Mayo 2015
Lo que queremos para el Puerto Rico del ma単ana hay que iniciarlo en la escuela de hoy.
Prólogo Descubriendo escritores en Aguas Buenas. Nuestros estudiantes escriben. Esta iniciativa nació para exponer a los maestros y a sus estudiantes al proceso de escritura creativa. La intención fue descubrir sus talentos y conocer cómo se manifiestan estos en el arte de escribir. Los maestros de las escuelas del municipio de Aguas Buenas, distrito escolar de Cidra, desarrollan en sus estudiantes las destrezas de escritura, las cuales quedan representadas aquí. Agradecemos la colaboración de los maestros Ramón Cotto, Nilmaris González, María de los A. Gómez , Jessica Ortiz y Zaida Aponte los cuales se dieron a la tarea de promover en sus estudiantes las destrezas de escritura. La profesora Nilda L. Ortiz Valdés, maestra Especialista en Tecnología recoge aquí los trabajos realizados por algunos de nuestros estudiantes. Lector, esta antología es una demostración de creatividad y talentos en los diferentes géneros literarios. Los estudiantes redactaron: cuentos, poemas y carteles . En tus manos tienes una creación de escritos donde se transforman las palabras en ilustraciones y así mismo las ilustraciones se transcriben en palabras. Este proceso que nombramos como escritura creativa, es nuestro regalo para ti. La antología es una que deleitará a sus lectores, porque está concebida con entusiasmo, pasión, sensibilidad y sentimiento.
Les invito a disfrutar la lectura.
Índice de Carteles • Carteles – Jonathan E. Ramos Rosa: La cuarterona 8 – Jonathan E. Ramos Rosa: Las palabras pueden crear un mundo… 11 – Ivelisse Mojica Díaz: Lenguaje y cultura 15
Índice de Cuentos • • • • • • • •
La gran Aventura Me enamoré de un príncipe 8 Horas y Media Querido Diario El Camino a Poesía Jesús el boxeador Coco, The Storyteller "Enjoy My Story“
18 25 57 74 83 97 110 116
Índice de Poesías • • • • • • • • •
Palabras Más que un anhelo Mi Tierra Voy a amarte… Una tarde en San Juan Español La Vida Conquistaré el Mundo Tristeza
133 137 139 142 149 151 153 160 166
Índice de Poesías • • • • • • • • • • •
Diluvio de pensamientos La persona que soy contigo Es pasión La gravedad Palabras Sonrisas Tiempo Sin ti nada es igual Amanece Mi pequeña Princesa La Vida es…
168 171 182 183 189 195 199 200 201 203 212
Carteles
Jonathan E. Ramos Rosa 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Cartel ganador del Segundo lugar a nivel estatal en la Fiesta de la Lengua 2015
Este cartel es en conmemoración de Alejandro Tapia y Rivera. En él plasmé su imagen en blanco y negro como símbolo de su fallecimiento. Por otra parte, ilustré la imagen de una mulata y un blanco, quienes representan a Julia y a Carlos, personajes de “La cuarterona”, obra de mayor relevancia y reconocimiento de Alejandro Tapia y Rivera. Se observa el romance y el amor que ambos se profesaban. Además se puede ver una cadena saliendo del corazón de Julia, esto simboliza la abolición de la esclavitud con el amor de esta pareja. De esta manera, la cadena se rompe y el candado se abre para hacer mención de la libertad. Bajo el dibujo de los dos desventurados amores, hay un papel enrollado donde aparecen varios títulos de obras literarias escritas por el puño y letra de Alejandro Tapia y Rivera.
Explicación a mi dibujo: Se pueden obtener dos ideas basándose en mi obra. La primera, está centrada en los diversos dibujos que simbolizan la manera en que el autor convierte sus pensamientos en simples palabras. Estas son plasmadas en un libro, en sus páginas; inmóviles hasta escuchar la voz de un lector. De la misma forma en que fueron incrustadas, con alma propia, van a ser extraídas; danzando, volando, tomando forma en el vacío, fluyendo en agua y aire; así mismo van tomando vida.
La segunda idea ocupa su lugar en el escrito: “Las palabras pueden crear un mundo de…”. Esto se refiere, no solamente a la trama de una lectura, sino también al mundo propio. En el transcurso de la historia se presentan los temas de: HORROR, CAOS, ROMANCE, AMOR, entre otros, todo ocurre debido al uso de las palabras, tanto positiva como negativamente. Todo tiene una causa, el uso de las palabras y el efecto de éstas. Las palabras comandan, reparan, manipulan, destruyen, cambian, se escuchan, se oyen, se entienden y enamoran. Existen infinitas consecuencias con el solo uso del poder de las palabras.
Ivelisse Mojica DĂaz Escuela Acreditada Superior Urbana de Aguas Buenas 12-4
Explicación del dibujo Para este dibujo me inspiré en el poema de Pablo Neruda. Al dibujar el ave trate de expresar lo que dijo Pablo Neruda, “las palabras tienen sombra, transparencia, peso, plumas, pelos…”. El río significa que tienen de todo lo que se les fue agregando de tanto rodar por el río. Las flores simbolizan las palabras que viven en la flor apenas comenzada. Los peces se refieren a la parte que dice: “Brillan como perlas de colores, saltan como platinados peces…”. El español hace referencia a lo que dice Pablo Neruda, “Se llevaron el oro y nos dejaron el oro…, se lo llevaron todo y nos dejaron todo…Nos dejaron las palabras”, ya que el saco que lleva el español es el oro y el que deja son las palabras. En las hojas hago referencia a la lectura “Lenguaje y cultura”, en donde expone que el lenguaje surge de la necesidad de comunicar ideas, temores y emociones.
Cuentos
Había una vez un perro que caminaba por la plaza del pueblo. Allí lo llamaban Juan. Juan tenía una amiguita que se llamaba Luz. Ella y Juan se casaron y tuvieron cuatro bebés; Milagros, Melanie, Lobo y Jesús. Pero la historia no termina aquí…
Milagros, Melanie, Lobo y Jesús cuando aprendieron a caminar tuvieron una gran aventura. Milagros escuchó a unos niños diciendo que había un tesoro enterrado en el árbol que está en el centro de la plaza.
Lobo y Jesús oyeron la conversación y le preguntan a los niños: “¿Cuándo van a ir? Queremos acompañarlos.”
Así fueron el sábado temprano a la plaza. Buscaron el árbol. Hicieron un hueco en donde había una equis de madera
Encontraron seis huesos. Cada uno se qued贸 con un hueso y le contaron a sus padres la gran aventura que hab铆an tenido.
Fin
Escuela Luis T. Bali単as
Por: Adrielys Calder贸n Ortiz
Me encontraba frente a una hermosa fuente en Italia. Leía un libro que recién había comprado y que pronto acabaría. A mi lado izquierdo estaban las pocas posesiones que cargaba conmigo, mi bolso y otro libro que también había comprado. Estaba tan enfrascada en la trama, que no vi venir a un gran perro, hasta que me arrancó el sándwich que sostenía mientras hacia ambas cosas, leer y comer.
