27 minute read

la obra de Telmo Herrera

Reflexiones sobre tecnología, arte y salud centrada en la persona

Juan Enrique Mezzich Mónica Sarmiento-Archer

Advertisement

Juan Enrique Mezzich nació en Lima de ascendencia yugoslava y peruana. Profesor de Psiquiatría, Escuela de Medicina Icahn en Mount Sinai, Nueva York; Ex presidente de la Asociación Mundial de Psiquiatría; Presidente Fundador, Colegio Internacional de Medicina Personal Centrada; Editor en jefe, Revista internacional de medicina centrada en las personas. Actualmente es miembro de la WPA Consejo, presidente honorario de la sección de clasificación, Evaluación y diagnóstico de la WPA. Su trabajo académico actual incluye entre otros, el Desarrollo de la educación centrada en la persona psiquiatría, medicina y salud pública. En Estados Unidos se especializó en la Formación en residencia psiquiátrica, con una Maestría en ciencias en psiquiatría académica y Maestría de Artes y Ph.D. grados en Matemáticas & amp; Psicología estadística en Ohio State University, así como certificación de la Junta Estadounidense de Psiquiatría y Neurología. Se desempeñó como presidente de la Sección de Clasificación de la Asociación Mundial de Psiquiatría (WPA) y Evaluación de Diagnóstico, miembro de la Organización Mundial de la Salud ICD-10 Mental Grupo de Trabajo de Trastornos y el Grupo de Trabajo DSM-IV de la Asociación Americana de Psiquiatría presidente del Grupo de Diagnóstico y Cultura del Instituto Nacional de Salud Mental de EE. UU., y consultor en sistemas de diagnóstico. Autor de más de 300 artículos de revistas científicas sus investigaciones se enfocan en monografías principalmente sobre diagnóstico psiquiátrico, epidemiología y cuestiones culturales y más recientemente sobre la psiquiatría y la medicina centradas en la persona. Ha recibido siete doctores Grados Honoris Causa de universidades de América y Europa, así como Premio Simón Bolívar de la Asociación Estadounidense de Psiquiatría, la Medalla por Mérito Extraordinario del Consejo Médico del Perú y Medalla Linnaeus

135

Medal of Uppsala en la Universidad en Suecia. Ha sido invitado a dar conferencias en más de cien países. alrededor del mundo. Se desempeñó como Secretario General de la WPA 1996-2002, Vicepresidente y Presidente de la WPA Electo 2002-2005 y presidente de la WPA 2005-2008.

Inés Mónica Sarmiento-Archer profesora en la Universidad de Adelphi University, Hofstra University; directora de bi/Coa: Base Intercultural / Community of the Americas; Coordinadora de la Conferencia global de investigadores universitarios sobre temas del mundo hispano en Nueva York.

Resumen

Este artículo se presenta a partir de un diálogo entre sus autores, en este, se revisa el arte y la tecnología desde la relación de la salud centrada en las personas. Se reflexiona en dos puntos específicos. Por un lado, la asociación de estas especialidades en la educación y el desarrollo sociocultural. Por otro lado, la perspectiva de la salud de las personas a partir de los cambios tecnológicos y cómo los acontecimientos actuales han transformado la experiencia metodológica de la enseñanza-aprendizaje. A partir de la segunda década del siglo XXI1 se ha experimentado cambios sustanciales en la educación y en el incremento de especialidades necesarias en la actualidad, estos condicionados por de desarrollo de la tecnología y su influencia en las distintas disciplinas, especialmente en la percepción del arte y la salud de los individuos. Destacando que, a lo largo de la historia se ha tenido una actitud positiva hacia las artes como parte de las humanidades, apoyadas por las élites y las personas más cultivadas y con un estatus económico mayor, lo que les permitía tener acceso al arte en todas las generaciones a pesar de las vicisitudes.

1 Se acentúa el siglo XX por los avances de la tecnología y su evolución a la medicina y ciencia en general, pero también se enfatiza las renovaciones en la salud y el arte, marcadas por las diferencias económicas entre países.

136

Salud centrada en la persona

A través de la “salud centrada en la persona”2 se promueve la calidad de vida desde una nueva perspectiva “para la persona y por la persona” (Mezzich, 2007). En ella se presta atención a la salud positiva sin ignorar la salud enferma que debe ser atendida, diagnosticada y tratada. El Dr. Mezzizh, reflexiona ante la pregunta. ¿Qué es lo que hace a una persona, “persona”? en términos de ética médica, no es solo que sus órganos funcionen muy bien, sino que la calidad de vida también está dada por otros aspectos que son la sociabilización y las actividades artísticas, que promueven una calidad de vida sana. Desde este planteamiento se han desarrollado profesiones enfocadas a promover estas actividades. Es así que nacen especialidades dentro de las distintas terapias, desde la psicomotriz a las artística como instrumento para ayudar a las personas.

