupo de edades de 17 a 24 años, que en el de 25 a 29 años. Este fenómeno puede tener dos causas:(1)un aumento en la deserción escolar durante los últimos años, o (2) que existan sectores poblacionales que abandonen temporalmente sus estudios escolares, pero que al cabo de algún tiempo completan el cuarto año de escuela superior.

PROPORCION DE PERSONAS CON ESCOLARIDAD MENOR A 12mo.

Diagrama 4

La hipótesis de un aumento reciente en la tasa de deserción escolar es inconsistente cor el resto de la información estadística analizada en este estudio. Se ha visto que, entre 1963 j 1991, ha estado aumentando la escolaridad mediana de las personas en la fuerza laboral del país.

y Consulta, Inc.

ESTIMAaÓN DEl, NÚMERO DE DESERTORES ESCOLARES EN P.R.
POR EDAD Y SEXO pan CIENTO ni&cuUno 17-M 21-14 23-21 90-34 95-31 40-44 43-41 30-34 33-31 «0-«4 C3-(l n*
GRADO
Asesoría

También se observó que la escolaridad mediana de la población aumentó entre 1960 y 1980, de acuerdo a la información censal. Más aún, las tasas de deserción escolar aumentan a medida que se pasa a grupos poblacionales de mayor edad. Toda esta información es consistente con una tendencia secular a la disminución en la tasa de deserción escolar a través del tiempo, por lo que ha de descartarse la hipótesis de un aumento en la tasa de deserción escolar.

El argumento anterior lleva a la consideración de la otra hipótesis: existen personas que abandonan temporalmente sus estudios escolares, para después completar su cuarto año de escuela superior. A estos individuos se les denomina aquí desertores temporales. Debe señalarse que estas personas no necesariamente completan su escolaridad de 12 años a través del mecanismo formal de la escuela tradicional, sino que pueden completarla por otros medios, como los programas de la Administración del Derecho al Trabajo y del Cuerpo de Voluntarios.

La existencia de esta categoría de desertores temporales no solo es consistente con el patrón de la evidencia empírica, sino que también con los hallazgos de otras investigaciones. Según un estudio que realizó el Departamento de Educación de Puerto Rico en 1988, ocho de cada diez desertores escolares indicaron que deseaban volver a la escuela'", indicando una propensión a no mantenerse permanentemente en su condición de desertores escolares.

A pesar de que escapa del tema de este estudio, parece pertinente indicar que esta situación plantea interrogantes, que convendría analizar en otras investigaciones, para el diseño de políticas públicas. El primer asunto es que, para la existencia de la posibilidad de que los Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserctón Escolar en P.R.

Estimactón del número de Desertores Escolares en P.R.

desertores temporales no se conviertan en permanentes, es necesario que existan alternativas educativas para que completen la escuela superior. Es evidente que tales alternativas deben ser diferentes a la escuela tradicional, puesto que:(1) ya ella falló y (2)las condiciones personales cambian con la edad, por lo cual un ambiente adecuado para un individuo de 14 años no lo es para uno de 20 años. Sería objeto de análisis determinar si alternativas como las que ofrecen la Administración del Derecho al Trabajo y del Cuerpo de Voluntarios son eficientes para esos desertores escolares, si su oferta es suficiente para el número de personas que requieren los servicios y cómo comparan las destrezas sociales y laborales de los que adoptan esas alternativas con las de aquellos estudiantes que siguen el patrón escolar tradicional.

Otro aspecto que conviene analizar es si existen variaciones en las características de los desertores temporales y permanentes. Ese análisis es pertinente para el diseño de estrategias de prevención para la deserción escolar. Si las características difieren entre los dos grupos, las estrategias también deberán ser diferentes.

NÚMERO.DES

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserqón Escolar en P.R. Notas

1. Véase, por ejemplo, Awilda Aponte Roque, La deserción escolar en el sistema educativo de Puerto Rico, 1950 a 1971, Junta de Planificación de Puerto Rico, Negociado de Planificación Social, San Juan, 1971. Comisión de Reforma Educativa de Puerto Rico, Informefinal, San Juan, 1977. James S. Catterall, On the Social Costs ofDropping Out ofSchool, Center for Educational Research at Stanford, California, 1985. Comisión Conjunta para la Reforma Educativa, Informefinal, San Juan, 1990.

2. Departamento de Educación de Puerto Rico, División de Información, Tabla 1, "Matrícula en Escuelas Públicas Diurnas de Puerto Rico", septiembre de 1991.

3. Véase el capítulo 2, "Deserción Escolar: Una Definición Operacional", Diagrama 1.

4. U.S. Department of Commerce, Bureau of the Census. Census of Population. Detailed Socio-Economic Characteristics. Puerto Rico, 1960, 1970 y 1980.

5. Horacio Matos, et. al.. Educación y mercado laboral en Puerto Rico. San Juan: Universidad de Puerto Rico, Administración Central y Administración de Colegios Regionales, 1992.

6. Se tiene que utilizar la población de 15 años ó más de edad, a causa de que esa es la forma en que el censo poblacional informa tales datos. Esto causa una inconsistencia metodológica en el análisis. Sin embargo, no es de esperar que, en el agregado, este problema cause un error de mayor magnitud en los estimados.

7. Este hallazgo es consistente con la información disponible en los censos de población de 1970 y 1980. En 1970 el 28.9% de los varones y el 25.3% de las hembras eran graduados de escuela superior, mientras que para 1980 esas proporciones habían aumentado a 40.1% en el caso de los varones y a 39.0% en el de las hembras; lo que refleja una disminución en la diferencia en tasas de deserción escolar entre los sexos. (U.S. Dept. of Commerce, Bureau of the Census. Census ofPopulation. Detailed Socio-Economic Characteristics. Puerto Rico. 1970 y 1980.) Asesoría y Consulta, Inc.

8. Este hallazgo también es consistente con la información disponible en los censos de población de 1970 y 1980. En 1970 el 7.1% de los varones y el 5.0% de las hembras tenían un nivel de educación de 4 ó más años de universidad. Para 1980 esas proporciones aumentan a 10.0 en el caso de los varones y 8.9% en el de las hembras. Nuevamente ocurre una disminución en la diferencia entre las proporciones que completan este nivel de educación en los dos sexos. (U.S. Dept. of Commerce, Bureau of the Census. Census of Population. Detailed SocioEconomic Characteristics. Puerto Rico, 1970 y 1980.)

9. Véase, por ejemplo, Rafael A. Meléndez Tosté, "La escuela me aburre: radiografía de un desertor escolar". Interamericana, noviembre/diciembre 1992, págs. 18 y 19.

10. Citado en ibid., pág. 19.

Asesoría y Consulta. Inc.

DBL NÚMERO DE DESERTORES ESCX3LARES EN P.R.
ESTTMAaÓN

Educación, Empleo y Desempleo

Introducción

Desde una perspectiva estrictamente económica, el problema del costo social de la deserción escolar surge porque las destrezas de la persona lo ubican en una posición de desventaja con respecto a la productividad promedio de la población'. Ello hace que la capacidad del desertor para emplearse y generar un ingreso sea una desventajosa. Por tal motivo, es pertinente evaluar cómo compara la situación laboral de los desertores escolares con las de las personas que han completado su educación secundaria. Tal análisis permite expresar en forma cuantitativa una de las desventajas que enfrentan los desertores escolares, así como una de las pérdidas que sufre la sociedad, al no emplear la capacidad productiva de estas personas.

De más está indicar que, al una persona ver limitadas sus oportunidades en el mercado laboral, ella y la sociedad sufren pérdidas adicionales a la disminución en la generación de ingresos. Sin embargo, esas pérdidas serán objeto de análisis en otros capítulos de este informe.

Ya en este estudio se había indicado que no había diferencias, con significación estadística, entres las personas cuyo nivel de escolaridad es entre 7 y 9 años y las que tienen un nivel entre 10 y 11 años^. Ese hallazgo es la justificación para agrupar a todos los desertores escolares en una misma categoría. También se encontró que,en promedio,la tasa de desempleo que enfrentan los desertores escolares excede en 9.4 puntos porcentuales la de la población en general»

1

EDucAaóN,Empleo

En este capítulo se analizan otros dos aspectos de la situación laboral de los desertores escolares: la tasa de participación en el mercado laboral y la comparación entre las oportunidades de trabajo que tienen en la empresa privada, el gobierno y el autoempleo El análisis se basa en la información de la encuesta descrita en el capítulo anterior.

Participación en el Mercado Laboral

Según se observa en el Diagrama 1, tanto en el caso de los varones, como de las personas del sexo femenino, la tasa de participación laboral tiende a crecer a medida que aumenta la escolaridad de los individuos. La tasa de participación laboral de los varones desertores escolares es de apenas 53.5%, aumentando a TASAS estimadas de participación laboraí POR NIVELES DE EDUCACION Y SEXO

76.8% para aquellos con T" escolaridad de duodécimo grado y a 91.8% para los que tienen educación « postsecundaria. En el caso de I HucallM las mujeres, la tasa de participación laboral de las Diagrama 1

desertoras escolares es tan solo 14.4%. Para las mujeres con escolaridad de 12mo. grado la

Asesoría y Consulta, Inc.

v
Desempleo

Costos Sociales de la Deserqón Escolar en P.R.

más que se duplica, al aumentar a 37.3%. Cuando se pasa a considerar al grupo de mujeres con educación postsecundaria, se observa otro incremento sustancial, al aumentar la tasa a 61.6%.

Es interesante notar que las diferencias absolutas entre sexos en las de participación laboral se mantienen aproximadamente constantes en los casos de desertores escolares y de personas con escolaridad de 12mo. grado. En ambos casos, la tasa de participación laboral de los varones es aproximadamente 39 puntos porcentuales mayor. Sin embargo, la diferencia absoluta disminuye a unos 30 puntos porcentuales para el grupo de personas con educación postsecundaria.

Al examinar las actividades de las personas que no participan en el mercado laboral, se encuentran fenómenos de interés. En el caso de los varones, se observa que el 10.2% de los jefes de familia que son desertores escolares se

POR CIENTO DE VARONES JEFES DE FAMILIA QUE SE DECLARAN INCAPACITADOS

declaran incapacitados. La lt¡t proporción de incapacitados ^ disminuye a casi la mitad, «K 5.4%, para aquellos con ^ escolaridad de 12mo. grado.

■M

Para los que tienen educación

postsecundaria, la proporción Diagrama 2

Asesoría y Consulta, Inc.

tor Ciento fteaertorts CrUo It

EDUCAaóN,Empleo y Desempleo

vuelve a disminuir a menos de la mitad, reduciéndose a 2.3%. Sería interesante investigar cuánto de esa variación en las tasas de incapacidad se debe a la naturaleza y condiciones de los empleos que tienen las personas con menores niveles de escolaridad, así como cuánto se puede deber a otros factores.

En cuanto a las mujeres, la principal ocupación de aquellas que no participan en el mercado laboral son los oficios domésticos en el hogar, sin remuneración monetaria. En el Diagrama 3 se observa que la proporción de mujeres dedicadas a oficios domésticos disminuye rápidamente a medida que aumenta el nivel de escolaridad. Esta evidencia es consistente con la hipótesis de que la educación aumenta L. Di

agrama 3 las oportunidades de las mujeres en el mercado laboral, a lo cual se le han encontrado implicaciones de mejorar las relaciones de igualdad entre los sexos^.

El análisis efectuado lleva a la conclusión de que una disminución en la tasa de deserción escolar llevaría a un aumento en la tasa de participación laboral. La información estadística

Asesoría y Consulta, Inc.

A OFICIOS
POR CIENTO DE MUJERES DEDICADAS
DOMESTICOS
BCOUllM»

indica que a medida que aumenta el nivel educativo de los individuos, mayor es su disposición para participar en la fuerza laboral. Así, una disminución en la tasa de deserción escolar aumentará el número de personas buscando empleo. Tal hallazgo hace que resulte pertinente analizar la distribución de empleos por sectores económicos y educativos. Tal anáüsis permitirá una primera aproximación acerca de la capacidad de la economía para absorber una oferta adicional de trabajadores, que resultaría de una disminución en el número de desertores escolares.

Ocupación por Sectores Económicos

El Diagrama 4 infonna la distribución por sectores económicos (empresa privada, gobierno y autoempleo)de

orirtc nnr VARONES EN UN NIVEL DE ESCOLARIDAD los varones agrupados por EMPLEADOS POR SECTORES ECONOMICOS niveles educativos. En el 1 caso de los desertores Z

escolares. el 57.8% de eUos trabajan en la empresa privada,el 13.7% en el gobierno y el 28.4% se autoemplea.

Diagrama 4 Asesoría

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. 43
Por Clofiio i 57.8« Í7.9A 28.4X
Priv*8o Cokltrno tICTOl ICaHOHICO ftutiMiwlco I ••••rtor ■SCOUllM» CraJe 12 Post-S*c
y Consulta,
Inc.

Al examinar la información en el diagrama se encuentra que las proporciones que se emplean en el sector privado no solo son mayores, sino que además tienden a ser bastante estables para los grupos con diferentes niveles de escolaridad. El 57.8% de los desertores escolares varones empleados trabaja en la empresa privada, proporción que es la misma para los varones con 12mo. grado de escolaridad. En el caso de los varones con educación postsecundaria, la proporción de ellos que se emplea en la empresa privada es 51.7%, la cual es algo menor a las correspondientes a los otros dos niveles educativos.

La situación con el empleo en el sector gubernamental es totalmente diferente. La proporción de varones que se emplea en el gobierno aumenta rápidamente con el nivel de educación. Mientras que el 13.7% de los desertores escolares varones empleados trabaja en el gobierno, en caso de aquellos con escolaridad de 12mo. grado la proporción aumenta a 22.6% volviendo a aumentar a 30.4% para los que tienen educación postsecundaria. Debe notarse que el desplazamiento ocupacional hacia el sector gubernamental ocurre, mayormente, a expensas del autoempleo. Las proporciones de personas autoempleadas disminuye rápidamente a mediada que aumenta el nivel de educación; registrándose la mayor reducción al pasar del grupo de desertores escolares (28.4% de ellos autoempleados) al grupo de aquellos cuya escolaridad es duodécimo grado (19.5% de ellos autoempleados).

En el Diagrama 5 se analiza el mismo tipo de información que en el anterior para personas del sexo femenino. Se observa que los patrones de comportamiento son similares a los Asesoría y Consulta, Inc.

Educaoón,Empleo y Desempleo

Costos Sociales de la Deseroón Escolar en P.R. de los varones, aunque más drásticos.

Al analizar el diagrama, se encuentra que el 62.1% de las mujeres que son desertoras escolares se emplea en la empresa privada. Esa proporción es mayor que la correspondiente a los varones que son desertores escolares (57.8%). A diferencia del caso de los varones, la proporción de mujeres empleadas en el sector privado disminuye con bastante rapidez a medida w que aumenta el nivel de ^

educación La •>< disminución resulta ser tal

MUJERES EN UN

DE

I F^Mrior Cra^ 12 Fori-Sac que, para las mujeres con ' I escolaridad de 12mo. Diagrama 5 grado la proporción es la misma que para los varones (57.8%); mientras que para las mujeres con educación postsecundaria, la proporción de ellas empleadas en la empresa privada(46.6%) es menor que la que corresponde a los varones en este grupo educativo (51.7%). De hecho, para las mujeres en esta categoría de educación, la empresa privada deja de ser su principal fuente de empleo.

Asesoría y Consulta, Inc.

-A I
SICTOX ICONOHICO ESCOUIIIM»
NIVEL
ESCOLARIDAD EMPLEADAS POR SECTORES ECONOMICOS For Clciiio TW

EDUCAaóN,Empleo y Desempleo

El empleo en el sector gubernamental parece ser más atractivo, o accesible, para las mujeres que para los varones. Las proporciones de ellas que se emplean en el gobierno exceden

■ a las de los varones en las tres categorías de niveles de educación. Nuevamente se observa el

'fenómeno de que las proporciones aumentan a medida que es mayor el nivel de educación. En

• este caso el incremento ocurre tan aceleradamente que, para las mujeres con educación postsecundaria, el gobierno se convierte en su principal fiiente de empleo. En el caso de las mujeres, el desplazamiento hacia el empleo gubernamental, a medida que aumenta la educación, ocurre a expensas tanto del sector privado como del autoempleo.

í Autoemplearse aparenta ser menos atractivo para las mujeres que para los varones. Para todos los niveles educativos, resulta que las proporciones de mujeres autoempleadas son

> significativamente menores a las correspondientes para los varones. Aquí también se observa

- el fenómeno de que la proporción de mujeres autoempleadas disminuye a medida que aumenta

'■ el nivel educativo. Resumen y Conclusiones

Ya en este estudio se había indicado que no había diferencias, con significación

• estadística, entres las personas cuyo nivel de escolaridad es entre 7 y 9 años y las que tienen un nivel entre 10 y 11 años. Ese hallazgo es la justificación para agrupar a todos los desertores escolares en unamismacategoría. También seencontróque, en promedio, latasadedesempleo

Asesoría y Consulta, Inc.

que enfrentan los desertores escolares excede en 9.4 puntos porcentuales la de la población en general.

En este capítulo se analizan otros dos aspectos de la situación laboral de los desertores escolares: la tasa de participación en el mercado laboral y la comparación entre las oportunidades de trabajo que tienen en la empresa privada, el gobierno y el autoempleo. El análisis se basa en la información de la encuesta descrita en el capítulo anterior.

El análisis efectuado en el capítulo lleva a la conclusión de que una disminución en la tasa de deserción escolar llevaría a un aumento en la tasa de participación laboral. La información estadística indica que a medida que aumenta el nivel educativo de los individuos, mayor es su disposición para participar en la fuerza laboral. Así, una disminución en la tasa de deserción escolar aumentará el número de personas buscando empleo. Tal hallazgo hace que resulte pertinente analizar la distribución de empleos por sectores económicos y educativos. Tal análisis permitirá una primera aproximación acerca de la capacidad de la economía para absorber una oferta adicional de trabajadores, que resultaría de una disminución en el número de desertores escolares.

Al examinar cómo se distribuyen las personas empleadas entre los diferentes sectores económicos se encuentran resultados de interés. Uno es que, tanto en el caso de los varones como de las mujeres, las proporciones de personas empleadas en el gobierno, en un grupo de nivel educativo, aumenta a medida que incrementa la escolaridad. Esto es, mientras más

y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deseroón Escolar en P.R.
Asesoría

educadas son las personas mayor es la probabilidad de que se empleen en el sector gubernamental. Esta tendencia es particularmente cierta para las mujeres, donde el gobierno es ? el principal patrono para las mujeres empleadas con educación de nivel postsecundario.

Toda vez que el empleo gubernamental no ha estado creciendo en los últimos años*, este * sector no habría podido absorber un aumento en la oferta laboral ocasionado por una reducción en la deserción escolar. Dados los problemas fiscales que enfrenta el gobierno de Puerto Rico no es de esperar que ocurra un cambio en su tendencia de creación de empleos, por lo que en el futuro próximo no podrá ser éste el sector que capte aumentos sustanciales en la oferta laboral.

No es de esperar que la empresa privada aumente su demanda por trabajadores de ocurrir una disminución en el número de desertores escolares. Para que las empresas empleen más personas es necesario que ocurran aumentos en la demanda por sus productos o que disminuya la tasa salarial en el mercado. La demanda por trabajo no varía con cambios en la oferta laboral por lo que un aumento en la oferta laboral tendría como resultado una disminución en el salario promedio, lo que traería consigo algún cambio en el número de personas empleadas Sin embargo, la situación más deseable sería que ocurriese un aumento en la demanda por trabajo Para ello es necesario que se tomen medidas que estimulen el crecimiento general de la economía o que aumente el autoempleo entre los participantes en la fuerza laboral

Asesoría y Consulta, Inc.

48 EDUCAaóN,Empleo y Desempleo

Costos Sociales de la Deseroón Escolar en P.R.

En el capítulo se encontró que el autoempleo es una alternativa que parece ser poco atractiva para las personas. A medida que aumenta el nivel de escolaridad del individuo, menor es su probabilidad de que decida autoemplearse. Aunque este tema cae fuera del ámbito de este informe, es pertinente que, en su momento, se estudien las oportunidades y limitaciones del autoempleo para la fuerza laboral del país; de forma de identificar medidas y políticas que lo conviertan en una alternativa efectiva para la generación de empleos.

Asesoría y Consulta, Inc.

Notas

1. Véase, por ejemplo, a H. M.Levin, The Costs ta the Nation ofinadequate Education, Report to the Select Committee on Equal Educational Opportunity of the U.S. Senate, 1972; y a J. S. Catterall, On the Social Costs ofDropping Out ofSchool, Center for Educational Research at Stanford, California, 1985.

2. Véase el capítulo 2, "Deserción Escolar: Una Definición Operacional", en particular la sección de "Resumen y Conclusiones".

3. Véase, por ejemplo, a Ramón J. Cao García y Elena M. Díaz Molina, "Working Wives in Puerto Rico: An Economic Analysis of the Determinants of Labor Forcé Participation of Married Women in Puerto Rico, 1960 to 1980", Xth Annual Conference of the Caribbean Studies Association. San Juan, mayo 29 a junio 1 de 1985.

4. Véase Departamento del Trabajo y Recursos Humanos de Puerto Rico, Serie Histórica del Empleo, Desempleo y Grupo Trabajador en Puerto Rico, 1947-1991. San Juan: septiembre de 1992. Tabla 21.

Asesoría y Consulta, he.

EDUCAaóN,Empleo y Desempleo

Deserción Escolar e Ingreso

Introducción

La literatura informa que uno de los efectos de la educación es aumentar la productividad de los individuos'. Por ello debe esperarse que los desertores escolares reciban ingresos relativamente menores a los del resto de la población, a causa de tener una productividad laboral menor. La literatura es consistente en identificar una relación positiva entre nivel educativo e ingreso, que muchos autores adjudican a que la educación aumenta las destrezas y productividad de las personas. Como consecuencia, a través de una mayor educación de las personas aumenta el Ingreso Nacional, contribuyendo al crecimiento económico. Cuando una persona abandona la escuela, la sociedad experimenta una limitación en su capacidad para el crecimiento económico, lo que representa un costo social.

La situación de los desertores escolares empeora además por el efecto, que también señala la literatura, de que la educación opera como filtro en el mercado laboral^. Se indica que los patronos suelen utilizar las credenciales educativas como instrumentos para distribuir a los solicitantes de empleo en categorías de deseabilidad. Desde esta perspectiva, conocida como la "hipótesis del credencialismo", el proceso educativo tienen el efecto de cernir ("screen") a los individuos de acuerdo a sus aptitudes, capacidades y disposiciones, independientemente de la capacidad productiva que le añada la educación al individuo. En este contexto, los patronos

51 .

utilizan las credenciales educativas como instrumento para practicar discriminación estadística.

Como los desertores escolares, por definición, están en desventaja con respecto a las credenciales educativas que poseen, su capacidad para obtener ingresos en el mercado laboral se ve limitada.

Se puede apreciar que ambos argumentos se refuerzan en el efecto de limitar la capacidad de los desertores escolares para generar ingresos. Así entonces, una reducción en el número de desertores escolares tendría el efecto de aumentar la capacidad social para generar ingresos. En

• este capítulo se trata de calcular un estimado de los ingresos sociales que se dejan de percibir

^ como resultado de la deserción escolar. Para tales cálculos se utiliza la información de encuesta descrita en capítulos anteriores.

Metodología

El primer paso en el proceso de estimación es calcular la diferencia promedio entre el ingreso ganado por los desertores escolares y las personas que no lo son. Al respecto se utilizará como patrón de estimación la diferencia entre el ingreso promedio de los desertores escolares y el de las personas con escolaridad de 12mo. grado. Tal criterio es conservador y tiende a subestimar el valor estimado de la diferencia, pues es de esperar que varios de los actuales desertores escolares, al completar su educación de escuela superior, realizarían estudios postsecundarios.

Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar e Ingreso

La diferencia, estimada en la forma antes descrita, se utilizará para calcular el aumento en ingreso ganado de los desertores escolares que dejen de serlo. Ahora bien, el estimado debe ajustarse por los factores indicados en el capítulo anterior, a saber;

1. La tasa de desempleo de los desertores escolares es mayor que la de las personas con escolaridad de 12mo. grado, por lo que es de esperar que aumente el número de ex-desertores escolares que obtengan empleo y ganen ingresos en el mercado.

2. La tasa de participación laboral de los desertores escolares es menor que la de las personas con escolaridad de 12mo. grado. Así que si un individuo deja de ser desertor escolar, aumenta la probabilidad de que entre en el mercado laboral, lo que aumenta el número de personas en la fuerza laboral.

3. Un aumento en la oferta laboral tiende a causar una reducción en el salario promedio, por lo que es de esperar que el ingreso ganado esperado de los desertores escolares sea menor al promedio actual en el mercado, si es que ocurre una reducción sustancial en el número de desertores escolares.

Para los estimados se utiliza al 1990 como año de referencia, ya que el número estimado de desertores escolares se calculó a base de la información del censo de 1990.

Asesoría y Consulta, ¡nc.

Escolar en P.R.
Costos Sociales de la Deserción

Estimados de Ingresos y Escolaridad

En el Diagrama 1 INGRESO SEMANAL GANADO PROMEDIO

POR NIVELES DE ESCOLARIDAD Y SEXO se informa la distribución del ingreso semanal I2mo* promedio por niveles de 13-14 escolaridad y sexo. Se

observa que el ingreso promedio de los varones es

mayor al de las mujeres Diagrama 1 para todos los niveles considerados de escolaridad. Asimismo se observa que el ingreso promedio aumenta a medida que es mayor el nivel de escolaridad. Esta situación es cierta para ambos sexos.

Las diferencias estimadas en ingreso ganado promedio entre los desertores escolares y las personas con escolaridad de 12mo. grado son, por sexo:

Varones

Mujeres

$44.01 semanales

$48.03 semanales

Se observa que completar la escuela superior resulta en una mayor mejoría para las mujeres que para los varones, en cuanto a la capacidad para generar ingresos.

Asesoría y Consulta, ¡nc.

WMrtor ■■ HticuBno F«ni«f>ir)o
Deserción Escolar e Ingreso ISCOLAItM»
•O.M SlM.ea «290.M «389.8Q «488.88 «S88.88 MUUES
19-U
«"««.Ba «zaa.Ba *3aa.aa ««sa.Ba «SM.M

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Para obtener un estimado del diferencial anual en ingreso ganado promedio entre los desertores escoalres y las personas con escolaridad de 12mo. grado, se multiplican los diferenciales semanales, antes informados, por 52 semanas. Los valores resultantes son:

Varones

Mujeres

$2,288.52 anuales

$2,497.66 anuales

El hecho de que el diferencial en ingreso ganado promedio entre sexos varíe con el nivel de escolaridad, amerita que el fenómeno se examine con mayor detenimiento. Para ello se

utiliza el Diagrama 2. En ese diagrama se presenta la diferencia porcentual entre el ingreso ganado en diferentes niveles de escolaridad, con relación al nivel de escolaridad de 12mo. grado. Esas diferencias relativas se calculan por sexo.

Según se aprecia en el Diagrama 2, en el caso de los hombres, pasar de la condición de desertor escolar a la de tener una escolaridad de 12mo. grado, significa un aumento promedio de

DIFERENCIAS EN INGRESO GANADO PROMECHO CON RELACION AL INGRESO GANADO POR PERSONAS CON ESCOLARIDAD DE 12mo. GRADO ESCOLARIM»

2

F«m«ftír>e 15.TX I M.2X J SE.» 47.9X sa.0x rOB CIENTO
Diagrama
Asesona y Consulta, Inc.

- 20.9% en el ingreso ganado. Ese mismo cambio, en el caso de las mujeres, representa un , incremento promedio de 28.0% en el ingreso ganado. Por lo que ese aumento en el nivel de educación es más beneficioso para las personas del sexo masculino.

La tendencia sigue con la misma dirección para el siguiente nivel de escolaridad considerado. En el caso de un varón que aumenta su nivel de educación de 12mo. grado a una escolaridad de 13 a 14 años, su ingreso ganado mejora, en promedio, 15.7%. Por su parte, en el caso de una mujer que registre el mismo cambio en educación, su ingreso ganado registra un ■" aumento promedio de 20.2%. Nuevamente resulta que el aumento en el nivel educativo es más beneficioso para las personas del sexo femenino.

La tendencia en el patrón de cambio se revierte cuando se pasa a niveles educativos mayores. Aumentar la escolaridad de 13 - 14 años a 15 - 16 años es más beneficioso para los hombres que para las mujeres, y lo mismo sucede cuando la escolaridad aumenta a 17 años o ; más. Esta situación tiene importantes implicaciones con respecto a la equidad en la distribución del ingreso entre los sexos, las que se exploran con ayuda del Diagrama 3.

En el diagrama sepresenta laproporción del ingreso ganado delos hombres con relación al de las mujeres. Estas proporciones se calculan para diferentes niveles de escolaridad. Así . laproporción de 1.35 en el caso de los desertores escolares significa que los varones, con ese < nivel de escolaridad, reciben un ingreso promedio que es 35% mayoral de las mujeres con el mismo nivel de escolaridad. Para que la relación sea perfectamente equitativa, la proporción

Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar e Ingreso

debe ser igual a 1.0; mientras más se aleje de ^ ^

1.0 el valor calculado,

menos equitativa es la ^

información en el Diagramas diagrama, se encuentra que, al comienzo de la distribución de escolaridad, los valores calculados para las proporciones van disminuyendo, hasta alcanzar su mínimo en el nivel de 13 a 14 años de escolaridad. Hasta llegar a ese punto, la educación tiene un efecto de disminuir las diferencias entre sexos en el ingreso ganado, lo que implica que la educación actúa como promotora de equidad social. Sin embargo, al pasar a los niveles de educación mayores a de 13 a 14 años de escolaridad, se encuentra que a mayores niveles de educación, mayor es la diferencia entre sexos en el ingreso ganado, disminuyendo así la equidad.

Se observa que la educación desempeña un papel contradictorio en la promoción de la enuidad entre los sexos. Al comienzo de la distribución de escolaridad, parece ser que aumentos n el nivel de educación disminuyen las diferencias en ingreso entre los sexos, actuando así la Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R."
0.8 distribución del ingreso 8.4 entre los sexos. ».2 O A base de la DIFERENCIAS RELATIVAS ENTRE SEXOS EN INGRESO GANADO PROMEDIO B.i*rtor Cr..lo 12 13 14 13 a U ISCOLARIMB ,
1.a
I I

educación como instrumento para promover la equidad social. Sin embargo, la educación cesa de cumplir esa función después que se pasa del nivel de escolaridad de 13 a 14 años; ya que después de ese punto la educación parece convertirse en agente promotor de inequidad social al aumentar el diferencial en ingresos entre los sexos.