Era un hermoso bernese mountain. pero no presté la atención suficiente. Mientras observo como se devora mi Busqué en el collar que llevaba puesto delicioso sándwich, recuerdo cuanto por si había alguna placa y la encontré había añorado tener un perro. Mis luego de unos segundos de padres jamás me lo había permitido, búsqueda entre la maranta de incluso después de graduarme de pelo. superior y contar con más independencia Observé con atención en la y responsabilidad, no me lo inscripción se encontraba el permitieron. El can me observaba nombre ‘Hércules’ y una y se acercó alegre hacia a mí dirección de Inglaterra. pegando su fría y húmeda nariz a Junto a un raro la mano que tenía extendida hacia símbolo. “Al él. La olfateó un momento y luego la parecer te están lamió juguetonamente. “Hércules!”, llamando amiguito” alguien se escuchaba a lo lejos dije dirigiéndome repitiendo esa palabra. al can. El solo me miró y Se acercaba a mí, casi parecía que me sonreía.
El can me ladró alegre y yo le acaricié la cabeza. “Hércules”, detrás de mi alguien llamó al perro con alivio. Me di la vuelta y me encontré con un apuesto joven de posiblemente no menos de 21 años. Llevaba unos mahonés rasgados, Vanz y una camisa blanca y sudadera. Se fue acercando sin prisa; lo observaba con detenimiento. Tenía el cabello largo, hasta las orejas y de un color avellana. Sus ojos eran de un azul intenso y sostuvo la mirada hasta estar cara a cara. Desvió la mirada hacia el perro y le habló con cariño: “Que travieso eres Hércules”, le acarició mientras se ponía a su altura y luego miró a Annabeth de nuevo.“Lo siento mucho, ¿Te hizo
algo?”. “No, no me a hecho nada, es solo muy juguetón”, contesté mientras reía recordando lo que había hecho a mi emparedado.
El chico me agradaba, no sentía que fuera una mala persona y tenía una vibra de seguridad que me hacía sentir a salvo junto a él. Se acercó a mí y me tendió su mano, “Hola, mi
nombre es Alex, Alex Andrés. ¿Y tú?”. “Me llamo Annabeth, Annabeth Rose Stone”, contesté y coloqué el marcador de libro en la página donde me quedé leyendo, extendí mi mano y al hacer contacto con la suya sentí una corriente que recorrió mi mano y mi brazo. Nos separamos y él se sentó a mi lado, sosteniendo la correa de Hércules. Comenzamos una conversación y pasamos el resto de la tarde juntos, me invitó a cenar a un restaurante al aire libre justo al lado del mar.
Los días pasaron volando y cada uno de ellos estuvieron llenos de momentos con Alex. Nos habíamos hecho muy unidos y visitamos mucho lugares juntos a través de Europa. Poco a poco me comencé a enamorar de él. No sé cuándo exactamente, pero sé que llegó un momento en que no podía evitar mirar sus ojos y desear que sonriera. Recuerdo como si fuera ayer, el día en que me dijo que le gustaba, mientras paseábamos por un parque en Suecia. Mis padres, que fueron quienes me regalaron el viaje, estaban al tanto de a donde viajaba, pero en ningún momento se dieron cuenta o les dije de con quién estaba. Jamás se hubiesen imaginado que un extraño, para ellos, se me estaba declarando. Le contesté que también me gustaba, pero me preocupaba que haríamos al momento de la despedida. Ambos vivíamos en lugares totalmente diferentes y yo deseaba tener algo más que un amor de verano junto a él. Decidimos no pensar en eso y vivir el día a día como si no hubiera mañana. Todo siguió perfecto hasta el día en que todo se derrumbó, el día de nuestra partida.
Alex y yo nos encontrábamos en ele aeropuerto de España. Era el último lugar que visitamos y de allí tomaríamos un avión por separado para volver a nuestros destinos. Él a Inglaterra y yo a Puerto Rico. Hércules había sido dado a un encargado para que lo llevara de antemano al avión y Alex y yo estábamos esperando a que llamaran nuestros respectivos vuelos. Yo aguantaba las ganas de llorar, pero se me partía el corazón al pensar que posiblemente no nos volveríamos a ver jamás.
Yo no quería alejarme de el, sentía que si lo hacía, jamás podría volver a sentir su mano en la mía, o ver sus despampanantes ojos azules y que me abrazara con amor. No sabía que hacer para solucionar el problema ante mí. Vi como Alex tomaba su teléfono y contestaba. Alguien lo había llamado y al parecer era importante, sus ojos me miraron por un instante para luego desviar la mirada. Sabía que ocultaba algo, desde que nos conocimos lo sé, pero a la misma vez se que si me lo oculta es por una razón, aunque esperaba que no fuera algo que luego me hiriera. Después de colgar tomó mis manos en las suyas y me miró a los ojos. “Annabeth, he
pasado el mejor verano de mi vida junto a ti. Siento un dolor en el pecho por tener que separarnos, pero tengo unas responsabilidades en casa y no puedo faltar a mi palabra. Escríbeme, no puedo hablar mucho por teléfono debido a mi trabajo en casa, pero me tomaré el tiempo para contestar tus cartas”,
En esos momentos yo estaba llorando y apretando con mucha fuerza sus manos. Él me abrazo y luego de separarse me dio su dirección escrita en una pequeña tarjeta. “Adiós Annabeth, hasta pronto”, me dio un suave beso en la mejilla y se fue alejando, mirando hacia atrás de momento en momento. Yo no tenía palabras, solo lágrimas. Hasta que me salí de mi dolor y grite su nombre. Corrí hacia él y le di un fuerte beso en los labios. Al separarnos contesté a todo lo que me había dicho:
“Alex te voy a extrañar mucho, pero prometo que te escribiré muchas veces. Adiós”. Lo besé rápidamente y me dirigí a tomar mi vuelo.
Desde ese momento no hubo ni un solo día en el que no pensara en Alex. Muchas veces me encontré pensando en si él estaría pensando en mí en esos momentos. Recordaba los días felices de verano que pasé junto a él. Estaba estudiando literatura y no deseaba dejar mis estudios, pero a veces se me hacía tentador el dejarlo todo y viajar hacia donde se encontraba Alex. Mis padres no entendían por que me sentía así, pero no tenía ganas de compartir mi soledad con nadie.
Durante todo ese tiempo escribí y escribí, pero ni una sola vez recibí una contestación. Me sentía herida, porque Alex me había prometido contestar y no tenía ninguna otra forma de contactarlo. No entendía por qué no lo hacía, muchas veces pensé en dejar de escribir, pero mi corazón no dejaba que me diera por vencida. Por mi cabeza pasaban muchas explicaciones del porqué no contestaba, pero solo eran ideas. Seguí sintiéndome triste hasta que un día me encontré con una anciana en la librería en la que trabajaba a medio tiempo. La señora y yo teníamos una conversación agradable, entonces dijo algo que me abrió los ojos, “Veo en tus ojos que te duele algo. ¿Son cosas del
amor, verdad? Te voy a dar un consejo, a veces pensamos que un chico no nos quiere cuando en realidad hay otros obstáculos que los separan. Así que, si la montaña no va a Mahoma, Mahoma va a la montaña”, y con eso dicho se alejó.
Me di cuenta de que esa anciana tenía la razón, si él no contestaba era por algo y prefería que si no deseaba saber mas de mí, que me lo dijera en la cara. Así que me decidí en ir a buscarlo. Ya que me encontraba en mi segundo año de universidad, se me había permitido hacer intercambio con otras universidades y tuve la suerte de que había una en Inglaterra cerca de la dirección de Alex.
Preparé todo, se lo comuniqué a mis padres y tomé un avión hacia Inglaterra. Durante el viaje, me di cuenta que desde el momento que conocí a Alex Andrés, mi vida había dado un giro de 360°. Nada volvería a ser igual, aunque Alex ya no me quisiera nada volvería a ser como antes, porque esos recuerdos estarán conmigo para el resto de mi vida.