Evolución del concepto artístico

En el pasado la visión del creador artístico, era desde un aspecto romántico, el artista creaba desde la perspectiva “por amor al arte” y la obra era la imagen figurativa que nos permitía visualizar un evento o hecho histórico. Es más, el arte o las bellas artes, tenían un destino estrictamente asociado a la contemplación, lo que significaba que no tenía ningún uso práctico. A medida que la sociedad evoluciona, el arte avanza como especialidad a las “artes visuales”3 . Los artistas exploran la intersección del arte y la tecnología, pasando del concepto tradicional hacia el ámbito de

2 Más información en línea, ver: La Red Internacional para la Medicina Centrada en la Persona (Internacional Network for Person Centered Medicine (INPCM): https:// www.personcenteredmedicine.org/index.html Otras instituciones en la misma línea de pensamiento, ver: https://es.stonybrookmedicine.edu/patientcare/familycare 3 El arte plantea nuevos manifiestos asociados a los avances de la tecnología, pasa de lo contemplativo a la especialidad práctica, véase: https://arts.mit.edu/cast/about/

137

los nuevos medios tecnológicos y especializados como puede el láser, la holografía, la robótica y a la interactividad con la medicina, neurociencia y la NeuroCultura.

El MIT Centro de Arte, Ciencia y Tecnología (MIT Center for Art, Science & Technology) junto a otras organizaciones se presentan como la punta de lanza de la innovación y se constituye como “testigo de su tiempo”4 desde las etapas más clásicas a las vanguardias (Anuario AC/E de Cultura digital 2017: 97). Así en el siglo XX comienza una ruptura del pensamiento del arte tradicional que además de ser estético, también se vuelve interactivo, contestatario y por sobre todo útil y al servicio de la sociedad. Los nuevos manifiestos del arte se hacen presentes en reivindicar la actividad artística como una fuente de ingreso. El artista da un servicio y como tal debe ser pagado. Algunos países comienzan a desarrollar leyes de mecenazgo, formuladores y activistas plantean nuevas reformas hacia donde se enfoca el arte como un activo empresarial.

Consecuencias de la tecnología en la salud mental

Una de las experiencias visibles es el aumento de trabajo, a finales de febrero del 2020 y provocado por el virus del COVID la tecnología alcanzó su máximo grado de uso, este acontecimiento generado por la pandemia obligó a transformar la educación y distintas fuentes de trabajos, mutando hacia el desarrollo en-línea (online).

Aparecieron nuevas plataformas digitales, otras como Zoom, Skype, Webex se actualizaron. En primer momento se consideró que estos sistemas serían temporales y de manera artificial, hasta que pasara la pandemia. En la salud las consultas en línea se incrementaron, en la educación y en

4 Véase enlace en línea: https://interaccio.diba.cat/sites/interaccio.diba.cat/files/art_neurociencia.pdf.

138

las empresas se desarrollaron nuevos sistemas de comunicación, modificando a gran escala, este desarrollo permitió que muchos profesionales se familiaricen y se pusieran al día en el manejo de estas tecnologías. En menos de un año la mayoría de la sociedad asumió que estos sistemas ya han pasado a formar parte de la nueva metodología de trabajo, comunicación y enseñanza.

Como resultado de este cambio tecnológico los profesionales comenzaron a trabajar en línea desde sus casas, provocando en muchos casos una carga extra de horarios y en otros casos se ha triplicado la carga de trabajo. En este momento los problemas de ansiedad se han duplicado y el estrés se ha triplicado, provocando el aumento de las enfermedades mentales. Según los expertos médicos, significa que las próximas décadas vamos a tener una sociedad más enferma, neurótica y con altos índices de enfermedades causadas por el agotamiento y trastorno mental5 lo que repercutirá en la salud de los individuos (OHCHR, 2010:24) y la sociedad en general.

El rol del arte en la salud

No es sencillo describir la situación de su relación, pero sí podemos decir que se han abierto nuevos campos como la neurociencia, analizando las técnicas de señales EEG (similares a los captados en un encefalograma) en el estudio se investiga el funcionamiento de la percepción del hecho artístico y se explora esta percepción humana, relacionando grupos de redes neuronales desde una óptica más científica6 (Anuario AC/E, 2017: 97).

