Recital de Poesía Colegio Mayor Ayete Ateneo de Poetas
15 de Noviembre de 2017
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Yo pronuncio tu nombre, en esta noche oscura, y tu nombre me suena más lejano que nunca. Más lejano que todas las estrellas y más doliente que la mansa lluvia. Federico García Lorca
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Recital de Poesía Índice Juan Flaquer
En la biblioteca
Rafael Hernández Urigüen
Bakea eta ona!
José Pablo García Pomar Gloria Galicia
Sol Noche cerrada
Gloria Galicia
Solo queda té
Juan Cárdenas
Eva, mi compañera
Juan Cárdenas
Mar naranja
Gonzalo Ruiz
A mi media naranja
Joaquim Planellas
Aroma
Sonia Ansa
Salmo IV a mi Dios niño
Javier Biera
Tres barcos y dos rosas
Francisco de Sales Nagore
Noviembre
Toché Marín
Cuento de hadas
Manuel de Benavides
Olvidó todo
Dario A. Brillembourg
La rosa suplica delicadeza
Fer Ruiz
Ceras azules
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El ateneo de poetas Es difícil tratar de expresar lo que uno desea, sufre o piensa. Aunque la ilusión sea plena y no podamos contener esa idea en nosotros, aun así, siempre es complicado hablar de lo intangible. Nadie habla de poesía en su casa con sus amigos cuando la televisión está encendida, ni qué decir en un bar invadido de conversaciones y música, o en la misma calle entre el ruido de los coches y el ajetreo de la vida. Cuando tratamos de describir a alguien todo el mundo comienza diciendo rasgos característicos, sus aficiones, dónde trabaja, alguno se aventura a hablar de su futuro, cualquiera comenta sobre su pasado. En cambio, si te preguntan a ti en qué eres bueno, lo más probable es que tengas que pensar un poco. Si la pregunta va sobre qué quieres hacer con tu tiempo, cuanto más tienes menos sabes. Mas, si la cuestión va sobre a quién amas o cómo querrías que fuese tu amor... nunca existe respuesta, y si crees tenerla, seguramente no sea el amor que en el fondo anhelas. Es aquí donde nace la poesía, de la necesidad. Una necesidad fundada en uno mismo, en el conocimiento propio, en la búsqueda de los sueños... La necesidad de explicar cosas imposibles, de comprenderlas e, incluso, de realizarlas. Un poeta es una persona que ha sabido tomar perspectiva de sí mismo desde sí mismo, desde su interior y cuando lo consigue, es invencible. Las personas que recogen aquí sus poemas han sabido hacerlo, pero piensa que tú también eres capaz, solo tienes que tener preguntas sin respuesta. Javier Biera !5
En la biblioteca Sentado en una silla, Ante una mesa alargada, Paso el tiempo atareado En tareas muy variadas. Por las rendijas amplias De la estática persiana, Se cuela la luz triunfante Al comenzar la mañana. Llevo rato trabajando El silencio me acompaña Cual testigo vigilante De mis trabajos y pausas. Deslumbrado casi siempre Por la molesta pantalla Escribo con el teclado Palabras y más palabras. Los libros que me rodean, piedras son de una muralla; ¡Ojalá fuera el cantero Que labrara la que falta! La piedra que es dovela De un arco de una arcada, Aquella que es la clave En la bóveda más alta. !6
Siento voces que me dicen —Tú escribe y… aguanta Esos locos delirios Que te agobian y te cansan. » Sé tú la última piedra, La de la balda más baja, La que para ser leída No necesita la escala. Miro a un lado y a otro lado Estoy solo en la gran sala El sol guiña por las rendijas ¡Ya es hora de abandonarla! Me levanto con cuidado No dejo en la mesa nada Me despido de los libros Y pienso en el que falta. Juan Flaquer