Al llegar me dirigí al campus de la universidad, me instalé y descansé. Las clases comenzaban dentro de dos semanas, así que tenía dos semanas para encontrar a Alex y aclarar lo que teníamos. Estaba nerviosa, sentía que estaba cerca de encontrarlo y eso me hacía sentir feliz y ansiosa.
Al otro día me dirigí a la dirección de la tarjeta. Era un pueblo, moderno, pero no como una gran ciudad. Antes de dirigirme investigué la historia y que aún había una familia real allí. No me fijé en las fotos, pero seguí leyendo con detenimiento algunas cosas. Al llegar me encontré con que había un desfile y las calles estaban cerradas. Me tuve que detener y caminar hasta mi destino. Me faltaba mucho, pero no me importaba ya que disfrutaría del desfile.
Me acerqué y quedé justo frente a la calle cuando comenzaba a pasar un auto elegante y varias personas saludando a los espectadores. Es ahí donde me di cuenta que el auto portaba el símbolo que Hércules tenía en su collar. No sabía en realidad lo que significaba, pues no había tenido tiempo de leer mucho sobre este pueblo. Entonces los vi, vi los ojos azules que tanto me enloquecían. Era Alex, saludando al público desde uno de los autos y no sé que me pasó, pero comencé a llamarlo.
Grité fuertemente su nombre: “Alex”, pero no me escuchó y el auto se alejaba cada vez más de mí. Me comenzaba a desesperar. Ya estaba corriendo detrás del auto sin salir de la malla de contención en las calles. Grité de nuevo su nombre y sé que esta vez escuchó mi voz, porque comenzó a buscar entre la multitud con su mirada. Grité más fuerte y al fin me vio; sus ojos se ensancharon y por poco se sale por la ventana. Al instante, el auto se detuvo y de inmediato se bajó. Él corría hacia mí y yo salté por la malla para ir hacia él. Al llegar a Alex, salté a sus brazos y sentía como las lágrimas bajaban por mi rostro. Estaba tan feliz en ese momento, que no recordaba sentir el corazón lleno de tanto júbilo como lo tenía en ese momento. “¿Qué haces aquí?” me preguntó al oído sin dejar de abrazarme. “Como no respondiste ninguna de mis cartas te vine a buscar”, respondí mientras me alejaba un poco y lo miraba a los ojos. Parecía confundido y estaba a punto de decir algo cuando alguien lo llamó. “Alexander Andrés”, escuché la voz de una mujer provenir de atrás de él.
Frente a mí se encontraba una pareja elegantemente vestida, miraban a Alex sorprendidos. Vi como el rostro del hombre iba de sorprendido a serio y le ordenaba a Alex que entrara en el auto, pero él lo ignoró.
“Annabeth, estos son mis padres, el Rey Héctor y la Reina Anaya.” Yo solo miraba a sus padres y buscaba en sus ojos algo que me dijera que no era cierto, pero no encontré nada. Alex era un príncipe. Mi vida cambió desde ese momento. Todavía recuerdo cuán sorprendida estaba de que había pasado todo un verano con un príncipe y yo sin saberlo. Esa noticia me había tomado por sorpresa y no sabía cómo contestar a su declaración. Él me miraba expectante, pero yo estaba conmocionada. Alexander se dirigió a sus padres y les habló: “Padres está es Annabeth, mi novia”, eso sí, por poco me mata de un infarto. Sabía que mis ojos parecían los de un pescado de lo sorprendida que estaba. Eso me lo había esperado menos de lo que me esperé la noticia de que él era un príncipe.
“Creo que me voy a desmayar”, le avisé a mi, según he entendido, novio. Comencé a sentirme mareada y me sostuve de Alex, este me sostuvo entre sus brazos y nos fuimos dirigiendo hacia el coche de donde se había bajado Alex. Escuché como su padre le decía que hablarían luego y no escuché más nada. Alex pasó una mano por debajo de mis rodillas y la otra la mantuvo en mi espalda, sosteniéndome en el aire contra su pecho.
“Annabeth, ¿estás bien?”, escuché una voz lejana que me hablaba, pero todo se volvió oscuro antes de poder contestar.
Por muchos años pensé en qué sería de mi vida ahora, si no hubiese conocido a Alex y hubiese decidido ir a buscarlo. No tendría a mi príncipe y no estaría en donde estoy ahora. Después de desmayarme, me encontré en una habitación desconocida. Era hermosa, además de gigantesca, y lujosa. Era azul y estaba llena de muebles. La cama donde me encontraba era gigantesca y el techo era altísimo. Era la habitación de un chico, eso estaba muy claro en mi mente. Recordaba haberme desmayado en los brazos de Alex, pero no sabía donde estaba ahora.
Salí de la habitación y luego de varios minutos recorriendo centenares de pasillos y puertas, llegué a un hermoso jardín lleno de flores y árboles. Era hermoso, para mí en esos momentos parecía un cuento de hadas. Me adentré en él y me encontré con un pequeño gacebo donde para mi sorpresa estaba Alex. Junto a él, sus padres y unos jóvenes. Alex me vio y me indicó que me acercara a ellos, lo hice un poco reluctante. No sabía qué tenía que hacer, jamás había estado en la presencia de un rey o de una reina. Alex se levantó y se dirigió hacia mí, sonreía y se veía feliz. Al llegar a mi lado nos abrazamos.
“Te encuentras mejor? ¿Cómo llegaste hasta aquí?”. “Estoy mucho mejor – sonreí hacia él – y en serio que no sé cómo llegué hasta aquí. Solo seguí caminando hasta que de improvisto me topé con el jardín.”. Me encantaba ver sus ojos, no podía dejar de mirarlos. “Ven, te quiero presentar a mi familia, además te tengo que explicar muchas cosas”. Yo asentí y caminé junto a él en dirección a su familia, sentía el estómago revuelto. Tenía miedo de conocerlos, “Estoy nerviosa Alex, y si lo arruino todo? No me preparé
para conocer un rey y a una reina.” “No te preocupes, yo estaré a tu lado”, contestó a mis miedos y besó mi sien de una manera reconfortante.
Jamás en mi vida había tomado té y allí estaba, tratando de tomar el té con la familia del chico de mis sueños. No sé cómo pude tomar toda la taza, pero sí sé que estoy muy orgullosa de no haber vomitado frente a todos. No es que sepa malo, es que a mis glándulas gustativas no les parecía tan agradable como lo es para otros. Cuando llegué junto a Alex, al gacebo, se formó un silencio un poco incomodo. Todos me veían con curiosidad y noté cómo el padre de Alex lo observaba seriamente. Luego de unos momentos la mamá de Alex se puso de pie y me dio un abrazo. No sabía cómo responder, puesto que nunca había estado en una situación parecida. Nos sentamos y empezó una cálida conversación. Me sentí fuera de lugar, pero luego de un rato comencé a relajarme. Nos preguntaron muchas cosas, ¿Cuándo nos conocimos? ¿Dónde? Y cosas sobre mí cómo: ¿De dónde soy? ¿Qué estudio? ¿Qué me gusta? Todo siguió así durante unas horas hasta que los padres de Alex se disculparon y se fueron a seguir con sus trabajos.