5 Una información detallada se puede ver en el enlace de la OMS “Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre”: https://www.who.int/es/news-room/ facts-in-pictures/detail/mental-health. 6 Acerca de esta experiencia hay disponible el Mapa de autores en neurociencia. Disponible en línea: https://www.frontiersin.org/articles/10.3389/fnhum.2013.00330/full https://www. fundaciorecerca.cat/ca/

139

En el último siglo se han incrementado los estudios de la “cognición creativa”, del razonamiento convergente y divergente (Fink y Neubauer, 2006). La medicina se ha hecho más científica y ha habido un creciente interés en prestar una mayor atención a los aspectos puramente biológicos, tanto desde el punto de vista de la genética, la biología y los relacionados con las enfermedades y disfunciones de los órganos, estos han captado la mayor atención del mundo médico en la práctica como la investigación. Por otra parte, se ha reflexionado en los “procesos de pensamiento implícitos” (Haider, 1992; Kaufman et al., 2010) al ser humano.

En las últimas décadas del siglo XX, comenzó a crecer y sigue creciendo esta perspectiva de considerar importante la salud, no solamente como enfermedad, si no, como la búsqueda de salud desde el punto de vista positivo de “bienestar completo” y destacando en este concepto la ciencia y el humanismo, partiendo de estudios “constitucionalista” (Kretschmer, Kahn, Hoffmann: 567-80). En los que se apunta, que: “Cada cultura escoge las enfermedades en las que el sufrimiento físico o psíquico le parece particularmente aterrador para hacer con ellas las representaciones simbólicas de los miedos fundamentales del ser humano” (Garrabé, 1992: 11-2)

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS) se tomó la definición de salud en forma general como “El estado de completo bienestar físico, emocional y social“, no solo, como la ausencia de la enfermedad. Promover una vida saludable hacia el bienestar de toda la sociedad en su conjunto, es una perspectiva que está creciendo, incluso ha habido grandes avances en el tratamiento del cáncer, de las afecciones circulatorias, diabetes, pero junto con estas limitaciones, está la de lidiar con las enfermedades, desde la perspectiva de conceptualizar al ser Humano como tal, no como portador de enfermedades. Estos análisis han permitido una “expansión conceptual” hacia un campo de “estudio sin restricciones” en la asociación de disciplinas (Abraham y Windmann, 2007).

140

Es muy importante concientizar a la sociedad y al estado en el concepto de “salud positiva” y su importancia en otros factores como los básicos: la alimentación, el ejercicio y dentro de las nuevas perspectivas que enriquecen la salud positiva. está proteger la salud de las personas, a través de mecanismos que disminuyan el progreso de las enfermedades, por ejemplo, el alzhéimer, aunque está claro que esta enfermedad es producida por múltiples factores genéticos. Es importante prestar atención a la forma de visualizar el estado de la función cerebral en personas que realizan actividades creativas, los estudios de imágenes de la inteligencia han demostrado la correlación con las características del cerebro y su capacidad (Jung y Haier, 2007) (Jung et al., 2013:3). De alguna manera se respeta la idea de que la actividad creativa retarda este proceso de deterioro mental.

El arte asociado a la salud

La psicología y psiquiatría en cierta forma se asocian al arte, por una parte, para tratar de entender al ser humano, se experimenta con la lectura de imágenes y es a través de las imágenes que podemos interpretar acontecimientos. Por otra parte, se desarrollan las especialidades de las “terapias” mediante actividades artísticas, con el fin de ayudar aliviar y a distanciar el estrés y la ansiedad en los individuos, fomentando la calidad de vida en cualquiera de sus etapas.

