De igual forma, el Necaxa versión Clausura 2011 y las muchas similitudes que existen con el equipo que descendió hace un par de años tampoco lo están. Las comparaciones entre ambos equipos están a la orden del día y sin mayor problema podríamos comparar infinidad de las situaciones que ocurren en el seno necaxista, o bien, a las directivas, los jugadores —y la cantidad de refuerzos que llegaron para encarar la comprometida situación porcentual—, o a los técnicos de estos equipos. De hecho, de estos últimos es de los que hablaremos en esta ocasión: Raul Arias y Daniel Brailovsky. En el papel, las diferencias entre ambos técnicos son abismales y de acuerdo a lo que sus trayectorias y logros como estrategas nos dicen de cada uno de ellos no habría muchas similitudes ya que por un lado hablaríamos de un técnico con vasta experiencia en Por: Primera División y por otro de uno con pocos partidos Gerardo «Taker» dirigidos en el máximo circuito de nuestro balompié. Cuellar Arias, guste o no, es un técnico en toda la extensión de la palabra, en cambio Brailovsky ha dejado muchas dudas sobre su capacidad para dirigir a un equipo profesional, dejando en no pocas personas la impresión de que únicamente un gran analista de este deporte.
«Arias, guste o no, es un técnico en toda la extensión de la palabra, en cambio Brailovsky ha dejado muchas dudas sobre su capacidad para dirigir a un equipo profesional, dejando en no pocas personas la impresión de que únicamente un gran analista de este deporte.» Cuando se anunció el regreso de Raul Arias a la dirección técnica de Necaxa, muchos aficionados, incluso los que lo demeritaban y aquellos que no gustaban de su estilo de juego vieron con buenos ojos su llegada. ¿La razón?, Un técnico capaz y especialista en sacar resultados hacían creer a la afición que el desenlace de ese torneo sería completamente opuesto a la forma en que se dio.
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