Después de un rato más, Alex y yo nos encontrábamos solos y sabía que teníamos que hablar. El parecía nervioso y yo también lo estaba. Decidí ser la primera en hablar y le pregunté por las cartas. A lo que me contestó, “Siento mucho no haber podido contestar, siendo honesto, nunca llegaron a mis manos esas cartas. Yo pensé que no querías volver a saber de mí. Pensé en escribirte, pero no te había pedido tu dirección. – sacó de una canasta que tenía a su lado unas cartas amarradas con un lazo rosado. Eran mis cartas o más preciso, las cartas que le había enviado yo a él. – Las encontré esta mañana, alguien las había guardado todas y no se me había avisado.” No tenía palabras, parece que me estoy quedando sin palabras muy a menudo. “No te preocupes, entiendo. Después las puedes leer”, le sonreí y terminé de comer el bizcocho que estaba frente a mí. “¿Qué tal si seguimos nuestra conversación en otro lugar? Te quiero mostrar un lugar especial.”
Salimos del gasebo para dirigirnos al bosque, allí Alex me guió hasta un lugar hermoso en el bosque donde nos sentamos a hablar sobre todo lo que había pasado. Después de nuestra conversación estaba muy confundida. El deseaba que me quedara allí, que fuéramos novios. Me quería y yo lo quería a el, pero era una decisión muy difícil la que tenía que tomar. Estaba entre ser una princesa y luego reina, o olvidarme de todo lo sucedido y volver a mi ordinaria vida sin Alex.
Era algo que me dolía, porque no quería separarme de él. Cada vez que estaba junto a el, mi corazón se aceleraba y al nuestras manos hacer contacto, aumentaba más la velocidad. Nunca quería verlo triste o enojado, me gustaba como su sonrisa formaba hoyuelos en sus mejillas. Me estaba enamorando profundamente de él y la verdad es que podría quedarme aquí. La universidad no quedaba lejos y podría hacer el esfuerzo. Aunque también está el problema de lo que sus padres pueden opinar, pero puede que eso no sea para preocuparse. Por lo que vi el día de hoy, ellos son personas amables y con un gran corazón.
Decidí tomar una decisión dentro de una semana y así se lo dije a Alex. A él no le molestó, incluso me dijo que eso era lo mejor, que él sabía que era mucho lo que me pedía. Durante esa semana en su hogar, en su castillo, me mostraron muchas cosas. Me enseñaron etiqueta, cómo vestirme adecuadamente, y muchas otras cosas. Era agotador y a la vez muy interesante, además lo debía de hacer por Alexander. Él me quería y yo lo quería, y ambos queríamos estar juntos; pero para eso tenía que esforzarme. Alex y yo pasamos cada momento que teníamos libre juntos. Ya nos conocíamos muchísimo, pero el estar juntos nos hacía feliz. Era el último día para tomar mi decisión y en esos momentos ya me sentía frustrada. ¿Por qué? Pues porque me había dado cuanta de que Amaba a Alexander y que de verdad quería algo con él y quedarme, pero mis padres había hablado conmigo y cuando se enteraron de lo que iba a hacer y que había pasado todas mis vacaciones con un desconocido, ellos enloquecieron. Querían que volviera de inmediato y me alejara de él. Ellos eran mis padres y me dolía que no me conocieran lo suficiente como para saber que yo no había hecho nada indiscreto.
Le conté a Alexander lo que había pasado entre mis padres, fue él quien me consoló y me tendió su hombro para llorar. Me dijo que el estaría ahí para mí, sin importar la decisión que tomara. En esos momentos de mi vida comprendí algo: en el amor a veces se debe de dejar algo para obtener algo más preciados, los hijos dejaran a sus padres; como sus padres dejaron a los suyos. Yo haría mi vida, claro que mis padres siempre serán muy importantes para mí, pero Alex es igual de eterno como mi familia. Había tomado una decisión y sabía que nada era imposible. Todo se puede con AMOR, FE y PACIENCIA.
Decidí quedarme con Alex. No sería fácil el tiempo por venir y eso lo tenía muy claro, pero mi amor lo podía todo. Cuando se lo dije a Alex, estaba que explotaba de la alegría. No podía dejar de abrazarme y besar mi rostro. Parecía un niño pequeño. Sus padres me dieron la bienvenida a su hogar.
Dos días después, Alex y yo nos encontrábamos en una hermosa pradera y hablábamos. Estábamos en silencio caminando hasta que se detuvo y se volteó para mirarme de frente.
“Annabeth, sé que estos días lo has pasado muy ajetreada, esforzándote mucho y que estabas triste por dejar a tus padres. Sé que tomaste esa decisión por que me quieres y sabes que yo te quiero y es por eso que deseo decirte algo muy importante para mí. Jamás había conocido a una chica tan fenomenal, graciosa, humilde y hermosa. Te has convertido en alguien muy importante en mi vida y es por eso que quiero pedirte formalmente que seas mi novia.” Se mantuvo viéndome a los ojos y vi como brillaban con expectación. Así que no lo hice sufrir más y contesté con una media sonrisa, “Sí”. Su sonrisa se ensanchó y se fue acercando hasta que nuestros labios se tocaron, y me besó. “Te Amo” me susurró, a lo cual le contesté, “Yo también te amo”.
Mi vida como princesa apenas comenzaba. Debía estar presente en bailes, cenas, reuniones y muchas otras cosas. Algunas fueron aburridas y en otras me divertí. Conocí muchas personas e hice nuevas amistades. Estudiaba y participaba de las actividades a las que tenía que acompañar a Alex por ser su novia.
El tiempo se fue volando y pronto me encontré frente a una iglesia y bajando de una auto para entrar a ella. Era el día de mi boda. Los años habían pasado rápido y Alex me propuso matrimonio de una manera extraordinaria y bellísima, si creía que no me podía enamorar más de él, estaba equivocada de eso. La alegría de ese día siempre me ha acompañado, incluso en los momentos difíciles; ese día y el día en que conocí a mi alma gemela son los que me hacen sobrellevar los obstáculos.
Atrapa la Felicidad, guárdala y recuérdala por siempre como lo hago yo todos los días. Mi historia puede que no fuese tan emocionante como lo vieron, pero cada relato de amor tiene su propia aventura. La mía la tuvo y gracias a nuestros deseos de estar juntos y amarnos es que hoy puedo decir que amé con todas mis fuerzas. Viví dolores, pero me mantuve fuerte. Alex y yo siempre tendremos en nuestros recuerdos mas vivos, la historia de como fuimos de una encuentro casual a amarnos por toda la vida.
“Los cuentos de hadas, sí existen”.
“ El verdadero amor es raro, y es la única cosa que le da un significado real a la vida”. - Nicholas Sparks
8 Horas y Media
Pensaba que la vida era un cuento de esos en los que todo siempre es perfecto, como cualquier otro niño piensa pero… digamos que la vida no me ha mostrado su lado más bonito. Soy Emilio, un hombre moreno de ojos color miel y con infinitos lunares adornando su cuello. Tengo 40 miserables años de los que no estoy orgulloso de haber vivido. Odio mi nombre, mucha gente piensa que es estúpido odiarlo, no es un nombre feo, pero ellos no saben mi vida y su opinión para mí no vale. Llevo una cicatriz cruzando mi boca diagonalmente que me gané aquí el día de mi llegada a este lugar, pensaban que había cometido una locura pero sé que hice lo correcto. Caminando por estos pasillos putrefactos solo puedo pensar en mi vida pasada, lo terrible que fue y lo que me llevó a hacer. Llevo la mitad y un poco más de mi edad en este asqueroso lugar. Hoy le darán fin a esta historia.