Las terapias cumplen un papel fundamental en la salud y en la búsqueda de soluciones a muchas enfermedades. Profesionales médicos investigan la relación directa con el arte. Un ejemplo de ello es la médica y académica literaria Rita Charon7, quien Funda y dirige el programa de “Medicina narrativa” en la Universidad de Columbia en Nueva York, con el propó-

7 Rita Charon es Directora Ejecutiva, de la División de Medicina Narrativa de CUIMC; Profesor de Medicina, Centro Médico Irving de la Universidad de Columbia. Entrevista en línea: https://www.intramed.net/contenidover.asp?contenidoid=69837

141

sito de desarrollar el rol de la narrativa en la ética médica. Las terapias en todas las disciplinas artísticas han generado un resultado exitoso, pero, para llegar a lo largo de la historia aceptar esta investigación en el área de “inteligencia” y “creatividad” ha tenido que pasar mucho tiempo para profundizar en los constructos cognitivos (Arden et al. 2010). En los países desarrollados, estas especialidades se han implantado, sirvieron de modelo e influencia en otros países. Es así que, en centros de la tercera edad, hospitales, centros culturales, crean actividades artísticas. en los centros infantiles contribuyeron a mejorar la destreza y en los centros educativos se desarrollaron metodologías prácticas. La enseñanza pasó de ser pasiva a una instrucción interactiva, el aula se convirtió en un pequeño laboratorio al servicio y desarrollo del aprendiz con las nuevas metodologías educativas. Eliminando “lo absurdo y frívolo de lo significativo y apropiado”, esta reflexión ha contribuido a que se comprenda mejor el valor de la “retención selectiva” (Campbell, 1960). Las distintas terapias ayudan aliviar enfermedades psicológicas y otras generadas por la falta de actividad intelectual, en estos aspectos se sigue avanzando en nuevas investigaciones.

Experiencias positivas y negativas en la enseñanza

Los mecanismos de educación han cambiado drásticamente y las formas de educación son distintas en cada sociedad, las clases en línea, híbridas, sincrónicas, asincrónicas o clases pregrabadas por las distintas plataformas van interactuando a través de un foro de preguntas y respuestas. En los países desarrollados los fondos económicos hacia la investigación son mayores lo que permite un desarrollo avanzado hacia las tecnologías.

Si un profesional quiere tener una instrucción especializada va a los países desarrollados, en donde el entrenamiento en la investigación es más organizado. En la actualidad, la ausencia de investigación es visible en algunos países latinoamericanos, no poseen buenos sistemas de comunicación y

142

con la epidemia se ha hecho más visible estas decadencias. No hay disponibilidad de sistemas tecnológicos adecuados para un adiestramiento eficiente, esto influye a que muchos abandonen los estudios por falta de medios adecuados en sus hogares. En el medio urbano muchos han tenido que abandonar la universidad para ir a trabajar, porque los padres se han contagiado, paralizando la economía familiar, se destaca que en el medio rural esta problemática se agrava por el descuido absoluto en la formación.

En el 2020 las experiencias educativas han dado distintos resultados, mirando desde el aspecto positivo y útil, acercó a las instituciones universitaria, facilitando colaboraciones entre los profesionales académicos de distintos países. Las nuevas plataformas han permitido a los estudiantes una mayor información y aprendizaje, explica el doctor Mezzich, partiendo desde su propia experiencia. Él es profesor en el departamento de epidemiología de la Universidad de Mount Sinaí de Nueva York, simultáneamente, ha sido invitado a dar clases en la Facultad de Medicina en la Universidad de San Marcos en Lima, en donde ha creado una nueva cátedra permitiendo que tenga un profesorado con el que, actualmente están desarrollando un programa de mentoría Centrada en la Persona y el Desarrollo Humano. Esto ha sido posible por la incorporación de nuevas plataformas en línea y la aplicación de metodologías sólidas en la educación.

Transformación del sistema

Cada uno de estos acontecimientos en este último año, contribuirán al desarrollo de las distintas estructuras sociales. más aún en momentos de crisis global , ¿Cómo sobrevivir ante esta situación? es un planteamiento o pregunta que nos podríamos hacer. La educación ayuda en parte a cambiar esta visión general de una sociedad, pero el aspecto fundamental radica, en que, lo que realmente hay que reformar es el sistema (OHCHR, 2010:28).

143

El sistema debe renovarse con una predisposición y respeto a aceptar sus propias diferencias. Si el sistema no cambia, tampoco la sociedad podrá evolucionar. Los gobiernos que eran influyentes en modelos de desarrollo, están pasando por una crisis ética y de liderazgo, esto se reconoce cuando se generan nuevas formas de desarrollo que velen por la protección de sus ciudadanos. La influencia de los Estados Unidos como modelo de desarrollo social, ha repercutido en todo el mundo, desde el punto de vista de salud y desarrollo universal, se han dado pasos en retroceso que tendrán consecuencias en el futuro ya que han generado una inapropiada actitud “anti” (OHCHR, 2010:16) de desprecio hacia las minorías, lo que muestran una decadencia cultural.