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Bakea eta ona!, Francisco de Asís, paz y bien hoy 15 de noviembre por la tarde y siempre INTRODUCCIÓN: Perdonad que os confíe algo muy personal: Hoy mismo, a las siete menos diez, la brisa de la mañana despertaba en mi rostro dormido recuerdos de Arántzazu, mientras iba a predicar por aquí cerca. Y pensaba, -¡qué fuerte!, no me acostumbro- en la cercana Eucaristía. Son tiempos recios y convulsos. Ante el universal dolor la pregunta habitual:-“¿todo bien?”, suena casi a insulto en forma de tópico. Por eso yo pedía al de Asís que me ayude en mi oración a descubrir qué más podemos poner de nuestra parte para recuperar el bien que escasea y la humanidad tanto anhela. Venía, hecha plegaria recurrente, a mi cabeza la vieja y simple tonada de Mecano: Hermano sol hermana luna que nada nunca me separe de los dos Hermano sol hermana luna que nada nunca me separe de mi Dios Paz y Bien, Francisco de Asís, Bakea eta Ona! ¡Ruega por nosotros, otoitz gure alde, poverello, mendigo de Dios, millonario de Amor que se da sin medida; llena nuestros corazones mezquinos, millennials, mileuristas pensionistas, consumistas…! Sí, hoy, precisamente esta noche oscura y luminosa, porque es quince de noviembre, en el año diez mil siete, aquí desde las ocho postmeridian. Paz y Bien, Francisco de Asís, Bakea eta Ona! !8
Admíteme en tu corro de fratelli y pide al Santo Espíritu que me ponga a girar y cuando digas stop!¡ ¡para!, geldi! ¡quieto ahí!, ruega que después camine sin pausa; sin más dirección que la marcada por mi Único Señor, sí, el que obedeció hasta la muerte y no cualquiera, sino muerte de Cruz,… ya sé que Google Maps no ha registrado esta ruta y los GPS con solo nombrarla enloquecen, porque suena a escándalo a los unos y necedad a los otros, políticamente incorrecta, para los que no saborean la perenne docta ignorancia Paz y Bien, Francisco de Asís, Bakea eta Ona! Quiero llevar tu saludo que sosiegue los zumbidos de panales y avisperos agitados por los odios y discordias. Aizu!, ¡Eh! Francisco, Hey! Mi poverello de Asís Déjame cantar contigo: “¡Hazme instrumento de tu paz! Quiero entonarlo con gritos silenciosos… “Donde haya odios siembre amor Donde haya injuria perdón!” Quiero vocearlo por Corea, Siria, Irak, en las cárceles de Cuba y Venezuela, en Yemen, Irán, Palestina, Afganistán, y más que nunca por la ramblas de la ciudad Condal, y en los estadios repletos de hooligans, en todos los parlaments y parlamentos, en la cámara de los lores y en todas las asambleas… Y ¿en los pasillos de Ayete, Olarain, las terrazas de Jaizkibel, en la Compañía de María y los universitarios pisos...? ¡que todo podría ser- aunque pongamos cara de buenos! Y. en el Cuélebre, Munto y hasta en el Molly Malone, los txokos y sociedades, en Ibaeta bajo los soportales y en la bendita cafetería de TECNUN…; o en Lo Viejo, y las zonas… esos jueves entre el fragor del pintxo-pote que intensifica volumen, !9
tonos de voz chillones y alienta el rajar con frecuentes discusiones... ¿bizantinas? Desarma, Francisco, las violentas, insidiosas y envenenadas palabras. Paz y Bien, Francisco de Asís, Bakea eta Ona! ¡Vamos al Mediterráneo pertrechados de chalecos salvavidas! Vaciemos de cerebros huecos y corazones helados los cruceros blancos impolutos de Halcón, el Corte. Inglés, Ecuador, Pullmantur, Marsáns... Aguardan en las listas de espera cientos de miles: mujeres, hombres, y niños, ateridos por el frio y los engaños mafiosos. Suena el silbato: “¡Pasajeros refugiados, todos a bordo: No corran... Los últimos, en primera: ocuparán mil lujosos camarotes. Los salones alfombrados chapados en parqués de fina caoba anhelan vuestras danzas, risas y cantos! ¡A bordo, por favor, sin agolparse hay sitio para todos!“ Europa se ha hecho vieja, salvo honrosas excepciones, un poco cínica, hipocondríaca, endogámica, anancástica, neurótica, artrósica, burocrática, psicorígida, bulímica, robótica, androide, háptica manca de manos de carne que se tiendan en ayudas y caricias... ¡Amigos Sirios: please, enseñadnos a bailar! Paz y Bien, Francisco de Asís, Bakea eta Ona! Acércate a Birmania y convence a los budistas de Myanmar que vacíen si quieren sus egos pero no los territorios expulsando a los rohingyas …¡y van ya 3000 muertos o más … 400.000 refugiados...! Paz y Bien, Francisco de Asís, Bakea eta Ona! Sin ir más lejos, convénceme primero a mí y enséñame a orar, cura mi ego, dame tu saludable empujón... descéntrame de esa órbita personalista tan tóxica para los que queremos servir sin ser servidos. Detesto ser Narciso hipnotizado ante el espejo del lago: -“que no busque ser querido sino amar”, “que no busque ser comprendido... ¡Hazme empático… Quiero comprender...!” !10