Aunque escapa del ámbito de este estudio, tal hallazgo plantea interrogantes que ameritan ser investigadas. Existen varios factores que se podnan explorar en la búsqueda de una explicación a este fenómeno. Previamente, en el informe, se señaló que el empleo en el sector gubernamental parece ser más atractivo, o accesible, para las mujeres que para los varones* y que la proporción de mujeres empleadas en el gobierno aumenta con el nivel educativo de la mujer^. Tan es así, que el gobierno es quién emplea la mayor proporción de las mujeres con educación postsecundaria que están trabajando. Puesto que los salarios en el gobierno tienden a ser menores que los del sector privado, la mayor concentración relativa de mujeres en el servicio público puede ser un factor que aporte a este peculiar efecto de la educación sobre la distribución del ingreso entre los sexos.

Otro posible factor que se menciona en la literatura es que la selección de profesiones universitarias no es aleatoria, sino que está afectada por las características socioeconómicas de los estudiantes\ Particularmente se indica que las mujeres exhiben una mayor probabilidad de ubicarse en profesiones de menor prestigio y remuneración que los varones.

Cualesquiera que sean las causas para el peculiar comportamiento de los efectos de la

58 Deserción Escolar e Ingreso
Asesoría y Consulta, Inc.

educación sobre la equidad entre los sexos, el fenómeno identificado es lo suficientemente importante como para justificar un análisis mayor al que se le puede dedicar en este estudio.

Pérdida Agregada en Ingresos Estimados

Una vez se ha estimado la pérdida esperada en ingreso que sufre un desertor escolar, a causa de su condición educativa, es necesario calcular el valor agregado de esa pérdida para la sociedad, en un año dado. Puesto que se ha establecido que el ingreso esperado varía entre sexos, es conveniente estimar esa pérdida para cada sexo y después sumar ambos valores.

Pérdida Agregada en Ingresos: Desertores Escolares del Sexo Masculino

Previamente se estimó que en la población de Puerto Rico hay 554,000 desertores escolares varones. Puesto que se estima en 53.5% la tasa de participación laboral de estas personas, se calcula que 296,390 desertores escolares participan en la fuerza laboral. De ellos, el 25.6% se encontraron desempleados durante el año^ por lo que solamente 220,514 desertores escolares trabajaron durante el año. Toda vez que se estimó en $8,650.20 el ingreso anual promedio ganado por los desertores escolares del sexo masculimo, el total agregado del ingreso ganado durante el año es (220,514 x $8,650.20 =)$1,907.5 millones.

Se estableció, en este informe, que la tasa de participación laboral de los varones graduados de 12mo. grado es 76.8%. Así, si los desertores escolares completasen la escuela

Asesoría y Consulta. Inc. ^

en P.R.
Costos Sociales de la Deserción Escolar

superior, se esperaría que el número de ellos en la.fuerza laboral fuese (554,000 x 76,8% =) 425,472. Puesto que la tasa de desempleo promedio para los varones fue 16.2% durante el año de 1990, es de esperar que 356,546 de esas personas estarían empleadas. Al multiplicar el ingreso promedio anual que gana una persona del sexo masculino con escolaridad de 12mo. grado ($10,938.72) por el número de desertores que se espera que estuviesen empleados, (de aumentar su escolaridad a 12mo. grado,) se obtiene el ingreso que habrían ganado en el agregado. Ese cálculo resulta en un valor estimado de $3,900.1 millones para el año 1990.

La pérdida social de ingresos, atribuible a la deserción escolar entre los varones, es igual a la diferencia entre el ingreso agregado que este grupo pudo haber ganado, si no fueran desertores escolares, y el que se estima que ganó. Esa diferencia ($3,900.1 millones - $1,907.5 millones =)se estima en $1,992.6 millones.

Pérdida Agregada en Ingresos: Desertores Escolares del Sexo Femenino

En cuanto a la situación para las mujeres, se estimó que en la población de Puerto Rico hay 753,000 desertores escolares del sexo femenino. La tasa de participación laboral de estas personas se estimó en 14.4%, resultando en que 108,434 desertoras escolares participan en la fuerza laboral. De ellas, el 20.1% se encontraron desempleadas durante el año®, así que se estima en 86,639 el número de desertoras escolares que trabajaron durante el año. Puesto que el ingreso anual promedio ganado por las desertoras escolares del sexo femenino se estimó en

Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar e Ingreso

$6,415.24, el total agregado del ingreso ganado durante el año es (86,639 x $6,415.24 =)

$555.8 millones.

Se estableció, en este informe, que la tasa de participación laboral de las mujeres graduadas de 12mo. grado es 37.3%. Así, si las desertoras escolares completasen la escuela superior, se esperaría que el número de ellas en la fuerza laboral fuese (753,000 x 37.3% =) 280,869. Puesto que la tasa de desempleo promedio para las mujeres fue 10.7% durante el año de 1990, es de esperar que 250,816 de esas personas estarían empleadas. Al multiplicar el ingreso promedio anual que gana una persona del sexo femenino con escolaridad de 12mo.grado ($8,912.80) por el número de desertoras que se espera que estuviesen empleadas,(de aumentar su escolaridad a 12mo. grado,) se obtiene el ingreso que habrían ganado en el agregado. Ese cálculo resulta en un valor estimado de $2,235.5 millones para el año 1990.

La pérdida social de ingresos, atribuible a la deserción escolar entre las mujeres, es igual a la diferencia entre el ingreso agregado que este grupo pudo haber ganado, si no fueran desertoras escolares, y el que se estima que ganó. Esa diferencia ($2,235.5 millones - $555.8 millones =)resulta ser $1,679.7 millones.

Pérdida Agregada en Ingresos

El costo social de la deserción escolar, atribuible a los ingresos que pierden de ganar los desertores escolares, por causa de su menor productividad y oportunidad laboral, es la suma de

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.r.
Asesoría y Consulta. Inc.

las dos partidas estimadas en los párrafos anteriores.

La pérdida atribuible a los desertores escolares varones se estimó en $1,992.6 millones, mientras que la correspondiente a las desertoras escolares del

Deserción Escolar e Ingreso

Diagrama 4

sexo femenino se calculó en $1,679.7 millones, ambos valores estimados para el año 1990. El costo social total por este concepto es, entonces, $3,672.3 millones. Este valor corresponde al 27.0% del total de los pagos por compensación al trabajo en 1990.

Pérdida Agregada en Ingresos Estimados: Ajustada por Cambios en el Mercado Laboral

El costo social estimado en el apartado anterior supone que eliminar la deserción escolar no traena consigo cambios en la estructura salarial de la isla. Tal supuesto es ingenuo, toda vez que la tasa de participación laboral de los graduados de 12mo. grado es mayor que la de los desertores escolares. Así entonces, eliminar la deserción escolar resultaría en expandir la oferta laboral. Un aumento en el número de personas participando activamente en el mercado de Asesoría y Consulta. Inc.

PERDIDA ESTIMADA EN INGRESOS A CAUSA DE LA DESERCION ESCOLAR SIN AJUSTAR
Uurofws «1«992.6 MuJtrti 49.7*/ *1,*79.7 Total: 3,672.3 millones
1990

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

trabajo, suele resultar en diminuir el salario promedio y aumentar la tasa de desempleo.

Lo indicado en el otroi-Mr^A PERDIDA ESTIMADA EN INGRESOS . . ^ A CAUSA DE LA DESERCION ESCOLAR párrafo antenor implica AJUSTADA que deben ajustarse los estimados de la pérdida agregada en ingresos ganados por los desertores escolares, para reconocer "^«VTzV.b'^

Total; $2,754.2 millones los efectos del incremento L_ ^990

Diagrama 5 ^ ' esperado en la ofeta laboral. Para hacer ese ajuste, se decidió uülizar el criterio propuesto por Catterall, en su estudio acerca del costo social de la deserción escolar en los Estados Unidos^ Siguiendo el procedimiento propuesto por ese autor, la pérdida estimada en ingresos, atribuible a la deserción escolar, se reduce en 25 por ciento; lo que resulta en una pérdida ajustada neta de $2,754.2 millones. Tal cantidad corresponde al 20.3% del total de las compensaciones pagadas al trabajo en Puerto Rico durante 1990.

Asesoría y Consulta. Inc.

UaroMs 34.3>! «1,494.4 Hujtirs 43,7X «1,2S9.B 1990

Valor Presente de la Pérdida de Ingresos de un Desertor Escolar

Otra forma de valorar los efectos de la pérdida de ingresos ocasionada por la deserción escolar, es calcular el valor presente de los ingresos que pierde un desertor escolar a través de su vida. Ese estimado ofrece un indicador de la pérdida capitalizada que sufre la sociedad por cada uno de los desertores escolares.

Para calcular el valor capitalizado de esa pérdida, se comienza por ajustar el ingreso promedio esperado de un desertor escolar por la probabilidad de que reciba ese ingreso. Este ajuste es necesario porque no todas las personas participan en el mercado laboral, y no todos los que participan están empleados. El ingreso esperado promedio de las personas con escolaridad de 12mo. grado también se ajusta, siguiendo el mismo procedimiento.

La diferencia entre los ingresos promedios ajustados de los desertores escolares y los que han completado 12 grados de escuela, es la pérdida anual en ingreso atribuíble a que una persona no complete su educación de escuela superior. Esa pérdida se proyecta a través de la vida productiva esperada del desertor escolar, que se supone que cubre el período entre las edades de 18 a 65 años. Para hacer esa proyección, se utiliza una tasa de crecimiento real anual promedio de 3.96 por ciento en los salarios, que corresponde a la experiencia histórica de la pasada década en Puerto Rico.

Para capitalizar, o expresar en su valor presente, las pérdidas estimadas, se descuentan los valores anuales a una tasa de 7.5 por ciento. Se utiliza esa tasa porque es a la que ha

Deserción Escolar e Ingreso

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

tendido a fluctuar el interés de largo plazo para inversiones de riesgo moderado. Toda vez que el ingreso y las tasas de participación y desempleo varían entre sexos, los estimados se deben " calcular por separado para varones y mujeres.

En el Diagrama 6 se informan los resultados que se obtienen al utilizar el procedimiento descrito en los párrafos anteriores. Se encuentra que el valor presente de las pérdidas estimadas en el ingreso de un desertor ,3,, escolar del sexo masculino '

«40.S

es $87,333 mientras que ,29.s

para uno del sexo

femenino es $54,161.

Esos valores contrastan

VALOR PRESENTE DE LA PERDIDA DE INGRESOS DE UN DESERTOR ESCOLAR

Diagrama 6

marcadamente con los recursos que se asignan para prevenir y remediar la deserción escolar en Puerto Rico, ya que se estima que el gasto anual promedio por participante para esos propósitos es $407.89»

Asesoría y Consulta, Jnc.

MmcuUao F*M«fl|AO

Resumen y Conclusiones

En este capítulo se estableció que la literatura es consistente en identificar una relación positiva entre nivel educativo e ingreso, que muchos autores adjudican a que la educación aumenta las destrezas y productividad de las personas. Así entonces, una reducción en el número de desertores escolares tendría el efecto de aumentar la capacidad social para generar ingresos. En este capítulo se trata de calcular un estimado de los ingresos sociales que se dejan de percibir como resultado de la deserción escolar. Para tales cálculos se utiliza la información de encuesta descrita en capítulos anteriores.

El primer paso en el proceso de estimación es calcular la diferencia promedio entre el ingreso ganado por los desertores escolares y las personas que no lo son. Al respecto se utiliza como patrón de estimación la diferencia entre el ingreso promedio de los desertores escolares y el de las personas con escolaridad de 12mo. grado. Esa diferencia es la base para calcular el aumento en ingreso ganado de los desertores escolares que dejen de serlo. Ahora bien el estimado debe ajustarse por los siguientes factores:

1. La tasa de desempleo de los desertores escolares es mayor que la de las personas con escolaridad de 12mo. grado.

2. La tasa de participación laboral de los desertores escolares es menor que la de las personas con escolaridad de 12mo. grado.

3. Un aumento en la oferta laboral tiende a causar una reducción en el salario

Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar e Ingreso

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. promedio.

Para los estimados se utiliza al 1990 como año de referencia, ya que el número estimado de desertores,escolares se calculó a base de la información del censo de 1990.

Al efectuar el análisis, se observa que el ingreso promedio de los varones es mayor al de las mujeres para todos los niveles considerados de escolaridad. Asimismo se observa que el ingreso promedio aumenta a medida que es mayor el nivel de escolaridad. Esta situación es cierta para ambos sexos. También se observa que completar la escuela superior resulta en una mayor mejoría para las mujeres que para los varones, en cuanto a la capacidad para generar ingresos, ya que completar el 12mo. grado de educación representa, en promedio,los siguientes aumentos en el ingreso anual que ganan los desertores escolares:

Varones

Mujeres

$2,288.52 anuales

$2,497.66 anuales

El hallazgo de que el diferencial en ingreso ganado promedio entre sexos varíe con el nivel de escolaridad, amerita que el fenómeno se examine con mayor detenimiento. En el caso de los hombres, pasar de la condición de desertor escolar a la de tener una escolaridad de 12mo. grado, significa un aumento promedio de 20.9% en el ingreso ganado. Ese mismo cambio, en el caso de las mujeres, representa un incremento promedio de 28.0% en el ingreso ganado. Por lo que ese aumento en el nivel de educación es más beneficioso para las personas del sexo masculino.

Asesoría y Consulla, Inc.

La tendencia sigue con la misma dirección para el siguiente nivel de escolaridad, esto es, al pasar a un nivel de 13 a 14 años de educación formal.(Véase el Diagrama 2, en el texto.)

La tendencia en el patrón de cambio se revierte cuando se pasa a niveles educativos mayores.

Aumentar la escolaridad de 13 -14 años a 15 -16 años es más beneficioso para los hombres que para las mujeres, y lo mismo sucede cuando la escolaridad aumenta a 17 años o más.

Esta situación tiene importantes implicaciones con respecto a la equidad en la distribución del ingreso entre los sexos. Al comienzo de la distribución de escolaridad, la proporción entre el ingreso ganado de los hombres, con respecto al de las mujeres, va disminuyendo, hasta alcanzar su mínimo en el nivel de 13 a 14 años de escolaridad. Hasta llegar a ese punto, la educación tiene un efecto de disminuir las diferencias entre sexos en el ingreso ganado, lo que implica que la educación actúa como promotora de equidad social. Sin embargo, al pasar a los niveles de educación mayores a de 13 a 14 años de escolaridad, se encuentra que a mayores niveles de educación, mayor es la diferencia entre sexos en el ingreso ganado, disminuyendo así la equidad.

Se observa, entonces, que la educación desempeña un papel contradictorio en la promoción de la equidad entre los sexos. Aunque escapa del ámbito de este estudio, tal hallazgo plantea interrogantes que ameritan ser investigadas, adelantándose algunas hipótesis en el informe. Cualesquiera que sean las causas para el peculiar comportamiento de los efectos de la educación sobre la equidad entre los sexos, el fenómeno identificado es lo suficientemente

Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar e Ingreso

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.'

importante como para justificar un análisis mayor al que se le puede dedicar en este estudio.

Una vez se estima la pérdida esperada en ingreso que sufre un desertor escolar, a causa de su condición educativa, es necesario calcular el valor agregado de esa pérdida para la sociedad, en un año dado. Puesto que se ha establecido que el ingreso esperado varía entre sexos, es conveniente estimar esa pérdida para cada sexo y después sumar ambos valores. La pérdida agregada atribuible a los desertores escolares varones se estimó en $1,992.6 millones, mientras que la correspondiente a las desertoras escolares del sexo femenino se calculó en $1,679.7 millones, ambos valores estimados para el año 1990. El costo social total por este concepto es, entonces, $3,672.3 millones. Este valor corresponde al 27.0% del total de los pagos por compensación al trabajo en 1990.

El costo social informado en el párrafo anterior supone que eliminar la deserción escolar no traería consigo variaciones en la estructura salarial de la isla. Sin embargo,tal cambio resultana en expandir la oferta laboral. Un aumento en el número de personas participando activamente en el mercado de trabajo, suele resultar en diminuir el salario promedio y aumentar la tasa de desempleo. Por este motivo, se deben ajustar los estimados de la pérdida agregada en ingresos ganados por los desertores escolares, para reconocer los efectos del incremento esperado en la ofeta laboral. Para hacer ese ajuste, se decidió utilizar el criterio propuesto por Catterall. Siguiendo el procedimiento propuesto por ese autor, la pérdida estimada en ingresos, atribuible a la deserción escolar, se reduce en 25 por ciento; lo que resulta en una pérdida Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar e Ingreso

ajustada neta de $2,754.2 millones. Tal cantidad corresponde al 20.3% del total de las compensaciones pagadas al trabajo en Puerto Rico durante 1990.

Otra forma de valorar los efectos de la pérdida de ingresos ocasionada por la deserción escolar, es calcular el valor presente de los ingresos que pierde un desertor escolar a través de su vida. Ese estimado ofrece un indicador de la pérdida capitalizada que sufre la sociedad por cada uno de los desertores escolares. Al calcular ese costo social en tal forma,se encuentra que el valor presente de las pérdidas estimadas en el ingreso de un desertor escolar del sexo masculino es $87,333, mientras que para uno del sexo femenino es $54,161. Esos valores contrastan marcadamente con los recursos que se asignan para prevenir y remediar la deserción escolar en Puerto Rico, ya que se estima que el gasto anual promedio por participante para esos propósitos es $407.89.

INGRESO.DES

Asesoría y Consulta, Inc.

1. Acerca de este asunto, el lector puede referirse, entre otros a: G. Becker, Human Capital New York: National Bureau of Economic Research, 1964; M. Blaug, "Where Are We Now iil the Economics of Education?', Economics ofEducation Review, Vol. II, verano de 1985 págs. 17 a 28; M. Blaug, The Empirical Status of Human Capital Theory", Joumal ofEconomic Literature, Vol. LIV, sept. de 1976, págs. 827 a 855; E. Cohn, The Economics ofEducation ambndge, Mass.: Gallmger Publishing Co., 1979; E. F. Denison, Why Growth Rotes Differ? Washington, D.C.: The Brookings Instituüon, 1967; E. F. Denison, The Sources ofEconomic Growth in the United States. New York: Committee for Economic Development, 1962" H. S Houthakker, "Education and Incorne". Review ofEconomics and Statistics, Vol. XLl, febrero de 1959; J. Mincer, Human Capital and Economic Growth", Economic ofEducation Review Vol. 111, No. 3, 1984, Págs. 195 a 205; J. Mincer, "Human Capital and Eamings" en D M Windham (ed.),Economic Dimensions ofEducation. Washington,D.C.: Report ofa Comm'ittee of the National Academy ofEducation, 1979, págs. 1 a 31; G. Psacharopoulos, "Los réditos de la educación ,La Educación: Revista Interamericana de Desarrollo Educativo, Año XXX No. 98, 1985; T. W. Schultz,¡nvestment in Human Capital, New York: The Free Press 1971- T.* W.Schul^, The Economic Valué ofEducation. New York: Columbia University Press, 1963" 1. Sobel, "The Human Capital Revolution in Economic Development: Its Current Históry and Status", Comparative Education Review, Vol. XXll, No. 2,junio de 1978, págs. 278 a 308" y L. D. Webb, "Savings to Society by Investing in Adult Education". Economic and Social Perspectives in Adult Illiteracy, 1977, págs. 52 a 73.

2. Para una discusión de esta hipótesis, véase a los artículos de M. Blaug citados en la nota antenor, ^i como a P B. Doeringer y M. J. Piore, Internal Labor Markets and Manpower Analysis, Lexington, Mass.: D. C. Heath, 1971.

3. Véase el capítulo 4, "Educación, Empleo y Desempleo", en este informe.

4. Ramón J. Cao Gaxcia y Horacio Matos Díaz, Educación Universitaria y Oportunidad Económica en Puerto Rico. Madrid: Editorial Betania, 1988, capítulo 5. rtunidad

Asesoría y Consulta. Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. Notas
'i

Deserción Escolar e Ingreso

5. La tasa de desempleo promedio para los varones en 1990 fue 16.2%, de acuerdo a los datos publicados por el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos de Puerto Rico. Previamente en el estudio se estimó que la tasa de desempleo de los desertores escolares excede, en promedio, la de la población en general en 9.4 puntos porcentuales; así, la tasa estimada de desempleo para los desertores escolares varones es (16.2 + 9.4 =)25.6%. Este estimado es consistente con el valor que resulta de los datos muéstrales utilizados en el estudio.

6. La tasa de desempleo promedio para las mujeres desertoras escolares se estima siguiendo el mismo procedimiento que en el caso de los varones, según se describe en la nota anterior.

7. J. S. Catterall, On the Social Costs of Dropping Out of School. Stanford: Center for Educational Research at Stanford, 1985.

8. Calculado a base de la información en Diseño y Desarrollo de Sistemas, Inc., Programas y Proyectos para Remediar la Deserción Escolar en Puerto Rico: Resumen Ejecutivo, estudio efectuado para el Sistema Universitario Ana G. Méndez, Vicepresidencia de Asuntos Académicos, Proyecto NEXOS, marzo de 1992, Tabla V.

Asesoría y Consulta, Inc.

Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar

Introducción

La relación entre educación e ingreso, analizada en el capítulo anterior, tiene otras manifestaciones sociales que conviene explorar. A mayor sea el ingreso de la persona, mayor será su habilidad para pagar impuestos y, por ende, mayores los ingresos gubernamentales. Un aumento en las recaudaciones fiscales resulta en una combinación de dos resultados: una reducción en las tasas contribuüvas o un aumento en la capacidad del gobierno para proveer servicios públicos'. Ambos efectos son beneficios para la sociedad, que se pierden cuando los estudiantes se convierten en desertores escolares, causando así un costo social.

Otro efecto de un mayor nivel de ingresos, es la disminución en la demanda por servicios de bienestar social. Al aumentar el nivel de ingresos de una persona, se reduce su demanda por servicios de beneficencia pública, lo cual es un beneficiq social. Sin emj^go, en el caso de Puerto Rico, es necesario ser cautelosos al estimar este eLto,pues gran parte de los pagos de asistencia publica se financian a través de transferencias del gobierno federal. Una reducción en la demanda por asistencia pública podría resultar en la combinación de dos efectos: una reducción en el monto de las transferencias federales o en un aumento en el subsidio promedio que reciben los beneficiarios de los programas de asistencia pública. Si no ocurre la reducción en las trasferencias federales, o si la disminución es proporcionalmente menor a la disminución

- en demanda ocasionada por el aumento en los niveles educacionales de la población, es de esperar que prevalezca el segundo efecto, aumentando así el beneficio social de eliminar la deserción escolar.

Este capítulo se dedica a analizar esos efectos esperados de la deserción escolar sobre las finanzas gubernamentales. En primer término se calcula el efecto sobre los ingresos del gobierno central de Puerto Rico, para después evaluar las consecuencias sobre las recaudaciones del gobierno federal. Como esos pagos se transfieren fuera de la isla, escaparían de la actividad •'económica local, por lo que deben deducirse de los beneficios estimados. Después de estimados los efectos sobre los ingresos gubernamentales, estatales y federales, se procederá a evaluar la segunda categoría identificada, es decir, el cambio en la demanda por servicios de bienestar social. Efectos sobre Ingresos Gubernamentales

Para esümar el aumento esperado en ingresos gubernamentales, es necesario comenzar identificando cuáles impuestos se afectaiían por un cambio en la deserción escolar, para después calcular el monto del cambio esperado en las recaudaciones.

Evaluación de Impuestos que Ingresan al Fondo General del Tesoro del ELA

La primera categoría de ingresos gubernamentales a considerar son los que se destinan al Fondo General del Tesoro del Estado. Esa es la principal categoría fiscal del gobierno central

Asesoría y Consulla, Inc.

74 Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar

y los fondos se destinan a propósitos presupuestarios generales. Los ingresos que nutren ese fondo se consideran a continuación.

Contribución sobre la Propiedad: Aunque se podría esperar que al aumentar su nivel de escolaridad, algunos desertores escolares organicen sociedades o corporaciones que paguen contribuciones sobre la propiedad mueble e inmueble, resulta ser muy especulativo hacer supuestos al respecto; por lo que se prefiere adoptar una posición conservadora y suponer que el gobierno no recaudaría ingresos adicionales por este concepto. Respecto a la contribución sobre la propiedad de viviendas, es razonable suponer que ellas disfrutarán de exoneración contributiva, por lo que tampoco se generarían recaudos fiscales por este concepto.

Contribución sobre Ingresos de Individuos: Si aumenta el ingreso ganado de los desertores escolares, al incrementar sus niveles educativos, ese aumento es tributable bajo la contribución sobre ingresos. Puesto que el ingreso adicional tributaría bajo las mismas disposiciones que el anterior; y dado que, aún con el aumento esperado en los ingresos, los -desertores escolares típicos no serían personas de altos ingresos, es razonable suponer que ese ingreso tributaria a la tasa efectiva promedio del impuesto. Esa tasa efectiva, estimada con respecto al Ingreso Personal, fue igual a 4.8% para 1990.^

Contribución sobre Ingresos de Corporaciones y Sociedades: Aunque podría argumentarse que, con mayor escolaridad, algunas personas establecerían sociedades y corporaciones que tributarían, no existe una forma objetiva de calcular el tamaño de ese posible

Asesoría y Consulta, Inc.

JL Ui.
.IT ;j 'JI I -I
Mj
Costos Sociales de la Deserción Escolar en P. R.

conjunto de individuos y el ingreso asociado. Además, se ha visto que el autoempleo tiende a ♦ disminuir a medida que aumenta el nivel de educación. Por estas razones, se prefiere hacer el supuesto conservador de que no habrían incrementos en los recaudos fiscales por concepto de este impuesto.

Contribución sobre Ingresos que No Son Ganados por el Trabajo: En Puerto Rico los ingresos no ganados por el trabajo (tales como, intereses por ahorros, dividendos de acciones y ganancias de capital) tributan bajo disposiciones especiales. Puesto que el efecto de la educación es sobre la productividad del trabajo, se supone que no existe una relación directa . entre ella y los ingresos que no son ganados por el trabajo^ Por ello se supone que el gobierno ■ • no recibirá recaudaciones contributivas adicionales por este concepto.

Contribución sobre Herencias y Donaciones: Se supone que no se generarán ingresos gubernamentales por este concepto, ya que el impuesto aplica solamente a caudales relictos y donativos de montos altos. Puesto que, aún con el aumento en escolaridad, los desertor escolares no pasarían a ser personas de altos ingresos, la aplicación efectiva del impuesto sería marginal, si alguna, en este caso.

Arbitrios: Con el aumento esperado en ingresos, asociado a la mayor escolaridad incrementaría el gasto de consumo de los actuales desertores escolares Ello r^cnu '

"rcsuiiana en un mayor pago de impuestos sobre uso y consumo (arbitrios). H monto del incremento dada 1 estructura del impuesto, depende de los patrones de consumo de estas personas Es razo bl

Asesoría y Consulta, Inc.

76 Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar

suponer que su patrón de consumo sea el mismo al del promedio de la población. Por eso, el aumento en recaudaciones se calcula como el incremento en ingreso, por la efectiva promedio de los arbitrios. Esa tasa efectiva, estimada con respecto al Ingreso Personal, fue 4.6% en 1990".

Licencias y Otros: Esta categoría incluye licencias de vehículos de motor, multas, rentas de lotería, derechos varios, etc.. Es razonable suponer que el ingreso adicional pague al erario a base de la tasa efectiva promedio para la población. En 1990, la tasa efectiva, estimada con respecto al Ingreso Personal fue 1.3%^

Derechos de Aduana: Esto se refiere a los aranceles aduanales que cobra el gobierno federal por importaciones de países extranjeros a Puerto Rico, y devuelve los recaudos al gobierno estatal. Lo que tribute el ingreso adicional por este concepto depende de los patrones de consumo, por lo que se debe calcular a base de la tasa efectiva promedio del impuesto. Eoa tasa, respecto al Ingreso Personal, se calcula en 0.4% para 1990®.

Arbitrios Federales: Se refiere a los arbitrios federales que cobra el gobierno de los Estados Unidos por mercancías consumidas en Puerto Rico. Las recaudaciones por este concepto se transfieren al gobierno estatal. A base del mismo argumento que en el caso anterior, el aumento en las recaudaciones se calcula a base de la tasa efectiva promedio del impuesto. Ella fue, en 1990, el 1.0% del Ingreso Personal''.

Asesoría y Consulta. Jnc.

R.
Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.

Efectos sobre Recaudos Fiscales al Fondo General

Una vez identificados los impuestos pertinentes, y calculadas las tasas efectivas correspondientes, el aumento esperado en los ingresos fiscales al Fondo General del Tesoro del ELA se estima multiplicando las tasas efectivas por el aumento esperado en ingresos a causa de un incremento en la escolaridad de los desertores escolares. El incremento en ingresos, ajustado por los efectos del aumento esperado en la oferta laboral, se estimó en $2,754.2 millones® En la Tabla 1 se presentan los cálculos del incremento estimado en ingresos gubernamentales a este fondo, utilizando como base al año 1990.

Tabla 1

Aumento Estimado en Ingresos Fiscales al Fondo General del ELA

Se estima entonces que, a causa de la deserción escolar, el Fondo General del Tesoro del ELA dejó de recibir $333.25 millones en 1990. Esa cantidad equivale al 9.1% de los ingresos neto

Asesoría y Consulta, Inc.

78 Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar
Impuesto Tasa Efectiva Aumento en Recaudaciones ($ millones! Contr. s/Ingresos Individuos 4.8% $132.20 Arbitrios 4.6 126.69 Licencias y otros 1.3 35.80 Derechos de aduana 0.4 11.02 Arbitrios Federales 1.0 27.54 Total $333.25

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P. R. recibidos por el Fondo General en ese año.

AUMENTO ESPERADO EN INGRESOS FISCALES FONDO GENERAL DEL ELA: 1990 Contr.