En conclusión, la relación entre la salud y el arte ha permitido comprender mejor al ser humano y concientizar hacia una mejor calidad de vida. A medida que las sociedades se van adentrando en la tecnología, aumenta el estrés, la comunicación cada vez es más veloz, las personas trabajan de forma saturada por la presión social y con un salario mínimo. Investigadores, formuladores culturales, líderes, expertos de distintas disciplinas han participado con una voz crítica a lo largo de estas décadas, con el objetivo de avanzar hacia nuevos procesos de desarrollo social. Hay una necesidad urgente de que el sistema y las reformas sociales se actualicen.

144

Referencias

Garrabe J, Hoff P (en prensa): Historical views on Psychiatry for the Person. Psychopathology. Charon, Rita (2007): Principles and Practice of Narrative Medicine. Oxford University Press, 2017. Mezzich JE (2007): Psychiatry for the Person: Articulating Medicine’s Scien ce and Humanism. World Psychiatry 6:1-3. Mezzich JE, Salloum IM, Cloninger R, Salvador L, Kirmayer L, Banzato C, Wallcraft J, Botbol M (en prensa): Person‐centred integrative diagnosis: conceptual bases and structural model. Canadian Journal of Psychiatry. Mezzich JE, Snaedal J, van Weel C, Heath I (2009): The International Network for Person-centered Medicine: Background and First Steps. World Medical Journal 55: 104-107. Rex E. Jung, Brittany S. Mead, Jessica Carrasco and Ranee A. Flores: The structure of creative cognition in the human brain. Department of Neurosurgery, University of New Mexico, Albuquerque, NM, USA. United Nations, Center for Human Rights. Study Series Human Rights and Disabled Persons. New York: United Nations; 2010:28-27. World Health Organization (2009): World Health Assembly Resolutions. Geneva: WHO.

145

Una trayectoria transnacional: la obra de Telmo Herrera

Emmanuelle SINARDET, Université Paris Nanterre, Centre d’études équatoriennes - Centre de Recherches Ibériques et Ibéro-américaines (CRIIA)

Prof. Emmanuelle Sinardet es catedrática en historia y estudios culturales latinoamericanos de la Universidad París Nanterre. Es responsable del Centro de Estudios Ecuatorianos en el seno del laboratorio de investigación CRIIA (Centre de Recherches Ibériques et Ibéro-américaine) de la que fue también directora. Dirige varias tesis de doctorado sobre estudios culturales e historia ecuatorianos y filipinos. Es también miembro de la Academia Nacional de Historia del Ecuador. Sus ejes de investigación son: América Latina, Filipinas, siglos 19 y 20, construcción del Estado nacional, políticas culturales y educativas, historia cultural, literatura e identidad. En la actualidad lleva a cabo una investigación sobre Filipinas en la segunda mitad del Siglo 19 y primera mitad del 20. Tiene publicados numerosos artículos y capítulos de libros. Su último libro, Construire l’homme nouveau en Equateur (1895-1925. Más información en https://www.parisnanterre.fr/mme-emmanuelle-sinardet-seewald-sinardet--749093.kjsp

No resulta fácil describir en pocas palabras una obra tan polifacética y fértil en significados como lo es la de Telmo Herrera (Mira-Ecuador, 1948). Subrayemos que el mismo artista es multifacético y touche-à-tout, por lo que su trabajo escapa de las categorías y de las etiquetas que tienden a definir de forma definitiva una obra y su propósito. Telmo Herrera es un electrón libre al que resulta imposible de asociar con una generación, una corriente o una institución cultural, tanto en Ecuador como en Francia o en España. No es sólo dramaturgo, actor, director de teatro, artista gráfico, sino también poeta y novelista. Telmo Herrera se define como un trotamundos y ha producido fuera del Ecuador gran parte de su obra atípica y proteiforme. Con 23 años de edad viajó a Australia, luego a

146

Canadá y a España antes de radicarse en París en 1973, donde vive parte del año hasta la actualidad. Este espíritu nómada asume trabajar desde un margen que le permite preservar su independencia frente a las instituciones y corporaciones, y privilegiar las afinidades personales y artísticas con suma libertad. Por lo cual, hasta hace pocos años, era poco conocido en el Ecuador, aunque ello vaya cambiando felizmente – felizmente puesto que Telmo Herrera representa una de las figuras más interesantes de las artes ecuatorianas contemporáneas.