Paz y Bien, Francisco de Asís, Bakea eta Ona! Paz y Alegría, Bakea eta Alaitz! Y a todos mis colegas: miremos al Dios Niño en tu pesebre de Greccio, nuestro primer Nacimiento; y las llagas de tu Cristo el de san Damián y la Iglesia destruida que te movió al radical compromiso. Aprendamos a girar alrededor del Espíritu, tan Santo, que impele a salir, elevando nuestros ojos al cantar, sí, precisamente este himno: “Loado seas por toda criatura, mi Señor, y en especial loado por el hermano sol, que alumbra, y abre el día, y es bello en su esplendor, y lleva por los cielos noticia de su autor”. Paz y Bien, Francisco de Asís, Bakea eta Ona! Paz y Alegría, Bakea eta Alaitz! Rebaja ya mi ego y el de los demás pastores, docentes, empresarios monitores, asesores, comisarios y políticos; ahuyenta los demonios tercos, endogámicos, impositivos, despóticos, centrípetos… aquellos diablos de la idea tan propia y genial que todos los demás “han de seguir” sin rechistar, quiéranlo o no, eso sí; moviendo hilos y conspirando estrategias desde la oscuridad y el secreto. Manipulando la opinión pública para que las imposiciones parezcan surgir de las bases: “no busque ser querido sino amar no busque ser comprendido sino comprender; Porque dando es como recibimos; perdonando es como Tú nos perdonas; y muriendo en Ti, es como nacemos a la vida eterna”. !11
Paz y Bien, Francisco de Asís, Bakea eta Ona, Paz y Alegría Bakea eta Alaitz: Ayúdame a sembrarlas en las aulas, departamentos, laboratorios, talleres, conservatorios, marquesinas, cocinas, hospitales, los estadios y comercios, sobre los azules círculos del aparcamiento de TECNUN; al surcar los pasos- cebra… pisando con humilde firmeza esas líneas blancas que resaltan sobre el asfalto tan negro, siendo minúsculo peatón que pregona:”¡Paz y Bien; Bakea eta Ona, Bakea eta Alaitz, Francisco de Asís!” Y también en los contenedores al verter desechos, cada uno en su lugar, amarillo, verde, azul, y ocre… Piense yo global y actúe local, mirando al Cielo contigo mientras alabamos al Señor: ¡Laudato si! Junto al buen Papa Francisco…: “por la hermana tierra, que es toda bendición, la hermana madre tierra, que da en toda ocasión las hierbas y los frutos y flores de color, y nos sustenta y rige: ¡loado, mi Señor!” ¡Paz y Bien; Pax el Bonum, Pace e Bene; Bakea eta Ona, Peace and Good, Paz y Alegría, Bakea eta Alaitz, Francisco de Asís, hoy quince de noviembre, ahora y siempre! Rafael Hernández Urigüen
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Sol ¿Por qué lloras por el sol? De noche, no puedes verlo No ha dejado de existir Y hay estrellas en el cielo. ¡No es la estrella más grande! Ni tampoco la que más brilla. Pero, sin embargo, la que me ha despertado la vida. En lo oscuro me tocó dejarte Rezo que tu luz no perezca. Pues tampoco quiero idealizarte Y que en mi corazón una costra aparezca. Es difícil despreocuparse. Siempre he sido orgulloso. Y no quiero que mi Sol, Le ilumine el día a cualquier otro. No es una intención egoísta. Pues para el astro solo deseo. Que brille con su luz más bella. así como le gusta al Artista. Brilla fuerte estrella bella. Prometo nunca olvidarte. Como te lo dije en la puesta, Nunca me arrepentí de amarte. !14
Disfrutaré pues de la noche, Haciendo el bien a tus hermanas. Recogiendo todas mis fuerzas, para amarte más en la mañana. José Pablo García Pomar
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Noche cerrada NOCHE CERRADA. Ni una estrella. Ni siquiera la luna se ha dignado a asomarse esta noche. El trajinar de los últimos coches quejarosos llega hasta mi pequeña celda: cuatro paredes en el corazón del viejo París. NOCHE CERRADA. Ni una llamada. Ni siquiera un mensaje para consolar este destrozado corazón. Mis lánguidas manos husmean resentidas en busca de alguna respuesta entre altas torres de amarillento papel y de amontonados vasos de licor, ya vacíos.