Gritos, recuerdo gritos, cosas las cuales odiaba escuchar todos los días cuando él llegaba a casa. Ella lo amaba tanto, lo recuerdo, pero en cuanto a él no puedo decir lo mismo, no era un hombre alcohólico, era simplemente un imbécil enfermo, le gustaba verla sufrir ya que “le causaba cierto placer”. Me pregunto si desde el primer momento fue así con ella… Sé que la respuesta sería un no porque su resistencia al sufrimiento era inagotable o al menos así lo veía yo. Rubí, así se llamaba y era la mejor persona que habrías conocido jamás, aún mantengo en mi mente los momentos en que me mimaba y me consentía. Pero muchas cosas pasaron…
Durante toda mi niñez no tuve ni una sola buena amistad con alguien y jamás tuve el “privilegio” de poder hacer mis problemas “más livianos” contándoselos a mi mejor amigo o amiga. De todos modos en este mundo a nadie le importan tus problemas. La gente ya tiene muchos problemas como para andar por ahí cargándose de los ajenos. En lo único que pensaba esos últimos días era en poder cumplir mis 18 años para largarme de ese cuchitril que solo había logrado arruinar lo que creí que sería perfecto. Vivía tan aterrado de que un día me golpeara a mí también y se convirtiera en costumbre. Esa noche, cuando pensé que todo acabaría estaba apenas comenzando.
17 años, en 3 o 4 semanas más me podría largar de allí por fin. Era un día como cualquier otro, un poco lluvioso pero nada grave, hoy era el último día de clases del primer semestre. Eran las 4:30pm y Me dirigía a mi casa luego de un día completamente normal en la escuela.
Ya eran las 6:30 pm cuando llegué a mi casa, la escuela no me quedaba ni un poco cerca. Me encerré en mi cuarto a ahogar mis pensamientos en la música, música brusca, violenta, poderosa, que me ayudaba a alejarme de mi realidad.
Ella siempre estaba allí en casa, la mantenía limpia para nosotros o, no lo sé, tal vez era su único desahogo pero yo no podía hacer nada más que fingir que estaba dormido. Nunca salía a ninguna parte, odiaba tanto eso, pero no podía hacer nada más que fingir que aún seguía dormido. Ya las cosas en mi casa no eran igual que al inicio, cada año la gravedad de las cosas aumentaba. Llegué a casa y allí estaba tal y como lo supuse, distrayendo sus sentimientos, preocupaciones y problemas en la cocina: la comida, los ingredientes, los platos, los cubiertos, el postre… y todo eso acompañado de la sonrisa falsa más profesional que pudieras ver en tu vida. Yo ya estaba harto de ver cómo se esforzaba para “un cambio”.
7:30pm Llegué a las duchas, malditas y asquerosas duchas, pero tengo que estar “presentable” según los cretinos de aquí. Sentía el agua recorrer cada espacio de mi cuerpo dándome cierta paz.
7:50 pm bajé las escaleras para dirigirme a la cocina y saciar mi hambre; nos sentamos a comer juntos, no la miraba, no podía, no me atrevía. Así pasó la hora de la cena, solo cubiertos sonando, ninguna mirada ni tema de conversación; solo se escuchaban carros pasando por la calle, música a lo lejos, tal vez en la casa de algún vecino y gente haciendo ejercicios. Después de cenar los dos, fuimos dejando la cocina impecable, eran las reglas, y nos dirigimos a dormir a nuestras respectivas recamaras.
9:50 pm, todo el vecindario duerme y yo despierto cuando siento algo, él había llegado; él, Emilio. Comencé a sentirme en un ambiente de miedo como cada noche sucedía. Escuchaba como su tono de voz iba aumentando cada vez más. 10:00 pm podía sentir cómo la golpeaba y como cada insulto calaba su corazón. Sentía que me derrumbaba con cada golpe “haz algo, la va a matar idiota” mi yo interior gritaba.
10:30 pm recorro estos asquerosos pasillos que me han protegido durante los últimos 22 años… Encaminándome al final de todo.
11:00 pm ya estoy aquà en la acojinada silla nada amigable‌
11:15 pm Ella intentaba defenderse pero le era imposible, los gritos aumentaban y nadie hacia nada… 11:30 pm Tape mis oídos para concentrarme más en lo que estaba ocurriendo o estaba a punto de ocurrir. 11:45 pm los gritos cesaron “la mató” gritaba mi yo interior; Comenzó una discusión más fuerte y los sollozos de mi madre me rompían el corazón de a poco, pero no podía hacer nada más que fingir que seguía dormido…fingir que seguía dormido…fingir que seguía dormido… 11:50 pm “Despierta, Despierta, Despierta” En un arranque de valor llegué a su habitación y en un brusco movimiento abrí la puerta… Allí estaba ella, tirada en el suelo rogándole en sollozos que se detuviera. ¿Qué era lo que iba a hacer?
Al verlo rápidamente lo escaneé con la mirada de arriba hacia abajo y tenía un arma de fuego en la mano apuntando hacia ella. “NO” me dije para mis adentros “No dormiré más” Corrí hacia donde él estaba y comencé a forcejear para arrebatarle el arma
11:55 pm Se escucha un disparo, una bala había atravesado sus entrañas. Ahí comenzó todo…
Son las 11:59 pm aquĂ en mi acojinada y nada amigable silla estoy, faltan solo segundos para el fin. A las 12 termina todo.
Kamil L. Coriano ParĂs 12-1 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Querido Diario‌
Fuiste un regalo en mi cumpleaños de parte de mi madre, Ana. Mis padres piensan que es mejor escribirlo en un papel que desahogarme con una persona. Como puedes ver, ellos no confían en nadie últimamente, para ellos todo es malo. Pero bueno, me llamo Elena y acabo de cumplir mis 18 años, creí que me sentiría diferente, pero es solo un número más. ¿Por qué digo eso? Digamos que mis padres me sobreprotegen demasiado, así que apenas salgo. Oh, por cierto, cuando me gradué de superior, nos mudamos a Mystic Falls.
Mi primer verano aquí fue interesante, les pedí a mis padres que me dejaran ir a la fiesta de bienvenida de verano y me lo permitieron. Ahí conocí a un chico atractivo, misterioso y amable, nunca me dijo su nombre. No lo volví a ver después de esa fiesta. Pasaron meses y mientras caminaba por el parque lo vi sentado en una banca mientras leía un libro. Me acerqué a él y comencé a hablarle, había algo en él que me daba escalofríos y mucha curiosidad por conocerlo.
Su nombre era Damon Salvatore. Hablamos por horas, y todavía hay algo en el que lo encuentro misterioso, como si escondiera algo. Después de eso, comenzamos a vernos constantemente en el mismo banco del parque a la misma hora, pero un día fui y él nunca llegó. Otra vez, no lo vi por meses, tonta yo por no pedirle su número. Seguí yendo a la misma banca, la misma hora, todos los días, por meses, hasta que un día me cansé de esperar y entré al bar que se encuentra frente al parque, me senté en la barra y pedí mi bebida.
De momento, siento que alguien se sienta a mi lado y me pregunta si estoy bien, ¿quién sería? Al mirar, era él, Damon. Meses después, había rumores de que existían vampiros y que andaban por Mystic Falls, irónico, eso no es posible. Luego, me enteré que Damon era uno de ellos, claro que me asusté y lo quería lejos de mí, pero estaba enamorada de él, aunque fuera peligroso. Ya había pasado dos años desde que lo conocí. Un día, íbamos a pasar por el puente donde mis padres adoptivos fallecieron, sí…se me olvidó decirte que mis verdaderos padres me dejaron
cuando era solo un bebé, pero ese no es el punto. Damon iba a cruzar por ese puente, pero le dije que no, le tenía mucho miedo porque yo estuve en ese accidente y alguien me salvó pero mis padres murieron, Damon sostuvo mi mano y me dijo que todo iba a estar bien, pero cuando aceleró, alguien se cruzó en el medio y el auto fue directo al agua. Yo no recordaba nada, al despertar me sentía tan confundida, perdida, con mucha sed…pero de beber sangre, ¿por qué?