No es posible aquí nombrar todas las obras publicadas, son demasiadas, pero quisiéramos proponer una breve selección, subjetiva por cierto, que nos parece dar fe de la riqueza temática y formal del trabajo artístico de Telmo Herrera. Tratándose de la producción poética, cabe destacar los poemarios Ítaca/Luzmila (2014), un magnífico homenaje al gran Cavafis, y Desde la capital de los MalGenioS, París 1995-2000, reeditado en 2020 en Nueva York, una obra cuya lectura transforma la visión que uno tiene de París, pues ningún lector puede pasearse por la capital gala o tomar el metro sin pensar en varias escenas conmovedoras presentadas en los poemas. En cuanto a la narrativa, las sensitivas novelas Papá murió hoy (finalista del premio Nadal en 1984 y recientemente reeditada), Al margen (2018) y El cura loco y las treinta y siete vírgenes de Santa Rosa (2018) nos parecen también una muestra representativa de las ambiciones metatextuales herreranas –que recalcamos a continuación. Cabe evocar las obras del dramaturgo también, por ejemplo Dos personajes, presentada en Madrid en 2017, para citar una de las más recientes y personales. Tampoco resulta posible enumerar todas las direcciones teatrales, una labor que nutre la propia producción del dramaturgo. Solo mencionaremos dos direcciones realizadas en París a partir de obras ambiciosas de Sarah Kane, muy difíciles de poner en escena: Ansia en 2006 y 4.48 Psicosis en 2008. De hecho, hasta el trabajo de dirección teatral de Telmo Herrera es polifacético: al mismo tiempo que iba presentando de forma magistral la torturada obra de Kane, estaba preparando las ligeras comedias francesas

147

Cuisine et dépendances (Cocina y dependencias) y Un air de famille (Aire de familia), ambas de Agnès Jaoui y Jean-Pierre Bacri. Por fin, el artista gráfico es conocido por sus tintes que también adornan los textos publicados por editoriales francesas y españolas.

Podemos distinguir dos épocas en la trayectoria artística de Telmo Herrera. El universo andino caracteriza una primera época en la que la producción literaria se centra en un escenario ecuatoriano principalmente, con fuertes tonalidades nostálgicas y temáticas míticas, como en El cura loco y las treinta y siete vírgenes. La segunda época corresponde a la etapa francesa, con argumentos que se desarrollan en París, un París personal y sublimado. Con todo, estas dos épocas coinciden en un mismo imaginario, el cual, a pesar de la gran variedad formal y genérica, nos parece dotado de una fuerte coherencia interna.

Primero, Telmo Herrera utiliza un denso material autobiográfico constituido por sus recorridos por diferentes países, sus impresiones transnacionales, sus experiencias sentimentales, su relación con la escritura y con el trabajo artístico, sus sentimientos íntimos también como la nostalgia de la tierra natal y de la familia. Con ello, el autor no busca la exactitud referencial, sino que va reinventando una verdad personal que la escritura transciende en una experiencia universal que los lectores pueden compartir y con la que pueden identificarse. De hecho, domina una perspectiva fundamentalmente subjetiva, no solo por lo íntimo de las percepciones (sensuales y eróticas incluso en varias obras) sino por la asumida libertad tonal de la que da fe su primera novela, Papá murió hoy, la cual consideramos como una autoficción. La construcción narrativa herrerana a su vez ilustra esta perspectiva subjetiva, pues descansa en las declaraciones de un narrador que no son sino flujos de conciencia: la realidad descrita es una realidad de y desde lo interior, que muchas veces recuerda la narrativa defendida por la corriente literaria del Nouveau roman. Desde luego, esta manera de posicionarse ante lo real implica cuestionar los cánones here-

148

dados de la tradición decimonónica que procuró definir las normas genéricas y estéticas de una “buena” novela. La escritura herrerana rechaza y sacude las tradicionales jerarquías literarias; describe con igual lirismo la pureza del sentimiento amoroso y los viajes en buses populares, la grandeza de los paisajes andinos y la pobreza de los barrios periféricos de Quito, en Papá murió hoy. En realidad, esta novela es representativa de la posición de Herrera frente al arte: no existe de por sí ningún objeto artístico. A través de los parientes del narrador que hacen arte sin saberlo, Herrera define el arte como una experiencia libre y fundamentalmente íntima.