NOCHE CERRADA. Nada. Ni siquiera una señal. Nada. Ni siquiera un adiós. Mi mirada ardiente se inunda de tristeza a falta de las ya agotadas lágrimas. Mis brazos, aquellos que confiadamente a él se aferraban, eran ahora objeto de enfermizos temblores. Mis piernas, que un día se entregaron por aquello que !16
pensaron que de amor se trataba, se dirigían ahora patosa pero decididamente hacia el mugriento balcón. NOCHE CERRADA. Nada que a este mundo me ate. Nadie que a este lado me mantenga. Nada que pueda detenerme. La gélida oscuridad de enero me envuelve con su siniestro manto. Una invitación de la propia Muerte a salir a su encuentro. Al menos ella sí me ha llamado… NOCHE CERRADA, mas un repentino sonido de esta miseria me despierta. NOCHE SIN LUNA, mas un melancólico saxo me suplica paciencia. NOCHE SIN ESTRELLAS, mas una bella melodía me promete que en verdad LA VIDA ES BELLA. Gloria Galicia
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Solo queda té La cortina se agita por un golpe de viento. No oye su voz desde hace ya tiempo. Sobre la mesa ni siquiera un cubierto. Solo queda té. Armarios vacíos son sus centinelas. Custodian la taza sin letras. No quedan ya palabras. Solo queda té. El golpe de la puerta aún hace vibrar la vela. Los ojos, perdidos, miran tu estela. El canario en su jaula ya no vuela. Solo queda té. ¿Qué ha sido de esos días enamorados? Por la brutal realidad fuimos golpeados. Pero no se arregla estando separados. Solo quédate. Gloria Galicia
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Eva, mi compañera Eva, mi compañera Siempre hermosa Siempre fuerte Casi inmune al dolor Tu dialéctica es aguda Como un dardo de Cicerón Y en el juicio de la vida El jurado te ha dado la inocencia Y a mí me enculpa Es tu lógica, Lejana de farragosas filosofías Brillante como un fuego de artificio Y enigmáticamente bella Como una orquídea salvaje Tu memoria, desconcertante Posees como una piedra millar Los recuerdos, Mientras que a mi ha tiempo que se escaparon. Conservas el candor infantil Y sin embargo tu mente Es madura y poderosa. Cuando lloras Pierdo la razón !20
Cuando ríes Enloquezco Resultas para mi Incomprensible Sorprendente Como un paisaje infinito. He mirado esas estrellas a años luz Me he pasmado con la explosión del universo Me resulta inalcanzable El surgir inusitado de la vida Y sin embargo, Esos misterios Son acertijos de niños Comparados con tu sentir Quizá por eso Me atraes y me cautivas Juan Cárdenas
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Mar naranja Sentada sobre la tenue arena La dama de tez de ébano africano Y ojos fríos Esta varada como las conchas: Mira más allá del horizonte. Pies descalzos, y una mueca de amargura Ojos tristes, vidriosos, Pero elocuentes. Cuerpo impregnado de salitre Alma temblorosa Mirar errante pero locuaz: Todo es dolor… Sólo el parco consuelo De una incierta criatura en su vientre Mar Naranja Una mujer lejana y vieja Sonríe falsa Con tez ajada Embadurnada de Channel No quiere que los pies desnudos De la triste joven Pisen sin veto Su jardín de rosas Mar Naranja