Luego Damon me explicó que estaba muriendo y tuvo que convertirme en vampira, al principio me sentía tan furiosa con él, pero luego todo fue tan divertido, me enseñó muchas cosas como: hipnotizar a las personas, tener control y no matar a nadie, cazar animales, además soy más fuerte y veloz, puedo escuchar desde muy lejos todo. También tengo mi anillo para caminar bajo el sol, son tantas cosas. Desde eso, hemos viajado para todas partes por años y seguimos siendo jóvenes, esa es la mejor parte, no envejecemos.
Este fue un resumen de c贸mo cambi贸 mi vida con solo conocer a Damon Salvatore, ha sido una gran aventura y mucha adrenalina, por fin me estoy divirtiendo, hasta aqu铆 mi historia. Hasta Luego Diario, Elena Gilbert.
Francheska Ayala Rivera 12-1 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas Querido Diario‌
El camino a Poesía Érase una vez un poeta deprimido que no encontraba su inspiración. Un día, cuando su coraje tomó posesión de él, empezó a quemar todo poema que alguna vez en su vida le trajo alegría y esperanza. Descontrolado tomo el siguiente papel que se encontraba cerca de su mano y lo arrojó al fuego. Lo que no se esperaba era que el papel no se quemaba.
Al contrario, las fuertes llamas bailaban alrededor de aquel viejo y marchitado papel. Maravillado de lo que veía, apagó el fuego y sacó el papel cuidadosamente. Al visualizarlo se dio cuenta que era un mapa que ilustraba el camino a Poesía. Con sentimientos encontrados, recordó que su padre antes de morir le había hablado de Poesía, aquel encantado lugar escondido, donde las palabras sinceras cobraban vida y en donde los verdaderos poetas realizaban sus maravillosos poemas que cambiaban la vida de las personas.
Cansado de vivir una vida llena de soledad, amargura y palabras crueles, decidió aventurarse en lo desconocido. Desesperado empacó sus rimas, versos, metáforas, prosas, entre otros. Y comenzó su travesía con su antiguo mapa y su pequeña maleta. El camino consistía en atravesar las tierras de los libros hadas y el cementerio de los poetas frustrados.
Caminó por dos largos y agotados días hasta llegar a las tierras de los libros hadas. El lugar era un bosque encantado lleno de vida, pero ningún ser viviente se encontraba allí. Preocupado e intranquilo, continuó su camino. Cansado de caminar, decidió sentarse debajo de un gigante árbol frondoso que daba sombra a la mitad del bosque. Al alzar su mirada se percató que en las ramas del árbol se encontraban libros. Sorprendido y lleno de curiosidad, se levantó y agarro uno de los libros.
Al abrirlo todo el bosque cambió. Lo que parecía que alguna vez tuvo vida ya no existía, solo era una mancha negra que simbólicamente representaba la muerte. Un fuerte dolor que provenía de su mano, lo hizo mirar hacia abajo y vio que el libro lo mordía con sus filosos dientes. Asustado llevó su mano hacia atrás y con todas sus fuerzas golpeó el árbol con el libro. El libro soltó su fuerte agarre y cayó al suelo. El golpe hizo que los demás libros cobraran vida.
Aterrorizado tomó sus pertenencias y comenzó a correr. Los libros empezaron a volar persiguiéndolo y dejándose caer encima del poeta, causándole a este gritar por el agonizante dolor. La única manera que haría que los libros hadas lo dejaran en paz, era salir de sus tierras. Milagrosamente, vio un letrero en malas condiciones que decía “FIN DE LAS TIERRAS DE LOS LIBROS HADAS”.
Con sus últimas fuerzas y esperanzas, cruzó el letrero y como si nada hubiera pasado, el bosque y los libros volvieron a su normalidad. El poeta desorientado no podía creer lo que le había ocurrido. Pero su deseo de ver la tierra de Poesía fue lo que lo mantuvo motivado a seguir caminando. Por el camino comprendió que aquellos libros eran libros que fueron escritos por autores que les deseaban la maldad a las personas.
Envuelto en sus pensamientos, no se dio cuenta que habĂa llegado al Cementerio de los Poetas Frustrados. En donde las almas de los poetas se encontraban prisioneras por sus deseos de un verdadero poema que les llenara el vacĂo que en sus almas habitaba. El cementerio era un lugar oscuro, desierto y con muy poca visibilidad por la neblina que allĂ se encontraba. El poeta aterrorizado por la apariencia de aquel temible cementerio, dio su primer paso hacia delante.
Rápidamente una fuerte voz le pregunta: “¿Quién eres y por qué estás aquí?”. Tartamudeando, el poeta le explica brevemente su pequeña historia y su gran deseo de llegar a Poesía. Al instante que el poeta culminó de hablar, muchas voces comenzaron a reír descontroladamente. La misma voz fuerte le explica que para poder llegar a Poesía tenía que crear un poema que rompiera las cadenas que ataban todas las almas que se encontraban en aquel cementerio.
Asustado y nervioso, el poeta comenzó a sacar las pertenencias de su maleta. No sabía cómo crear un poema tan poderoso . Estuvo horas pensando e intentando, pero nada se le ocurría. De momento, empezó a pensar sobre su padre, aquel valiente hombre que murió por salvar a su familia. Su mano empezó a escribir como si tuviera mente propia y de la nada había creado un asombroso poema lleno de sentimiento que llenaba sus ojos de lágrimas.
El poeta ley贸 su obra en voz alta. A mitad del poema,un fuerte ruido de cadenas rompi茅ndose lo hizo detenerse. Cuando despeg贸 su mirada del papel, se dio cuenta que se encontraba solo y la oscuridad que antes hab铆a, la reemplazaba una brillante luz que creaba un ambiente sereno.
Orgulloso de lo que había logrado, recogió sus pertenencias y dio sus últimos pasos hasta llegar a donde se encontraban dos grandes puertas hechas de oro y adornadas con palabras en diferentes lenguajes. Al lado de una de las puertas se encontraba un letrero de plata que decía “Bienvenidos a Poesía”.
Emocionado, empujó las pesadas puertas y estas se abrieron. Un odioso ruido lo hizo despertar de aquel profundo y magnifico sueño. Enojado, silenció su alarma y continuó durmiendo, anhelando reaparecer en aquel sueño que sin darse cuenta había completamente cambiado su vida.
María Pérez Rosario 12-1 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
En ese momento, deciden enfrentar al campeón mexicano Orlando “Siri” Salido. Chuito sufre su primera derrota como profesional por decisión unánime. Esta derrota puso muy triste a su familia y a Chuito: pensó que era el fin de su carrera porque nunca había pasado por la experiencia de ser derrotado como boxeador profesional. A Chuito le vino a la mente sus padres y tuvo mucho
Beristain (entrenador y jefe del equipo de Chuito) le informa a éste de la oportunidad. Chuito lo Consulta con sus padres y estos lo apoyaron pero al mismo tiempo se preocuparon mucho por el largo viaje. Luego de analizarlo bien, Chuito firma el contrato. Y éste comienza a entrenar para el combate en Filipinas. Luego de un largo viaje aéreo Chuito, su grupo de trabajo y su familia llegan a Filipinas con 10 días de anticipación al combate. Chuito el día del pesaje tuvo problemas para dar el peso límite teniendo una penalidad económica lo que significó menos dinero en su bolsa.