Recayendo la responsabilidad del relato en una conciencia subjetiva, la narración se elabora a partir del fluir de tal conciencia, o sea, a su ritmo y según su percepción del tiempo, mediante los mecanismos de su memoria y a través del filtro de sus sentimientos, por lo que el narrador no solo remite a una instancia narrativa, sino que también se convierte en uno de los protagonistas del relato. No es casualidad si todas las obras herreranas destilan una suerte de melancolía agridulce, pues el narrador procura recobrar lo irrecuperable. Resucita a los muertos, reconstruye mundos desaparecidos y restaura la infancia feliz en Papá murió hoy; recupera a la mujer amada perdida para siempre y la transforma en una musa inmanente en Ítaca/Luzmila; capta los instantes preciosos, frágiles y únicos que pronto desaparecerán, los fija en el espacio textual y los conserva en Desde la capital de los MalGenioS, París 1995-2000.

La obra herrerana acaba siendo un relato-mosaico en el que la narración no se reduce ni se limita a un argumento central, sino que va desarrollándose en base a una multitud de otros relatos dentro del relato principal, en función de aquel fluir de la conciencia y de sus circunvalaciones. Si bien es cierto que el narrador y la voz poética representan el centro de gravedad del conjunto, el relato sigue una dinámica espiral, muy barróca por cierto. Nace la sensación de un movimiento constante, de un torbellino en el que un mismo personaje puede (re)aparecer varias veces, desde

149

prismas diferentes, a manera de caleidoscopio: como personaje principal en el relato específico que le está dedicado, como personaje secundario en otros relatos, como protagonista mediatizado por los recuerdos de otro personaje, por ejemplo, en El cura loco y las treinta y siete vírgenes. Le incumbe al lector, por lo tanto, reconstruir la totalidad del relato general y, al mismo tiempo, interpretar el significado de las narraciones fragmentadas. El lector herrerano es necesariamente un lector activo, co-productor y co-autor de la obra como lo es el lector ideal de Cortázar.

Otra característica herrerana es la creatividad formal. Reformulando y reactualizando los cánones admitidos, Telmo Herrera moldea formas nuevas, como lo muestra la hibridez genérica de sus producciones artísticas, nacidas de un fructífero diálogo entre narrativa, poesía, cuento, autobiografía, ficción. Desarrolla la forma original del “poema cuento” en Ítaca/ Luzmila y en Desde la capital de los MalGenioS, París 1995-2000, con relatos múltiples en versos libres. Por el verso libre, el lector se encuentra ante un poema, pero éste se desarrolla y se articula en torno a la narración de un argumento. A la vez poema y narración, narración poética y poema narrativo, el “poema cuento” es una forma eminentemente híbrida, emparentada con la tradición de los Petits poèmes en prose de Baudelaire.

Tal plasticidad formal no es gratuita ni artificial: está al servicio de una escritura de la celebración que va exaltando sentimientos que también contribuyen a dar su coherencia orgánica a la obra herrerana, felicidad, amor, fruición, rabia, frustración. Procura expresar la complejidad y la ambivalencia elusiva de los sentimientos y de los deseos. Cabe insistir en el amor, no solo como temática central sino como motor del relato. Los diferentes rostros del amor se declinan en una multitud de protagonistas femeninas, objetos del deseo de los narradores que las van erotizando en escenas sexuales a veces crudas. Sin embargo, las figuras femeninas también son complejas y multifacéticas: amigas, amantes, madres, hijas, compañeras, todas encarnan ideales que remiten tanto a la musa inspira-

150

dora como a la metáfora de la fuerza vital, como es el caso en Ítaca/Luzmila que nos invita a viaje literario que también es un viaje sentimental. Esta celebración de la vida a través de la exaltación de los sentimientos y de los deseos en realidad alimenta una reflexión permanente sobre el poder del arte frente al pasar del tiempo y a la desaparición de los seres queridos, evocados con nostalgia tanto en la narrativa como en la poesía. De esta preocupación íntima, obsesiva casi, nace la creación como una urgencia vital que procura desafiar, a veces con desesperación, siempre con humor, la muerte y el olvido, la ausencia y la angustia del vacío.