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El mar blanco En el bello atardecer En el tibio crepúsculo Se ha teñido de naranja Pero no por el sol poniente: Cientos de chalecos salvamuertes Se mezclan en el agua Como en una acuarela Mar Naranja Y nuestra anciana es incapaz de ver Los labios trémulos El frío la nada y la desnudez Mar Naranja Quiera Dios Que nuestro entendimiento Vea más allá de aquellas arrugas Y sienta, al menos, compasión. Juan Cárdenas
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A mi media naranja Diamantes coronan el cuadro Que creó el gran maestro Cogió el más precioso lienzo Decidió esta vez pintar lo que nunca nadie ha hecho Unas pinceladas de sol Que reflejan los rayos de la luna Causando de esta contradicción tan pura Destellos que tejen las cortinas de mi duda Se aprecian bajo esa misma sombra oscura Cuevas llenas de rumores y secretos La más hermosa, decorada con esmero Promete alivio a los corazones descontentos Valles, montañas, paisaje exuberante Gloriosa estela deja al ser trazado Ofrece descanso al viajero siempre errante Y consuelo al infeliz desamparado Más abajo tierra, firme y sólida Capaz de sostener los principios de la vida Profundas raíces que por el suelo se propagan Alcanzando cada metro de los corazones que las aman Por último, adornos florales Capaces de captar el corazón de los mortales Gracia infinita la aportada por el arte Hacen del conjunto una obra deslumbrante !24
Mira el pintor con satisfacción La obra, un orgullo de su creación En las profundidades de su memoria recordó Declaró que su pareja sería, yo Gonzalo Ruiz
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Aroma Gusto amargo en la boca por una promesa rota. Promesa de sueños forjada, casa hecha de humo Ojos tristes, enmarañados, pegajosos por la dulzura de tu recuerdo, néctar de la nada. Vete alma perdida, descubre nuevas tierras pero no esperes nunca de ellas un verdadero romance. Como el clavel moribundo me dejas desolado, me reencarno en el perfume que al pisar has creado. Joaquim Planellas
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Salmo IV a mi Dios niño Niño divino. Tan grande y tan chiquito. Enternecida te admiro y contemplo. El advenimiento anunciado se ha cumplido. Llegada la hora de tu nacimiento, nadie te daba cobijo. Entre pajas y cubierto de rudos pañales en el más rústico de los aposentos, en el pesebre de un establo has nacido. Los animales del establo ajenos a tan bello acontecimiento, con su aliento calientan el recinto. Tu madre la Virgen María deslumbrada de tan maravilloso gozo, con mimo y dulzura te mece y te cuida. Mientras tu padre San José no cesa de protegerte y admirarte. Allí no hay lujos para un Rey. No has nacido en ningún palacio. No tienes cuna ni finos pañales. Pero tienes el amor de los amores. Tu humildad y mansedumbre te hacen tan grande. Has nacido para servir y no para ser servido. Dios mío haz que vea la luz como los pastores vieron el resplandor y me guíe la estrella como a los magos hasta donde estás tú. Ante ti postrada te adoraré y mis mejores presentes te ofreceré.