Diagrama 1

Ingresos a Fondos Especiales del Tesoro

Además de los ingresos que se recaudan para el Fondo General del ELA, el gobierno recauda otros ingresos destínados a fondos especiales. Algunos de eUos se destinan a propósitos de profesiones o colegios, para seguros empresariales y programas de estabilización de precios u otros subsidios a empresas; por lo que no son de relevancia para esta investigación. Tampoco se toman en consideración los ingresos de empresas estatales, ya que esas rentas gubernamentales son parte de los gastos de consumo de las personas. Otros fondos especiales se destinan al fmanciamiento de agencias o servicios púbHcos(por ejemplo, arbitrio a apuestas de hipódromo y máquinas tragamonedas para la educación universitaria, y.arbitrio sobre bebidas Asesoría y Consulta, Inc.

M/Ing.-lni. 3J.TvC <132.2
38.e>! <12£.7
Arbitrios Fcd. 8.3X y tzr.s Bsr. Aduuis 3.3>! <11.8
10.7:< <35.8
Arbitrios
/
Licsnciss
Total: $333.25 millones

carbonatadas para servicios de salud pública) y para sistemas estatales de seguridad social (por ejemplo, Fondo del Seguro del Estado, Seguro por Desempleo estatal y Seguro Choferil). Estas dos últimas categorías representan recaudos fiscales del gobierno de Puerto Rico, que se utilizan para proveer servicios gubernamentales, por lo que se incluyen sus estimados como parte de los ingresos que el gobierno deja de recibir a causa de la deserción escolar.

Fondos para Financiar Servicios Públicos: A base de la información estadística en el Departamento de Hacienda®, se estima que la tasa efectiva promedio para los fondos especiales que se utilizan para financiar servicios públicos es 0.7%. Esa tasa se estima para el año 1990 con respecto al Ingreso Personal. Resulta entonces que la pérdida de ingresos fiscales por este concepto, atribuible a la deserción escolar, es $20.06 millones.

Sistemas Estatales de Seguridad Social: Los sistemas estatales de seguridad social ■ incluyen principalmente al Fondo del Seguro del Estado,Seguro por Desempleo Estatal y Seguro Choferil. No se toman en consideración los fondos gubernamentales de retiro y de pensión porque sus beneficios se determinan actuarialmente, de forma que el valor presente de su beneficios es igual al de las aportaciones, funcionando como sistemas privados de pensione Bajo el mismo criterio, tampoco se incluyen las aportaciones a la Autoridad de Compensacio por Accidentes de Automóvil. Las aportaciones a esos sistemas de seguridad social se basan nóminas, por lo que la tasa efectiva promedio se calcula a base del pago de compensacio al trabajo en Puerto Rico en 1990. Se estima'" que la pérdida de ingresos gubemamentale Asesoría y Consulta, Inc.

Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar
|l

COSTOS Sociales de la Deserción Escolar en P. R.

esta categoría, atribuible a la deserción escolar es $157.0 millones.

Efectos Estimados en Ingresos Gubernamentales

El total de la pérdida en ingresos del gobierno central de Puerto Rico, atribuible a la deserción escolar, para el año 1990; se obtiene sumando los valores previamente calculados.

Esa agregación se presenta en la Tabla 2.

Tabla 2

Efectos Estimados sobre Ingresos del Gobierno de P.R.

Atribuibles a la Deserción Escolar

Año 1990

Se observa que el gobierno del ELA de Puerto Rico dejó de recibir, en 1990, un total estimado de $510.4 millones, atribuibles a la pérdida en productividad causada por la deserción escolar existente. Ese monto contrasta con los $64.5 millones que se estiman como el gasto gubernamental en actividades para prevenir o remediar la deserción escolar".

Asesoría y Consulta, Inc.

gj
Fondo General del ELA 1^ $333.3 Fondos Especiales para Servicios Públicos 20.1 Sistemas de Seguridad Social 157.0 Total $510.4 '1

EFECTOS ESTIMADOS SOBRE INGRESOS DEL GOBIERNO DE PUERTO RICO ATRIBUIRLES A LA DESERCION ESCOLAR

Diagrama 2

Aumentos en Transferencias al Exterior

Por otra parte, al aumentar el ingreso de los desertores escolares actuales, también - aumentarían las aportaciones a sistemas federales de seguridad social. Esos pagos se transfieren al gobierno federal, por lo que salen de la economía local. Consecuentemente, es necesario descontarlos de los beneficios que derivaría la economía puertorriqueña de la eliminación de la deserción escolar.

En el caso de los empleados, al aumentar los ingresos aumentan sus aportaciones a Medicare y al Sistema del Seguro Social. El incremento en esas aportaciones sería igual al aumento en los sueldos y salarios, multiplicado por la tasa de las aportaciones a estos sistemas

La pérdida ajustada en ingresos laborales, se calculó en $2,754.2 millonea «t en ei capitulo

Asesoría y Consulta, Jnc.

Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar
Fondo Grtl. dtl ELA tS.Sv! «333.3 Fdo. Fsp. S»rv, Publ 3.ÍX «20.1 Sirt. Scauridaid Soc. 38.ex «157.8 Total: $510.4 millones

anterior. Al multiplicar ese valor por la tasa efectiva promedio calculada para estas aportaciones'^ se obtiene un valor estimado de $157.0 mülones para este componente de las transferencias al exterior.

Los patronos, por su parte, aumentarían sus aportaciones al seguro federal por desempleo y al Sistema del Seguro Social. Utilizando un procedimiento equivalente al empleado para estimar el cambio en las aportaciones de los empleados'^, se calcula que las transferencias de patronos al gobierno federal, en 1990, habrían aumentado en $179.0 millones.

Así, si en 1990 no hubiera habido deserción escolar, las transferencias de Puerto Rico al gobierno federal habrían aumentado en $336.0 millones. Es claro que esas aportaciones generan derechos ("entitlements") para las personas, que resultarían en incrementos futuros en los beneficios que recibirían los trabajadores del gobierno federal. No se incluyen los aumentos futuros en esas transferencias federales, ya que la valoración se hace para un año específico, 1990. Por eso, los estimados deben interpretarse con precaución, ya que podrían resultar en subestimar los beneficios asociados a controlar la deserción escolar.

Demanda por Servicios de Bienestar Social

Uno de los efectos esperados de un mayor nivel de ingresos, es la disminución en la demanda por servicios de bienestar social, lo cual constituye un beneficio para la sociedad'^

En esta sección del capítulo se presenta un estimado del efecto fiscal de una disminución en la Asesoría y Consulta, Inc.

en P. R. g2
Costos Sociales de la Deserción Escolar

demanda por servicios de bienestar social, resultante de una reducción en el número de ' desertores escolares. Se debe advertir que es necesario considerar varios factores al hacer tal evaluación. En primer lugar, se debe tomar en cuenta, como se señaló anteriormente, que, en el caso de Puerto Rico, gran parte de los pagos de bienestar social se financian a través de aportaciones del gobierno federal. Por ello es necesario analizar la naturaleza y disposiciones que rigen los diversos programas, bajo los cuales se reciben esas aportaciones. Lo anterior es pertinente, tanto para las transferencias federales que van directamente a las personas, como aquellas que se canalizan a través de las distintas agencias del gobierno de Puerto Rico. En este '* capítulo también se estimará el efecto que tendría sobre el presupuesto del Departamento de Educación la eliminación de la deserción escolar.

Aportaciones del Gobierno Federal

Las aportaciones del gobierno federal constituyen una porción significativa del monto total de pagos por servicios de bienestar social en Puerto Rico. Los programas que autorizan esos pagos se rigen por leyes o disposiciones del Congreso de los Estados Unidos, o por reglamentación de agencias del gobierno federal. En el caso de aquellos programas en que el monto de las aportaciones depende de la demanda en Puerto Rico, un cambio en el nivel de ingreso tendrá el efecto de alterar la demanda y, en consecuencia, el monto de los fondos que reciba el país. Cuando, por el contrario, las asignaciones de fondos se determinan sin estar Asesoría y Consulta, Inc.

Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar

directamente relacionadas con el nivel de la demanda, el efecto de eUminar la deserción escolar sena modificar la aportación promedio por recipiente, pero no el monto total de las transferencias. Así que los efectos variarán entre los programas, dependiendo de las reglas de asignación que los rijan.

Aportaciones Federales a las Personas

Las transferencias federales a las personas se clasifican en devengadas y otorgadas'^ En el pnmer caso se trata de aportaciones en las que media un pago previo o servicio prestado por ciudadanos residentes en Puerto Rico al gobierno federal, por razón de los cuales la persona adquiere un derecho a recibir esa aportación gubernamental. Las transferencias otorgadas son aquellas que se reciben sin que medie ningún pago previo o servicio por parte de los beneficiarios.

Previamente, en el capítulo, se estimó en $336.0 millones los aumentos en pagos o transferencias de Puerto Rico al gobierno federal para 1990, de haberse eliminado la deserción escolar. Ese aumento ocurriría por concepto de aportaciones a programas de seguridad social (Seguro Social, Medicare, seguro federal por desempleo), para los cuales los trabajadores y sus patronos hacen aportaciones mandadas por ley. Ellas generan derechos a las personas, que implican aumentos en los beneficios o pagos que éstas habrán de recibir en el futuro. Lo anterior debe tomarse en consideración, aún cuando no se incluyan esos aumentos futuros en los Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P. R.
f) Di

cómputos del estudio, toda vez que ellos ocurrirán en el futuro y los estimados se basan para el -.año 1990.

Los beneficios a veteranos son otros derechos adquiridos por los recipientes, esta vez por

• servicios prestados en el ejército. Esta partida es importante por su monto, pero no está sujeta a fluctuar con cambios en el nivel de ingreso, por lo que no se afectaría por un cambio en la tasa de deserción escolar.

Los dos renglones principales en las transferencias federales otorgadas directamente a las

•, personas son los programas de asistencia nutricional(Programa PAN)y el de becas a estudiantes

^ universitarios (Pell Grants). El efecto estimado de una reducción en la deserción escolar sobre

.-los beneficios en becas estudiantiles se evalúa en otro capítulo de este informe^®.

Respecto a los fondos por concepto del programa de asistencia nutricional, los mismos no se verían afectados por un cambio en el nivel del ingreso. Esos fondos se asignan en ^ cantidades predeterminadas por el Congreso de los Estados Unidos, sin que se modifique su .. monto por razón del número de solicitantes en un momento dado. Un aumento en los niveles de ingreso, que reduzca el número de familias que cualifiquen para el programa, ocasionará un cambio (aumento) en los pagos promedios por familia, pero no altera el monto total de la , transferencia. Lo mismo aplica a las aportaciones del programa de ayuda a la vivienda .(subsidios de renta), por ser éste también uno donde las cantidades asignadas están determinadas a nivel federal.

Asesoría y Consulta, Inc.

Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar

Aportaciones Federales al Gobierno Estatal

Estimar las consecuencias fiscales de una reducción en la demanda por servicios de bienestar social en las aportaciones federales a las agencias del gobierno estatal es sumamente difícil. La dificultad estriba tanto en la multiplicidad de programas específicos, como en el hecho de que muchos de esos fondos se reciben a través de propuestas, donde los criterios de otorgación son múltiples y no dependen únicamente de los niveles de ingreso en la población. En 1990, el sector público puertorriqueño recibió $1,395.5 millones en transferencias del gobierno federal'^. De ese total, se asignaron $946.7 millones al gobierno central, que se originaron por más de un centenar de programas federales y se distribuyeron entre prácticamente todas las agencias. Esas aportaciones se recibieron por concepto de asignaciones específicas a la isla o por medio de propuestas.

Las agencias que recibieron más fondos federales fueron los Departamentos de Educación, Salud y Servicios Sociales. En el caso del Departamento de Educación, el 30.3% de su presupuesto para gastos de funcionamiento provino de transferencias federales. En el Departamento de Salud la proporción fue 32.6% y en el Departamento de Servicios Sociales fue 59.2%".

Estimar las consecuencias fiscales de un aumento en el nivel de ingreso en la población, como consecuencia de una disminución en la deserción escolar, presenta entonces serias dificultades. Hay que considerar, en primer lugar, que un gran número de transferencias que Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P. R.

se reciben son predeterminadas a nivel federal, o son fondos por los que Puerto Rico compite a través de propuestas. El monto de los mismos no depende directamente de la demanda por esos servicios. Sin embargo, no debe perderse de vista que la demanda por esos servicios o las necesidades de la población sirven como elementos para justificar las peticiones de fondos o como criterios que utilizan las agencias federales para designar el monto de las aportaciones En ese sentido, y aún cuando no se puede calcular el efecto para un año específico, resulta razonable suponer que cambios en los niveles de ingresos han de afectar eventualmente algunas de tales aportaciones federales.

Otro factor que debe considerarse es la imposibilidad de usos altemos para esos fondos federales. Uno de los beneficios de una disminución en la demanda por servicios de bienestar social, estriba en que los recursos económicos que se ahorren por ese concepto podrían ser destinados a otras áreas de desarrollo económico y social. En el caso de los fondos federales el gobierno de Puerto Rico no tiene poder discrecional para modificar el uso de los mismos Muchas asignaciones federales también requieren el pareo con fondos locales, lo que a su vez limita el uso discrecional de los recursos del gobierno local.

A pesar de las limitaciones antes señaladas, es posible estimar algunos de los efectos fiscales que provocaría una reducción en la deserción escolar. Resulta particularm pertinente, a los efectos de este estudio, evaluar los efectos sobre el presupuesto para gastos d financiamiento del Departamento de Educación.

Asesoría y Consulta, Inc.

88 Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar

Efectos Fiscales en el Departaniento de Educación

Gastos Operacionales

Una reducción en el numero de desertores escolares aumentará el número de estudiantes activos en el sistema, lo que, a su vez, requeriría un incremento en los recursos económicos disponibles para la agencia. Para 1990, se estimó en 35.3% la tasa de deserción para las personas en edad escolar. En ese año habían 666,260 estudiantes matriculados en el programa regular del Departamento de Educación, a un costo promedio de $287.00 por estudiante^'. De no haber existido deserción escolar, el número de estudiantes se elevaría a 1,029,768, lo que representa un aumento de 363,508 alumnos sobre la matrícula atendida. Al multiplicar el número de estudiantes adicionales (363,508) por el gasto promedio ($827.00), se obtiene que serían necesarios $300.6 millones adicionales en el programa regular. Aplicando el mismo método, resulta que para el programa vocacional sería necesario un aumento en gastos de $5.3 millones. Por su parte, los programas de servicios a estudiantes y de recursos a la docencia requerirían aumentos presupuestarios de $34.6 y $0.2 millones, respectivamente. El monto total de los incrementos estimados en gastos es $340.7 millones.

De no existir desertores escolares, el presupuesto para el programa de extensión educativa disminuiría en $5.8 millones. Al restar esta última cantidad a los $340.7 millones estimados en aumentos, se obtiene un incremento neto de $334.9 millones en los gastos estimados. Esa cifra Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P. R.

yU CONSECUENCIAS FISCALES DE LA DESEROÓN ESCOLAR

refleja el aumento presupuestano adicional que sería necesario para ofrecer los servicios educativos, a los niveles registrados de gasto promedio.

Tabla Resumen

Efectos Fiscales en el Departamento de Educación, 1990 (millones de dólares)

Efecto sobre Transferencias Federales al Depto. de Educación

Otra área que es pertinente evaluar es la de las transferencias federales que recibe el Departamento de Educación. En esta sección se presentan estimados delimpacto dela reducción de la deserción escolar sobre algunas partidas de aportaciones federales.

Los fondos federales que se reciben por concepto del programa de comedores escolares se alterarán por un cambio en el número de participantes. Los fondos que se reciben por e t programa dependen del número de estudiantes que demanden el servicio. De reducirse

Asesoría y Consulta, Inc.

Area Aumento en Gastos Reducción en Gasto Programa Regular $300.6 Programa Vocacional 5.3 Servicios a Estudiantes 34.6 Recursos a la Docencia 0.2 Extensión Educativa -$5.8 Total $340.7 -$5.8 Aumento Neto $334.9 _J

eliminarse la deserción escolar, aumenta el número de estudiantes activos, así como el que habría de participar en el programa.

En 1990 el gobierno federal aportó $116.8 millones para comedores escolares. Ese año recibieron el servicio (desayuno y almuerzo) unos 692,315 estudiantes, para una aportación promedio de $168.75. De eliminarse la deserción escolar, habrían participado en el programa unos 377,725 estudiantes adicionales. Al multiplicar ese incremento en participantes por su costo promedio anual ($168.75)resulta un estimado de $63.7 millones adicionales en 1990, por concepto de aportaciones federales al programa de comedores escolares. Otras transferencias dentro del programa de servicios a estudiantes experimentarían un aumento de $8.7 millones; lo que totaliza $72.4 millones adicionales en transferencias federales para este programa del Departamento de Educación.

En el programa de extensión educativa se reducirían las aportaciones del gobierno federal en $7.2 millones. Al restar esa cifra de los $72.4 millones estimados en aumentos, se obtiene un incremento neto de $65.2 millones en transferencias federales.

Otras Consecuencias Fiscales

Otras agencias en las cuales se puede esperar un efecto fiscal como resultado del aumento en ingresos en la población que provocaría una disminución en la deserción escolar, son los Departamentos de Servicios Sociales y de Salud.

Asesoría y Consulta. Jnc.

COSTOS Sociales de la Deserción Escolar en P. R.

El Departamento de Servicios Sociales tiene como una de sus responsabilidades evaluar y canalizar ayuda económica directa (en efectivo) e indirecta (a través de subsidios y artículos) a las familias con mayores necesidades sociales (de menor ingreso). Esos servicios se brindan a través del programa de asistencia económica. En 1990 aportó ayuda a unos 260 808 solicitantes (personas y familias). El programa contó con un presupuesto de $107.4 millones de los cuales $77.6 millones fueron aportaciones federales y $29.8 millones provinieron de fondos estatales.

Aunque resulta sumamente difícil efectuar un estimado monetario del efecto fiscal oue tendría una reducción en la demanda por esos servicios, vale la pena destacar que un aumento en el nivel de ingreso de la población, resultante de eliminar la deserción escolar, disminuiría el número de personas que demandarían tales servicios. Ello resultaría en ayudas mayores a las personas necesitadas que permanezcan, o el ahorro de recursos que podrían ser reasignados a otras áreas.

Los servicios de salud pública, que el estado brinda a través del Departamento de Salud es otra de las áreas que habrán de verse afectadas por un aumento en los niveles de ingreso de la población, puesto que la demanda por servicios de salud pública tiende a disminuir a medida que aumenta el nivel de ingreso y de escolaridad en las personas. Aún cuando resulta muy difícU hacer una cuantificación específica de ese efecto, es pertinente considerar el asunto aunque sea en términos generales.

Asesoría y Consulta, Inc.

92 Consecuencias Fiscales de la Deseroón Escolar

La literatura presenta evidencia estableciendo una relación positiva entre el nivel de educación de la persona y el de su salud y la de sus hijos. Esta relación disminuye la demanda por servicios de salud pública, puesto que mientras mejor sea el estado de salud de una persona y su familia, menor será el uso que se haga de los servicios de salud pública. Además, a medida que aumenta el nivel educativo de la persona, incrementa la probabilidad de que esté empleada, por lo que mayor también será la probabilidad de que participe en un programa de seguro de salud en su centro de trabajo. Un aumento en el número de personas suscritas a seguros médicos privados tiene el efecto de disminuir la demanda por los servicios de salud que brinda el gobierno^". ING-nSC.DES

Asesoría y Consulta, Inc.

CusTos Sociales de la Deseroón Escolar en P. R.

1. Estos efectos son tipo de extemalidades denominadas "políticas" por Tullock. Para una exposición original de esta clase de situaciones y sus implicaciones económicas, refiérase a Gordon Tullock, Prívate Wants, Public Means. New York: Basic Books, 1970; cap. 4.

2. Estimada a base de la información en Junta de Planificación de P.R., Informe Económico al Gobernador 1991, Apéndice Estadístico. San Juan, 1992.

3. Aunque se ha argumentado que a medida que aumenta el nivel educativo de la persona mejora su habilidad para obtener mayor rendimiento de sus ahorros e inversiones. Sobre este asunto, véase a L. C. Salomón, "The Relation Between Schooling and Savings Behavior" en F. T. Juster, ed., Education, Income and Human Behavior. New York: McGraw-Hill 1975 págs. 253 a 294. Véase también, en este informe, el capítulo 11: "Otros Beneficios Sociales de la Educación".

4. Calculado a base de la información en la Junta de Planificación de Puerto Rico, op. cit

5. Ibid.

6. Ibid.

1. Ibid.

8. Véase el capítulo 5 de este informe, titulado "Deserción Escolar e Ingreso" para un descripción de los procedimientos utilizados para estimar la pérdida en ingreso atribuible deserción escolar en Puerto Rico. ^

9. Departamento de Hacienda de P.R., Oficina de Asuntos Económicos y Financieros Jt Periódicas al Tesoro. San Juan, 1991. '

Asesoría y Consulta, Inc.

Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P. R.

10. Estimado a base de la información estadística en Junta de Planificación de P.R., op. cit.

11. Diseño y Desarrollo de Sistemas, Inc., Programas y Proyectos para Remediar la Deserción Escolar en Puerto Rico:Resumen Ejecutivo, estudio efectuado para el Sistema Universitario Ana G. Méndez, Vicepresidencia de Asuntos Académicos, Proyecto NEXOS, marzo de 1992.

12. Calculada a base de las compensaciones pagadas al trabajo en 1990, de acuerdo a la información estadística publicada en Junta de Planificación de P.R., op. cit.

13. Ibid.

14. Se considera que una disminución en la demanda por servicios de bienestar público porque permite el ahorro de recursos económicos, que pueden ser transferidos a otras áreas socialmente deseables.

15. Para más detalles sobre este asunto, véase ELA de Puerto Rico, Junta de Planificación, Informe Económico al Gobernador, 1991, cap. VIII.

16. Véase el capítulo 9, Deserción escolar y demanda por educación universitaria.

17. Junta de Planificación, op. cit.

18. Esas tres agencias recibieron un total de $745.5 millones en transferencias federales, lo que representa el 78.7% del total de transferencias federales al gobierno central.

19. ELA de PR, Oficina del Gobernador, Oficina de Presupuesto y Gerencia, Informe de Presupuesto. Presupuesto para el Año Fiscal 1990-91, Tomo II.

Asesoría y Consulta, Inc.

20. También podría indicarse que las parejas con mayores niveles de educación tienden a tener en promedio, menos hijos que las parejas de menor escolaridad. Una disminución en el número de hijos también tiene el efecto de disminuir la demanda por servicios de salud en la población

Asesoría y Consulta, Inc.

Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar

Deserción Escolar y Criminalidad

Introducción

Uno de los factores identificados en la literatura como relacionado con una mayor escolaridad es la disminución en la tasa de criminalidad entre las personas con mayor educación. Una reducción en los niveles de criminalidad resulta entonces en un menor costo social como consecuencia de la disminución directa en el número de delitos, además de que se reducen los costos gubernamentales asociados al sistema de justicia criminal. Para evaluar este aspecto se hace necesario comenzar a establecer la relación entre escolaridad y la probabilidad de cometer delitos.

Educación y Criminalidad

La incidencia criminal es uno de los problemas más graves de Puerto Rico. Así es percibido tanto por la ciudadanía como por el Estado. La comisión de delitos ocasiona crecientes costos económicos,emocionales y sociales. La criminalidad es un fenómeno complejo cuyas causas están asociadas a todo un conjunto de variables sociales.

La abundante literatura sobre este tema coincide en destacar a la educación como una de las variables asociadas con el comportamiento delictivo. Se señala que las tasas de criminalidad tienden a disminuir entre las personas con mayor nivel de educación\ Un aumento en el nivel

educativo es de esperarse que genere beneficios sociales por la vía de una reducción en la ■ cnmin^dad. En esa misma dirección diversos estudios han señalado la relación entre la r deserción escolar y la actividad delictiva, particularmente la delincuencia juvenil^

En el más reciente estudio sobre la criminalidad realizado en Puerto Rico, al señalar los factores asociados a la misma se apunta; "Se enumeran entre estas causas: las altas tasas de natalidad y de población joven, movimiento migratorio desde las zonas rurales a las zonas urbanas y a otros países, la inmigración, un crecimiento económico desbalanceado, altos índices

• de pobreza, pobres niveles de salud y vivienda, baja escolaridad, altos niveles de desempleo, consumo exagerado y vicioso, uso desmedido de drogas y alcohol, tráfico ilegal de armas de . fuego, relajamiento de los valores éticos, morales y religiosos, debilitamiento de los valores de la familia y resquebrajamiento de las instituciones de control social como la Escuela la Iglesia y la Autoridad Pública."^

Como uno de los factores asociados a la criminalidad se destaca a la Escuela en sus dos funciones básicas: como la principal institución responsable de proveer unas destrezas básicas y conocimientos a los individuos y como institución de control social

Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar y Criminalidad

Función Social de la Escuela

El sistema educativo cumple dos funciones básicas. En primer lugar, la educación tiene como objetivo el proveer a los individuos unas destrezas y conocimientos que lo preparen para incorporarse como un ente productivo a la sociedad. A través del proceso educativo se desarrolla el potencial del recurso humano de un país.

Por otro lado, la Escuela tiene una responsabilidad social mucho más amplia. Es a su vez una institución de control "donde se prepara al individuo para su adaptación armoniosa y efectiva a la vida social de un país."^ Como agencia de control "contribuye a conservar y mantener cierta estabilidad y orden en el funcionamiento de la sociedad" en la medida que "tiende a moldear la personalidad individual de acuerdo a las normas sociales comúnmente aceptadas por los miembros de la sociedad."^ Desde esa perspiectiva se ha señalado que la Escuela constituye la institución socializante de mayor congruencia con el sistema de valores y expectativas de nuestra sociedad (Sánchez Vilella, 1984; González Ramos, 1984; Cartagena, 1985). El abandono de la escuela implica para el joven una separación del sistema educativo-socializante durante los años de formación.

Asesoría y Consulta, Inc.

Escolar en P.R.
Costos Sociales de la Deserción

. Deserción Escolar, Delincuencia Juvenil y Criminalidad

Al evaluar la correlación existente entre el nivel de escolaridad y la criminalidad es necesario considerar la relación entre la deserción escolar y la delincuenciajuvenil. Los estudios realizados tanto en Puerto Rico como en los Estados Unidos son consistentes en señalar la relación entre ambos fenómenos. En los trabajos de Franco Ferracuti para el Centro de Investigaciones Sociales de la Universidad de Puerto Rico se señala que la deserción escolar resulta ser el factor más significativo para predecir la conducta delictiva en los menores.® Por su parte la Dra. Mercedes Otero'', vincula los procesos de delincuencia, deserción escolar y las i» condiciones familiares.

Otros estudios son también consistentes en esos señalamientos. El Dr. Rodríguez Bou* encontró una mayor incidencia de casos de delincuencia entre jóvenes desertores. Como parte de sus hallazgos el autor destaca que el 30% de los casos intervenidos por la Policía habían .• ocurrido después del abandono de la Escuela. El grupo de desertores había tenido más . problemas con la Policía(10%)que los no desertores (1%)'. Como parte de sus conclusiones el Dr. Rodríguez Bou señaló que existía una relación entre la deserción del joven y el nivel de escolaridad de los padres.

El estudio de la Dra. Dora Nevárez'° aporta evidencia sobre la relación que guarda l nivel de escolaridad con la reincidencia de los jóvenes transgresores y el tránsito i criminalidad adulta. Señala la autora que losjóvenes que asistían a las escuelas públicas y los Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar y Criminaudad
i I ri 1 I

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

que no estaban en la escuela reincidían más que aquellos de escuelas privadas y los que estaban asistiendo a la escuela. Señala también que el grado más alto cursado al momento de cometerse la falta variaba inversamente con la frecuencia de delincuencia del ofensor(a más faltas menos años de escuela cursados). Este último señalamiento resulta ser muy importante toda vez que en un estudio postenor donde la doctora Nevárez dio seguimiento al cohorte de delincuentes nacidos en 1970, encontró que el número de jóvenes transgresores que hacen la transición a la criminalidad adulta aumenta conforme al número de intervenciones previas cuando era menor. Con relación a la edad, el citado estudio revela que los delincuentes más activos son aquellos que comenzaron su actividad delictiva entre los 13 y 15 años. Se señala también que los delincuentes juveniles que se iniciaron en la actividad delictiva entre los 15 y los 16 años fueron los que tuvieron mayor número de arrestos como adultos por faltas graves. En ambos casos se trata de jóvenes en edad escolar. Nótese que las edades donde en mayor medida se inicia la actividad delictiva de los jóvenes(14 a 16 años) son aquellas donde éstos deben estar cursando los grados (séptimo a décimo) en los que a su vez se da una mayor incidencia de

Asesoría y Consulta, Inc.

jq2

Escolaridad e Incidencia Delictiva en los Menores

Las estadísticas más recientes de la administración de tribunales indican que para el año fiscal 1989-90, una cantidad de 1,882 (40.6%) del total de 4,634 menores contra quienes se radicaron querellas no asistían a la escuela. De ese total, 1,593(84.6%)tampoco trabajaban

ASISTENCIA A LA ESCUELA Y AL TRABAJO DE LOS MENORES CONTRA QUIENES SE PRESENTARON QUERELLAS (Año 1989-1990)

Asistencia a la Escuela y Trabajo

Asistfan a la Escuela

Trabajan

No trabajan

No asistían a la Escuela

Trabajan

No trabajan

Sin información

Fuente de información:

Información Anual de la Rama Judicial, 1989-1990, Tribunal General de Justicia.

Con relación a las edades de los jóvenes intervenidos y que no asistían a la ese 1 encontramos que el 55.5% tenía entre 14 y 16 años. Estos datos son consistentes con lo resultados del estudio de la doctora Nevárez citado anteriormente.

Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción
y
Escolar
Criminalidad
Cantidad 2.720 Por ciento 2,479 1.882 1.593 4.634

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Tabla 11

EDAD DE LOS MENORES CONTRA QUIENES SE RADICARON QUERELLAS

Y QUE NO ASISTÍAN A LA ESCUELA

Cantidad Por ciento menos de 10 anos

18o más

'Casos que cometieron faltas a los 17 años pero la querella se presentó cuando habían cumplido 18 años o más.

Fuente de información:

Información Anual de la Rama Judicial, 1989-1990.

Tribunal General de Justicia.

Aunque los datos recopilados por la Administración de Tribunales no recogen información sobre el nivel de escolaridad de los jóvenes transgresores, podemos obtener un indicador de esa variable al examinar la información disponible sobre losjóvenes internados bajo custodia.

Asesoría y Consulta, Inc.