Chuito conoce a una muchacha llamada Cristina, la cual le brinda su amistad y consejos durante una cena. Al pasar el tiempo, Chuito y ĂŠsta comienzan a salir juntos y sienten que se estĂĄn
compartir bien con los padres de ésta. Luego de 4 años de noviazgo, Chuito le propone Matrimonio a Cristina , y ésta lo acepta con mucha alegría y emoción. Deciden casarse por la
Cuentos en InglĂŠs
Coco, The Storyteller A Short Story By: Sergio Rivera
Coco loved animals, especially snakes, crocodiles and sharks. All day he thought about snakes that make noise with its tail, which have large fangs and spit poison, which are longer than one way and those that are big enough to eat a whole deer. Coco said crocodile’s bite was so powerful that they could pluck one leg at a stretch and are so fast that we can’t escape them. He also was fascinated about sharks, he said that roam the beaches and have a big jaw that can eat a human of one bite. For his birthday Coco asked his mom to get him a really dragon, those who take fire in his throat.
Shark
Crocodile
Snake
Coco loved how children felt scared‌ He once said that a snake had climbed through his window and when he reached his bed he found it sleeping with his pillows. Also, he once scared a classmate saying that a crocodile had dragged him down the river and almost eat his leg.
Also, he told a child that once being on the beach, a shark was so brave that jumped on the boat. So, he spent his entire time, talking, playing and thinking about snakes, crocodiles and sharks.
One summer Coco had to stay a few days in the field with her aunt Antonia, because her mother had to work. Coco loaded a backpack with lots of toys to feel entertained. Coco stood still. When, suddenly, he saw a huge tail move between plants. At morning he went to the He was afraid and did not know what balcony and saw something to do. He thought about running, but move very fast. his legs were shaking; he thought about screaming, but her throat was sealed by fear; he thought a prayer, but his mind was blank.
Was this the boy who scared everyone with wild animals? When he could move a leg, observed that a snake was the one who was trying to hide among the plants. Luckily for him, his aunt came and Coco pointed her where was the snake. His aunt sought a broom and scared the snake that had very bright yellow and brown stripes; scrawled over the balcony until reached the garden and disappeared with lightning speed. Coco hugged his aunt. The shock took effect. Coco's mother made him a call to see what gift he wanted of the travel, waiting for him to say that a huge poisonous snake; but was surprised when he asked for some toy cars.
Well kids, get ready because now the Coco’s stories will be the cars, buses, trucks, and even bicycles.
Please do not stop laughing and behave yourselves.
Department of Education of Puerto Rico Aguas Buenas Urban High School
Francis M. García Cruz Christian O. Guzmán Morales
Although they were very afraid they faced the ghost Later, realized it was their friend Pedro playing around.
Now that the mystery was solved, they all went inside the house to chat, eat and play games. In the end, Rafael and Martha had a nice afternoon with their “ghost� Pedro!
Poesía
Palabras Las palabras, al igual que el viento, acarician al igual que azotan. No importa el pasar del tiempo las palabras siempre alborotan. Puede ser un sutil silbido, Aquel que marque nuestra existencia. Puede ser la gran tormenta que derrumbe nuestra paciencia.
Tanto sean palabras de amor o sean palabras de ira, cada vez que halamos un clamor las palabras son nuestra guĂa.
De principio a fin las palabras nos demuestran tanto lo hermoso de vivir o nuestra inocencia secuestran.
Como dice Isabel Allende, las palabras son poderosas. Ten cuidado como las usas puedes crear cosas desastrosas.
Tanto sean palabras de horror o sean palabras de consuelo, las palabras son un esplendor que a menudo nos causa revuelo.
Abiah N. Figueroa Soto 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Más que un anhelo Más que un anhelo, más que un deseo. Todo mi ser anhela de ti porque gracias a ti estoy aquí. No sé qué haría sin tu presencia , pero por el momento, me agarraré de ti y no te dejaré ir. Gracias a ti respiro y puedo vivir. Mi alma anhela adorarte hasta el fin. Cuando vengas a buscar a tu pueblo estaré lista para adorarte con lo más profundo de mi ser. Más que un anhelo, más que un deseo, mi alma y mi cuerpo te pertenecen hasta el fin.
Alondra González Rodríguez 12-1 Esc. Acredita Superior Urbana Aguas Buenas
Mi Tierra Tu tamaño es como una botella pero tú eres la Isla más bella. En la noche, espero para ver tus estrellas. A ti te amo cual linda doncella.
Primero, de los taínos esta tierra, luego llegó España con su guerra. Africanos trabajando en las sierras. Al final, los descendientes de Inglaterra.
En el Caribe eres el país que más brilla. Tú que tienes tantas maravillas que se ven hasta cuando el sol brilla, valen más que la riqueza amarilla. Nació el deporte del pobre y del rico donde los gallos pelean con su pico. Si no sabes de dónde hablo, me explico: me refiero al mejor país, Puerto Rico.
Carlos J. RodrĂguez Aponte 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Voy a amarte‌
Voy amarte hasta que las estrellas desaparezcan del universo.
Hasta que las hojas dejen de caer con la llegada del oto単o.
Hasta que las olas del mar dejen de llegar a las costas.
Y hasta que el sol deje de ocultarse.
Simplemente, te voy amar hasta que mi cuerpo no reciba mĂĄs oxĂgeno.
Dayra E. Marcano Ortiz 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Una tarde en San Juan Aquella tarde en San Juan donde el Sol se veía brillar, se escuchaban las gaviotas cantar. Las pequeñas olas de aquel mar me inspiran a bailar. La brisa suave que me venía a acariciar en aquella tarde en San Juan.
Edwin A. Vallejo Pedraza 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Eres lengua mía de sangre y herencia. Eres oficial en mis pueblos, idioma mío y de ellos. Eres lengua romance y vulgar por igual. Lengua de Dioses y de humanos tal cual. Eres mi idioma, mi ser eres el Español de mi atardecer.
Génesis Verlynn Sánchez Hernández 12-4 Esc. Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
LA VIDA
Vivir es tener experiencias buenas y malas. Vivir es amar las personas mรกs cercanas. Vivir es disfrutar los momentos buenos, pero enfrentar los malos.
Vivir es trabajar lo que te gusta. Vivir no es quedarse en la casa encerrada. En la vida los momentos malos destruyen a cada uno de diferentes maneras.
Cada uno tiene la opci贸n de vivir en tristeza o armon铆a.
Muchos destruyen la vida de otros.
Otros tienen que pelear por libertad y justicia.
La vida es corta, disfruta cada momento. Gerardo J. Monge Ocasio
12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Conquistaré el Mundo Conquistaré el mundo. Sí, yo conquistaré el mundo. No, como lo hicieron en la antigüedad; con armas y espadas, cañones y bombas, guerras y duelos, trampas y engaños, así como nos invadieron.
Yo conquistaré el mundo, como lo hizo Isabell Allente, con sus palabras. Esas que plasmó en un libro, que recorrió el mundo entero, llegando a su país natal, creando en unos esperanza, en otros temor; porque alguien se atrevió a escribir la realidad. Así, yo conquistaré el mundo, con mis palabras.
Pero seré astuta, seré sabia. No usaré palabras que hieran, lastimen, castiguen o critiquen a otros. Usaré las palabras que tanto Pablo Neruda amó. Palabras positivas e inesperadas. Que motiven, convenzan, inspiren y conquisten. ¡Con esas palabras yo, conquistaré al mundo!