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Te cantaré nanas, te recitaré salmos, sonarán trompetas... porque el Niño ha nacido. Aves que voláis tan alto, no desviéis el vuelo que el Niño en Belén ha nacsdo. Cantad sin cesar y que vuestros armoniosos trinos alegren al Niño. Rosas, jazmines, azucenas...que el viento lleve vuestro aroma y perfume al Niño que acurrucado está entre pajas. Niño divino. Hijo de Dios vivo, que has nacido para salvar al mundo, quiero darte cobijo en mi pecho por los que no te han acogido. Sonia Ansa
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Tres barcos y dos rosas El murmullo del mar ha muerto. He olvidado tus susurros al oído y tu sonrisa se ha desvanecido entre mis manos. La luz, el calor, la brisa de amanecer desaparecieron, se han transformado en antónimos de bienestar, en anagramas satíricos que imploran orden. Ahora soy solo un niño que anhela su traje de los domingos, un animal solitario hambriento del latir de tu pecho. Soy el patito feo en su reflejo del estanque: alguien que debe crecer para ser bello. Me encuentro entre la angustia y el destiempo, entre la solución y un “qué pasará mañana”. Perdido en el laberinto de tus fotos, en este apogeo de recuerdos que arropan mi existencia.
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Desde que te conocí no he podido querer olvidarte: nuestro portal, el cambio de 1914, mi miedo y una frase cada día. Quise hacer realidad mi sueño - uno más sin ti, con la sospecha del regreso. Ahora soy Ulises que divaga por el exilio de sus afanes. Mas la Vida otorgará nuestro reencuentro. Y aunque, el murmullo del mar siga muerto reconoceré tu tacto en mi cara, haremos presente el antaño. Dormiremos juntos y te lo contaré todo. Hasta entonces daré gracias al Cielo porque te echo de menos Javier Biera
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Noviembre Ahora que te has ido mi infancia has revivido. En mis recuerdos apareces a la sombra de un Roble rodeado de zarzas y avispones. Te veo con cien moscas pegadas a tu espalda sus zumbidos te acompañan son la música de tu marcha. Ahora que te has ido como mosca quiero ser. En tu espalda quiero beber el jugo del esfuerzo. Del sacrificio hecho néctar, déjame sorber. Pues quien ha de limpiar Año tras año La cruz que tu llevaste a la cima de aquel monte Francisco de Sales Nagore
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Cuento de hadas Contemplo, desde el cuento, la realidad. En la realidad, fantasía. Y en ella, la vida. En tu mirada, quien da vida, fantasía, realidad. Toché Marín
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Olvidó todo Sus ojos eran la incógnita. El espejismo: fantasía, su paz inocente. Todo le parecía inútil y se desvanecía como el rastro de Lota en la orilla. La arena era asfalto inerte sobre el que sus reflejos bailaban, y llegados al borde de la acera, – cuando el sol en verano saldría – él olvidó todo hasta ese día. Manuel de Benavides
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La rosa suplica delicadeza Si solo pudiera parar el tiempo, Y observar aquello de nuevo. Una flor que nace en lo lejano del río, Ay Dios mío ayúdame a verlo. Me acerco y quedó en asombros Tanta grandeza en pequeña belleza. ¿Cómo es posible algo así existir? - Preguntaba al cielo mi amigo el colibrí. Un corazón que no entiende, De donde aparecen tales frutos. El peligro acecha los mares y los ríos, Una manzana venenosa en el árbol prohibido. Ciego queda aquel que se atreve a verla, Incluso algunos que pretenden poseerla Mi rosa dulce y amarga se protege del fuego Unos poco paladares se saciarán en su reflejo. De tal esplendor que emana, El reino animal junto proclama Alabemos al Señor por esta belleza Y aunque tenga infinita grandeza, La rosa súplica delicadeza.
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Solo una cosa te voy a pedir, Querido buscador de rosas, Y es que si algún día te encuentras con una de éstas, Ten en mente lo que vale, Pues solo tú y más nadie sabrá lo que has encontrado, Ahora depende de ti mantenerla a tu lado. La rosa suplica delicadeza. Dario A. Brillembourg
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Ceras azules Dibujé perfiles de colinas y árboles de azabache movido por las simas que son atrás por estar antes. Dibujé océanos y mares, claroscuros de arrecife donde el horizonte se evade todo uno, todo libre. Dibujé los cielos abiertos, para dar gloria a los hombres y puse eclipses pasajeros por si arden los bosques. He pintado el mapa del tesoro (marco-piel y pintura-vida) y he escondido la llave en cielos, simas, mares y colinas Fer Ruiz
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