100.0
Total

La Secretaría Auxiliar de Centros de Tratamiento Social del Departamento de Servicios Sociales llevó a cabo un estudio del perfil socio-económico de los menores ingresados bajo custodia en el año fiscal 1984-1985. Con relación al status académico y ocupacional, este • estudio señala: "Dos de cada tres (65.5%) menores institucionalizados no asistían a la escuela

Esto a pesar de que el 95.6% de la población tenía de 11 a 18 años de edad, lo que les ubica en edades escolares." En términos de participación en la fuerza de trabajo se encontró que de aquellos de 16 años o más, sólo el 2.8 estaban ocupados en actividades de producción ' económica.

Con relación al nivel de escolaridad el estudio señala que la mediana de escolaridad era ' de 6.1 grado. Se indica también que el 91.5% de los menores no habían rebasado sus estudios primarios, esto es, que no habían pasado del noveno grado. Al examinar la escolaridad en relación con las edades de los jóvenes se encontró una deficiencia o retraso escolar de aproximadamente cuatro años. El 96% de los menores tenían 13 años o más por lo que de no haber fracasado en alguna ocasión, deberían haber completado la escuela elemental Sin embargo, el 50% de éstos no habían pasado de ese nivel de escolaridad.

Para el año de 1990 los datos de la Administración de Instituciones Juveniles^' reflejan que el 71.7% de losjóvenes no asistían a la escuela al momento de su reclusión. Con relación al nivel promedio de escolaridad ésta había aumentado al séptimo grado.

Asesoría y Consulta, Inc.

104 Deserción Escolar y Criminalidad

Escolaridad e Incidencia Criminal en los Adultos

Desafortunadamente no se dispone de información acerca de los niveles de escolaridad de los adultos convictos por delitos en Puerto Rico. La Rama Judicial no recopila esa información. Por esa razón habremos de utilizar en esta parte del estudio las estadísticas de la Administración de Corrección.'"* Estos datos corresponden a la población de convictos que cumplen condenas en las instituciones penales.

Para junio 30 de 1991 había un total de 7,232 confinados sentenciados (no se incluyen a los confinados sumariados) en el país. La relación de estos por nivel de escolaridad se presenta en la tabla que aparece en la próxima página.

Del total de 7,106 confinados sobre los que se tiene información, una cantidad de 4,929 (69.4%) tenía menos de doce años de escolaridad. El 23.7% (1,683) había estudiado hasta el duodécimo grado (habían completado su educación secundaria) y unos 494(7%)tenían alguna educación superior. La mediana de escolaridad para esta población resulta ser de noveno grado.

Asesoría y Consulta, Inc.

P.R.
Costos Sociales de la Deserción Escolar en
CONFINADOS SENTENCIADOS POR GRADO DE ESCOLARIDAD (Al 30 de junio de 1991) Grado de escolaridad Cantidad de confinados 0 119 1 103 2 110 3 188 4 263 5 242 6 433 8 9 10 11 12 13 14 15 16 16 o más No informa 684 611 967 548 661 1,683 250 135 57 51 1 Asesoría y Consulta, Inc.
Deserción Escolar y Criminalidad Tabla ni

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Tabla ni

CONFINADOS SENTENCIADOS POR GRADO DE ESCOLARIDAD

(Al 30 de junio de 1991)

: Grado de escolaridad

Fuente de información:

Administración de Corrección, Oficina de Planificación. Informe Estadístico Anual de las Instituciones Penales. Al 30 de junio de 1991.

En cuanto a la distribución de los confinados por edades, ellas se presenta en la siguiente

Tabla IV

CONFINADOS SENTENCIADOS POR EDAD

(AL 30 de junio de 1991)

Edad

Cantidad de confinados

Asesoría y Consulta, Inc.

Total que informa Total Cantidad de confinados 7,106 7,232

Fuente de Información:

Administración de Corrección, Oficina de Planificación.

Informe Estadístico Anual de las Instituciones Penales.

Al 30 de junio de I99I.

La edad mediana de los convictos confinados es de 27.9 años. AI compararar las edades de éstos con el nivel de escolaridad, se encuentra que mientras el 98.5 por ciento tiene 19 años

Asesoría y Consulta, Inc,

Escolar y Criminalidad
Edad Cantidad de confinados 24 524 25-29 1984 30-34 1290 35-39 749 40-44 423 45-49 255 50-54 151 55-59 51 60-64 25 65-69 17 70 0 más 13 7,232
Deserción
Tabla IV CONFINADOS SENTENCIADOS POR EDAD (AL 30 de junio de I99I)

o más, solamente el 30.5 por ciento ha alcanzado o superado doce años de escolaridad. Los

4,948 confinados mayores de 18 años que no han completado su educación secundaria representan el 69.4 por ciento de esa población. Por otro lado, la escolaridad mediana de esta población, 9no. grado, resulta ser significativamente más baja que la de la fuerza laboral activa con empleo (12.8 años).

Asesoría y Consulta, Jnc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Resumen y Conclusiones

La literatura señala que la tasa de criminalidad tiende a disminuir entre las personas con ' mayor educación. Una reducción en los niveles de crímenes resulta en un menor costo social, como consecuencia de la disminución directa en el número de delitos, además de que se reducen los gastos gubernamentales asociados al sistema de justicia criminal. Por eso es importante evaluar la existencia de tal relación, entre educación y criminalidad, en Puerto Rico.

En este capítulo se presentó una revisión de estudios efectuados en la Isla acerca del tema de la criminalidad. Al examinar esas investigaciones se encuentra que, en efecto, en Puerto ^ Rico también parece existir una relación inversa entre el nivel de escolaridad del individuo y la probabilidad de que incurra en actos delictivos. Posteriormente, en el capítulo, se examinaron estadísticas gubernamentales referentes a la incidencia criminal de menores y adultos. Las estadísticas evaluadas también resultan ser consistentes con el argumento de que los niveles de - criminalidad tienden a disminuir a medida que aumenta la escolaridad en las personas.

Una vez se establece la relación antes indicada, es pertinente efectuar un estimado del costo social de la criminalidad asociado a la deserción escolar. Ese es el tema del próximo capítulo.

des-crim.des

Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar y Criminalidad

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. Notas

1 Véase, por ejemplo, a R. G. Spiegleman, "A Cost/Benefit Model to Evalúate Educational Vjogrzms Socio-Ecommic Planning Sciences, Yol. I, 1968, págs. 443 a 460; L. D. Webb Savings to Society by Investing in Adult Education",Economic and SocialPerspectives inAdult

SS'r t ^ Social Costs ofDropping Out ofSchool Stanford. Center for Educational Research at Stanford, 1985. '

2. Sobre este p^cular, el lector puede referirse, entre otros, a los siguientes trabajos- I

FacultaTdí^ fÜ' Investigaciones Pedagógicas of iSñ V Piedras, PubHcaciones Pedagógicas, SerieH No A' ^n ^tinoz y M. E. Wagfans, con la colaboración de P. E. Tracy'y S a Personas Nacidas en 1970. Sometido LviembT de F l Problemas de Incidencia Criminal, Í/Tn 7 ¿ Petracuü, S. Dimtz y E. Acosta de Brenes, Delinguenís and ausniHn'riT r"^ T h Culture, Ohio: Ohio State University Press (con el Piedras), 1975; Comité para el IQrTft A^P Estrategias para Combatir el Crimen,San Juan: Infn,l77P Fijf T° tle Trabajo Multidisciplinario para Combatirla CriminaHdad, Informe Final, San Juan: abril de 1992.

op^u" Trabajo Multidisciplinario para Combatir la Criminalidad,

4. Comisión para el Desarrollo Económico de Puerto Rico, op. cit.

5. E. H. Stullken, The School and the Delinquency Problem, Houghton Mifflin, 1959.

l'fi- ^P; también a P. Muñoz Amato, Cambio Cultural, Administración McM Delincuencia. Ponencia para la Conferencia Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar y Criminalidad

7. M. Otero, Estudio Sociológico de la Deserción Escolar en Puerto Rico, San Juan: Centro de Investigaciones Sociales, UPR Río Piedras, 1970.

8. I. Rodríguez Bow, op. cit.

9.En esta investigación se examinan las características delos desertores escolares al compararlas con un grupo de control de jóvenes no desertores.

10. D. Nevárez Muñoz, et. al., op. cit.

11. Departamento de Instrucción Pública, Area de Planificación y Desarrollo Educativo Estudio de los Jóvenes que Abandonan la Escuela en Puerto Rico. San Juan: 1988. Según ese estudio eljoven promedio que abandona la escuela es principalmente uno del séptimo al noveno grado.

12. Departamento de Servicios Sociales, Secretaría Auxiliar de Centros de Tratamiento Social Características Socio-económicas de los Menores Ingresados en los Centros de Tratamiento Social por Haber Cometido Faltas Contra la Ley. San Juan: Año fiscal 1984-1985.

13. Administración de Instituciones Juveniles, Perfil Socio-legal[de la]Menor TransgresorfaJ Cumpliendo Medida Dispositiva en las Instituciones Juveniles; Tendencias de los Ultimos 15 Años. Informe preliminar, San Juan: agosto 1992.

14. Administración de Corrección, Oficina de Planificación. Informe Estadístico Anual d 1 Instituciones Penales al 30 de Junio de 1991. San Juan: abril 1992. ^

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserción Escolar

Introducción

En el capítulo anterior se presentó una revisión de la literatura referente a la relación entre deserción escolar y criminalidad. Aunque se reconoce que la conducta delictiva es un fenómeno multidimensional, que no tiene una causa única, los estudios revisados son unánimes al establecer que a mayor sea el nivel de escolaridad de una persona, ceteris paribus, disminuye la probabilidad de que cometa delitos. Evidencia empírica reciente, que se analizó en ese capítulo, también resulta ser consistente con esa hipótesis.

Esta sección del estudio trata acerca de los costos sociales de la criminalidad que pueden atribuirse al fenómeno de la deserción escolar. Hacer un estimado de tales costos requiere comenzar contestando dos preguntas importantes:(1)¿cuál es la probabilidad de que un desertor escolar incurra en crímenes?, y (2) ¿cuáles son los costos sociales de la criminalidad?. De las respuestas que se le puedan dar a estas dos interrogantes depende el estimado que resulte para los costos sociales de la cnminalidad asociados a la deserción escolar. En las próximas páginas se trata de contestar estos asuntos.

Deserción Escolar y Probabilidad de Crimen

Se puede postular, sin riesgo a equivocación, que en esta sociedad la inmensa mayoría

'■ de las personas son decentes. Esto es cierto, independientemente de si el individuo es o no desertor escolar. La revisión de la literatura, presentada en el capítulo anterior, establece que la deserción escolar está asociada con un aumento en la probabilidad de que una persona cometa un delito. Sin embargo, no se puede establecer una relación determinista de causa y efecto, ya que es posible que existan condiciones que puedan causar conjuntamente deserción escolar y criminalidad, afectando así la probabilidad registrada. Por eso, en este estudio, no se supone

' que la deserción escolar sea condición necesaria ni suficiente para la criminalidad.

Establecida esta aclaración acerca de la interpretación que se le pueda dar a la probabilidad de que una persona sea desertor escolar y cometa delitos, se puede proceder a analizar el tema. Como se indicó antes, la literatura establece que la probabilidad de que una persona cometa un delito aumenta si es desertor escolar; pero la literatura no indica cuál es esa probabilidad, ni la magnitud esperada del cambio en el caso delos desertores escolares. Porello es necesario proceder a aproximar el valor para tal probabilidad, mediante algún procedimiento razonable.

Puestoquenoexisteuncensodedelinfcuentes, niesposibleesperarquealguien sedefina como talen unaencuesta, no sepuedeobtenerunadistribución queasociealosdelincuentescon su nivel de educación. La mejor aproximación disponible es la distribución de los confinado Asesoría y Consulta, Inc,

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserctón Escolar

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

de acuerdo a su escolaridad. En el capítulo anterior se encontró que el 69.36% de los confinados adultos en instituciones penales del país son desertores escolares. Puesto que tal proporción excede a la de los desertores en la población, ella es consistente con la hipótesis de que la probabilidad de cometer un crimen es mayor entre los desertores escolares.

En la Tabla 1 se presenta información estadística adicional, que también parece ser consistente con la hipótesis expresada. La tabla informa la distribución por ocupaciones de la fuerza laboral de Puerto Rico y de los confinados en instituciones penales en la isla en 1990. Las ocupaciones aparecen organizadas en orden descendente de acuerdo al nivel de escolaridad requerido en cada una de ellas. Se observa que la proporción de confinados, con respecto al número de personas en la fuerza laboral con la misma categoría ocupacional, tiende a aumentar a medida que disminuye el nivel de escolaridad asociado. Esta evidencia también es consistente con la hipótesis de que las personas más educadas tienen una menor probabilidad de cometer delitos o, cuanto menos, de estar confinadas en instituciones penales'.

Una vez se ha establecido la razonabilidad de la hipótesis que relaciona la probabilidad de cometer delitos con el nivel de escolaridad del individuo, procede tratar de calcular un estimado del valor de dicha probabilidad para los desertores escolares. El primer asunto es establecer un indicador del número de delincuentes en el país. Como no existe un censo de delincuentes, es necesario estimar una aproximación.

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la DESERaóN Escolar

Fuentes: Depto. del Trabajo y Recursos Humanos de P.R. y Adm. de Correcciones.

Los problemas en esta tarea son múltiples. No se puede utilizar el número de delitos, porque no todos los delitos se informan y un criminal puede cometer varios delitos. Tampoco se puede utilizar al número de confinados, porque no todos los delincuentes están presos Asimismo, los casos que se presenten en los tribunales de justicia son información deficiente

Asesoría y Consulta, Inc,

1990 Categoría Fuerza Ocupacional Laboral Confinados Por ciento Profesionales 162,000 38 Propietarios y adm. no fincas 115,000 18 0.02 Oficinistas y vendedores 234,000 157 0.07 Agricultores y adm. fincas 12,000 18 0.15 Servicios (no doméstico) 133,000 199 0.15 Artesanos y capataces 157,000 780 1 Operarios y obreros no fincas 216,000 743 0.34 Obreros y mayordomos fincas 28,000 74 0.26 Otros 203,000 5,177 2.55 Total 1,072,000 7,232 0.67
Distribución por Categorías Ocupacionales de la Fuerza Laboral y de los Confinados en Instituciones Penales Puerto
Rico

para los propósitos de esta investigación, porque no todos los delincuentes son encausados y una misma persona puede ser juzgada por varios actos criminales. El problema se complica porque las estadística de la Administración de los Tribunales se refieren a casos y no individuos, donde una misma persona puede ser encausada por múltiples casos en un mismo año.

Reconociendo las limitaciones existentes, se puede comenzar tratando de establecer la relación entre individuos y casos; esto es, el número promedio de casos que se presentan en contra de un encausado. De acuerdo a la Administración de los Tribunales^, en 1989-90 se presentaron 8,388 querellas contra 4,634 menores, lo que representa un promedio de 1.81 querellas por menor intervenido en el Tribunal de Menores. De las querellas presentadas ese año, se resolvieron 8,294; de las cuales, en 6,494 se encontró que el menor querellado incurrió en falta. Al aplicar la proporción, antes estimada, a las determinaciones de faltas, se estima que a 3,588 menores se les encontró que cometieron faltas.

Con respecto a los adultos, la Administración de los Tribunales informa que en 1989-90 hubo 22,537 convicciones criminales en el Tribunal Superior y 15,521 en el Tribunal de Distrito, para un total de 38,058 convicciones criminales. Si este valor se ajusta proporcionalmente por el incremento ocurrido durante ese año en casos pendientes', se obtiene un estimado de que, de los casos criminales presentados durante ese año en los tribunales, 40,075 deberán resultar en convicciones. Si se aplica la proporción estimada en el párrafo anterior a las convicciones proyectadas, se obtiene un estimado de 22,141 adultos convictos por Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deseroón Escolar

casos cnminales.

Si se suma el total estimado de adultos convictos por casos criminales con el número estimado de menores que el tribunal determinó que cometieron faltas en 1989-90, se obtiene un total de 25,729 personas. Ese valor se va a utilizar como el mejor estimado del número de delincuentes en Puerto Rico para el año 1989-90.

Fuente:

2 Distribución de la Población por Edades Grupos de Edades Número de Habitantes Menos de 5 años 302,173 5 a 9 años 316,473 10 a 14 años 339,573 15 a 19 años 326,717 20 a 24 años 287,227 25 a 44 años 987,328 45 a 54 años 355,858 55 a 59 años 140,952 60 a 64 años 124,852 65 años 0 más 340,884 Total 3,522,037 CCTa* <1f.Pnhhcirtn V Vi..i-nrtn V Vivienda, GPO Asesoría y Consulta, Inc.
Tabla

La Tabla 2 presenta la distribución por edades de la población en Puerto Rico en 1990. Se observa que la población total fue 3,522,037 y que la población con 15 ó más años de edad fue 2,563,818 habitantes. Si se divide el mejor estimado del número de delincuentes entre la problación con 15 ó más años de edad, se obtiene el valor de 0.0100, que se utilizará como estimador de la probabilidad de que una persona cometa actos criminales.

El siguiente paso es calcular cuántos, dentro del número estimado de los delincuentes, son desertores escolares. Se puede obtener un estimado multiplicando el número estimado de delincuentes en 1989-90(C)por la probabilidad de que una persona sea desertor escolar dado que es delincuente [P(D¡C)]. Esa probabilidad se aproxima como la profiorción de los desertores escolares entre los confinados en instituciones penales en el país, que en el capítulo anterior se encontró que es 0.6939 para 1989-90. Así que el número estimado de delincuentes que son desertores escolares (CD)es igual a:

CD = C * P(D|C) = 25,729 (.6936) = 17,846

Un estimado del número de desertores escolares en la población (D), se obtiene multiplicando la población con 15 años o más de edad (P15)'* por la proporción de desertores escolares en la fuerza laboral en el año 1990 [P(D)], la cual se esüma en 0.5098^ En esta forma, el número estimado de desertores escolares en la población de Puerto Rico en 1990 fue:

D = P,5 ♦ P(D) = 2,563,818 (.5098) = 1,306,907.

Asesoría y Consulta, Inc.

Sociales de la Deserción Escolar en P.R.
Costos

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserción Escolar

Entonces, la probabilidad de que una persona cometa actos criminales, dado que es desertor escolar [P(C¡D)] se obtiene como la proporción del número estimado de delincuentes que son desertores escolares(CD),entre el número estimado de desertores escolares en la población(D), esto es:

P(C¡D) = CD/D = 17,846/1,306,907 = .0137

Se puede utilizar el mismo razonamiento para calcular un estimador de la probabilidad de que una persona cometa actos criminales dado que no es desertor escolar [P(CjD')]. Esa probabilidad se calcula como:

P(CID') = CDVD'

donde:

= es el número estimado de delicuentes que no son desertores escolares; lo que es igual al número total estimado de delincuentes (25,729), menos el estimado de desertores escolares en ese grupo (17,846). Así CD' = 7,883.

= es el número estimado de personas que nos son desertores escolares en la población de 15 años o más de edad. Esto es igual a la población en ese grupo de edades (2,563,818), menos el número estimado de desertores escolares en esa población (1,306,907). AsíD' = 1,256,911.

Asesoría y Consulta, Inc.

A base de la información anterior, se estima que:

P(CID') = .0063

Los estimados realizados hasta el momento permiten calcular un estimador de la probabilidad de que una persona sea desertor escolar y cometa un delito [P(D y C)]. La teoría de probabilidad® indica que

P(D y C) = P(D)*P(C¡D)

En las páginas anteriores se estimó

P(D) = .5098

PC|D) = .0137

Así que:

P(D y C) = (.5098)(.0137) = .0070

Por otra parte, la probabilidad de que una persona no sea desertor escolar escolar y cometa un delito [P(D' y C)] se estima como: donde:

P(D' y C) = P(D')*P(C|D') P(D') — probabilidad de que una persona no sea desertor, la cual es igual a 1 -

P(D) = 1 - .5098 = .4902.

En párrafos anteriores se estimó que P(C¡D') = .0063, por lo que:

P(D' y C)= (.4902)(.0063) = .0030

Asesoría y Consulta, Inc.

la Deserción Escolar en P.R.
Costos Sociales de

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserción Escolar

Como es natural, la suma de las probabilidad de que nua persona sea desertor escolar y cometa delitos, mas la probabilidad de que una persona no sea desertor escolar y cometa delitos, tiene que ser igual a la probabilidad de que una persona cometa actos criminales. Se observa que, en efecto, .0070 + .0030 = .0100, que es el valor estimado para la probabilidad de que una persona cometa delitos.

Inferencias acerca de la Probabilidad de que una Persona Sea Desertor Escolar y Cometa Delitos

Se observa que la probabilidad de que una persona sea desertor escolar y cometa delitos es más del doble de la probabilidad de que una persona no sea desertor escolar y cometa actos delictivos. Tal resultado es consistente con la hipótesis, establecida en la literatura, de que la probabilidad de conducta criminal disminuye con la educación.

El análisis realizado también puede ampliarse para efectuar simulaciones acerca de lo que sucedería con la tasa de criminalidad si disminuye la proporción de desertores escolares en la población. Si se reduce tal proporción, disminuye el valor de P(D), por lo que se reducirá la probabilidad de que una persona sea desertor escolar y cometa delitos. Puesto que la probabilidad de cometer delitos [P(C)] se define como;

P(C) = P(D y C) + P(D' y C)

una reducción en P(D) resulta en disminuir P(C). El cambio resultante en P(C) ofrece u indicador del efecto proporcional sobre la tasa de criminalidad que resulta de un cambio

Asesoría y Consulta, Inc.

deserción escolar. La Tabla 3 informa los resultados de varias simulaciones, en las que se supone un cambio en la proporción de desertores escolares en la población y se evalúa el efecto del cambio sobre la tasa de criminalidad.

Tabla 3

Efectos Estimados de Cambios en la Deserción Escolar Sobre la Tasa de Criminalidad

en la proporción de desertores escolares

Sociales de la Deserción Escolar en P.r. 123
Costos
(Por ciento) Disminución
(Por ciento) 5% 2% 10 3 15 5 20 7 25 9 50 18 75 28 100 37
Disminución
resultante en la tasa de criminalidad

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserción Escolar

Un Estimado del Costo Social del Crimen

En la sección anterior de este estudio se ha establecido la probabilidad de que un desertor escolar incurra en actividad delictiva. Sin embargo, para poder evaluar los beneficios sociales de una reducción en la criminalidad como resultado de una menor incidencia de deserción escolar, se hace necesario establecer el monto de la pérdida económica que ocasiona la criminalidad.

La actividad delictiva ocasiona crecientes costos económicos en nuestra sociedad. Estos costos implican una pérdida tanto para los individuos y las empresas como para el estado. En el estimado de estos costos, los hemos dividido en las siguientes categorías:

1. Pérdida de la propiedad.

2. Productividad perdida por asesinatos u homicidios.

3. Gasto de prevención e intervención del crimen por el Estado.

4. Gasto de prevención y pérdidas del sector privado.

Pérdida de la propiedad

De acuerdo a las estadísticas de la policía de Puerto Rico el monto de la pérdida de propiedad por robos y hurtos ascendió a $62,554,943 en 1991. Esta cifra incluye unos $500 000 de daños a la propiedad en las propias escuelas del Sistema de Instrucción Pública De hech durante el período comprendido entre 1986 y 1991 se cometieron 12,016 actos vandálicos en 1 escuelas con una pérdida ascendente a $3,485,912.

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción EscoulR en P.R.

Productividad pérdida por asesinatos u homicidios

Para el año natural de 1991 se registraron en el país un total de 817 homicidios. La edad mediana de las víctimas fue de 28.2 años, lo que ubica a la mayoría de esa población en una etapa temprana de su vida productiva. En adición del indudable costo emocional que provocan estas muertes violentas, podemos establecer el costo, que en términos de productividad pérdida implica para la sociedad este total de 817 homicidios. Tomando como base un estimado de pérdida en productividad de $190,000 por cada víctima tenemos entonces un total de $155,953,862.

Gasto,del Estado en actividades de prevención y control del crimen

Producto de la incidencia criminal, el Estado se ha visto forzado a destinar una cantidad cada vez mayor de recursos para la prevención y control del crimen. De ocurrir una reducción en la incidencia delictiva, al menos parte de esos recursos podrían ser destinados a otras áreas de la gestión gubernamental, lo que ocasionaría una mejoría en el nivel de vida de la población. Las agencias públicas identificadas con responsabilidad en esta área son:

Departamento de Justicia

Policía de Puerto Rico

Tribunal General de Justicia

Administración de Correcciones

Administración de Instituciones Juveniles

Instituto de Ciencias Forenses

Corporación de Empresas Correccionales

Junta de Libertad Bajo Palabra

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserqón Escolar

El total de gastos de estas agencias, que durante el año fiscal 1990-91 se destinó a actividades relacionadas con la criminalidad, fue de $386,250,662. Esa cifra debe considerarse como una mínima. Para este cómputo se ha considerado tan sólo la proporción del presupuesto de las agencias señaladas que se destinó a esos fines. Los servicios prestado por otras agencias que no es posible estimar, elevan el gasto total público que podemos relacionar con la criminalidad.

Costos del sector privado

A pesar de los esfuerzos del gobierno y de los recursos destinados por el Estado para la protección de la vida de los ciudadanos y la propiedad privada y social, la criminalidad sigue en aumento. Esta situación ha traído como resultado que el sector privado (individuos y empresas) se vean forzados a destinar una cantidad cada vez mayor de recursos para la protección y seguridad. Como costos del sector privado deben considerarse desde la contratación de guardias de seguridad, los equipos y arreglos para viviendas y negocios (rejas veijas, cierre de sectores residenciales, sistemas de video y comunicaciones), los equipos de seguridad para automóviles (alarmas y otros aditamentos), la compra de armas de fuego las primas de seguros contra robos, hasta los más sofisticados sistemas de seguridad para la industria y el comercio.

Asesoría y Consulta, Inc.

126

Aunque no es posible hacer un estimado preciso del costo monetario total en que incurre el sector privado, en esta sección se estiman algunas de esas partidas.

Tabla 4

Costo de guardias de seguridad privados

Instalación de rejas en residencias y negocios

Costo de sistema de alarmas para automóviles

Pérdida del comercio por robos (ShopUfting) Total

Fuente: Apéndice al capítulo. 120000000 74030879 15476546 300000000 509507425.00

El total de más de $500 millones en costos del sector privado relacionados con la criminalidad debe considerarse como una aproximación subestimada del costo real. Quedan fuera de este cómputo algunas partidas que, como se señalara anteriormente, no existe información disponible para estimarlas. Tampoco se incluyen los llamados delitos sin víctima (prostitución,juegos ilícitos, evasión contributiva, etc.), ya que a priori no se puede establecer una relación concreta entre ellos y el nivel de escolaridad. Los costos asociados al tráfico de drogas se excluyeron de los cálculos, para evitar incurrir en un error de doble conteo. Muchos de los otros crímenes (asesinatos, robos, escalamientos, etc.) están relacionados con el uso y distribución de drogas, por lo que contabilizar en forma adicional costos asociados a las drogas resultaría en doble conteo. Se reconoce que esta exclusión subestima los valores estimados, pero se prefiere errar por el lado conservador en los cómputos.

Asesoría y Consulta, Inc.

Sociales de la Deserción Escolar en P.R.
Costos

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserción Escolar

Costos económicos de la criminalidad - Resumen

La suma de las cuatro categorías, en que para los efectos de este estudio, hemos dividido los costos económicos atribuibles al crimen, ascendió para el 1991 a $1,114 266 922

Tabla 5

Pérdida de la propiedad

Productividad pérdida por asesinatos y homicidios

Gasto público en prevención e intervención

Costos del sector privado

Total

Fuente: Apéndice al capítulo. ~

62554943

155953862

386250662

509507425

114266892.00

Aunque la cifra de más de un billón de dólares es por sí sola impactante, no se deben reducir o limitar los costos asociados con el crimen al monto de las pérdidas materiales o su costos económicos. La actividad delictiva ocasionada otros efectos neeativnc o gauvus en nuestra sociedad^ Los daños y efectos emocionales son tanto o más importantes como los económicos

El temor y la ansiedad en que vive nuestra población son a su vez costo"; sociales, que aún cuando no podamos estimarlos en términos monetarios, no debemos subestimar sumar, uomo una de sus consecuencias, cabe destacar la pérdida de productividad tanto en el sertor r.'Kisccior publico como el privado. Por otro lado la creciente actividad delictiva genera efectos negaüvos muy que afectan el proceso de convivencia social en el país.

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Disminución en la Deserción Escolar y Costos Sociales de la Criminalidad

En el capítulo se ha establecido la existencia de una relación entre deserción escolar y criminalidad: los desertores escolares registran una mayor probabilidad de incurrir en delitos, que las otras personas en la población. Sobre esa base, se estimaron las probabilidades de que desertores escolares y no desertores cometan delitos, de forma de calcular la reducción porcentual, que se espera ocurra en la tasa de criminalidad en el país, de eliminarse o disminuir la deserción escolar, Al utilizar esos estimados con el costo social calculado para la criminalidad, se pueden obtener unos valores monetarios para la disminución en el costo social de la criminalidad asociado a reducciones en la tasa de deserción escolar. Los resultados se informan en la Tabla 6.

Tabla 6

Reducciones en el Costo Social de la Criminalidad

Asociadas a Disminuciones Relativas en la Deserción Escolar

Disminución en Deserción Escolar Reducción en Costo (millones $) 5% $22.3 m 33^4 15 55^7 20 78.0 25 100.3 50 200.6 75 312.0 100 412.3

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserción Escolar

De la información en la tabla se observa que, de eliminarse la deserción escolar, el costo social anual de la criminalidad habría de disminuir en $412.3 millones,lo que equivale al 37 por ciento del costo social total estimado para la actividad criminal en Puerto Rico. Por otra parte, en la isla se han identificado 46 organizaciones, de los sectores público y privado, que desarrollan proyectos para prevenir o remediar la deserción escolar*. Esas entidades comprometieron en 1990 un total de $69.4 millones en recursos para tales actividades. Ahora bien, si se reduce el número de desertores escolares en tan solo 20 por ciento, se generaría un beneficio anual estimado de $78.0 millones, por concepto de disminuir el costo social de la criminalidad; lo cual excede a la inversión anual en prevenir y remediar la deserción escolar en Puerto Rico. Resumen y Conclusiones

La literatura propone que un beneficio de la educación es disminuir la tasa de criminalidad entre las personas de mayor educación. Es evidente que una reducción en los niveles de crímenes resulta en un menor costo social, como consecuencia directa del menor número de delitos; además de que disminuyen los costos privados y gubernamentales asociados a la prevención del crimen y al sistema de justicia criminal.