Sacaré del olvido las palabras, que María Vaquero menciona en su artículo “¿Ubí sunt?”. Para obtener el dominio, con el que puedo hacer cualquier cosa. Ese que señaló Juan Antonio Rosado, El dominio de la palabra.
Pero yo me preparé con mis 24 herramientas, sí, mis 24 fonemas. Esos que me ayudan a crear las palabras, con las que haré la diferencia, con las que dejaré mi marca, con las que conquistaré el mundo. ¡Ven, conquistemos juntos, conquistemos el mundo con el poder de las palabras!
Glorimar Martínez Fontánez 12-1 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Dulce amargo que mata, Puño de dolor que te ata El alma se va en huida Buscando apoyo y sanación para su herida. Ya sea por una pérdida dura, o sea por desamor, Así siendo un extraterrestre, animal o humano Todos sabemos que siempre La cura para la tristeza lo será el amor. Oscuridad sin fin, sin salida Oscuridad que solo podrás alumbrar Oscuridad que solo podrás iluminar Con la ayuda de Dios y tu familia.
“TRISTEZA”
Jensen Cotto Vรกzquez 12-1 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Diluvio de pensamientos
Gotas y gotas caen sin cesar, mi mente no se cansa de pensar. Gotas y gotas caen sin parar, Mi mente no se cansa de pelear.
Mi lucha es continua y mis fuerzas son pocas. A menudo me agoto Y los dĂas se agotan.
Gotas y gotas caen sin cesar, El charco aumenta más. Gotas y gotas caen sin cesar, Ellos no me dejan en paz.
Pensamientos hostigadores de ti Deambulan diciendo “te lo advertí”. Una madre solo tendrás, Sin mi, en soledad estarás.
JesĂŠ Vergara Ayala 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
“La persona que soy contigo”
Todavía recuerdo el día el cual a mi vida entraste. Realmente nunca pensé que serías alguien tan importante
Ya habĂa dejado de creer en el amor, pues su resultado en mĂ siempre era dolor.
JesĂşs M. Villegas Cruz 12-4
Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Es pasión… Algo más que desear, algo más que sentir, algo más que anhelar, algo más que intensidad, algo más que entusiasmo, algo más que satisfacción, algo más que energía, algo más que sexualidad, algo más que amar.
Joeliz González Negrón 12-1 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
La gravedad se apodera de mí, lenta y dolorosamente. Me arrastra hasta el suelo, intento escapar, pero es imposible, poderme salvar.
La gravedad se venga de mí, mi felicidad, fue su esclavitud. Y ahora su esclava soy yo, la culpable de esta estática insólita del yo.
Mi egoísmo me cegaba, Mi inseguridad me atormentaba. Pero tengo que escapar; escapar de la gravedad, a la cual me aferraba.
Mientras más resisto, más daño me hace. Su peso recae en mis hombros, pero yo; siempre fui la culpable.
¡Cómo escapar de ti! ¡Cómo escapar de la gravedad! ¡Cómo ser libre! ¡Cómo escapar de mí! Gravedad… ¡abandóname! y socórreme de a golpe; no quiero ser como tú, mas quiero ser como yo… quiero ser libre, y tu fuerza me adhiere al suelo.
Quiero ser mariposa, y bailar con el viento, mas tu fuerza me mantiene estática. Continuaré luchando, Por ser libre de ti, algún día. Y volaré en mi espacio Alcanzando mi fantasía.
Kamil L. Coriano ParĂs 12-1 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Palabras
Palabras en silencio, palabras en papel. Palabras en tus huesos, palabras en mi piel.
Palabras pudiste haber dicho, palabras yo siempre esperĂŠ. Palabras que siempre contienes, palabras en este papel.
Palabras con nervios de punta, palabras con sentimientos profundos. Palabras que pueden cambiarnos, en cuestión de varios segundos. Palabras que yo me contengo, palabras que quieres oír. Palabras que sin tu ayuda, no podrían salir de mí.
Palabras que quiero decirte, palabras que contengo aún. Palabras que pienso al verte, palabras en mi corazón.
¿Hasta cuándo esperaremos? ¿Hasta cuándo las retendremos? ¿Hasta cuándo las esconderemos? ¿Hasta cuándo fingiremos?
No permitamos que se detengan, no las dejemos apresadas. Que estas palabras no se contengan, que no se queden encarceladas.
Kamil L. Coriano ParĂs 12-1 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Sonrisas
Sonrisa se dibuja en tu cara, sonrisa se dibuja en la mía. Sonrisas que hacen despertar algo, sonrisas que no son mentira. Llenas están de cariño, del cariño que nos tenemos. De ese que no demostramos pero aun así verlo podemos.
Tu sonrisa, cual brillante luz, mi sonrisa acompañando la tuya. Reflejando un momento perfecto, en el que la luz de ambos perdura.
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Expresión de alegría en tu cara expresión de alegría en la mía Expresión que afirma que tu alma, está destinada a la mía.
Kamil L. Coriano ParĂs 12-1 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Tiempo
Kenneth Cintr贸n D铆az 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Desde aquel día que me dejaste, nada es igual, mi corazón llora de tristeza , porque tú no estas, quisiera que vieras mi despertar, porque ya nada sin ti es igual.
Cuando aquel día te marchaste, Me dejaste sin respirar, Porque solo contigo, Yo quería estar. Esa nube que está, Tiene que despejar, Porque algún día contigo, Me voy a encontrar.
Sin ti nada es igual Por: María I. Guevara Santiago 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Amanece Hay un silencio profundo en todo mi alrededor, es como un vacío hondo que nos brinda el Creador. Siento una tranquilidad y una paz interior, es como la lealtad que nos ofrece el Señor. Durante la madrugada fruto de la creación, mi alma está sosegada ya amaneció іQue emoción!
Naomi D. Rivera Mojica 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
“
“Mi Pequeña princesa”
”
Muchos sentimientos encontrados. PasĂŠ de felicidad a tristeza, con mis ojos hinchados, no puedo dejar de ver tu belleza.
Tanto que me gustan los bebes. ¿Porque esto me pasa a mí? Tan solo faltaba un mes para poder tenerte aquí`.
Te fuiste sin apenas conocerte. El dolor me tortura el alma, pensar no poder tenerte, no logro encontrar calma.
Al tenerte aquí en mis brazos sentirte fría e indefensa solo puedo darte un abrazo y preguntarme: “¿Por qué tu vida no fue más extensa?”
Ya tenía todo preparado, ahora todo se a arruinado solo me queda una cuna vacía. Mi pequeña princesa, María.
SĂŠ que Dios te ha llevado con ĂŠl y que no debo cuestionar, pero no puedo aguantar las enormes ganas de llorar.
Gracias, mi pequeĂąa princesa por tu tan linda humildad y por darme la oportunidad de tan solo ocho meses ser mamĂĄ.
Yaira pagรกn Aponte 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
La vida es… La vida es un pentagrama, notas suben y bajan, silencios y valores según las notas, blancas y negras las personas. La vida es en clave de sol o de fa, en Andantino o Allegro según el compás, largas ligaduras hay que pasar, ritmos vienen y van. La vida es una sinfonía, es interpretada según su melodía, se suma, resta, divide y multiplica, así describo la vida mía.
Yairel M. Martínez Ramírez 12-4 Escuela Acreditada Superior Urbana Aguas Buenas
Realizado en CITeD de Aguas Buenas