Por fin, el universo herrerano se caracteriza por un notable y rico discurso metanarrativo que le invita al lector –un lector cortazariano como dicho– a constantemente (re)interpretar la obra. Efectivamente, las voces narrativas suelen describir el trabajo de un artista o de un escritor; es más, este artista o escritor comenta su propia labor, haciéndole al lector partícipe de sus aspiraciones y ambiciones. En numerosas obras incluso, el narrador principal también es aquel escritor que escribe y que describe cómo escribe mientras escribe. Son numerosísimas las abismaciones de las figuras del autor, por lo que la narrativa herrerana se narra a sí misma al informarnos sobre cómo y en qué condiciones se va elaborando. Las abismaciones metanarrativas también descansan un denso juego intertextual mediante nutridas referencias a otras figuras autorales. Incluso podemos definir Ítaca/Luzmila como un homenaje a Cavafis. La narrativa herrerana siempre procura dialogar con otras obras creando una verdadera transversalidad artística, la cual contribuye a una patte singular, es decir, a que inmediatamente resulte reconocible un texto de Telmo Herrera, desde la primera página.

Las presentes reflexiones sobre las producciones culturales de Telmo Herrera intentan precisamente subrayar lo singular del universo artístico que fue y sigue creando aquel artista multifacético desde experiencias transnacionales entre Ecuador, Francia y España. Efectivamente, nos parece que

151

existe un universo herrerano sui genesis que se distingue en el panorama actual de las Letras. Como lo hemos formulado en una conferencia en la Maison de l’Amérique Latine en 2018 en París, Telmo Herrera puede ser considerado como un Caronte –sin la dimensión infernal de esta figura mítica desde luego. Si evocamos a modo de conclusión a la figura del Caronte barquero, es para dar cuenta de los procesos del pasar y hacer pasar inherentes a la ya vasta obra de Telmo Herrera: Herrera es un passeur entre diferentes culturas e imaginarios, entre ficción y realidad, entre ilusiones mentirosas y verdades universales. De hecho, el lector y el espectador nunca llegan a saber a ciencia cierta si se encuentran ante un sueño o lo vivido por los protagonistas, siendo extrema la labilidad entre imaginación y realidad. Al respecto llama la atención la dimensión barroca de este viaje por entre los límites, de unas orillas culturales, artísticas, narrativas, a otras –otra característica que explica lo peculiar del universo herrerano. Y como en el mito, a este Caronte moderno le pagamos un óbolo; el óbolo de nuestra atención, inteligencia y sensibilidad, de nuestra aptitud para interpretar, desinterpretar y reinterpretar. Pues las obras herreranas son exigentes y nos solicitan enteramente. Nos toca buscar pistas, encontrar indicios, fabricar claves para entender, en últimas instancias, cómo funciona la narración y cuál es su alcance. Ello no quita el placer de la lectura, al contrario.

152

Breve bibliografía

Herrera Telmo, La publicidad, cuentos de hadas del siglo XX, Sevilla, C.A.A Editores, 1977. Herrera Telmo, Algo así como un poema’78, Madrid, Ediciones Playor, 1981. Herrera Telmo, La Cueva, Quito, Paradiso Editores, (1995) 2003. Herrera Telmo, Ítaca/Luzmila, Sevilla, Deculturas Ediciones, 2014. Herrera Telmo, Papá murió hoy, Sevilla, Deculturas Ediciones, (1984) 2016. Herrera Telmo, Personajes (Teatro), Sevilla, Atopía Editorial, 2017. Herrera Telmo, Al margen, Sevilla, Arma Poética Editorial, Colección Naginata, 2018. Herrera Telmo, El cura loco y las treinta y siete vírgenes de Santa Rosa, Sevilla, Deculturas Ediciones, 2018. Herrera Telmo, Desde la capital de los MalGenioS. Antología esencial, 19952000, New York, BiCoa / Fundación Cultural Miguel Hernández, (2000) 2020. Sinardet Emmanuelle, “Amour, mythe et littérature: l’Ithaque de Telmo Herrera dans Ítaca/Luzmila (2014)”, in César Garcia de Lucas, Alexandra Oddo (ed.), Magister dixit : mélanges offerts à Bernard Darbord par ses collègues et ses disciples, Nanterre, Université Paris Nanterre, 2016, pp. 361-376. Sinardet Emmanuelle, “Paris, mythe poétique équatorien”, in Inés Mónica Sarmiento-Archer (ed.), Desde la capital de los MalGenioS. Antología esencial, 1995-2000, New York, BiCoa / Fundación Cultural Miguel Hernández, 2020, p. 23-67. Sinardet Emmanuelle, “¿Una autoficción ecuatoriana?: Papá murió hoy de Telmo Herrera”, Hofstra Hispanic Review, Special Issue Building Bridges among Researchers, Artists, Policymakers and Scientist on Hispanic Issues, Inés Mónica Sarmiento-Archer.

153

154

155

ARQUITECTURA

156