En este capítulo se contrastó empíricamente la hipótesis propuesta en la literatura. Se encontró que, efectivamente, los desertores escolares registran una mayor probabilidad de Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

13j

incurrir en delitos, que nos no desertores. Así, una reducción en el número de desertores escolares tenderá a disminuir la criminalidad, y los costos a ella asociados. Efectivamente, se calculó en $412.3 millones el costo social anual del crimen atribuible a la deserción escolar existnte. Ese valor equivale al 37 por ciento del costo social total estimado para la actividad criminal en Puerto Rico.

Asesoría y Consulta. Inc.

J]

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserctón Escolar

Apéndice al Capítulo Cómputo de los costos económicos de la actividad delictiva Pérdida de propIedacP

En esta partida se reflejan las estadísticas de la policía de Puerto Rico sobre el valor de la propiedad hurtada en 1991. El total de $62,554,973.00 se desglosa de la siguiente manera.

Dinero en efectivo

Prendas y metales preciosos

Vehículos de motor

Televisores, cámaras, radios, etc.

Armas de fuego

Artículos del hogar

Ropa y accesorios

Misceláneas

Estas estadísticas se refieren a los robos informados a la policía, por lo que resulta lógico suponer que el monto real por concepto de pérdida de propiedad sea mayor.

Asesoría y Consulta, Inc.

2565972 5503426 42977377 351912 52194 246100

. Gasto público en prevención e intervención del crimen^°

El gobierno del Estado Libre Asociado de Puerto Rico a través de varias agencias públicas lleva a cabo diversas funciones con el propósito de proteger la vida de los ciudadanos y la propiedad privada y social. Es responsabilidad también del Estado Libre Asociado hacer cumplir con las leyes e intervenir con las personas que cometan delito.

Para establecer el costo de las agencias públicas que de una u otra forma participan en la prevención e intervención de la actividad delictiva es necesario, en primer lugar, determinar

• el por ciento o proporción de su presupuesto que se destina a este propósito. Esa determinación se hizo tomando como base las funciones de cada agencia.

Como se verá, la proporción del gasto que se destina a tareas relacionadas con la criminalidad, vana entre las agencias. Para este cómputo se incluye también el 15% de los recursos económicos asignados en cada agencia para mejoras permanentes".

Tabla I Costos del Sector Público

1. Policía de Puerto Rico

Presupuesto Total Gastos de Funcionamiento

Proporción estimada (91.85%)

15% mejoras permanentes

Gasto relacionado con la criminalidad

2. Administración de Correciones

Presupuesto

Proporción estimada (100%)

15% mejoras permanentes

I33
Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.
232440385 213496494 900000 98337699 7050000 214396494
Total Gastos
de Funcionamiento 98337699

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deseroón Escolar

Tabla I Costos del Sector Público

Gasto relacionado con la criminalidad

3. Corporación de Empresas Correccionales

Presupuesto Total Gastos de Funcionamiento

Proporción estimada (100%)

Gasto relacionado con la criminalidad

4. Junta de Libertad bajo Palabra

Presupuesto Total Gastos de Funcionamiento

Proporción estimada

Gasto relacionado con la criminalidad

5. Instituto de Ciencias Forenses

Presupuesto Total Gastos de Funcionamiento

Proporción estimada (100%)

15% mejoras permanentes

Gasto relacionado con la criminalidad

6. Tribunal General de Justicia

de Funcionamiento

(28.62%)

la criminalidad

7. Departamento de Justicia

Presupuesto Total Gastos de Funcionamiento

Proporción estimada (57%)

15% mejoras permanentes

Gasto relacionado con la criminalidad

8. Administración de Instituciones Juveniles

Presupuesto Total Gastos de Funcionamiento

Presupuesto Total Gastos
Proporción estimada
Gasto relacionado con
105387699 3556595 677941 677941 677941 4241072 4241072 300000 4541072 86311190 12946678 12946678 750000 15429624 Asesoría y Consulta, Inc.

Proporción estimada (100%) 15%

La cifra de $386,250,662 corresponde a los costos del Estado Libre Asociado asociados con la prevención e intervención del crimen. Este valor debe considerarse como una subestimación de la cantidad real, ya que se quedan fuera del cómputo los servicios que otras ^ agencias rinden a las incluidas en los estimados, y que a su vez implican un costo para el Estado.

Tabla II Costos del Sector Privado

1. Pérdida del comercio por robos {Shopliftíng)

Pérdidas anuales estimadas del sector comercial por robos en las tiendas. (Estimado obtenido en el Artículo Hired guns; The high cost of taking the Jaw into our own hands, por Maritza Díaz Alcaide, Semanario Caribbean Business, 29 de agosto de 1991.

2. Gastos en rejas para residencias y negocios'^

Total de viviendas ocupadas (1991)

Viviendas con rejas (50%, estimado)

Total de locales comerciales (1989)

Locales comerciales con rejas(80%, estimado)

Total de viviendas y comercios con rejas Costo promedio en dólares (estimado)

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.
Tabla I Costos del Sector Público
permanentes Gasto relacionado con la criminalidad
75000 15504624
mejoras
15429624
386250662.00
1054924 527462 34712 27770 555232 2000 1100464000 300000000 Asesoría y Consulta, Inc.
Total invertido

Costos Sociales de la Criminalidad asociados a la Deserción Escolar

Tabla II Costos del Sector Privado

Costo anual atribuible (vida útil estimada de 15 años)

3. Costo en alarmas para vehfculos^^

Total de vehículos de pasajeros (1991; excluyendo 1333364 autobuses y camiones)

Vehículos con alarmas instaladas (65%; estimado) 866686

Costo promedio (estimado) 25

Total invertido 108335825

Costo atribuible anual

4. Costo de guardias de seguridad^*

Cantidad total estimada. (Existen 140 compañías de seguridad que emplean entre 10,000 a 15,000 guardias privados. Tomando la cantidad promedio de 12,500 guardias se computa el salario promedio para el servicio más los gastos de operación de las agencias. Datos de la Policía de Puerto Rico para el 1991).

Otra pérdida asociada a la criminalidad es la pérdida en capacidad productiva que resulta cuando ocurre un homicidio o asesinado. Para calcular el valor capitalizado de esa pérdida, se utiliza el ingreso promedio por concepto de compensación al trabajo en Puerto Rico. Esa pérdida se proyecta a través de la vida productiva esperada de una víctima típica, que se supone que cubre el período entre las edades de 28.2 a 65 años. Para hacer esa proyección, se utiliza una tasa de crecimiento real anual promedio de 3.96 por ciento en los salarios, que corresponde a la experiencia histórica de la pasada década en Puerto Rico.

Para capitalizar, o expresar en su valor presente, las pérdidas estimadas, se descuentan

Asesoría y Consulta, Inc.

Total
15476546 120000000 509507479.00
74030933

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

los valores anuales a una tasa de 7.5 por ciento. Se utiliza esa tasa porque es a la que ha tendido a fluctur el interés de largo plazo para inversiones de riesgo moderado. En esa forma se estima que el valor capitalizado de la pérdida en capacidad productiva, que ocurre como consecuencia de un homicidio o asesinato, es $190,886 por víctima.

En el cómputo de los costos privados relacionados con la criminalidad se han quedado fuera algunas partidas. Estas no han sido incluidas debido a que no hay suficientes datos disponibles que nos permitan hacer un estimado razonable de las mismas.

Tampoco han sido incluidos en esta sección los llamados delitos sin víctimas como los juegos de azar clandestinos (bolita y quinielas), la prostitución, la venta de drogas y la evasión contributiva.

COST-CRM.DES

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserción Escolar Notas

1.Que ambas probabilidades sean iguales requiere que todo criminal tenga la misma probabilidad de ser confinado en una institución penal. Se puede argumentar que tal supuesto no es válido, ya que podría ser que mientras mayor sea el nivel educativo del criminal, menor sea la probabilidad de:(1) ser capturado,(2) ser convicto si se le captura y (3) ser confinado en una institución penal si se le halla culpable de un delito. A pesar de que se reconocen las limitaciones del supuesto, en este estudio se utiliza la distribución de la escolaridad de los confinados como indicador de la de los delincuentes, por ser la mejor información disponible que relacione el nivel de educación que tengan los delincuentes.

2.ELA de PR, Administración de los Tribunales, Informe Estadístico 1989-90. San Juan, 1992.

3.E1 número de casos pendientes ha estado aumentando, como se puede apreciar a continuación:

Así, entre 1988-89 y 1989-90, el número de casos pendientes aumentó en 1,825, lo que representa un 5.3% de los casos presentados. Ese por ciento se utiliza para el ajuste proporcional en las convicciones.

4. Se tiene que utilizar la población de 15 ó más años de edad, a causa de que esa es la forma en que el censo poblacional informa esos datos. Ello causa una inconsistencia metodológica en el análisis, la cual es inevitable a causa de la disponibilidad de la información estadística S' embargo, no es de esperar que,en el agregado, este problema cause un error de mayor maén'tud en los estimados. ^

Asesoría y Consulta, Inc.

Año Fiscal 1984-85 1985-86 1986-87 1987-88 1988-89 1989-90 Casos Pendientes 13,403 14,222 14,993 16,365 16,206 18,031

5. Proporción calculada en este informe en el capítulo "Estimación del Número de Desertores Escolares en Puerto Rico".

ó.Para una revisión de la teoría de probabilidad aplicable, el lector puede referirse, entre otros, a J. R. Stockton, C. T. Clark y R. J. Cao, Principios y métodos estadísticos para comercio y economía. Tomo I. Cincinnati: South-Westem Publ. Co., 1980. cap. 5.

7. Por ejemplo, se ha indicado que la criminalidad es una de las causas para la expansión registrada en los centros comerciales en Puerto Rico. Puesto que la seguridad personal de los clientes es mayor en los centros comerciales que en los distritos comerciales tradicionales, los cosumidores tienden a preferir hacer sus compras en ellos. Ese patrón de conducta abona al deterioro de los centros urbanos y a los problemas sociales asociados a tal deterioro. Sobre este asunto, refiérase a Angel Morey, Jhe Puerto Rican Market-An Overview, convención de la Intemational Association ofShopping Centers, Hotel Cerromar, Dorado,Puerto Rico, diciembre de 1992.

8. Diseño y Desarrollo de Sistemas, Inc., Programas y Proyectos para Remediar la Deserción Escolar en Puerto Rico:Resumen Ejecutivo, estudio efectuado para el Sistema Universitario Ana G. Méndez, Vicepresidencia de Asuntos Académicos, Proyecto NEXOS, marzo de 1992.

9. Información suministrada por la División de Estadísticas de la Policía de Puerto Rico.

10.Información sobre el presupuesto de las agencias tomada del Informe de Presupuesto; Año Fiscal 1990-91, Oficina de Presupuesto y Gerencia.

11. Utilizar esa proporción supone que la vida útil de las mejoras y el equipo es 6.67 años.

12. Estadísticas sobre el número de establecimientos comerciales tomadas del U.S. Department of Commerce.Bureau ofthe Census, Country Business Pattems, Puerto Rico, 1989. Estadísticas sobre el número de viviendas ocupadas tomadas del Informe del Censo. Census of Population, Puerto Rico, Summary Popúlation and Housing Characteristics, 1990.

Asesoría y Consulta, Inc.

COSTOS
Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserción Escolar

13. Los datos sobre el número de vehículos de motor fueron suministrados por la División de Vehículos de Motor del Departamento de Transportación y Obras Públicas.

14. Véase a Maritza Díaz Alcaide, "Hired Guns: The High Cost of Taking the Law into Gur Own Hands", Caribbean Business, 29 de agosto de 1991.

Asesoría y Consulta, Inc.

Deserción Escolar y Demanda por Educación Universitaria

Introducción

Una disminución en la deserción escolar tiene como consecuencia un aumento en el número de graduados de escuela superior (grado doce), lo cual es de esperar que genere un aumento en la demanda por educación universitaria. Resulta importante evaluar este efecto pues el mismo conlleva:

1. un incremento en la demanda por servicios universitarios

2. mayores transferencias del gobierno federal en becas estudiantiles, y

3. una modificación adicional en la capacidad para generar ingresos de tales personas.

En esta parte del estudio se evaluará el efecto que tendrá una reducción en la deserción escolar sobre la demanda por educación superior. De igual forma se evaluará el impacto de una reducción en la deserción escolar sobre las transferencias federales por concepto de becas estudiantiles.

Para estimar el aumento en la demanda por educación universitaria se tomará como base la proporción de personas que se graduaron de escuela superior y que a su vez se matricularon en universidades en los cinco años comprendidos en los cursos académicos de 1985-86 al 198990. Se descarta utilizar el número de solicitudes de ingreso, toda vez que es común el que una persona solicite admisión a más de una institución universitaria. Tampoco es útil para este

propósito el número de personas admitidas a universidades debido a que una persona puede ser admitida a varios centros de educación superior a la vez. En ambos casos se estaría sobreestimando la relación que nos interesa debido al doble conteo.

Demanda por Educación Universitaria

La relación entre los graduados de escuela superior y los estudiantes de nuevo ingreso que se matricularon en instituciones universitarias en Puerto Rico, puede verse en las Tablas 1 a 3.

Tabla 1

142 Deserción Escolar y Demanda por Educactón Universitaria
1988-89 1989-90
Años 1985-86
31,617 29,137 6,793 6,953 Año Escuelas Públicas Escuelas Privadas Total Graduados 1985-86 31,579 5,351 36,930 1986-87 30,317 4,866 35,183 1987-88 31,832 6,487 38,319 ^uente: ELA de P.R., Departamento de Educación, üíicina de Estadísticas," 38,410 36,090
Graduados de Escuela Superior: Puerto Rico
a 1989-90
2
de Nuevo Ingreso Matriculados en Universidades de Puerto Rico Años 1985-86 a 1989-90 Ano 1985-86 1986-87 1987-88 1988-89 1989-90 Univ. Publicas 10,394 10,183 12,894 10,441 10,931 Univ. Privadas 18,764 17,712 15,540 17,141 18,872 Total 29,158 27,895 28,434 27,582 29,803 Consejo de Educación Superior, Estadísticas de Instituciones de Educación Superior en Puerto Rico, San Juan: 1991
3
Año Graduados Ese. Superior Matriculados en Univ. Por Ciento 1985-86 36,930 29,158 78.95% 1986-87 35,183 27,895 79.29 1987-88 32,319 28,434 74.20 1988-89 38,410 27,582 1989-90 36,090 29,803 82.58
Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. Tabla
Estudiantes
Tabla
Proporción de Graduados de Escuela Superior Que Se Matricularon en Universidades Puerto Rico: 1985-86 a 1989-90

Para el período de cinco años bajo consideración, hubo un total de 184,932 graduados de escuela superior, de los cuales el 77.3% (142,872) se matricularon en universidades.* Lo anterior implica que, en promedio,por cada cien(100)graduados adicionales de escuela superior aumentará en 77 el número de estudiantes universitarios. Al comparar esa proporción con el por ciento anual de «u graduados que se matriculan en universidades, se encuentra

que la misma se mantiene bastante estable en el Diagrama 1 período de cinco años, lo que implica que no se observa una tendencia de cambio. Queda por considerar, entonces, la proporción de estudiantes que se gradúan de escuela superior de la población entre las edades en que se debe completar el grado doce.

Asesoría y Consulta, Inc.

DEMANDA POR EDUCACIÓN UNIVERSITARIA
DESERaÓN ESCX)LAR Y
PROPORCION DE PERSONAS GRADUADAS DE ESCUELA SUPERIOR QUE SE MATRICULAN EN UNIVERSIDADES FOX CIENTO 78.93:4 79.MS<

Relación entre Graduados de Escuela Superior y la Población en Edades de 15 a 19 Años 1985-86 a 1989-90

Como puede observarse en la tabla anterior, la relación entre el número de graduados de escuela superior y la población de 15 a 19 años se mantiene bastante estable en el período bajo consideración y no se observan tendencias a cambio en la misma. RELACION

Diagrama 2

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.
Tabla 4
Año Población de 15 a 19 años Graduados de Escuela Superior Proporción de Graduados entre Población de 15 a 19 años 1985-86 338,860 36,930 10.90% 1986-87 334,812 35,183 10.51 1987-88 333,024 38,319 11.51 1988-89 331,246 38,410 11.60 1989-90 330,129 _ 1. 1 • / T 1 rra 36,090 r-7 ; ^ 1 10.93 Graduados de Escuela Superior: Tabla 1
ENTRE GRADUADOS DE ESCUELA SUPERIOR Y LA POBLACION EN EDADES DE 16
19 UM IMT
A

A partir del análisis de los datos anteriores se puede evaluar preliminarmente el efecto que tendría una reducción en la deserción escolar sobre la demanda por educación superior. En ese sentido, se puede argumentar, preliminarmente, que por cada cien (100) graduados adicionales aumentará en setenta y siete (77) el número de personas matriculadas en universidades. Falta ahora por considerar cómo se distribuye ese impacto entre el sistema universitario público y privado.

Para evaluar el impacto específico que un aumento en la demanda habrá de tener en el sistema universitario público y privado, se ha de tomar en cuenta, en primera instancia la política de admisión de la Universidad de Puerto Rico. Esa política del sistema universitario público no descansa sobre las fluctuaciones en la demanda. De hecho, excepto en el año académico 1987-88,los estudiantes de nuevo ingreso matriculados en la Universidad de Puerto Rico fluctuaron alrededor de los 10 mil(Véase Tabla 2). Esa cifra representa alrededor del 36% del total de estudiantes de nuevo ingreso matriculados anualmente(1985-86 al 1989-90) De no haber cambios en esa política de admisión de la Universidad de Puerto Rico, resulta razonable suponer que el aumento en matrícula resultado de una disminución en la deserción escolar habrá de reflejarse totalmente en las universidades privadas.

DESERCION Escolar y Demanda por Educación Universitaria
Asesoría
y Consulta, Inc.

Efectos de la Deserción Escolar en la Demanda por Educación Universitaria: Un Estimado

Para tratar de estimar con mayor precisión el efecto de la deserción escolar en la demanda por educación universitaria, se procedió a estimar dos ecuaciones de regresión, con los datos informados en la sección. Se estimó una ecuación para las universidades privadas, donde se supuso que el número de estudiantes de nuevo ingresos que se matriculan en ellas es función del número de graduados de escuela superior y de la tasa de desempleo para los jóvenes en las edades de 16 a 24 años^. Asimismo se estimó otra ecuación para las universidades públicas, donde se supuso que el número de estudiantes que se matriculan en ellas es función de las mismas variables que en la ecuación anterior^.

Esas ecuaciones proveen un instrumento para estimar el cambio esperado en demanda por educación universitaria de controlarse la deserción escolar. Si en las ecuaciones se sustituye el número de graduados que habría en la clase de 1990 de no haber deserción escolar, se obtiene un estimado del cambio en la demanda por educación en las universidades públicas y privadas en Puerto Rico.

Previamente se había estimado que la tasa de deserción escolar promedio en cada promoción de graduados es 35.3%^. Al ajustar el número de graduados de escuela superior en 1990 por la tasa de deserción estimada, se obtiene que 55,781 personas se habrían graduado de escuela superior, de no ser por la deserción escolar. Al sustituir ese valor para el número de graduados en 1990 en la ecuación para las universidades privadas, se obtiene que para ese año

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

DESERaóN Escolar y Demanda por Educación Universitaria

habna ocumdo una matrícula estimada 24,962 estudiantes de nuevo ingreso en esas instituciones. Eso representa un incremento de 32.3% sobre la matrícula estudiantil de nuevo ingreso registrada ese año. Al efectuar la misma simulación para las universidades públicas, se obtiene un estimado de 11,203 estudiantes, lo cual es apenas 2.5% mayor que el valor registrado para ese año de 1990. Se encuentra que el resultado obtenido para las universidades públicas es consistente con la observación previa, de que la matrícula en ellas depende principalmente de políticas institucionales de admisión, que tienden a ser inelásticas con la demanda por educación universitaria.

La matrícula total de estudiantes de nuevo ingreso que habría de ocurrir en 1990, de no haber deserción escolar, es la suma de esas matrículas estimadas en las universidades públicas y privadas, según se informaron en el párrafo anterior. Ese total

DESERCION ESCOLAR Y DEMANDA

Diagrama 3

asciende a 36,165 estudiantes. Ello implica un aumento de 21.3 % sobre el valor registrado 1990.

Asesoría y Consulta, Inc.

EDUCACION UNIVERSITARIA MTIICULA KECtSTRAM 29«803 kfecto »exeiciqn isc «•ata
POR
1990

Se observa que, a base de los estimados informados,la proporción de personas graduadas de escuela superior que se habrían matriculado en universidades en 1990, de no haber sido por la deserción escolar, sería 64.8%. Tal proporción es menor al valor promedio de 77 por ciento, que se ha registrado históricamente. Sin embargo, es razonable que esa proporción disminuya al ocorrir un aumento sustancial en el número de graduados de escuela superior, según es el caso en la simulación llevada a cabo.

Efectos sobre las Transferencias Federales

En la introducción a este capítulo, se señaló que uno de los efectos de una reducción en la deserción escolar sería el de provocar una aumento en las transferencias del gobierno federal en becas. La proporción de estudiantes que reciben esta ayuda en todo el sistema universitario es muy alta. Para el año 1989-90 de los 156,147 estudiantes universitarios en Puerto Rico, el 90.04% (140,600) recibían becas federales. El pago promedio por estudiante ascendió en ese año a $1,925.00^ Tanto el pago promedio por estudiante como el monto total de la transferencia ha ido en aumento, reflejo del incremento de los costos de estudio.

En la sección anterior se estimó que, por causa de la deserción escolar, en 1990 hubo 6,362 estudiantes menos en las universidades del país. Si esas personas hubieran asistido a instituciones universitarias, es de esperar que las transferencias federales por concepto de becas habrían aumentado en $12.2 millones. Ese valor es otra pérdida de ingresos a la sociedad que

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. 149

Deserción Escolar y Demanda por Educación Universitaria

ocasiona la deserción escolar.

Resumen y Conclusiones

En este capítulo se exploraron los efectos de la deserción escolar sobre la demanda por educación universitaria. Toda vez que la deserción escolar disminuye el número de graduados de escuela superior, ella reduce el número de candidatos elegibles a realizar estudios universitarios. Este asunto es importante por varias razones.

En primer término, la MATRICULA TOTAL EN UNIVERSIDADES DE PJl

matrícula universitaria en Puerto Rico disminuyó a partir 13S del año 1984, por lo que n» parece existir capacidad excesiva en esas instituciones educativas.

Diagrama 4

Un aumento en la matrícula universitaria también incrementaría los flujos de ' transferencias federales, por concepto de becas, que recibiría Puerto Rico. Así aumentaría el ' ingreso disponible en el país. Además, los nuevos estudiantes universitarios, al graduarse

- tendrían mayor capacidad para generar ingresos del trabajo, lo que se añadiría al valor estimad

Asesoría y Consulta, Inc.

1976 A 1991 Mll*s 4» Estuéiaiit*!
l»7t U77 l»7e 117» usa 1181 1182 1183 1184 1183 1184 1187 1188 1181 1118 1111 Futntt: Cen»«jo d« Cduc»ciOA Suotfiof

en el capítulo 5 de este informe.

Sin embargo, el elemento más importante en este asunto quizás lo sea el efecto que tenga sobre la capacidad de Puerto Rico para competir bajo las nuevas condiciones económicas. Los desarrollos en la tecnología, la globalización en la industria y la regionalización de los mercados alteran las relaciones económicas. Ahora los países, para competir con éxito, requiren nuevas condicioens para la promoción industrial, incluyendo disponer de una fuerza obrera diestra y versátil*^. De ahí la importancia de promover la educación universitaria y postsecundaria, así como el efecto limitante de la deserción escolar en el desarrollo de la competitividad en nuestra economía.

Para estimar los efectos de la deserción escolar sobre la demanda por educación universitaria, se revisó información estadística pertinente y se estimaron dos ecuaciones de regresión. Esas ecuaciones relacionaron la matrícula universitaria de nuevo ingreso con el número de graduados de escuela superior y con la tasa de desempleo para losjóvenes en edades de 16 a 24 años. Se estimó una ecuación para universidades públicas y otra para universidades privadas en Puerto Rico. Esas ecuaciones se utilizaron para simular el número de matriculados en universidades en 1990, de no haber deserción escolar.

La simulación indicó que, de eliminarse la deserción escolar, en 1990 habrían 6,362 estudiantes adicionales de nuevo ingreso en las universidades del país. De ellos, 6,090 habrían ingresado en universidades privadas y 272 en instituciones del estado. La diferencia en esa

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

distribución se puede atribuir al fenómeno observado de que la universidad pública basa sus admisiones en políticas institucionales que son poco elásticas con respecta a la demanda por sus servicios.

Se observa que, a base de los estimados informados,la proporción de personas graduadas de escuela superior que se habrían matriculado en universidades en 1990, de no haber sido por la deserción escolar, sería 64.8%. Tal proporción es menor al valor promedio de 77 por ciento, que se ha registrado históricamente. Sin embargo, es razonable que esa proporción disminuya al ocorrir un aumento sustancial en el número de graduados de escuela superior, según es el caso en la simulación llevada a cabo.

Ahora bien, si la matrícula universitaria hubiese aumentado en 6,362 estudiantes en 1990 es de esperar que las transferencias federales por concepto de becas habrían aumentado en $12 2 millones. Ese valor es otra pérdida de ingresos a la sociedad que ocasiona la deserción escolar.

MAT-UNIV.DES

Deserción Escolar y Demanda por Educación Universitaria
Asesoría y Consulta, Inc.

1. Debe indicarse que esos valores se refieren a los graduados de escuela superior que se matricularon en instituciones universitarias en Puerto Rico. Esas cifras no incluyen a aquellos estudiantes que ingresaron en universidades fuera de la isla.

2. La ecuación estimada es como sigue:

Constante: 1789.563

Coef. Graduados Ese. Superior: 0.38548 (0.319943)

Coef. Tasa de Desempleo: 56.52721 (117.5543)

R^: 0.4393

Los datos referentes a las tasas de desempleo para losjóvenes en las edades de 16 a 24 años son los siguientes:

Fuente: Depto. del Trabajo y Recursos Humanos de P.R.

3. La ecuación estimada es como sigue

Constante: 28018.08

Coef. Graduados de Ese. Superior: -0.41827

Asesoría y Consulta, Jnc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. Notas
Año Tasa de Desempleo 1985-86 1986-87 1987-88 1988-89 1989-90 44.05% 39.76 35.09 30.34 29.55

Coef. Tasa de Desempleo:

R^: 0.7717

(0.166251)

-58.2022

(61.08446)

4. La ta «ta de deserción escolar promedio para una promoción de graduados de escuela superior se estimó a base de la encuesta informada en el capitulo 3 de este informe. Para verificar si la tasa estimada de 35.3% es consistente con la información censal, se puede sumar el número de graduados de escuela superior entre 1986 y 1990, y ajustar la suma por la tasa de deserción estimada. El valor así calculado debe sera aproximadamente igual a la población que tenía entre 20 y 24 años en 1990. A base de la información en la Tabla 1, en este capítulo, 184,932 personas se graduaron de escuela superior entre 1986 y 1990. Si se ajusta ese número por la de deserción de 35.3%, se obtiene un estimado de 285,830 personas. De acuerdo a la información en la Tabla 2 del capítulo 8, en 1990 hubo 287,227 perosnas en las edades entre 20 y 24 años. Se observa que la diferencia entre ambos valores es apenas 0.49%, lo cual es evidencia a favor de la razonabilidad de la tasa de deserción estimada.

5. Calculado a base de Junta de Planificación, Informe Económico al Gobernador 1990, Apéndice Estadístico, San Juan: 1991; y Consejo de Educación Superior, Estadísticas de Instituciones de Educación Superior en Puerto Rico, 2990, San Juan: 1991.

6. Sobre este particular véanse, entre otros, a L. Thurow, Head to Head, New York: William Morrow and Co., 1992, así como a J. Naisbitt y P. Aburdene, Megatrends 2000: Ten New Directionsfor the I990's, New York: William Morrow and Co., 1990, capítulo 1.

Asesoría y Consulta, Inc.

DESERCIÓN Escolar y Demanda por Educaqón Universitaria

Efectos Intergeneracionales y Distribución del Ingreso Introducción

En capítulos anteriores se estableció que el desertor escolar registra una mayor probabilidad de estar marginado de la fuerza laboral que el resto de la población. Más aún, aquellos de ellos que participan en el grupo trabajador tienen una mayor posibilidad de estar desempleados, mientras que los que obtienen un empleo devengan un salario menor que sus compatriotas con niveles más altos de escolaridad. Resulta entonces evidente que la deserción escolar introduce una dimensión de marginación e inequidad entre sectores sociales, la cual debe reflejarse, entre otras manifestaciones, en la distribución del ingreso.

La literatura reconoce la importancia de la educación como factor determinante en la distribución social del ingreso, de suerte que a menores sean las diferencias en la distribución de la educación entre la población, más equitativa será la distribución social del ingreso^ El argumento es que si se reducen las diferencias entre los niveles de educación que posean las personas, menores serán las variaciones en productividad y habilidad para generar ingresos del trabajo entre los individuos, lo que promueve la equidad económica en la sociedad.

En este capítulo se analizará la discusión en la literatura acerca de la educación y la distribución del ingreso en Puerto Rico, evaluando los hallazgos informados con los resultados en esta investigación. Después se considerará el tema de educación y equidad intergeneracional, para evaluar los efectos de la deserción escolar en estos asuntos. Esa discusión podrá aportar

y Distribución del Increso

nuevas perspectivas para la formulación y evaluación de políticas para prevenir y remediar la deserción escolar.

Educación y Distñbución del Ingreso en Puerto Rico

En Puerto Rico pocos temas han sido objeto de mayor estudio que el de la distribución del ingreso. Asimismo, pocos temas han dado lugar a mayores controversias profesionales^

La mayoría de las investigaciones se basan en información censal y los resultados son en extremo dispares, unos estudios concluyen que la distribución del ingreso en Puerto Rico ha tendido a mejorar a través del tiempo, otros que ha sido estable y aún algunos indican que tiende a tomarse menos equitativa. Aún la relación entre educación y distribución del ingreso ha estado en controversia.

Los orígenes de la controversia se ubican en la contrastar empíricamente la hipótesis de Kuznets para Puerto Rico. Esa hipótesis postula que durante las primeras etapas del desarrollo económico la distribución del ingreso tiende a tomarse menos equitativa, para después estabilizarse y, finalmente, pasar a ser más equitativa, cuando la economía llega a etapas de mayor madurez en su desarrollo\ La controversia comienza en Puerto Rico en 1964 con 1 estudio de Andic*, quién utiliza información estadística de diversas fuente*: v i

"y concluye que, en la Isla, la distribución del ingreso comenzó a tomarse más equitativa desde los co mismos del proceso de desarrollo económico. Andic atribuye ese resultado a las lí •

Asesoría y Consulta, Inc.

156
iNTERCENERAaoNALES
Efectos

sociales y a la promoción educativa efectuadas por el gobierno. Ese mismo año se publica otro estudio, realizado por Miller®, quién utiliza datos censales para concluir que entre 1949 y 1959 no ocurrió ningún cambio en el patrón de la distribución del ingreso.

En 1965 se publica otro estudio de Andic®. En este trabajo el autor utiliza datos censales y concluye que entre 1949 y 1959 mejoró la distribución del ingreso entre los obreros. Ese mismo año aparece un estudio de Castañeda y Herrero"^, que utiliza datos del Departamento del Trabajo de Puerto Rico, y argumenta que la distribución del ingreso empeoró entre 1953 y 1963. Estos estudios dan lugar a una controversia entre Andic® y Castañeda y Herrero', donde cada uno argumenta a favor de sus posiciones originales. Esta controversia generó amplia discusión profesional, que envolvió incluso a la Junta de Planificación de P.R.'°. Poco después, en 1970, aparece un estudio de Weisskoff", que utiliza la misma información estadística que Castañeda y Herrero, llegando a idénticas conclusiones.

Unos años después se publican los estudios de Maldonado", que vuelven a usar información censal. Esta autora concluye que entre 1959 y 1969 mejoró la distribución del ingreso en Puerto Rico, lo que atribuye parcialmente a una mejor distribución en las oportunidades educativas. En 1975 se publica un estudio por Mann y Ocasio" y en 1976 otro por Andic y Mann'^ que concluyen que la distribución del ingreso tendió a mejorar entre 1949 y 1969. Los autores atribuyen parte de la explicación para este fenómeno a los incrementos ocurridos en las inversiones en capital humano durante el período.

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Curiosamente, en 1977 Mann y Ocasio'^ publican otro estudio, en el cual argumentan que la distribución del ingreso empeoró entre 1949 y 1959, pero que mejoró entre 1959 y 1969. En ese estudio los autores plantean que la educación actúa como agente promotor de equidad en la distribución del ingreso. Al otro año aparece un informe del Departamento del Trabajo de Puerto Rico'®, concluyendo que entre 1976 y 1977 empeoró la distribución del ingreso.

En 1979 se publica un estudio de Cao'' que argumenta que la distribución del ingreso tiende a ser estable en la isla y que el papel que desempeña la educación en la determinación de dicha distribución es trivial. Al año siguiente se publica un estudio por Corrada'®, que utiliza una metodología similar a la de Andic y Mann y llega a conclusiones semejantes.

El último estudio de importancia sobre el tema es el de Cué" que cubre los períodos censales de 1949 a 1979. Cué concluye que entre 1949 y 1969 ocurre en Puerto Rico una tendencia hacia mayor igualdad, pero que la situación cambia entre 1969 y 1979. Con respecto al papel de la educación en la distribución del ingreso, este autor encuentra que el efecto de la variable no tiene significación estadística.

Independientemente de lo que haya sucedido con la distribución del ingreso en Puerto Rico, al examinar las investigaciones realizadas, se encuentra que (a pesar de los reclamos de algunos autores)el papel de la educación como agente promotor de equidad es trivial o ninguno - pues la variable no resulta con significación estadística. Ese resultado no solo es inconsistente con estudios realizados en los Estados y otros países, sino que es contrario a la creencia nsual.

Aseso:{a y Consulta, Inc.

Efectos Intergeneracionales y Distribuqón del Ingreso

Costos Sociales de la Deserqón Escolar en p.r.

por lo que conviene analizarlo con algún detenimiento.

Hallazgos en este estudio pueden ayudar a explicar, cuanto menos en forma parcial, los resultados de las investigaciones realizadas acerca de la distribución del ingreso en Puerto Rico.

En el capítulo 5 de este informe se indicó que la educación desempeña un papel contradictorio en la promoción de la equidad entre los sexos. AIK se encontró que al comienzo de la distribución de escolaridad, al aumentar el nivel de educación disminuyen las diferencias en ingreso entre los sexos. Como se ilustra en el Diagrama 1, en el caso de los desertores escolares, el ingreso promedio de los varones es 1.35 veces el de las mujeres. Esa diferencia va disminuyendo a medida que aumenta el nivel de escolaridad, alcanzando su mínimo cuando el nivel de educación es de 13 a 14 años. En ese punto el ingreso

DIFERENCIAS RELATIVAS ENTRE SEXOS EN INGRESO GANADO PROMEDIO

Diagrama 1

promedio de los varones es 1.18 veces el de las mujeres en ese nivel de escolaridad.

Sin embargo, después de ese punto, la educación cesa de actuar como instrumento para promover la equidad en la distribución del ingreso entre los sexos, convirtiéndose en promotora Asesoría y Consulta. Jnc.

Cr^ 11 11 a 14 19 a U 174 CICOLAIIMI

jgQ

Efectos Intergeneracionales y DisTRiBuaóN del Ingreso de inequidad. Después del nivel educativo de 13 a 14 años de escolaridad, aumenta el diferencial en el ingreso promedio entre los sexos. El mayor diferencial en la distribución se registra en el nivel de 17 ó más años de escolaridad, donde el ingreso promedio de los varones en esa categoría es L42 veces mayor al de las mujeres.

Ese efecto variante de la educación sobre la distribución del ingreso entre los sexos, puede ayudar a explicar que en la literatura resulte que el efecto de la educación sobre la distribución global del ingreso sea trivial o sin significación estadística. La mayor promoción educativa registrada en el país^°, tiene un efecto de estimular mayor equidad entre las personas que alcanzan los primeros niveles educativos, pero el efecto se revierte cuando se pasa a los niveles educativos superiores. Como ambos efectos están ocurriendo en forma simultánea con direcciones opuestas, en el agregado tienden a cancelarse entre sí; resultando el efecto básicamente neutro que informa la literatura.

Ahora bien, como el fenómeno de la deserción escolar ocurre en las primeras etapas de la distribución de escolaridad, donde mayor educación se asocia con mayor equidad, aumentar el nivel educativo en ese punto tiene un efecto de promover la equidad en la distribución del ingreso. Así entonces, acciones encaminadas a prevenir y remediar la deserción escolar son consistentes con la promoción de la equidad social.

Asesoría v Consulta, Inc,

Efectos Intergeneracionales

No cabe duda que la deserción escolar limitalas oportunidades económicas del desertor, lo cual actúa en contra de la equidad social. Así planteado, el problema es uno estático; es decir, se refiere al estado de situación en un momento dado, pero puede tener consecuencias dinámicas. Si las oportunidades de los hijos de los desertores escolares se afectan por la escolaridad de sus padres, entonces la condición de desigualdad que ocasiona ladeserción escolar promueve una dimensión de inequidad intergeneracional, al limitar la movilidad social a través del tiempo.

La literatura reconoce que la educación de los padres tiene importantes consecuencias sobre las oportunidades educativas de los hijos. Se ha establecido que la escolaridad de los padres es un factor de importancia afectando el nivel de ingreso y la selección de profesión u oficio de los hijos^'. También se ha encontrado que las características del medioambiente social del que procede el estudiante, incluyendo en forma especial la escolaridad de los padres, son determinantes sobre el aprovechamiento académico; de forma que a menor sea la escolaridad de los padres, menor tiende a ser el aprovechamiento académico de los hijos^. De esta suerte, la probabilidad de que un joven sea desertor escolar aumenta si sus padres también lo son^. Es evidente que la limitación, que se establece en la literatura, en las oportunidades educativas de los hijos de desertores escolares tiene el efecto de restringir la movilidad social a través del tiempo. Tal situación tiene importantes connotaciones sociales, adicionales a la Asesoría y Consulta, Inc.

■fsm Costos Sociales de la Deseroón Escolar en P.R. ' 11 i1 I ' lí ñ

dimensión de inequidad dinámica ya mencionada. Por ejemplo,la literatura económica concluye que existe un requisito de movilidad social dinámica para la existencia de sistemas constitucionales democráticos^^, condición cuyo cumplimiento automático se dificulta con la deserción escolar.

En resumen, la deserción escolar promueve el desarrollo dinámico de un círculo vicioso, donde los hijos de los desertores tienden también a serlo. De esta forma, la situación de desigualdad social que promueve la deserción escolar tiende a perpetuarse a través del tiempo deteriorando la cohesión en las estructuras sociales.

Resumen y Conclusiones

En capítulos anteriores se estableció que el desertor escolar registra una mayor probabilidad de estar marginado de la fuerza laboral que el resto de la población. Más aún aquellos de ellos que participan en el grupo trabajador tienen una mayor posibilidad de estar desempleados, mientras que los que obtienen un empleo devengan un salario menor que sus compatriotas con niveles más altos de escolaridad. Resulta entonces evidente que la deserción escolar introduce una dimensión de marginación e inequidad entre sectores sociales la cual debe reflejarse, entre otras manifestaciones, en la distribución del ingreso.

Al revisar la investigaciones realizadas en Puerto Rico acerca del tema de la distribuc'ó del ingreso, se encontró que los autores no han podido establecer una clara relación estadísti

Asesoría y Consulta, Inc.

Efectos Interceneracionales y Distribuqón del Ingreso

entre aumentos en los niveles de escolaridad y mayor equidad en la distribución del ingreso. Esa situación se puede explicar por el papel contradictorio que tiene la educación en la promoción de la igualdad económica entre los sexos. Se encuentra que, hasta llegar al nivel educativo de 13 a 14 años de escolaridad, a mayor sea la escolaridad menor es la diferencia entre los sexos en el ingreso ganado por el trabajo. Sin embargo, después de ese nivel la relación cambia, de suerte que al pasar a mayores niveles de escolaridad aumenta la diferencia entre los sexos en el ingreso ganado. Como ambos efectos están ocurriendo en forma simultánea con direcciones opuestas, en el agregado tienden a cancelarse entre sí; resultando el efecto básicamente neutro que informa la literatura.

Toda vez que prevenir y controlar la deserción escolar ocurre en la zona donde aumentar la escolaridad mejora la equidad entre los sexos, aumentar el nivel educativo en ese punto tiene un efecto de promover la equidad en la distribución del ingreso. Así entonces, acciones encaminadas a prevenir y remediar la deserción escolar son consistentes con la promoción de la equidad social.

Se encuentra, además, que la deserción escolar promueve el desarrollo dinámico de un círculo vicioso, donde los hijos de los desertores tienden también a serlo. De esta forma, la situación de desigualdad social que promueve la deserción escolar tiende a perpetuarse a través del tiempo, deteriorando la cohesión en las estructuras sociales.

DIST-ING.DES

Asesoría y Consulta, Inc.

en P.R.
Costos Sociales de la Deserqón Escolar

1. Sobre este particular, el lector puede referirse a: J. Mincer, "Investment in Human Capital and Personal Income Distribution", Joumal ofPolitical Economy, Vol. LXVn, No. 4 I95gG. S. Becker y B. R. Chiswick, "The Economics of Education and the Distribution of Eamings",American Economic Review, Vol. LH,No.5, 1962; A. Al-Samarrie y H.P. Miller "State Differentials in Income Concentration", American Economic Review, Vol. LVn* No l' 1967, págs. 57 a 72; T. S. Sale UI, "Interstate Analysis in the Size Distribution of Familv Incomes", Souihem Economic Joumal, Vol. XL, 1974; J. Tinberger, Income DistributionRecent Research, Amsterdam: North-Holland, 1975; B. R. Chiswick y J. A. O'Neill Human Resources and Income Distribution: Issues and Policies, New York: W. W. Norton 1977

2. Para una revisión crítica, bastante amplia, de este tema, véase a R. Cao García y H M i Díaz, Educación Universitaria y Oportunidad Económica en Puerto Rico Madrid- PH't Betania, 1988, cap. 3. » . i nal

3. S. Kuznets, "Economic Growth and Income Inequality", American Economic Rpví^v,, i XLV, No. 1, 1955. review, Vol.

4. F. Andic, Distribution ofFamily Incomes in Puerto Rico, Río Piedras* Institutp nf r -uu Studies, University of Puerto Rico, 1964. * ^^bbean

5. H.P. Miller, Poverty in Puerto Rico, San Juan: ELA de Puerto Rico, Junta de Planificació 1964.

6. F. Andic, "La distribución del ingreso en la fuerza obrera de Puerto lo^n Revista de Ciencias Sociales, Vo) Vm,No. 2, 1965, págs. 113 a 145 1949-1959",

1. R. Castañeda y J. A. Herrero, "La distribución del ingreso en Pn^rt^ t>* comentarios en base a los años 1953-1963",Revista de Ciencias Sociales, Vol DC

Asesoría y Consulta, Inc.

Efectos
Intergeneracionales y Distribución del Ingreso Notas

Costos Sociales de la Deserción Escouvr en P.R.

8. F. Andic,"Un comentario en tomo a la distribución del ingreso en Puerto Rico: Un estudio realizado a base de los años 1953-1963", Revista de Ciencias Sociales, Vol. IX, No. 4, 1965, págs. 363 a 372.

9. R. Castañeda y J. H. Herrero, "Más sobre la distribución del ingreso: Contrarréplica al doctor Andic", Revista de Ciencias Sociales, Vol. X, No. 2, 1966.

10. ELA de Puerto Rico, Junta de Planificación, Informe Económico al Gobernador, 1966. San Juan: Junta de Planificación, 1967.

11. R. Weisskoff, "Income Distribution and Economic Growth in Puerto Rico, Argentina and México", Review ofIncome and Wealth, Vol. XVI, 1970.

12. R. Maldonado, "Distribución del ingreso y el desarrollo económico de Puerto Rico", Revista de Ciencias Sociales, Vol. XVin, Nos. 1-2, 1974; y R. Maldonado, "Education, Income Distribution and Economic Growth in Puerto Rico", Review ofSocial Economy, Vol. XXXTV, No. 1, 1976.

13. A. J. Mann y W. C. Ocasio, "La distribución del ingreso en Puerto Rico: Una nueva dimensión". Revista de Ciencias Sociales, Vol. XIX, No. 1, 1975.

14. F. Andic y A. J. Mann, "Secular Tendencies in the Inequality of Eamings in Puerto Rico", Review ofSocial Economy, Vol. XXXIV, No. 1, 1976.

15. A. J. Mann y W. C. Ocasio, "The Determinants of Income Concentration in Puerto Rico MunicipíJlities", Revista/Review Interamericana, Vol. VII, No, 2, 1977.

.16. ELA de Puerto Rico, Departamento del Trabajo y Recursos Humanos, Negociado de Estadísticas del Trabajo, Estudio sobre el Ingreso Monetario de las Familias en Puerto Rico. Año Natural 1977. San Juan: mimeo., 1977.

Asesoría y Consulta, Inc.

17. R. Cao García, "Distribución del ingreso en Puerto Rico: Unos comentarios y un nuevo análisis", Revista de Ciencias Sociales, Vol. XXI, Nos. 3-4, 1979.

18. R. Gorrada Guerrero, "La distribución del ingreso en Puerto Rico", Revista Homines Vol IV, No. 2, 1980.

19. F. M. Cué, íncome Distribution and Economic Development: A Case Study of Kuznets Hypothesis Applied ta Puerto Rico. Oklahoma State University, disertación doctoral, 1985.

20. Para una evaluación de la tendencia de la escolaridad mediana en la fuerza laboral de Puerto Rico, refiérase al capítulo 2,"Deserción Escolar: Una Definición Operacional",en este informe

21. M. Frau Ramos, Determinantes del Ingreso y la Profesión Seleccionada por Graduados Universitarios, Tesis de Maestría, Departamento de Econonua, Universidad de Puerto Rico Recinto de Río Piedras, 1986; y R. Cao y H. Matos, op. cit., capítulo 5. '

22. J. S. Coleman, et. al., Equality of Educational Opportunity, Washington, D.C.: US Department of Health, Education and Welfare, Govemment Printing Office, 196*6;*H *A* Averch, et. al., How Effective Is Schooling? A Critical Review and Synthesis of Research Findings, Santa Monica, California: The Rand Corporation, 1972; R. L. Thomdike, Readinz Comprehension Education in Fifteen Countries:An Empirical Study, New York: Halsted 1973D. T. Jamison, et. al., "The Effectiveness of Altemative Instructional Media: A Surve Review ofEducational Research, Vol. XLIV, 1974,págs. 1 a 67;E. G.Lewis y C.E Mas ^d' The Teaching ofEnglish as a Foreign Language in Ten Countries, New York: Halsted 1^5' R. Cao García y A. Ortiz Rivera, "Análisis Económico de la Educación Pública en'p ' Rico", Schemas, Vol. I, No. 3, 1983; H. Matos Díaz, "University Educaüon as^ Homogenizing Process: An Exploratory Study",Economics ofEducation Review Vni vt xr^ 1, 1987, págs. 49 a 54. ' ^o.

23. G. Palau Ríos, Los Determinantes Empíricos de la Deserción Escolar en Puerto R' Niveles, Tesis de maestría. Departamento de Economía, Universidad de Puertn de Río Piedras, 1984. '°®cinto

Asesoría y Consulta, ¡nc.

Efectos iNTERCENERAaoNALEs
y Distwbuctón del Ingreso

24. J. M. Buchanan y G. Tullock, The Calculm of Consem, Ann Arbor: The University of Michigan Press, 1962; R. J. Cao García, Explorations Toward an Economic Theory ofPolitical Systems, Landham, Md.; University Press of América, 1983.

Asesoría y Consulta, Inc.

la Deserción Escolar en P.R.
Costos Sociales de

Otros Beneficios Sociales de la Educación

Introducción

En las secciones anteriores de este informe se han evaluado costos sociales de la deserción escolar que son cuantificables. La intención ha sido calcular un indicador monetario de lo que la sociedad puertorriqueña pierde a causa de la deserción escolar, así como de los beneficios que recibiría de controlar ese problema. Sin embargo, el control de la deserción escolar también resultaría en beneficios que no se pueden medir en términos monetarios, pero no por eso resultan ser menos importantes. En realidad, algunos de esos beneficios, como se verá más adelante, son esenciales para la operación del sistema económico y la permanencia misma de la sociedad. Por esta razón, se ha decidido dedicar esta sección del informe a la evaluación de esos "otros beneficios sociales de la educación" que, si bien no son cuantificables monetariamente, son esenciales para que puedan existir y funcionar adecuadamente economía y sociedad.

Educación y Sistema Social

El producto de la educación es multidimensional y la importancia relativa de sus varios productos cambia con el nivel educativo. Así, en los primeros grados escolares el esfuerzo educativo se dirige a impartir destrezas básicas que capaciten el aprendizaje futuro del estudiante. Tales destrezas incluyen el desarrollo de habilidades motoras, motivación, disciplina

escolar, e iniciación en lectura, escritura y aritmética. La función primordial de todas esas destrezas es que el alumno adquiera habilidades básicas que le permitan adquirir futura información, destrezas y valores, que forman parte del proceso educativo preuniversitario. En el otro extremo del espectro, el posgrado universitario, el esfuerzo educativo se concentra en promover la práctica supervisada de la imaginación y del razonamiento sistemático para analizar fenómenos inadecuadamente estudiados, u ofrecer soluciones a problemas no resueltos.

Dentro de este conjunto de múltiples productos educativos, sobresales la función de la educación como socializadora de los individuos en una colectividad. "Los sociólogos hacen hincapié en esta función de la educación, señalando que para la existencia de la cohesión en un grupo social es necesario que las personas compartan un idioma, una visión de mundo, en fm una cultura que los ubique y permita compartir el quehacer cotidiano. Cualquier observación del preuniversitario, particularmente en sus grados primarios de instrucción, encontrará la importancia que se le asigna a este asunto en la educación preuniversitaria.'" Es evidente que en el caso del desertor escolar, se le trunca ese proceso de socialización, lo que ha de tener un efecto de marginación y de erosionar la cohesión social^.

El proceso de socialización que ocurre a través de la actividad escolar tiene consecuencias importantes para la acti/idad económica. En la escuela se desarrollan actitudes que son importantes para el mundo del trabajo. Ejemplos de esas actitudes son la puntualidad, el sentido de responsabilidad, destrezas competitivas, disposición para seguir instrucciones

Asesoría y Consulta, Inc.

Otros Beneficios Sociales de la Educación
r-

directrices, así como la capacidad para trabajar en equipo y mantener lealtad a su equipo de trabajo (compañerismo). Estas actitudes que son de tan gran importancia para el mundo del trabajo, que algunos autores consideran que ellas constituyen el producto primario del proceso educativo'.

La socialización y cohesión social que se producen por medio de la educación, también son necesarias para que un sistema democrático de gobierno pueda funcionar adecuadamente'*. Esta relación se reconoce en el hecho de que los gobiernos democráticos tienden a establecer a la educación como una responsabilidad del estado, que se debe ofrecer en forma gratuita y compulsoria. Más aún, la literatura encuentra que existe una relación directa entre educación y modernización', estando esta última ligada con la promoción de sistemas democráticos de gobierno en países con subdesarrollo económico. Otro estudio señala que para la existencia de un sistema democrático de gobierno se requiere de un conjunto de condiciones socioeconómicas, que incluyen una comunalidad de valores y equidad en oportunidades económicas, para lo cual es necesario que no ocurran variaciones amplias entre los niveles educativos de la población®.

Capacidad para Aprender y Adaptarse al Cambio

Olía función o producto que la literatura le reconoce a la educación es desarrollar en las personas la capacidad para aprender, o adquirir conocimientos adicionales. Por esta razón es que autores, como Becker, argumentan que el proceso educativo produce economías a escala^.

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

El argumento esbozado en el párrafo anterior tiene varias implicaciones. Una es que la capacidad que tenga una persona para adquirir conocimientos adicionales depende de la educación que haya acumulado. Un desertor escolar, por definición, posee una acumulación deficiente de educación, por lo que enfrenta serias limitaciones para adquirir conocimientos y destrezas adicionales®.

Desarrollar la capacidad para aprender también permite que la persona sea más efectiva para ajustarse a cambios'. Esta capacidad es particularmente valiosa en esta época, cuando a causa de las frecuentes transformaciones económicas. Los cambios tecnológicos fuerzan a a

cambien las condiciones laborales de las personas, obligándolas no solo a que se readiestren sino aún a cambiar de ocupación, incluyendo períodos transicionales de desempleo. Por lo que los individuos tienen que efectuar ajustes periódicos, tanto en sus destrezas laborales como en sus condiciones personales. Nuevamente, los desertores escolares enfrentarán limitaciones en su capacidad para ajustarse a cambios económicos, lo que conlleva costos sociales

Transformaciones Económicas'°

En el caso concreto de Puerto Rico, es de esperar que las transformaciones económicas futuras sean aceleradas y profundas, por lo que desarrollar en las personan la ^ 1 X- tto la Liipaciaad para adaptarse al cambio cobra particular importancia. La tendencia hacia la globalización i transformaciones en el mundo que antes era comunista, se refuerzan para aumentar la de Asesoría y Consulta, Inc.

172 Otros Beneficios Sociales de la Educación •
M ^

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. y disminuir la oferta de capital de inversión. Aumenta así la competencia entre los países que como Puerto Rico, dependen de capitales extemos para financiar su inversión.

Los efectos de la regionalización en los mercados son algo más variados. Al establecerse un bloque comercial, los países que no pertenecen al mismo ven aumentadas sus dificultades para exportar al bloque. Los países miembros encuentran una ampliación en las oportunidades comerciales, la cual se registra en ambas direcciones. Un país miembro tiene menos trabas para vender sus productos dentro del bloque, pero esa ventaja conlleva el precio de abrir su economía a las importaciones. Aquellas de sus industrias que no sean competitivas, de acuerdo a los estándares de los demás países en el bloque comercial, tendrán que transformarse o desaparecer.

Dentro del contexto puertorriqueño, el desarrollo más reciente en regionalización, que incide directamente sobre nuestra economía, es el tratado para crear uña zona de libre comercio en Norteamérica (NAITA). Este acuerdo, que debe comenzar a operar en enero de 1994, incorpora a México en el bloque comercial que habían creado Canadá y los Estados Unidos. La integración se prevé en etapas, que deben culminar, a más tardar, para el año 2004.

Insertar a México en el bloque económico donde opera Puerto Rico tiene el efecto de expandir sustancialmente la oferta de mano de obra no diestra en el mercado laboral extendido al que pertenecemos. La teoría econ5mica nos enseña que un incremento en la oferta de cualquier cosa suele resultar en la disminución de su precio unitario", así que los obreros no diestros en la isla deben esperar reducciones en su ingreso real y probabilidad de empleo,como

Asesoría y Consulta, Inc.

consecuencia directa de NAFTA.

La amplia disponibilidad de mano de obra no calificada y barata en México,junto a la eliminación de barreras a las importaciones de productos mexicanos, habrá de resultar en una mayor competencia de los productos aztecas que no requieran destrezas laborales especiales para su manufactura. Asimismo, se crean estímulos para la inversión extema en México dirigida a estas industrias. En tal forma, es de esperar que aumente significantemente la participación mexicana en la oferta regional de mercancías cuya producción tiene requisitos bajos de destrezas laborales. Las oportunidades de empleo en esas industrias aumentará en México'^ por lo que disminuirán en el resto de la zona de libre comercio, incluyendo a Puerto Rico

Si bien los obreros no diestros en la isla verán deteriorar su situación los obreros diestros experimentarán una mejoría en su posición económica. La expansión en la oferta laboral no cualificada, causada por la inserción de México en el mercado integrado resulta en que se vuelvan relativamente más escasos los trabajadores especializados o con destrezas específicas que sean pertinentes a las condiciones del mercado. Así que la mano de obra calificada en la isla verá mejorada su situación.

El argumento presentado tiene implicaciones directas con respecto a las tendencias a esperar en el mercado laboral puertorriqueño.

Se indicó que,como consecuencia de NAFTA,la fuerza laboral no diestra en Puerto Rico tiene la expectativa de que su posición económica empeore, mientras que el sector con destre

Asesoría y Consulta, Inc.

174 Otros Beneficios Sociales de la Educación

pertinentes tiene una oportunidad para mejorar. México tiene una clara ventaja en la producción de aquellos bienes y servicios, sujetos al comercio internacional, cuya producción no requiera destrezas laborales especializadas. En esos sectores, a Puerto Rico le será en extremo difícil competir. Por ello, nuestra fuerza laboral no diestra verá limitada sus oportunidades de empleo a los sectores industriales que no participen en el comercio internacional, mayormente servicios y construcción. Tal desarrollo resulta en una disminución en la capacidad de expansión en las oportunidades laborales para el sector no diestro, lo que promueve el deterioro del ingreso relativo de los trabajadores no diestros.

Más aún, el proceso de globalización económica tiene el efecto de restar importancia al hecho de que una localidad tenga acceso a fuentes de materias primas y capital. Ello implica que el factor que se vuelve relativamente más importante para la decisión de localización industrial es la disponibilidad de una fuerza laboral calificada, puesto que son las personas quienes tienen las mayores limitaciones para transportarse entre fronteras.

Las oportunidades para el crecimiento económico en Puerto Rico se dan, entonces, en los sectores industriales de alta tecnología y productividad, con altos salarios; donde las ventajas comparativas se crean por diseño y acción humana". Así que la capacidad para el progreso económico de la isla a largo plazo depende, en gran medida, de que cuente con una fuerza laboral que sea diestra y adiestrable. Esto significa que las políticas de promoción industrial, desarrollo de infraestructura y de formación ocupacional tienen que estar integradas. Ellas no

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

son otra cosa que tres aspectos de un mismo asunto; crear ventajas comparativas que sean consistentes con las condiciones económicas en gestación.

Es importante reconocer que no basta conque las personas posean destrezas laborales adecuadas a las condiciones vigentes en el mercado; sino que es también necesario que sean capaces de adquirir nuevas destrezas al menor costo posible. Se requiere entonces que el sistema educativo formal [K-12] desarrolle en sus educados, más que otra cosa, la capacidad y la voluntad para aprender; ya que los cambios tecnológicos, con rapidez, tornan obsoletas las destrezas específicas que posea una persona. En el caso de Puerto Rico, la situación se agrava porque el tamaño de la economía promueve que ella registre profundas transformaciones estructurales con periodicidad.

Dentro de este contexto, los desertores escolares tendrán una limitada capacidad para adaptarse a los cambios esperados. Ello no sólo refuerza la tendencia hacia la marginación social de estas personas, sino que limita la capacidad del país para adaptarse al cambio Esta limitación restringe las posibilidades para el crecimiento económico y el progreso social en la

Otros BENEnaos Sociales de la Educactón
Asesoría y Consulta, Inc.

Educación y Salud'^

Otro beneficio económico de la educación que resulta de difícil cuantificación es el de la relación entre educación y salud. La evidencia presentada en la literatura indica la existencia de una relación positiva entre educación y mejor salud''. Que una persona tenga mejor salud no solo la beneficia a ella, sino que también a la sociedad. A mejor sea la salud del individuo, todo lo demás constante, mayor será su productividad y menos los días de trabajo que pierda, por lo que aumenta su capacidad para producir y generar ingreso. Asimismo, una persona saludable no contagiará enfermedades a otros miembros de la colectividad. Además, un mejor estado de salud reduce el uso de recursos necesarios en servicios médicos, de hospital y en medicamentos; lo cual permite que la sociedad pueda disponer de más recursos para promover su crecimiento económico, o asignarlos a otras actividades socialmente deseables.

En la literatura también se establece una relación negativa entre educación e incapacidad ocupacional esto es, a mayor sea el novel educativo del individuo, menor tiende a ser la probabilidad de que se incapacite ocupacionalmente. También se ha encontrado que, a mayor sea el nivel educativo de la madre, menor es la probabilidad de que un niño sea anémico u obeso y mayor la probabilidad de que tenga buena dentadura. Así que la relación entre educación y salud no solo aplica a la persona educr da, sino que se extiende a su descendencia.

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Administración del Hogar

La literatura también señala que las personas más educadas tienden a ser consumidores más eficientes", lo que no solo mejora la eficiencia económica en general, sino que también tiene efectos directos sobre la administración del hogar. Así se ha determinado que las personas más educadas muestran una mejor capacidad para proteger sus ahorros de los efectos de la inflación'®, por lo que pueden tener mayor independencia financiera en su vejez, con mejor capacidad discresional para el uso de sus ingresos en sus años productivos. Asimismo se ha encontrado que existe una relación directa entre el nivel de escolaridad y la capacidad que muestre la pareja para la planificación familiar".

En la literatura también se establece que la escolaridad de los cónyuges está correlacionada^", así como que la escolaridad de la esposa tiende a aumentar el ingreso del marido^'. Estos hallazgo en la literatura han llevado a que algunos autores sugieran que la educación promueve la felicidad conyugal, puesto que facilita el emparejamiento en el mercado matrimonial^^. Debe señalarse, sin embargo, que la propensión al divorcio aumenta con 1 nivel de escolaridad de la esposa; lo que algunos autores atribuyen al hecho de que el incremento en el ingreso femenino disminuye las ventajas económicas del matrimonio^®

En resumen, la literatura establece con claridad que la educación ue .ae a mejorar las decisiones cotidianas de las personas y la administración del hogar. Ello incrementa el biene tar de los individuos en formas que no son estimables en términos monetarios pero no por ello

Asesoría y Consulta, Inc.

Otros Beneficios Sociales de la Educación

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

resultan ser menos relevantes. Los desertores escolares sufren una disminución en esos beneficios, la que depende del nivel en que abandonen la escuela: a más temprana sea la deserción, mayor la pérdida de beneficios.

Efectos sobre Equidad

Puesto que existe una relación directa entre el nivel de educación de una persona y su ingreso, numerosos autores han argumentado a favor de promover la educación como instrumento para la equidad social. Este argumento se ha tomado más crítico en tiempos recientes, cuando los rápidos cambios tecnológicos llevan a que las personas en el mercado laboral requieran niveles crecientes de destrezas. Así, en las últimas décadas, las dos terceras partes menos diestras de la fuerza laboral en los Estados Unidos ha experimentado una reducción neta en su salario real, a pesar de que el Producto Nacional Bruto real creció^. En consecuencia, el tercio más educado de la fuerza laboral estadounidense registró un crecimiento neto más que proporcional en su ingreso real. Así entonces, para que la educación sea un instrumento de equidad social, es necesario que ella misma se distribuya equitativamente, puesto que de otro modo se toma en una fuerza promotora de desigualdad. La deserción escolar resulta, e.i esta forma, en un elemento generador de inequidad social, ya que da lugar a desigualdad en la distribución de escolaridad en la población.

Asesoría y Consulta. Inc.

Debe reconocerse que las relaciones socioeconómicas usuales no tienden a promover mayor equidad en la distribución de la educación. En la literatura se reconoce que el nivel de escolaridad de una persona, y aún su nivel de aprovechamiento académico, están altamente relacionados con el nivel educativo de sus padres^^, por lo que la promoción de igualdad en la distribución social de la educación requiere una intervención activa de la colectividad.

En el caso de Puerto Rico, se han efectuado numerosos estudios relacionando educación y distribución del ingreso^*^. Las conclusiones de esos estudios no parecen ofrecer una visión clara del fenómeno, lo que puede deberse a las dificultades que encuentran para establecer indicadores adecuados de la distribución de la educación en la población. Aún así, parece existir consenso en la literatura de que mayor igualdad en la distribución de la educación tiende a promover mayor equidad en la distribución del ingreso. Puesto que controlar la deserción escolar tiene el efecto de disminuir la desigualdad en la distribución de la educación, es de esperar que ello promovería una situación de mejor justicia social.

Resumen y Conclusiones

Esta sección del informe se dedicó a considerar beneficios de la educación que no pueden ser cuantificados en términos monetarios. Entre esoj beneficios se identificaron la función de socialización y cohesión social de la educación, la cual es esencial para el funcionamiento y permanencia de una colectividad, en particular si su sistema de gobierno es democrático

Asesoría y Consulta. Inc.

180 Otros BENEncios Sociales de la Educación "

Asimismo se identificó el papel que desempeña el proceso educativo en el desarrollo de actitudes adecuadas y necesarias para el mundo del trabajo.

Otros beneficios identificados son el desarrollo de las capacidades de las personas para aprender y adaptarse al cambio. Se estableció que estas destrezas son particularmente importantes en el momento presente, a consecuencia de las profundas y rápidas transformaciones económicas que traen consigo los procesos actuales cambios tecnológicos, globalización económica y regionalización de los mercados. Dentro de ese contexto, se concluyó que la viabilidad misma de la economía de un país depende de que su fuerza laboral no solo posea las destrezas laborales en demanda, sino que tenga la capacidad para aprender nuevas destrezas al menor costo y adaptarse a los cambios.

En esta sección también se estableció que a mayor el nivel de educación de una persona, mejor tiende a ser su salud y la de sus hijos. Asimismo se encontró que la literatura identifica el fenómeno de que la educación tiende a mejorar las decisiones cotidianas de las personas, su eficiencia como consumidores y en la administración del hogar.

Finalmente, se discutió que, puesto que existe una relación directa entre el nivel de educación de una persona y su ingreso, numerosos autores han argumentado a favor de promover la educación como instrumento para la i quidad social. Este argumento se ha tomado más crítico en tiempos recientes, cuando los rápidos cambios tecnológicos llevan a que las personas en el mercado laboral requieran niveles crecientes de destrezas. Así, parece existir consenso en la

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.r.
Asesoría y
Consulta. Inc.

literatura de que mayor igualdad en la distribución de la educación tiende a promover mayor equidad en la distribución del ingreso. Puesto que controlar la deserción escolar tiene el efecto de disminuir la desigualdad en la distribución de la educación, es de esperar que ello promovería

una situación de mejor justicia social.

Se observa que estos beneficios son de la mayor importancia social, a pesar de que no puedan ser cuantificados en términos monetarios. Por eso, cualquier estimación monetaria de los costos sociales de la deserción escolar tiende a subestimar el valor real de tales costos por lo que esos estimados (incluyendo el que se presenta en este informe) deben evaluarse con precaución.

182
BENEnaos Sociales DE LA Educación
Otros
»s.
OTRO-BEN.DES Asesoría y Consulta, Jnc.

1. Ramón J. Cao García y Horacio Matos Díaz, Educación universitaria y oportunidad económica en Puerto Rico. Madrid: Editorial Betania, 1988, págs. 67 y 68.

2. Una de las manifestaciones de este asunto de marginación y limitación en la cohesión social de los desertores escolares se registra en la sección "Costos Sociales de la Criminalidad Asociados a la Deserción Escolar" en este informe. Allí se encontró que la probabilidad de una persona cometa actos criminales dado que es desertor escolar (0.0069) es más del triple de la probabilidad correspondiente para los que no son desertores escolares (0.0031).

3. Véase, por ejemplo, a S. J. Bowles y H. Gintis, Schooling in Capitalist América:Educational Reform and the Contradictions ofEconomic Ufe. New York: Basic Books, 1976.

4. W. W. McMahon, "Extemalities in Education", en George Psacharopoulos, ed., Economics ofEducation: Research and Studies. Oxford: Pergamon Pres, 1987, págs. 133 a 137.

5. yéase, por ejemplo, a M. Weiner, Modernization: The Dynamics ofGrowth. New York: Basic Books, 1966; A. Inkeles y D. Holsinger, Education and Individual Modemity in Developing Countries. Leiden: Brill, 1974; y a A. Inkeles y D. H. Smith, Becoming Modem Individual Change in Six Developing Countries. Cambridge, Mass.: Harvard Univ.Press, 1974.

6. Ramón J. Cao García, Explorations Toward an Economic Theory of Political Systems. Lanham, Md.: University Press of América, 1983, cap. 3.

7. Gary Becker, Human Capital. New York: National Bureau ofEconomic Research, 1964.

8. Otra implicación, que no es objeto de este estudio, es que para acumular efectivamente educación, la persona tiene que participar formalmente en el proceso educativo. Así, sustituir educación formal por exámenes que certifiquen conocimientos o destrezas no es una alternativa que equivalga al resultado de un proceso educativo, aunque se emita un certificado o credencial

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. Notas

como resultado del examen.

9. T. W. Schultz, "The Valué of the Ability to Deal with Dlsequilibria", Joumal of Economic Literature, Yol. 13, 1975, págs. 827 a 846.

10. La discusión en esta sección está tomada de Ramón J. Cao García, "Cambios tecnológicos integración económica y tendencias ocupacionales en Puerto Rico", ponencia presentada en el Primer Forosobre la Formación Tecnológica-Ocupacional, Hotel Caribe Hilton San Juan P p 6 de octubre de 1992. ' ' •

ll.I^ única excepción principal a esta regla es el caso de los servicios médicos. Este tipo de servicio tiene características muy particulares, en cuanto a la difusión de las propiedades del servicio, la información disponible al consumidor y la organización de su oferta, por lo que su producción no ocurre dentro de estructuras tradicionales de mercado.

12.Un estudio realizado por la empresa Peat Marwick identifica los siguientes sectores de la economía mexicana como los que registran mayores posibilidades de expansión en el emnl como consecuencia de NAFTA: ^

Sector Industrial

Cosechas agrícolas

Construcción

Frutas y vegetales

Hoteles y restaurantes

Minería

Otros servicios comerciales

Ropa

Refinación de azúcar

Textiles

y seguros

Aumento Esperado en el Empleo __fQOO)

1
Otros Beneficios Sociales de la Educación
Piezas
vehículos
Equipo eléctrico 333.1 141.0 113.8 40.5 28.9 26.0 25.4 25.4 24.4 22.7 15.9 15.9 Asesoría y Consulta, Inc,
Finanzas
de
de motor

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.r.

Componentes electrónicos

(KPMG Peat Marwick - Policy Economics Group, The Effects of a Frpp a betweenthelT.S and Mevico. Washington,

incluyen la microelectrónica, farmacéutica y biotecnología nuevos herramínt diseno y manufactura de aviones, robótica y máquinas herramientas, computadoras y programación. maquinas

McMahon."Consumplion Benefits of Education , en G. Psacharopoulos, op. cit., págs. 129 a 133.

N

l u' "Tlis CorrelaUon between Health and Schooling", en 1976 pág^ Í47 a 2°n Consumption. New York: Columbia Univ.Presa, 38; pd"2®r""

17. Gary Becker, Economic Theory. New York: Alfred A. Knoff, 1971.

id' I'f'a'ion Between Schooling and Savings Behavior", en F. T. Juster, Education, Income and Human Behavior. New York: McGraw-Híll, 1975, págs. 253 a ^oi^üdcVnalyih °Í960 tó^lPSO Xth^ bolina, "Working Wiyes in Puerto Rico: An Association «Jan Tnan rr. oQ • , Annual Confeicnce of the Caribbean Studies Benents of Educatio.;-? en W.'W'McMAof/ Non-Monetary Overcomin,.nemency and hne.uiiy. Urban:,^L•u°iv.°o^l¿nS•¿retT82'

Asesoría y Consulta, Inc.

15» 1

Otros Beneficios sociales de la Educación

20. R. T. Michel, op. cit., y W. W. McMahon, "Why Families Invest in Education", en S Sudman y M. Spaeth, eds., The Collection and Analysis of Economic and Consumer DataEssays in Honor ofRoben Ferber. Urbana, 111.: Univ. of Illinois Press, 1984.

21. L. Benham, "Benefíts of Women's Education Within Marriage", en T. W. Schultz ed Economics ofthe Family. Chicago: Univ. of Chicago Press, 1974. ' '

22. Gary Becker, A Treatise on the Family. Cambridge, Mass.: Harvard Univ. Press 1981 cap. 4. Para un análisis, desde otra perspectiva, que refuerza ese argumento, véase a Ramón J. Cao García, "Educación privada y desigualdad: Un análisis económico", Revista de Cienrin^ Sociales, Vol. XXIII, Núms. 1-2, 1981.

23. Gary Becker, op. cit., 1981.

24. Lester Thurow, Head to Head. New York: William Morrow and Comoanv IQQó 163 a 164. '

25. H. A. Averch, S. J. Carroll, T. S. Donaldson, H. J. Kiesling y J. Pincus. How Effective Is Schooling? A Critical Review and Synthesis ofResearch Findings. Santa Monica, Calif • Th Rand Corporation, 1972; D. T. Jamison, P. Suppes y S. J. Wells, "The Eff¿tiveness of Altemative Instructional Media: A Survey",Review ofEducationalResearch, Vol. XLIV 1974 págs. 1 a 67; Manuel Frau Ramos, Determinantes del ingreso y la profesión seleccionada do' graduados universitarios. Tesis de maestría, Depto. de Economía, Universidad de Puerto Ri ^ Recinto de Río Piedras, 1986; Horacio Matos Díaz y Ramón J. Cao García "Uni Education as an Homogeneizing Process: An Exploratory Study", Economics of FA Review, Vol. VI, Núm. 1, 1987, págs. 49 a 54. ^ucation

26. Véase, entre otros, a Rita Maldonado, "Education, Income Distribution and Ec Growth in Puerto Rico", Review of Social Economy, Vol. XXXIV, Núm, 1 1975. Andic y Arthur J. Mann, "Secular Tendencies in the Inequality of Eaminés in P n Review ofSocial Economy, Vol. XXXIV,Núm 1, 1976; Arthur J. Mann y Wüliani C O ' "The Determinants of Income Concentration in PÍierto Rico Municipalities R '' Interamericana, Vol. VII, Núm. 2, 1977; Ramón J. Cao García, "Distribución deHng^

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Puerto Rico: Unos Coméntanos y un Nuevo Análisis, Revista de Ciencias Sociales, Vol. XXI Núms. 3-4, 1979;Félix M.Cué,Income Distribution and Economic Developrnent:A Case Study of Kuznets Hypothesis Applied ta Puerto Rico. Disertación Doctoral, Oklahoma State University, 1985.

Asesoría y Consulta. Jnc.
.c

Resumen y Conclusiones

Este estudio trata acerca de estimar los costos sociales de la deserción escolar en Puerto Rico. Su propósito es calcular el monto de esos costos para el año de 1990, el cual se selecciona por ser un año censal.

Deserción Escolar: Una Definición Operacional

Estimar los costos sociales de la deserción escolar conlleva identificar cuáles son esos costos, estimar su valor por individuo y agregar para la población de desertores escolares'.

Claro que antes de proceder, según lo indicado al comienzo del párrafo, es necesario definir con claridad cuál es la definición que se ha de emplear para "desertor escolar". Por ello, en el capítulo 2 de este informe, se analizan las ejecutorias históricas en el mercado laboral de las personas con diferentes niveles de escolaridad. A base de ese análisis se establece una definición operacional de la deserción escolar, la cual se contrasta con las que se encuentran en la literatura.

La literatura usualmente utiliza como criterio de deserción escolar a no completar la graduación de escuela superior. Desde una perspectiva estrictamente económica, el problema del costo social de la deserción escolar surge porque las destrezas de la persona lo ubican en una posición de desventaja con respecto a la productividad promedio de la población. Ello hace que la capacidad del desertor para emplearse y generar un ingreso sea una desventajosa. Puesto que

la escolaridad mediana de la fuerza laboral ha estado aumentando a través del tiempo, resulta pertinente preguntar si no ha cambiado el nivel de escolaridad que establece el umbral para la desventaja en el mercado laboral. Además, es posible que los niveles de desventaja laboral varíen sustancialmente entre personas con diversos niveles de escolaridad, en cuyo caso sería necesario establecer varias categorías de desertores, en vez de agregarlos en una sola.

Para evaluar esas posibilidades, se examinaron las tasas de desempleo por nivel de escolaridad para el período de 1963 a 1991, cubriéndose así 29 años en el análisis. Se encontró que, a partir de 1976, las desventajas de las personas con de 10 a 11 años de escolaridad se mantienen constantes en el mercado laboral. En términos generales, este grupo laboral registra tasas de desempleo que, en promedio, exceden en 9.4 puntos porcentuales las de la población en general.

DESERCION ESCOLAR Y DESEMPLEO

Las personas con Diagrama 1 I educación postsecundaria tienden a mostrar una ventaja estable en el mercado laboral de suert que su tasa de desempleo tiende fluctuar manteniendo una distancia promedio de 8 5

Asesoría y Consulta, Inc.

190
y Conclusiones
Resumen
fQrctniualvs uta X»t3 1967 1969 1971 1973 1975 1977 1979 1961 1963 1983 1987 1989 i,',i Futnti: Dipto. dti Tr«b<;o v Fac. Hum.
Fu/)tos

Costos Sociai^ de la Deserción Escolar en P.R.

porcentuales por debajo de la tasa para la población. Así que, durante los pasados 15 años, no parece que hayan ocurrido cambios en las ventajas y desventajas laborales relativas de las personas con niveles de escolaridad mayores y menores a la graduación en escuela superior, a pesar del aumento registrado en la escolaridad mediana de la fuerza laboral.

El siguiente asunto que se trató en el análisis fue comparar si las oportunidades laborales de las personas no graduadas de escuela superior, pero con niveles diversos de escolaridad, registran diferencias sustantivas. El análisis estadístico concluyó que las oportunidades o desventajas laborales para las personas con de 7a9 años de escolaridad no son significantemente diferentes a las que experimentan las personas con de 10 a 11 años de escolaridad.

Resulta entonces que el análisis, concluye que la información estadística evaluada es consistente con utilizar al criterio de graduación de escuela superior como base para definir operacionalmente la deserción escolar. Por esta razón se adopta ese criterio, según es lo tradicional en la literatura.

Estimado del Número de Desertores Escolares

Una vez de define operacionalmente, para propósitos del estudio, la deserción escolar, se procede a estimar el número de desertores escolare:, en Puerto Rico. El problema aquí es que el Departamento de Educación estima "tasas de retención" como el número de estudiantes en un grado dividido entre el número que comenzó estudios para esa clase. Pero la pérdida de Asesoría y Consulta. Inc.

estudiantes en las escuelas del Departamento no significa que los no retenidos sean necesanamente desertores escolares. El número de estudiantes en una clase en escuelas públicas puede mermar a causa de la emigración, la transferencia a escuelas privadas y la muerte e incapacidad de estudiantes. La tasa de retención así calculada también se afecta por la inmigración y la transferencia de estudiantes de la escuela privada a la pública. Por todas esas razones, es necesario ajustar los estimados de deserción escolar del Departamento de Educación para obtener un indicador más preciso del número de desertores escolares en la población También es necesario analizar los cambios y tendencia en la tasa de deserción a través del tiempo y entre grupos de edades.

Para estimar el número de desertores escolares en Puerto Rico, se utiliza la definición operacional establecida anteriormente: un desertor escolar es una persona adulta que no completa sus estudios de escuela superior, esto es, que su escolaridad es menor a 12 años. Para no incluir como desertores escolares a personas con rezago en sus estudios, se excluye de la definición de deserción escolar a las personas que estén matriculadas en cualquier institución educativa Así por ejemplo, un joven de 20 años de edad, que haya completado el lOmo. grado, pero que esté asistiendo a una escuela u otra institución educativa, no se considera desertor escolar. Tampoco se consideran desertores escolares a los menores que vivan como dependientes de un jefe 'e , familia, aunque no asistan a la escuela. Esto se hace para evitar incluir como desertor escolar a aquellos menores que interrumpen temporalmente sus estudios.

Asesoría y Consulta, Inc.

Resumen y Conclusiones 1

Costos Sociales de la Deserctón Escolar en P.R.

Utilizando los criterios indicados en el apartado anterior, se estima que la tasa de deserción escolar de varones es 46.2%. Puesto que, de acuerdo a la información censal, el número total de varones con 15 ó más años de edad en la población '

es 1,200 mil, se estima que el TV.IM total de varones que son desertores

5S.K( escolares es 554 mil. Con «•»>< 30.BX respecto a las personas del sexo

10.BM femenino, a base de la ■.«.

T información muestral se calcula Diagrama 2

ASAS ESTIMADAS DE DESERCION ESCOLAR PUERTO RICO; 1992

que su tasa de deserción escolar es 55.2%. Toda vez que la información censal indica 1,364 mil personas del sexo femenino con 15 ó más años de edad, se estima que 753 milpersonas del sexo femenino son desertores escolares. La tasa de deserción resultante para la población total es 51.0%.

Se observa que este resultado significa que, nuevamente, aumentó la proporción de graduados de escuela superior en la población. Como se indicó antes en este capítulo, tal fenómeno sólo puede ocurir si la tasa de deserción escolar ha estado disminuyend:"* a través del tiempo. Para verificar esa hipótesis, se decide examinar la de deserción escolar por sexo y grupos de edad. De ser cierta la hipótesis, se espera que la tasa de deserción escolar aumente

Asesoría y Consulta, Inc.

fe.-.,;--

mientras mayor sea la edad del grupo.

r El Diagrama 3 informa las tasas de deserción escolar por sexo y grupos de edades para las personas mayores de 25 años en la muestra. Se encuentra que, según lo esperado, las tasas de deserción escolar tienden a ser mayores para los grupos de mayor TASAS ESTIMADAS DE DESERCION ESCOLAn~ POR GRUPOS DE EDAD Y SEXO edad. Otro hallazgo interesante es »»■< que la diferencia entre sexos en

1 j t ^ las tasas de deserción escolar For Citfito

• NucmIIao FMiCfilii disminuyea medidaquesereduce a»-'», aa-a, 4«-m 4»^, J la edad de los grupos, Uegaudo a — | desaparecer la diferencia para ei Diagrama 3 grupo en las edades entre 25 y 29 años^

En el Diagrama 4 se presenta la distribución por sexos y grupos de edad de las proporciones de personas con educación postsecundaria. Nuevamente se encuentra que las personas másjóvenes tienden aestar mejoreducadas quelas mayores. Además ladesventa" educaúonal delaspersonasdelsexofemenino, nosolodisminuj-enlosgruposdemenoredad sino quepara las edades entre 25 y 34 años laproporción depersonas del sexo femenino co educación postsecundaria es mayor que la correspondiente al sexo masmiínoS x """"

Asesoría y Consulta, Inc.

• Eos patrones

Resumen y Conclusiones

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. identificados en estos dos diagramas indican que a través del tiempo han estado ocurriendo cambios de significación en la distribución de la educación entre los sexos.

POR OENTO CON EDUCAOON POST-SECUNDARIa"

POR GRUPOS DE EDAD Y SEXO

Diagrama 4

Parecen existir dos fenómenos en la población que están relacionados con la deserción escolar, aunque pueden considerarse diferentes a ella. Uno es el rezago escolar. Esta categoría comprende a estudiantes, matriculados en instituciones educativas, que no registran un progreso académico normal; esto es, que en cada año académico no incrementan su nivel de escolaridad también en un año. El problema con estas personas es que, a pesar de no ser desertores escolares, bajo la definición operacional que se emplea en este estudio, parecen registrar una alta probabilidad a desertar de la escuela".

Por otra parte, al examinar la información estadística, se observa que la proporción de personas que no ha completado 12 años de escuela sup erior es mayor en el grupo de edades de 17 a 24 años, que en el de 25 a 29 años. Este fenómeno puede tener dos causas:(1)un aumento en la deserción escolar durante los últimos años, o (2) que existan sectores poblacionales que Asesoría y Consulta. Inc.

23-» 38-34 33-33 48-44 43-43 38-34 15-33 48-44 43-43

abandonen temporalmente sus estudios escolares, pero que al cabo de algún tiempo completan el cuarto año de escuela superior.

PROPORCION DE PERSONAS CON ~~

ESCOLARIDAD MENOR A 12mo. GRADO POR EDAD Y SEXO

Diagrama 4

La hipótesis de un aumento reciente en la tasa de deserción escolar es inconsistente con el resto de la información estadística analizada en este estudio. Se ha visto que, entre 1963 y 1991, ha estado aumentando la escolaridad mediana de las personas en la fuerza laboral del país También se observó que la escolaridad mediana de la población aumentó entre 1960 y 1980 de acuerdo a la información censal. Más aún, las tasas de deserción escolar aumentan a medi'a que se pasa a grupos poblacionales de mayor edad. Toda esta información es consistente con una tendencia secular a la disminución en la tasa de deserción escolar a través del tiempo po

Asesoría y Consulta. Inc.

Resumen y Conclusiones
PQX CIENTO Miiculino Femenino 17-29 21-24 25-29 39-34 35-39 49-44 45-49 59-54 55-59 (9-44 45-49 79*

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

lo que ha de descartarse la hipótesis de un aumento en la tasa de deserción escolar.

El argumento anterior lleva a la consideración de la otra hipótesis: existen personas que abandonan temporalmente sus estudios escolares, para después completar su cuarto año de escuela superior. A estos individuos se les denomina aquí desertores temporales. Debe señalarse que estas personas no necesariamente completan su escolaridad de 12 años a través del mecanismo formal de la escuela tradicional, sino que pueden completarla por otros medios, como los programas de la Administración del Derecho al Trabajo y del Cuerpo de Voluntarios.

La existencia de esta categoría de desertores temporales no solo es consistente con el patrón de la evidencia empírica, sino que también con los hallazgos de otras investigaciones. Según un estudio que realizó el Departamento de Educación de Puerto Rico en 1988, ocho de cada diez desertores escolares indicaron que deseaban volver a lá escuela^, indicando una propensión a no mantenerse permanentemente en su condición de desertores escolares.

A pesar de que escapa del tema de este estudio, parece pertinente indicar que esta situación plantea interrogantes, que convendría analizar en otras investigaciones, para el diseño de políticas públicas. El primer asunto es que, para la existencia de la posibilidad de que los desertores temporales no se conviertan en permanentes, es necesario que existan alternativas educativas para que completen la escuela superior. Es ^'vidente que tales alternativas deben ser diferentes a la escuela tradicional, puesto que:(1) ya ella falló y (2)las condiciones personales cambian con la edad, por lo cual un ambiente adecuado para un individuo de 14 años no lo es

Asesoría y Consulta, Inc.

para uno de 20 años. Sería objeto de análisis determinar si alternativas como las que ofrecen la Administración del Derecho al Trabajo y del Cuerpo de Voluntarios son eficientes para esos desertores escolares, si su oferta es suficiente para el número de personas que requieren los servicios y cómo comparan las destrezas sociales y laborales de los que adoptan esas alternativas con las de aquellos estudiantes que siguen el patrón escolar tradicional.

Otro aspecto que conviene analizar es si existen variaciones en las características de los desertores temporales y permanentes. Ese análisis es pertinente para el diseño de estrategias de prevención para la deserción escolar. Si las características difieren entre los dos grupos las estrategias también deberán ser diferentes.

Educación Empleo y Desempleo

Una vez se obtiene un estimado del número de desertores escolares en la población procede identificar, y calcular, los costos sociales asociados a esta situación. Identificar los costos sociales asociados a la deserción escolar equivale a establecer los beneficios que la sociedad pierde cuando un estudiante abandona sus estudios®. Al revisar la literatura encuentra que uno de los principales efectos que se señala es la relación entre educación productividad e ingreso"'. La literatura es consistente en identificar una relación positiva entr nivel educativo e ingreso®. Como consecuencia, a través de la educación las personas aumentan el nivel del Ingreso Nacional, contribuyendo así al desarrollo económico' CuanHn una persona

Asesoría y Consulta, Inc.

Resumen y Conclusiones

abandona la escuela, la sociedad experimenta una limitación en su capacidad para el crecimiento económico, lo que representa un costo social.

Así entonces, desde una perspectiva estrictamente económica, el problema del costo social de la deserción escolar surge porque las destrezas productivas de la persona lo ubican en una posición de desventaja con respecto a los demás miembros de la sociedad'®. Ello hace que la capacidad del desertor escolar para emplearse y generar un ingreso sea desventajosa. Por tal motivo es pertinente evaluar cómo compara la situación laboral de los desertores escolares con la de las personas que no lo son. Tal análisis permite expresar en forma cuantitativa una de las desventajas que enfrentan los desertores escolares, así como una de las pérdidas que sufre la sociedad, al no emplear la capacidad productiva de estas personas.

El análisis efectuado en el estudio lleva a la conclusión de que una disminución en la ta'ia de deserción escolar llevaría a un aumento en la tasa de participación laboral. La información estadística indica que a medida que aumenta el nivel educativo de los individuos, mayor es su disposición para participar en la fuerza laboral. Así, una disminución en la tasa de deserción escolar aumentará el número de personas buscando empleo. Tal hallazgo hace que resulte pertinente analizar la distribución de empleos por sectores económicos y educativos. Tal análisis permitirá una primera aprc.imación acerca de la capacidad de la economía para abrorber una oferta adicional de trabajadores, que resultaría de una disminución en el número de desertores escolares.

Escolar en P.R.
Costos Sociales de la Deserción

Al examinar cómo se distribuyen las personas empleadas entre los diferentes sectores económicos se encuentran resultados de interés. Uno es que, tanto en el caso de los varones como de las mujeres, las proporciones de personas empleadas en el gobierno, en un grupo de nivel educativo, aumenta a medida que incrementa la escolaridad. Esto es, mientras más educadas son las personas mayor es la probabilidad de que se empleen en el sector gubernamental. Esta tendencia es particularmente cierta para las mujeres, donde el gobierno es el principal patrono para las mujeres empleadas con educación de nivel postsecundario

Toda vez que el empleo gubernamental no ha estado creciendo en los últimos años'"

^ este sector no habría podido absorber un aumento en la oferta laboral ocasionado por una reducción en la deserción escolar. Dados los problemas fiscales que enfrenta el gobierno de Puerto Rico, no es de esperar que ocurra un cambio en su tendencia de creación de empleos por lo que en el futuro próximo no podrá ser éste el sector que capte aumentos sustanciales en la oferta laboral.

No es de esperar que la empresa privada aumente su demanda por trabajadores de ocurrir una disminución en el número de desertores escolares. Para que las empresas empleen personas es necesario que ocurran aumentos en la demanda por sus productos o que dismi

. la tasa Sí'.arial en el mercado. La demanda por trabajo no varía con cambios en la oferta labo al

.. por lo que un aumento en la oferta laboral tendría como resultado una disminn^jx^""""cion en el salario promedio, lo que traería consigo algún cambio en el número de personas empleadas S'

2ÜU Resumen y Conclusiones
Asesoría y Consulta, Inc.

embargo, la situación más deseable sería que ocurriese un aumento en la demanda por trabajo. Para ello es necesario que se tomen medidas que estimulen el crecimiento general de la economía o que aumente el autoempleo entre los participantes en la fuerza laboral.

En el estudio también se encontró que el autoempleo es una alternativa que parece ser poco atractiva para las personas. A medida que aumenta el nivel de escolaridad del individuo, menor es su probabilidad de que decida autoemplearse. Aunque este tema cae fuera del ámbito de este informe, es pertinente que, en su momento, se estudien las oportunidades y limitaciones del autoempleo para la fuerza laboral del país; de forma de identificar medidas y políticas que lo conviertan en una alternativa efectiva para la generación de empleos.

Deserción Escolar e Ingreso

A continuación, en el estudio se analiza directamente la relación entre ingreso y escolaridad, con el propósito de calcular la pérdida en ingresos del trabajo que es atribuible a la deserción escolar. Los valores que se estimen deben ajustarse por los efectos que tendría sobre la oferta laboral un aumento en el nivel de escolaridad en la población.

El primer paso en el proceso de estimación es calcular la diferencia promedio entre el ingreso ganado por los desertores escolares y las personz: que no lo son. Al respecto se utiliza como patrón de estimación la diferencia entre el ingreso promedio de los desertores escolares y el de las personas con escolaridad de 12mo. grado. Esa diferencia es la base para calcular el

Asesoría y Consulta, Jnc.

Sociales de la Deserción Escolar en P.R.
Costos

^ aumento en ingreso ganado de los desertores escolares que dejen de serlo. Ahora bien, el estimado debe ajustarse por los siguientes factores:

1. La tasa de desempleo de los desertores escolares es mayor que la de las personas con escolaridad de 12mo. grado.

2. La tasa de participación laboral de los desertores escolares es menor que la de las personas con escolaridad de 12mo. grado.

3. Un aumento en la oferta laboral tiende a causar una reducción en el salario promedio.

Para los estimados se utiliza al 1990 como año de referencia, ya que el número estimado de desertores escolares se calculó a base de la información del censo de 1990.

Al efectuar el análisis, se observa que el ingreso promedio de los varones es mayor al ■ de las mujeres para todos los niveles considerados de escolaridad. Asimismo se observa que el ingreso promedio aumenta a medida que es mayor el nivel de escolaridad. Esta situación es cierta para ambos sexos. También se observa que completar la escuela superior resulta en una mayor mejoría para las mujeres que para los varones, en cuanto a la capacidad para generar ingresos, ya que completar el 12mo. grado de educación representa, en promedio,los siguientes aumentos en el ingreso anual que gL.ian los desertores escolares:

Varones

Mujeres

$2,288.52 anuales

$2,497.66 anuales

Asesoría y Consulta, Inc.

Resumen y Conclusiones

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

El hallazgo de que el diferencial en ingreso ganado promedio entre sexos varíe con el nivel de escolaridad, amerita que el fenómeno se examine con mayor detenimiento. En el caso de los hombres, pasar de la condición de desertor escolar a la de tener una escolaridad de 12mo. grado, significa un aumento promedio de 20.9% en el ingreso ganado. Ese mismo cambio, en el caso de las mujeres, representa un incremento promedio de 28.0% en el ingreso ganado. Por lo que ese aumento en el nivel de educación es más beneficioso para las personas del sexo masculino.

La tendencia sigue con la misma dirección para el siguiente nivel de escolaridad, esto es, al pasar a un nivel de 13 a 14 años de educación formal. La tendencia en el patrón de cambio se revierte cuando se pasa a niveles educativos mayores. Aumentar la escolaridad de 13 - 14 años a 15 - 16 años es más beneficioso para los hombres que para las mujeres, y lo mismo sucede cuando la escolaridad aumenta a 17 anos o mas.

DIFERENCIAS EN INGRESO GANADO PROMEDIO CON RELACION AL INGRESO GANADO POR PERSONAS CON ESCOLARIDAD DE 12mo. GRADO

ESCOLARIDAP

Besertor

Diagrama 6

Asesoría y Consulta, Inc.

15.75Í 2Q,2:^
92.2X 47.9/ 5S.BX roí CIENTO
]

Esta situación tiene importantes implicaciones con respecto a la equidad en la distribución del ingreso entre los sexos. Al comienzo de la distribución de escolaridad, la proporción entre el ingreso ganado de los hombres, con respecto al de las mujeres, va disminuyendo, hasta alcanzar su mínimo en el nivel de 13 a 14 años de escolaridad. Hasta llegar a ese punto, la educación tiene un efecto de disminuir las diferencias entre sexos en el ingreso ganado, lo que implica que la educación actúa como promotora de equidad social. Sin embargo, al pasar a los niveles de educación mayores a de 13 a 14 años de escolaridad, se encuentra que a mayores niveles de educación, mayor es la diferencia entre sexos en el ingreso ganado, disminuyendo así la equidad.

Se observa, entonces, que la educación desempeña un papel contradictorio en la promoción de la equidad entre los sexos. Aunque escapa del ámbito de este estudio, tal hallazgo plantea interrogantes que ameritan ser investigadas, adelantándose algunas hipótesis en el informe. Cualesquiera que sean las causas para el peculiar comportamiento de los efectos de la educación sobre la equidad entre los sexos, el fenómeno identificado es lo suficientemente importante como para justificar un análisis mayor al que se le puede dedicar en este estudio.

Una vez se estima la pérdida esperada en ingreso que sufre un desertor escolar, a causa de su condición educL.iva, es necesario calcular el valor agregado de esa pci'dida para la sociedad, en un año dado. Puesto que se ha establecido que el ingreso esperado varía entre sexos, es conveniente estimar esa pérdida para cada sexo y después sumar ambos valores. La Asesoría y Consulta, Inc.

RESUMEN Y CONCLUSIONES

pérdida agregada atribuible a los desertores escolares varones se estimó en $1,992.6 millones, mientras que la correspondiente a las desertoras escolares del sexo femenino se calculó en $1,679.7 millones, ambos valores estimados para el año 1990. El costo social total por este concepto es, entonces, $3,672.3 millones. Este valor corresponde al 27.0% del total de los pagos por compensación al trabajo en 1990.

El costo social informado en el párrafo anterior supone que eliminar la deserción escolar no traería consigo variaciones en la estructura salarial de la isla. Sin embargo, tal cambio resultana en expandir la oferta laboral. Un aumento en el número de personas participando activamente en el mercado de trabajo, suele resultar en disminuir el salario promedio y aumentar la tasa de desempleo. Por este motivo, se deben ajustar los estimados de la pérdida agregada en ingresos ganados por los desertores escolares, para reconocer los efectos del incremento esperado en la oferta laboral.

Para hacer ese ajuste, se decidió utilizar el criterio propuesto por Catterall. Siguiendo el procedimiento propuesto por ese autor, la pérdida estimada en ingresos, atribuible a la deserción escolar, se reduce en 25 por ciento; lo que resulta en una pérdida ajustada neta de $2,754.2 millones. Tal cantidad corresponde al 20.3% del total de las compensacion^-s pagadas al trabajo en Puerto Rico durante 1990.

Asesoría y Consulta, Inc.

la Deserción Escolar en P.R. 205
Costos Sociales de

PERDIDA ESTIMADA EN INGRESOS A CAUSA DE LA DESERCION ESCOLAR

UaroMf 34. «1,494.4

Mujeres 45.7Z «1.259.8

Total: $2,754,2 millones 1990

Diagrama 7

Otra forma de valorar los efectos de la pérdida de ingresos ocasionada por la deserción escolar, es calcular el valor presente de los ingresos que pierde un desertor escolar a través de su vida. Ese estimado ofrece un indicador de la pérdida capitalizada que sufre la sociedad po cada uno de los desertores escolares. Al calcular ese costo social en tal forma cp pno, » iiíia, ac encuentra que el valor presente de las pérdidas estimadas en el ingreso de un desertor escolar del sexo masculino es $87,333, mientras que para uno del sexo femenino es $54 I6i Eso al contrastan marcadamente con los recursos que se asigi.an para prevenir y remediar la deserc"' escolar en Puerto Rico, ya que se estima que el gasto anual promedio por participante para eso propósitos es $407.89.

Asesoría y Consulta, Inc.

Resumen y Conclusiones
AJUSTADA

Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar

La relación entre educación e ingreso tiene otras manifestaciones sociales, que también conviene explorar. A mayor sea el ingreso de la persona, mayor será su habilidad

Al estimar esos efectos, se encontró en que 1990 el gobierno central incurrió en una pérdida de ingresos fiscales estimada en $510.4 millones. Por otra parte, atender el mayor número de estudiantes (los que ahora son desertores escolares) requeriría un aumento en el presupuesto del Departamento de Educación estimado en $334.9 millones, suponiendo que se mantendrían constantes los niveles de gasto promedio por estudiante en las diferentes partidas. Asimismo, se estimó que el Departamento de Educación tendría un incremento neto de $77.4 millones en las transferencias que recibe del gobierno federal.

Asesoría y Consulta, Inc. para pagar impuestos y, por ende, mayores los ingresos gubernamentales. Otro efecto de un mayor nivel de ingresos es la disminución en la demanda por servicios de bienestar social. Al aumentar el nivel de ingresos de una persona, se reduce su demanda por servicios de beneficencia pública. En el caso de Puerto Rico es necesario ejercer cautela al estimar ese efecto, pues gran parte de los pagos de asistencia pública se financian a través de transferencias del gobierno federal; por lo que es necesario ajustar por los efectos sobre los pagos de transferencia.

Deserción Escolar en P.R. 207
Costos Sociales de la

Deserción Escolar y Criminalidad

En la literatura también se señala que las tasas de criminalidad tienden a disminuir entre las personas con mayor nivel de educación'^; por lo que es de esperar que un aumento en el nivel educativo habrá de generar beneficios sociales por la vía de una reducción en la criminalidad. Para analizar esa hipótesis, se efectuó una revisión de estudios realizados en la Isla acerca del tema de la criminalidad. Al examinar esas investigaciones se encuentra que en efecto, en Puerto Rico también parece existir una relación inversa entre el nivel de escolaridad del individuo y la probabilidad de que incurra en actos delictivos. El examen de las estadísticas gubernamentales referentes a la incidencia criminal de menores y adultos tiende a indicar que ellas también resultan ser consistentes con el argumento de que los niveles de criminalidad tienden a disminuir a medida que aumenta la escolaridad en las personas.

En el estudio se encontró que, efectivamente,los desertores escolares registran una mayor probabilidad de incurrir en delitos, que los no desertores. Así, una reducción en el número de desertores escolares tenderá a disminuir la criminalidad, y los costos a ella asociados. Se calculó en S412.3 millones el costo social anual del crimen atribuible a la deserción escolar existente

Ese valor equivale al 37 por ciento del costo social total estimado para la actividad criminal en Puerto Rico.

Asesoría y Consulta, Inc.

208 Resumen y Conclusiones

Demanda por Educación Universitaiia

Toda vez que la deserción escolar disminuye el número de graduados de escuela superior, ella reduce el número de candidatos elegibles a realizar estudios universitarios. Este asunto es importante por varias razones. En primer término, la matrícula universitaria en Puerto Rico disminuyó a partir del año 1984, por lo que parece existir capacidad excesiva en esas instituciones educativas. Un aumento en la matrícula universitaria también incrementaría los flujos de transferencias federales, por concepto de becas, que recibiría Puerto Rico. Así aumentana el ingreso disponible en el país. Además, los nuevos estudiantes universitarios, al graduarse tendrían mayor capacidad para generar ingresos del trabajo, lo que se añadiría al valor de la pérdida de ingresos del trabajo, previamente estimado en el informe.

Sin embargo, el elemento más importante en este asunto quizás lo sea el efecto que tenga sobre la capacidad de Puerto Rico para competir bajo las nuevas condiciones económicas. Los desarrollos en la tecnología, la globalización en la industria y la regionalización de los mercados alteran las relaciones económicas. Ahora los países, para competir con éxito, requiren nuevas condicioens para la promoción industrial, incluyendo disponer de una fuerza obrera diestra y versátil". De ahí la importancia de promover la educación universitaria y postsecundaria, así como el efecto limitante de la deserción escolar en el desarrollo de la competitividad en nuestra economía.

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

Para estimar los efectos de la deserción escolar sobre la demanda por educación universitaria, se revisó información estadística pertinente y se estimaron dos ecuaciones de regresión. Esas ecuaciones relacionaron la matrícula universitaria de nuevo ingreso con el número de graduados de escuela superior y con la tasa de desempleo para losjóvenes en edades de 16 a 24 años. Se estimó una ecuación para universidades públicas y otra para universidades privadas en Puerto Rico. Esas ecuaciones se utilizaron para simular el número de matriculados en universidades en 1990, de no haber deserción escolar.

La simulación indicó que, de eliminarse la deserción escolar, en 1990 habrían 6 362 estudiantes adicionales de nuevo ingreso en las universidades del país. De ellos 6 090 habrían ingresado en universidades privadas y 272 en instituciones del estado. La diferencia en esa distribución se puede atribuir al fenómeno observado de que la universidad pública basa sus admisiones en políticas institucionales que son poco elásticas con respecta a la demanda por servicios.

Se observa que, a base de los estimados informados,la proporción de personas graduadas de escuela superior que se habrían matriculado en universidades en 1990 de no haber s'd la deserción escolar, sería 64.8%. Tal proporción es menor al valor promedio de 77 por ciento, que se ha registrado históricamente. Sin embargo, es razonable que esa proporción dismin al ocorrir un aumento sustancial en el número de graduados de escuela ucid bupenor, según es el caso en la simulación llevada a cabo.

Asesoría y Consulta, Inc.

Resumen y Conclusiones

Ahora bien, si la matrícula universitaria hubiese aumentado en 6,362 estudiantes en 1990, es de esperar que las . transferencias federales por concepto de becas habrían aumentado en $12.2 millones. Ese valor es otra pérdida de ingresos a la sociedad que ocasiona la deserción escolar.

Diagrama 3

Efectos Intergeneracionales y Distribución del Ingresa

También es importante reconocer que la deserción escolar tiende a introducir un elemento diferenciador entre sectores sociales: los más educados y los menos educados. Ello tiende a introducir una dimensión de marginación e inequidad entre sectores sociales, lo cual es contrario a la cohesión y la solidaridad social. Un indicador de esos efectos es las consecuencias que tengas las diferencias en niveles educativos sobre la distribución del ingreso.

Al revisar la investigaciones realizada^ en Puerto Rico acerca del tema de la distribución del ingreso, se encontró que los autores no han podido establecer una clara relación estadística entre aumentos en los niveles de escolaridad y mayor equidad en la distribución del ingreso.

EDUCACION UNIVERSITARIA HATBICUU
DESERCION ESCOLAR Y DEMANDA POR
1990 mcTO »EsncioH txc

Esa situación se puede explicar por el papel contradictorio que tiene la educación en la promoción de la igualdad económica entre ios sexos. Se encuentra que, hasta llegar al nivel educativo de 13 a 14 años de escolaridad, a mayor sea la escolaridad menor es la diferencia entre los sexos en el ingreso ganado por el trabajo. Sin embargo, después de ese nivel la relación cambia, de suerte que al pasar a mayores niveles de escolaridad aumenta la diferencia entre los sexos en el ingreso ganado. Como ambos efectos están ocurriendo en forma simultánea con direcciones opuestas, en el agregado tienden a cancelarse entre sí; resultando el efecto básicamente neutro que informa la literatura.

Toda vez que prevenir y controlar la deserción escolar ocurre en la zona donde aumentar la escolandad mejora la equidad entre los sexos, aumentar el nivel educaüvo en ese ™ , • C5C punto tiene un efecto de promover la equidad en la distribución del ingreso. Así entonces, acciones encaminadas a prevenir y remediar la deserción escolar son consistentes con la promociónl la equidad social.

Se encuentra, además, que la deserción escolar promueve el desarrollo dinámico de un circulo vicioso, donde los hijos de los desertores tienden también a serln tv ^crio. De esta forma, la situación de desigualdad social que promueve la deserción escolar tiende del tiempo, deteriorando la cohesión en las estructuras sociales.

Asesoría y Consulta, Inc.

a perpetuarse a través

Resumen y Conclusiones

Otros Beneficios Sociales de la Educación

La intención primordial en el estudio es calcular un indicador monetario de lo que la sociedad puertorriqueña pierde a causa de la deserción escolar, así como de los beneficios que recibiría de controlar ese problema. Sin embargo, el control de la deserción escolar también resultana en beneficios económicos que no se pueden medir en términos monetarios, pero que no por ello resultan ser menos importantes. En realidad, algunos de esos beneficios son. esenciales para el funcionamiento del sistema económico y la permanencia misma de la sociedad. Por tal razón, se ha decidido dedicar el capítulo 11 del informe a la evaluación de esos "otros beneficios sociales de la educación", que son esenciales para que puedan existir y funcionar adecuadamente economía y sociedad.

Entre esos beneficios se identificaron la función de socialización y cohesión social de la educación, la cual es esencial para el funcionamiento y permanencia de una colectividad, en particular si su sistema de gobierno es democrático. Asimismo se identificó el papel que desempeña el proceso educativo en el desarrollo de actitudes adecuadas y necesarias para el mundo del trabajo.

Otros beneficios identificados son el desarrollo de las capacidades de las personas para aprender y adaptarse al cambio. Se estableció que estas destrezas son particularmente importantes en el momento presente, a consecuencia de las profundas y rápidas transformaciones económicas que traen consigo los procesos actuales cambios tecnológicos, globalización

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

económica y regionalización de los mercados. Dentro de ese contexto, se concluyó que la viabilidad misma de la economía de un país depende de que su fuerza laboral no solo posea las destrezas laborales en demanda, sino que tenga la capacidad para aprender nuevas destrezas al menor costo y adaptarse a los cambios.

En la literatura también se establece que a mayor el nivel de educación de una persona mejor tiende a ser su salud y la de sus hijos. Asimismo se encontró que la literatura identifica el fenómeno de que la educación tiende a mejorar las decisiones cotidianas de las personas, su eficiencia como consumidores y en la administración del hogar.

Finalmente, se discutió que, puesto que existe una relación directa entre el nivel de educación de una persona y su ingreso, numerosos autores han argumentado a favor de promover la educación como instrumento para la equidad social. Este argumento se ha tomado más crítico en tiempos recientes, cuando los rápidos cambios tecnológicos llevan a que las personas en el mercado laboral requieran niveles crecientes de destrezas. Así, parece existir consenso en la literatura de que mayor igualdad en la distribución de la educación tiende a promover mayor equidad en la distribución del ingreso. Puesto que controlar la deserción escolar tiene el efecto de disminuir la desigualdad en la distribución de la educación, es de esperar que ello promovería una situación de mejor justicia social.

Se observa que estos beneficios son de la mayor importancia social, a pesar de que no puedan ser cuantificados en términos monetarios. Por eso, cualquier estimación monetaria de Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.r.

los costos sociales de la deserción escolar tiende a subestimar el valor real de tales costos, por lo que esos estimados (incluyendo el que se presenta en este informe) deben evaluarse con precaución.

Resumen de los Costos Económicos de la Deserción Escolar en P. R.

Los principales efectos económicos y sobre las finanzas gubernamentales de la deserción escolar, según han sido estimados en este estudio, se reseñan en la tabla a continuación.

Resumen de los Principales Efectos Económicos y Fiscales de la Deserción Escolar

Estimados para el Año 1990

Categorías

Ingreso adicional del trabajo

Beneficio por disminución en actividad criminal

Aumento en ingresos al Gobierno de Puerto Rico

Fondo General

Fondos Esp. Serv. Públ. Sistema de Seguridad Soc.

en gastos en el Depto. de Educación

Aumento
Cambio neto
Depto. Educación Millones de $ 333.3 157.0 Millones de $ $2,754.2 412.3 510.4 334.9
en transferencias federales al

Otra forma de contabilizar los costos sociales de la deserción escolar es estimar el valor presente de la pérdida económica. Este enfoque trata a la educación como una inversión en capital humano, así que se capitaliza el flujo de ingresos adicionales que obtendría un desertor escolar que dejase de serlo. Ese valor capitalizado se puede agregar para todos los desertores escolares que pertenecen a la clase de 1990; obteniéndose así un estimado del costo económico de la deserción escolar en que incurre la sociedad, evaluado para ese grupo de personas que debió graduarse en 1990.

En el estudio se estimó que en la clase de 1990 hubo 19,691 desertores escolares Si ellos hubiesen terminado sus estudios de escuela superior, se esperaría que 13,329 de ellos no realizarían estudios posteriores y que 6,362 ingresasen a hacer estudios universitarios El valor promedio de la pérdida capitalizada de los ingresos de los desertores escolares, con respecto a los graduados de escuela superior es $70,749, mientras que con respecto a los que tienen una escolaridad de 13 a 14 años es $83,305. Así que la pérdida social, correspondiente a aquellos para los que el diploma de escuela superior sería el grado terminal sería $943 millnnpc iiiiluilci, mientrEs que para el grupo que ingresaría a realizar estudios universitarios sería $530.0 millones''' Lo cual resulta en una pérdida económica capitalizada de $1,473 millones, atribuible a la deserc"' escolar en la clase de 1990. Esa pérdida económica conlleva que el gobierno deie d j ue recibir ingresos fiscales, cuyo valor presente se estima en $273 millones.

v Consulta, Inc.

Resumen y Conclusiones
La Clase de 1990
Asesoría

1. J. S. Catterall, On the Social Costs of Dropping Out of School. Stanford: Center for Educational Research at Stanford, 1985.

2. Este hallazgo es consistente con la información disponible en los censos de población de 1970 y 1980. En 1970 el 28.9% de los varones y el 25.3% de las hembras eran graduados de escuela superior, mientras que para 1980 esas proporciones habían aumentado a 40.1% en el caso de los varones y a 39.0% en el de las hembras; lo que refleja una disminución en la diferencia en tasas de deserción escolar entre los sexos. (U.S. Dept. of Commerce, Bureau of the Census. Census ofPopulation. Detailed Socio-Economic Characteristics. Puerto Rico. 1970 y 1980.)

3. Este hallazgo también es consistente con la información disponible en los censos de población de 1970 y 1980. En 1970 el 7.1% de los varones y el 5.0% de las hembras tenían un nivel de educación de 4 ó más años de universidad. Para 1980 esas proporciones aumentan a 10.0 en el caso de los varones y 8.9% en el de las hembras. Nuevamente ocurre una disminución en la diferencia entre las proporciones que completan este nivel de educación en los dos sexos. (U.S. Dept. of Commerce, Bureau of the Census. Censas of Population. Detailed SocioEconomic Characteristics. Puerto Rico, 1970 y 1980.)

4. Véase, por ejemplo, Rafael A. Meléndez Tosté, "La escuela me aburre: radiografía de un desertor escolar". Interamericana, noviembre/diciembre 1992, págs. 18 y 19.

6. Para una taxonomía de esos beneficios, véase a E. Cohn, The Economics of Education. Cambridge, M?ss.: Ballinger Publishing Co., 1979, capítulo 3. El lector también puede referirse a T. W. Schultz, The Economía Valué ofEducation. New York: Columbia University Press, 1963.

7. Véase, por ejemplo,a H S. Houthakker, "Education and Income". Review ofEcoromics and Statistics, Vol. XLI, febrero de 1959; M. Blaug, "The Empirical Status of Human Capital

Asesoría y Consulta, Inc.

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R. Notas 217

Theory. A Slightly Jaundiced Survey". 7owr/2í2/q/"£cí)«o/7i/c L/rerc/«re Vol LTV t-

ErnTEconomics ofEducation Review, Vol. II, verano de 1985, págs. 17 a 28- I. Sobel "Tho rr Capital Revolution in Economic Development: Its Current History and Status"'Cornna^m^ Educamn Review, Vol. XXII,No.2,junio de 1978,págs. 278 a 308; G.Psacha^oZíor^o! réditos de la educación . La Educación: Revista Interamericana de Desarrollo Edumt- ' XXX NO. 98. 1985; R. Cao García y H. Matos Díaz, Mucacién económica en Puerto Rico. Madrid: Editorial Betania, 1988. oportunidad

8. Véase ente ovos a G. Becker, Human Capital. New York: Natlonal Burean nf • Research, 1964; T. W. Schultz, Investmen, in Human Capital. New York-^e p T"'" 1971;J. Mincer,"Human Capital and Eamings" en D. M.Windham,ed.,Economic OfEducation. Washington, D.C.: Report of a Committee of the Natíonal , Edücation, 1979, págs. 1 a 31;J. Mincer, "Human Capital and Economic Growth" ofEducation Review, Vol. III, No. 3, 1984, págs. 195 a 205. '

9 E. F. Denison, The Sources of Economic Growth in the United States KTésu, v , Committee for Economic Development, 1962 y E. F. Denison, Why Growth Washington, D.C.: The Brookings Institution, 1967. ^^ffer?.

10. Véase, por ejemplo, a H. M. Levin, The Costs to the Nation of InadeauatP vn Washington, D.C.: Report to the Select Committee on Equal Educational U.S. Senate; and J. S. Catterall, op. cit. PPortunity of the

11. Véase Departamento del Trabajo y Recursos Humanos de Puerto Rico SeriP rrEmpleo, Desempleo y Grupo Trabajador en Puerto Rico 1947-1991 V, ^^^^orica del 1992. Tabla 21. ' ' ^ septiembre de

12. R. G. Spiegleman, "A Benefit/Cost Model to Evalúate Educational Prop Economic Planning Sciences, Vol. I, 1968, págs. 443 a 460; L. D. Webb "S ' by Investing in Adult Edücation". Economic and Social Perspectiws in Society págs. 52 a 73; y J. S. Catterall, 1985, op. cit. '^Uneracy, 1977,

Asesoría y Consulta, Jnc.

Resumen y Conclusiones

Costos Sociales de la Deserción Escolar en P.R.

13. Sobre este particular véanse, entre otros, a L. Thurow, Head to Head, New York: William Morrow and Co,, 1992, así como a J. Naisbitt y P. Aburdene, Megatrends 2000- Ten New Direcríonsfor the 1990's, New York: William Morrow and Co., 1990, capítulo 1.'

14. Este estimado se basa en el supuesto de que, en promedio, las personas en este grupo que ingresen a universidades obtendrían una escolaridad promedio de 13 a 14 años.

TAB1L.A DE CONTENIDO

de la Pérdida de Ingresos de un Desertor Escolar

Página 1. INTRODUCCIÓN 1 2. DESERCIÓN ESCOLAR: UNA DEFINICIÓN OPERACIONAL 9 Planteamiento del Problema 9 Escolaridad y Oportunidades Laborales 10 Variación en Escolaridad y Oportunidades Laborales 17 Resumen y Conclusiones 20 3. ESTIMACIÓN DEL NÚMERO DE DESERTORES ESCOLARES EN PUERTO RICO 25 Introducción 25 Problemas de Medición 26 Una Metodologia de Estimación 29 Estimado del Número de Desertores Escolares en la Población 31 Rezago Escolar y Desertores Escolares: Una Disgresión 33 4. EDUCACIÓN, EMPLEO Y DESEMPLEO 39 Introducción 39 Participación en el Mercado Laboral 40 Ocupación por Sectores Económicos 43 Resumen y Conclusiones 46 5. DESERCIÓN ESCOLAR E INGRESO 51 Introducción Metodologia Estimados de Ingreso y Escolaridad Pérdida Agregada en Ingresos Estimados Pérdida Agregada en Ingresos: Desertores Escolares del Sexo Masculino Pérdida Agregada en Ingresos: Desertores Escolares del Sexo Femenino Pérdida Agregada en Ingresos Pérdida Agregada en Ingresos Estimados: Ajustada por Cambios en
Mercado Laboral Valor Presente
Resumen y Conclusiones
el

tabila de contenxdo (Continuación)

6. CONSECUENCIAS FISCALES DE LA DESERCIÓN ESCOLAR

Introducción

Efetos sobre Ingresos Gubernamentales Evaluación de Impuestos que Ingrescui al Fondo General del Tesoro del ELA Efectos sobre Recaudos Fiscales al Fondo General Ingresos a Fondos Especiales del Tesoro Efectos Estimados en Ingresos Gubernamentales Aumentos en Transferencias al Exterior Demanda por Servicios de Bienestar Social Aportaciones del Gobierno Federal Aportaciones Federales a Personas

Efectos Fiscales en el Departamento de Educación Gastos Operacionales

Efectos sobre Transferencias Federales al Departamento de Educación

Otras Consecuencias Fiscales

7. DESERCIÓN ESCOLAR Y CRIMINALIDAD

Introducción

Educación y Criminalidad

Función Social de la Escuela Deserción Escolar, Delincuencia Juvenil y Criminalidad

Escolaridad e Incidencia Delictiva en Menores Escolaridad e Incidencia Criminal en los Adultos

8 COSTOS SOCIALES DE LA CRIMINALIDAD ASOCIADOS A LA DESERCIÓN ESCOLAR

Introducción

Deserción Escolar y Probabilidad de Crimen

Inferencias acerca de la Probabilidad de que una Persona Sea Desertor Escolar y Cometa Delitos

Un Estimado del Costo Social del Crimen Resumen y Conclusiones

Apéndice al Capítulo

Cómputo de los costos económicos de la actividad delictiva

9. DESERCIÓN ESCOLAR Y DEMANDA POR EDUCACIÓN UNIVERSITARIA

Introducción

Demanda por Educación Universitaria Efectos de la Deserción Escolar en la Demanda por Educación Universitaria: Un Estimado Efectos sobre las Transferencias Federales Resumen y Conclusiones

10. EFECTOS INTERGENERACIONALES Y DISTRIBUCIÓN DEL INGRESO

Introducción

Educación y Distribución del Ingreso en Puerto Rico

Efectos Intergeneracionales Resumen y Conclusiones

11. OTROS BENEFICIOS SOCIALES DE LA EDUCACIÓN

Introducción

Educación y Sistema Social Capacidad para Aprender y Adaptarse al Cambio Transformaciones Económicas Educación y Salud Administración del Hogar Efectos sobre Equidad Resumen y Conclusiones

12. RESUMEN Y CONCLUSIONES

Deserción Escolar: Una Definición Operacional Estimado del Número de Desertores Escolares Educación, Empleo y Desempleo Deserción Escolar e Ingreso

Consecuencias Fiscales de la Deserción Escolar Deserción Escolar y Criminalidad

Demanda por Educación Universitaria Efectos Intergeneracionales y Distribución del Ingreso

Otros Beneficios Sociales de la Educación Resumen de los Costos Económicos de la Deserción Escoleur en P. R«

La Clase de 1990

TABIoA. DE CONTENIDO (Continuación)
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.